El itinerante opina: Raphael Huerta

Sí hay futuro para la moda en México ______________________________________

En este tiempo de pandemia, lo más sorpresivo en el entorno de la moda mexicana, es que ahora se han establecido mejores canales de comunicación entre los diferentes segmentos y actores de la industria, hoy gozamos de una relación mucho mejor establecida a pesar de la distancia y nos mantenemos en la firme postura de que, cuando esta pausa termine, la moda comenzará un nuevo andar en el que habrá mayor empatía, apoyo y por encima de todo, respeto entre colegas.

Por Raphael Huerta/ ksnewspuebla@gmail.com

El fin de semana pasado tuve la oportunidad de participar en una charla virtual con Jacob Pulido, director de ModaEmprende, con la finalidad de dar a conocer el lanzamiento del primer concurso de emprendimiento de moda, en éste, contamos con la compañía de más de 40 escuchas, todos ellos, interesados en conocer a fondo los detalles del evento para posteriormente concursar con sus proyectos.

Se resolvieron dudas y establecieron parámetros para dicho concurso, pero, lo que más llamó mi atención fueron unas palabras que dijo Pulido durante la plática: “Ya es momento de que México tenga verdaderos empresarios de moda que estén enfocados en un segmento real de compradores y que tengan la capacidad de manejar su negocio de forma que se obtengan ganancias de verdad cuantificables”. Es increíble poder observar el surgimiento de una plataforma basada en enseñar al emprendedor a ser empresario, pero más increíble es ver que estos emprendedores no se dan por vencidos ante el panorama actual.

Contrario a lo que muchos creerían, nadie - tal vez unos cuantos- se ha bajado del barco durante esta época de desconcierto, al contrario, muchos diseñadores, editores, fotógrafos, maquillistas, patronistas, sastres, etc., han preferido utilizar las redes sociales como un músculo para establecer la comunicación no sólo con su clientela sino con las generaciones más jóvenes que aspiran a un futuro dentro de la moda mexicana. De este modo, han estado compartiendo, además de experiencias, los conocimientos adquiridos durante su trayectoria con un vastísimo grupo de personas, mismas que a su vez, comparten la información descubierta. En contraste a lo que muchos pudieron pensar, este encierro, generó una gran necesidad de comunicarnos, y lejos de permanecer indiferentes, hemos preferido abrirnos y colaborar con los demás, y así, casi sin querer, construimos un puente de solidaridad; pleno de técnicas, ideas, estadísticas, metodologías, cifras, y procesos que están ayudan a más de uno para poder seguir adelante con sus negocios a pesar de la pandemia.

No es que estos puentes de ayuda no existieran previamente, lo que sucede ahora, es que el hermetismo es muchísimo menor. Parece ser que finalmente, llegamos al entendimiento de que, en la industria de la moda mexicana, lo mejor no es trabajar en un solitario protagonismo sino en un nutritivo equipo, en el que la sinergia lograda no es más que el resultado de que cada uno de los integrantes de éste tiene una capacidad particular, y al conjugarse con las facultades de los demás, logra incrementar la fortaleza de nuestra industria, mientras las debilidades descienden favorablemente.

Si seguimos así cuando la crisis sanitaria haya terminado, por supuesto que habrá un futuro para la moda nacional, porque además de vender moda, le ofreceremos a los consumidores una razón de peso para elegir lo que nosotros creamos, y esa razón es que la propia industria de la moda mexicana creyó y apostó por sí misma desde adentro. KS