Conexión JA - 2T 2012

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Editorial

DVM S

iempre es complicado triunfar en un país extranjero. Y lo es aún más cuando existe una competencia o un examen de por medio.

El éxito y el protector cuidado de Dios habían alcanzado a Daniel y a sus tres amigos. Es movilizador leer el libro de Daniel. Sus doce capítulos rebalsan de emocionantes relatos, sueños proféticos, leones hambrientos, hornos de fuego y ratificaciones concretas de las bendiciones de Dios para aquellos que eligen ser fieles a cualquier costo.

En medio de una sociedad complicada e idólatra, ellos resolvieron seguir sus convicciones a cualquier precio. Sin duda, eran DVM. En el ámbito espiritual, se negaron a adorar a otro Dios que no fuera su Dios; y continuaron con sus prácticas religiosas, como la oración (Dan. 3:17, 18; 6:10-13). En el área física, se negaron a ingerir la comida del rey (Dan. 1:8) y se sometieron a una evaluación de salud, que superaron con todo éxito (Dan. 1:11-15). Y, en el campo intelectual, se destacaron por sobre todos los demás integrantes del plantel real (Dan. 1:19).

La sociedad de hoy es una gran Babilonia, llena de confusión y de relativismo. Abundan los encantadores y los farsantes. El error se mezcla trágicamente con la verdad. El raquitismo ético y moral es alarmante. Frecuentemente nos en-

El problema está en la base; la solución, también.

contramos “en el palacio de Nabucodonosor”, y debemos tomar decisiones difíciles.

En este número de Conexión JA, te contamos historias de jóvenes cristianos que se destacan en donde les toca desempeñarse. Además, contamos con varias novedades que ya irás descubriendo.

Como Jóvenes Adventistas, debemos ser DVM. Con tentaciones, pero sin vicios. Conectados con el mundo, pero sin ser del mundo. Absorbidos por nuestros trabajos diarios pero comprometidos con nuestra misión eterna. Esto traerá beneficios a nuestra vida y a nuestra iglesia. En cada cosa que realicemos, seamos DVM. Busquemos la excelencia. Busquemos lo mejor. Aunque nuestra obligación sea tender una cama, hornear un pan, preparar un examen o vender un producto.

“En todo asunto de sabiduría e inteligencia que el rey los consultó, los halló diez veces mejores que todos los magos y astrólogos que había en el reino” (Dan. 1:20, la cursiva no aparece en el original).

Seamos DVM: diez veces mejores cristianos, líderes, padres, hijos. Diez veces mejores estudiantes, profesionales, empleados, ciudadanos…

Vale la pena intentarlo.

Pablo Ale Director de Conexión JA, edición en español.

te parecida a la Torre Lamentablemente, hay mucha gen e una base sólida. Un de Pisa: gente “torcida”, que no tien personas es que nada pensamiento común para ese tipo de ad absoluta. Pero no es inmutable y que no existe la verd os para dar olvidar que los cimientos son hech ido podemos deb ón naci incli su por osa fam es , pie. en a Torre de Pisa, en Italia sustentación a la obra y mantenerla s en el terreno en el ento cimi sus de Dios, también e de part Ley de d la de ilida deb a la Ese es el principio “tor torre la de 56 metros, os. Refleja parte que fue construida. Con una altura conocida como los Diez Mandamient 20 de a cerc e crec que os, grad 5 de su manera de cida” llega a una inclinación de del carácter de Dios y el retrato patrón, la Ley debe milímetros por año. pensar. Como un molde que fija un para as harí Pisa? ¿Cómo s como algo que ¿Sería posible vivir en la Torre de ser colocada delante de las persona ? qué r ¿Po ble. posi es No ? sala vida debe ordenar tu cuarto o limpiar una no cambia y una base sobre la cual la una pras com o ilas Si tú alqu Porque el problema está en la base. ser construida. tu gusto: cambias el piso, con rdo acue Areli Barbosa casa, puedes reformarla de ide Sudamérica. hab tistas las de Adven n es orde Jóven de el Líder aun a cambias el color de las paredes, y hast r los cimientos de la casa, a taciones. Pero, no es posible modifica menos que la derrumbes.

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6 Llamados a destacarse

¿Por qué vivir en la mediocridad? ¿Por qué no tener éxito? ¿Por qué no trascender y obtener importantes logros?

12 Misión en los Balcanes 14 Un país marcado por el comunismo y 29 jóvenes dispuestos a cambiar la historia

Postmodernos (con “t” de Cristo)

Entrevista: John Baxter “Fumaba, me emborrachaba y tenía demonios en mi cabeza”

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Link

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144.000

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Mercado de trabajo

Sábado on line. ¿Qué estás haciendo en la red?

¿Quiénes son y qué papel desempeñan en el conflicto cósmico?

Un clic puede ayudarte a encontrar trabajo... o a perderlo.

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En la ruta de los pioneros

Foto: Guilherme Silva

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17 ¿Cómo hablar de Dios a aquellos que dudan?

La columna de Víctor Armenteros

Conexión JA viajó a los EE.UU. para mostrarte dónde nació nuestra iglesia.

29 Bien contado

Una historia de alto vuelo para entender lo que significa confiar en Dios.

30 Me pasó

Diana vivió un milagro divino.

En una sociedad secular que niega y cuestiona a Dios, podemos elaborar métodos y tener herramientas a fin de que todos conozcan al Creador Asociación Casa Editoria Sudamericana Conexión JA - Fascículo 21 Dirección: Pablo Ale (ACES) Diseño del interior: Éfeso Granieri, Marcos S. Santos (CPB) y Andrea Olmedo Nissen (ACES) Diseño de la tapa: Andrea Olmedo Nissen (ACES) Ilustraciones del interior y de la tapa: Shutterstock Libro de edición argentina IMPRESO EN LA ARGENTINA - Printed in Argentina Primera edición MMXII – 19,6M

Es propiedad. © ACES, 2011.

Queda hecho el depósito que marca la ley 11.723.

Se terminó de imprimir el 3 de febrero de 2012 en talleres propios (Av. San Martín 4555, B1604CDG Florida Oeste, Buenos Aires).

ISBN 978-987-567-248-2 (Obra completa) ISBN 978-987-567-902-3 (Fasc. 21)

Prohibida la reproducción total o parcial de esta publicación (texto, imágenes y diseño), su manipulación informática y transmisión ya sea electrónica, mecánica, por fotocopia u otros medios, sin permiso previo del editor.

Conexión JA / Dirigido por Pablo Ale - 1ª ed. - Florida : Asociación Casa Editora Sudamericana, 2012. v. 21, 31 p. ; 27 x 21cm.

ISBN 978-987-567-902-3 1. Iglesia Adventista. 2. Jóvenes. I. Ale, Pablo, dir.

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muro joven Envíanos un e-mail:

conexionja@aces.com.ar Escribí un artículo que quisiera poder publicar. ¿Cuándo y dónde lo debo enviar?

Gracias y bendiciones,

Romina Peña.

Respuesta de Conexión JA: Romina: Puedes enviarnos cuando quieras un artículo.

Escribe a la dirección de correo electrónico que aparece más arriba. Preferentemente, deben ser temas prácticos, devocionales o testimonios.

También, nos gustaría recibir noticias sobre actividades misioneras creativas de los jóvenes de tu iglesia.

Síguenos en Twitter:

@miconexionja

Esta es una nueva sección destinada para que ustedes, nuestros queridos lectores, se puedan expresar.

Aquí pondremos los correos que nos llegan, los mensajes que mandan al Facebook y al Twitter y los comentarios que hagan sobre artículos de la revista.

También publicaremos sus poesías, extractos de sus blogs y pequeñas historias que tengan y nos quieran contar.

Además, habrá un espacio para tu foto. Puede ser una foto “artística” que refleje el amor de Dios y su maravillosa creación o también una foto que refleje a los JA en acción.

Búscanos en Facebook https://www.facebook.com/ConexionJA Esto preguntamos en nuestro muro de Facebook: Aparte de la Biblia, ¿cuál es tu libro favorito de la iglesia y por qué?

“Mi libro favorito se llama El Deseado de todas las gentes, de Elena de White, porque retrata de una manera impresionante y profunda la vida de Cristo en este mundo.

Felipe Diemer de Lemos, periodista, Brasilia, Rep. del Brasil.

“Mi libro favorito se llama Crear amor, de Kay Kuzma, porque, realmente, uno de los problemas más grandes que hay en el mundo es no entender realmente el significado de esta palabra, que es el secreto de llevar una vida feliz con Jesús. Este libro puede ayudarnos a mejorar en nuestras relaciones interpersonales, para que, como cristianos, imitemos el carácter de nuestro gran Dios. ¡Léanlo! ¡Se los recomiendo!

Ivana Rojas Romero, Iglesia de Vista Alegre, Asunción, Rep. del Paraguay.

Gustavo Acevedo. ¡Hola! Me gustaría que la revista tenga secciones de guitarra, o sea, partituras de las canciones que cantamos, como “Soy de Jesús” o “Vaso de honra”. Además, me gustaría que haya espacio para recomendar proyectos, páginas webs y blogs que hayan creado nuestros JA. Hace mucho que no leo la revista, pero las pocas que tengo están buenísimas. ¡Sigan adelante con la obra de predicar a todo el mundo!

Pr. Santiago J. López Blasco, ciudad de Córdoba, Prov. de Córdoba, Rep. Argentina.

Qué buena iniciativa tener una página en Facebook de Conexión JA. Los invitamos a sumarse a las páginas de la Asociación Argentina Central (Iglesia Adventista- Asociación Argentina Central y JA Asociación Argentina Central) ¡Bendiciones!

Carolina Tierra, desde la ciudad de Riobamba, Rep. del Ecuador.

Mi resolución para este año es descubrir la verdadera misión para la cual Dios me creó, y cumplirla.

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Guiados por el Pr. Fabricio Kos, alumnos y docentes del Instituto Adventista de Rosario viajaron casi trescientos kilómetros con el fin de conocer y recorrer la Asociación Casa Editora Sudamericana. Luego de ver el proceso editorial que siguen los libros y las revistas, se sacaron una foto en la entrada de ACES y pidieron que sea publicada en esta sección.

Los JA de Monte Caseros, provincia de Corrientes, Rep. Argentina, enviaron su foto al Facebook de Conexión JA. Esto nos dicen: “Muchas gracias por compartir un espacio con nosotros en la revista. Dios los bendiga”.

Gesem Brighton Calli Monroy Iglesia Central del distrito Puno A, Misión del Lago Titicaca, Unión Peruana del Sur. “Los JA de Puno tenemos planeadas varias actividades; entre ellas, el apoyo al plan Misión Caleb, y la realización de charlas y capacitaciones. Además, visitamos a templos y congregaciones que están alejados de la ciudad y participaremos del proyecto ‘Vida por vidas’.

“Quisiera añadir que el Club de Líderes Arturo Carcagno Farfan tiene planes un poco más exigentes para este año y busca fortalecer el nivel de liderazgo en los JA. Este Club es metropolitano y congrega a jóvenes de cinco distritos. “¡Que nuestro ánimo no decaiga!”

Los amigos de Conexión JA comparten, en su perfil de Facebook, muchas fotos, avisos y noticias. Pero, también, breves y edificantes reflexiones.

Mateo 8

Hoy leí Mateo 8, y encontré a un Dios que: • Está siempre dispuesto a sanarnos de nuestras dolencias.

• Está lleno de autoridad, y con solo decir las palabras las cosas suceden... los milagros ocurren.

• Está lleno de compasión.

• Muchas veces, suple nuestras necesidades sin que nosotros se lo pidamos.

• Cargó con mis pecados.

• Cuando estuvo acá, no tenía una casa donde vivir...

• Quiere el primer lugar en mi vida... ¡Y tiene todo el derecho de pedírmelo!

• Es Señor de la naturaleza... Él está en el control, y esta le obedece sin “peros”.

• Los espíritus no pueden más que rendirse y someterse a su voz... Su poder los excede.

En resumen, es un Dios SÚPER PODEROSO y, a la vez, TAN PERSONAL que quiere caminar conmigo y sanarme del pecado y de las heridas que este dejó...

Este es Jesús, Emanuel (“Dios con nosotros”). No dejes que las cosas que te pasan digan lo contrario... ¡Él no cambia!

Marlene Muller Bulich, misionera en Tajikistán.

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POR

nota de tapa

PABLO ALE

Llamados a

destacarse El joven cristiano, lejos de adherirse a las cómodas posturas de la mediocridad, es un joven de éxito. ¿Por qué no trascender y obtener importantes logros?

T

enemos el caso de José. Apenas había pasado los 17 años cuando enfrentó la profundidad del pozo, el odio de sus hermanos y la vida de esclavitud en Egipto. No había que ser adivino profesional, ni nada por el estilo, para augurar que la vida de José sería un rotundo fracaso. Pero no. Aferrado a Dios y cumpliendo fielmente sus mandatos, luego de 13 años de luchas y de pruebas llegó hasta lo más encumbrado del poder político de sus días. A los treinta años, se convirtió en el vicepresidente de la potencia mundial de sus días.

“Y dijo Faraón a José: Pues que Dios te ha hecho saber todo esto, no hay entendido ni sabio como tú. Tú estarás sobre mi casa, y por tu palabra se gobernará todo mi pueblo; solamente en el trono seré yo mayor que tú. Dijo además Faraón a José: He aquí yo te he puesto sobre toda la tierra de Egipto. Entonces Faraón quitó su anillo de su mano, y lo puso en la mano de José, y lo hizo vestir de ropas de lino finísimo, y puso un collar de oro en su cuello; y lo hizo subir en su segundo carro, y pregonaron delante de él: ¡Doblad la rodilla!; y lo puso sobre toda la tierra de Egipto. Y dijo Faraón a José: Yo soy Faraón; y sin ti ninguno alzará su mano ni su pie en toda la tierra de Egipto” (Gén. 41:39-44).

Tenemos el caso de Daniel. Sin llegar siquiera a los 18 años, fue un exiliado en tierras babilónicas. El exilio fue un duro destino, para quien era un príncipe en Israel. Sus tres fieles amigos padecieron las mismas penurias. No había que ser muy inteligente para suponer que la vida de estos cuatro jóvenes estaba condenada a la miseria y el olvido. Pero no. Consagrados a una integridad total y a una lealtad indivisa a los mandatos de Dios, Daniel y sus amigos se destacaron ampliamente en la corte del rey. No solo fueron diez veces mejores (Dan. 1:20), sino también fueron excelentes funcionarios públicos y dieron un maravilloso ejemplo que, incluso, despertó envidias y resentimientos.

“Entonces los gobernadores y sátrapas buscaban ocasión para acusar a Daniel en lo relacionado al reino; mas no podían 6

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hallar ocasión alguna o falta, porque él era fiel, y ningún vicio ni falta fue hallado en él” (Dan. 6:4).

Tenemos más casos En la Biblia, vemos muchos ejemplos de jóvenes destacados, que sobresalieron por su arrojo, eficacia y gallardía. Fue Josías, que asumió el reinado de Judá a la edad de ocho años, quien realizó una gran reforma espiritual en el pueblo de Israel.

En 2 de Reyes capítulo 23, se cuenta cómo este pequeño niño tuvo la madurez suficiente para hacer lo que había que hacer.

“Y subió el rey a la casa de Jehová con todos los varones de Judá, y con todos los moradores de Jerusalén, con los sacerdotes y profetas y con todo el pueblo, desde el más chico hasta el más grande; y leyó, oyéndolo ellos, todas las palabras del libro del pacto que había sido hallado en la casa de Jehová. Y poniéndose el rey en pie junto a la columna, hizo pacto delante de Jehová, de que irían en pos de Jehová, y guardarían sus mandamientos, sus testimonios y sus estatutos, con todo el corazón y con toda el alma, y que cumplirían las palabras del pacto que estaban escritas en aquel libro. Y todo el pueblo confirmó el pacto” (2 Rey. 23:2, 3).

Lo que sigue, en el relato bíblico, muestra hasta dónde había descendido el nivel espiritual del pueblo de Dios. Lee 2 Reyes 23:4 al 24, y verás. Hubo que sacar del templo los utensilios hechos para Baal y Asera; hubo que sacar a sacerdotes paganos que invocaban a los signos del zodíaco; hubo que sacar del Templo imágenes de Asera y se eliminaron los lugares de prostitución. También, derribó altares paganos, quebró estatuas y barrió a los adivinos. Y, como si todo esto fuera poco, hizo que el pueblo volviera a celebrar la Pascua.

“No hubo otro rey antes de él, que se convirtiese a Jehová de todo su corazón, de toda su alma y de todas sus fuerzas, conforme a toda la ley de Moisés; ni después de él nació otro igual” (2 Rey. 23:5). ¿Y qué decir del joven misionero Timoteo, ayudante del gran apóstol Pablo?

No solo escribió dos epístolas dirigidas a él, sino también le dijo: “Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza”.

Los Jóvenes Adventistas (JA) estamos llamados a destacarnos, a ser luces en este mundo de tinieblas, y a ser ejemplos completos y cabales de lo que Dios puede hacer en la vida de alguien que entrega todo a su servicio.

Lee las historias de Amalia, Sergio y Leonardo. Verás que hoy Dios aún busca jóvenes, como en el pasado.

Amalia: destacada por el servicio Radio Programas del Perú (RPP) es una red de emisoras de la Rep. del Perú fundada el 7 de octubre de 1963. Y cada año entrega un galardón que es ampliamente reconocido por la sociedad: el Premio Integración, creado “para reconocer a peruanos que hacen grande al país”, según destaca la página web de RPP. Es un reconocimiento nacional, que tiene el objetivo de identificar y rescatar a personajes que, con su trabajo, transforman la

Amalia Suaña.

sociedad, mostrando proyectos que buscan promover valores a través de acciones ejemplares, y benefician a la población.

En 2011, este premio fue otorgado a Amalia Suaña, una joven egresada de la Universidad Peruana Unión, filial Juliaca. Amalia se destacó por el trabajo que realiza con los niños de entre tres y cinco años en su Jardín Infantil,

Amalia y la

a.

primera dam

ubicado en la Isla Tupiri de los Uros, Puno.

“Los últimos tres días antes de conocer el resultado, no pude dormir. Creíamos que nuestras oraciones nos ayudarían, y así fue”, comentó Amalia, quien fue una de las 12 finalistas y que superó, además, a otros 278 candidatos al mismo mérito obtenido.

Amalia, docente de profesión, presentó el proyecto denominado “Sumita Corazón” (“Bonito corazón”, en lengua aimara). Trabajó durante dos años con infantes en esta isla, quienes reciben una formación cristiana y de calidad, con el fin de ingresar al nivel primario eficientemente preparados.

Entre las actividades formativas, se destacan la enseñanza del quechua, del aymara, del español y del inglés. “Lo que me motivó a crear el Jardín fue que, mientras estudiaba, observé que los niños más pequeños no recibían la atención y la educación que ellos se merecen.

Entonces, sentí la necesidad de aplicar mis conocimientos en ellos, porque se encontraban solos, debido a que sus padres trabajaban durante el día. Y con el apoyo de mi familia construimos este jardín”, explicó Amalia.

En noviembre pasado, la destacada joven recibió el premio de manos de Na-

dine Heredia, primera dama del Perú.

“Es gente joven, que desde sus propias vivencias se integran; son historias de empeño. Sé de las necesidades que se pueden tener; lo que han logrado es una cosa formidable, que valoramos mucho.

En estos momentos se habla de inclusión social, y no queremos que sea una palabra abstracta”, dijo la esposa del presidente Ollanta Humala en su discurso; quien, además, agregó que Amalia, de 25 años, es la persona más joven en recibir el premio RPP Integración.

Por otra parte, Nadine Herrera destacó la obra que realiza Amalia: “Es un sacrificio enorme. Porque ella pudo haberse ido afuera, para cumplir con sus aspiraciones personales, pero regresó a sus raíces, apoyada por su familia, y lograr hacer este proyecto bonito; y va recogiendo a los niños.

Es un esfuerzo y una dedicación; y sobre to-

Amalia y sus alumnos. do, un compromiso con su tierra; un ejemplo de lucha, de mujer emprendedora”.

Amalia trabaja de manera gratuita, ya que los padres de los niños no le pagan.

“Me ofrecen trabajo en otros lugares, pero yo no puedo ir. No voy a dejar a estos niños. Dios provee para mis necesidades. Desde que estudiaba, siempre oraba porque sabía que Dios no me iba a dejar desamparada”.

Sergio: destacado por el estudio intelectual Tiene trece años, dos hermanos menores: Juan, de seis, y Samuel, de cuatro.

En sus tiempos libres hace ejercicios matemáticos y escucha música cristiana. Es

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adventista de nacimiento, y asiste desde pequeño al Colegio Adventista de Bagua, perteneciente a la Misión Peruana del Norte. Se llama Sergio Eduardo Sánchez Rodas y, en noviembre pasado, fue premiado en el Patio de Honor del Palacio de Gobierno, por el presidente de la República, Ollanta Humala, con la medalla de bronce del Concurso Nacional de Matemáticas

Sergio, con su medalla de bronce.

2011. En su discurso, el presidente sostuvo lo siguiente: “En el Perú, siempre nos hemos vanagloriado de ser un país exportador de materias primas, de minería... Pero, cuando los veo a ustedes, veo que son la mejor materia prima que tenemos”.

El Concurso Nacional de Matemáticas, dirigido a los estudiantes de educación secundaria, se desarrolló desde junio de 2011 en cuatro etapas, que comprendieron la localidad de origen de los colegios de todas las regiones. Luego de la primera prueba clasificaron a la siguiente etapa 160.000 estudiantes. A la tercera etapa, 2.472 escolares. Y a la gran final, llegaron solo 264 alumnos. Sergio ocupó el tercer

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Sergio y Wilson

lugar en la clasificación final.

Cabe destacar que, además, otro alumno Momento de la del Colegio Adventista premiación. de Bagua fue finalista del concurso. Se trata de William Rogelio Mirabal Velapatiño, de catorce años. Williams no es adventista, y 2011 fue el primer año que asiste a un colegio adventista. “Me gustan las matemáticas, tocar la guitarra y jugar al fútbol”, dice Williams.

“Pero estudiar en este colegio adventista es lo más lindo que me ha pasado en la vida, por todas las cosas que se enseñan 8

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aquí y por las amistades que tengo”.

Sergio y Williams coinciden en sus vocaciones. Cuando sean adultos, quieren ser ingenieros, aunque Sergio también expresa su deseo de ser pastor. Y también coinciden en el mensaje que quieren dejar a quienes lean esta nota. “¿De qué manera sienten que pudieron predicar ante las autoridades del gobierno?”, les preguntamos.

“Recalcando que Dios es nuestro gran Maestro y que, si confiamos en él, todo será posible”, sostiene Williams.

“En todas las entrevistas que me hicieron para la radio y la televisión, agradecí a Dios porque él es el autor del logro que obtuve en Lima”, declara Sergio.

Así es. Las escuelas adventistas forman alumnos vencedores.

Por eso, también debemos mencionar y extender la responsabilidad de este logro a los padres de los alumnos, al trabajo del profesor Lenin Jiménez y a José Urcia, director del Colegio Adventista de Bagua.

Leonardo: destacado por el estudio de la Biblia El sábado 3 de diciembre, en el auditorio de grados y títulos de la Universidad Peruana Unión, se llevó a cabo la final del IV concurso universitario “Bueno con la Biblia”. El estudiante de Matemáticas Leonardo Galleni de Oliveira, de Olimpia, San Pablo, Rep. del Brasil, obtuvo el primer lugar en el certamen.

Leonardo representó a la Unión Central Brasileña. Por su parte, el segundo lugar fue para Eduardo Andre V. Araujo, de la Unión Sur Brasileña; y el tercer puesto fue para Nicolas Oyarzún, de la Unión Chilena.

Gracias a un convenio especial con la Universidad de La Sierra, California, Estados Unidos, el ganador del concurso podrá particiLeonardo Galleni. par de un intercambio internacional, para realizar estudios de idioma inglés. También, se hizo un reconocimiento a cada concursante, a través de un certificado especial por su alto conocimiento de las Sagradas Escrituras.

“Hace varios años vengo estudiando para concursos, así que tengo varios apuntes, textos subrayados y preguntas archivadas que puedo usar”, explicó Leonardo. “En 2011, también participé elaborando un concurso para los jóvenes de la iglesia a la que asisto. Con seguridad, eso fue de gran ayuda”.

Curso de lectura

2012

Conquistadores

La medalla de oro de Katya Katya quería dejar de meterse en problemas, y dedicarse a una sola cosa: esquiar. Así que, se unió al club de esquí y comenzó a ganar carreras. Ahora sabía lo que quería en la vida: medallas de oro. Un día conoció la verdad a pesar de la educación atea que había recibido. Cuando descubrió que no podía guardar el sábado bíblico y continuar compitiendo, tuvo que tomar la decisión más difícil de su vida.

Guías mayores y Jóvenes Un llamado a destacarse Una obra verdaderamente novedosa. Se trata de una selección de consejos y escritos de Elena de White, escrita en forma de paráfrasis, para que los jóvenes puedan leer, en un lenguaje contemporáneo y más informal, los extraordinarios consejos del Espíritu de Profecía.

Pídelo al coordinador de Publicaciones de tu iglesia. www.aces.com.ar / ventas@aces.com.ar

El objetivo principal de este concurso, a través los años, es motivar, no solo a jóvenes y universitarios, sino también a toda la feligresía en el estudio de la Biblia. En este sentido, Leonardo Galleni de Oliveira dice que hay mucho por hacer. “Creo que, en primer lugar, los jóvenes solo leerán la Bi-

n la Biblia 2011.

Podio de Bueno co blia si existe en sus hogares una cultura que lo favorezca. Además, la iglesia tiene que seguir promoviendo concursos como este. Otra cosa importante es que la Biblia debe ser presentada a los jóvenes como un libro actual, que tiene las respuestas para sus preguntas”.

Por otra parte, Leonardo destaca los beneficios del estudio de la Biblia: “Cada vez que se lee la Biblia, se aprende una lección nueva. La parte de la Biblia que más me llamó la atención fue la de los evangelios, principalmente, las parábolas de Jesús.

Algunos textos que leemos rápidamente fueron más claros y atractivos para mí. La sabiduría allí encontrada es superior a la que se encuentra en cualquier otro libro”.

Elena: destacada por su rol profético Tenemos el caso de Elena. Esta joven estadunidenses, que no pudo completar su educación formal y que sufría de varios problemas físicos, fue llamada por Dios para desarrollar un ministerio profético trascendente. A los 17 años recibió su primera visión, y desde allí fue una fiel mensajera de Dios.

Cuando murió, en 1915, dejó un lega10

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do admirable: escribió más de cuarenta libros y casi cinco mil artículos. Es la escritora femenina más traducida en toda la historia de la literatura; y la autora estadounidense más traducida en cualquier género. Sus escritos abarcan temas tan variados como la religión, la educación, las relaciones sociales, la nutrición y la administración.

Fue ella quien remarcó el secreto del éxito de dos de los jóvenes destacados que mencionamos al comienzo: José y Daniel.

Esto dijo: “En la historia de José, Daniel y sus compañeros, vemos cómo la áurea cadena de la verdad puede ligar a la juventud al trono de Dios. No podían ser tentados a apartarse de su integridad. Valoraron el favor de Dios por encima del favor y la alabanza de los príncipes, y Dios los amó y los cobijó bajo su escudo.

“El Señor los honró señaladamente delante de los hombres por su fiel integridad, por su determinación a honrar a Dios por encima de todo poder humano. Fueron honrados por el Señor Jehová de los ejércitos, cuyo poder se extiende sobre todas las obras de sus manos, arriba en el cielo y abajo en la tierra. Estos jóvenes no se avergonzaban de desplegar su verdadero estandarte. Hasta en la corte del rey, en sus palabras, en sus hábitos, en sus prácticas, confesaron su fe en el Señor Dios del cielo. Rehusaron inclinarse ante cualquier mandato terrenal que detrajera el honor de Dios.

“Tenían fuerza del Cielo para confesar su lealtad a Dios. Deberíais estar preparados para seguir el ejemplo de estos nobles jóvenes. No os avergoncéis jamás de vuestra bandera; tomadla y desplegadla a la mirada de los hombres y los ángeles. No os dejéis dominar por una falsa modestia, una falsa prudencia que os sugiera un curso de acción contrario a este consejo. Por la elección de vuestras palabras y una conducta consecuente, por vuestra corrección, vuestra ferviente piedad, haced una profesión eficaz de vuestra fe, decididos a que Cristo ocupe el trono en el templo del alma, y poned vuestros talentos sin reservas a sus pies, para que sean utilizados en su servicio” (Elena de White, Mensajes para los jóvenes, pp. 24, 25).

Coro de alumnos adventista ganó un concurso navideño en Perú El jueves 8 de diciembre se llevó a cabo el concurso de coros navideños de las diferentes instituciones educativas de la ciudad de Bagua, organizado por la Escuela Superior de Formación Artística Pública de la localidad.

Gracias a Dios, el Colegio Adventista de Bagua obtuvo el primer lugar en el nivel secundario, y el tercer lugar en el nivel inicial.

Jóvenes Adventistas, premiados en Alemania En noviembre pasado, un grupo de jóvenes adventistas de Mainz, Rep. Federal de Alemania, recibió el premio “Esperanza Dorada”, por su trabajo con los niños y los adolescentes de zonas marginales. El proyecto ofrece ayuda para las tareas escolares y los servicios de tutoría. En cooperación con tres escuelas primarias y secundarias y un centro local de jóvenes, los voluntarios ofrecen ayuda para las tareas escolares y tareas de tutoría para niños sin apoyo parental o que enfrentan dificultades económicas.

Este premio es entregado por la red alemana de iglesias, asociaciones y comunidades cristianas, y reconoce “el compromiso y la testificación ejemplares de la caridad cristiana”.

“Este premio pertenece a todos los voluntarios que dieron de su tiempo libre para atender a las necesidades de otras personas”, expresó Jessica Dietrich, directora del proyecto llamado “Igualdad de Oportunidades”.

Colaboraron en este informe: Edgardo Muguerza Florián (director de Educación, Comunicación y Libertad Religiosa de la Unión Peruana del Sur); Carlos Corrales Ruiz (director de Educación y Comunicación de la Misión Peruana del Norte); y Wendel Lima (editor de Conexión JA en portugués).

Fotos: UPS- UPN- DSA y adventist.org.

Pablo Ale es redactor de la ACES y director de Conexión JA, edición en español.

ideas y misión

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los ojos de un visitante próximo a aterrizar en el Aeropuerto Internacional Madre Teresa, en Tirana, la capital del país, la geografía de Albania impresiona.

Situado estratégicamente en el estrecho de Otranto, que conecta el Mar Adriático con el Mar Jónico y con el Mediterráneo, el país, de tres millones de habitantes, está caracterizado por una fascinante cordillera. La montaña más alta se llama Korab, y mide 2.573 metros. Bastante menor, pero no menos estupenda, es Mount Moravia, uno de los sitios albaneses más explorados como atracción turística. Desde sus alturas es posible ver plenamente la ciudad de Korçë, uno de los municipios más importantes, con 60 mil habitantes.

Fieles de varias nacionalidades se reunieron en esta montaña el 1º de julio pasado, con el propósito de realizar un periodo de oraciones al ponerse el sol. En esa ocasión había albaneses, un pastor croata y un voluntario sueco, que trabajó en la construcción del primer templo adventista en Albania. Pero, la mayoría del grupo era del Brasil.

Una comitiva de 29 jóvenes voluntarios entró en la historia por participar de la primera excursión internacional de la Misión Caleb.

El pastor Oliveiros Ferreira, uno de los líderes de la expedición, fue el precursor del adventismo en el país, al construir el primer templo en 1994, después de una temporada misionera en Korçë.

Por su parte, los 29 voluntarios distribuyeron quince mil ejemplares del libro Señales de esperanza, traducido al albanés.

Ellos visitaron todas las casas del municipio en solo cinco días.

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Conoce la aventura misionera de 29 jóvenes de San Pablo en Albania, un país que antes era comunista.

Ellos participaron de la primera expedición internacional de Misión Caleb.

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El 60% de los alba

Los voluntarios hablaban inglés y algunas palabras en albanés.

Fotos: Cortesia dos entrevistados e Fotolia

POR

HERON SANTANA

A

El libro Señales de esperanza fue traducido al idioma local.

Distribuyeron quince mil libros misioneros en apenas cinco días.

Cortina de hierro Esta fue la primera evangelización adventista en masa realizada en Korçë, una ciudad importante en la formación de Henver Hoxha, el dictador que lideró la revolución cultural e ideológica. Ese movimiento instituyó oficialmente el ateísmo en Albania durante cuatro décadas, hasta la apertura política, verificada al final de los años 80.

En la Albania moderna, el 60% de la población profesa el islamismo. Por eso, los misioneros brasileros tuvieron que superar varios desafíos. Ellos distribuyeron el libro misionero e invitaron a los habitantes a asistir a las predicaciones en el hotel en el que el grupo estaba hospedado. Cada noche, cerca de ochenta albaneses acompañaron los mensajes bíblicos presentados por el pastor Oliveiros Jr.

En general, la recepción fue amistosa.

Los voluntarios hasta se aventuraron a intercambiar algunas palabras en albanés. Durante el segundo día de trabajo, los Calebs tuvieron la ayuda de jóvenes adventistas de Tirana. Los organizadores del proyecto prepararon una apostilla con frases esenciales para la distribución del libro y la invitación para las reuniones misioneras.

Un joven que asistió a los encuentros de adoración durante todas las noches aceptó recibir estudios bíblicos, junto con su novia. Él está decidido a bautizarse en la iglesia adventista del séptimo día.

Futuro Servet, un joven alcanzado por el mensaje adventista en Tirana, colaboró con los Calebs durante este proyecto de

evangelismo. Por causa de su fidelidad en guardar el sábado, perdió su empleo en el centro comercial en el que trabajaba. Pero, la habilidad misionera del joven llamó la atención de los pastores Oliveiros Ferreira y Leo España, presidente de la Iglesia Adventista del Séptimo Día en Albania. Ellos decidieron contratarlo como evangelista para el país el mismo día que fue despedido de su antiguo empleo. El hecho emocionó a todos los brasileros y señaló el futuro de la expansión adventista en Albania.

El misionero albanés está actuando y enviando informes regulares para los líderes brasileños. Para alcanzar a los jóvenes, creó un equipo de fútbol de siete jugadores, llamado Equipo Caleb. “Ellos tienen mucha necesidad de Dios en su medio. Todos están interesados en Dios y, en breve, con su ayuda, tendrán la oportunidad de estudiar la Biblia”, relató Servet. La primera reunión fue un gran éxito. El sábado 23 de julio, tres jugadores participaron en el encuentro de evangelismo y discutieron el tema de la lección de la Escuela Sabática.

Heron Santana es periodista de la Iglesia Adventista para la región central del Estado de San Pablo, en la ciudad de Campinas. Rep. del Brasil.

Puertas abiertas A los 17 años, el estudiante del curso técnico de Enfermería Alexandre Jiménez Jr. vivió una experiencia que redefinió su trayectoria espiritual. Fue uno de los voluntarios del proyecto realizado en Albania. En esta entrevista, evalúa el valor de su participación en esta expedición internacional.

–¿Qué conocías de Albania antes del viaje?

–No conocía muchas cosas. Solo había escuchado que es un país europeo, ex comunista, de economía débil, de relieve montañoso y con una gran población que profesa la religión.

–¿Qué fue lo que más te llamó la atención cuando llegaste al país?

–La belleza de Albania. ¡Es imposible no notarla! El país entero tiene montañas bellísimas, que forman un paisaje que no existe en ningún lugar del Brasil.

–¿Cómo fue la distribución del libro?

–En las calles, formábamos parejas, generalmente un brasileño con un albanés voluntario; otras veces, solamente íbamos con dos brasileños y golpeábamos las puertas. En la mayoría de los casos, la recepción fue buena, porque el pueblo albanés es muy hospitalario. Mencionar que éramos de otro país nos ayudó: descubrí que aprecian mucho a las personas del Brasil.

Enfrentamos algunas dificultades; pero lo que más me marcó en lo personal fueron los casos que terminaron bien. El momento más emocionante fue el último día, cuando cerca de cien personas aceptaron el llamado que se hizo en el sermón.

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torbellino de ideas La columna de

Víctor Armenteros

3P

Postmodernos (con “t” de Cristo)

E

ra la cuarta hora de clase. Los alumnos leían y releían el libro de Gramática. Algunos, de tanto en tanto, soltaban un largo bufido. ¡Tantas palabras, tantas normas, tantas excepciones! En un momento de cansancio, Ivanna, la jovencita de los ojos vivarachos, se decidió a hacer una pregunta: –Profe...

–Sí, Ivanna.

–¿Por qué la palabra...

Miró el libro de reojo, y mencionó el primer término que pudo leer.

–¿Por qué la palabra “posmoderno” se escribe como se escribe?

–¿Qué quieres decir?

–No sé, a veces lleva una “t” y otras no.

–Porque se puede escribir de las dos formas.

–Pero... ¿cuál fue la primera?

–Veo que estás aburrida, ¿no?

–Un poco, profe.

–Bien, paremos la actividad un rato y les cuento un secreto de las palabras. ¿Están de acuerdo?

El clamor se dio al unísono: les fascinaba cuando el profesor se ponía en plan enigmático.

–Hoy en día, las palabras no son tan fuertes como lo eran antes. Antes, una palabra podía concluir una batalla, sellar un contrato, unir a una pareja de por vida con apenas un “sí”. Las cosas han cambiado en nuestros días. Las palabras actuales tienen la enfermedad de las tres “pes”.

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–¿Las tres “pes”? –preguntó Martín, con una expresión de intensa curiosidad.

–Sí, las tres “pes”. No soportan mucha carga y tienen problemas con el peso. No les gusta ir despacio y siempre tienen mucha prisa. Se aburren rápidamente, y solo les importa el presente. Por eso, las palabras cada vez tienen menos letras y padecen la enfermedad de las tres “pes”.

Ivanna tuvo una idea, que no dudó en compartir: –A partir de hoy, voy a escribir “postmoderno” con “t”.

–Como la “t” de Cristo –añadió Martín.

Se hizo el silencio… ¡esa sí que era una brillante idea!

El hombre no tiene la capacidad de nacer en la época que lo desee. Aquellas personas que llegaron al mundo en Europa en el siglo VI d.C., les gustase o no, pertenecían a la Edad Media; las que vivieron en el siglo XVI, al Renacimiento; y en el siglo XX, a la Modernidad. Nosotros, sea como fuere, somos del siglo XXI y, por ahora, estamos incluidos en la Posmodernidad. Eso quiere decir que habrá cosas del tiempo que nos ha tocado vivir, positivas y negativas, que tendremos que reconocer que son como son. ¡Es lo que hay! Otra cuestión es que nos quedemos de brazos cruzados, aceptando todo lo que sucede a nuestro alrededor. Si somos cristianos, ¿cómo deberíamos abordar las situaciones que nos rodean? ¿Nos dejaremos llevar? ¿Nos opondremos? Es por esa razón que me atrevo a desafiarlos a analizar nuestro mundo y teñirlo de la grandeza de los mensajes de Jesús. Me gustaría pensar que somos capaces de ponerle una “t” a la palabra Posmodernidad; una “t” con toda la intensidad del Mesías: Postmodernidad (nuestro mundo bajo la mirada del cristianismo). ¿Están conmigo? Yo pongo la tinta, ustedes la reflexión y ojalá la acción.

Podemos definir la Posmodernidad desde diferentes puntos de vista. Yo les voy a proponer tres que, aunque no son exhaustivos, sí que la radiografían:

Estética (peso) ¿Sabrían diferenciar los “emos” de los “floggers”? ¿Y los “punkies” de los “góticos”? No hay que ser Sherlock Holmes para identificarlos, porque son bastante distintos en su manera de vestir, de cortarse el cabello o de llevar accesorios. Ahora, ¿sabrían diferenciarlos si no los ven y leen algo que hayan escrito? ¿Saben cuáles son las filosofías de vida que les hacen ser lo que son?

La estética es muy importante en la Posmodernidad, porque define las cosas y a las personas. Algún sociólogo dice que es tan relevante la forma en la que se presentan los mensajes como su contenido. Y un ejemplo son los comerciales de televisión. ¿No han observado cómo son los spots de refrescos? ¡Espectaculares! Embuten obras de arte en veinte segundos, para que te tomes una gaseosa, cualquier gaseosa.

Todo debe ser de diseño. Eso lo entendió muy bien Steve Jobs, y el mundo se llenó de Ipods, Iphones e Ipads. Lo último debe ser bello y, esto es muy importante, ligero. La Posmodernidad está obsesionada con la ligereza de las cosas y... de las personas.

Una computadora portátil se considera mejor cuanto menos pesa. Una persona ideal no puede ser “pesada” (no hablo de kilos, aunque también afecta). ¿Qué piensan cuando alguien cuenta dos veces la misma historia? ¿Y a la tercera? ¡Qué pesado!

Todos deben ser jóvenes. Y, tristemente, podemos ver a niños que aceleran las etapas de su vida a fin de parecer mayores de lo que son. Pero, y esto es peor, vemos a personas mayores “planchando” sus arrugas y llenándose de bótox, para parecer jóvenes. Es como si lo viejo fuera desechable. Bueno, en cierta medida lo es, porque la Posmodernidad es una sociedad de consumo, en la cual todo debe ser nuevo.

Expresiones como “ir al grano” nos muestran que nadie tiene mucho tiempo que perder. Como la mayoría de las personas no tiene una perspectiva de futuro más allá de la vida, se dedica a “vivir el momento”. Y el momento, lo inmediato, ha pasado a ser su medida de tiempo.

El objetivo de todo momento, además, está vinculado con el placer: el placer de ir de compras, el placer sexual, el placer de una comida exquisita, el placer de un videojuego, el placer del último thriller, etc. Si “Hamlet” se escribiera en nuestros días, diría: “Me gusta o no me gusta, esa es la cuestión”.

Esto es lo que hay. Como buenos cristianos, ¿cómo podemos “reciclarlo”? Les lanzo algunas ideas para quienes han pensado que no estaría mal ser postmodernos:

Estética

En la sociedad posmoderna, todo acontece con prisa. Hubo un tiempo en que la velocidad con la que se medía el mundo dependía del paso humano. Una legua, por ejemplo, era la distancia que podía recorrer una persona en una hora. Hoy, muchos ni conocen la palabra. Los medios de transporte han ido adquiriendo mayor rapidez, y eso ha cambiado nuestras vidas.

Nos gusta lo rápido. Un ejemplo es la comida. ¿Por qué tanta gente va a los restaurantes fast food? Muy fácil, porque alguien, desde su coche, pide una hamburguesa triple con pepinillos, queso Emmental, tomate, patatas fritas, pan francés con semillas de sésamo, lechuga rizada, una gaseosa hipersupermaxiextra y, ¡zas!, aparece como por arte de birlibirloque.

Se espera que las cosas sean ya.

No sé si les pasa a ustedes, yo recibo muchos correos electrónicos cada día; y no siempre puedo contestarlos en el momento. En bastantes ocasiones me ha sucedido que alguna persona se ha molestado porque ayer me envió un mensaje y “¡todavía no le he contestado!” ¿Para qué tanta velocidad? No se sabe muy bien, pero la sociedad posmoderna es así.

A Dios le encanta la belleza y, al principio, lo hizo todo hermoso (en el original del texto del Génesis la palabra que se emplea para “bueno” también puede ser “bello”; y, curiosamente, “útil”). Que alguien procure la excelencia en lo estético es positivo, siempre que la superficie refleje lo interior. A veces, observo a cristianos que, por su aspecto, no lo parecen. No voy a entrar a hablar de si se puede llevar esto o aquello sino de qué mensaje estoy transmitendo.

Jesús, en Mateo 12:34, afirma que todo aquello que hay en nuestro interior, finalmente, sale hacia afuera. Nuestras palabras, nuestras miradas, nuestros gestos e, incluso, nuestra manera de vestir están cargados de información.

Te propongo, tal y como nos aconsejó Jesús, que te llenes de tantas cosas positivas por dentro (respeto, gentileza, generosidad, simpatía, pureza, etc.) que salgan al exterior. Si te llenas de contenido (peso), dejarás de ser superficial (ligereza) y no vivirás al son de la moda. No hay mejor rostro que el de una persona buena; ni PhotoShop consigue algo así.

Inmediatez (presente)

Velocidad

La sociedad en la que vivimos ha perdido el pasado y se aterroriza con el futuro (porque no es nada halagüeño). Vive en el presente. Un presente, además, cada vez más corto.

Nosotros, como cristianos, sabemos cómo acaba la historia de este mundo, y tenemos nuestra velocidad. Antes de que se inventara el movimiento slow life, nosotros ya hablábamos

Velocidad (prisa)

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de vivir en el campo; de dedicar tiempo a la familia; de tener nuestra huertecilla; de encontrarnos con Dios cada siete días.

Nuestra única prisa se produce cuando tenemos que ayudar a otros, porque deseamos hacerlo pronto y bien.

Detente un momento; observa el mundo. Puedes moverte a otra velocidad, ¿quién te lo impide? Saborea, disfruta, paladea cada detalle de la vida.

Otra propuesta. Cuando te comas tu sándwich preferido, piensa en cómo Dios sigue sustentando el mundo en cada tomate, en cada lechuga, en cada grano de trigo que se convierte en pan. Él se ha tomado su tiempo, para que tú te tomes el tuyo.

Inmediatez Gracias a la Biblia tenemos pasado y futuro. Al leerla, comprendemos que Dios marcó el inicio de nuestra existencia creando un hábitat perfecto para el ser humano. Ya sabemos que las cosas no

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salieron como Dios las había planificado pero, aun así, nos preparó un plan de salvación que se concretó en el momento, por ahora, más relevante de la historia: la primera venida de su Hijo. ¡Qué fantástico! También, verificamos en su Palabra que hay una promesa que se ha empeñado en cumplir: desea volver a crear este mundo, y cuenta con nosotros. Ese concepto nos aporta un horizonte: tenemos opciones de una vida más allá de esta. Por eso, no estamos obsesionados con el placer sino con el vivir. Anhelamos, en Cristo, vivir plenamente. Vivir con alegría aunque tengamos tristezas, porque tenemos esperanza. No saben lo relevante que puede ser esto; cambia vuestras existencias.

El presente, para los cristianos, es la oportunidad de hacer de este mundo algo mejor. La Nueva Tierra empieza aquí, cuando decidimos que cada uno de nuestros momentos se vivirán en Cristo.

Una última propuesta. Deja de leer

(todavía no, que te tengo que dar las instrucciones), cierra los ojos, sonríe y dedica este momento a Dios. Puedes pedirle que te dé algo de su sabiduría, para diferenciar los momentos (Eclesiastés 3), y la actitud para afrontarlos o disfrutarlos. Ahora sí, deja de leer y cierra los ojos. ¿Qué tal? Acabas de abrir una ventana a la eternidad. Mantenla así.

Hace tiempo que estoy intentando ser postmoderno con “t” de Cristo y, por eso, te comparto mis pensamientos. ¿Te apuntas?

Víctor M. Armenteros es doctor en Teología y vicerrector académico de la Universidad Adventista del Plata, Rep. Argentina.

¿Cómo hablar de Dios a aquellos que dudan?

T

omás, uno de los doce apóstoles de Jesús, sin duda puede ser considerado como uno de los abanderados del paradigma del escepticismo en las Sagradas Escrituras.

Un escepticismo que no ocultaba y que, incluso, hacía explicito. “Si no veo la señal de los clavos en sus manos, y pongo mi dedo allí, y mi mano en su costado, no creeré” (Juan 20:24, 25), había señalado el discípulo, ante la información de la resurrección de su Maestro.

A partir del relato bíblico, Tomás, también, se convirtió en el modelo de una forma de pensar que el mundo adoptaría casi dos milenios después. Un modelo duramente criticado por los creyentes. Sin embargo, Jesús no condenó la incredulidad de Tomás. En lugar de ello, el Señor, conocedor como nadie de las necesidades de la mente y del corazón humanos, reprendió levemente la actitud dubitativa de Tomás, pero no antes de mostrarle las evidencias que su intelecto requería.

La misma paciencia del Maestro es la que hoy debiéramos imitar, para acercar a muchos escépticos a sus pies, en una época de marcado agnosticismo. Una época en la cual la ciencia, que ha optado por filosofías humanistas, y la sociedad han calificado, en muchos círculos, el concepto de “Dios” como irracional.

Ante este panorama, surge un interrogante, de respuesta obligada para cumplir con la misión que Jesús encomendó: ¿Cómo hablar de Dios a los incrédulos?

A lo largo de la

POR

DAVID FLIER

Seguramente, en tu trabajo o en tu facultad puedes encontrarte con compañeros o amigos que no creen en Dios, o que cuestionan sus actos.

historia del cristianismo, se ha formado un concepto erróneo de que quienes no creen en Dios necesitan únicamente de sermones o de predicaciones morales, y no evidencias de la fe cristiana. Sin embargo, se trata de una fe basada en hechos históricos, y 1 Pedro 3:15 nos exhorta a “responder con mansedumbre y respeto al que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros” (la cursiva fue añadida por el autor).

Quienes no conocen a Dios y no han tenido experiencias con él, necesitan de algo más que testimonios personales y subjetivos. Muchas veces, es necesario exponer nuestra fe como una creencia confiable y, hasta cierto punto, racional.

A menudo, además, descontextualizamos la Biblia, dando a las Sagradas Escrituras el lugar de un libro “caído del cielo”. No obstante, el relato bíblico lejos está de corroborar tal origen, para los textos inspirados. Pedro mismo aseguró que la Biblia no es una fábula ingeniosa, sino que “fuimos testigos oculares de su majestad” (2 Ped. 1:16).

Por otro lado, Pablo sabía muy bien cómo adaptar sus mensajes a las distintas audiencias que no conocían al Salvador. En Hechos 14:1 puede leerse cómo este siervo de Dios entró, junto con Bernabé, en una sinagoga en Iconio, y “creyó una gran multitud de judíos y de griegos”. Aquel primer viaje de Pablo traía consigo presagios de éxito. Sin embargo, no siempre sería tan fácil alcanzar almas para Dios.

En Tesalónica, Pablo “por tres sábados razonó con ellos [los judíos] basándose en las Escrituras” (Hech. 17:2); mientras que, en Éfeso, el texto de Lucas afirma que “durante tres meses habló con denuedo, razonando y persuadiendo acerca del reino de Dios” (Hech. 19:8).

Incluso en Grecia, Pablo dejó una lección

acerca del evangelismo. El país balcánico no era un terreno fértil para sembrar las buenas nuevas del cristianismo. Lejos del monoteísmo que profesaba Israel, los griegos adoraban a muchos dioses. Y fue precisamente esa ferviente religiosidad la que Pablo se dedicó a elogiar y encausar. “Atenienses, en todo os veo muy religiosos”, señaló el apóstol en las primeras palabras que dirigió a los griegos. Y, desde allí, Pablo predicó acerca del Dios verdadero: desde los conocimientos que los griegos tenían sobre filosofía y literatura, mencionando a sus dioses y sus autores (Hech. 17:22-31). Al fin y al cabo, no hizo otra cosa más que lo que Gregory Boyd, un teólogo estadounidense del siglo XX, señaló como la manera en la que los seres humanos aprendemos: yendo de lo que es sabido a lo que ignoramos.1 Cuando los fariseos preguntaron a Jesús cuál era el principal mandamiento, él respondió: “Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente” (Mat. 22:37). Dios anhela que lo presentemos como un Dios que invita a los incrédulos a preguntarle sus dudas, a probar su verdad, a investigar sus evidencias... No obstante, esta búsqueda debe ser sincera. Si es así, la promesa divina es clara: “Me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón” (Jer. 29:13).

David Flier es licenciado en Comunicación Social y miembro de la Iglesia Adventista de Núñez, Buenos Aires, Rep. Argentina. _______________ 1 Boyd, Gregory. Cartas de un escéptico. Debate sobre temas del cristianismo entre un creyente y su padre incrédulo (Editorial Vida: Miami, Florida, 2004).

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POR

Es que John es un misionero global.

Gracias a su trabajo, ha recorrido y vivido en varios países. Desde su conversión al adventismo, el trabajo por alcanzar a los no alcanzados del planeta es su objetivo.

Vive para eso. No le preocupa nada más en esta vida.

Conexión JA dialogó con John Baxter, director de Reclutamiento de Adventist Frontier Mission (AFM), una organización adventista que envía misioneros a todo el mundo.

L

os ojos de John Baxter, de un intenso color celeste, se mueven vertiginosamente y, al parecer, tratan de reflejar el movimiento de su cerebro, empeñado en buscar la palabra más adecuada en castellano.

Porque, además del inglés, su lengua natal, John habla varios dialectos asiáticos y el español. Si bien su pronunciación no es exacta, se hace entender perfectamente.

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Conexión JA (CJA): ¿Qué es Adventist Frontier Mission?

John Baxter (JB): Somos una organización que envía misioneros a las fronteras donde no hay adventistas ni, incluso, cristianos. Donde las personas son musulmanas, hindúes, budistas o ateas. Si queremos que Jesús venga, tenemos que predicar a ellos y compartir con ellos el evangelio.

CJA: ¿Son todos voluntarios? ¿Son laicos?

JB: Tenemos algunos pastores, pero la mayoría son laicos. Pero necesitamos de los dos.

CJA: La sede central ¿está en los Estados Unidos? ¿Tienen sedes en otros países?

JB: Sí, la sede principal se encuentra en Estados Unidos, pero estoy orando a fin de que podamos tener una sede en algún país de Sudamérica. Es paradójico, tal vez, pero históricamente desde Estados Unidos se enviaron misioneros a todo el mundo. Nuestra iglesia nació allí, y desde allí salieron hombres y mujeres que esparcieron el mensaje adventista. Pero, hoy, la iglesia en ese país está padeciendo por el secularismo. Actualmente, desde muchas partes del mundo, más que nada de Sudamérica, salen misioneros a predicar. Tal vez, pronto Estados Unidos necesite que se le envíen misioneros. No obstante, nuestra misión es alcanzar a quienes nunca oyeron hablar de Jesús.

CJA: ¿Cómo conoció la Iglesia Adventista?

JB: La historia de mi conversión es larga. Yo soy un milagro de Dios. Mi vida estaba llena de lujos y de dinero. Tra-

PABLO ALE

bajaba como banquero internacional en Nueva York. Tenía de todo, económicamente hablando. Pero, mi vida estaba vacía. Estaba totalmente sumergido en las drogas y en el alcohol. Fumaba como sesenta cigarrillos al día. Hasta que una situación me puso al borde del abismo.

Yo no era cristiano, pero deseaba buscar la ayuda divina. Al único lugar que se me ocurrió ir fue a un cementerio, porque allí hay cruces. Yo pensaba que podía encontrar a Dios en un crucifijo, pensaba que ese crucifijo era Dios. Ahora, sé que no debo hacer eso porque lo dicen los Mandamientos. Pero, en ese tiempo ignoraba la Biblia. Así que fui al crucifijo y oré.

Y me quedé a dormir en el cementerio.

Esa noche, tuve un sueño. En él, las nubes estaban oscuras y se abrieron. Vino una luz brillante, y una voz dijo: “El fin del mundo viene y tú tienes que anunciarlo”.

Y, cuando desperté, yo tenía voces en mi mente. Estoy seguro de que estaba poseído. Yo fumaba, me emborrachaba, me drogaba y tenía demonios en mi cabeza.

Había llegado al límite. Así que, me puse a predicar. Pero, no sabía nada de la Biblia. Por alguna noción de cultura general, sabía que los profetas bíblicos usaban túnica. Así que, me saqué la ropa y me puse una túnica. Tomé una Biblia, libro que nunca había leído, me fui al centro de Manhattan y me puse a predicar: “Cristo viene”. Ese era mi único mensaje.

CJA: ¿Qué edad tenía cuando esto sucedió?

JB: Tenia 24 años.

CJA: ¿Y cómo sigue su historia?

JB: El día que salí con la túnica estaba nevando. Llegué al puente que conecta Queens con Manhattan, y un hombre detuvo su limusina. Me dijo que suba.

Tuvimos el siguiente diálogo: -¿A dónde va, así vestido?

-Al Rockefeller Center.

-¿Y a qué va?

-A predicar sobre la Biblia.

-¿Leyó usted alguna vez la Biblia?

-No. Entonces, me dijo: “Mire, joven, yo también creo en la Biblia y creo que hay que predicarla; pero no de la forma en que usted quiere hacerlo. Tiene que regresar a su casa ahora, y estudiar mucho la Biblia. Conozca a Jesús, y luego, sí, salga a predicar”.

CJA: ¡Qué buen consejo!

JB: El mejor. Así que, me bajé de su limusina, y él me dio su tarjeta personal de identificación. Se llamaba Sonny Goodson. Al despedirnos, me aconsejó que, si me sentía insatisfecho como banquero, deje mi trabajo y me dedique a predicar. Me fui a mi casa y me quedé pensando en cómo sabía que yo era banquero, y en el nombre de identificación de la tarjeta. En inglés good son es “buen hijo”. Tal vez, esta persona era una especie de ángel, o alguien a quien Dios envió para ayudarme y aconsejarme.

CJA: Entonces, ¿dejó su trabajo en el banco?

JB: No. Seguí trabajando dos años más. Pero, pasé esos dos años leyendo y estudiando la Biblia solo, por mi cuenta. Y también, a mi manera, oraba mucho. Quería encontrar a Dios y sanarme de mis vicios.

Un día, vi un cartel que anunciaba un lugar donde se estudiaban las profecías bíblicas del fin del mundo. Concurrí a unas reuniones. Lo que decían allí era lo que yo había leído. Una persona me invitó a estudiar juntos la Biblia. “¿Crees que Jesús es tu Salvador? ¿Crees que su sangre te limpia de todo pecado? ¿Quieres ser perdonado y curado?”, me preguntaba siempre. Y yo respondía que sí.

Hasta entonces, yo no había oído de los adventistas; ni sabía que esas personas eran adventistas. Fui un miércoles a una reunión de evangelismo. Volví a asistir el viernes. Ese día, dijeron que orarían para que Dios nos libertara del mal. Oramos en ese lugar. Yo pedí para dejar de fumar. No sé exactamente cómo paso, pero no volví a fumar, y los demonios de mi cabeza desaparecieron. Era libre, por la sangre de Jesús.

Yo no sabía que Jesús tenía tanto poder para cambiar mi vida.

CJA: ¿Qué pasó luego?

JB: Me convertí en un misionero. Dejé mi trabajo en el banco. Tenía 25 millones de dólares a mi cargo, para administrar. Pero, dejé todo para irme a predicar el mensaje adventista a otros países, como la India. Ya pasaron 24 años de eso.

CJA: ¿Qué le agregó a esa experiencia espiritual el hecho de conocer otras culturas?

JB: Me dio la oportunidad para que mi fe crezca. Fui misionero en la India. Ahora

La historia de Brad Jolly En la entrevista, preguntamos a John Baxter cuál había sido, para él, la historia más impactante de AFM. Entre las numerosas vivencias y testimonios, eligió la historia de Brad Jolly.

En 1991, AFM trasladó a Brad y a su familia desde Estados Unidos hasta Mongolia, una extensa nación ubicada en el centro de Asia. Allí, la Iglesia Adventista tenía cerradas las puertas. Las tradiciones comunistas de la ex Unión Soviética aún imperaban.

Luego de un dedicado trabajo misionero, en 1993, se realizó el primer bautismo. Dos personas de ese país entregaron su vida a Cristo. El Pr. Robert Folkenberg, que era presidente de la Asociación General en ese tiempo, fue quien ofició la ceremonia.

En 1997, se organizó en ese país la primera congregación adventista. Tenía 26 miembros. En 1998, Brad Jolly murió por causa de una enfermedad terminal. Pero otros continuaron su obra.

Por la gracia de Dios, en Mongolia hay actualmente 1.664 adventistas.

Todo comenzó con el ministerio de Brad en ese lugar.

Fundada en 1985, AFM tiene, como objetivo, llevar el mensaje adventista a todas las tribus, los pueblos y las naciones. Como resultado, se ha establecido y consolidado la presencia adventista en Papúa Nueva Guinea, Mongolia, Camboya, Burkina Faso, Benin, Mali, Albania, Guinea, India, China, Tailandia y Nepal.

Si bien AFM no es un organismo oficial de la iglesia adventista, trabaja en cooperación y en armonía con la Asociación General.

Conoce más sobre Adventist Frontier Mission, sus objetivos, sus metas y las historias de sus misioneros en www. afmonline.org

creo que cuando yo oro él me está escuchando y hará lo que es mejor en esa situación. Siempre se dice que hay tres respuestas para la oración: Sí, No y Espera. Pero, hay una cuarta, también: Aún mejor. Oramos por esto o por aquello, pero Dios hace siempre algo mejor.

El tiempo ha transcurrido, y John Baxter tiene que presentar otro seminario en “I will go!”, el primer encuentro de misioneros voluntarios adventistas, realizado en la Universidad Adventista del Plata. Mientras terminamos la entrevista, decenas de jóvenes se arremolinan alrededor. Él los mira, revoloteando ágilmente sus ojos celestes, y con paciencia atiende todos los requerimientos y contesta todas las preguntas.

Pero, antes de eso, pide que más allá de todo lo que dijo, esto quede bien claro: “Tenemos que llevar el mensaje adventista a todo el mundo antes de que venga Jesucristo. Y si lo vamos a hacer, tenemos que empezar por la oración”.

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______ Editor

______ ualidade

______ pto. Arte

Consumir para esconder el vacío.

¿D

ios está en contra del ocio? Cuidado… piénsalo bien, antes de responder. Vamos a los hechos. En el Edén, Dios ordenó que Adán y Eva cultivasen el jardín. Ese es un argumento de peso, contra el ocio. Pero ¿cuál fue la primera experiencia en las vidas de Adán y de Eva? Fue un sábado, es decir un día de... ¡reposo! Dios tenía la intención que las criaturas tuvieran tiempo libre, y creó un día específicamente para eso. Quería que el ser humano contase con un periodo en el que estuviese liberado de obligaciones y pudiera relacionarse plenamente con su Creador y con toda la creación.

Las tardes de sábado en Facebook, Twitter, MSN y otras redes sociales son una realidad: para muchos jóvenes adventistas, descanso sabático equivale a largas charlas virtuales en la Red. No podemos juzgar los motivos, pero sí podemos proponer una reflexión sobre esa práctica y lo que está implícito en ella.

Una de las formas que el ser humano encontró para ocupar el tiempo libre es el consumo. Ya tenemos muchos y válidos argumentos en contra del consumismo desmedido de bienes y de servicios. Además, como nos cuestan dinero, no podemos estar comprando productos todo el tiempo. Pero, raramente percibimos otro consumo, que es inmaterial, intangible y mucho más barato; características que lo hacen más eficaz e irresistible: el consumo de “simbología”.

Esto implica imágenes, información y datos, que llegaron a nuestra vida a través de máquinas de producir comunicación, como la televisión y la computadora.

Razonando de esta forma, incluso la conversación virtual en la Red es una forma de participar de esa lógica de consumismo. Pero ¿cuál es la diferencia entre conversar presencialmente o en la red? Para responder, haré otra pregunta: Tú ¿has conversado con alguien por medio de Internet dejando solamente la ventana de esa persona abierta, concentrándose permanentemente en lo que ella decía, sin abrir otras ventanas, sin tocar nada más y sin siquiera tocar el teclado, a no ser 20

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para responderle al otro? Probablemente, no.

Justamente, eso es lo que nos atrae de Internet; esa posibilidad de llenar todos los vacíos y cualquier tiempo libre que tengamos. Con la computadora, u otro artefacto digital frente a nosotros, no tenemos que quedar esperando que el otro elabore su razonamiento. Mientras este piensa y escribe, podemos ir tocando, viajando, mirando fotos... Mientras la otra persona demora en respondernos, podemos entrar en comunicación con otro. Analizándolo bien, lo que importa no es el otro, sino que nosotros llenemos nuestro tiempo con el (los) otro(s). Twitter sintetizó muy bien eso. Constantemente, nos llega el tweet de alguien, y así quedamos ocupados todo el tiempo. La Red es nuestra aliada preferida en el arte de matar el silencio.

En la conversación en Red, la otra persona es solamente una coartada para lo que realmente queremos: matar el tiempo y llenar nuestro vacío; es decir, las verdaderas razones del consumismo simbólico. Y eso pasa a ser una necesidad, a partir del momento en que el tiempo libre no tiene ya un sentido, lo que es algo totalmente diferente de lo que Dios había planificado.

Por eso, Elena de White nos dice: “Bien sabe Satanás que todos aquellos a quienes pueda inducir a descuidar la oración y el estudio de las Sagradas Escrituras serán vencidos por sus ataques. De aquí que invente cuanta estratagema le es posible para tener las mentes distraídas” (El conflicto de los siglos, p.

573). Dios sabía que era necesario tener tiempo libre. Por eso, antes incluso que el trabajo, creó el sábado, que significa un tiempo para relacionarse con él, para leer la Biblia y orar.

Si el tiempo que Dios separó para él está siendo usado para “consumir”, puede ser que nuestras vidas estén perdiendo el sentido. Y, para un cristiano, ese es un síntoma muy serio como para ser ignorado.

Tales Tomaz es profesor de Comunicación Social en la Universidad Adventista de San Pablo.

Imagem: Fotolia

24270 – CONEXÃO JA 03/2011

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Sábado online

¿Qué identidad tendrá el pueblo de Dios que enfrentará la crisis final?

U

no de los temas que más intrigan a los adventistas del séptimo día, y a los cristianos en general, es el de los 144.000, número que aparece en el Apocalipsis. Muchos no comprenden ni siquiera los aspectos básicos de los 144.000: si el número es literal o simbólico; si ellos forman parte de la llamada “gran multitud”; y, fundamentalmente, quiénes son ellos.

En gran parte, esto se debe a un consejo de Elena de White, que pide que se eviten discusiones inútiles sobre ese asunto, así como otros no esenciales para la salvación.1 Sin embargo, ella misma citó a ese grupo decenas de veces en sus escritos, relacionándolo con los acontecimientos cruciales para el pueblo de Dios en el tiempo del fin, como el sellamiento y la gran tribulación.

Tan crucial fue la importancia de ese grupo en su ministerio profético, que los 144.000 fueron representados ya en su primera visión sobre el pueblo del advenimiento.2 A pesar de haber escrito bastante sobre los 144.000, Elena de White nunca los definió claramente. La Iglesia Adventista, hasta hoy, no tiene una posición oficial abarcante sobre el asunto.

Aunque el Instituto de Investigaciones Bíblicas de la Asociación General interpreta el número como simbólico,3 la Iglesia no determina oficialmente esa comprensión como una creencia.4 Y, a pesar de que el Comentario Bíblico Adventista declara que, hasta la época de su reedición (1980), los Adventistas del Séptimo Día favorecían la interpretación que afirmaba que los 144.000 son un grupo especial del pueblo de Dios en los últimos

días, un grupo aparte de la gran multitud,5 esa tampoco era, ni es hoy, una posición oficial de la Iglesia. El asunto todavía está en estudio, y lo que se enfatiza no es tanto quiénes son los 144.000 sino cómo ser parte de ellos; es decir, cómo alcanzar la salvación.6 Por otro lado, si bien Elena de White condenó las discusiones inútiles, también instó a los adventistas del séptimo día a no desistir de buscar conocer cada vez más la Biblia y las profecías.7 Por lo tanto, las enseñanzas y las profecías de la Biblia pueden y deben ser comprendidas cada vez más, a medida que el tiempo pasa y los estudios progresan. Aspectos como la justificación por la fe, que Elena de White inicialmente no comprendía, fueron entendidos por ella décadas después. De la misma manera, partes de la Biblia que ella no entendía, por la falta de estudios más profundos en la época, hoy pueden ser mejor comprendidos (así como Daniel no entendía sus propias profecías, pero hoy podemos comprenderlas, tal como dice Daniel 12:4).

Avances En las últimas décadas, diversos estudios en relación con los 144.000 han sido divulgados por medios oficiales de la Iglesia, como el ya mencionado Instituto de investigaciones Bíblicas, y han mostrado más luz sobre el asunto. Una importante colección de materiales sobre Daniel y Apocalipsis, lanzada en el inicio de los años 1990, es la serie Daniel & Revelation Comit-

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Un grupo Así como Beatrice Neall, Ekkehart Müeller, en su artículo “The 144.000 and the Great Multitude” [Los 144.000 y la gran multitud], presenta argumentos convincentes en favor de que ambos grupos son uno solo: 1. Juan escucha el número de los sellados (144.000). Pero, en la secuencia, contempla una gran multitud (Apoc. 7:4, 9), así como en Apocalipsis 5:5 y 6 él había oído sobre un León, pero vio un Cordero.

2. En el capítulo 7, los 144.000 son los justos del tiempo del fin, descritos como estando todavía en la tierra, la gran multitud es un retrato de ese pueblo ya en el cielo.

3. Los 144.000 son la descripción del pueblo de Dios, en el tiempo del fin, que va a pasar por la gran tribulación (representada por la liberación de los vientos).

La gran multitud son los que ya pasaron por la tribulación (Apoc. 7:3,14).

4. Los 144.000 son los sellados antes de la liberación de los vientos (Apoc. 7:3); la gran multitud, lógicamente, necesitó ser sellada antes de pasar por la gran tribulación (Apoc. 7:14).10 El sellamiento y la gran tribulación son las principales marcas de identificación, de acuerdo con cómo lo llama Neall, entre los 144.000 y la gran multitud. Ambas marcas dan fundamentos para que se vean semejanzas, no diferencias, entre los grupos. Los dos grupos fueron sellados y pasaron por la tribulación. No es de balde que, en el libro El conflicto de los siglos, Elena de White se refiriera a los 144.000 citando versículos referentes directamente a la gran multitud (Apoc. 7:14-16).11 Así, queda una duda: ¿qué podría diferenciar a los 144.000 de la gran multitud? ¿Habrá dos grupos de justos cuando Cristo vuelva? Algunos argumentan que los 144.000 son las “primicias” (Apoc.

14:4); un grupo especial en relación con la gran multitud. Sin embargo, “primicias” puede referirse tanto a los 144.000 como a los primeros frutos de la “cosecha universal de redimidos de todas las eras”.

Frente a esto, Müeller concluye que “es mejor entender que los 144.000 y la gran multitud son el mismo grupo, visto desde diferentes perspectivas”. Para él, los 144.000 representan un “término simbólico”, mientras la gran multitud “describe la realidad”.12 El simbolismo de los 144.000 puede encontrar su realidad en la gran multitud en diversos aspectos. Entre ellos se destacan: 1. Origen étnico. Juan escuchó acerca de un grupo compuesto por doce tribus de 12.000 hijos de Israel; pero vio una multitud de tribus (Apoc.

7:9).

2. Número. Juan escuchó el número exacto, pero vio una multitud innumerable (Apoc. 7:4, 9).

3. Pureza. Los 144.000 son descritos como puros, sin mancha; así como la gran multitud, vestida con vestiduras blancas (Apoc. 14:4, 5; 7:14).

4. Proximidad al Cordero. Los 144.000 “siguen al Cordero para donde quiera que Él va”, así como la gran multitud sirve de “día y de noche” delante del trono del Cordero (Apoc.

14:4; 7:15, 17).

5. Servicio. Los 144.000 son “siervos de Dios”; y la gran multitud también “sirve a Dios” (Apoc. 7:3, 15).

Hans K. LaRondelle, eminente teólogo adventista, señaló los 144.000 como el pueblo remanente de Dios en el tiempo del fin; fieles de todas las naciones que “guardan los mandamientos de Dios y tienen la fe de Jesús” (Apoc. 14:12). Según LaRondelle, ellos enfrentarán la crisis final, promovida en el mundo por el anticristo. Es decir, él ve en los 144.000 un símbolo del remanente que pasará por la gran tribulación.13 Frente a las evidencias presentadas, queda más claro que el número 144.000 es simbólico. El propio contexto de los pasajes indica eso: tanto en el capítulo 7:1 al 8, como en el 14:1 al 5, el lenguaje directamente relacionado con los 144.000 contiene un fuerte simbolismo: vientos, cuatro ángeles, cuatro extremos, sellamiento en la

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tee Series. En uno de los volúmenes de la colección, un capítulo escrito por Beatrice Neall, “Sealed Saints and the Tribulation” [Los santos sellados y la tribulación] trata directamente de los 144.000.8 En ese estudio, un punto especial puede ser destacado: la relación entre los 144.000 y la “gran multitud” de Apocalipsis 7.

En lugar de enfatizar las diferencias entre ambos grupos, la autora presenta diversas “marcas de identificación”. Entre ellas, hay evidencias de que pueden constituir un solo grupo. A su vez, otros académicos adventistas, como Ekkehardt Müeller, también favorecen esa posición.

Los 144.000 son presentados en dos secciones: en Apocalipsis 7:1 al 8 y 14:1 al 5. En el capítulo 7, el relato sobre los 144.000 es seguido por la descripción de una multitud incontable. La primera gran evidencia de que los 144.000 y la gran multitud pueden ser el mismo grupo es la propia estructura del libro de Apocalipsis.

El capítulo 7 es un hiato, un paréntesis entre el sexto y el séptimo sellos. Responde a una pregunta básica realizada por los impíos en el sexto sello.

Frente a la expectativa por la venida de Jesús, los impíos claman a los montes y a las rocas: “Caigan sobre nosotros y escóndannos del rostro de Aquel que se sienta en el trono de la ira del Cordero, porque llegó el gran día de la ira de ellos, ¿y quién podrá sostenerse?” (Apoc. 6:16, 17). En Apocalipsis 7:9, la respuesta es directa: “Después de estas cosas, vi una gran multitud que nadie podía contar... en pie delante del trono y delante del Cordero”. Más adelante, en el libro, los 144.000 son vistos en pie junto al Cordero, en el monte Sion (Apoc. 14:1).

Los 144.000 y la gran multitud son descritos en momentos diferentes, como los únicos que pueden quedar de pie frente a Cristo, en su regreso a la tierra.

Eso deja en claro que ambos son el retrato del pueblo de Dios que estará vivo en ocasión del regreso de Jesús. La cuestión es: ¿se trata de dos grupos o uno solo?

frente, hombres vírgenes, doce tribus de Israel (la mayoría extinta; además de que la lista no se corresponde con la original de los doce patriarcas). Es más coherente entender a los 144.000 de las doce tribus de Israel como simbolizando la unidad, la perfección, la completitud y la vastedad de la iglesia de Dios.14 Por lo tanto, es posible concluir que los 144.000 simbolizan la gran multitud; la multitud innumerable que atraviesa la crisis final de la tierra. Hay razones para creer que Jesús no vendrá para buscar a un pequeño grupo de redimidos, ni a dos grupos de justos vivos en la tierra, sino a un remanente fiel compuesto por una multitud innumerable de todas las naciones. Vendrá a buscar a un pueblo que habrá pasado por muchas dificultades, pero que contó con la protección de un Dios que enjugará personalmente “toda lágrima” (Apoc. 7:17). Más importante aún es prepararnos para pertenecer a ese grupo.

Elena de White. Primeros escritos, pp. 15-23.

Gerhard Pfandl, “Information on the Seventh-day Adventist Reform Movement”, Biblical Research Institute. En un punto de este artículo, la creencia reformista de que 144.000 es un número literal es puesta en contraste con la creencia adventista del séptimo día de que el número es simbólico. Disponible en: http://migre.me/5NUPA. 4.

Seventh-day Adventist Bible Commentary (Hagerstown, MD: Review and Herald, 1980), t. 7, p. 783.

5.

Ibíd., p. 785.

6.

Ibíd., p. 783.

7.

Elena de White, El camino a Cristo, p. 112 y Consejos sobre la obra de la la Escuela Sabática, p. 23.

8.

Beatrice Neall, “Sealed Saints and the Tribulation”, Symposium on Revelation – Book I. Daniel & Revelation Committee Series, Frank Holbrook (Ed.) (Hagerstown, MD: Review and Herald, 2000), pp. 245-278.

9.

Ekkehardt Mueller, “The 144.000 and the Great Multitude”, Biblical Research Institute. Disponible en: http://migre.me/5NURu. 10.

Ibíd.

11.

Elena de White, El conflicto de los siglos, pp. 648, 649.

12.

Ekkehardt Mueller, ibíd.

13.

Hans K. LaRondelle, “Prophetic Basis of Adventism”, Adventist Review (1º de junio-20 de julio, 1989). Disponible en: http://migre.me/5NURX. 14.

Neall, ibíd, pp. 262-269.

2.

3.

Diogo Cavalcanti es editor asociado de la revista Conexión JA, edición en portugués.

Referencias 1.

Elena de White. Eventos de los últimos días, p. 268.

Marcas de identificación Características iniciales (Apoc. 7:4, 9) • • •

“Oí” 144.000 “de las doce tribus de los hijos de Israel”

• • •

“Vi” Multitud incontable “de todas las naciones, tribus, pueblos y lenguas”

Relación con la gran tribulación (Apoc. 7:3, 14) •

Son sellados antes que sean dañados la tierra, el mar y los árboles. Es decir, son sellados para ser protegidos de la gran tribulación.

•

“Son los que vienen de la gran tribulación”.

•

Lo siguen por donde quiera que vaya.

•

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Apego al Cordero (Apoc. 7:15, 17; 14:1, 4) Permanecen día y noche frente al Trono y en su Santuario. Son guiados y apacentados por el Cordero.

Victoria sobre la crisis (Apoc. 7:3, 9, 14; 14:1, 3; 15:3) • •

Sellados para pasar por la liberación de los vientos de las calamidades.

Frente a la amenaza de la trinidad falsa (Apoc. 12, 13), quedan de pie junto al Cordero.

• •

Palmas en las manos (símbolo de victoria).

Pasan por la gran tribulación y también quedan de pie. ¿Dónde? Ante el Trono y el Cordero.

Pureza en la fe y en el carácter (Apoc. 7:14; 14:1, 3-5)

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•

Sellados en la frente con el nombre del Cordero y del Padre, no se mancharon con mujeres, no mienten y no tienen mácula.

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Usan vestiduras blancas lavadas y blanqueadas en la sangre del Cordero.

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uien pone los pies en los Estados Unidos por primera vez se siente en un parque de diversiones. Pocos países ofrecen museos para todos los gustos, parques temáticos de última generación, las mejores universidades del mundo, metrópolis que son el paraíso del consumo y bellezas naturales diversas, con playas, montañas y nieve. Frente a tanta variedad, lo que los recorridos turísticos tradicionales suelen ignorar es un tesoro histórico religioso para 17 millones de fieles en 206 países: los lugares que retratan el surgimiento y el desarrollo de la iglesia adventista del séptimo día.

Cuatro amigos y yo tuvimos la experiencia fantástica de conocerlos en un viaje en el que recorrimos millares de kilómetros durante catorce días, atravesando más de diez Estados. Al visitar tumbas, monumentos, haciendas, museos, hospitales y universidades, percibimos que Alguien está por detrás de la historia de nuestra iglesia. Si deseas seguir los pasos de los pioneros adventistas, lee las próximas páginas y, cuando puedas, ¡toma el próximo avión!

Distancia: 55 kilómetros del aeropuerto internacional de Washington, DC. Sede mundial (Silver Spring, Maryland): En la sede mundial de la Iglesia Adventista, son tomadas las decisiones que van a influir en la vida de millones de feligreses. El edificio tiene cuatro pisos, espacio ocupado por los departamentos de la iglesia y por algunos ministerios especiales más, como la página web oficial de la iglesia (adventist.org), el Instituto de Investigación Bíblica (biblicalresearch.gc), la Radio Mundial Adventista (awr.org), la Red Adventista de Televisión (adventist.tv) y el Patrimonio Literario de Elena White (whiteestate.org). Para visitar la sede mundial, donde trabajan ochocientos empleados, es necesario pedir un horario y anunciar la visita.

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Distancia: 105 kilómetros de la sede mundial.

Review and Herald (Hagerstown, Maryland): Esta editora es la más antigua de todas las instituciones adventistas. Incluso antes de que la iglesia, como denominación, tuviera un nombre, Jaime White publicó, en 1849, la revista The present truth (La verdad presente). Después de sufrir un incendio en 1902, en Battle Creek, Michigan, la editora ya se mudó dos veces de localización.

Hoy, con casi doscientos empleados, la Review and Herald continúa publicando los libros teológicos más importantes de la iglesia, además de imprimir Biblias para Rumania, revistas para Rusia y folletos para África. Los adventistas estadounidenses, además, cuentan con otra editora centenaria: la Pacific Press Publishing Association (pacificpress.com), ubicada en Boise, Idaho.

Fotos: Diogo Cavalcanti, Guilherme Silva, Leandro Quadros y Wendel Lima.

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La próxima vez que vayas a los Estados Unidos, no dejes de realizar un turismo cultural por los lugares que relatan la historia y el desarrollo de la Iglesia Adventista

WENDEL LIMA

Casa de José Bates (Fairhaven, Massachusetts): El más antiguo de los tres fundadores de la Iglesia Adventista (los siguientes dos fueron Jaime y Elena White), vivió en esa ciudad. El capitán jubilado, que navegó hasta Europa y América del Sur, llegó a visitar el litoral brasileño de Norte a Sur, y tuvo sus propias embarcaciones. En la ciudad vecina, New Bedford, las cartas, archivadas en el museo ballenero, relatan esas historias (whalingmuseum.org). El legado construido por Bates fue dedicado a predicar sobre el sábado y el cuidado de la salud.

Distancia: 222 kilómetros de Plymouth y 160 kilómetros de Boston.

Primera iglesia Adventista (Washington, New Hampshire): En esta localidad, de mil habitantes, se encuentra el primer templo adventista del séptimo día del mundo. En 1844, algunos guardadores del sábado ya se reunían allí. Al lado de la pequeña iglesia de madera, en la que todavía se congregan nuestros hermanos, hallamos un cementerio y el inicio de un sendero de más de un kilómetro. En este sendero, hay 31 inscripciones en piedras, que narran la historia del sábado, desde el Edén hasta la Tierra Nueva. Cerca de allí, está la casa de Cyrus Farnsworth, uno de los pioneros de la iglesia local (tagnet.org/washington).

Gorham, Maine. Elena de White nació en esta ciudad el 26 de noviembre de 1827. Una placa al lado de la carretera fue colocada para indicar el lugar.

Distancia: 18 kilómetros de Portland.

Distancia: 225 kilómetros de la primera iglesia Adventista.

Portland, Maine. En esta ciudad, Elena de White vivió con sus padres, la familia Harmon. Cierto día, en el camino de regreso del colegio hacia su casa, ella fue golpeada en la nariz por una piedra que le arrojó una compañera de escuela. Ese accidente comprometió mucho su salud. Fue allí, también, en el parque Deering Oaks, donde ella conversó varias veces con Dios sobre sus desafíos espirituales. Quien visita Portland, puede conocer la iglesia metodista que ella frecuentó, en la calle Basco.

Distancia: 341 kilómetros de Gorham y 380 kilómetros de Portland.

Hacienda de Guillermo Miller (Low Hampton, New York): En la misma propiedad se ubican la casa de Miller, las edificaciones de la hacienda, una capilla y la llamada Roca de la Ascensión, lugar en el que algunos milleritas aguardaban la venida de Jesús, el 22 de octubre de 1844. Cerca de allí, Miller y su esposa fueron sepultados. La casa, con sus muebles originales, fue transformada en un museo abierto al público. Ese es uno de los lugares históricos más interesantes y mejor preservados del adventismo. De origen bautista, Miller alcanzó escasa instrucción escolar, pero fue autodidacta. Después de estar a punto de perder la vida en la guerra de 1812, él estudió la Biblia como pocos. De 1835 a 1844, Miller predicó 3.200 veces sobre la venida de Jesús. Murió en 1849, sin haberse transformado en un guardador del sábado, pero creyendo en la pronta venida de Jesús. abril - junio 2012

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Distancia: 727 kilómetros de la Review and Herald y 98 kilómetros de Boston.

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Distancia: 893 kilómetros de la hacienda de Hiram Edson y a 170 kilómetros de Chicago, Illinois.

Hacienda de Hiram Edson (Port Gibson, New York): Fue caminando, en medio del maizal de esa propiedad, que Hiram Edson, predicador millerita, recibió una visión sobre el Santuario celestial. Eso sucedió después del gran chasco del 22 de octubre de 1844. Algunos amigos y él pasaron la noche en oración, en el granero, en busca de consuelo.

Reconfortados, ellos salieron para animar a los demás fieles.

Distancia: 402 kilómetros de la hacienda de Guillermo Miller y a 47 kilómetro de Rochester.

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Battle Creek, Michigan. En las primeras décadas de la historia de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, esta ciudad abrigó la sede mundial, la casa editora, la primera escuela y el primer hospital de la denominación. Hoy, el famoso tabernáculo denominado Dime continúa funcionando como iglesia local. Alrededor, fue construida una villa histórica, para reunir algunas casas de los pioneros y un museo, que contiene los equipamientos de vanguardia usados por el médico John Harvey Kellog.

Elmshaven (Santa Helena, California): En ese pequeño paraíso se ubica la casa en que Elena de White vivió sus últimos quince años. Los muebles de la casa muestran la visión de vanguardia de Elena de White. La casa contaba con teléfono y energía eléctrica. Sus caballos eran de raza y su carruaje, moderno. Entorno del hogar de la sala, a ella le gustaba comer y jugar con sus nietos los sábados por la noche. En ese lugar, conocido como Elmshaven, ella vivió con su hijo William, algunos parientes y sus asistentes. En su dormitorio, Elena tuvo varias visiones (elmshaven.org).

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Distancia: 112 kilómetros de San Francisco.

Fotos: Diogo Cavalcanti, Guilherme Silva, Leandro Quadros e Wendel Lima

Distancia: 137 kilómetros de la Universidad Andrews y a 274 kilómetros de Chicago.

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Universidad Andrews (Berrien Springs, Michigan): Esta universidad es heredera de la primera escuela de la denominación, fundada en la década de 1870, con apenas doce alumnos, en Battle Creek, Michigan.

En poco tiempo, la institución se transformó en un centro de formación de misioneros. No es sin razón que hoy lleva el nombre del primer misionero oficial de ultramar, John Andrews; recibe alumnos de casi cien países.

Su posgrado en Teología es el más importante de la iglesia adventista del séptimo día. En el campus, donde estudian 3.400 alumnos, hay un museo de arqueología del Antiguo Cercano Oriente, con 8.500 piezas y una de las mayores colecciones de tabletas cuneiforme de los Estados Unidos (siegfriedhornmuseum.wordpress.com); una escuela de aviación para la formación de pilotos misioneros; y el mayor acervo histórico de la historia del adventismo en el Center for Adventist Research, donde están objetos tales como manuscritos de Isaac Newton y la Biblia de Guillermo Miller (andrews.edu/library/car).

Leandro Quadros e Wendel Lima

Pacific Union College (Angwin, California): Con el apoyo de Elena de White y de su hijo William, el internado fue establecido en 1882 (puc.edu). Es la única institución adventista que ofrece títulos en producciones cinematográficas y artes escénicas.

Distancia: 8 km de Elmshaven

Distancia: 2 kilómetros de Elmshaven.

Hospital Santa Helena (Santa Helena, California): Así como las instituciones de Glendale (glendaleadventist.com), y Paradise Valley (paradisevalleyhospital.net) y la Universidad de Loma Linda, esta entidad médica fue establecida por influencia de Elena de White (sthelenahospitals.org).

Universidad La Sierra (Riverside, California): Fundada en 1922, la institución ofrece cursos en las áreas de artes, ciencias, educación, negocios y religión.

Se ha destacado en las competiciones deportivas, por sus proyectos sociales y su culto contemporáneo. La universidad también abriga el John Hancock Center, un instituto de investigaciones sobre el desarrollo espiritual de los jóvenes. (lasierra.edu/ centers/hcym).

Distancia: 66 kilómetros de Los Ángeles.

Distancia: 160 kilómetros de Simi Valley y a 87 kilómetros de Los Ángeles.

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Centro de medios (Simi Valley, California): Allí está localizado uno de los principales centros de medios de comunicación adventista del mundo (sdamedia.org). Aquí, son producidos programas como “Está escrito”, “La voz de la esperanza”, “Fe para hoy”, “Breath of life”, “Life talk radio”, además de CDs y DVDs (ampstudios.com). También, se realiza la atención de la escuela bíblica. El edificio tiene dos estudios de televisión, cuatro de audio y seis de edición de videos. Uno de los estudios tiene seis mil m² y cuenta con plateas para las grabaciones.

Distancia: 21 kilómetros de la Universidad La Sierra y a 95 kilómetros de Los Ángeles.

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Universidad de Loma Linda (Loma Linda, California): Este es el centro más importante de estudios y enseñanza sobre salud de la iglesia adventista (llu.edu). Su hospital es referente nacional en pediatría y cardiología, y es conocido por su actividad pionera en el tratamiento del cáncer con protones (lomalindahealth .org). La longevidad de la comunidad adventista local ha sido estudiada por numerosos especialistas del mundo, y fue destacada por la prensa de varios países. Los cursos en el área de la salud atraen anualmente a cuatro mil alumnos de ochenta países. En el predio también está localizado el Geoscience Research Institute, la sede central general adventista sobre Creacionismo (grisda.org). abril - junio 2012

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Internet, las redes sociales y el ambiente de trabajo

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ué tienen en común Internet y el desempleo? Si tú sabes usarla, nada. El problema es que mucha gente confunde la oficina o el taller de trabajo con la sala de su casa, y utiliza esta importante herramienta de forma errada. Y eso puede llevarte a un problema, tal como ocurrió al diputado estadounidense, Anthony Weiner, quien usaba Twitter para enviar fotos sensuales a sus seguidoras.

Tal vez no lo sepas, pero las computadoras de las empresas pasan por auditorías. Es decir, aquello que tú haces en la web, incluso los mensajes corporativos, pueden ir directamente a la mano del jefe, en forma de informe. Sí, eso es legalmente permitido. Cuando hay normas previas sobre la circulación de datos en la red empresarial, la grabación de las informaciones de acceso no es considerada como invasión de privacidad.

Esa medida fue adoptada debido a la caída de productividad registrada en algunas compañías después de la instalación de Internet. Una investigación realizada por la agencia Triad, por ejemplo, reveló que el 80% de los funcionarios utilizan hasta tres horas del tiempo de su trabajo navegando en Internet, con actividades que no contribuyen al servicio laboral. Un 27,3% emplea tiempo exagerado con mensajes; y un 40,9% busca y envía chistes a sus colegas.

Además de esto, en la Rep. del Brasil, por ejemplo, el artículo 482 de la Consolidación de las Leyes del Trabajo permite que un empleado sea desafectado con justa causa cuando hay un mal procedimiento, quiebre de confianza o

Para no caer en la red Intimidad

Redes sociales

Evita enviar, desde la computadora de tu trabajo, mensajes con expresiones íntimas o contenidos románticos, aunque sean a tu cónyuge.

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Búsqueda de empleo Evita usar el e-mail de la empresa para buscar empleo en otro lugar.

Archivos No uses las computadoras de la empresa para almacenar contenidos particulares. No bajes ni instales ningún programa sin obtener la autorización expresa del responsable.

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insubordinación, entre otros, que violen la “seguridad de la información”.

Y hay más. La empresa no necesita comprobar que infirió en juicio, basta que no se hayan respetado las reglas.

Entre los mayores errores en el uso de la computadora en el trabajo están los siguientes: reenviar cadenas de correos a los amigos; mirar videos de Youtube; usar e-mail de la empresa para asuntos o problemas personales; intercambiar informaciones en conversaciones virtuales en MSN (o páginas de chats); jugar en la Red; usar Facebook, Twitter y otras redes sociales, para hablar mal de la empresa, del jefe, de los compañeros de trabajo, o revelar informaciones estratégicas y confidenciales; navegar en páginas impropias y la instalación de softwares. Si tú no quieres formar parte del grupo que solo usa Internet para buscar trabajo, aquí van algunos consejos:

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Mensajes Reserva tiempo para leer los mensajes y para organizarlos.

Responde enseguida los que sean urgentes.

No uses las redes sociales como Twitter, Facebook u otras para expresarte mal, divulgar secretos de la empresa, dar indirectas, hacer chistes o colocar cualquier información o imagen que podría perjudicarte en el empleo.

Cristiano Stefenoni

es periodista, consultor de carreras y autor del libro Profesional de éxito (CPB).

Imagens: Fotolia

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La dimisión de un clic

POR

PABLO D. RAMOS

Ajustándose los

cinturones

Sospecho que nunca hice tantas oraciones juntas como la primera vez que viajé en avión. Desde la ventana del aeroparque Jorge Newbery, en la Rep. Argentina, observaba el inmenso artefacto que me llevaría, exactamente en tres horas y catorce minutos, hasta Ushuaia, en la porción de continente más austral del mundo.

Mi primo, experto en cuestiones aéreas debido a su trabajo, únicamente pudo acompañarme hasta la puerta de embarque, ya que es necesario tener un pasaje para poder continuar desde ese lugar.

Todo el tiempo que estuve con él, no demostré siquiera un gramo de temor. No era cuestión de revelar la revolución interna que el vuelo inaugural me producía.

Siempre me mostré superado, inmutable.

Pero, sabía que de ahí en más estaba solo.

Me detuve antes de atravesar un pasillo metálico que te conduce directamente a la nave. Me imaginé caminando lentamente, arrastrando los pies, escoltado por dos guardias corpulentos cuya mirada penetraban mi nuca, atentos a cualquier movimiento que denotara un intento de fuga. Esposado. Y allá, del otro lado del corredor, a modo de silla eléctrica o de inyección letal, el avión. Esperándome.

La aeromoza dibujó su mejor sonrisa y puso empeño en la bienvenida. Apenas respondí con un movimiento de cabeza.

Me pareció que no era de fiar una persona que está tan contenta cuando está a punto de viajar a más de 700 kilómetros por hora a diez mil metros de altura.

“Volar es el medio de transporte más seguro”, me repetí mentalmente, en un intento por autoconvencerme, pero nunca me funcionó la estrategia. Si bien las estadísticas no mienten en ese aspecto, tampoco lo hacen en las probabilidades

de sobrevivir a un accidente aéreo. Es decir, hay pocas chances de estrellarte pero, si eso pasa, no hay demasiado por hacer.

Tal vez, era esa imposibilidad de intervenir lo que hacía que volar me resultase tan complicado. Me senté, y ajusté mi cinturón de seguridad. “Ya está”, pensé y comencé una cantidad incontable de oraciones pidiendo a Dios que cuidara y guiara al piloto, esa persona extraña de quien solo conocí su voz cuando utilizó el altavoz para indicarnos dónde íbamos y cuánto demoraríamos en llegar. Allá arriba, uno depende completamente de las aptitudes y de las decisiones del piloto. Solamente queda aferrarse fuerte de los apoyabrazos... y confiar.

El avión comenzó a carretear, y yo continué con mis oraciones. Hice un repaso mental de todos mis seres queridos, y sentí la necesidad de abrazarlos una vez más.

Vi el resumen de mi vida en flashes, como correspondía a la situación.

Pero, lo que más me entristeció fue la duda que creció en mi interior cuando me di cuenta de que, si ese primer viaje fuese también el último, paradójicamente, el cielo no estaba tan cerca, para mí, como hubiera deseado. Aunque estuviese atravesando nubes a gran velocidad.

Mi relación con Dios era muy escueta y estaba deteriorada; ese “mano a mano” cotidiano había quedado reducido a una oración fugaz antes de correr para la oficina por la mañana temprano, y a una breve plegaria nocturna antes de dormir. Eso, sumado al pedido de bendición

por los alimentos, era todo. Nada más.

Aferrado de mi asiento, prácticamente abrazado al cinturón de seguridad, me di cuenta de la necesidad que tenía de Dios para poder afrontar esta vida sin miedos.

Porque solamente la confianza en el Piloto y la plena certeza de que su mano jamás estrellará nuestro vuelo hacen que el viaje sea confortable.

Ese día, llegué sin problemas a Ushuaia. El viaje, en retrospectiva, fue genial. Sin embargo, de cuando en cuando necesitamos de las turbulencias a fin de que comprendamos la importancia de estrechar vínculos con el Piloto, a fin de conocerlo mejor. Eso hace que podamos depender completamente del cuidado divino. Nosotros tenemos que hacer nuestra parte y colocarnos el cinturón de seguridad, como corresponde. Pero, hay momentos, en medio de la tormenta, en que no queda otra opción que sentarnos, agarrarnos firmemente del apoyabrazos y entregar a Dios por completo nuestro avión. Y confiar.

Pablo D. Ramos es instructor regional de Jóvenes Adventistas de la Asociación Argentina Central y vive en Paraná, Entre Ríos, Rep. Argentina.

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me pasó

POR

Un milagro en mi vida

C

orría el mes de noviembre de 2009, y comencé a tener algunos síntomas de malestar en mi cuerpo. Los médicos me indicaron que se debían a que tenía retención de líquidos. Así que me internaron en el hospital de mi ciudad (Concordia, provincia de Entre Ríos, Rep. Argentina). Me hicieron innumerable cantidad de estudios, de los cuales nunca se desprendía un diagnóstico claro y concreto. Pero, luego de una tomografía computada, se observó que mi hígado no tenía un aspecto sano.

Es así que se resolvió mi traslado a un centro médico de mayor complejidad, en la ciudad de Buenos Aires: el Hospital Italiano. Allí me diagnosticaron la enfermedad de Wilson. Esta enfermedad es un trastorno hereditario, poco común, en el cual existe demasiado cobre en los tejidos corporales. El exceso de cobre causa daños en el hígado y en el sistema nervioso; esto hace que los órganos afectados dejen de funcionar bien, lo cual conlleva resultados irreversibles, en su gran mayoría. Todo un problema para una joven de 18 años.

Los médicos intentaron frenar el avance y lograr una mejoría general con la aplicación de penicilina. Pero, no se obtuvieron los resultados esperados. Es por ello que se optó por el último recurso: un trasplante de hígado. Desde ese momento, mi nombre ingresó en la lista nacional, a la espera de un donante.

Mi estado general empeoraba día a día. Mis órganos, uno a uno, dejaban de funcionar. Pero, al contrario de lo que sucedía con mi cuerpo, mi ánimo era altamente positivo. Los médicos no entendían qué era lo que me mantenía anímicamente tan bien. Se preguntaban si yo no comprendía que, poco a poco, me estaba muriendo. Pero yo lo 30

DIANA NOEMÍ ACOSTA

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sabía. Era consciente de mi realidad; no obstante tenía algo que me hacía sobreponer a cualquier adversidad: el saber del cuidado de mi misericordioso Dios, y el poder de la constante oración de los hermanos de mi iglesia.

El tiempo pasó, y me suministraron plasma, ya que no tenía coagulación. Tuve constantes crisis de alergia, durante los cuales recibía dosis de adrenalina. Todas ellas, situaciones difíciles de poder sobrellevar. Pero sabía que Dios me sostenía y me daba fuerzas para seguir luchando.

El 12 de diciembre mi mamá me dice: “En este momento, todos nuestros hermanos de la iglesia están orando por vos. Comencemos a alabar a Dios, ya que hoy o mañana llegará el hígado apropiado para el trasplante”. Nuevamente, ese día me aplicaron plasma. Pero no todo estaba saliendo según lo planeado, pues derivó en una crisis muy fuerte, por la cual tuvieron que llevarme a la sala de Terapia Intensiva. A los treinta minutos de este hecho, el médico que me atendía se acerca a mi madre y le dice: “Señora, tenemos el hígado para su hija”.

El 13 de diciembre, a las 15:00, ingresé en el quirófano y me realizaron el trasplante. Al cabo de cuatro horas, los médicos informan que la operación había sido exitosa, pero que tenía que permanecer en observación en Terapia Intensiva. Estuve con respirador artificial y con problemas musculares. Pero la evolución continuaba avanzando. Ya en la sala de Terapia Intermedia tuve episodios de presión sanguínea muy elevada y un edema pulmonar. Pero, una vez más, Dios me sacó adelante.

Luego de quince días me dieron el alta, para poder estar en el lugar en el cual nos alojábamos. Al mes experimenté un rechazo del órgano trasplantado, y me administraron corticoides fuertes. A los 45 días, un riñón estaba dejando de funcionar, por lo cual permanecí quince días más internada.

Hasta que llegó el día en que pude regresar a Concordia, mi ciudad, y estar en mi casa, con mi familia, mis amigos y mis hermanos de la iglesia. Es decir, con todas esas personas que extrañaba tanto.

Pasaron los meses, y Dios cuidó de mí. Día a día, comprobaba que él había obrado un milagro en mi vida.

Todos los meses voy a control. El cabello no se me cayó tanto como estimaban los médicos. Tengo que tomar una gran cantidad de remedios; pero nada se compara con el gozo y la bendición que recibí de mi Padre celestial. Él me cuidó, me sostuvo y obró en mí. Soy una prueba viviente del poder de Dios, soy una prueba viviente del poder de la oración. Alabo al Señor por todas sus maravillas, nada es imposible para él. Hoy sé que Dios tiene un plan para mí, y estoy dispuesta cumplirlo.

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