Comunicado 001 de 2019 Política industrial y enfoque diferencial para las mipymes deben ser incluidas en PND
Considerando la importancia que tiene el Plan Nacional de Desarrollo 2019-2022 para la definición de las políticas y los recursos que se invertirán, así como de los aspectos en los que el Gobierno hará énfasis, Acopi Bogotá-Cundinamarca realizó el análisis del articulado y el Plan Plurianual de Inversiones (PPI) presentado por el Gobierno en días pasados. El gremio ve con preocupación que en los rubros de inversión presentados por el Gobierno no hay una destinación de recursos específica hacia la industria manufacturera, agregando que tampoco hay un enfoque claro hacia las micro, pequeñas y medianas empresas, que son más del 96% del tejido empresarial del país, generan de más del 70% del empleo y aportan cerca del 40% de PIB. Sobre el Pacto por el emprendimiento, la formalización y la productividad, en donde se debería hacer énfasis en el desarrollo económico nacional, se considera que se deben incluir propuestas que vayan encaminadas al fortalecimiento de las micro, pequeñas y medianas empresas, como la simplificación normativa y la actualización de Ley Mipyme, así como a programas de modernización y transferencia de tecnología que permitan reactivar la industria y utilizar la capacidad instalada. Para desarrollar estos últimos aspectos, que pueden apalancar el crecimiento y desarrollo económico, los recursos definidos en el Plan Plurianual de Inversiones para Emprendimiento y productividad; Ciencia, tecnología e innovación; Transformación digital; y Sostenibilidad, podrían ser insuficientes, pues van a tener solamente el 6,7% del presupuesto. Así mismo, la apuesta por la formalización, que se enfoca únicamente en las llamadas empresas de desarrollos tecnológicos innovadores que se creen, debería cobijar al resto de actividades económicas, incluido el comercio y los servicios. En este punto, es importante señalar que el acceso a financiamiento debería ser directo a las mipymes mediante bancos de primer piso, y no mediante entidades financieras de segundo piso que administren los recursos públicos.
Por otro lado, aunque es importante impulsar la economía naranja, sector que tendrá $65,1 billones para inversión, lo correspondiente al 6% del PPI, esto se destinará solo a 27 actividades económicas no manufactureras de las registradas en el CIIU, por lo que es necesario que se incluyan algunas de las otras 498 actividades económicas, por lo menos las que son generadoras de valor agregado y encadenamientos productivos, claramente con enfoque diferencial para las pymes, en vista de que estas son el 90,6% del total de establecimientos industriales, aportan el 32% de la producción bruta y el 27% del valor agregado. También se considera que el PND debe servir para generar un crecimiento sostenible y fortalecer la economía nacional frente a los vaivenes de la economía y la política internacionales, tales como el nerviosismo de los mercados por la guerra comercial entre EE.UU. y China, la caída del crecimiento económico mundial, el punto muerto del Brexit y la situación venezolana. Asimismo, podrían plantearse soluciones al déficit comercial colombiano que en 2018 llegó a US$ -7.113 millones, o a las variaciones negativas de la producción real y el personal ocupado, que fueron de -0,8% y -0,9%, respectivamente, en diciembre del año pasado frente al mismo mes en 2017, cifras que no logran despegar, así como las ventas reales, que sólo variaron 0,6% en el mismo periodo. Por último, aun cuando hay avances en la simplificación normativa, es necesario crear un marco de mejora regulatoria, con el fin de reducir la normatividad excesiva, cambiante, compleja, costosa e inequitativa; a lo que deben añadirse las políticas diferenciales para las mipymes como un aspecto imprescindible para la creación y sostenimiento de la equidad. Acopi Bogotá-Cundinamarca insiste en la necesidad de tener una política industrial que fomente principalmente la manufactura, la cual permite dominar, crear y aplicar tecnología y ciencia de forma intensiva, generar empleo formal, bien remunerado y altamente calificado, todo esto acompañado de una revisión exhaustiva de los acuerdos comerciales suscritos por Colombia que no estén arrojando los resultados prometidos en anteriores gobiernos. El gremio reitera, la capacidad de generar riqueza es más importante que la riqueza misma.