Ideas para decorar tu casa.
Yolanda Royo Serrano. Dise単adora de Interiores
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Los Elementos Básicos de la Decoración. 1. Cómo crear tu propio ambiente y diseñar tu hogar. .Cómo encontrar tu propio estilo. .Cómo personalizar tu espacio, cambio de gustos.
2. Cómo planificar el espacio, la distribución y el equipamiento. .Cuestión de orden. .Decidir la distribución. .Cómo diseñar tu plano. .Planificar habitaciones. .Previsión y revisión de las instalaciones. .Redistribuir el espacio. .Optimizar los metros.
3. Jugar con el color y las texturas, provocar efectos y sensaciones. .Encontrar la inspiración. .La rueda del color. .Cómo elegir tus colores, la gama. . Efectos visuales. . La textura. . Cómo hacer un muestrario, y qué colocar en él.
4. Definir el estilo acertando con el mobiliario. .Cómo encontrar tu estilo. .Cómo recrear un estilo. .Una mezcla ecléctica.
5. Vestir con telas, tejidos y tapicerías. .Tejidos de temporada. .El color, la textura, el estampado.
6. Potenciar la luminosidad y elegir la Iluminación para crear atmósferas sugerentes. .Ganar claridad. .Ventanas, pavimentos, paredes. .Recursos visuales. .El arte de iluminar.
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Los Elementos Básicos de la Decoración. Las claves para lograr que la casa desprenda una atmósfera única y acogedora depende de sutiles factores que pasan desapercibidos, elegir el estilo que mejor nos define, saber jugar con la luz, el color, o las telas, dominar los trucos que nos ayudan a ampliar visualmente el espacio. Tomate tu tiempo, pregúntate que es lo que quieres y cual es la mejor forma de conseguirlo, las prisas en estos casos nos hacen cometer algunos errores.
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Cómo crear tu propio ambiente y diseñar tu hogar.
La casa forma parte de la expresión de nuestra vida, antiguamente su funciones eran precarias, dar cobijo, alimento y descanso. Hoy en día la casa se ha transformado en hogar y por tanto ello requiere de una adaptación de las necesidades básicas a estéticas, visuales y de confort que convertirán el espacio anteriormente sobrio y simple en un hogar cálido y acogedor. Nuestro hogar es un espacio donde mostramos nuestros gustos, experiencias, vivencias y objetos, donde nos relajamos y descansamos, donde celebramos fiestas con los amigos y acontecimientos importantes con los familiares y juegos con los niños y donde también podemos trabajar ampliando las necesidades diferentes dentro del plan doméstico habitual.
Cómo encontrar tu propio estilo. Es muy importante que la casa se adapte a tus gustos, de este corte se puede seguir un estilo clásico, un estilo sencillo y practico, o un estilo marcado por una tendencia. Un buen comienzo sería dejarte inspirar por una fotografía del interior de una casa de alguna revista o libro. No se trataría de copiarla tal cual sino de analizar lo que en ella se ve, sus cuadros, los elementos que te atraen, el color de las paredes, el estilo y la disposición de los muebles. Tal vez los materiales utilizados así como el aspecto práctico que desprende.
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A veces un estilo determinado nos ayuda a disciplinarnos en una forma de pensamiento que nos lleva a alcanzar un equilibrio personal. Por ejemplo el estilo minimalista, requiere de un orden visual y conceptual que no todo el mundo puede llegar a mantener o por el contrario le ayuda a conseguir que este aspecto básico de líneas puras le libere cada vez más de bienes materiales u objetos innecesarios que iría almacenando sin más sentido que el si mismo o por el contrario elegir un estilo ecléctico donde cada objeto convive como significación de las diferentes épocas por las que recorrió la persona y por tanto le aportan un recuerdo, un sentido etc. Y por ultimo preguntarte si no estas siguiendo una moda, que con el tiempo te acabarás cansando. Una vez identificado el estilo o teniendo una idea más precisa de lo que has descubierto, piensa si podrías recrearlo.
Cómo personalizar tu espacio, cambio de gustos. Deberíamos saber elegir por nosotros mismos para reflejar esa identidad en un lugar, sabiendo combinar y mezclar todo para crear nuestro propio estilo. Las primeras preguntas que deberíamos hacernos son primero pensar en nuestro estilo de vida. Tal vez te vayas a independizar del hogar de tus padres, y al dejar la casa familiar y su espacio influenciado por ellos con sus gustos personales tengas que experimentar tus propios esquemas, en el nuevo espacio que vas a habitar o vayas a formar un hogar con tu pareja con lo cual tendrás que convivir con los gustos y compartir las necesidades del otro. Es una obviedad que con el tiempo los gustos suelen variar y el tiempo y las circunstancias, al igual que las modas, el emplazamiento de tu casa afectarán a tu modo de vida y a tu forma de decorar el espacio. Este es un factor que con que debemos contar siempre.
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Cómo planificar el espacio, la distribución y el equipamiento.
Cuestión de orden. Un proyecto bien ejecutado se sostiene sobre estas bases: el espacio, la luz y las necesidades de almacenaje. Es vital saber que uso le vamos a conferir a cada estancia, cuales van a ser nuestras necesidades, y que almacenaje seleccionamos para elegir el mobiliario más adecuado. Dado que en las viviendas actuales uno de los factores principales es la falta de espacio, es preciso contemplar bien las opciones de armarios empotrados, altillos, alacenas, muebles auxiliares, estos aumentaran la sensación de orden visual. Para disfrutar de una casa diáfana y organizada debemos de tener una visión global que nos permita tomar decisiones acertadas, por ejemplo, si deseamos aligerar visualmente los armarios superiores de la cocina, prevenir disponer de un aparador o de una alacena para tener un lugar donde guardar el menaje y los útiles de la despensa.
Decidir la distribución. Es necesario analizar la mejor distribución en función del uso que vayamos a darle. El comedor estaría mejor situado cerca de la cocina para no tener que recorrer gran distancia entre ambos con la comida y el menaje, el rincón de trabajo debería estar lo más próximo posible a una entrada de luz natural para aprovechar la claridad. Y así pieza por pieza analizando bien el asoleo y que estancias dejaríamos para un uso privado o cuales para un uso más público. Ideas para decorar tu casa. Yolanda Royo Serrano.
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Cómo diseñar tu plano. Lo mejor es coger papel, lápiz y metro para ir tomando notas y medidas sobre cada estancia, y anotar en ella todos los elementos estructurales importantes como los pilares, las columnas, las jacenas, las puertas, las ventanas, los radiadores, los enchufes, etc. Una vez tomado el plano, podemos ayudarnos recortando piezas de mobiliario a escala como los sofás y sillones, la masa y las sillas, librerías etc. si se trata del salón y distribuirlo por el papel a nuestro antojo hasta ver como nos quedaría el conjunto, y si las dimensiones y el mobiliario nos encajarían.
Planificar habitaciones. Para asegurar que el diseño interior de una habitación permita su función optima, primero tiene que volver a lo elemental. Es necesario plantearse si se desea dividir el espacio en varias zonas, dónde están las conexiones eléctricas, la iluminación y que hacer con ellas. Qué es lo que puedo mejorar o Cómo en techo, suelo, paredes y ventanas. Existe un procedimiento lógico para colocar los muebles en cada habitación. Se trata de pensar e imaginarte como vas a utilizarla al entrar en ella, imagina realizando la actividad.
Previsión y revisión de las instalaciones. Antes de iniciar un proyecto, es fundamental revisar el estado de las instalaciones eléctricas, de gas y de agua. Es conveniente elegir la ubicación de los enchufes y puntos de luz en cada habitación y si son necesarias practicar unas rozas nuevas que nos permiten tener la nueva disposición. La climatización debe planificarse sobre plano para ubicar radiadores o split. Estos sistemas a veces requieren de grandes obras, como colocación de falsos techos para instalaciones de aire acondicionado y levantar los pavimentos para la calefacción radiante.
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Redistribuir el espacio. Las últimas tendencias en interiorismo apuestan por ambientes diáfanos y amplios. Frente a pisos excesivamente compartimentados en pequeñas habitaciones. Con lo que tratamos de integrar en una estancia diferentes ambientes, como salón, el comedor y la cocina, o bien el dormitorio y el baño. A veces esto se consigue eliminando uno o varios tabiques, mereciendo en ocasiones analizar esta opción. Ejemplo: Una habitación pequeña anexa al dormitorio principal puede reconvertirse en un vestidor.
Optimizar los metros. Existen soluciones prácticas para ayudarnos a resolver problemas de espacio como por ejemplo sustituir una puerta abatible por una puerta corredera, para ganar espacio extra en la estancia. Se estima una ganancia de 1 m2 aproximadamente por puerta, pudiendo por ejemplo colocar una zona de rincón con office para una cocina, o integrar un armario empotrado en recibidor amplio.
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Jugar con el color y las texturas, provocar efectos y sensaciones.
Encontrar la inspiración. El color es una herramienta útil y efectista a la hora de decorar, pues es capaz de decorar y a la vez producir efectos ópticos que ayudan a potenciar la luminosidad de una estancia. Podemos transmitir sensaciones, como calidez, vitalidad, armonía o relajación. Podemos encontrar la inspiración en los diferentes estilos por ejemplo la combinación de rojo, rosa fucsia y amarillo azafrán es muy común en la india, donde el color es el protagonista. Para evocar la naturaleza, combinar con sabia inspiración, los tonos neutros, las maderas y los complementos en fibras naturales representan el espíritu de la naturaleza en calma, serena y apacible donde se alían para aprovechar al máximo la luz natural.
La rueda del color. Proveerse de un círculo cromático es lo ideal para visualizar como combinan las tonalidades de las diferentes gamas de colores a utilizar. Esta rueda dispone de infinidad de tonalidades que se ordenan forma armónica por colores, pasando por todas las variedades como en el arco iris.
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Cómo elegir tus colores, Cómo elegir la gama. Cuando ya tenemos analizado el espacio y planificada la distribución del mobiliario, es cuando podemos elegir la gama de color. . Debería decidirse en función de nuestros gustos personales y las sensaciones que queremos transmitir sin olvidarnos de coordinarlo a partir de las tonalidades del color del mobiliario, de los revestimientos y de las tapicerías. No es conveniente usar más de dos o tres colores base en una misma habitación. La sensación psicológica que transmite el color varía en las personas por eso es imprescindible escoger la gama que nos haga sentir más cómodos. Podemos hablar de tres esquemas de color según lo tonos que elegimos. El esquema tonal, el esquema armónico y el esquema de contraste. El esquema tonal, consiste en seleccionar de un mismo color diferentes tonalidades. Si queremos lograr ambientes serenos esta esl la opción. Por ejemplo: blanco, blanco roto y blanco almendra. El esquema armónico es cuando se combinan colores que están situados próximos en el círculo cromático, con ello conseguimos un ambiente acertado con atmósferas integradas y relajantes. Por ejemplo: azules y malvas, o marrones y tejas. El esquema de contraste, permite recrear un ambiente dinámico y estimulante como consecuencia de elegir tonos que contrastan como naranja y azul o rojo con verde. Existen dos grupos principales de color por la sensación que transmiten son de gama cálida o fría. La gama cálida son colores anaranjados, los amarillos, los tierra, mientras que los azules, grises y verdes son los considerados fríos. Decorar con blancos es una tendencia actual para ambientes minimalistas, es muy luminoso por lo que refleja la luz natural y amplia visualmente el espacio también se utilizan toda la paleta de blanco, rotos por alguna tonalidad que tienden al gris, marrón, azul o amarillo. Estos ambientes provocan también una sensación de calma y serenidad.
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Los tonos tierra como los ocres y tejas se utilizan para ambientes coloniales y provenzales. Resultan muy cálidos y alegres. Los tonos amarillos son muy luminosos y resultan útiles tanto para zonas con mucha luz por que la aumentan como para aquellas zonas más sombrías porque la iluminan. Los tonos azules son ideales para ambientes más relajantes por ejemplo dormitorios. Los tonos verdes son los más tranquilos de la paleta a pesar de ser poco usado, es un tono que combina suavemente y transmite mucho descanso.
Efectos visuales Los colores oscuros ayudan a reducir el peso óptico de un sofá de formas voluminosas, mientras que si se viste con telas de con tono claro se verá más grande. Los colores cálidos “acercan” visualmente, mientras que los colores fríos la “alejan” dando mayor profundidad visual. Los colores oscuros se pueden utilizar para disimular superficies irregulares o desequilibrios arquitectónicos. Por ejemplo un techo pintado de negro o azul brillante hará que parezca más alto. Los tonos claros hacen que las superficies avancen. Los tonos vivos consiguen un resultado impactante y espectacular. Pueden hacer variaciones si por ejemplo pintas una pared de marrón café y colocas una alfombra de un color marrón más claro en el suelo, puedes elegir la tapicería un tejido que contenga ambas tonalidades y contrarrestarlo con los muebles más oscuros. Y jugar con las tonalidades intermedias en los accesorios combinando materiales como el latón, oro, plata, estampados y texturas.
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La textura. La textura es importante, pues influirá en el acabado final. Tanto para paredes como para mezcla de materiales es importante saber mezclarlas pues dependen de ello que el acabado quede anodino, plano o recargado en exceso.
Cómo hacer un muestrario, y qué colocar en él. Reúne todas tus ideas en un esquema decorativo, pon los colores, las texturas, los dibujos, tejidos y muestras que te gusten. Este muestrario es una forma de ver agrupados todos los elementos decorativos que te gustan y que has ido recogiendo para poder mirarlos, tocarlos, combinarlos y mezclarlos hasta conseguir la combinación óptima. Puedes colocar en el todo lo que te llama la atención, un recorte de revista, trocitos de tejido, un color recogido en un trozo de papel. Este muestrario es muy útil porque con él puedes elegir a todos los sitios a los que vayas para elegir mobiliario, accesorios y comprobar las luces de día y de noche.
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4.
Definir
el
estilo
acertando
con
el
mobiliario.
El estilo debe estar acorde con los gustos y hábitos de los que viven en la casa, debería ser auténtico y por ello no dejarse influenciar por las modas pasajeras. Cómo encontrar tu estilo. Inspírate en el edificio donde vives, en las tendencias del pasado o del futuro. Una gama de colores, un estilo de mobiliario concreto, una película, influencias orientales, el estilo zen o el campo. Estas ideas deberían ser la inspiración en la que basarte a la hora de encontrar tu estilo si aún no te has decantado. Cómo recrear un estilo. Existen unos factores de sentido común que se han de considerar siempre antes de terminar de decantarnos por un estilo u otro y son sin duda la ubicación, el clima, el entorno y la arquitectura del edificio. Si es una casa de playa nos inspiran colores frescos, inspiración marinera por ejemplo blanco y azul, tejidos livianos, natural. Lonetas resistentes para los sofás, fibras naturales, muebles lacados en blanco y complementos inspirados en el mar. Una casa de campo también nos inspira sus suelos de barro, tarima de madera, vigas vistas, muebles antiguos recuperados artesanalmente y tejidos cálidos como chenilla y tartán.
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Si el estilo arquitectónico de una casa por su edificación puede tener techos altos, paredes con molduras, zócalos, azulejos o madera. Podemos restaurarlos y obtendremos un aire más clásico, con lo que podemos utilizar mobiliario clásico como un sofá tipo chérter, tapizados capitoné, piezas de anticuario, tejidos ricos como seda, terciopelo, brocado y damascos. Aunque existen personas que obvian todos los elementos y prefieren comenzar como si fuera un folio en blanco. Las casas de arquitectura actual, suelen tener grandes ventanales, pocas compartimentaciones con lo que nos inspirará un estilo más contemporáneo con piezas de diseño, tapicerías lisas, colores neutros, líneas rectas, materiales fríos como acero inoxidable, vidrio y maderas oscuras. En el ambiente actual deberemos elegir más el estilo por el que decantarnos por lo que el mestizaje es también una apuesta decorativa donde se integra lo antiguo con lo actual, arquitectura original con piezas de decoración actual o viceversa.
Una mezcla ecléctica. Escogidas para perdurar, existen piezas de mobiliario y complementos singulares que desafían el paso del tiempo. Rescatadas por el tiempo se mantienen de plena actualidad. A pesar de formar parte de otras épocas, experimentan un particular “regreso al futuro” para integrarse en ambientes urbanos, formando parte de un interiorismo intemporal, donde combinan con piezas más cercanas en el tiempo.
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Los tonos grises, azulados y neutros son, seguramente, los que mejor permiten esta conjugaci贸n de pasado y presente. Esta apuesta por la mezcla de estilos decorativos que provienen de diferentes 茅pocas y procedencias refleja mejor la personalidad de la casa. Poner un toque 茅tnico, con un mueble oriental o pieza realizada en madera tr贸pica, o utilizar mobiliario provenzal como alacenas o consolas para un piso urbano. Son opciones arriesgadas pero que si se saben hacer quedan casas con estilo muy propios.
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Vestir con telas, tejidos y tapicerías.
Las telas son capaces de transmitirnos muchas sensaciones, con sus texturas, tonalidades y estampados. Puedes transformarnos una atmósfera en muy agradable gracias a la calidez del tejido y alegría, serenidad o lujo por los estampados. Su color, textura y estampado nos acabarán de definir el estilo del ambiente que queramos conseguir, dándole un carácter actual, rústico, clásico o crear atmósferas cálidas con terciopelos, chenillas o crear un ambiente fresco con lino, algodón y seda. Una vez elegidos los tonos con los que se va a trabajar lo normal es comenzar a elegir el tejido de la pieza más grande visualmente. En el salón sería el sofá, en el dormitorio, la colcha y cabecero y cortinas para el resto de las instancias. Si comenzamos por ahí, coordinar el resto es mucho más sencillo. No obstante no olvidarnos de tener una visión global de toda la casa para no efectuar grandes cambios que puedan afectar al conjunto del hogar. Lo ideal sería establecer un hilo conductor en la elección del motivo de los estampados o en el colorido global. Por ello la importancia del muestrario.
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Tejidos de temporada. En los cambios estacionales se puede dar otro aire a la casa, para cumplir con las diferentes necesidades de la temporada. En verano queremos estar frescos, en invierno nos arropan las calidas mantas nos gusta el calor. Por esto recomendamos adecuar los tejidos en el hogar de forma que sea tambien una forma de redecorar, que supongan un cambio estetico en tu entorno para que te resulte beneficio. Utiliza cortinas con tejido reversible, del lado oscuro en invierno y del claro en verano, cambia los edredones y fundas de plumas del invierno, por sabanas de lino, nido de abeja o una mantita de algodón fino. Utiliza fundas de colores cálidos para el invierno y otroño y en verano elige tonos fresco y utiliza tejidos de algodón. Tambien podemos cambiar las fundas de los cojines, de ricos estampados a fundas lisas o de cuadros. Los plaid y mantitas de sofá de mohair o chenilla a lino o algodón. Con estos cambos en los complementos notaras una gran diferencia de una estación a otra El color, la textura, el estampado. Elegir lisos o estampados depende del gusto personal, evidentemente los estampados tienen mayor peso visual, por lo que se relegan a superficies menos voluminosas. Los motivos de estampado grande necesitan mayor dimensión para poder apreciar el dibujo. Si las estancias son demasiado pequeñas apostemos por los tejidos lisos y los colores suaves. También están las rayas o estampados pequeños que combinan perfectamente para piezas más pequeñas y no resulte el conjunto demasiado monótono. Por eso existen las texturas, para en estos casos combinarlas pues nos aportarán otros matices. Terciopelo con hilo, seda, tela con relieves marcados en espiga, etc.
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No obstante en el mercado ya nos favorecen los coordinados con sus cuatro o cinco motivos de rayas, flores y acabados. Es importante elegir la tela en función del uso que se le va a dar. Si vamos a tapizar no podemos elegir el mismo tejido que para un visillo o cortina. Es necesario mirar la composición y condiciones del tejido para decidirse. En las tapicerías se suele utilizar mezcla de fibra natural con fibra sintética, que son más resistentes a los roces y manchas. Las telas de pelo son más adecuadas para cojines y zonas pequeñas que para tapizar superficies grandes. Los tejidos de terciopelo puro añaden una nota de romanticismo en cualquier lugar que se coloque. La gasa es buena elección como cortina pues dejan pasar la luz. Los adornos y accesorios sirven para embellecer cojines y cortinas lisas. Las telas suaves con buena caída son más aptas para cortinas o persianas porque hacen delicados pliegues. Los estampados clásicos nunca pasan de moda. Las chenilla gruesa suele utilizarse para tapizar. La piel puede ser natural o sintética. Los tejidos de punto suelto sirven como mantas o plaid para colocar en respaldos de sofás o butacas. Existen dos tipos de fibra, naturales o artificiales y sintéticas. Entre las naturales se destacan las de origen vegetal como el algodón, que es muy utilizado en el hogar desde sus versiones más finas y ligeras como la muselina, el organdí y la batista hasta las más calidas como la chenilla el terciopelo o el jacquard. El algodón resistente, agradable al tacto y fresco. De origen animal está la lana como el cheviot, la franela o el tartán. Su cualidad es la calidez, es flexible y resistente. Se obtiene del tallo de la planta del lino, ofrece un tejido fresco muy natural y agradable. El inconveniente es que se arruga con facilidad. La seda es otro tejido de origen natural, se extrae del capullo de gusano. Fino y brillante es resistente y elástico. Se utiliza para tejidos como el brocado, el damasco, el moaré, el otoman, el satén aportando un toque de elegancia y sofisticación a los ambientes donde se utiliza. Tambien existen tejidos de pelo de cabra de angora o de pelo de cabra de cachemira.
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Las fibras artificiales y sintéticas ofrecen mayores prestaciones en cuanto a resistencia, manchas y arrugas. Están las poliamidas que provienen del petróleo, no encogen ni arrugan. Conocidas como el perlon, nylon, tactel. También existe otro derivado que es el poliéster que se mezcla con el algodón y se conoce como trevira, tergal. También se usan los acrílicos, fibra sintética que se mezcla a veces con lana o algodón. Es ligera y aislante térmica.
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6. Potenciar la luminosidad y elegir la Iluminación para crear atmósferas sugerentes.
Decoremos la casa con el botín de la naturaleza, con un buen tratamiento de la luz, con la naturalidad como premisa a la hora de crear esa atmósfera que trasmita la elegancia inmediata del espacio sincero, vivido y confortable.
Ganar claridad. En la antigüedad, los pesados y túpidos cortinajes protegían los rayos del sol en las estancias. En la actualidad lo ideal es tener una buena orientación y grandes ventanales que nos inunden de luz natural una estancia. La orientación ideal es la sureste. La luz solar transmite mucha energía y ademas amplia los espacios visualmente. Cuando la realidad es que no tenemos la luz natural que nos gustaría podemos aprender a potenciar la claridad con el color. El blanco es un color que refleja la luz. Tonos como los amarillos, arena y beige aparte de darle claridad le aportarán algo de calidez a la estancia. La distribución de las habitaciones debería ser con mayor asoleo para la zona de día y la zona de noche menor.
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Ventanas, pavimentos, paredes. Las ventanas son vitales para alcanzar el objetivo de mayor luz, por eso podemos decantarnos por unos visillos ligeros que tamizen la luz, como el lino, la organza. Los pavimentos tambien juegan un papel importante en la ganancia de luz natural, las maderas claras como haya, abedul o arce. Los suelos de mármol y cerámicos en tonalidades claras y acabado pulido hacen reflejar la luz por la superficie brillante. Cuando hay mucha ausencia de luz se pueden estudiar abrir huecos en los tabiques para comunicar la luz de una estancia a otra, como un pasa platos en la cocina o sustituir por un tabique de pavés o un panel de cristal.
Recursos visuales. En la elección de materiales como el acero, el vidrio y la laca que reflejan la luz. Tambien con la elección de piezas como mesa y sillas de formas ligeras y depuradas que dan un aire libiano. Con la utilización de espejos que multiplicar la luz a la vez que duplican el espacio con sus falsas perspectivas. Reforzar estos recursos con la elección de mobiliario bajo, comunicación visual entre las diferentes zonas como por ejemplo colocar un puf en vez de una butaca.
El arte de iluminar. Una buena iluminación es aquella que se adapta a las diferentes horarios, funciones y actividades que necesita cada una de las estancias. No necesitamos la misma luz en el salón cuando se cena que cuando se ve la televisión o cuando se esta en una tertulia. Cada ambiente requiere su ilumación. La mayoria de las casas está iluminada de forma plana y uniforme. Un unico punto de luz para una sola habitación es un error generalizado. Como el clasico plafón en el techo del dormitorio.
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Tambien evitamos asi un exceso de claridad concentrada en un solo punto. Para decorar iluminando es fundamental repartir los puntos de luz y situarlos en diferentes lugares de la estancia, si ademas elegimos menor intensidad de menor potencia, la luz que se proyecte será mucho más agradable. En el salón es necesaria una luz genera rica que envuelva la estancia de forma general mediante unos focos dirigidos hacia la pared o hacia el techo, luego disponer varios puntos de luz ambiental para lámparas de sobremesa a los lados del sofá. Son muy útiles los programadores de luz, que graduan la intesidad y permiten ajustarla. En el comedor lo ideal es poner una lámpara de techo que proporcione luz acogedora y cálida. La altura es importante, no puede estar muy alta porque deslumbraría. Lo normal es situarla a unos 80 cm sobre la mesa. Si la mesa es muy alargada deberíamos elegir un aparato que aunque solo tuviera un punto de luz pudiera instalarse con dos focos de luz independiente. En las zonas de paso, podemos usar apliques de pared, o focos en el techo que alumbre la pared.En el dormitorio principal debemos usar luz en las mesitas de noche, tanto en lámpara como en aplique de pared y desplazar un punto de iluminación general para colgar una lámpara o un poner una de pie. El resto de dormitorios pueden iluminarse de forma general no olvidando colocar lamparas en mesitas y sobremesa para la zona de estudio. En cocina y baños pueden usarse la fluorescencia en focos empotrados e incandescencia en lámparas decorativas para el office o incluso el tocador del lavabo. La iluminación de realce se utiliza para enfocar directamente algun cuadro, escultura, librería o elementos decorativo que queramos destacar. Lo ideal es combinar la luz cálida de las bombillas de tunsteno con la luz blanca de los halógenos. Utiliza la luz de forma indirecta bañando paredes o retroilumina detrás de una pared o mueble.
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