© De las autoras y autores - Título: Mil y un poemas saharauis. Libro II - Varios autores: Adela Vila, Afaf Malainin Talebuya, Ali Salem Iselmu, Àngels Moseguí, Augusto Mainar, Bahia Mahmud Awah, Chejdan Mahmud, Darak Mohamed, Ebnu, Esperanza Jaén, Fátima Galia, Feilah Mohamed-Ahmed, Jaqueline González Cruz, Josep Codonyer Soria (Ibn Al-waqt), Juan Muñoz Montero, Larosi Haidar, Limam Boisha, Luali Leshan, Macaco, María Jesús Alvarado, Maribel Lacave, Miguel Mosquera Paans, Mohamidi Fakala, Nafi Brahim Salem, Nerea Gay, Oswaldo Roses, Raduán Zaruali (Saharaui Ochenta), Saleh Abdalahi, Saleh Brahim, Salka Embarek, Salka Hamma Amideh, Sara Vanegas, Siboney del Rey, Susana Riviere, Xabier Susperregi y Zahra Hasnaui.
- Autor de portada: Fadel Jalifa - Selección y presentación: Xabier Susperregi - Con la colaboración de: Haiyu Sahara y Joves Saharauís a Catalunya - Colección: Literatura y tradiciones saharauis. Libro V - Edita: Biblioteca de las Grandes Naciones bibliotecadelasgrandesnaciones.blogspot.com/ - Correo de contacto y colaboraciones: xsusperregi@gmail.com Libro 15º Oiartzun, Junio de 2013
MIL Y UN POEMAS SAHARAUIS LIBRO II
Pintura de portada de Fadel Jalifa Presentaci贸n y selecci贸n de Xabier Susperregi
PRESENTACIÓN A quien le gusta la poesía, también es poeta Limam Boisha
Esas palabras las mencionaba nuestro admirado escritor y poeta saharaui, Limam Boisha en tiempo en que andaba yo preparando el primer volumen de esta antología de: Mil y un poemas saharauis y sin duda sirvieron de influjo para que poco a poco me fuera acercando también a esta contundente modalidad literaria. El mundo de la poesía, tan ligado al mundo de los sentidos es un mundo tan profundo que normalmente queda al margen de nuestras vidas, pero que si te envuelve, difícilmente deja ya que puedas escapar. Pero la poesía saharaui es algo más. Pues es para el lector como un espejo, un espejo quebrado por el dolor del exilio y por las familias rotas, quebrado por la opresión en los Territorios Robados y saqueados, por la persecución, por el terrible daño que se está haciendo a la cultura y tradiciones saharauis en su propia tierra. Un espejo que a pesar de todo, refleja libertad, dignidad deseos de paz, identidad. Esa identidad que bien quisieran otros, precisamente aquellos que están al otro lado de los muros, al lado del que los construye. Un espejo que cuantas más grietas tiene, más deja ver. Por eso debemos ponernos frente a este espejo e ir pasando páginas, ir comprendiendo, aprendiendo los valores que nos muestra, pues seguramente, viendo reflejado al pueblo saharaui, logremos descubrir algo más y mejor de nosotros mismos. Xabier Susperregi Oiartzun, Junio de 2013
EL ROSTRO DE LAS HUELLAS Nafi Brahim Salem “Si jo l’estiro fort per aquí i tu l’estires fort per allà, segur que tomba, tomba, tomba, i ens podrem alliberar.” Lluis Llach, L’estaca
Hojas de pena perenne sonrisas de hoja caduca. ¿De dónde viene la angustia que tiñe en rojo las dunas? ¿Qué monstruo invadió el camino que en vez de huellas dejó tumbas? * En las calles del Aaiún andan buitres carroñeros, con garras y sin plumaje venidos de otro desierto. Una madre los ha visto corre y abraza a su pequeño: - Que han llegado tantos buitres que te llevarán con ellos, busca algún negro refugio como son tus ojos negros que han llegado tantos buitres que te llevarán con ellos.
* En las calles del Aaiún encarcelan a los sueños y se estrangulan las voces entre secuestro y secuestro. Sombras de buitres armados que empiezan su picoteo con sangre, balas y porras, pues se alimentan del miedo. La angustia armada de buitres ya señala con el dedo que las calles del Aaiún no están demasiado lejos. * Buitres con cascos azules lamen con fingido beso rancio, amargo y con espinas las heridas que yo dejo. Y buitres de verde estrella van llenando de agujeros ya veinte años de palomas que he lanzado por el cielo. La tierra agita los brazos en señal de sufrimiento de dignidad indomable de los indomables ecos, mas han llegado los buitres y los llevarán con ellos. *
En las calles del Aaiún negra bóveda es el cielo, no existen los ciudadanos, tan sólo existen los presos, mas ser libre o no ser nada, ser la ceniza o de fuego la llama, sólo depende de la voluntad del pueblo. Un joven con grandes piedras empieza su lanzamiento, se unen mujeres y niños y grita eufórico un viejo: ¿Ha de temer a la muerte el que en vida vive muerto? ¿El muerto acaso no vive más que aquel que tiene miedo? * En nuestras vidas atadas, ¿quién juzga quiénes son los que empuñan las espadas y los que empuñan la razón? *
¿Quién impone los castigos, franceses o americanos? Si no hay tiranos amigos que juzguen a otros tiranos. * ¡Pues que el pueblo se libere! si de igual quieren juzgar al que mata porque muere y al que mata por matar.
SE ME OLVIDÓ Por Zahra Hasnaui Se me olvidó dedicar un poema a la fuerza invisible de la mujer afgana. A la niña Malala que con letra carmesí pinta caminos prohibidos. A la espiga que se dobla en un monte andino. Al poeta, al músico, al cooperante que se sacude la mano y limpia de espinas la tiende, al amigo sin fronteras. A la caricia del viento en un lunar de Tiris, a las sonrisas del sol en mis ondas marinas. Al enigma de tus ojos cómplice de mi insomnio. Al silencio de tu boca, a veces, afluente y otras, espada. Se me olvidó tanto...
EL MORO CIEGO Por María Jesús Alvarado Cada noche el moro ciego pasa con su burro viejo. Sabe que le espero, y desde el patio, canta para mí. Cada mañana la palmera luce mordida y deshojada... Pero hace días que no escucho su andar tosco, que su voz de paja y suras no se enreda en mi ventana. ¿A dónde has ido? ¡Viejo! ¡Ciego! ¡Burro! ¡Niña! La noche no habla. Yo los hecho en falta, y la palmera empieza ya a brotar, ...como si nada.
Cuenta María Jesús acerca de su poema: "El moro ciego": “A menudo, por las noches, me despertaba un burro que paraba junto a nuestro patio y, por encima del muro, mordisqueaba la palmera. Una noche me asomé y vi que lo acompañaba un viejo ciego. Paraba paciente junto a él y cuando el burro decidía seguir, seguían el camino. Una noche no vinieron más, y nunca supe si habría muerto el burro o le habría pasado algo al ciego... “ “Lo escribí con 13 años, en El Aaiun. Muchos de los poemas de "Isla Truk" fueron escritos mientras vivía en el Sahara”.
CORAZÓN VELERO Por Maribel Lacave El mar en la ventana y el corazón -este barco cargado de nostalgiasansioso navegando.
CORAZÓN VELERO (II) Por Maribel Lacave Mis sueños llegarán a Truk a lomo de los peces. Amor sepúltame en el mar cuando yo muera. Deja que mi corazón velero siga el curso natural de sus latidos hasta varar en aquella playa de luz de la memoria.
AMISTAD Por Larosi Haidar Chubascos de pura gota fresca, cristalina, ávida de ser bebida, absorbida del dulce vaso de la amistad transparente, sincera, serena pero nunca jamás rota. Amistad sin pudor ni color ni peros ni condiciones ni el interés que envilece; amistad desnuda, horizontal de tú a tú sin contrapartidas esperadas ni palmaditas a la vanidad que todo lo entorpece. Amistad amistosa de rosa risueña compañía de estío y del frío invierno de la vida; amistad en la ascensión y en la risa en el llanto y en la dura caída en la escasez y en la abundancia; amistad en la palabra y en la letra en el susurro de la cercanía melosa y en el grito de lontananza; amistad tras el velo de la oscuridad en la penumbra y a la luz del día bajo techo al descubierto en la salud y en la enfermedad;
amistad en la guerra y en la paz en el mar, en la selva y el desierto en el pueblo y en la ciudad en las nubes de la fantasía rapaz; amistad en el cómodo despacho con aire y buenas vistas amistad bajo rejas y en el montón desnudo, sediento y sucio impoluto, vestido y alimentado jadeante en los campos de algodón. Amistosa amistad te deseo te quiero, te anhelo, te necesito sin ti agonizo, muero contigo radiante resucito mística devoción te guardo en mi corazón en mi alma en mi sueño amistad, eres mi dueño mi espada, mi cobijo eres el aire que respiro la sangre roja de mis venas los signos de mi papiro eres la cura de mis penas la esperanza de la vida el amor de todos los seres; mi amistad eres, amistad y por mucho que digan los demás al fin y al cabo amistad eres.
CINCO LETRAS DE UN PINCEL Por Limam Boisha Cuando el Ramadán cosecha virtudes, galopante anemia, alteración metabólica y horarios cóncavos sobre las raquíticas espaldas de este milenio, sigo pincelando tu nombre. (Al otro lado del autobús vibra tu pelo castaño, asomando al cristal con bellos ojos verdes, hechizando la tierra cruel que el viento intenta abrazar). Desde el viaje al pueblo de fronteras provisionales, nombres plurales y anónimas calles de polvo, sigo pincelando tu nombre. La noche es un desnudo de implacable belleza mientras alrededor de su ombligo Sigo pincelando tu nombre.
Desde la folclórica danza, con guerreros de rupestre fusil y mujeres de henna, nila y collar, sigo pincelando tu nombre. Bajo el reseco fuego de las piedras, en la caverna de rosas, fósiles y madera, sobre el lomo de un camión sureño, en la cruda intemperie, sigo pincelando tu nombre. Frente a tu caligrafía cargada de sensualidad y cautivador instinto, sigo pincelando tu nombre. En las breves charlas, en el gusto, en tus radiantes besos de luna, sigo pincelando tu nombre.
Cuenta Limam Boisha acerca de su poema: “Cinco letras de un pincel”: “Es, simplemente, una historia de amor, recreada en los campamentos de refugiados”.
DUENDE AL SOL Por Limam Boisha Ahora que el pasto es una caridad enlatada, y la lluvia del exilio puede destruir la habitación de adobe o llevarse el barrio de equipaje. Ahora que el sol anuncia su salida, una niña trepa, con su diente caído entre las manos, hasta lo más alto de la colina. Ahora que el cielo escucha, la niña ruega al astro y le dice: “Toma este diente de burro... Ahora, y mientras tanto, un aplauso anuncia la mejor puesta de sol en una isla griega. Y la niña espera, como primera noticia matutina, que el sol le regale ...un hermoso diente de gacela”.
Cuenta Limam sobre su poema “Duende al sol”: “El hilo conductor del poema es una leyenda saharaui que escuché y practiqué de pequeño. Cuando a un niño o niña se le caía un diente, la familia le decía: “Sal fuera y enséñalo al sol. El pequeño cogía el diente entre sus dedos. Lo elevaba en dirección al sol y pedía el siguiente deseo: “Sol, toma este diente de burro y dame un diente de gacela”. Un hermoso diente de gacela.”
MUNDO ROTO Por Macaco No dejes que este mundo roto estropee tú sonrisa leré no dejes que este mundo roto estropee tú sonrisa leré Si la vida es un momento, penitas pa´fuera; échalas al viento, suéltale un soplío, vacila otra vez tú caminar. Cicatrices, grietas del mundo que nos lleva. Mientras tanto, mi niña, tú giras mis antenas, realidades desbordadas imponen soledad. Mientras tanto, mi niña, tu mano en mi mano va. Sonidos dormidos: los tuyos silencios vivos; tu oro, solere pa´mi lerele
No dejes que este mundo roto estropee tú sonrisa leré no dejes que este mundo roto estropee tú sonrisa leré Si la vida es un momento, penitas pa´fuera; échalas al viento, suéltale un soplío, vacila otra vez tú caminar. El ruido de afuera a mí no me dice ná. Mientras tanto, mi niña, tu sonrisa me da verdad. Entre calma y tormenta, la marea así nos lleva. Mientras tanto, mi niña, tú alzaste mi vela. Tus respuestas sin palabras, soplidos de esperanza que giran la veleta de mi solerelere
Y hoy en mi balanza, se mecen las distancias. Como en mundo roto puedes tú coser los retales de mi esbozo. No dejes que este mundo roto estropee tú sonrisa leré No dejes que este mundo roto estropee tú sonrisa leré Si la vida es un momento, penitas pa´fuera; échalas al viento, suéltale un soplío, vacila otra vez tú caminar. No dejes que este mundo roto estropee tú sonrisa leré No dejes que este mundo roto estropee tú sonrisa leré Qué las grietas no nos apaguen la llama iluminando distancias, rearmando lo que se separa todos dicen...
LUALI Por Fátima Galia Levántate, ya todos sabemos cómo te llamas y quién eres. Las palomas repartieron tu nombre en el combate y en los campamentos. Eres la gloria, eres el valor, eres la fuerza. Levántate, para que todos los guerrilleros, niños, ancianos y mujeres, digan ansiosamente allí viene el Líder de nuestro pueblo. La sangre que corre en nuestras venas, el oxígeno que respiramos y el fusil de nuestra batalla. Nunca olvidamos que estés y estarás presente en nuestros hogares, en nuestras trincheras, en nuestros pensamientos y en nuestros corazones, siempre eres el héroe inmortal queridísimo Luali.
BELLEZA Por Saleh Abdalahi A Margalida
Yo estimo la belleza desinteresada, despojada de complementos y las ataduras de los reflejos, la que por ser, carece de intenciones y espejos. Yo estimo la belleza que cultiva con su hechizo el alma y cautiva con sencillez su grandeza yo estimo la belleza. Yo estimo la belleza, en la que la palabra se siente mariposa, a que armoniza y resplandece su entorno, la que incita con su presencia los colores del universo y con su ausencia mĂĄs que nostalgia es un cielo de alas que acaricia la memoria. Yo estimo la belleza compaĂąera del alma, la que enarbola la verdad como esencia y embelesa en sus redes los sentidos de la conciencia. Yo estimo la belleza, yo estimo la belleza.
EL TIEMPO Y LA ESPERA Por Esperanza JaĂŠn Esperando la sentencia de los inocentes de Gdeim Izik
El tiempo es una losa pesada cuando se espera con miedo, es un camino oscuro, que nunca se acaba, lleno de brazos que intentan detenerte, de ojos que te miran sin verte, repleto de corazones que esperan que el sol alumbre y la oscuridad cese, que los brazos abracen y que la libertad llegue.
DESPEJADA LA OSCURIDAD Bahia Mahmud Awah De luto negro desvisten tus montes Sario, y de azul claro, acaricia tu mar de norte a sur. Tus vientos te abrazan y tu llovizna despierta el gran río de Saguia El Hamra. Hermosura es tu Río de Oro, y hermoso y bello, bello cuando unido junto al mar a batallar, semejante fervor ha de estallar, todo en cadena a vencer desde la Güera y más allá de El Aaiun a seguir. En ti Sario, ahí está el rostro de la libertad, espejo de dignidad y en ti, el pueblo saharaui
MUJER SAHARAUI Por Adela Vila Ya no importa cuántos verdugos forcejeando mi cuerpo, entrando y saliendo de él a su voluntad. ¡Bisontes torturadores, no tengo más piel para vuestros golpes, ni más sangre en los ojos! En la calle el alto me dais, festejando y regodeándoos que en la noche anterior fuisteis vos. Noto un pinchazo en el hombro, ¿qué me inyectáis malditos?, si al colegio arrastra mi hijo ya mi pellejo. ¡Sigue golpeándome el vientre, si te place! dentro de mí esa nueva mujer nace, te ve. ¡La estás haciendo crecer más fuerte! Basiri, ¿recuerdas en aquel campamento? poníamos agua cristalina a hervir, ¡bien, hoy sopa! - decían los niños- antes de dormir.
EN LA CIUDAD DEL VIENTO Por Fรกtima Galia En la ciudad del viento, veo lo que nadie ve, siento lo que nadie siente, lo digo, lo repito con el viento y no me arrepiento. El desierto me hace sentir como una princesa en la ciudad del viento. En la ciudad del viento, hay palacios de piedras y castillos de arena, como en los cuentos de hadas. El desierto me hace sentir como una princesa en la ciudad del viento. Ando descalza sobre una alfombra de arena, suave como la seda y dorada como el ORO.
Vivo bajo un cielo grande e inmenso, cubierto por un velo azul, azul como el mar. En la ciudad del viento la libertad nació sin dueño. En este horizonte lejano y sin límite, como un sueño, cuando posa la mirada, la vista navega libremente. El desierto me hace sentir como una princesa en mi palacio de lona, rodeado de espejismos, como cascadas y fuentes de agua, que se deslizan de las montañas... espejismo brillante, con destellos, como el diamante que brota de repente desde el fondo de la tierra... Tierra, yerma y querida, madre del fuego, del aire, del frío, del silencio, del nómada y del viento.
El desierto me hace sentir como una princesa en la ciudad del viento. El sol, mi hada madrina, cada dĂa me quiere, me guĂa y me protege. La luna, mi espejo mĂĄgico, que me escucha, me mira y me mima. Las estrellas, luces de vecinos y pueblos de princesas, cercanas y lejanas, cada noche me iluminan, me vigilan y me amparan. El desierto me hace sentir como una princesa en la ciudad del viento. En la ciudad del viento veo lo que nadie ve, siento lo que nadie siente. Lo digo, lo repito con el viento y no me arrepiento. El desierto me hace sentir como una princesa en la ciudad del viento.
PARA QUE TODOS LOS SEPAN Por Salka Embarek Para que todos los sepan, yo no empeño tu memoria. Yo, que he llorado con el honor de mis muertos, desafío mi débil existencia para que libre la vida, se aleje de mi cuerpo. Mi verdad es de mérito, que todos los sepan, yo entregué mi alma al calor de mis huesos transformados en lucha para liberar la tuya. Sí, me consta que no es fácil mostrar tanto amor. Soy consciente de que mi propósito contigo es de un compromiso asombroso, pero te diré que yo iba a ser estudiante, pastor, traductor de idiomas, ingeniero, un intelectual discreto, un niño viajante, lucharía atrevido por rozar tu boca en la noche paseando libre por mis calles tuyas.
Mas la noche y tu boca, tu calle y mi lucha era de estudiantes, de pastores, traductores viajantes, y niños ingenieros. Así fue que entendí mi amor. Esta meritoria verdad que anuncio se multiplica cada hora que paso tras las rejas del hambre. Que todos lo sepan, No cederé en mi empeño de amarte, no antes de lucharte y lograrte, porque sin ti, patria, no soy nadie.
AÚN NO DUERMO Por Chejdan Mahmud Aún no duermo cuando me acaricia la pubertad. Sus manos no cesan de infringir mi silencio. En la sonata cotidiana que resuelve sus ganas abrasa su pubis y me ata su lengua. Aún hoy duermo después del letargo que me hizo esclavo y, me susurró, de algún modo el desgano de verla, desnuda y, no duermo todavía porque, algún fantasma, me recalcó que, aún virgen, tiene que ser.
LOS HIJOS DE LAS NUBES... Por Augusto Mainar Los hijos de las nubes discurren por el desierto, buscando el agua que alivie el reseco. Los hijos de las nubes se adaptan al medio, al ocupado, a la hamada y en los dos al tedio, de una espera muy larga que se dilata en el tiempo. Los hijos del dinero, esquilman mares y suelos, extraen fosfatos, petróleo y alimentos. Los hijos del dinero, narcotizados, posesos, son presos del ansia, no compran el sueño, el sueño de un pueblo que siente, lucha y grita.
REBELDE CAMELLO SAHARAUI Por Siboney del Rey ¡Berrea, berrea! ¡Berrea camello saharaui! Que tu grito es la resistencia de tu pueblo sufrido, de tu pueblo golpeado, atacado y herido. ¡Berrea, berrea! ¡Berrea camello saharaui! ¡Tu grito es rebelde y valiente! Acompañas a tu pueblo, con la dignidad y la ternura persistente. ¡Berrea, berrea! ¡Berrea camello saharaui! Ni la maldita bala marroquí, jamás acabará contigo, jamás te arrancarán la esperanza, ni el sentimiento bonito.
¡Berrea, berrea! ¡Berrea camello saharaui! Tu grito es el disparo de sueños y justicia, que llega hasta tu pueblo. ¡Mira el horror de tus hombres, mujeres y niños! ¡Tu grito firme y desafiante. Es resistencia y coraje, que quedará ahora en adelante! ¡Berrea, berrea! ¡Berrea camello saharaui! ¡Que ni el maldito soldado marroquí, jamás acabará contigo! Caracas, 02/11/12.(Día de los Fieles Difuntos)
DEL PROFUNDO SOL Por Susana Riviere Escribe el viento en la arena, deja sus curvas, fuertes y débiles, suaves palabras que lentamente, marcan en la arena. Así con el sonido del viento ...y tu voz ronca de soledad y de nostalgias, así como el ulular que trae el espacio, se escriben las páginas del Sahara, ...seres separados ...del conjunto de historias, que nos cuesta unir y contar. Móviles como cada grano de arena ...piel, soledad y sangre ...grito desde el fondo del sol, tatuado en las melancolías, que no sé cómo se acercaron hoy a mi corazón. Son los sonidos que el viento trajo ...desierto que enamora los ojos... entre tú y yo un té aromático. Argentina, 20 de Mayo
¡EL CIELO SERÁ DE ALÁ, PERO ESTA TIERRA ES NUESTRA! Saleh Brahim La escena en cada rincón se repite, un pueblo desafiando la muerte, niños, mujeres, hombres y ancianos. Ésta es una batalla de años, la familia reunida té, incienso y sonrisas. Los niños sueñan con ser mayores, los mayores añoran su infancia perdida.
LOS NIÑOS Saleh Brahim Los niños juegan y revolotean, alegres, inocentes, se enfadan y gritan nada se preguntan, el futuro espera, pero no son conscientes generación perdida, inocentes, sonríen que no les roben su infancia. ¡Lástima! Qué bonita ignorancia ¡Inocentes! Pero ellos saben, saben que están con su gente pero no es lugar. Notan en las miradas falta de libertad …libertad para escapar... ...olor a mar... Qué les deparará el futuro una puerta abierta un porvenir incierto un largo camino por el desierto.
LA JUVENTUD Saleh Brahim La juventud toma las riendas, la herencia: una larga batalla, un cofre: una identidad, una cultura. Rebelde, crítica y formada, desenvaina la espada, orgullosa, nunca se cansa. ¡La utopía, hacerla realidad! No hay muros por derrumbar sino, dunas que el viento se llevará imagina, idea y crea nuevas vías de lucha, resistencia pacífica, ejemplo mundial, inquieta, no para viaja, se organiza y dispara el enemigo de cerca vigila se nota el miedo en sus entrañas, ésta es la herencia una revolución ya comenzada, una identidad que conservar una bandera, ¡gritos de libertad! Y con los pies en el suelo, demuestra, que ¡el cielo será de Alá, ¡Pero esta tierra es nuestra!
LAS MADRES Saleh Brahim Las madres luchan peleas diarias, supervivencia es la palabra, no hay obstáculo que resista. No hay día que desistan; calor, siroco y escasez de agua. Con valentía, la melfa se atan, los niños, la daira, la causa. Han levantado un hogar en medio de la nada. Se envalentonan y plantan cara, parieron en la hamada, sufrieron la pérdida de hijos, hermanos y maridos. ¡Maldita guerra, maldito desierto! En su imaginación caminos trazan hacia la libertad ansiada cada amanecer es una batalla, cada anochecer nostalgia. Tanto tiempo soñando, con la rutina, en su tierra liberada.
LOS ANCIANOS Saleh Brahim Los ancianos miran al horizonte, con lágrimas en los ojos señalan la tierra robada, cuentan mil batallas, mil y una noches estrelladas, caravanas de camellos, fronteras imaginarias. Con las manos arrugadas, inspiran respeto y sabiduría, sus rostros reflejan una vida dura, una larga lucha. Les queda aún la esperanza, de ver el mar, un rincón para descansar, dejando de herencia, una tierra un país, una bandera.
LOS HOMBRES Saleh Brahim Los hombres, guerreros incansables héroes de mil batallas, mártires de la causa. Lucharon cuerpo a cuerpo contra gigantes de acero, su voluntad y su valentía es su arma más potente. Valientes, siempre mirando al enemigo de frente; ni muros, ni aviones, ni hileras de soldados podrán con sus ansias. Es larga esta batalla, pero pacientes, esperan todo por la causa; tantos años con el puño cerrado, apretando los dientes y sacando los colmillos al enemigo. Ni un paso atrás. ¡Esta batalla se ganará!
SI TE FUERAS Por Chejdan Mahmud Si la luna bajara, ya cansada de esperar, y tendiera un manto cerca de su amado, las estrellas no llorarĂan, no, irĂan en complejas filas, al rincĂłn abandonado por esa luna rebelde.
SAHARA Por Salka Hamma Amideh, poeta saharaui Aquel desierto que no mentía, un desierto despedazado. Sahara, arena viento y olvido. Aquel inhóspito lugar que de vez en cuando dejaba de existir. Sahara, aquella mancha de tres colores en mitad de África, lugar de medias verdades y mentiras infinitas. Desierto arenoso con sabor a humildad, a dignidad. Lugar donde el viajero siempre volvía, sin saber el cómo ni el porqué, pero siempre volvía.
Sahara aquel desierto que gritaba a media voz. Gritos de silencio en forma de Libertad, de seguir a las nubes allĂĄ donde fueren. Sahara, desierto de lucha, de sangre derramada en su bandera. Aquel lugar mĂĄgico, resistente a 38 aĂąos de lucha. Sahara, mi querida Sahara...
POEMAS Por Sara Vanegas De sus “Versos trashumantes”
I como en los viejos tiempos: tu corazón será enterrado en medio del desierto para que los pájaros recuerden su ruta más allá del mar --dunas: oleaje de fuego. aúlla el viento en tus manos resecas bajo un cielo de vidrio molido y el espanto de la luz te arrastras entre fantasmas arrugados. oasis imposibles imploras la noche. allí. de bruces sobre el espejismo del agua vomitando soledad y arena --un latigazo de arena acaba por doblegarte. lames ese fuego que te circunda y sabes que has descendido al hueco más oscuro de la noche en pleno día. los buitres se aproximan a tus despojos. en un último intento vomitas el corazón
--río de ojos que surca este paisaje una palabra apenas se levanta seca como vómito de sol y ciega el río para siempre --pero es cierto que estamos solos. solos como el aire roto de una ocarina o el espejo de un crustáceo en la arena ardiente estamos solos /luchando con nuestro ángel y así somos --es el viento que ruge entre las dunas hendidas puertos antiguos y naves sumergidas desde el fondo (de la arena resucitan /por segundos eternos mientras el caminante maldice su propia huella /tan lejos del oasis de sus antepasados tan ajeno al recuerdo y al olvido ---
fuego de mares calcinados. voces ardientes voces que absorben mis palabras como las dunas voces que me rebautizan con nombres milenarios y me pierden --música violenta y dulce desde el templo sepultado (deseas ser aire y eres aire entre las naves) alguna vez estuvo aquí el mar --acercas tu oído a la roca. un zumbido lejano como de campanas roncas. gargantas resecas ... de pronto, una cascada intermitente. ¿o es la danza de un lirio de mar? la roca hendida --mansiones lejanas. estatuas. una mano que reparte estrellas diminutas sobre los muslos. tan cerca de la arena y la esfinge. tan lejos del mar y sus lunas. tan solas. tu garganta: el oasis y la sed. el triángulo de la luz canta el viento sobre rosas minerales
EL NOMBRE ES SAHARAUI OCHENTA Por Raduán Zaruali (Saharaui Ochenta) El nombre es Saharaui OCHENTA. O así me llaman en Paltalk, Facebook y en las calles y avenidas de Colomina. Saharaui es nombre, es tierra e identidad. E identidad destrozada en mil pedazos: Refugio, diáspora, exilio e infierno. ¡¡¡Madre mía, qué infierno!!! El nombre es Saharaui OCHENTA. O así me llaman en Paltalk, Facebook y en las calles y avenidas de Colomina. OCHENTA es el apellido, es fama y una generación perdida y víctima de malas condiciones, la generación ochenta. Ochenta es tío desaparecido. Y libre en los noventa. Ochenta, un sueño de emigrar que en los noventa se acabó en el mar de Youssef ABBA, de Ali y Omar.
El nombre es Saharaui OCHENTA. O así me llaman en Paltalk, Facebook y en las calles y avenidas de Colomina El Paltalk, aunque las distancias, nos reúne y el Facebook sobre un sueño nos une. El de volver. El de ver de nuevo Colomina. Y beber del agua del río, beber y beber. El nombre es Saharaui OCHENTA…
LAMENTO DEL DESIERTO Miguel Mosquera Paans ¡Ay, arenilla mancillada, pequeña mota de polvo manchada! Por el camino de la sangre antigua Iberia sometió tu infinito ocre, Ismaíl llenó con tu sangre un odre para derramarla en tu patria ambigua, privada de aire y acorralada, llena de sed y desierto, grava yerma bajo un sol de cobre. ¡Ay, arenilla hambrienta pequeña gota en el Río de Oro! Ávida de sombra del palmeral. Dátil ansioso por aliviar el más cálido y grande bochorno el ciego sol atestigua el tiempo ocioso para olvidar al saharaui sometido, a la contigua tragedia y desesperación sangrienta.
SOY EL SAHARA Por Salka Embarek Seré guerra y cuando sea necesario, seré paz. Seré la paz de la guerra y el límite entre ambos lo marcaré yo. Que no vuelvan a llamarme fanfarrona, que no vuelva ningún ministro a provocarme, que durante los años de mi tragedia, ya le derribé algunos muros y logré hacer caer sus falsos estandartes. No hay gobierno usurpador, ni cruel, ni rey tan soberano que pueda mirarme a los ojos, y negarme que no es culpable. No podrá porque no ha olvidado las veces que le he enfrentado, le he descubierto y ganado. Mírame bien, porque el timón está en mis manos, y el viento sopla a mi favor, no seré yo la que tema, no seré yo la que pierda, ni oirás mis palabras en vano.
Ya soy vieja, treinta y cuatro años han pasado pisando mi cuerpo, bajo metros de tierra enterrado. Más de treinta años han dejado en mi boca sabores amargos, algunos ya no los siento, otros se han vuelto brazos, de líderes desconocidos, de mujeres en esperanza, brazos de mártires que vuelven extendidos a la superficie, acudiendo a mi llamada, al de esta vieja que soy yo, y que ahora vuelve joven y renovada. Que no me llamen fanfarrona, porque mis hijos le responden, que mi voz no es una sola, soy el Sahara, ¡ESCUCHA BIEN MI NOMBRE!
INVASIÓN Por Nerea Gay De repente un día tu casa está en el extranjero, sin cambiar de lugar y tus derechos han volado. Sí tenemos miedo, oigan: Tenemos mucho miedo. Pero deberían temblar ustedes de nuestro miedo.
AMGALA Por Ebnu Las olas del tiempo rompen contra los muros de la memoria erosionando las huellas de mi infancia lejana. La distancia, engulle los indefensos recuerdos que vagan dispersos a la deriva. -El almuédano despierta la mañana— y yo me acuerdo de ti, Amgala. Bajo las estrellas recito el nombre de Alá... las suras del Corán, esquivo la extraña mirada y las lágrimas se derraman sobre el cuaderno de lengua castellana. De la aburrida escuela me iba al encuentro con el mar mi seco río de orillas blancas y tibias, collar dorado que acaricia las sombras de las montañas y los pastores riberas donde jugaba al escondite con las olas y las flores.
-El almuédano perdió la voz y el maestro cruzó la fronteraSola te quedaste, Amgala sin vientre y sin senos sin brazos y sin ojos sin padre y sin mí. Al duende parlanchín, esclavo de tus pozos y alturas se le ahogó la voz en la distancia. -Ya no me responde¿Acaso murió de soledad... o lo desterró la tormenta que arrasó tus polvorientas calles donde aún ruedan mis sueños y mis canicas? La tormenta, arrancó la acacia de los huesos colgantes y secó el huerto de los higos verdes y sandías. Las mariposas se quedaron sin niños y se alejaron persiguiendo sonrisas entre los proyectiles de la guerra.
-Tras los barrotes del invierno espera, pacientemente, la primaveraEsperas tú. Espero yo. Espera la mujer que grita su último dolor destrozando el silencio y el niño que llega de madrugada. Esperamos todos en esta estéril inmensidad que se extiende entre el cielo y la nada. Amgala, sin mí te quedaste pero quedaste conmigo abrazada a mis venas alimentando mi corazón de caravanas de sal y de miel de gacelas paleolíticas y golondrinas de odres de leche y palmeras. Sin mí te quedaste pero conmigo volverás para encontrarnos y pernoctar bajo la sombra de tu aliento en el interior de tu extraviada muralla y quedarnos a solas contigo y tus reliquias de barro y piedra.
LA MĂšSICA DEL SIROCO Por Ali Salem Iselmu Cuando todo es invisible y el turbante tapa los ojos, los camellos se arrodillan bajo las acacias. Cuando el desierto, es silencio y arena y de la mar nace la tormenta el sonido es oscuro y tapa los ojos y no puedes distinguir entre la noche y el dĂa. Cuando todo es calor y sed las venas de la tierra se secan, bajo el manto de arena veo surgir el fuego del alma.
NOVIEMBRE Por Ebnu Sobre un lecho de piedra descansan los huesos de noviembre. Los abandonamos en su blancura detrás de los días oscuros. Pero no era noviembre lo que importaba. Éramos nosotros. Tú y yo. Era la vida. Treinta días tridimensionales calculados para terminar al otro lado del recuerdo. Pudo ser octubre o diciembre pero un día más habría sido demasiado para un amor nacido de la despedida.
Tú y yo transitábamos entre el verano y el invierno por los caminos que dibujaban las hojas desprendidas de las ramas del otoño. Tú descendías de un largo viaje. Yo doblaba la esquina de las lágrimas arrastrando jirones de un adiós precipitado. Nuestras miradas se juntaron marcando la medianoche y comenzó noviembre. Nuestro noviembre. Que abandonamos sobre un lecho de piedra abrazando los restos remotos de una pasión apagada.
NO ES FÁCIL AMAR ASÍ Por Salka Embarek A todos los presos políticos saharauis en huelga de hambre.
Para que todos los sepan, yo no empeño tu memoria. Yo, que he llorado con el honor de mis muertos, desafío mi débil existencia para que libre la vida, se aleje de mi cuerpo. Mi verdad es de mérito, que todos los sepan, yo entregué mi alma al calor de mis huesos transformados en lucha para liberar la tuya. Sí, me consta que no es fácil mostrar tanto amor. Soy consciente de que mi propósito contigo es de un compromiso asombroso, pero te diré que yo iba a ser estudiante, pastor, traductor de idiomas, ingeniero, un intelectual discreto, un niño viajante, lucharía atrevido por rozar tu boca en la noche paseando libre por mis calles tuyas.
Mas la noche y tu boca, tu calle y mi lucha era de estudiantes, de pastores, traductores viajantes, y niños ingenieros. Así fue que entendí mi amor. Esta meritoria verdad que anuncio se multiplica cada hora que paso tras las rejas del hambre. Que todos lo sepan, no cederé en mi empeño de amarte, no antes de lucharte y lograrte, porque sin ti, patria, no soy nadie.
MI ANIVERSARIO DE VIDA CON LA RASD Por Siboney del Rey Desde la insurgencia de la vida, a mi madre la quiero, aunque la tenga lejos. Hace más de 30 y dele de eneros me trajo al mundo y mi grito rebelde, la puso a llorar de alegría. Hace más de 30 y dele de eneros, lejos, muy lejos... en pleno desierto africano, se organizaba la libertad de un pueblo que dijo: "Ya no somos colonia de España". ¡Enero dio paso a Febrero y nacía la RASD! Desde la insurgencia de la vida, a mi madre la quiero, aunque la tenga lejos. Desde la insurgencia de la vida, la RASD vive en esperanzas, y la quiero como si fuera mi madre, con sentimiento amoroso y justiciero. El corazón de una madre, es inmenso como un pueblo rebelde y libertario. En un lugar de África, también vive mi sueño por ver feliz a mi otra madre ¡La RASD!
¿LAS ROSAS FLORECEN EN EL DESIERTO? Por Afaf Malainin Talebuya, poeta saharaui Yo he visto rosas en el desierto, rosas atrapadas en un lugar muerto, rosas heridas, rosas acaloradas, rosas maltratadas. He visto rosas refugiadas y otras muchas encarceladas. Encarceladas por decir la verdad, maltratadas por gente sin piedad. Rosas divididas por un muro de espinas, rodeado por tanques asesinos y miles de minas sedientas. Un muro vigilado por miles de soldados, soldados genocidas, gobernados por gente sin escrúpulos, gente hipócrita y materialista, gobernadores terroristas, que por conseguir poder son capaces de matar a civiles desprotegidos y lanzarles bombas asesinas. Bombas ilegales que escupen sangre robada, sangre inocente. Pero las rosas siguen creciendo en el desierto llenas de esperanza, luchando día a día esperando que alguien las escuche, esperando que el GRAN DÍA llegue: EL DÍA DE LA LIBERTAD.
AYYY COLOMINA Por Raduán Zaruali (Saharaui Ochenta) Ayyy Colomina …eso es Jonás. La perdida Colomina roja, con su gente fuerte y floja. Ese barrio tan bello donde al fútbol se jugaba, donde la bienvenida al huésped se daba, y donde Ment Salka me besaba… …eso es Jonás. La perdida Colomina roja, con su gente fuerte y floja. En esta postal la veo y la ves, colmena roja, impartiéndonos lecciones y paradoja, de convivencia, de amabilidad, y de solidaridad coja. Colomina, buldózer y tractores destruyen. Colomina. Colomina, mujeres y niños, huyen, y ojos puestos desde muy lejos, desde muy lejos puestos en Colomina…
La ves Jonás, la perdida Colomina roja, Con su gente muerta o coja, herida o floja. Aquí yo vivía y ahí a Ment Salka veía, y en su piso, tantas cosas me decía… y su madre, su madre allí solía tomar el té sagrado con una vecina mía. Ayyy Colomina. Ayyy Colomina.
Dajla : 26-02-2013 Colomina Roja era un barrio de mayoría de habitantes saharauis destruido por Marruecos el año 1985 y que se hallaba en el centro de El Aaiún. Sus habitantes fueron forzados a separarse.
MI MADRE LOCA Por Chejdan Mahmud Mi madre cuerda nació antes que yo, en un día azul sobre una alfombra amarilla. Mi madre es de sangre turbia y venas vagas. Tuvo el honor de vivir adulada por su vecino, odiada por su ropa y enamorada de su abuelo. Loca. Loca, loca, loca, loca, loca. Así vivió en mi ausencia. Cuando volví estaba rematadamente loca.
DIOSES Por Xabier Susperregi Cuando niño era cuántas veces me solía preguntar, sobre ese Dios del que decían que por todas partes va y yo pensaba y pensaba: dónde diablos está. El tiempo corre no hacia delante, pues marcha para atrás y en llegado el momento me dejé ya de preguntar. Descubrí que las gentes otros dioses adoran: Mentira, gran diosa siempre presente con su velo a la gente envuelve caprichosa.
O el dios Dinero que para que unos lo tengan a otros les va faltando y los ricos, robando y los jueces a los pobres, juzgando. Y de tanto ruin Dios maldita sea, acabaremos olvidando a mi diosa favorita y de los saharauis hermanos; Libertad tiene de nombre y parece pobrecita, parece que estรก, llorando.
SED Por Saleh Abdalahi Las piedras se descomponen bajo el sol para mĂĄs arena. Los caminos se pulverizan en la contienda hacia una paz que por herida no llega. El silencio se remota bajo el peso de un gigante monte que se encierra la clave de una serpiente negra, y aquĂ en esta contienda donde el lagarto se deseca bajo la sombra de un verano caliente y el camello atontado por tanto espejismo, tengo mĂĄs sed de paz que de agua.
LA CÁRCEL DEL CIELO Afaf Malainin Talebuya En lo más inhóspito del desierto, hay un pueblo sediento que pide a los cuatro vientos ayuda sin más miramientos. En un lugar de la Hamada hay un pájaro que añora la tierra amada y que pide sin cesar ayuda para poder volar. En un lugar del cielo hay un muro de hielo que divide con ambición a familias sin compasión. En las placas heladas hay miles de palomas atrapadas por el más duro invierno que se ha convertido en un temido infierno.
Los pájaros son asesinados por cazadores malintencionados, que utilizan políticas terroristas ayudadas por aliados materialistas, que superponen los derechos humanos frente a supuestos intereses de los ciudadanos. Después de leer este poema me gustaría que te quedaras con el siguiente lema: “si escuchas al viento, oirás un llamamiento de un pueblo herido que teme caer en el olvido”.
OLVIDO Por Salka Embarek Porque no olvido, podrán pasar ejércitos de palabras cosiendo negativas en mi alma, podré escuchar versos cadenciosos, negando mi origen, justificando que duerma. No consiento, no transijo. Vendrán a mí, hombres anunciando ser justos para hastiar de nubes mi razón, y en los ojos y oídos descansando su olvido, me dirán que no existo, que el dolor fue un sueño, que nunca hubo cárceles de niños, ni muertos, ni hambres de conciencia, que nunca hubo río, ni de agua, ni de sangre, ni barrios de protesta en la calle, que los hombres son arena de desierto, y no aúllan las barreras del silencio. No consiento.
Me dirán que mi piel se desvanece, que mi padre no fue y no nací, que no hubo exilio, ni guerra, ni campos de la miseria, ni palabras en mi boca, ni sal en los ojos, ni en mi sangre venas, que la verdad no es eterna, como el amor, que me olvide, que todo lo olvide, que fue un sueño. No consiento. Olvido en español, pero no en hassanía.
PERDÓN Por Chejdan Mahmud Al amigo pido perdón, a mi madre, a esa persona sensible: mi querida amada. A mi buena intención también se lo pido. Y es que me he delimitado, diciendo mal de lo incierto, sobreponiendo sentimientos innatos, y valorando sin fe a la gracia divina. Y pido perdón, porque no sé hacer reír, ni con la magia de los gestos ni con el consuelo de las hermosas palabras. Soy infame, grotesco; por eso pido perdón al navegante, que en el mar de la poesía hunde ancla para saborear palabras. Palabras que han de ser útiles.
QUÉ DE LÁGRIMAS ESTÁ EL PUEBLO SAHARAUI Àngels Moseguí ¡ Ay Ay, Mahfud Ali Beiba se fue ! Hombre de buen talante, carácter fuerte, corazón grande, su corazón era tan grande que todos los saharauis cabían en él. Su fiel amigo el pueblo Saharaui, como debe ser. En tierras ásperas y curtidas por el sol. Pasó parte de su vida luchando por los suyos, nadie es como él. Pocos ya quedan de su clase. Una suerte conocerle y cruzarse en su caminó. Dicen que señor se nace, pero ¡Ay Mahfud Ali Beiba! Caballero y luchador se hace, y tú si lo conseguiste. Dejas una buena huella y todos aprendimos algo de ti… Cuando una luz se apaga en la tierra. Una estrella grande nace en el cielo. Mi más sentido pésame a toda su familia y todo el pueblo Saharaui.
NUESTRA ERA Por Ebnu Esta es la era de la soledad y el silencio, los amantes son desconocidos que vagan tomados de las manos por aceras distintas en las interminables calles de ciudades perdidas. Los transeúntes cabizbajos van tropezando con la podredumbre del futuro que anuncian los lumínicos de rascacielos invisibles. Los niños se arrastran mudos y descalzos, cargando sus penas en busca del presente. Mientras el mundo va nadando en aguas turbias de ríos hediondos que desembocan en el umbral del nuevo milenio. En esta edad de hambrunas y guerras, en esta era en que a nadie se le ocurre pedir una palanca para mover el mundo.
EL TIEMPO PARTIDO Por Saleh Abdalahi En el momento de tu desnudo las mariposas con sus menudas alas rompieron los cristales de los conceptos dejando en el aire flotar prendas, sábanas, zapatos vacíos sin suelas colgaron al sol pendientes, cintos y cordones con relojes parados. En el momento de tu desnudo las mariposas con sus menudas alas buscaron en cubitos el sol y la luna y con sus doradas antenas mezclaron las pinturas en un cuadro, EL TIEMPO PARTIDO EN UN VASO que luego, desnudos, colgamos en nuestra cabecera de sueños.
ACUARELA Por Chejdan Mahmud Yo soy de aquellos creyentes que tienen doble cara, se sacian de las putas y comen en nombre de Dios. Galopan en las nubes cuan hartos de la tierra y pintan sirenas con el humo falso de la eternidad. Esto es todo. Ya lo digo: hay alguien que se aferra a creer que un fiel es un poema andante.
LA NOVIA DEL MAR Por Bahia Mahmud Awah Villa Cisneros, Dajla, península ausente, Arus Elbahar camino de los cisnes blancos. Esta es mi lejana ciudad amada la que Francisco Bens vio desnuda y libre a plena luz del Gamar sahariano. Esta novia de la mar y del desierto también la contempló hermosa, caminando descalza entre las orillas y el vaivén de sus olas atlánticas, otro amante que se llamó Emilio Bonelli. Mi ciudad es gemela de Rosarito, San Quintín, Santa Rosalía, Loreto, Ensenada, San Lucas y La Paz, su otra hermana Mexicana, posada feliz en la mar pacífica. Mi ciudad, mi novia, mi sirena mi península, está sublevada está muntafida está herida, tiene la mar atlántica triste y soledad en las playas, tiene sed de libertad como para saciar el Océano Atlántico.
VILLA CISNEROS Por María Jesús Alvarado Como una feliz mora la ría se tiende en la arena con su melfa azul. La cabeza apoyada en el istmo, escuchando latir el pasado; los pies en el faro, en mar abierto -¡Atlántico!-, oleaje de mundos lejanos. Y bajo el cielo caro de diciembre se levanta el Fuerte, vigía de este pueblo blanco donde la casa se comparte con el viento cálido y la vida toda es una fiesta de peces de colores y tambores salados a la puesta de sol. Cielo, arena y mar, perfume de salitre, incienso y flores. Todas las voces de mundo construyen su silencio, y el desierto se alarga hasta la orilla para que beduinos y sirenas se enamoren.
(Cuenta María Jesús Alvarado acerca de su poema “Villa Cisneros”: “Es una descripción poética del pueblo donde pasé mi infancia”
DESDE QUE NOS SEPARAMOS Por Darak Mohamed Vive noches oscuras sin luz, la soledad es la que me acompaña. Y en una noche serena hablé con la luna de nuestro amor y el dolor de la alma que siento. El dolor, el que no tiene remedio. No tengo armas más que mi pluma, es la fortuna que tengo. Me ha conquistado la vida como prisionero; prisionero por tu amor, prisionero por separarnos, prisionero por no dar nuestro amor ninguna pista, prisionero por estarme en silencio. Desde que nos separamos las horas pasan y yo sigo aquí, a puro dolor. Mi vida no se encuentra normal, no tiene ninguna significación porque te perdí. Es verdad que siempre lloro por ti, cada segundo pienso en ti. No atrevo pensar en otra cosa más que en ti, tu amor por poco me llega matar.
Desde que nos separamos, siempre sueño contigo, siempre siento que estás a mi lado. No quiero despertar de este sueño, porque estás conmigo, estás en mi corazón, estás en mi mente. Eres mi fantasía, eres mi vida eres mi sangre y mi inspiración, eres mi alma. Quiero ser un suspiro de tu boca, quiero ser el aire que respiras, quiero ver con tus ojos. Me haces sentir hombre, tus palabras son una música que quiero estar y escucharla. Nuestro pasado es un alfabeto conocido sin palabras. Siempre me acordaré de él, porque cuando estoy contigo no me canso nunca, nunca siento el peligro, nunca tengo sueño. Siempre tengo ganas de estar despierto.
Cuando estoy contigo el dolor se olvida, siento que puedo superar todo. Nadie puede violar nuestro juramento cuando estoy contigo. Apunto mi foto en tu corazón, en tu sonrisa y en tus ojos veo quién soy. Eres la mujer de mis sueños, eres la mujer de mil maravillas, No me importa si pasan cien años pero voy ser el hombre de tu vida y tú vas ser la mujer de mi vida. No olvides nuestro juramento, espero vida mía que pase un milagro y nos junte otra vez. Te amo.
DIDÁCTICA DE LA GUERRA Por Nerea Gay Ya tenemos una identidad. Sabemos bien quién somos. Es necesario que sepan ustedes quiénes somos. Y cómo lucharemos. Han de estar preparados, para aprender. Han de estar preparados para comprender que van a perder. Han de leerse bien un manual de autoayuda. Estarán bien sin nuestro sufrimiento. Sabrán caminar sin pisarnos. Deberán aprender a respetarnos. Les sugerimos la autodidáctica. Si lo ven difícil, nosotros estamos cargados de odio. El respeto, con sangre, también entra.
EL BUSCADOR DE CAMELLOS Por Limam Boisha Un anciano acaricia la mítica barba, con los dedos extiende la vista, el pasto sonríe. Los camellos, de rodillas, adoran el regalo de la Badía. El deyar anda en busca... leyendo las huellas del animal en la enciclopedia de la distancia. Desde el pecho de un pozo brota un germen de esperanza. En la soledad de los parajes, los nombres de Dios le acompañan en su viaje por la vía láctea. El deyar saluda, formula interrogantes, donde lo atrapa la noche hace un refugio y duerme. Las manecillas de sus pasos son la medida del tiempo. El anciano acaricia la mítica barba, con los dedos extiende la vista, mira hacia el horizonte, y en su búsqueda descubre el secreto de la Badía.
BUBISHER Por Bahia Mahmud Awah A veces inesperado posa sobre los vientos de la jaima, a veces como un ágil anciano del desierto turbante blanco y silham[1] oscuro, saluda ávido sobre los secos ramos de una acacia. Cuántas buenas noticias espera el nómada de tu visita, después de años sin lluvias, años de flacos dromedarios años sin leche ni pastos días en los que los niños lloran de gana y de noche duermen cansados de esperar. Pajarito cantor, primavera del desierto, cantor de verdes pastos, cantor de buenas noticias para Lefrig[2]. Una madre entra sonriente y le dice a sus hijos: Alegraos que nos visita Bubisher, viene con su piquito rebosante de cuentos y sus alas esparciendo historias. Y todos como dicta el rito beduino canturrean: ¡Bubisher ibasharna uibasharac biljeir Bubisher ibasharna uibasharac biljeir Bubisher ibasharna uibasharac biljeir! Bubisher que tengas y nos traigas buenas noticias.
[1] Silham, especie de albornoz prenda de color oscuro que utilizan algunos ancianos que realza su presencia y personalidad. [2] Lefrig, campamento de jaimas tradicionales saharauis tejidas de lana de dromedarios.
DESPEDIDA Por María Jesús Alvarado Este lugar, que es todo cuanto tengo, ¿qué guardará de mí cuando me vaya? ¿Crees tú que alguien evocará mi rostro entre estas calles? ¿Recordará la huella de mis pies esta arena que me despide cabizbaja? ¿Alguna tarde el cielo enrojecido echará de menos mis ojos o mi voz? ¿Acaso el viento guardará mi canción entre sus dedos, levantará la arena con mi risa cuando pase estrecho entre las talhas y las graras, o deseará jugar una vez más con mis cabellos? No quiero que la playa me olvide, ni el fuerte, ni la casa, ni el pozo, ni la escuela... Dile al viento que recuerde mi nombre y en cuanto pueda me indique el camino de vuelta.
(Cuenta María Jesús Alvarado acerca de su poema “Despedida”): “Lo escribí unas horas antes de marchar, dejando atrás todo lo que había sido mi vida hasta ese momento. (1975)”
NI JUSTICIA NI OLVIDO. LO SIENTO, SAN VALENTINO Por Raduán Zaruali (Saharaui Ochenta) Dedicado a los presos políticos de Gdeim Izik
Me dijeron que eras un santo, también me dijeron que eras bueno, y me contaron que diste la esperanza a muchos soldados, a muchos indignados, a muchos hombres, meros seres humanos para que vivieran el amor y disfrutarlo. ¡Qué maravilla! Con lo que es el amor, y ¡qué alegría hacerle feliz al soldado en tiempos de guerra… Pero te fuiste. Lamentablemente te fuiste. Te fuiste creyendo que el amor consiste, simplemente, en estar al lado de una, creyendo que estar puede ser sinónimo de mirar, de charlar, de coquetear, de acariciar, de besar y f… Te fuiste pensando que el amor, sólo, es eso. Y te fuiste Santo Valentino. Lamentablemente te fuiste, te fuiste, sin cumplir tu deber.
Tuvieras que decirles a los soldados que amen a los niños, que respeten a las mujeres tanto como a los ancianos; nuestros sagrados ancianos…, que quieran, que amen los valores humanos que llevan nuestros jóvenes en sus pancartas, que escuchen las inquietudes de presos inocentes en cuevas desconocidas. Eso es amar Santo Valentino, es comunicar, es tolerar, escuchar y respetar. Te fuiste estimado Santo. Lamentablemente te fuiste, y te fuiste, sin impartir a este grupo humano su histórico deber, que es defender y proteger: la justicia, la paz y la convivencia social, y que esas nacen de la primera y desembocan en ella. Mañana es el 14 de febrero, peeeero, pero como te fuiste sin cumplir tu misión, querido Santo, mañana no habrá ni amor ni justicia, y ni justicia ni olvido. Que me perdone querido Santo, no voy a conmemorar el 14 de febrero.
MENSAJE EN UNA BOTELLA Por Ebnu En silencio te saludo con la mirada errante a través de las ondas de una radio. En silencio te envío los encendidos versos y la voz de un poeta que te cantó hasta después de muerto. En silencio desde estas costas que te miran en una botella le he confiado un mensaje de libertad a las olas. En silencio después de quebrarse mi voz seguiré gritando tu nombre de tormenta tu dolor, tus heridas, tu soledad. En silencio seguiré contándote los pasos que separan tu ciudad de las dunas que habitan mis corazones.
SUEÑOS Por Limam Boisha A un niño saharaui con Síndrome de Down
Hay palomas que susurran a quien les da de comer maneras de Baraka, ciertamente insondables. Y en alguna orilla de cañaveral, vestido de madrugada, un pescador espera que el anzuelo le ofrezca hermosos sueños ejemplares. Pero cuando truena la memoria, el río desvela tejidos de rencor y mordiscos de sobrevivientes sobre los troncos erectos. Hay un sublime sueño: sólo anhela conducir el camión de la basura.
NOCHES DESNUDAS Por Darak Mohamed Medio siglo vivo sin infancia, medio siglo no conozco la ignorancia, medio siglo de la distancia, medio siglo esperando la independencia; ¡en medio de la nada! No puedo reír y no tengo que elegir entre vivir y morir, sólo tengo que sufrir ¡ésa es la loca suerte! Preguntar el tiempo por el daño que hay que pagar, cruzando los caminos de la vida, luchando contra el maldito destino, luchando por mi mundo perdido, donde quiero estar, allí donde quiero disfrutar. Es el recuerdo que quiero llevar, es la madre que quiero amar, es la tierra que quiero abrazar hoy antes que mañana.
EXILIO Por María Jesús Alvarado “Decirles que la tierra no es de ellos, que la gente no es de ellos...” Alí Salem Iselmu (La música del siroco)
¿De qué me sirven el llanto y la rabia? ¿Cómo luchar contigo desde aquí, cómo decirles que también a mí se tienen que enfrentar en la batalla? Defenderemos juntos el cielo, el mar, la casa. Tú en la arena caliente, yo los pies en el agua. Y aunque el té ahora es amargo, el tiempo nos espera, y en una jaima blanca de azúcar y canela beberemos la paz, será nuestra la fiesta.
Cuenta María Jesús Alvarado acerca de su poema exilio: “Intenta describir la necesidad de compartir la lucha cono los saharauis desde mi propio exilio. Fue escrito en 1977”
RECONCILIACIÓN Por Ali Salem Iselmu Bajo la promesa del calor desapareció la lluvia, los colores son enigmáticos y la nueva ciudad es una basta colina, algunas palabras suenan lejanas y el olor de la fruta es un espejismo. La familia reunida alrededor del té conversa de forma espontánea y el horizonte desaparece en el cielo. El turbante, el siroco, la lógica del desierto impone la naturaleza de las cosas. El sabor de la leche es extraño y cada paso persigue una nueva huella en una ruta infinita; ser beduino y caribeño se lleva dentro del alma.
ME DICE EL SOL CADA MAÑANA Por Luali Leshan Me dice el sol cada mañana levántate, te doy mi calor, inundaré de luz tu pequeño mundo. Y orientaré tu mirada hacia una nueva mañana de esperanza. Meceré tu cuerpo de niño en mis cálidos brazos hasta que duermas. Y mañana, como cada mañana, te diré: levántate, y te volveré a dar mi calor. Y así hasta el fin de tus días. Haz que mi luz no se derrame en vano.
GRITOS POR EL SAHARA Por Darak Mohamed ¡Libertad!, ¡paz!, ¡esperanza! Entre la vida y la muerte, entre el paraíso y el infierno, ¡allí estoy¡ Entre el mar y el enemigo, entre montañas de arena, ¡allí estoy¡ Encarcelada en mis sueños escapada del destino y grito por el Sahara: ¡Libertad!, ¡paz!, ¡esperanza! Grito al mundo a ver si me escuchan, grito a la humanidad a ver si me ven, grito a la hermandad a ver si me hablan, grito a la amistad a ver si me salvan. Lucho contra el tiempo y grito: ¡Libertad!, ¡paz!, ¡esperanza!
Grito por el Sahara, grito por su libertad, grito por su independencia. Porque es la sonrisa de mi boca, el brillo de mis ojos, la melodía de mi voz. Es mi amor eterno. Sahara en todos los sitios; en mi corazón, en mi sangre, en la belleza de la luna, en cada grano de la arena, en cada inspiro del aire, en cada ola del mar. Sahara es el pasado y el futuro que tengo y por ella voy gritar: ¡Libertad!, ¡paz!, ¡esperanza!
VIEJA FOTO Por María Jesús Alvarado He encontrado esta mañana una foto vieja de mi infancia. Está gastada y algo rota por un lado, pero aún desprende el aire cálido del momento del disparo, y se oye e mar, al fondo, entonando folias con bello punteo de desierto. Se adivina un horizonte largo, tan largo como todos los años que han pasado y los que quedan; y el secreto de un cielo azul a veces, a veces rojo, a veces negro y estrellado, un cielo que lo envuelve todo, que me abraza siempre.
Yo luzco despeinada por el viento y se oyen tambores, palmas y esgarit de mujeres alegres; canciones de eurovisión, juegos de escuela, los cantos de la iglesia y la llamada a orar de madrugada adornando el silencio y los poemas. Asoman lápices de colores, arena en los rincones, olor a gofio y a té con hierbabuena. Y un ventanuco en el techo por donde se escapó el tiempo. Tiempo sólo mío tiempo que no vuelve y que el alma de esta foto en blanco y negro guarda para siempre.
Cuenta María Jesús Alvarado acerca de su poema “Vieja foto” "Poema nostálgico en el que los recuerdos reflejan la mezcla de culturas e influencias -canaria y saharaui- que conformaron mi infancia, con el gofio y el té verde, los esgarit y las folias...”
LOS LIBROS Por Bahia Mahmud Awah Los libros me hablaron de nefastas e injustas guerras. También me enseñaron cómo odiarlas, cómo repudiarlas. Los libros me condujeron a las entrañas de mi siglo. Porque he visto poetas jornaleros, poetas jardineros, poetas cristaleros. Poetas que avivan las letras donde el cielo abraza la inmensidad de los desiertos. Pero también he visto que la palabra de un poeta jardinero equivale al precio de un tulipán en Constantinopla.
LIBERTAD AMORDAZADA Por Esperanza Jaén A los presos políticos saharauis
La memoria no es el olvido. Los recuerdos son una puerta entreabierta que deja que te asomes a la dura realidad.. El sufrimiento de tantos años rompe el disfraz de la falsa verdad, ésa que quieren que creamos, la que intenta poner mordaza a nuestra boca y romper la unión de nuestras manos. Hoy los barrotes amenazan más que nunca, las mentiras van tejiendo su tela de muerte, los torturadores quieren sepultar bajo cenizas la memoria de víctimas inocentes. Ánimo, compañeros la justicia siempre vence, aunque se empeñe en dibujar puertas cerradas, la solidaridad con su fuerza, rompe muros, lima barrotes y abre todas las ventanas. La verdad llegará con la justicia para dejar de ser causa olvidada. La memoria de los años tras las rejas por gritar que es posible soñar sin el olvido, hará florecer la primavera y vendrá la libertad, abriendo todos los caminos.
8 de febrero de 2013
TABLERO DE ARENA Por Limam Boisha Cuatro pies rompen las costillas de la duna, los turbantes se abrazan para la hora del juego. La mano acaricia, alisa la flotante arena, y un improvisado palillo indaga en la milenaria memoria. Y nace en la arena un mundo cuadrado, con dos líneas cruzadas -horizonte y banderaasentadas en su firme ombligo. Dentro brota un diamante enrejado con cuarenta corrales. Un jugador con pequeños palitos arma su propia zona. El otro la llena de estiércol. Una casilla está libre para que comience la batalla; el tablero cobra vida.
LA LARGA NOCHE Por Darak Mohamed Quiero que creas que entre le gente hay un corazón que no miente, hay una mirada ilusionante, hay una voz emocionante, hay alguien que te siente. Desde el momento que tú te marchaste, aquella noche que yo no dormía por la palabra que ella me decía y porque la caricia que ella me daría siempre fuera mía. Hasta aquella noche en que yo le he perdido y volví con el corazón partido, paseando en las carreteras, pensando en ella sola hasta tardes horas, como un loco enamorado, porque no le había encontrado.
Quisiera calmar el tiempo y atrapar el cielo. Quisiera mirar hacia atrás para devolverla. Quisiera devolver su linda sonrisa. Quisiera devolver su distinta mirada donde hay mi esperanza. Quisiera hablarla. Quisiera decirla que la quiero. Quisiera borrar sus heridas y olvidar el pasado y estar a su lado. Es ella que quiero tener. Es ella que quiero proteger. Es ella que no quiero perder. Quiero que olvidemos lo peor y pensamos en lo mejor pero aquella noche fue mi primer y último error porque le había perdido para siempre y me quedé con el dolor.
OPRESIÓN DEL SAHARA Por Oswaldo Roses Esa es la realidad. De pronto hay palabras que se desgarran y se pudren porque no tienen libertad, no –están oprimidas-, porque hay recuerdos, recuerdos que se quedan solos. Hacia el olvido. Como una piedra hundida, como una sed volcada en desconsuelo, como una noche esparcida en soledad. Cuando tanta indiferencia del mundo y de España pesa ya... en tu vida, y entonces crees que no sientes, y entonces crees que no llegas apenas a algo, a lo que cualquier lágrima llegó hace tiempo. Por eso, saharaui, sí, hay que conquistar el grito de nuevo, hay que ganar de nuevo incluso la fe, soñar de nuevo rompiendo cadenas, venciendo todos los miedos, queriendo con otra hambre y, luego, al fin andar como una nueva y plena persona con su sentimiento de tierra libre, libre, libre y... siempre libre.
EL PRĂ?NCIPE Por Ebnu Estoy solo irremediablemente solo ya no quedan zorras para domesticar ni ovejas ni rosas que cuidar.
VOLVER Por Salka Hamma Amideh En la profundidad de la noche, sombras y penumbras rompen el silencio de la noche. El Aiun duerme ajeno a su cercana tragedia y en un parpadeo su gente se encuentra bajo el manto frĂo del desierto, perseguido por indeseadas sombras rojas. Y a lo lejos una lĂĄgrima saharaui bajando por la duna, deseosa de volver, volver a esa celestial arena, volver rompiendo las fronteras de la miseria. Y volver, volver a la inmensidad del Aiun. Los ruidos de la infancia, la paz y la bondad que caen por sus dunas. Y dejar atrĂĄs el exilio, y volver, volver a mi adorado Sahara.
CARTA DESDE AQUÍ Por Chejdan Mahmud Hay un trozo de arena que palpita bajo mi lengua. Hay un trozo de arcilla que nubla mis ojos. Hay sentimientos reacios a dejarme dormir. El canon de lo normal va marcando mis pasos. Más acá del paraíso se retuerce mi ser entre deseos y desganos. Cosas, como palabras, vigilan mis sentidos, desde el orgasmo de la pradera adyacente.
Y ADEMĂ S ES IMPOSIBLE Por Nerea Gay No puedes obligar a un niĂąo zurdo a escribir con su mano derecha. Como no puedes obligar a un pueblo a que borre su identidad. A golpes no se borra lo que uno es. A golpes no derrotas la resistencia.
ALGUIEN Por Limam Boisha Alguien irrumpió en esta tierra para cazar falenas, para destruir la semilla de los nidos en peregrinación. Alguien irrumpió en esta tierra y castró la vena de la raíz rugosa y mutiló los hijos de la bendecida lluvia. (Al amanecer, las cigüeñas atravesaron el horizonte con las alas vacías) Alguien irrumpió en esta tierra y ordenó al pelotón acribillar los cuernos del antílope, y asfixió las descuartizadas almas en el incienso de la inexorable pólvora.
Alguien irrumpió en esta tierra, y aún tiembla el árbol, y siguen cayendo anónimas hojas para enjugar las lágrimas de la genealogía.
TRISTEZA Por Xabier Susperregi Esta noche viniste, tristeza de pronto llegaste con tu llave maestra a robarme mi sueño dispuesta. Y de pronto, tristeza mi cuerpo parece no pesa el viento me trae y me lleva. Abre los ojos y cierra y la noche ha cerrado su puerta. Y de pronto, tristeza rodeado me encuentro de arena y a mi lado una niña, pequeña soñando, sueña despierta Aicha, su madre no está muerta y libre, su pueblo se queda.
ÂżYa te vas, tristeza? pero pronto, te ruego regresa pues mejor que el olvido tĂş eres, tristeza.
LA VIDA SIN TI, PAISANA Por Raduán Zaruali (Saharaui Ochenta) Maldita esta vida que te aleja de mí, que te hace volar y me hace llorar, que nos obliga a callar. Maldita. --Maldita cuando se echa de menos a tu locura, a la chula sonrisa, ¡qué hermosura!, a ojos matadores y labios, ¡qué dulzura! y a aquellos susurros seductores. Maldita. --Morena, sabes bien que el verdadero amor no puede ocultar, nuestra bonita historia, ni olvidar, ni olvidar que aquellas noches a tu lado nunca se van a alcanzar que el segundo vaso que solías darme nunca lo voy a tragar, nunca lo voy a tragar. Y bajo la luna llena y la “Telha”, nadie lo puede imaginar.
--Amiguita, me duele acordarme de ese sabor al besar, miel de mi patria, y cebada saharaui en tu piel solía brillar. huele en tu perfume flores del Sahara, huele “nuar”. Y esa suave resistencia que mostrabas al acariciar tu rostro, nunca la voy a encontrar, nunca la voy a encontrar. Y cuentos y leyendas me solías contar, nunca los voy a escuchar, nunca los voy a escuchar, y vasos de té y brindar. nunca los voy a encontrar --Morena, no sé si te acuerdas como me acuerdo ni recuerdas como bien recuerdo… pero lo que sí sé es que era un verano en una ciudad cuyo nombre no me acuerdo cuando te conocí paisana. Y fue un buen recuerdo.
En aquella época, en aquella época no creí en que un día la hermosa “hasnía” pueda ser amiga mía, no lo creía, por varias razones no lo creía. Y como lo creía y tú perteneces a la burguesía mientras, a las masas yo pertenecía como lo creía y la juventud por tu orgullo no se atrevía. --Maldita esta vida, paisana que te aleja de mí, que te hace volar y me hace llorar, que nos obliga a callar. Maldita.
Dajla en : 16-06-2013.
SAHARA ¡QUÉ PENA! Por Larosi Haidar Recuerdo las dunas esbeltas de antaño y ahora en mi mente se empujan humilladas por los vientos del norte. Recuerdo dóciles rebaños a mares por el amado desierto y hoy ocupan su lugar alimañas de norte incierto. Recuerdo beduinos sonrientes honestos encariñados con su tierra ahora veo criaturas norteñas rencorosas y deshonestas. Recuerdo el mágico perfume ceniza de alcance infinito y ahora todo huele a ajos, cloacas nortes, arenas movedizas.
Recuerdo seductores mantos en guitarra símbolos de exquisita finura y ahora me ciega la costura norteña de tela y capucha. Lo recuerdo y me acuerdo aciago que hoy la patria es reo de reyes y oscuros intereses y el dolor me rompe las venas por tu destino Sahara, ¡qué pena!
INTIFADA Por Ali Salem Iselmu Las tristes tinieblas arderán en el nombre de la mitología de los hombres desnudos con la virtud de la inocencia. Ya no se apaciguará la lámpara encendida que se transforma lentamente en una luz rebelde y sabia. Iluminará el trayecto hasta el final. Pero volverán a surgir los hombres vestidos con palabras que el viento transforma en un enorme eco lleno de libertad. Desaparecerá la represión de los que oprimen, porque el llanto de la rabia será el grito de la alegría.
MARIAM Por Ebnu Canta Mariam, Canta. que tengo el coraz贸n ausente y la voz quebrada. Canta Mariam, Canta. Que Sreiser Dahbu ha vuelto y los caballos dejaron de llorar su ausencia. Canta Mariam, Canta. Que las olas vuelven a besar tu risa y un ni帽o por las calles de El Aaiun te llama hermana. Canta Mariam, Canta. Que mi amor espera en la tierra sin sombra en la tristeza de mis versos mientras cantas las nanas que engendr贸 tu voz de flauta pastora. Canta Mariam, Canta.
PUEBLOS HERMANOS Por Esperanza Jaén No puede ser casualidad que tu pueblo y el mío compartan colores en la bandera. Que sólo un día separe las celebraciones de nuestras fiestas. El verde de esperar tiempos mejores, con el blanco de un pueblo digno y noble y la alegría del rojo de la vida que despierta a la noche en las estrellas. Ojalá el color negro que difiere en el futuro sea una franja que no importe, un pasado de injusticia que , olvidado, sea sólo el espacio inferior de tu bandera. Hermano, vamos a mirarnos que estos días, en “hassano-andalú” cantamos y bailamos, lloramos y reímos hablamos y recordamos. Los dos pueblos, unidos en la espera los dos pueblos, hermanos de camino celebramos, esperando, nuestra fiesta. 27F, día de la RASD. 28F, día de Andalucía
UN GRANITO DE ARENA Por Mohamidi Fakala Habito entre granitos de arena, pero de brillo no como cualquiera; de oro y cielo de plata fina. En una JAIMA humilde de arena, sin conchas ni espuma. A menudo salgo, y más en primavera a saludar la avalancha de blancas plumas, que suele atravesar la frontera, sin visa, amén de un anillo de compromiso encima de los espolones de las patitas. Venían batiendo alas en busca de tibia ternura, hacia el sur, de donde yo soy; de la tierra del arenal de las rositas. Cada vez que me necesita, urge el encuentro como vuelo de aves de las que se resucitan. A mi manera, la llevo conmigo, y en su pupila un granito de arena (...) y una lágrima púrpura de muy adentro, sin espinas. Sahara, donde yo habito, hay mucho más que un granito alado, y un verso puro, sin blasfemia, siempre a tu lado.
A ALI ULD MEYARA Por Bahia Mahmud Awah Gigante aún despierto en el lecho de un minúsculo río, a veces desnudo de verdes, a veces cubierto, sabanas copos de nsil. Sin lápida de mármol, nostálgico epitafio, cinco vainas de bronce vacías por un Sahara en paz soñada. Gigante invicto en la batalla de los siete franceses, gigante vivo o muerto setenta años después, gigante aún vencedor en la misma trinchera. Gigante aún despierto en el lecho de un minúsculo río, a veces desnudo de verdes, a veces cubierto, sabanas copos de nsil.
AMOR MÍO NO ME DEJES Por Darak Mohamed Madre MÍA... hermana MÍA... amiga MÍA. En cada sitio te busqué. En cada sitio pregunté por ti. En cada sitio te esperé Para decirte estas palabras: Gracias por hacerme feliz. Gracias por hacerme la más fuerte. Gracias por traerme para esta vida. Gracias por darme la sonrisa. Gracias por todo. Madre MÍA... hermana MÍA... amiga MÍA... Sin ti yo no soy nada. Sin ti yo no tengo ningún precio. Sin ti yo soy la más débil Por favor... no me dejes sola en este mundo. No conozco nadie más que tú. Por favor no sueltes mi mano. No te marches lejos que ya estoy cansada. Siento el dolor de la nostalgia. Siento el miedo y el dolor. Estoy perdida en esta vida. No sé dónde estoy en el mundo y no se dónde está el mundo para mí. Vivo sola en este silencio, al abrigo de una jaima. Nunca tengo sueño y no lo voy a tener. No tengo en esta vida más que nuestros recuerdos. Los tengo guardados en el fondo de mi corazón porque valen mucho para mí.
Madre MÍA... hermana MÍA... amiga MÍA... No quiero perderte otra vez. Por favor no te marches. Pero si es obligatorio quiero decirte estas palabras antes de regresar: En cada respiración estás. En cada mirada estás. En cada lágrima estás. En cada palabra que sale de mi boca estás. No olvides que te quiero y voy a seguir queriéndote. Eres el hombre y la mujer de mi vida. Te amo mama.
LA AUSENCIA Por Mohamidi Fakala En tu ausencia me conformo a escuchar el silencio que fragua los colores del viento, y que remueve con paciencia oscuros sentimientos, que ocultes, en ocasiones, cuando se apodera de nosotros la nostalgia. Yo no canto a las estrellas ni a los brazos bonitos, y a煤n menos al aureado firmamento. S贸lo me apetece el silencio, si es posible, sin tu ausencia.
A POR EL MAR ROBADO Por Esperanza Jaén Amigo, hermano, hay que seguir la nube liberada y perseguir estrellas luminosas, son muchos años ya de arena y nada, de cárcel y de heridas dolorosas. A por el mar, que nos está llamando con el sonido de nuestras caracolas, que pasaremos sobre el muro derribado, para sentir la tierra y sembrar las rosas. Tendremos que tender todas las manos para desterrar las ilusiones rotas, soñar codo a codo la victoria y llenar de risas y besos nuestras bocas. La libertad nos espera, poderosa, en el Sahara libre y soberano, para poner el verde sobre el blanco y llevarles las estrellas rojas a los corazones desilusionados. Amigo, hermano, Recorreremos juntos el camino compartiendo los sueños y los cantos gritando nuestro amor y nuestra fuerza y nos tendrán que dar el mar robado.
AMINATU Por Juan Muñoz Montero A Aminatu Haidar
Escucho el eco de tu mirada estrellándose contra los cristales, en el punto de mira de las cámaras ahora que te mata el hambre y lloras en hassanía bellas palabras que nadie sabe. Con la arena del desierto incrustada en tu corazón late más fuerte que nunca el viento en la Hamada y se siente el peso de tu amor en las lonas de las jaimas. Brotan flores en el Aaiún aunque tú no puedas estar para verlo. Caen lágrimas frente a un muro de odio. Su vapor se deshace en un soplo de tiempo. Ahora que tu mente viaja en vuelo rasante sobre las calles del mar (de casas) de Tindouf, que casi se confunden con el desierto, puedes escuchar el té estrellándose contra los vasos como lo hace ahora la lluvia contra los vidrios del aeropuerto. Perdiéndose tus ojos tras ellos, aunque tu imagen quede atrapada en su reflejo. Las piedras del desierto lloran por ti. El Sahara entero camina a tu encuentro. Caen las noches más frías que nunca, suena tu voz en el céfiro.
¿DÓNDE ESTUVE? Por Feilah Mohamed-Ahmed Hoy mi corazón descansa Porque mil y una estrellas le guían Hoy mi corazón descansa Porque tiene lo que más ansía Esta tierra, por la que acepté luchar Por la que desplegué mis alas y eché a volar En busca de mi destino De saber quién soy De encontrar mi camino Hoy, cierro los ojos Inspiro hondo ¿Dónde estoy? Que recién mi alma se descubre ¿Dónde estuve? Que nunca me sentí tan libre Vuelvo a abrir mis ojos Despierto de un largo sueño La imagen se materializa de a poco Mi Desierto en la Nada La Nada inundada por el siroco Un par de acacias en la Nada Esa Nada de la que soy dueño Vago bajo un sol Que tiñe de dorado la tierra Sobre una arena Que se adapta a mis pasos
Con una brisa Que me susurra Y con un paisaje Que plasma el peor de los castigos Estuve tan lejos de casa Que me sentí desintegrar No me supe encontrar Hasta que un día me dije “Abre tus alas Y echa el vuelo ¿Que a dónde irás? Rápido, abraza tu sino No mires al suelo Al frente con decisión No te cuestiones más Abre tus alas Y echa a volar” Y ahora cada minuto que pasa Y cada paso que doy Solo hago preguntarme ¿Dónde estoy? Que recién mi alma se descubre ¿Dónde estuve? Que nunca me sentí tan libre
EL VERANO Luali Leshan El verano es una estaci贸n de soledades mustias. La tierra rinde su pleites铆a ante el sol y nuestros cuerpos, coraz贸n de la tierra, se tuercen mientras dura la reverencia. El viento es una navaja afilada que destroza la tarde.
TIEMPO DE INOCENCIA Por Maribel Lacave A mi hermano Alberto y a sus paracaídas caseros
El viento sopla sobre los barcos de papel sobre los paracaídas de plástico. Sopla sobre la niñez, ese insólito tiempo de inocencias cuando aún no sabíamos que los barcos se hundirían sin remedio, y que las bombas acabarían cayendo sobre Kabul, M´Dreiga, Gaza o Bagdad. Ese tiempo en que no nos preguntábamos a dónde emigrarían las gaviotas de las playas de Butarja ni en qué puerto vararían los membrillos que dejábamos salándose en el mar. Ese tiempo en que sólo Truk era todo el horizonte.
POEMAS Por Jaqueline González Cruz El viaje a los campamentos saharaui estuvo lleno de grandes experiencias y emociones, quisiera plasmar de alguna manera lo que vi y viví. No me considero poeta, sólo una viajera que tuvo la oportunidad de conocer al pueblo saharaui, estoy convencida que su lucha es uno de los acontecimientos mundiales más importantes y una muestra de temple para muchos países. Al pensar en lo que dije estando en el Centro de victimas de guerra y de minas “Seré voz de su causa” surgen estos breves pensamientos:
RESISTENCIA Por Jaqueline González Cruz Al escucharte me doy cuenta de tu fortaleza, para la resistencia: cultura e identidad. Mujeres guerreras y valientes preservan tradiciones, costumbres y valores. Hermana, hermano saharaui me duele tu tristeza me anima tu valentía me inspira tu caminar deseo tu victoria. Nunca un día más sin sentirte en mí hermana, hermano saharaui.
(Inspirando en la reunión de mujeres saharauis el 8 de marzo del 2010, Día Internacional de la Mujer en los campamentos saharauis, Tinduf).
GUERRA Por Jaqueline González Cruz Soldados, tanques, fusiles, minas... el muro..., y el sol como testigo de la resistencia saharaui. La arena golpea los rostros de los que esperan. El soldado marroquí obedece una orden: - Nadie pasa el muro. El soldado saharaui obedece a su corazón: - Recuperar su tierra. El soldado marroquí obedece una orden: - Nadie pasa el muro. El soldado saharaui obedece a su alma: - Regresar al mar. El soldado marroquí obedece una orden: - Nadie pasa el muro. El soldado saharaui siente nostalgia. El soldado marroquí siente miedo. El soldado saharaui ama a su patria y la quiere libre. Marroquí – Saharaui, se miran, se reconocen... El soldado marroquí tiene un tanque. El soldado saharaui tiene fe y esperanza. Se fue el soldado marroquí y el soldado saharaui ahora tiene un tanque, tiene corazón, tiene alma, tiene fe y esperanza, y con la nostalgia puede tocar el mar que le pertenece.
EN EL DESIERTO Por Jaqueline González Cruz Me encuentro en el desierto, camino en el desierto, la arena entra en mis orificios, me gusta hundir los pies en la arena, me gusta mirar cuando el sol se esconde, me gusta jugar con la nada, me gusta cantar con el viento, me gusta correr por el mar de arena, me siento plena. Donde me advirtieron que no habría nada encontré familia y amigos. Donde me advirtieron que no habría nada encontré mi fuerza.
DESPUÉS DEL VIAJE Por Jaqueline González Cruz Todo cambió, ya no soy la misma, ya nada es igual en mí. Al cruzar el Océano Atlántico llegué a puerto seguro, agradezco las manos que tomé, la tierra apelmazada en mis zapatos y los olores y sabores de los lugares que conocí. Las imágenes se agolpan en mi cabeza, las emociones se avivan y aún tengo claro cada día del viaje. Tengo en mi corazón a cada persona que me contó su historia, que me hizo parte de su dolor, pero también de su fortaleza. Al irme de mi tierra mexicana sentía que quizá no volvería, y así sucedió, pues la que se fue, no volvió. Cambié y una parte de mí, murió. Nuevas maneras de ver el mundo nacen en mí...
CIELO Por María Jesús Alvarado Anduve sin destino ni tiempo, hasta aquella acacia, primero, a las talhas secas, hasta las rocas negras, allá, donde la duna grande... Anduve hasta ocultarse el sol. Y cada paso fue el principio del camino. Porque a pesar de tanta tierra extendida a mis pies, es el cielo inmenso el que me lleva, el espacio que recorro cada día para no llegar a ningún sitio que no sea lo mejor de mí.
NIÑOS Por Fátima Galia Vi ojos bellos clavados en los míos, miradas apagadas, sin juguetes ni diversión. Vi pupilas nubladas, manos tiernas con mascotas de lagartos y escorpión. Vi tez morena, pies descalzos correteando, por los charcos y dunas. Vi criaturas víctimas del terror, inocencias que apasionan, rostros que inspiran, corazones que cautivan. Vi lo que nadie pudo ver, espejismos tejiendo cuerdas del pasado, sombras en el horizonte cultivando claveles y resplandores en el cielo con mensajes esperanzadores. Vi semillas forjadoras del mañana, un presente con futuro, un porvenir con varias formas del saber. Vi tantas, tantas cosas por decir, que sólo mi mente guarda y mis labios no podrán describir.
TE HE ESCRITO UNOS VERSOS AKH HASSANI Josep Codonyer Soria (Ibn Al-waqt) Tu sangre se pierde entre las piedras del desierto, mientras el viento se lleva tu sombra entre ruinas de esperanzas. Tu cuerpo nos han robado, para intentar ocultar la verdad. Te han lanzado al fondo de un pozo junto con todos nuestros amigos muertos. No obstante, tu mirada está en nuestra memoria. Todavía escuchamos tu elevada voz diciéndonos alto y claro la verdad de nuestro sufrimiento. Una voz transgeneracional, donde todos nuestros muertos expresan su fuerza, la fuerza de generaciones en lucha por la dignidad y la libertad del Sahara Occidental.
Y nosotros, tristes por vuestras ausencias, dolidos por tantas mentiras, cargados de rabia, rabia por tantos y tantos aĂąos de injusticia y de hipocresĂa, de violaciones y de torturas, de muertos. Nosotros, afirmo, decimos: ÂĄBASTA! Estamos hartos de tantas pesadillas, estamos hartos de que los criminales gobiernen este mundo.
ÁFRICA Por Limam Boisha Hermoso nombre de mujer, pobre y violada. Torpe semilla que esconde tesoro y expone hambre. Bellos ojos oscuros con alma arrugada. África, otra vez se han roto tus sueños y reliquias de retorno. Vuelve, África, con tu orgullo, con tus senos libres, verdes o secos, pero vuelve. Vuelve, África, con tu soberbia voz o sin ella, pero vuelve. Y reúne a todos, a todos tus tambores.
EL INFIERNO del SAHARA OCCIDENTAL Por Àngels Moseguí Cielo rojo, estrellas, no hay luces en las calles Gatos muertos, puertas cerradas, vértigo en la oscuridad. Rabia en las miradas, no hay tiempo para pensar Golpes secos, sangre, vuestra ley es MATAR Cuerpos muertos, guerras, en el barrio de Maatallah. En el Sahara Occidental.
ANTES DE MARCHAR Por Darak Mohamed Antes de marchar en silencio recuerda amigo que hay sola una sociedad, te esta esperando, lagrimas de unas madres, gritos de pequeños niños, sufrimiento de débiles viejos. Antes de marchar en silencio recuerda amigo que todos te esperan muerto o vivo, en cada mirada te esperan, en cada mirada te preguntan, en cada mirada te quieren, en cada mirada te aman. Antes de marchar en silencio recuerda amigo qué puedes hacer por ellos... por ellos nada es prohibido, por ellos nada deja de ser valido, por ellos nada es imposible, por ellos nada es increíble.
Antes de marchar en silencio recuerda amigo que eres un gran luchador saharaui, no conoces el imposible, subes las montaĂąas, llevas el cielo en tu mano. Puede ser que naciste sin nada y vives sin nada pero no vas a morir sin nada, porque vas a ganar las batallas, la guerra te puede matar pero vivir sin victoria y gloria es morir todos los dĂas. Antes de marchar en silencio recuerda amigo, antes de partir en silencio recuerda amigo, antes de partir en silencio recuerda amigo que eres saharaui.
INDICE DE POEMAS 1- EL ROSTRO DE LAS HUELLAS - Nafi Brahim Salem - pp.9 2- SE ME OLVIDÓ - Por Zahra Hasnaui - pp. 13 3- EL MORO CIEGO - Por María Jesús Alvarado - pp. 14 4- CORAZÓN VELERO - Por Maribel Lacave - pp. 15 5- CORAZÓN VELERO (II) - Por Maribel Lacave - pp. 16 6- AMISTAD - Por Larosi Haidar pp. - 17 7- CINCO LETRAS DE UN PINCEL - Por Limam Boisha - pp. 19 8- DUENDE AL SOL - Por Limam Boisha - pp.21 9- MUNDO ROTO - Por Macaco - pp. 23 10- LUALI - Por Fátima Galia - pp. 26 11- BELLEZA - Por Saleh Abdalahi – pp. 27 12- EL TIEMPO Y LA ESPERA - Por Esperanza Jaén – pp.28 13- DESPEJADA LA OSCURIDAD - Bahia Mahmud Awah – pp. 29 14- MUJER SAHARAUI - Por Adela Vila – pp.30 15- EN LA CIUDAD DEL VIENTO - Por Fátima Galia – pp. 31 16- PARA QUE TODOS LOS SEPAN - Por Salka Embarek – pp. 34 17- AÚN NO DUERMO - Por Chejdan Mahmud – pp. 36 18- LOS HIJOS DE LAS NUBES... - Por Augusto Mainar – pp. 37 19- REBELDE CAMELLO SAHARAUI - Por Siboney del Rey – pp. 38 20- DEL PROFUNDO SOL - Por Susana Riviere – pp. 40 21- ¡EL CIELO SERÁ DE ALÁ, PERO ESTA TIERRA ES NUESTRA! Por Saleh Brahim – pp. 41 22- LOS NIÑOS – Por Saleh Brahim – pp. 42 23 - LA JUVENTUD - Por Saleh Brahim – pp. 43 24- LAS MADRES - Por Saleh Brahim – pp. 44 25- LOS ANCIANOS - Por Saleh Brahim – pp.45 26- LOS HOMBRES - Por Saleh Brahim - pp. 46 27- SI TE FUERAS - Por Chejdan Mahmud – pp. 47 28- SAHARA - Por Salka Hamma Amideh, poeta saharaui – pp. 48 29- POEMAS - Por Sara Vanegas – pp. 50 30- EL NOMBRE ES SAHARAUI OCHENTA Por Raduán Zaruali (Saharaui Ochenta) – pp. 53 31- LAMENTO DEL DESIERTO - Miguel Mosquera Paans – pp.55 32- SOY EL SAHARA - Por Salka Embarek – pp. 56 33- INVASIÓN - Por Nerea Gay – pp. 58
34- AMGALA - Por Ebnu – pp. 59 35- LA MÚSICA DEL SIROCO - Por Ali Salem Iselmu – pp. 62 36- NOVIEMBRE - Por Ebnu – pp. 63 37- NO ES FÁCIL AMAR ASÍ - Por Salka Embarek – pp. 65 38- MI ANIVERSARIO DE VIDA CON LA RASD Por Siboney del Rey – pp. 67 39- ¿LAS ROSAS FLORECEN EN EL DESIERTO? Afaf Malainin Talebuya, poeta saharaui – pp. 68 40- AYYY COLOMINA - Por Raduán Zaruali (Saharaui Ochenta) – pp. 69 41- MI MADRE LOCA - Por Chejdan Mahmud – pp. 71 42- DIOSES - Por Xabier Susperregi – pp. 72 43- SED - Por Saleh Abdalahi – pp. 74 44- LA CÁRCEL DEL CIELO - Afaf Malainin Talebuya – pp. 75 45- OLVIDO - Por Salka Embarek – pp. 77 46- PERDÓN - Por Chejdan Mahmud – pp. 79 47- QUÉ DE LÁGRIMAS ESTÁ EL PUEBLO SAHARAUI Àngels Moseguí – pp. 80 48- NUESTRA ERA - Por Ebnu – pp. 81 49- EL TIEMPO PARTIDO - Por Saleh Abdalahi – pp. 82 50- ACUARELA - Por Chejdan Mahmud – pp. 83 51- LA NOVIA DEL MAR - Por Bahia Mahmud Awah - pp. 84 52- VILLA CISNEROS - Por María Jesús Alvarado – pp. 85 53- DESDE QUE NOS SEPARAMOS - Por Darak Mohamed – pp. 86 54- DIDÁCTICA DE LA GUERRA - Por Nerea Gay – pp. 89 55- EL BUSCADOR DE CAMELLOS - Por Limam Boisha – pp. 90 56- BUBISHER - Por Bahia Mahmud Awah – pp. 91 57- DESPEDIDA - Por María Jesús Alvarado – pp. 93 58- NI JUSTICIA NI OLVIDO. LO SIENTO, SAN VALENTINO Por Raduán Zaruali (Saharaui Ochenta) – pp. 94 59- MENSAJE EN UNA BOTELLA - Por Ebnu – pp. 96 60- SUEÑOS - Por Limam Boisha – pp. 97 61- NOCHES DESNUDAS - Por Darak Mohamed – pp.98 62- EXILIO - Por María Jesús Alvarado – pp. 99 63- RECONCILIACIÓN - Por Ali Salem Iselmu – pp. 100 64- ME DICE EL SOL CADA MAÑANA - Por Luali Leshan – pp. 101 65- GRITOS POR EL SAHARA - Por Darak Mohamed – pp. 102 66- VIEJA FOTO - Por María Jesús Alvarado – pp. 104
67- LOS LIBROS - Por Bahia Mahmud Awah – pp. 106 68- LIBERTAD AMORDAZADA - Por Esperanza Jaén – pp. 107 69TABLERO DE ARENA - Por Limam Boisha – pp. 108 70- LA LARGA NOCHE - Por Darak Mohamed – pp. 109 71- OPRESIÓN DEL SAHARA - Por Oswaldo Roses – pp. 111 72- EL PRÍNCIPE - Por Ebnu – pp. 112 73- VOLVER – Por Salka Hamma Amideh – pp. 113 74- CARTA DESDE AQUÍ- Por Chejdan Mahmud – pp. 114 75- Y ADEMÁS ES IMPOSIBLE - Por Nerea Gay – pp. 115 76- ALGUIEN - Por Limam Boisha – pp. 116 77- TRISTEZA - Por Xabier Susperregi – pp. 118 78- LA VIDA SIN TI, PAISANA Por Raduán Zaruali (Saharaui Ochenta) – pp. 120 79- SAHARA ¡QUÉ PENA! - Por Larosi Haidar – pp. 123 80- INTIFADA - Por Ali Salem Iselmu – pp. 125 81- MARIAM - Por Ebnu – pp. 126 82- PUEBLOS HERMANOS - Por Esperanza Jaén – pp. 127 83- UN GRANITO DE ARENA - Por Mohamidi Fakala – pp. 128 84- A ALI ULD MEYARA - Por Bahia Mahmud Awah – pp. 129 85- AMOR MÍO NO ME DEJES - Por Darak Mohamed – pp. 130 86- LA AUSENCIA -Por Mohamidi Fakala - pp. 132 87- A POR EL MAR ROBADO - Por Esperanza Jaén – pp. 133 88- AMINATU - Por Juan Muñoz Montero – pp. 134 89- ¿DÓNDE ESTUVE? - Por Feilah Mohamed-Ahmed – pp. 135 90- EL VERANO - Luali Leshan – pp. 137 91- TIEMPO DE INOCENCIA - Por Maribel Lacave – pp. 138 92- RESISTENCIA - Por Jaqueline González Cruz – pp. 140 93- GUERRA - Por Jaqueline González Cruz – pp. 141 94- EN EL DESIERTO - Por Jaqueline González Cruz – pp. 142 95- DESPUÉS DEL VIAJE - Por Jaqueline González Cruz – pp. 142 96- CIELO - Por María Jesús Alvarado – pp. 144 97- NIÑOS - Por Fátima Galia – pp. 145 98- TE HE ESCRITO UNOS VERSOS AKH HASSANI Josep Codonyer Soria (Ibn Al-waqt) – pp. 146 99- ÁFRICA - Por Limam Boisha – pp. 148 100- EL INFIERNO del SAHARA OCCIDENTAL Por Àngels Moseguí – pp. 149 101- ANTES DE MARCHAR - Por Darak Mohamed – pp. 150
ÍNDICE DE AUTORAS Y AUTORES Adela Vila – pp. 30 y 160 Afaf Malainin Talebuya – pp. 68, 75-76 y 161 Ali Salem Iselmu – pp. 62, 100, 125 y 162 Àngels Moseguí – pp. 80 y 149 Augusto Mainar - pp. 37 y 163 Bahia Mahmud Awah - pp. 36, 47, 71, 79, 83, 114 y 164 Chejdan Mahmud – 36, 47, 71, 79, 83, 114 y 165 Darak Mohamed – pp. 86-88, 98, 102-103, 109-110, 130-131-, 150-151 y 166 Esperanza Jaén – pp. 28, 107, 127, 133 y 167 Fátima Galia – pp. 26, 31-34, 145 y 168 Feilah Mohamed-Ahmed – pp. 135 Jaqueline González Cruz – pp. 140-143 Josep Codonyer Soria (Ibn Al-waqt) – pp. 146 Juan Muñoz Montero – pp. 134 Larosi Haidar – pp. 17-18, 123-124 y 169 Limam Boisha – pp. 19-20, 21-22, 90, 97, 108, 116-117, 148 y 170-172 Luali Leshan – pp. 101, 137 y 173 Macaco – pp. 23-25 María Jesús Alvarado – pp. 14, 85, 93 99, 104-105, 144 y 174 Maribel Lacave – pp. 15, 16, 138-139 y 175 Miguel Mosquera Paans – pp. 55 Mohamed Salem Abdelfatah, EBNU – pp. 59-61, 63-64, 81, 96, 112, 126 y 176 Mohamidi Fakala – pp. 128, 132 y 177 Nafi Brahim Salem – pp. 9 Nerea Gay – pp. 58, 89 y 115 Oswaldo Roses – pp. 111 Raduán Zaruali (Saharaui Ochenta) – pp. 53-54, 69-70, 94-95, 120-122 y 178 Saleh Abdalahi – pp. 27- 74, 82 y 179 Saleh Brahim – pp. 41-46 Salka Embarek – pp. 34-35, 56-57, 65-66, 77-78 y 180 Salka Hamma Amideh pp. 48-49, 113 y 171 Sara Vanegas – pp. 50-52 y 182 Siboney del Rey – pp. 38-39, 67 y 183 Susana Riviere – pp. 40 y 184 Xabier Susperregi – pp. 72-73 y 118-119 Zahra Hasnaui – pp. – 13 y 185
NUESTRAS AUTORAS Y AUTORES
ADELA VILA
Adela Vila, poetisa social, humanista, crítica, de ideología comprometida. Amante de la Paz, la concordia y el entendimiento. En definitiva, de cualquier valor derivado de todo ello. Ferviente defensora del amor entre los seres humanos y entre los pueblos.
Libros publicados: “Simples palabras” (ISBN 84-96104-93-1), “Vuelo de palabras” (ISBN 978-84-89268-42-5), “En tres palabras” (ISBN 978-8489268-68-5), “Naces de palabras” (ISBN 978-84-936980-0-3), “Cauce de palabras” (ISBN 978-84-936984-1-9), “Salto de palabras” (ISBN 978-84-938500-6-7).
AFAF MALAININ TALEBUYA
Es una joven saharaui de 20 años cumplidos en enero, estudiante de Enfermería en la Universidad del País Vasco/EHU, cuyo interés por la lectura comenzó a los ocho años y sus primeros poemas ya los crea con tan sólo diez años. Pasa gran parte de su vida en los campamentos de refugiados y el fin que persigue con sus creaciones literarias es el de dar a conocer la situación que vive su pueblo saharaui. Tiene un blog donde va colocando sus relatos y poemas: “Nevar en el desierto, esquiar en la arena” rasdexiste.blogspot.com/ Su obra va apareciendo también en: “Nuestras poetas del mundo” y próximamente también en y “Relatos del País de los saharauis, volumen III”
ALI SALEM ISELMU
Nació en 1970 en Dajla-Villa Cisneros, en el Sahara Occidental. Tras la invasión marroquí y mauritana huyó a los campamentos de refugiados del Tinduf, donde pasó su niñez. Posteriormente fue a Cuba, donde se licenció en Periodismo por la Universidad de Santiago.
A su vuelta a los campamentos se incorporó al departamento de español de la Radio Nacional Saharaui, donde trabajó varios años. Actualmente vive en España. Ha participado en las antologías de poesía saharaui contemporánea: “Añoranza” (2002), “Bubisher” (2003), “Aaiún...” (2006), “Um Draiga” ( 2007) , “31. Treinta y uno — Thirty one” (2007). Publicó su primer poemario en solitario: “La música del siroco” (2008). Ha participado posteriormente en otras antologías como: “Don Quijote, el azri de la Badia saharaui” (2009), “La fuente de Saguia” (2009), “Los colores de la espera” (2010), “Retratos saharauis” (2011) y “Primavera saharaui” (2012).
AUGUSTO MAINAR
Tan s贸lo quiere dedicar su colaboraci贸n a las personas que quiere y a todas las asociaciones de apoyo al Sahara. Que sea por la libertad del pueblo saharaui.
BAHIA MAMHUD AWAH
Nació en 1960 en Tiris. Exiliado en Argelia, marchó a Cuba donde estudio durante siete años, graduándose en Telecomunicaciones.
De vuelta a los campamentos de refugiados saharauis trabajó durante varios años en el departamento de emisiones en español en la Radio Nacional Saharaui. En 1998 vino a España y aquí ha realizado estudios de lingüística y traducción en los Servicios Sociales y Traducción e Interpretación Jurídico-Legal y Administrativa en la Universidad Autónoma y en la Universidad de Alcalá de Henares. Actualmente trabaja en un proyecto de investigación de la UAM, relacionado con el Sahara. Es miembro fundador del grupo de poetas y escritores saharauis, Generación de la Amistad. Con ellos ha participado en varias antologías de poesía saharaui en español. La Universidad de Alcalá de Henares publicó en 2007 su poemario, “Versos
refugiados”.
Ha publicado también:
“La maestra que me enseñó en una tabla de madera”, Editorial Sepha 2011 y recientemente: “El sueño de volver”. Editado por CantArabia.
CHEJDAN MAHMUD
Reconocido poeta saharaui. Ha participado en numerosas antologías poéticas y literarias.
“La primavera saharaui. Escritores saharauis con Gdeim Izik” (2012), “Los colores de la espera” (2010), “La fuente de Saguia” (2009), “Don Quijote, el azri de la badia saharaui” (2009), “Treinta y uno, Thirty one” (2007), “Um Draiga” (2007) o “Aaiun gritando lo que siente” (2006), “Bubisher” (2003). Parte de su obra puede consultarse en el blog: chejdan.blogspot.com
DARAK MOHAMED
Nació el 28 de enero de 1993 en Techla, Auserd. Estudió lenguas extranjeras en la Universidad de Wergla, en Argelia.
Joven poetisa saharaui capaz de expresar sus inquietudes en varios idiomas, con una gran sensibilizad también por preservar el patrimonio cultural y tradicional saharaui. Ha publicado varios poemas en la antología: “Mil y un poemas saharauis” y
“Nuestras poetas del mundo”.
ESPERANZA JAÉN
Nació en Lebrija, en la primavera del año 1957.
Su vocación desde muy pequeña ha sido y es la Educación. Es profesora desde hace muchos años en el mismo Instituto en el que antes fue alumna.
Vicepresidenta de la Plataforma por la Solidaridad de Lebrija y activista pro-saharaui.
El año 1994 surgió el flechazo con la causa, al acoger por primera vez a una niña saharaui. Ahora, ese flechazo se ha convertido en un enamoramiento en toda regla. Amante de la poesía, escribe poemas cuando se lo pide el alma. Su casa huele a puchero andaluz, sobaíto cántabro y cuscús saharaui. Es una pequeña ONU en la que se anuncia y se vive que otro mundo es posible. Ha publicado en la antología: “Nuestras poetas del mundo”.
FÁTIMA GALIA
Fátima Galia Mohamed Salem. Periodista, escritora y poetisa de origen saharaui afincada en Bizkaia, País Vasco, desde hace más de 20 años. Licenciada por la Universidad del País Vasco. Contadora de cuentos, ofrece recitales poéticos… Ha publicado:
Lágrimas de un Pueblo Herido (1998), editado por la Universidad del País Vasco. Pueblos de Sabios, Pueblos de Pocas Necesidades, La henna y sus maravillas (2001) y Nada es eterno (2009). En pocos días aparecerá su último trabajo libro, poemario contra las injusticias sociales titulado: La Dignidad Una Corona de Oro. Además colaboró en una publicación de Mujeres del Mundo en su libro de poemas: Palabras desde la distancia. También ha escrito, dirigido y publicado una obra de teatro titulada: Monólogos
con África.
LAROSI HAIDAR
Nació en El Aaiún en 1962. Estudió en el Colegio de La Paz en su ciudad natal. En 1992 se trasladó a España donde reside actualmente. Estudió en Granada, donde Traducción e Interpretación.
se
doctoró
en
Actualmente vive en la costa malagueña donde trabaja como profesor en la Universidad de Granada. Ha publicado varios artículos sobre la teoría de la traducción, es autor de varias traducciones de poesía árabe y de la tesis “Traducción de cuentos saharauis: una
introducción a la tradición oral del Sahara Occidental”.
Ha participado en la antología de poesía saharaui “Aaiun, gritando lo que se siente” (Universidad Autónoma de Madrid, 2006), dedicada a la Resistencia Pacífica Saharaui en las zonas ocupadas. También en: La primavera saharaui. Escritores
saharauis con Gdeim Izik
Es uno de los pilares que ha hecho posible la publicación del primer volumen de Cuentos tradicionales saharauis y de los siguientes volúmenes.
LIMAM BOISHA
Podía haber nacido en un año hermoso, con nombre poético, por ejemplo: "El Año de la lluvia de estrellas" o "El Año del parto de abejas".
Pero no, ese privilegio, sólo le correspondió a mis antepasados, padres, y dos de mis hermanos. A alguien se le ocurrió abortar la nomenclatura de los años, según nuestra mitología, la mitología saharaui. Por tanto, cuando despunté del vientre de mi madre, los años ya eran cifras, tristes cifras, y me estamparon: 1973. No sé el día, ni el mes. Según mi madre, fue en julio o agosto. El acontecimiento ocurrió accidentalmente en la ciudad mauritana de Atar. Digo accidentalmente, porque mi madre, estando enferma, fue del Sahara a esos famosos oasis para reponerse. Y allí nací, en una choza africana, bajo una enorme sombra protectora de palmeras, cargadas de apetitosos dátiles. Pero la serenidad de los oasis de Atar duró muy poco, al igual que la paz en la Badía (el desierto fértil). Nadie de la familia se percató, de que ella venía. De que se arrastró en silencio como una sonámbula semilla, y sin previo aviso irrumpió en nuestras vidas la guerra. No era una guerra extraña y lejana. Era la "nuestra", y había que sobrevivir de cualquier manera. La guerra contra Marruecos y Mauritania. Con ella sobrevino el difícil éxodo, y esa larga estación que aún perdura. Ya no tenía importancia, para mi familia, que el otoño fuera una estación ambigua o mediocre, o que la lluvia de ese otoño pudiera “mojar el cuerno de una gacela, y el otro ni siquiera tocarlo". Ya no tenía importancia que los vientos del sur fueran augurio de lluvia. Las nubes, el pasto, ya no tenían importancia. Ahora, sólo importaba huir, buscar refugio y sobrevivir. El largo exilio resultó para mí y los de mi generación, una sucesión de estaciones para estudiar y formarme.
Para mi padre y los demás hombres, el combate, las batallas, y para mi madre y las demás mujeres, levantar del milagro del adobe del exilio, escuelas y hospitales. Mi primera estación fue un internado, el "9 de junio". Volvíamos al finalizar el curso escolar a ver la familia. Con las enormes carencias de los primeros años, los veranos de la Hamada argelina eran de una crueldad insólita. Nuestras vacaciones, eran en estado de guerra. La amenaza de los bombardeos marroquíes, era siempre una noticia inminente. Con nueve años me marché con un grupo de alrededor de quinientos niños y niñas a Cuba para estudiar. Era el año 1982. Cuba fue una estación agradable y hermosa, llena de energía y bondad y pecados. Allí contemplé por vez primera, montañas pobladas de árboles, me adentré y conocí los bosques, las selvas vírgenes. Vislumbré una infinidad de vivos colores, y probé sabrosas frutas extrañas. Descubrí la exuberante belleza caribeña. El Caribe y el Sahara, esa extraña, dulce e inusual mezcla, es el fuego que corre ya por mis venas. Después de doce años, me licencié en Periodismo, en la Universidad de Oriente, en Santiago de Cuba. Y retorné al Sahara, a los Campamentos de Refugiados, en el sur de Argelia. El cambio fue brusco, impactante. Pero me impactó más la rutina diaria, conocer mi familia, y ese raro sentimiento de encontrarme forastero en mi propio hogar. Me costó meses recuperar los años de incomunicación, de ausencia. Como licenciado aporté mi granito de arena, mi ilusión al proyecto común. Trabajé varios años en la Radio Nacional Saharaui, hasta que decidí que podía ser más útil a mi familia y a mi pueblo estando en España. Vine a España gracias a la invitación de mi amigo y escritor Gonzalo Moure, porque en uno de sus viajes al Sahara le acompañé como traductor en lo que luego sería La Zancada del Deyar, un hermoso libro de viajes sobre la vida y costumbres de los nómadas saharauis. Ayudé a Gonzalo en la elaboración del glosario del Hasanía (la lengua de los saharauis) y otras cuestiones relacionadas con la cultura saharaui. Trece años llevo de nomadeo entre distintas ciudades españolas: Murcia, Valencia, Barcelona, Málaga. Trabajé en varios oficios: peón agrícola, camarero, vigilante de seguridad, teleoperador, encuestador. Lo que encontraba en el mercado de la precariedad. También trabajé como Mediador Intercultural en Bibliotecas en Totana (Murcia) y en Madrid. Actualmente resido en Madrid y de vez en cuando hago traducciones esporádicas del árabe al castellano.
He publicado un libro: Los versos de la madera (Editorial Puentepalo) y he participado en varias antologías de poesía saharaui contemporánea como Añoranza, Bubisher, Um Draiga, Aiún, gritando lo que se siente, y libros de relatos: Don Quijote, el Azri de la Badía saharaui y La Fuente de Saguia. También soy coautor de A los Cuatro Vientos con cuatro poetas españoles, en Los Libros de Ariadna. También, Ritos de Jaima (una mezcla de poesía y antropología) y un guión cinematográfico: Cuba, escrito conjuntamente con Gonzalo Moure y Ricardo Gómez. Publico ocasionalmente relatos breves, poemas y opiniones www.generaciondelaamistad.blogspot.com y en la revista Shukrán.
en
el
blog
He impartido charlas sobre la temática del Sahara Occidental y recitales poéticos en varias ciudades españolas y otras como Londres, Leeds, La Habana, Caracas, Cagliari (Cerdeña) y en Andorra. El Sahara está más presente que nunca en mi corazón. Entre mis ojos revolotea la anhelada esperanza, de que la próxima estación sea, el mar de nuestra auténtica frontera.
LUALI LESHAN
Nació a finales de 1971 en Aalb Ergad (Las dunas del sueño), en la región de Tiris. Su primera infancia está marcada por el estallido del conflicto del Sahara y el exilio. Junto a su familia llegó en 1975 a los campamentos de refugiados de Tinduf. Continuó su formación en Cuba por imperativos del exilio. Después de 15 años de estancia continuada en Cuba, en 1997 se licenció en Letras. De vuelta a los campamentos trabajó como periodista en las emisiones en castellano de la Radio Nacional Saharaui durante varios años, antes de emigrar a España. Ha participado en las antologías de poesía saharaui contemporánea “Añoranza” 2002), “Bubisher” (2003) “Aaiún, gritando lo que se siente” (2006), “Um Draiga” (2007) y “31. Treinta y uno — Thirty one” (2007) y “Los colores de la espera” (2010).
MARÍA JESÚS ALVARADO
Nacida en Canarias, pasó su infancia y adolescencia en el Sahara, lugar al que ha dedicado gran parte de su obra. Es psicóloga clínica de profesión y escritora de vocación, además de transitar por el cine y el teatro.
Ha publicado los libros:
Suerte Mulana, Extraña estancia, Geografía accidental, Al sur de Zagora, Isla Truk y Sorimba que se encuentra en plenas presentaciones, además de participar en numerosas publicaciones colectivas. En breve comenzará presentaciones de su último poemario titulado Grietas.
también
con
las
Premio a la Mejor Aportación Historiográfica en Memorimage-07 por el documental:
La puerta del Sahara.
MARIBEL LACAVE
Poeta, narradora y ensayista, nació en las Islas Canarias en 1951 y pasó gran parte de su infancia en el desierto del Sahara.
De niña publica ya poemas en la prensa de las islas y en revistas literarias como: Azor, Poesía Toda o Caracola. Más tarde colaboró habitualmente en: Sansofé y El Puntal.
Gran parte de su obra se recoge en grabaciones discográficas y antologías tanto de poesía como de narrativa. Muchos de sus poemas han sido musicalizados por cantautores españoles, latinoamericanos y africanos, en discos como: Señas de identidad de Nancy San Martín o Pasiones de Mary Carmen Mulet. Graduada Social, con estudios de Derecho. Luchadora incansable desde las filas del Frente Polisario por la independencia del Sahara Occidental (a cuyo pueblo está destinada gran parte de su obra). Ha participado en numerosos Congresos, Ferias del Libro y Eventos Literarios recibiendo numerosos reconocimientos y premios literarios. Desde 1998 reside en el sur de Chile, donde ha impartido diversos talleres literarios y desde donde sigue colaborando con diversas publicaciones tanto latinoamericanas, saharauis como españolas. Miembro de la Agrupación Canaria de Escritores, Presidenta de la Agrupación Cultural “El Rodezno de Curaco de Vélez, Directora de la Agrupación Chilota de Escritores (ACHE), miembro del Comité Editorial de la revista “Cuaderna Vía” y Coordinadora de los Encuentros de Poetisas de Chiloé. Entre sus publicaciones destacan: Con toda la mar en los bolsillos (1984), Donde sólo media luna (1988), Sin fronteras (2001), Dos para un tango (2002), en colaboración con Constantino Contreras. Como florece el Dafne en el invierno (2004), Cuentos de la abuela Majareta (2006), Los canarios del Lago Budi (2007), Los mundos de Gali (2008), Isla Truk (2011), junto a María Alvarado. Mestizada-Susurros para Paula (2013), Insulares al alimón, actualmente en imprenta.
MOHAMED SALEM ABDELFATAH, EBNU
Nació en Amgala, Sahara Occidental, en 1968.
Es licenciado en Lengua española y Literatura por el Instituto Superior Pedagógico de Pinar del Río, Cuba.
Actualmente vive en España. Ha participado en las antologías de poesía saharaui contemporánea: “Añoranza” (2002), “Bubisher” (2003), “Aaiun, gritando lo que se siente” (2006), “Um Draiga” (2007) y “Treinta y uno -31- thirty one” (2007), “Don Quijote: el azri de la badia saharaui” (2009), “La fuente de Saguia” (2009) “Los colores de la espera” (2010), “La primavera saharaui. Escritores saharauis con Gdeim Izik” (2012). En solitario ha publicado los poemarios: “Voz de fuego” (2003) y “Nómada en el exilio” 2008. También ha publicado: “La joven del pozo” (2009).
MOHAMIDI FAKALA
Escritor y periodista saharaui.
Ha participado en varias antologĂas de literatura saharaui como: Don Quijote, el azri de la badia saharaui, en 2009, La fuente de Saguia, en 2009, La primavera
saharaui. Escritores saharauis con Gdeim Izik‌
Muchos de sus valiosos escritos pueden consultarse libremente en su blog: Camino
de El Aaiun.
RADUÁN ZARUALI (SAHARUI OCHENTA)
Raduán Zaruali (conocido por Saharaui Ochenta). Nació en la famosa Colomina roja en El Aaiún el año 1980. Licenciado en la filología española de la facultad de Dhar El Mehraz en Fez el año 2010. Graduado del instituto de hostelería y turismo de El Aaiún el año 2006.
Cuenta con diplomas de DELE del Instituto Cervantes de Madrid ( inicial y intermedio) y diplomas en la didáctica de ELE, de la ONG española DCPM el año 2007 y la universidad de Granada el verano de 2010. Estudió la filología árabe en la Universidad de Agadir los años 2000-2002. Hizo una formación de didáctica de ELE de un año en el centro pedagógico regional de Tánger en el norte de Marruecos 2010. Lleva dos años trabajando en un instituto público en la ciudad de Dajla como profesor de ELE. Habla hasanía, árabe, inglés, español y un poco del catalán. Obtuvo el bachillerato en las literaturas modernas en el liceo Mohamed V EL Año 2000.
SALEH ABDALAHI
Nací en 1971 en el Aaiún. Aunque mi infancia fue interrumpida por la invasión marroquí al Sahara Occidental en 1975.
Tan sólo con cuatro años fui obligado junto con mi familia y miles de saharauis a exiliarme, donde nos instalamos en campamentos de refugiados en la Hamada de Tindouf, en territorio argelino. Donde aprendí a leer y escribir en los primeros internados que se construyeron en los campamentos. En 1982 y gracias al gobierno cubano, fui a Cuba, donde terminé mis estudios. En 1995 volví a los campamentos con la licenciatura en dibujo técnico, trabajé como profesor en un centro de formación profesional durante ocho años. En 2004 vine a España, donde en julio del 2005 creamos la Generación de la Amistad, grupo de poetas saharauis que escriben en español. A partir de ahí he participado en diferentes antologías poéticas como: Bubisher, Aaiún gritando lo que se siente, Treinta y uno, Umdraiga. Sin olvidar la primera antología “Añoranzas”, que fue publicada en 2002, cuando todavía estaba en los campamentos. Desde el 2006 vivó en Mallorca donde trabajo como mediador intercultural y donde también he escrito y participado en una obra de teatro: “Frit de Camell”. Además de la publicación de un libro como autor: La arena de tus huellas.
SALKA EMBAREK
De lo que más orgullosa está Salka es de haber nacido en el Aaiun, Sahara Occidental, y por desgracia haber vivido la terrible Marcha Verde. Siente que es una mezcla entre saharaui y española y esa fusión cultural le ha hecho amar tanto al pueblo que le vio nacer, como al pueblo que después la acogió.
Después se licenció en Filología Hispánica y más tarde en Periodismo. Luchadora infatigable por los derechos del pueblo saharaui, que queda de manifiesto en su contundente poesía. Pertenece a la Generación de la Amistad, junto a los que ha publicado algunos trabajos como:
La primavera saharaui. Escritores saharauis con Gdeim Izik.
Preside una importante Asociación Cultural Hispano-Saharaui. También ha publicado algunos poemas y artículos en revistas especializadas y poema suyos contribuyen a que las antologías: Mil y un poemas saharauis o Nuestras poetas de mundo, sean ya una realidad.
SALKA HAMMA AMIDEH
Joven poeta saharaui de veinte años. Nacida en los campamentos refugiados, lleva ya dos terceras partes de su vida en España. Su gran pasión y a lo que va a dedicarse, es a la Psicología.
Descubrió su fascinación por la poesía a los 12 años y mi primer poema fue para su abuelo que nunca conoció y que vive en los Territorios Ocupados. Tal vez algún día podamos conocer ese poema para su abuelo y otros muchos más que irá escribiendo.
SARA VANEGAS
Nació en Cuenca, Ecuador Domina el español, alemán y tiene buen conocimiento de inglés. Doctora en Filología Germánica, Profesora de Lengua y Cultura Alemanas, Gran Diploma Alemán (Munich, Alemania). Magíster en Docencia Universitaria, Especialista en Docencia Universitaria, Profesora de Segunda Enseñanza, Especializada en Lengua y Literatura, Licenciada en Humanidades Modernas (Cuenca, Ecuador). Profesora de Lengua y Literatura Española (Madrid, España).
Publicaciones, creación literaria: 90 Poemas. Casa de la Cultura Ecuatoriana, Cuenca, 1981. Luciérnaga y otros textos. (Poesía y relatos), Cuenca, Universidad de Cuenca, 1982. Entrelíneas. (Poesía), Quito, Universidad Central, 1987. Indicios. (Poesía), Cuenca, Casa de la Cultura Ecuatoriana, 1988 PoeMAR. (Poesía), Cuenca, Casa de la Cultura Ecuatoriana, 1994. Mención Especial, Rosario, 2000. Más allá del agua. (Poesía), Guayaquil, Manglar, 1998. Antología personal. (Poesía), Guayaquil, Casa de la Cultura Ecuatoriana, 2000. Premio Nacional de Poesía, "Jorge Carrera Andrade", año 2000. Al andar. Quito, Libresa, 2004. Versos Trashumantes, Cuenca, Universidad de Cuenca, Casa de la Cultura Ecuatoriana, 2004. Yo soy chica (novelita infantil), Cuenca, Municipalidad de Cuenca, 2005. Numerosos premios y distinciones: Universal Peace Ambassador in Universal Ambassador Peace Circle (Ginebra, 2006) Participación en la serie de videos documentales sobre escritores representativos de Ecuador. En la serie La belleza de sentir. (2010) Diploma de Excelencia, Asociación Prometeo de Poesía, Madrid, 2010. Participación en el programa “Mujeres creadoras: su obra, su vida” (disco 2), Premio Nacional de Poesía "Jorge Carrera Andrade", Quito, 2004 con: “Al andar”. Premio Hoja de Encina, Asociación Prometeo de Poesía, Madrid, 2001 Premio Nacional de Poesía "Jorge Carrera Andrade", Quito, 2000
SIBONEY DEL REY
Nació en Caracas, el 17 de enero de 1976. Poeta, trabajadora, luchadora social, ama de casa, madre, estudiante universitaria. Sus padres fueron de origen campesino. Es la mayor de cinco hermanas. Creció bajo el apego a la fe cristiana, el amor, el respeto a la familia, a la escuela y a la patria. Marcha a Caracas, a la edad de 15 años, y prepararse comenzando pronto a trabajar en una empresa privada, sufriendo de cerca las injusticias, las humillaciones, y la violación de sus derechos como trabajadora. A los 19 años de edad, viaja a La Habana, su hogar adoptivo, una familia de luchadores sociales y desde ahí, cultiva el verdadero trabajo poético, como lucha social. En el año 2001, fue fundadora del Banco de Desarrollo de la Mujer. Canta a la justicia social, a la paz, a la solidaridad con los pueblos del mundo, contra la injusticia y la guerra... cantos al amor, a la esperanza, y a la ternura. En los años 1999 al 2003, tuvo un radial de poesía: “El Rincón de Siboney. En la actualidad, son más de ochocientos [800] poemas, y doce [12] cuentos cortos, que forman parte de su trabajo artístico. Colabora con diversas organizaciones de derechos humanos, mujeres, culturales y sociales. Embajadora por Venezuela del Movimiento de Poetas del Mundo. Difunde sus obras en entrevistas televisivas, programas radiales, prensa impresa y digital [esta última, a nivel nacional e internacional]. En diciembre del año 2008, publica su primer libro de poesía "Besos al Viento", por la Cooperativa Editorial Giraluna. Ha presentado con éxito sus recitales, en infinidad de organismos del Estado como la Asamblea Nacional, Parlamento Latinoamericano, Parlamento Andino… y en Embajadas de las Repúblicas de: Argelia, Bolivia, Cuba, y República Árabe Saharaui Democrática. También ha compartido escenarios con infinidad de agrupaciones musicales, y cantores venezolanos . Ha sido condecorada con la orden “MUJER DE ORO” [Estado Miranda, 08/03/08], y ”HEROÍNA DE LA PATRIA”. Madre de dos niñas: Alba Inés y Ludmila Ayelén. Pacifista, luchadora, amante de la causas de los pueblos de África, Medio Oriente, Latinoamericano y Caribeño; es conocida como “La Embajadora venezolana de la poesía por la paz, solidaridad y unidad con los pueblos.
SUSANA RIVIERE
Mujer, madre, abuela… “Pinta sentimientos, con letras de principiante, siempre de principiante, la montaña de la vida, no se termina de escalar”. Cuenta con sesenta años, y mil recuerdos que afortunadamente, a veces, convierte en poemas. Ha participado recientemente en la antología:
“Nuestras poetas del mundo”.
ZHARA HASNAUI
Nació en el Aaiún, antigua capital del Sahara Occidental. Al terminar sus estudios de Filología Universidad Complutense, se trasladó campamentos de refugiados saharauis trabajó, entre otras cosas, en la Nacional.
en la a los donde Radio
En 2005, se constituyó la Generación de la Amistad, una nueva tribuna para la difusión de la causa y la cultura saharauis. Zahra ha colaborado en las antologías de poesía y relatos breves: Aaiún, gritando lo que se siente, Um Draiga, Treinta y Uno, el Quijote Saharaui, La Voz de Saguia, y Gdeim Izik, la primavera saharaui. La colaboración se extiende a las charlas y ponencias en territorio español, Europa y Estados Unidos. Actualmente vive y trabaja de profesora en España.
Todos los libros de la colección pueden leerse gratuitamente en el Blog de la Biblioteca de las Grandes Naciones.
1- CUENTOS TRADICIONALES SAHARAUIS
2- RELATOS DE PAÍS DE LOS SAHARAUIS
3- MIL Y UN POEMAS SAHARAUIS
4- ANTIGUOS CUENTOS DE テ:RICA
5- CUENTOS Y LEYENDAS DE ZUGARRAMURDI
6- CUENTOS DE ESCOCIA
7- XANA
8- TRASGU
9- HADAS DE IRLANDA
10- RELATOS DEL PAÍS DE LOS SAHARAUIS. LIBRO II
11- CUENTOS DE PALESTINA
12- Fテ。ULAS VASCAS
192
13- NUESTRAS POETAS DEL MUNDO
14- TRADICIONES NICARAGÜENSES
193
194