Inteligencia artificial, una aliada de la agricultura

Inteligencia artificial,

una aliada de la agricultura

Vienen años apasionantes por delante. la tecnología está haciendo posible lo que parecía imposible y va solucionando problemas de difícil solución. En el mundo de la agricultura el principal desafío es hacer frente al aumento de la población mundial a la que habrá que alimentar con menos recursos. Y para conseguir una agricultura más eficiente va a ser necesario utilizar nuevas herramientas como la inteligencia artificial (iA) o la robótica, dentro de la llamada digitalización del sector. El desarrollo de la tecnología está permitiendo que la iA ofrezca un valor real. de la investigación se está dando paso a la acción y su uso en la agricultura se está desarrollando muy rápido.

Y es bueno que así sea porque la esperada falta de mano de obra en la agricultura en los próximos años plantea un verdadero reto al sector. El uso de la iA y de la robótica en el campo es una necesidad y poco a poco van apareciendo compañías que trabajan en prototipos para dar respuesta a este desafío. los expertos hablan de una hecatombe al referirse a la falta de humanos en la agricultura y que es necesario tomar las medidas que permitan acelerar su automatización. Ya vemos máquinas que trabajan en la supervisión y selección de bananas, en la recolección de fresas, en las viñas, en la eliminación de malas hiervas… Es un buen comienzo. cuando hablamos de automatización podemos pensar que existe el riesgo de que las máquinas sustituyan al hombre, pero en el caso concreto de la agricultura, hay trabajos para los cuales es difícil encontrar mano de obra y las máquinas serían una parte de la solución. las nuevas generaciones se sienten cada vez menos atraídas por el trabajo del campo y desde el sector se está haciendo un esfuerzo para revertir la situación. Aunque se hable mucho de iA, hay pocas personas bien formadas en esta materia. Ellas podrían desarrollar más y mejor todas las puertas que abre la iA.

Es cierto que en el mundo de la agricultura debemos diferenciar las grandes explotaciones, con potentes grupos económicos por detrás, de las pequeñas en las que encontramos negocios mucho más familiares. Para los primeros la inversión en tecnología es mucho más rentable mientras que para los segundos aparece como algo inalcanzable. Pero para todos es igual de importante. En un mundo cada vez más digitalizado existen herramientas que pueden ayudar a conseguir las mejores cosechas posibles, rentabilizar el tiempo, reducir los costes. Y hay aplicaciones al alcance de todos. Es este aspecto falta formación entre los agricultores y todavía se nota cierta desconfianza hacia lo desconocido. Al hablar de robots y máquinas, la limitación financiera es evidente ya que su adquisición sigue siendo cara, pero se encuentran ya nuevas modalidades como “Robot as a service”, que permite alquilarlo. En la próxima década muchas cosas van a cambiar y entre ellas, la forma de trabajar en los campos. 