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AGRICULTURA · Tecnología aumenta producción de cebolla hasta cinco veces más

Tecnología aumenta producción de cebolla hasta cinco veces más

El cultivo de cebollas ha mejorado sus frutos con la incorporación de tecnología de punta, acompañado del buen manejo de las tareas agrarias.

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El ingeniero agrónomo Manuel Ocampo, vio los resultados de la aplicación de tecnología en 38 hectáreas, que pasaron de cosechar 10.000 a 50.000 kilos por hectárea de este bulbo.

El profesional se refirió a la utilización de semillas, tablones, riego, todos con maquinarias en la zona de Curuguaty, sobre la Ruta 13, límite entre Caaguazú y Canindeyú.

“Este sistema de trabajo se está utilizando en Argentina y trajo un productor argentino casado con una paraguaya. Empezó a producir en 14 hectáreas. Luego le hicimos seguimiento con una empresa brasileña (Ocean Quality) proveyendo insumos al productor. Ellos trajeron su sembradora, tablonadora, fumigadora. El productor paraguayo puso la tierra”, expuso.

Adicionalmente se incorporó un riego con el sistema pivot, más tarde se corrigieron falencias del suelo, del cual se desprendió el uso de tablones. Después inició la siembra con la máquina sembradora para el efecto.

El ingeniero comentó que en el sistema tradicional los productores utilizaban un kilo de semillas para sembrar de forma manual y obtener una hectárea. Con la máquina, bajo el modelo de siembra directa, se lanzan cuatro kilos de semillas por hectárea, tres veces más que lo convencional.

“En tablones de 1 metro 20 centímetros, entran 12 hileras de cebolla. Cuando en los tradicionales se usa 40 centímetros de melga en promedio, con este se usa hasta 15 cm. de melga. Una vez que están germinando las cebollas se utiliza el herbicida pre emergente”, detalló.

La productividad con este sistema es hasta 50.000 kilos por hectárea. Comentó que el promedio de la producción nacional anteriormente era de 10.000 k/ha. “Ahora es cinco veces más”, celebró.

Con relación al tiempo de desarrollo, mencionó que depende de la variedad que se importa de Argentina y Brasil. Algunas son precoces, otras de más larga duración. Pero se maneja que su ciclo de maduración es de hasta seis meses.

“Este sistema de trabajo se está utilizando en Argentina y trajo un productor argentino casado con una paraguaya. Empezó a producir en 14 hectáreas. Luego le hicimos seguimiento con una empresa brasileña (Ocean Quality) proveyendo insumos al productor. Ellos trajeron su sembradora, tablonadora, fumigadora. El productor paraguayo puso la tierra”

HERRAMIENTAS NECESARIAS

Hugo Zarza, Director General de Programas de Investigación del Instituto Paraguayo de Tecnología Agraria (IPTA), consideró que la biotecnología como herramienta genética aún no se aplica mucho en el país, comparado con los vecinos, al menos con las hortalizas.

Relató que en países europeos hoy en día la mano humana no toca el producto, gracias a la mecanización y automatización de las tareas agrícolas, desde la producción de semillas hasta la cosecha. Sugirió que tal es la tecnificación que los rendimientos son mayores.

Con relación a lo que hay que tener en cuenta se refirió en primer lugar al suelo, porque si la fertilidad no está acorde con las exigencias del cultivo, el rendimiento no es el ideal, y Paraguay produce aproximadamente entre

15 y 20 toneladas de cebolla anuales, muy bajo frente a Argentina que produce alrededor de 50 mil y 70 mil toneladas.

En segundo lugar, habló del riego, cuya tecnología a su criterio es escasamente usada en el país. Luego están las variedades, y Paraguay no posee variedades propias. Evaluó que el uso correcto de las variedades es también importante para la aclimatación.

“Tenemos dos tecnologías que podemos corregir, preparación de suelo, fertilización, uso de variedades, y si se puede meter mecanización sería importante”, agregó.

Posteriormente, mencionó que otro factor a tener en cuenta es el control de plagas, a lo que sumó que en estos días se presentó el problema de aclimatación de algunas variedades, que muchas veces empiezan a florecer y el resultado de la cebolla no es en la condición deseable para los parámetros de una buena producción.

Por otro lado, se refirió a la época de siembra; tempraneras, intermedias y tardías. “Lo ideal sería sembrar en marzo la tempranera, abril la intermedia y mayo la última etapa de siembra. Para cada época hay una variedad bien definida. No es bueno sembrar una cebolla de maduración tardía en forma tempranera”, sostuvo.

Por otra parte manifestó que el trasplante demanda mucha mano de obra, y con la siembra directa se evita esta parte.

ASPECTOS A TENER EN CUENTA

Líder Medina, técnico especialista en el cultivo, con especialización en EMBRAPA Hortalizas (Brasil), puntualizó que la cebolla es una planta originaria de la Mesopotamia, lo que sería actualmente Irak y alrededores.

Pertenece taxonómicamente a la familia de las Aliáceas y hoy en día se consume en todo el mundo donde llega la civilización.

“Es una planta exigente al fotoperiodo y la temperatura. Eso quiere decir que hay respetar la época de siembra según la variedad para una buena bulbificación y productividad. La cebolla necesita días cortos y temperatura amena a bajas para el crecimiento de las hojas, y días más largos y temperatura más altas para su bulbificación”, describió.

Señaló que la acumulación de frío por dos a tres semanas con menos de 6°C puede inducir a la floración que es un evento no deseado en el cultivo de cebolla porque los bulbos de plantas que han florecido son desechados, por lo que la planificación del cultivo es fundamental para obtener un resultado óptimo.

VARIEDADES

La época de siembra va de marzo a junio. En marzo y abril se siembra la variedad de ciclo corto, denominada Valencianita Selección La Banda y Valencianita Angaco, esta última prácticamente no florece.

La siembra en abril se puede seguir con Valencianita Selección La Banda y Angaco. A fines de abril a mayo, se cultivan las variedades media tempranera Poranga, Alborada.

En la segunda quincena de mayo los híbridos recomendados son Bella Dura de Sakata y Kbuena de Plastiagro, Rainha. En junio ya se puede sembrar los tardíos como Salto Grande e Imperial BR 29.

PRODUCCIÓN DE MUDAS DE BUENA CALIDAD

Para lograr este objetivo es importante tener un análisis de suelo de tal forma a aplicar cal agrícola, materia orgánica y fertilización química adecuada.

Lograr mudas de buena calidad requiere densidad de siembra adecuada, de tres a cinco gramos de semillas por metro cuadrado y utilizar fertilización química de 50 kilogramos de fertilizante triple, 15 por cada kilo de semilla de cebolla.

Medina aconseja trasplantar mudas de 15 a 18 centímetros de largo y grosor del tallo de 6 milímetros de diámetro.

En cuanto a la densidad de plantación: trasplantar 14 mudas por metro lineal, la distancia de hileras depende de cómo se va a manejar el control de malezas y puede ser 20, 30, 40 centímetros o en parcelas entablonadas. El número de plantas es alrededor de 200 a 300 mil plantas por hectáreas.

Acerca del manejo del cultivo, se enfocó en el control de enfermedades, afirmando que la enfermedad más común en cebolla es la antracnosis, se controla con Carbendazim y los fungicidas compuestos que contengan un Estrobirulina más triazol.

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