La Llamarada #35 - Octubre 2016

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en debate PAG.6 y 7

Con el ascenso de un gobierno conservador y de derecha como el de Macri se ponen aún más trabas a las demandas fundamentales de las mujeres y de los colectivos disidentes. Es fundamental redoblar nuestra lucha por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito, por el desmantelamiento de las redes de trata y prostitución, y por poner fin a los femicidios y la violencia machista. Sin feminismo no hay socialismo.

INTERNACIONAL: “Estado español: La estabilidad del poder sin gobierno” / HISTORIA: “El legado del Che y la vigencia de su proyecto político” / “De regreso a octubre” / ECONOMÍA: “El presupuesto de los ricos”

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sumario

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Pág. 3 | Editorial Pág. 4 | Nacional: FMI, “mini Davos” y otras yerbas Pág. 5 | Nacional: La CGT y el terreno ganado por los movientos sociales Pág. 6 | En Debate: Contra la violencia patriarcal, organización feminista y popular Pág. 8 | Economía: El presupuesto de los ricos Pág. 9 | Internacional: Estado español. La estabilidad del poder sin gobierno Pág. 10 | Historia: El legado del Che y la vigencia de su proycto político Pág. 11 | Córdoba: La lucha contra Monsanto. Crónica de una victoria popular Contratapa | Juventud: Para que vivas hay que organizar

El 25 de octubre de 1917 es un día cargado de significados y esperanzas para los pueblos del mundo y nuestra clase obrera internacional. Es el día en el que se consagra en la toma del poder el proceso revolucionario ruso, que marcará a fuego todo el siglo XX, y que será emblema y enseñanza para los luchadores del mundo entero, al tiempo que partirá aguas en la izquierda a nivel global.

La Rusia Zarista El Imperio ruso era una aristocracia gobernada por la dinastía de los Románov desde 1613. Para inicios del siglo XX, Rusia era una potencia de tercer orden, con un fuerte atraso y una mayoría campesina sumida en la peor de las pobrezas. Con ello contrastaba la industria, insertada por capitales europeos a fines del siglo XIX, que desarrolló centros urbanos que concentraron grandes colectivos obreros en Petrogrado y Moscú.

En 1898 se realiza el primer congreso que da nacimiento al Partido Obrero Social-demócrata Ruso de ideología marxista. Cinco años después se producirá una división que será histórica. Las causas fundamentales se debieron a los debates sobre cómo debía ser el proceso democrático-burgués y el lugar que ocupaba la alianza de clases obrera-campesina en dicho proceso así como la forma en que se organiza el partido para tales tareas. Del lado de Lenin quedarían los bolcheviques (mayoría), del de Mártov los mencheviques (minoría).

1905, ensayo de la revolución Tras la contundente derrota zarista en la guerra ruso-japonesa de 1904, se agravan las tensiones sociales y la crisis económica, lo que derivará en el “domingo sangriento”, una masiva movilización popular masacrada por el zarismo.

Estas luchas y la ebullición por abajo que se gestaba marcarían el camino revolucionario del pueblo ruso. Es allí donde nacerán los órganos revolucionarios, expresión del poder obrero y popular, conocidos como Sóviets (o consejos). A su vez, se obtendrán enseñanzas de alcance mundial: “Es posible que el prole-

tariado de un país económicamente atrasado llegue antes al poder que en un país capitalista evolucionado…”1. El proceso de 1905 será el “ensayo general” de la revolución que tendrá lugar en octubre de 1917.

Hacia la toma del poder Luego del proceso de alza de 1905, el zarismo realiza algunas concesiones para apaciguar las luchas, entre las que se encuentra la conformación de la Duma (parlamento) y la libertad de prensa. Luego del fallido intento insurreccional que lleva a cabo el Soviet de Moscú, comienza un receso revolucionario que dura varios años.

La gran guerra librada en 1914 vuelve a ser el desencadenante y acelerador del proceso revolucionario. Los bolcheviques se proponen transformar la guerra imperialista en guerra civil. Esta postura rompe con la Segunda Internacional hegemonizada por posiciones nacionalistas a favor de la guerra.

El desastre de la guerra fortalece la posición bolchevique, se agudiza la crisis económicasocial, lo que deriva en una crisis política y concluye en la insurrección popular del 23 de febrero de 1917 que termina con tres siglos de aristocracia zarista.

“La leyenda de la espontaneidad –va a decir Trotsky- no explica nada.” Para lograr la insurrección fue necesaria la experiencia acumulada de 1905, la fuerza organizada, pero principalmente la dirección política y pedagógica ejercida por el partido de Lenin.

El gobierno provisional implantado en febrero contenía un carácter burgués. La presión ejercida desde los Soviets fue desplazando la composición liberal y terminó por poner al frente de la Duma a Kerenski como repre-

sentante del ala reformista. Cuando estalla la revolución de febrero Lenin se encuentra exiliado en Suiza, a su regreso plantea un viraje contundente de la línea bolchevique en función del cambio sustancial en las relaciones de fuerza en la lucha de clases. Esa orientación quedó sintetizada en las famosas Tesis de Abril. En ellas se propone desenmascarar al gobierno provisional capitalista, terminar con la guerra imperialista, construir “La guardia roja” destinada a tomar el poder y acuña su famosa consigna que proclama: “Todo el poder a los Soviets”. Durante estos meses el gobierno de Kerenski persigue y asesina a dirigentes bolcheviques. Estos últimos ponen en marcha un minucioso plan insurreccional el 24 de octubre. El 25 toman el Palacio de invierno. Kerenski escapa. Los Soviets toman el poder y se constituye la República Soviética. De inmediato se llama a elecciones y se avanza con las exigencias del pueblo obrero y campesino: reparto de tierras, fin de la guerra y edificación del orden socialista.

Desde el triunfo hasta la disolución de la URSS el proceso estuvo atravesado por múltiples contradicciones, por dificultades, por el asedio enemigo, y por una desviación política-ideológica que costaría muy caro a los revolucionarios de todo el mundo. Sin negar ese devenir, la revolución de octubre sigue siendo uno de los capítulos más altos de la lucha de la clase trabajadora. Aun en los momentos más oscuros del ascenso estalinista, la URSS cambió el tono general de la lucha de clases en todo el mundo.

Algunas conclusiones…

Las enseñanzas que venimos recogiendo del abnegado pueblo ruso y de la figura

destacada de Lenin, no contienen un carácter local o nacional, sino internacional. El poder soviético -germen del comunismo- se muestra como la forma de organización triunfante a adoptar por los pueblos decididos a marchar hacia el socialismo.

Resulta ineludible la importancia de la construcción de un partido de vanguardia obrero, ideológicamente compacto y con una altísima disciplina. Sin este hubiese sido imposible mantener el poder en manos de los obreros y campesinos, y esa es la esencia del leninismo: La lucha por el poder.

Por otro lado el rol pedagógico del partido en sus políticas de masas hizo posible desatar las luchas y arrojar las consignas en los momentos en que debía hacerlo, pues comprendió el avance en la conciencia del pueblo en su propia praxis. El internacionalismo bolchevique por la causa proletaria expresado en la construcción de la lll Internacional, la revolución contra los dogmas -incluso dentro del propio marxismo- y la capacidad de construir hegemonía y aunar en una misma causa a obreros, campesinos e intelectuales son algunas de las enseñanzas que no podemos dejar de mencionar.

A 99 años de aquellos acontecimientos, se vuelve fundamental hoy retomar las banderas del socialismo con una memoria activa, con un estudio profundo sobre las luchas de nuestra clase que nos permita iluminar el sendero por el que caminamos, al tiempo que nos muestra un horizonte bien amplio, repleto de dificultades, pero posible y más vigente que nunca.

1. “Resultados y perspectivas. Las fuerzas motrices de la revolución”, L. Trotsky, 1906

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os CEO’s y accionistas que ocupan el gobierno hacen los anuncios. El propio presidente, en conferencia de prensa, mira a la cámara y tomando prudencial distancia en sus palabras, ensaya una voz de congoja. Falsamente compungido anuncia las calamitosas cifras de pobreza del país que preside hace casi un año. Habla como si se tratase de un médico comunicando un diagnóstico pesimista que nada tiene que ver con él, y no como el presidente que exime de impuestos a los ricos y despide decenas de miles de empleados públicos. Un tercio de los habitantes por debajo de la línea de pobreza; 32%, según el INDEC. Una cifra que excede ampliamente la cantidad de desocupados, y que ratifica que millones de trabajadores que poseen empleo no pueden escapar de la escasez. Ese tercio de habitantes incluye a desempleados, a muchos trabajadores precarizados, pero también a otros empleados formales. Como ejemplo de esto, basta señalar que muchos trabajadores bajo convenio poseen salarios iniciales bastante por debajo del valor de una canasta básica, hoy estimada en $12.500 aproximadamente. Debe tenerse en cuenta, además, que el cálculo sobre dicha canasta ni siquiera contempla el pago de un alquiler. Pero así y todo, quedan debajo de esa cifra los sueldos de la mayoría de los docentes con un cargo, los de la base del escalafón de los empleados públicos municipales y provinciales, y el propio Salario Mínimo pactado por la burocracia sindical, que de móvil tiene poco y de mínimo demasiado, y hoy se estanca en insignificantes $7.560.

Si hablamos de pobreza infantil, las cifras recientemente anunciadas mediante la EPH (Encuesta Permanente de Hogares) del propio INDEC trepan casi a la mitad del total. El 47% de los niños menores de 14 años son pobres. Si quien mide es la UCA (Universidad Católica Argentina, una usina reaccionaria que Cambiemos no podría acusar de “desestabilizadora”), las cifras son más

tétricas: según sus mediciones, los niños pobres superan la mitad del total, un 56%, es decir casi siete millones. De ellos, más de un millón y medio se alimentan mal, y medio millón pasa hambre diariamente (La Nación, 02/08/2016).

Macri y sus gerentes dan discursos como recién asumidos. Nueve meses de gracia, pareciera solicitar el presidente: nueve meses donde a los millones de pobres e indigentes ciertamente heredados del kirchnerismo, el macrismo y sus aliados le sumaron velozmente más de un millón y medio de personas. Las estadísticas siempre remiten a lo recibido, como si la fecha de asunción fuera siempre la de esta mañana, conforme va avanzando el calendario.

La avanzada de los CEO’s se da en un plano económico-coyuntural, desde luego, depreciando el salario ante una inflación desmedida. Pero también en un plano estructural e ideológico. En el primer aspecto, el macrismo avanza planteando una reforma del Estado: nuevas tandas de despedidos, proyección de una reforma laboral flexibilizante, reorientación de funciones del área pública; cierre de programas públicos, e ingreso de ONG’s y empresas a hacerse cargo de manera directa de otros. En cuanto a la avanzada ideológica, negación del genocidio de la última dictadura (y hasta de la propia cifra de desaparecidos), exaltación del que mata en defensa de la propiedad privada para legitimar la represión y el gatillo fácil, discurso “modernizador” para legitimar el desguace de áreas del Estado. La apología oficial del linchamiento del ratero o el ladrón vulgar son la punta de lanza de una escalada represiva contra el pobrerío. La “justicia por mano propia”, muy distinta de la justicia popular, es siempre ponderada en resguardo de la propiedad y alentada por los voceros policiales que liberan zonas para el robo y el verdadero crimen organizado, por los multimedios que lucran con la inseguridad, por los funcionarios que no resisten una auditoría de su patrimonio.

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Las luchas en curso, las luchas por ta el cansancio, y los que reabrieron el ciclo venir de endeudamiento externo, no son idénticos; Mientras los de arriba avanzan, los de abajo no nos quedamos quietos. De manera aún embrionaria y descoordinada, el pueblo da pelea por sus condiciones de vida. Tras la Marcha Federal, quedó en evidencia la disposición de amplios sectores a dar pelea, como también el carácter retardatario de las direcciones sindicales burocráticas.

Las conducciones de CTERA y los distintos fragmentos de las CTA llaman a acciones, pero de manera espasmódica y dividiendo la lucha. Mientras plantean en declaraciones públicas la necesidad de un paro nacional, hacen poco por organizar desde abajo un plan de lucha en sus sectores, más temerosos de un desborde por abajo que de la avanzada de la propia patronal. A su vez, el papel de la recientemente unificada CGT queda en evidencia: acorde a la prédica de Massa (y coherente con la recepción de millones para las obras sociales que administran), prima la cautela, las entrevistas con funcionarios, el dialoguismo, el pedido limosnero de un bono de fin de año sin monto, pero no la concreción de un indispensable paro general.

En el plano defensivo, necesitamos con urgencia avanzar en acciones amplias y masivas contra el ajuste. Exigirle a la burocracia sindical que abandone su siesta, que no divida las luchas en curso, que concrete el llamado a un paro general. A su vez, con ese planteo debemos seguir empujando desde abajo, en cada espacio de laburo, en cada espacio multisectorial, reivindicando nuestra identidad como laburantes y lejos de cualquier cruzada “ciudadana”. En el plano político, es cada vez más necesaria la construcción de un frente político y social que pelee por nuestros intereses de clase, desde el anticapitalismo y con clara perspectiva socialista. Nuestra expectativa, tampoco hoy, puede estar centrada en ningún mal menor.

Ciertamente, los que pregonaban el “Patria o Buitres” y pagaron la deuda externa has-

no representan al mismo bloque del capital ni administran el estado del mismo modo… pero sí obedecen a los mismos intereses de clase. Una clase que, justamente, no es la nuestra. Las opciones para nuestro pueblo no pueden ser elegir entre los que en su década ganada gobernaron de la mano de los que embolsan oro y derraman cianuro, o los que rápidamente les quitaron las retenciones y derechos de exportación a esas mismas mineras. La opción no puede ser escoger entre los que reprimen frente a Lear en la Panamericana o quienes nos apalean como en Cresta Roja en la autopista Richieri; entre los que exoneran docentes en Tierra del Fuego o los que persiguen delegados y arman listas para incrementar los despidos desde su Ministerio de Modernización. De nada sirve ver quién lidera el ránking del saqueo: si aquellos que fugan divisas rumbo a empresas offshore, o los que las almacenan en bolsos y dragones de hojalata.

Nuestro camino está marcado por la lucha: es la única alternativa que tiene la clase trabajadora para revertir la miseria capitalista. Ese camino lo marcan los compañeros que no dan tregua y acamparon durante días en la Plaza de Mayo; lo marca el movimiento de mujeres que lucha contra el patriarcado, los femicidios y el oscurantismo; lo señalan los docentes y estatales que se organizan contra la privatización y los despidos. Una lucha que requiere de la unidad de acción e independencia de clase. Una pelea para que los que gerencian nuestra miseria y embolsan millones, alguna vez, dejen de ser quienes dirigen nuestro destino.

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Mientras el gobierno de Macri se rodea de empresarios multimillonarios buscando el aumento de las inversiones, el pueblo argentino se va hundiendo cada día más en la pobreza. Sólo la lucha unitaria de los trabajadores podrá revertir esta situación. dial que está “abierta al mundo”, idea so-

en un contexto de creciente bancarización de

20 de septiembre. Sucede que a pesar de las numerosas políticas con las que ha enviado señales a la burguesía mundial, los dólares no llegan. Un repaso por algunos hechos claves en ese sentido son: la participación del presidente en el Foro Económico Mundial en enero, la visita de Barack Obama a nuestro país en marzo, el acuerdo con holdouts en abril y los acuerdos de inversión con China en el mes siguiente, la participación en la reunión regional del Foro Económico Mundial en Colombia, el ingreso de Argentina en calidad de “observadora” a la Alianza del Pacífico y el apuntalamiento de las relaciones bilaterales con países de ese espectro como Chile, México, Perú. Y, la frutilla del postre, la misión del FMI para auditar las cuentas nacionales y las proyecciones del PBI, que desde hacía una década no se realizaban.

Pero además, como la burguesía comprende perfectamente el apriete político que supone para un gobierno ajustar y atacar a la clase obrera para debilitarla, requiere además una conducción política que ofrezca garantías de continuidad. Lisa y llanamente, esperan a los resultados de las legislativas del 2017 para observar si el proyecto de la “Argentina abierta al mundo” tiene consenso y posibilidades de continuidad.

El “Mini Davos”: poner a los bre la cual insistió nuevamente Macri en la las transacciones. trabajadores de rodillas Asamblea de las Naciones Unidas el pasado Del 12 al 15 de septiembre, el gobierno nacional reunió en el Centro Cultural Kirchner a casi dos mil empresarios en lo que se dio en llamar el “Mini Davos.” El evento realizado por la Agencia Argentina de Inversiones y Comercio Internacional que dirige Juan Procaccini se convocó bajo el nombre “Foro Argentino de Negocios e Inversiones” y tuvo por objetivo reunir a la mayor cantidad posible de inversionistas criollos y extranjeros para hacer realidad la promesa de campaña de Mauricio Macri, hasta ahora frustrada, de “lluvia de inversiones”.

El gobierno esperaba “mostrar el país” y apuntaba a crear inversiones por US$175.000 millones, distribuidas de la siguiente manera: Energía y minería: US$76.000 millones; Infraestructura: US$75.000 millones; Agroindustria: US$15.000 millones; Bienes industriales: US$5.000 millones; Servicios y tecnologías: US$7.000 millones”.

Lo que ellos quieren Cerca de 2 mil asistentes de 68 países es el número. Entre los invitados figuran los nombres de importantes CEOs como Jane Fraser (CEO para América latina del Citigroup), Muhtar Kent (Coca-Cola), Gonzalo Ramírez Martiarena (Louis Dreyfus), Robert Dudley (British Petroleum), Martín Marrón (JP Morgan), Fahad Al-Gergawi (CEO de la Dubai Investment Development Agency), Tim Draper (fundador de Draper Associates). Y entre los burgueses locales, Paolo Rocca, presidente & CEO de Techint; Luis Pagani, presidente de Arcor; Martín Migoya, cofundador y CEO de Globant y Marcos Galperin, cofundador y CEO de Mercado Libre. También participaron del evento gobernadores, legisladores y buena parte del gabinete nacional.

A lo largo de los encuentros, Cambiemos intentó mostrarse a la gran burguesía mun-

Pero ¿por qué las inversiones llegan a cuentagotas? Porque la burguesía, a pesar de los “gestos” de Macri, exige reformas más profundas que garanticen que toda inversión será compensada con una ganancia extraordinaria. El reclamo unánime de la burguesía es una reforma laboral en el país que flexibilice las condiciones de trabajo, achique las cargas impositivas que recaen sobre las patronales, destruya el salario real de la clase obrera y debilite la organización sindical. El italiano Cesare Trevisani sintetizó en el evento que “hay un tema cultural, de mantener el nivel de trabajo sin pensar en la eficiencia económica.” Paolo Rocca (Techint) afirmó que “hay que convencer a los sindicatos para que no peleen por el sueldo de algunos, sino por el empleo de muchos”, idéntica idea a la que ya viene instalando el propio gabinete económico nacional desde diciembre pasado.

El otro aspecto es la reforma impositiva.

Los empresarios se quejan de que invertir en Argentina es caro y exigen exenciones en los impuestos. Uno de los reclamos, por ejemplo, es la eliminación del impuesto al cheque

En resumen, los burgueses del mundo exigen condiciones para un negocio redondo: impuestos bajísimos para que la ganancia sea fabulosa y estabilidad política y social que les permita durante el mayor tiempo posible llevarse sus ganancias a los países de donde son nativos. Exigen las condiciones para aumentar la explotación y saquear nuestro país. Quieren a la clase obrera desarmada y de rodillas. Y el macrismo les abre de par en par las puertas para que puedan hacerlo.

De la torta, solo las migajas son para nosotros El miércoles 28 de septiembre el INDEC volvió a publicar los índices de pobreza e indigencia luego de dos años. Los números son similares a los que ya había advertido hace dos meses la UCA: el 32% de la población es pobre, es decir, casi 9 millones de personas; y el 6% de los argentinos es indigente, es decir, 1.700.000 seres humanos que viven con menos de $6.000 pesos mensuales.

Otros números completan el panorama desolador de la economía: la actividad industrial cayó en junio un 6,4% con relación a junio de 2015, en el semestre retrocedió el 3,3% con respecto a igual período del año pasado. El consumo en junio fue un 9,8% más bajo que en 2015. Los sectores de las economía más afectados son el automotriz (13,7%) e industrias metálicas (12,4%). La construcción también bajó 19,6% con relación a junio de 2015, y la caída del primer

semestre fue del 12,4%. Según la CEPAL, para este año se espera una contracción del PBI del 1,5%. Y la caída del salario real ronda el 12% anual.

Para el macrismo la clave de la recuperación económica está en la reactivación de las inversiones. Pero, en el capitalismo, eso puede realizarse según las condiciones que el capital exige: aumentando la explotación de los trabajadores. Esa es la apertura al mundo que Cambiemos tiene para ofrecer: crear condiciones locales para competir en el mercado de trabajo mundial, abaratando y domando la mano la obra. En criollo, atacando nuestro salario y condiciones de trabajo, y así, abrir de par en par el país para que el capital siga haciendo su negocio y se marche con los bolsillos llenos a su país de origen.

La alternativa es la resistencia organizada de la clase trabajadora: la lucha por el trabajo, el salario y las condiciones laborales.

La profundización del ajuste, que pretenden el macrismo y los capitales concentrados de nuestro país, podrá avanzar hasta donde se lo permitamos. En nuestra fuerza y unidad está la posibilidad de ganar la partida y hacer que los que viven de nuestro trabajo paguen los costos de una crisis que no hemos generado, sino que nace de las entrañas del capitalismo, un sistema hecho a medida de la codicia irracional e insaciable de los ricos y poderosos que nos quieren condenar a vivir en la miseria.

Quienes militamos por una transformación radical de nuestra sociedad tenemos la compleja responsabilidad de potenciar el conflicto social, buscando que la lucha contra el ajuste sea desde una perspectiva unitaria. Sólo así se logrará una salida de fondo a los problemas de nuestro pueblo trabajador.

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Los últimos datos oficiales marcan claramente quien paga los costos de las medidas adoptadas. El triunvirato de la CGT, la pasividad y el fantasma de un paro general cada vez más lejano; los movimientos sociales en la primera línea de resistencia. El Papa mete la cola. ¿Qué proyecto acumula el descontento social?

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stá claro que la desocupación, la precarización laboral y la pobreza que padecen millones de trabajadoras y trabajadores no empezaron a fines del año pasado. Igual de claro está que, desde el último diciembre, el conjunto de los sectores populares sufre los costos de un ajuste que se profundizó a tal punto que hoy en día 1 de cada 3 argentinos se encuentra en situación de pobreza. Mas fuerte resulta decir que 14 millones de laburantes estamos en esa situación. Sobre este universo, y en el marco de una precarización laboral que alcanza al 40% de la clase, los movimientos sociales vienen desarrollando su inserción desde hace más de 2 décadas.

El “rosario del ajuste” pareciera no tener fin. Pérdida de al menos un 10% del poder adquisitivo del salario, mas de 200 mil despidos en el Estado, veto a la ley antidespidos, miles de nuevos desocupados en distintos sectores formales (industria, construcción, automotriz, etc.), falsas promesas de campaña con respecto al impuesto al salario. Pero esta interminable lista aún no es suficiente para que los dirigentes del triunvirato de la CGT pasen del anuncio a la acción, convocando realmente a un paro general que ponga en mejores condiciones a los trabajadores y el pueblo para enfrentar el fuerte golpe que se viene descargando sobre sus hombros.

Resistencia y reacomodamientos de los movimientos sociales El amplio universo de las organizaciones sociales se ha ganado nuevamente un lugar en las primeras filas de la resistencia frente a un gobierno abiertamente de derecha. Al estar inserto en los sectores más golpeados de la clase, las organizaciones piqueteras han ido incrementando su presencia en las calles, en defensa de los recursos elementales arrancados al Estado en gobiernos anteriores. Y al igual que en otros espacios a nivel sindical y político, en los últimos meses se fueron dando reacomodamientos dentro del sector, en coordinaciones con mayor o menor grado de estabilidad.

A partir de la convocatoria de la marcha del 8 de agosto, conocida como la marcha de San Cayetano, La CTEP, Barrios de Pie y la Corriente Clasista Combativa conformaron una coordinación que, con el aval y apoyo de la iglesia -principalmente por la relación del Papa Francisco con algunos dirigentes de la CTEP-, los llevó a tender puentes con el recientemente conformado triunvirato de la CGT. La conformación de dicha coordinación es un movimiento táctico que intenta levantar los derechos de los trabajadores precarizados pero a un costo muy elevado: la resignación de la independencia de clase y de la identidad política, abonando a presentar como progresistas las iniciativas del vaticano. A su vez, en el caso del Movimiento Evita -sector hegemónico dentro de la CTEP- y de Barrios de Pie, terminan sumando a la capitalización de un sector por derecha del peronismo en reacomodamiento.

En el arco de los movimientos sociales de la izquierda no trotskista, también se vienen desarrollando coordinaciones. En este caso, frentes de lucha con mayor estabilidad, plasmados en acciones concretas de enfrentamiento a las políticas impulsadas por los empresarios que hoy dirigen los destinos de nuestro país.

Es el caso del reagrupamiento que vienen construyendo el FOL, la Agrupación Clasista Lucha y Trabajo, Votamos Luchar, MTRDD, Movimiento Resistencia Popular, entre otras organizaciones, que en base a años de recorrido conjunto les permite conformar un espacio frentista unitario a nivel gremial con una clara independencia de clase. Entre sus acciones de lucha más relevantes se encuentran: el acampe y los cortes de los puentes de Puerto Madero, en el marco de la Marcha Federal, y el reciente acampe de 4 días en Plaza de Mayo, en el que también confluyeron otras organizaciones como las integradas en la “Campaña Nacional No te dejes Ajustar” y sectores de la juventud precarizada con un pliego de reivindicaciones propios del sector. Las y los precarizados llevaron a las puertas de la Rosada la grave situación que viven miles de compañeros en distintos

puntos del país fruto de, entre otras cosas, programas de trabajo que tienen un sueldo por debajo incluso de la línea de indigencia.

Miles de desocupados se manifestaron allí en busca de trabajo genuino, denunciando el ajuste y las medidas en contra del pueblo.

Finalmente, poco se puede decir de las organizaciones sociales bajo el ala del trotskismo, principalmente del Partido Obrero, que no escapan a la lógica sectaria que impulsan en los distintos planos de intervención, más allá de algunas coordinaciones en donde sí se logró empalmar con dichos compañeros.

Todos los caminos conducen a Roma... y a Massa Es innegable que en un contexto general de avance de la derecha abiertamente proimperialista en Nuestra América, las resistencias de los pueblos comienzan a hacerse sentir.

En nuestro país, ante la pasividad de las centrales sindicales, los movimientos sociales fueron quienes ganaron las calles, enfrentando abiertamente a las políticas neoliberales.

Este hecho explica el acercamiento de la CGT a una parte de los sectores precarizados (aunque 20 años tarde). La necesidad de mantener el control social es asumida de esta forma por sectores de la burocracia sindical y por sectores de la Iglesia.

Quien intenta capitalizar esta situación desde el lugar de “oposición responsable” es Sergio Massa, quien logró que dos de los tres representantes del actual triunvirato de la CGT sean legisladores del Frente Renovador: Héctor Daer, del sindicato de sanidad y diputado nacional, y Carlos Acuña, de estaciones de servicio y legislador bonaerense.

Por otro lado, ante el avance del acuerdo de Stolbizer con el massismo, la proyección política de las medidas impulsadas por Barrios de Pie también queda en manos del tigrense. Una vez mas los miles de compañeros y compañeras que salen a poner su cuerpo ante la situación social cada vez más adversa ter-

minan abonando a una variante de la conciliación de clases, que se encuentra en pleno reacomodamiento post derrota electoral.

Codo a codo en la construcción de una alternativa política Un aspecto importante de la política que impulsan los movimientos sociales combativos hace a la relación con otros sectores en lucha de nuestra clase. Durante muchos años tuvieron que hacer mella para ganarse el reconocimiento de sus propios pares. Con el correr de los años -y de la lucha conjunta- esa distancia se ha ido reduciendo, mas no sin reparos. El fuerte vínculo construido con compañeros de la línea 60, con estatales y docentes de la “Corriente político-sindical Rompiendo Cadenas” y, en menor medida, con los compañeros aceiteros abonó a ese necesario reconocimiento por parte de los distintos sectores combativos de nuestra clase.

Con un programa claro, que abarca desde la mejora de los programas actuales de trabajo hasta el pedido de pase a planta permanente de los miles de laburantes precarizados, los movimientos sociales tienen mucho que aportar en pos de la tan necesaria unidad.

Con la firme convicción de avanzar en la construcción de una herramienta política con independencia de clase, para que los esfuerzos de miles de compañeras y compañeros no terminen en manos de las distintas variantes de quienes hace 200 años vienen entregando nuestra patria, exigimos: - Pase a planta de todos los trabajadores precarizados - Creación masiva de puestos de trabajo con un salario no menor al salario mínimo vital y móvil.

- Prohibición de despidos y suspensiones.

Dirección Territorial de OP Hombre Nuevo

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Con el ascenso de un gobierno conservador y de derecha como el de Macri se ponen aún más trabas a las demandas fundamentales de las mujeres y los colectivos disidentes. Es fundamental redoblar nuestra lucha por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito, por el desmantelamiento de las redes de trata y prostitución, para poner fin a los femicidios y la violencia machista, porque sin feminismo no habrá socialismo CAMBIEMOS: avanzada machista y mientras mantiene su connivencia con los la casa y fuera de ella. Se trata de una de Un Encuentro amplio, de unidad y patronal sectores más retrógrados. A su vez, enten- las dimensiones en las que se expresa con organización Este año, las mujeres nos encontramos ante una situación de avanzada machista sobre nuestros derechos. En menos de un trimestre, quedó claro que este gobierno, proveniente del sector empresarial, mantiene su unidad con los sectores más reaccionarios de la iglesia católica y no muestra ningún reparo a la hora de avanzar sobre los derechos que hemos conquistado tras años de lucha.

Leyes como la n° 26.485 de Protección Integral contra la Violencia, la Ley de Identidad de Géneros, la Ley de Salud Sexual y Procreación Responsable, el aborto no punible, son un avance en materia de derechos para las mujeres y colectivos disidentes, que fueron conquistados y defendidos con la lucha feminista en la calle. Aún así, que las leyes estuvieran sancionadas no implicó que el Estado las impulsara como políticas públicas. Tras largos años de exigir su implementación, en la mayoría de los casos aún no se ha concretado su ejecución integral. Mientras tanto más de 280 mujeres son asesinadas por año, 100 mueren por abortos clandestinos y miles son explotadas sexualmente o desaparecidas por redes de trata.

En el marco de la denuncia del héteropatriarcado, debemos identificar al Estado como responsable del impulso de políticas machistas. Es el responsable de que nuestras mujeres trabajadoras mueran en abortos clandestinos o de que no sean asistidas cuando denuncian violencia machista, mientras que los femicidas salen en libertad con total impunidad; los políticos y las instituciones abalan, cuidan y garantizan la trata de mujeres y niños/as o manejan los cabarets ilegales para la prostitución.

Nada podemos esperar de un gobierno de los CEOs que gestiona para los ricos

demos la designación de Fabiana Tuñez (fundadora de la Casa del Encuentro) como presidenta del Consejo Nacional de la Mujer, como un intento de maquillar las políticas reaccionarias del macrismo.

La avanzada de la derecha nos demanda demostrar a este gobierno empresarial, que el movimiento de mujeres, feminista y popular no retrocederá un solo paso. Por eso, desde las organizaciones populares nos abocamos a visibilizar estas problemáticas, particularmente en los barrios más humildes donde el entramado entre fuerzas de seguridad, tratantes, narcotraficantes y poder judicial, sólo puede ser enfrentado con mayores grados de unidad y organización.

La pobreza y la desocupación también son violencias Las mujeres y los colectivos de diversidad, somos las/os primeras/os en sufrir el ajuste y la pobreza. Nuestras “oportunidades” en el marco del sistema capitalista, que sólo ofrece explotación y muerte a nuestra clase, son reducidas. Las mujeres trabajadoras somos empujadas a los sectores de mayor precariedad e informalidad laboral, mientras que los colectivos trans o travestis aún no tienen el mínimo derecho a un cupo laboral. Cuando crece el desempleo y la flexibilización laboral, más aumenta la brecha salarial entre varones y mujeres, y somos nosotras quienes mayoritariamente pasamos a engrosar las largas listas de desocupadas/os.

Además de la precariedad del trabajo asalariado, las mujeres cargamos casi en exclusiva soledad con el trabajo doméstico y la crianza de las niñas y niños. Nuestro ingreso masivo al mercado laboral no ha implicado el quite de esta carga que convierte nuestro día en una jornada laboral doble: en

claridad la santa alianza entre capitalismo y patriarcado, puesto que nuestro trabajo en la casa es la garantía de la reproducción de la mano de obra.

A esta violencia por parte del Estado y sus instituciones, se suman las diferentes violencias que a diario nos golpean duramente: la violencia física y psicológica en nuestros hogares y lugares de trabajo que afecta a 1 de cada 3 mujeres en nuestro país, el aumento de las víctimas de violencia física y femicidios, la falta de presupuesto para que se cumpla la Ley de prevención contra las violencias (hoy sólo se asignan $4 por mujer al año), la inexistencia de lugares de atención para mujeres en situación de violencia, el cierre de programas de atención a víctimas, la inaccesibilidad al sistema de salud, la criminalización de nuestro derecho a decidir, la complicidad judicial y mediática, la cosificación de nuestros cuerpos, la condena social ante una elección sexual diferente a la impuesta.

Nuestras perspectivas para el ENM: fortalecer el espacio, avanzar en la lucha Desde el primer ENM, realizado en 1986 en Buenos Aires con la participación de unas mil mujeres, hasta el último, realizado el año pasado en Mar del Pata con la presencia de más de 65.000 mujeres, el Encuentro ha demostrado ser un evento de gran relevancia en la agenda feminista nacional. Se trata de una instancia en donde decenas de miles de mujeres de todas las provincias del país, junto con otras compañeras latinoamericanas, nos reunimos, debatimos, compartimos información sobre la situación en nuestros territorios, aprendemos de la experiencia hecha por otras, avanzamos en una perspectiva feminista.

Algunas organizaciones cuestionan el carácter horizontal y no resolutivo de los ENM, afirmando que se vuelven espacios de mera catarsis y proponiendo que adopte una dinámica de votación, con mayorías y minorías, que apruebe un plan de lucha nacional. Desde Izquierda Revolucionaria y Hombre Nuevo, no compartimos esta mirada. La amplitud con la que se realizan los ENM y la dinámica no resolutiva de los mismos explica, en parte, su sostenimiento en el tiempo y su indiscutible crecimiento.

Decimos en parte, porque sin lugar a dudas hay otro elemento que ha favorecido su desarrollo: el creciente nivel de conciencia y organización feminista que nos damos desde el pueblo y que apostamos a fortalecer el Encuentro.

La masividad de los ENM es una oportunidad única para las corrientes feministas revolucionarias para exponer nuestras perspectivas sobre las problemáticas que golpean a las mujeres de nuestro pueblo. En los debates y las experiencias compartidas con las mujeres que participamos de que todos los cambios son individuales, que hay que esperar los tiempos del Estado y negociar para conseguir “algo”.

Convertir el ENM en una especie de Congreso de tendencias, lo vaciaría de mujeres del campo popular haciéndonos flaco favor a quienes queremos transformar la sociedad.

Por otro lado, la historia de los ENM ha dado sobradas muestras de ser un espacio que propicia la organización y la lucha. De esa experiencia compartida, surgieron herramientas tan importantes como la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito (con más de diez años de militancia), la Campaña Nacional contra las violencias hacia las Mujeres, las

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en debate

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Socorristas en Red y una multiplicidad de organizaciones de mujeres, de diversidad o feministas, en todo el país. El desafío de nuestras organizaciones es el desarrollo de estrategias que promuevan mayores niveles de organización de las mujeres, que se forjen con perspectiva unitaria e independencia política de cualquier expresión patronal.

Talleres y actividades durante el ENM Los más de 60 talleres que funcionan en simultáneo abordan diversos temas de la agenda de lucha de las mujeres. Nosotras participamos activamente de los talleres referidos a las problemáticas que golpean severamente a las mujeres del campo popular. Estaremos dando batalla por nuestro derecho al aborto legal, seguro y gratuito, porque sabemos que en la mayoría de los casos los embarazos no deseados se producen entre las mujeres (y sobre todo las más jóvenes) de los barrios populares. Y esto se debe a la ausencia de educación sexual en las escuelas y a las dificultades para acceder a métodos anticonceptivos, pero principalmente responde al machismo que somete a nuestras pibas a violaciones sexuales o a situaciones de no poder negarse o de no poder exigir el uso de preservativo. Ellas son las que engrosan la escalofriante cifra de cien mujeres muertas por año en abortos clandestinos.

Contra la violencia machista y los femicidios, señalaremos la responsabilidad del Estado misógino que no atiende nuestras denuncias, que no nos ofrece refugios ni salidas viables ante situaciones de violencia, que nos criminaliza por cómo nos vestimos y actuamos, que nos coloca como objetos sexuales, que libera a los femicidas. En el mismo sentido, denunciaremos las redes de trata y prostitución, todas ellas promovidas y amparadas por el Estado. Porque sabemos que el nulo acceso al mercado laboral para personas trans y travestis es lo que las em-

puja a que la única forma de resolver las necesidades económicas sea la prostitución.

Porque la inmensa mayoría de mujeres en situación de prostitución son mujeres de los barrios pobres e inmigrantes, captadas por redes aceitadas para introducirlas en el perverso mecanismo de la explotación sexual. Por todo ello, estaremos exigiendo al Estado políticas públicas que garanticen a todas las personas en situación de prostitución, acceso a vivienda, salud, educación en todos los niveles y trabajo con un salario igual a la canasta familiar.

Además, invitamos a participar del taller “Estrategias de abordaje frente a las violencias hacia las mujeres” que impulsa la Campaña Nacional Contra las violencias hacia las mujeres. El taller se realizará en la Plaza San Martín. La Mesa de Mujeres Latinoamericanas contará con nuestra participación, así como las charlas-debate de las mujeres kurdas. Además, este año dimos una valiosa lucha nacional por la libertad de Belén y conseguimos que la joven tucumana volviera a su casa. Pero todavía se sostiene la condena que sobre ella pesa y ese será un grito de guerra que atravesará todo el ENM: ¡¡Anulación de la condena a Belén!!

El escrache es político: iglesia misógina Como todos los años, en la masiva movilización del domingo seremos parte de la gran columna feminista y de izquierda que se dirige a la catedral. La iglesia católica es una institución misógina y opresora, impulsora de múltiples genocidios y con una influencia política determinante sobre el Estado. Es uno de los actores fundamentales que se opone a nuestro derecho al aborto, así como a la educación sexual en las escuelas y hasta al uso de anticonceptivos.

Desde su retrógrada concepción, nos acusa de pecadoras a las mujeres que elegimos vivir nuestra sexualidad con libertad y no

como forma reproductiva, a la vez que condena a personas trasns, travestis y todo lo que se salga de la héteronorma, abonando a los altos niveles de violencia y discriminación. Autora de la caza de brujas, legitimadora del genocidio contra nuestros pueblos originarios, partícipe de las dictaduras latinoamericanas, encubridora de miles de curas abusadores…. Nos sobran los motivos para escracharla.

El escrache es una herramienta política de los sectores populares, de quienes no tenemos el poder. Es señalar el lugar físico donde se encuentran los responsables de nuestra opresión. Así como con las viviendas particulares donde se esconden los genocidas, iremos hasta la catedral a denunciar su misoginia y política opresora.

Por un feminismo revolucionario Asumiendo una perspectiva feminista y marxista, denunciamos la articulación entre capitalismo, hétero-patriarcado e imperialismo como sistemas de dominación, explotación y muerte que se articulan para oprimirnos. Por ello, adherimos a un pensamiento feminista de lucha y recuperamos todas las tradiciones heroicas de resistencia de las/os oprimidas/os de nuestra tierra.

No todas las mujeres vivimos el peso del patriarcado de igual manera. Por ejemplo, las mujeres que son parte de la clase patronal explotan a nuestra clase trabajadora e incluso se benefician del patriarcado privando de derechos laborales a otras mujeres (como la licencia por maternidad o la hora de lactancia) o empleándolas en condiciones precarias y en negro para que cumplan el trabajo doméstico en sus casas.

Un clarísimo ejemplo reciente de las diferencias de clase entre las mujeres, lo constituye la legisladora porteña del PRO, Mercedes de las Casas, con la publicación de su nefasto y esclavista libro titulado “Cómo conseguir una mucama… y no perderla en 7 días”. Allí señala que las mujeres que

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buscan este trabajo son pobres y sin instrucción, por ello hay que educarlas, darles uniforme, no tutearlas y otra cantidad de barbaridades que la patrona De las Casas define como “una guía fresca, práctica y amena para lidiar con el personal doméstico”.

Frente a esta realidad, nos oponemos a cualquier tipo de propuesta feminista que se adapte al sistema burgués y capitalista y proponga una política de reformas, haciéndonos creer que el único objetivo es conseguir algunos derechos dentro de esta sociedad injusta. Nosotras participamos de la lucha por la conquista de derechos, pero siempre planteando un horizonte de transformación mucho más amplio. Dentro del sistema capitalista, toda conquista es parcial, transitoria y no resuelve nuestros problemas de fondo. Nuestra lucha de horizonte socialista, se propone el fin de toda forma de opresión y alienación.

Por ello, en nuestra militancia cotidiana apostamos a la construcción de agrupaciones de base de composición popular. En la emancipación del machismo, el sujeto central somos las mujeres del pueblo, las obreras y trabajadoras de todas las ramas, las desocupadas, las estudiantes, las artistas y que tenemos un lugar de lucha en la primera fila contra el hétero-patriarcado. Buscamos promover espacios de unidad y coordinación que potencien nuestras luchas desde una perspectiva de independencia de clase.

Desde nuestra perspectiva de feminismo revolucionario, apostamos al desarrollo de una praxis emancipadora para que capitalismo y patriarcado caigan juntos.

Organización Política Hombre Nuevo Izquierda Revolucionaria

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economia

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El INDEC anunció oficialmente que 13 millones de argentinos son pobres, un millón y medio más desde que la Alianza Cambiemos llegó al poder. En este contexto desolador –que no es novedad para quienes todos los días pateamos las barriadas más pobres-, el Gobierno anunció el proyecto de presupuesto para 2017 que está muy lejos de atender al tercio de población que no llega a cubrir las necesidades básicas. En el mismo se expresan las prioridades de Macri y sus CEO´s para el año que viene: deuda, más deuda y elecciones. En esta nota, un repaso de los números.

E

l Ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat Gay, estuvo en las últimas semanas en el Congreso explicando el presupuesto 2017 planteado por el Gobierno y sus proyecciones para la economía. En su exposición, admitió que la economía argentina caerá durante el 2016 un 1,5% y que el aumento en las tarifas de los servicios públicos no alcanzará para reducir el déficit.

El mismo llegaría, durante el año que viene, a un 4,9% del PBI. Es decir, $480mil millones. Sin embargo, la luz aparecería al final del túnel gracias al ajuste en los bolsillos del pueblo trabajador: permitiría que la inflación sea de un 17% durante el 2017 y la economía crezca al 3,5%. Optimismo es lo que sobra.

La deuda eterna Según el Ministro, este es un buen presupuesto porque es razonable y real. Resulta razonable y real que un Gobierno bancado por el capital financiero destine $247mil millones para pagarle a los fondos buitres, al Club de París y los bonos que vencen durante el año.

Esto significa un aumento del 32% con respecto al 2016 y un 10,5% del total del presupuesto.

El Gobierno sostiene una visión bajo la cual la inflación es producto del aumento de los salarios y de la emisión de moneda. Bajo esta lógica, financiar el déficit fiscal imprimiendo más billetes genera un aumento acelerado de los precios. Por eso, o se elimina el déficit fiscal o se financia con nueva deuda. Así sucedió durante los 90.

Para este presupuesto, siguiendo la misma lógica liberal, se proyecta un endeudamiento de $970 mil millones, sin demasiadas precisiones. No se diferencia cuánto de los títulos públicos están en manos del Estado, ni se puede saber de antemano cuánto se podrá refinanciar, pero funcionarios del Gobierno admitieron en el Congreso que el endeudamiento podría llegar hasta u$s40mil millones. Alrededor de u$s14mil millones para el pago de vieja deuda y u$s 15mil millones para financiar el déficit.

Para los pobres, cero El peso del pago de la deuda en el presupuesto contrasta con la baja prioridad que se le asigna a los rubros sociales o de inversión:

- Desarrollo Social: si bien el monto asignado a los programas de empleo como el Argentina Trabaja aumenta un 37%, el total del presupuesto para promoción y acción social es de apenas $44mil millones en un país con 13 millones de pobres. Es decir, solamente un 1,9% del total.

- Salud: los recursos destinados aumentan un 16%, es decir por debajo de la inflación proyectada. Totalizan $87mil millones, un 3,7% del total.

- Educación: también aumenta levemente por debajo de la inflación. Suma $160mil millones, es decir un 6,8% del PBI. Mayoritariamente, estos recursos están destinados al pago de salarios. Y algunos sectores de la educación se ven particularmente perjudicados. Por ejemplo, las universidades aumentan su presupuesto para salarios, pero los fondos para obras se reducen un 70% hasta apenas $400 millones.

- Seguridad Social: este es el ítem que más aumenta, un 35% debido a la Ley de Reparación de jubilaciones sumando $935mil millones.

En total, los presupuestos de Desarrollo Social, Educación y Salud representan un 11% del total. Es decir, que más allá del discurso del Gobierno de querer erradicar la pobreza, los tres puntos cruciales del presupuesto para que los argentinos tengamos una vida digna suman prácticamente la misma cantidad de plata que se le paga a los Fondos Buitre, el Club de París, etc. Dicho de otra forma, si no se pagara la deuda se podría duplicar el presupuesto para los hospitales y escuelas públicas.

Año electoral Muchos economistas ortodoxos, incluso aliados del Gobierno, han criticado el proyecto por “keynesiano”. El ajuste en las tarifas no es suficiente para este sector más conservador y partidario de un ajuste más brutal al ya existente. Estos sectores cuestionan el financiamiento y la existencia misma del déficit, y también que los subsidios al transporte aumentan un 20% hasta $127mil millones. Sin embargo, el reciente aumento tarifario de luz, gas y agua reduce los subsidios al sector energético en un 20% hasta $168 mil millones. El relativo freno al ajuste por el costo político de la reacción po-

pular sumado a que el 2017 es un año electoral, obligó al Gobierno a disminuir levemente la profundidad de las medidas que estos sectores empresariales reclaman, abriendo ciertas grietas entre la propia clase dominante.

Por otro lado, la Alianza Cambiemos aumenta sustancialmente los presupuestos para la obra pública, que estuvo prácticamente paralizada durante los primeros 8 meses de Gobierno: se calcula que para Diciembre se habrá ejecutado un 80% de lo que se calculaba para el 2016.

La inversión en infraestructura para el transporte se incrementará en un 38%, llegando hasta $18mil millones. Los dos proyectos principales que lo explican son el Plan Belgrano y el soterramiento del Tren Sarmiento.

Pero la mayor parte de los recursos se irán en la construcción de autopistas a manos de Vialidad Nacional, un reclamo histórico del sector agrario para abaratar los costos del transporte de los granos.

Por otra parte, el Gobierno presupuestó $30mil millones para construir 40 mil viviendas.

Pero si bien la obra pública y la vivienda producirían un efecto positivo en la reactivación de la economía y el empleo, nada asegura que efectivamente esto ocurra. Ni que se realicen efectivamente los desembolsos de dinero y las obras, ni que se genere la reactivación esperada con el supuesto rebote post recesión y ajuste. Sin embargo, ambos rubros constituyen un elemento de negociación con los gobernadores e intendentes del PJ a quienes el gobierno pretende sostener como aliados, no sólo en términos de la gobernabilidad actual sino de cara a las elecciones legislativas del año que viene.

Los pobres pagamos la fiesta El proyecto de presupuesto también explica cómo se financian los gastos del Estado. Y aquí, la estructura impositiva demuestra todo su carácter regresivo. El impuesto que más aporta a las arcas del Gobierno es el IVA, con $341mil millones, un 33% del total. Este gravamen no diferencia entre ricos y pobres. Un paquete de fideos paga el mismo 21% que un auto último modelo; por lo que una familia pobre destina la mayor parte de sus recursos en pagar impuestos para que el Estado –por ejem-

plo- pueda pagar la deuda, los subsidios a las empresas, etc.

El otro plato fuerte en el financiamiento es el impuesto a las Ganancias. Este aporta $270mil millones para la Nación y $183mil millones a las provincias y es un 26% del total.

Es el segundo impuesto que más recauda, por esto se explica que ni el Gobierno nacional ni las provincias quieran rebajarlo. Sin embargo, lejos de ser un impuesto que pagan los empresarios en función de su Ganancia, son muchos trabajadores los que en la práctica sostienen este ingreso para el Estado, a costa una merma en su salario.

A pesar de que se han disminuido sustancialmente las retenciones a las exportaciones e importaciones, se espera que los ingresos por esta vía se incrementen el año próximo por un aumento del comercio exterior. Sin embargo, aún así significarían apenas un 17% del total para un sector que se ha visto ampliamente beneficiado por el macrismo. Mientras tanto, Bienes Personales suma apenas $4500 millones con una caída del 40% por el aumento del mínimo no imponible que, en esta ocasión sí, el Gobierno otorgó para los ricos

El presupuesto de los de abajo Macri y su gobierno tuvieron que recalcular parte de las prioridades de su mandato para el año que viene. Al aumento de tarifas pronosticado tuvieron que bajarle las expectativas por el costo político, aumentan el presupuesto para las áreas sociales y las obras y viviendas por el impacto del ajuste y porque es la forma más efectiva de financiar una campaña. La máquina electoral se pone en marcha y podría implicar una relativa y momentánea desaceleración del ajuste que le asegure la victoria legislativa al PRO a mitad de año. Sin embargo, este financiamiento trae más endeudamiento y la hipoteca de nuestro futuro. En un país con 13 millones de pobres, el pago de la deuda tiene que ser la última prioridad.

Lo que el pueblo necesita es en realidad un presupuesto que asigne los recursos suficientes para sacar a la inmensa mayoría de nuestra clase de la pobreza y el hambre, y no para seguir llenando los bolsillos de Wall Street y los empresarios locales.

Ariel Güemes

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internacional

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En este momento, el Estado Español lleva más de 290 días con un gobierno en funciones que tras dos elecciones no ha podido formar gabinete, debido a que ningún partido o coalición consiguió reunir los 178 diputados necesarios para hacerlo.

Aún así, el verdadero poder político sigue manejando el país a la espera de un gobierno fuerte que aplique las medidas de recortes que la Unión Europea viene anunciando hace tiempo Sin gobierno y sin novedades Situación extraordinaria o simple bloqueo institucional, el Estado Español (la gran España imperial para los que aún sueñan con viejas glorias coloniales) vive un momento sin precedentes en su corta y escasa vida democrática desde el inicio de la “pacífica” y “modélica” transición.

Desde el 21 de diciembre de 2015 cuando se celebraron elecciones y ningún partido obtuvo mayoría absoluta y tras el período de negociaciones que acabó sin suma de diputados para la mayoría, el país vive con un gobierno en funciones del Partido Popular con potestades limitadas. Pero el sistema parlamentarista burgués sigue tan estable como siempre. El ciclo de acumulación de capital hace su curso, la crisis económica sigue pesando sobre el trabajo y la vida de la clase trabajadora y las riñas entre los partidos del régimen no hacen más que alargar y teatralizar aquello que más temprano que tarde llegará: un gobierno que acate y aplique las políticas austericidas y criminales del Banco Central Europeo y el Banco Mundial.

En los comicios electorales de diciembre de 2015 los resultados de Podemos y Ciudadanos fue lo más destacable en un arco político acostumbrado al bipartidismo impuesto desde 1983 por la socialdemocracia europea y los grandes intereses económicos. Lejos de romper con este cuadro y de representar una alternativa política para los de abajo, Podemos (69 diputados) había hecho el salto a la política estatal con una cierta decepción para aquellos que esperaban un gran resultado. Ciudadanos (40 diputados) tampoco pasaba de un modesto resultado, cumpliendo eso si su papel de renovador de un Partido Popular (123 diputados) que castigado por la corrupción a gran escala y cuatro años de recortes había padecido un fuerte retroceso pero seguía siendo primera fuerza política lejos del PSOE (90 diputados) que obtenía su peor resultado hasta ese momento desde el final del franquismo.

Circo mediático mediante, las negociaciones acabaron sin acuerdos y haciendo caso omiso a los grandes medios de comunicación que pedían a gritos un entendimien-

to para salvar a la democracia española, se llamó a unas segundas elecciones donde las posiciones lejos de radicalizarse siguieron en la misma sintonía.

Una vez más, la inexistencia de una alternativa política desde la izquierda marca la estabilidad de un régimen que puede permitirse el lujo de estar casi un año entero sin gobierno Más allá de las alabanzas del candidato de Podemos Pablo Iglesias (gurú de la revolución europea para muchos) a las políticas de Barack Obama y Matteo Renzi y de los ataques infantiles entre partidos del mismo exacto discurso, la campaña electoral pasó sin pena ni gloria, así como los resultados.

El Partido Popular (137 diputados) subía en votos aprovechándose del miedo a la inestabilidad y de la caída de Ciudadanos (32 diputados), con un electorado que entre la copia y el original volvía a la marca original.

En el espectro de la izquierda (y que me perdonen por tal afirmación) el PSOE (85 diputados) volvía a obtener sus peores resultados encendiendo así una crisis interna de gran calibre y Podemos (71 diputados), a pesar de acudir a las urnas en coalición con Izquierda Unida(el viejo PCE), perdía 1 millón de votos en sólo 6 meses.

Elecciones en Euskal Herria y Galicia Con un escenario similar al que se había dado con las elecciones anteriores, muchos analistas marcaron que los resultados en las elecciones que se tenían que celebrar el 25 de septiembre en las comunidades autónomas de Galicia y Euskal Herria podrían servir para desatascar la situación nacional.

La importancia de estos territorios reside no sólo en ser comunidades de peso económico importante sino también teniendo en consideración su realidad de pueblos oprimidos por el Estado Español donde la cuestión na-

cional y la lucha por su liberación siempre jugaron un papel clave.

Así, los resultados en Galicia afianzaron un poco más la posición política del PP (obtuvo mayoría absoluta) y deslegitimaron la dirigencia del PSOE pues perdió 4 escaños. En Euskal Herria la posición del Partido Nacionalista Vasco,derecha nacionalista, volvió a ganar quedando segunda la opción electoral Bildu, coalición del actual Movimiento de Liberación Nacional Vasco. La Junta electoral prohibió a su candidato Arnaldo Otegui presentarse a las elecciones por su reciente salida de la cárcel. El PSOE por su parte obtuvo casi la mitad de votos que hace cuatro años, haciendo aún más honda la crisis del partido.

El momento actual y los desafíos En el momento actual, después de tres meses de negociaciones, una investidura fallida de Mariano Rajoy y un casi descartado gobierno progresista que tendría que formarse mediante una coalición entre el PSOE-Podemos y los partidos nacionalistas catalanes (estos exigían la celebración de un referéndum sobre la independencia del territorio catalán), toda la presión parece decantarse hacia el candidato del PSOE Pedro Sánchez, que tiene que afrontar una rebelión interna del sector más duro del partido que le exige que deje formar gobierno al Partido Popular por el bien de la democracia española. El viernes 1º de octubre, Sánchez dimitió a su cargo de secretario general del PSOE tras perder la propuesta de realizar elecciones primarias para la elección del secretario general. El ala pro PP triunfó marcando un nuevo capítulo de la debacle del partido.

Viendo cómo se acaba el tiempo (el límite para la formación de un gobierno es a finales de octubre) y queriendo evitar unas terceras elecciones a toda costa, todo parece indicar que el PSOE de alguna manera más o menos elegante le dejará la vía libre al PP o ante la supuesta urgencia de la situación un gobierno de coalición nacional y de procedencia tecnócrata se hará cargo del embrollo. Con una u otra solución, los beneficios de los grandes empresarios estarán bien resguardados y la política económica seguirá

siendo dictaminada por la UE. Según algunos datos, el paquete de medidas que se impondrá al pueblo trabajador español será de un recorte de 6.000 millones de euros y aun así no bastará para hacer parar el aumento del déficit público, que llegará al 3,7% del PIB para el 2017 según el Banco de España. En el mismo informe este banco señalaba que cada español tendría que trabajar 378 días para pagar todo el conjunto de la deuda pública del país.

Con estos números y el actual bloque político a resolverse en los próximos meses, la cuestión del proceso independentista catalán sigue siendo un punto rojo en el sentido de estado centralista de la mayoría de los partidos políticos. Aprovechando el “vacío” gubernamental en Madrid, el parlamento catalán de mayoría de diputados independentistas (en un arco ideológico desde la derecha a la Unidad Popular) sigue con su proyecto de construir una nueva república sin una hoja de ruta fija. Aunque la clase dominante catalana sigue teniendo la hegemonía de ese proyecto, la independencia plantea un desafío que ni la oligarquía ni el proyecto reaccionario español pueden permitirse.

Perspectivas de futuro y alternativas Una vez más, la inexistencia de una alternativa política desde la izquierda marca la estabilidad de un régimen que puede permitirse el lujo de estar casi un año entero sin gobierno. El fin del período de movilizaciones que empezó a decaer en 2009 junto al mediocre papel de Podemosy a un creciente peso de la política institucional en los movimientos independentistas, marcan la actual situación de estancamiento de las posibilidades de abordar la lucha de clases desde una perspectiva de independencia de clase.Sigue pendiente para los revolucionarios la necesidad de construir una estrategia de poder real en la que esté reconocido el derecho a la autodeterminación de las naciones oprimidas así como la necesidad de romper con la Unión Europea y todo lo que ese proyecto representa.

El noi del sucre

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historia

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Este 8 de octubre se cumple el 49 aniversario de la caída en combate de Ernesto “Che” Guevara a manos del Ejército Boliviano y la CIA. Su muerte, lejos de significar el final de su legado, lo multiplicó, siendo recuperado por los oprimidxs de todo el mundo, y sobre todo por las organizaciones políticas que han sabido dar la disputa más profunda por derribar al capitalismo en nuestro continente.

L

a figura del Che ocupa un lugar central a la hora de pensar la tradición revolucionaria latinoamericana. En él se condensan en buena parte, los aportes hechos por los revolucionarios y revolucionarias de Nuestramérica, quienes fueron construyendo un ideario emancipatorio anclado en las realidades sociales del continente. José Martí, Julio Antonio Mella o José Carlos Mariátegui son algunas de las voces que se pueden oír tras los escritos y discursos del Che. Pero es justamente haber logrado una síntesis de esos aportes, expresada en una praxis revolucionaria consecuente, lo que hace de él la máxima referencia del marxismo latinoamericano. Su enorme labor práctica (lejos de las infundadas acusaciones de “espontaneísmo”, “pragmatismo” y otras chicanas) fue producto de una profunda reflexión teórica crítica, reflejada en sus estudios sobre la transición socialista, economía y planificación, filosofía, etc., los que constituyen un importante aporte a la teoría revolucionaria .El Che logró llevar a fondo, en un procesos político concreto, todo el ideario antiimperialista que desde comienzos del siglo XX era parte del sentir de las grandes masas populares de nuestro continente. Supo constituirse así en el principal enemigo del imperialismo yanqui, pateando el tablero de su estrategia regional ni más ni menos que en “su patio trasero”.

La emergencia del guevarismo como corriente política en un contexto signado por la guerra fría, implicó un “cambio de aire” para los revolucionarios del mundo. Sus planteos anti dogmáticos entraban en directa contradicción con el estatalismo y el reformismo

que postulaba la URSS y a la que hacían seguidismo acrítico la mayor parte de los PCs del mundo.

Su participación protagónica en la Revolución Cubana, su aporte en la dirección de ese proceso y las discusiones planteadas dentro del mismo gobierno revolucionario en torno a la orientación económica, la relación con la URSS y la necesidad de una práctica internacionalista consecuente dan cuenta de una estrategia de poder integral. A estos aspectos debe agregarse la total independencia de clase en sus planteos. Guevara había comprendido muy tempranamente los límites del nacionalismo burgués, y por eso bajo ningún punto de vista su estrategia puede ser asociada con estos. La síntesis de su planteo es claramente expresado en el Mensaje a la Tricontinental cuando afirma: “Revolución Socialista o Caricatura de Revolución” Al mismo tiempo, la concepción política del Che supo recuperar y poner en primer plano la necesidad de generar nuevos valores para una nueva sociedad. En momentos donde la humanidad acababa de sufrir la más grande masacre de la historia, Guevara ponía en primer plano los estímulos morales, la necesidad de superar los valores del capitalismo, la implacable urgencia de construir desde lo cotidiano un “hombre y una mujer nueva”.

Por último, pero no por esto menos importante, el Che puso sobre la mesa la necesidad de la violencia revolucionaria, sobre la base de un profundo trabajo político en el seno de las capas laboriosas del pueblo.

A contramano del reformismo imperante en nuestro continente, entendió que cambiar de

raíz esta sociedad no era posible de manera pacífica, porque está fundada y se sostiene sobre relaciones de violencia de una clase sobre otra.

Recuperar unidad

su

legado,

construir

Tras su muerte, fueron muchas las organizaciones que recuperaron su legado. A nuestro entender las experiencias del PRT en Argentina y del MIR en Chile son las que mejor sintetizan su estrategia de poder. Entre otras razones, se destaca en ambos casos, haber logrado articular una importante inserción en el movimiento obrero y popular con una consecuente disputa por el poder. Ambas experiencias , en un marco general de movilización social, fueron el blanco predilecto de las dictaduras genocidas de la mano del Plan Cóndor. La caída de estas y otras organizaciones, la masacre de los mejores cuadros revolucionarios que parió nuestra clase, constituye una derrota de alcance histórico para el proyecto político emancipatorio de los/as trabajadores/as. Debemos aún profundizar nuestro balance de la experiencia más alta de la lucha de clases de nuestro país para extraer enseñanzas, pero es claro que a diferencia del posibilismo que domina en la actualidad, los compañeros de esa generación, al igual que el Che, supieron que es la esencia del capitalismo y del imperialismo lo que hay que atacar.

Desde entonces, nuestra tradición política no ha logrado poner de pie un proyecto que logre salir de pequeños grupos sin mayor incidencia. Sin duda, uno de los motivos de esto es histórico: fue la corriente

más golpeada por el genocidio de la última dictadura. Pero es necesario también señalar las limitaciones propias, que son también las del conjunto de la izquierda: la automarginación, los errores en las caracterizaciones de etapa, las lógicas sectarias, sólo por nombrar algunas, de las cuales, claro está, no podemos pensar que somos ajenos.

En gran medida, la actual etapa política hace necesaria la construcción de mayor unidad. El avance de la derecha en todo nuestro continente es realmente preocupante y sólo podremos oponer resistencia si avanzamos en instancias y experiencias de coordinación continental y, fundamentalmente, si crecemos en nuestras construcciones políticas Por eso mismo, sin ánimos de autoproclamación, pero conscientes de la responsabilidad que se nos impone, pensamos que venimos dando pasos importantes en ese camino. El proceso de discusión que venimos encarando entre Izquierda Revolucionaria y OP Hombre Nuevo, basado en el respeto mutuo y en la construcción de acuerdos políticos, busca ser un pequeño aporte para salir de esta fragmentación en la que como corriente política nos encontramos. Sabemos que los desafíos por delante son muchos, pero estamos convencidos de poder abordarlos, sin prisa pero sin pausa. Al mismo tiempo sabemos que con esto no alcanza y que hay muchos compañeros y compañeras de esta misma tradición (y de otras) con las que tenemos que seguir encontrándonos, discutiendo y construyendo en las bases, en el plano de lo social , pero también y sobre todo, en la búsqueda de articular una propuesta política de masas que sea capaz de dar un disputa real por cambiar de raíz esta sociedad.

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El 15 de junio de 2012, Cristina Fernández de Kirchner anunciaba una “inversión” millonaria de Monsanto para construir una planta en la localidad de Malvinas Argentinas, a 14 km de Córdoba Capital. Los vecinos de Malvinas, y de toda la provincia, rechazamos inmediatamente la instalación de la multinacional estadounidense por considerarla un atentado más contra nuestra soberanía política, alimentaria y ambiental. Numerosas organizaciones sociales, políticas, barriales, estudiantiles, ambientales comenzaban una lucha de largo aliento contra uno de los mayores monstruos del capitalismo imperialista.

Monsanto, radiografía de una acumulación de capital en las empresas mul- vegetales de Monsanto para Argentina, Uru- ba directamente a Monsanto y los gobiernos industria de la muerte y la tinacionales. guay y Paraguay de 2005 a 2007 (Leonardo cómplices de su instalación. La represión no dependencia imperial Los agronegocios (junto a la mega- Sarquís), haya asumido como Ministro de se hizo esperar, y en más de una oportunidad Con más de 115 años de vida, esta empresa (inicialmente ligada a la producción química industrial y luego pionera en los agronegocios) hoy es rechazada por vastos sectores populares a lo largo y ancho del planeta. Fue fabricante del refrigerante de transformadores PCB que produjo gravísimas enfermedades cancerígenas en Illinois (EEUU), en donde el 95% de la población está enferma. Aportó a la industria de guerra norteamericana el Agente Naranja con el que se bombardeó a Vietnam y a otros países. Luego, fue fabricante de todo el paquete agrotécnico que incluye semillas transgénicas y agroquímicos como el Round Up (elaborado en base al cancerígeno Glifosato), entre otros “inventos” vendidos siempre en nombre del “progreso”. En Paraguay, Monsanto estuvo detrás del golpe de Estado parlamentario contra Fernando Lugo, por haber demorado la aprobación de una ley de semillas similar a la que impulsa en nuestro país.

Dicha ley implica (una vez entregada toda la información del banco de semillas del INTA) una patentación de las semillas que sólo acrecienta las ganancias de ésta multinacional.

Hoy, luego de haber sido comprada por la trasnacional alemana Bayer por us$ 66.000 millones, manejará el 23,8% del mercado de agroquímicos en Argentina, lo que significa una facturación estimada en us$ 585 millones anuales. La suma de Monsanto a Bayer no sólo ratificará a ésta empresa como la más millonaria sino que le permitirá una complementariedad hasta ahora inédita. Monsanto es líder en el herbicida glifosato y en maíz, además de haber lanzado la nueva tecnología en soja Intacta, resistente a insectos, y Bayer es pionero en herbicidas específicos y otros fitosanitarios. De esta manera, la nueva empresa Bayer se quedará con dos de las tres próximas tecnologías transgénicas del país: la soja resistente al herbicida Dicamba (desarrollada por Monsanto), y la soja con resistencia al herbicida glufosinato de amonio (elaborada por Bayer). La tercera tecnología es la resistencia al herbicida 2,4 D, pero pertenece a la empresa Dow. La dependencia a todo este paquete tecnológico, se perpetua cada vez más, a medida que se centraliza la

mineria) responden coherentemente al modelo extractivista, que fue elaborado y preparado durante la década de los 90, pero que nunca avanzaron y facturaron tantos millones de dólares como lo han hecho durante la década kirchnerista (sólo en 2015 Monsanto facturó us$ 377,1 millones). Dicho modelo extractivo-exportador es la propuesta del imperialismo para toda Nuestramerica, con el objetivo de seguir beneficiando al capital trasnacional en detrimento de los trabajadores y el pueblo. Así en Argentina, nuestros suelos con sus nutrientes, su agua, sus bosques, su biodiversidad, han sido desmantelados para sembrar soja transgénica y nuestra Cordillera está siendo dinamitada para extraer minerales, proceso que implica el consumo de millones de litros de agua por segundo.

Los partidos patronales, le abren la puerta a Monsanto La entrega de nuestra Patria a la multinacional Monsanto, por parte de los partidos gobernantes (sin importar del color que sean) fue (y es) total. El kirchsnerismo impulsó su radicación en el Marco del Plan Estratégico Agroalimentario e impulsó la Ley de Semillas que obliga a los todos los a productores a pagar por las patentes a Monsanto. Por su parte, De la Sota y Rodríguez Saa, le dieron la autorización para que se instale en Córdoba y en San Luis, poniendo a las policías provinciales al servicio de reprimir las protestas contra esta empresa de la muerte. El radicalismo, a través del Intendente de Malvinas Argentinas autorizó la instalación de una gigantesca planta de Monsanto en la localidad cordobesa, pese a contar con el rechazo de toda la población, expresado en incontables manifestaciones y acciones directas. Por último, el ya difunto progresismo del FAP, fue pionero del agronegocio de la soja transgénica, de la mano de Hermes Binner, quién fuese gobernador de Santa Fe durante el período 2007-2011. Claro está que el actual gobierno de los CEO’s no sólo es fiel aliado de Monsanto, sino que ha contratado a su propia gente para conformar más de un gabinete. Prueba de ello es que un ex gerente general de la división de semillas

Asuntos Agrarios de la provincia de Buenos Aires, uno de los centros de la producción agraria del país. Como si esto fuese poco, recientemente el gobierno de Cambiemos designó a José Alfredo Martinez de Hoz (un asesor de empresas transnacionales en el país en asuntos jurídicos y propiedad intelectual) como vicepresidente del INPI (Instituto Nacional de la Propiedad Industrial), organismo clave para facilitar las patentación de vastas semillas que llenarán los bolsillos de Monsanto.

La resistencia mundial y la lucha local contra Monsanto Esta multinacional viene desde hace muchos años buscando una “tierra prometida”, ya que varios rincones del mundo rechazaron su modelo artificial de semillas transgénicas y de fumigaciones tóxicas que envenenan a la población y destruyen el ambiente.

En 2013 el senado italiano aprobó por unanimidad prohibir el cultivo de transgénicos, en Perú están prohibidos por 10 años los alimentos genéticamente modificados, en Hungría el paquete transgénico de Monsanto no está permitido, y en Venezuela se prohibió la producción de semillas adulteradas genéticamente. La lista de países y Estados que se suman al rechazo hacia el paquete de la muerte: semillas transgénicas, contaminación, cáncer, etc.

En nuestro país, el camino contra el modelo extractivista lo marcaron las asambleas contra la megaminería a cielo abierto en Andalgalá, Famatina, y Pascua Lama.

El pueblo cordobés se nutrió de esta experiencia de lucha y se dispuso a impedir la instalación de Monsanto en la localidad de Malvinas Argentina. A las masivas marchas, movilizaciones, amparos y demandas judiciales, rechazos de universidades nacionales, y cortes de ruta, se decidió en septiembre del 2013 redoblar la apuesta de lucha bloqueando los ingresos al predio donde se construye la planta de producción del monstruo de los transgénicos. La acción conjunta entre la Asamblea Malvinas Lucha por la Vida, las Madres del Barrio Ituzaingó, y la Asamblea Córdoba Ciudad Despierta, era una respuesta política masiva, que golpea-

la policía provincial, infantería, el Equipo Técnico Especial Recomendado, y la burocracia sindical de la UOCRA, descargaron una feroz represión sobre el pueblo malvinense que bloqueaba la entrada a la planta de Monsanto. Las detenciones, amenazas de muerte, y un sinfín de causas judiciales a lxs luchadorxs populares, no frenaron esta enorme lucha de Malvinas. La constante solidaridad entre los pueblos fumigados, las masivas asambleas, y el apoyo de las organizaciones sociales, políticas y gremiales, lograron que en 2014 la justicia ordene frenar la construcción de la plata, y tiempo después la secretaría de ambiente de la provincia rechace el estudio de impacto ambiental presentado por Monsanto. La lucha sostenida durante todo este tiempo logró que hace pocos días, un comunicado de la empresa asumiera su retirada de Malvinas producto de los innumerables conflictos que le generó la oposición del pueblo cordobés.

Finalmente, cuatro años de organización y lucha dieron sus frutos.

Entendemos que este golpe al monstro de los transgénicos no puede obnubilar la histórica consiga “Fuera Mosanto de Malvinas, Fuera Monsanto de América Latina”. Por ello, seguiremos defendiendo la vida y la soberanía nacional, alimentaria y ambiental en toda Nuestramerica, a la par que luchamos por la prohibición del patentamiento de productos biotecnológicos; la estatización del dominio y la explotación de todos los bienes comunes; la eliminación del “modelo sojero” y diversificación de la producción agropecuaria para satisfacer las necesidades alimentarias del pueblo; y la prohibición del uso de insumos tecnológicos agropecuarios contaminantes o insalubres.

El capitalismo sólo busca acumular más y más ganancia, y por ende piensa explotar todo nuestro ambiente hasta las últimas consecuencias. Por ello reafirmamos que no existe alternativa sustentable dentro de la lógica del capital, y que sólo una economía basada en la planificación socialista, podrá cuidar nuestros bienes comunes a la par que satisfaga las necesidades del pueblo trabajador.

Regional Córdoba OP Hombre Nuevo

En un contexto de ajuste económico y de avance de la derecha neoliberal, la represión y la criminalización a los sectores más pobres y a la juventud se intensifican. Nuestras tareas ante esta coyuntura.

V

ivimos en un sistema basado en la desigualdad de clases, donde la gran mayoría de la población sólo posee su fuerza de trabajo para venderla a cambio de algunas monedas e intentar sobrevivir, y una minoría posee todo lo necesario para seguir manteniendo su poder en base de la explotación a las trabajadoras y trabajadores y la extracción de los recursos naturales. Al ser un país dependiente del imperialismo, siendo nuestra ultrajada América Latina el patio trasero de Estados Unidos, no sólo nos subsumen económicamente, sino también ideológica, política y militarmente. Podemos ver la injerencia yanqui instalando sus bases, militarizando nuestras tierras, utilizando zonas enteras de los países caribeños para hacer experimentaciones de sus nuevos métodos genocidas, como también financiando el armamento y entrenando a las fuerzas represivas locales con el objetivo de su “profesionalización para la eliminación del narcotráfico”. Así es que nuestra tierra llora la sangre de todos nuestros caídos en la lucha y de todos los perseguidos por ser pobres.

Con la caída de los precios internacionales de las materias primas, todos los planes de EEUU contra la insurgencia latinoamericana (especialmente contra los procesos revolucionarios de Venezuela y Colombia), y limitaciones en nuestras propias fuerzas, se llega hoy a un cambio de momento político en la región. La llegada de Macri al gobierno tiene su repercusión en términos internacionales, ya que no le tiembla el pulso al alinearse de manera directa a las exigencias del gran capital mundial. Por eso, con mayor fuerza todavía, se torna urgente la lucha antiimperialista por la independencia política y económica de toda Nuestra América.

Estos grandes movimientos tienen su traducción en el territorio nacional, combinando una política de represión abierta con una construcción de sentido común reaccionario. Como la patria de los CEOs que gobiernan son los dólares, necesitan implementar una política que redunde en el engorde de

sus bolsillos, caiga quien caiga. No pueden permitir que el pueblo organizado arremeta con fuerza contra sus medidas, ni que los sectores más empobrecidos embistan contra la imposición del hambre. Y como bien saben los gobernantes, la juventud juega un rol fundamental en la edificación de una nueva sociedad (o en la reproducción del mismo sistema con un cambio de color). Por eso, es que apuntan fundamentalmente a nuestro sector para la cooptación de las fuerzas represivas, montándose en las condiciones de miseria que ellos mismos generan para luego ofrecernos la misma salida fácil con dos caras aparentemente opuestas: la gorra ortiva, o el tubo de la droga.

Mientras 975.000 jóvenes no pueden acceder ni al estudio ni al trabajo, una política que pretende actuar de “novedosa” para la inclusión social de la juventud es la promoción de primer empleo joven en las nuevas policías locales del conurbano bonaerense. Esta ley, aprobada en julio del 2014 bajo la gobernación de Daniel Scioli, que propone como objetivo principal la “prevención” y “descentralización” de las fuerzas, hace montar hoy en día a más de 20mil jóvenes reclutados de entre 18 y 35 años. Existe también un gran reclutamiento de jóvenes mujeres bajo el fin de darle una cara “más humana, sensible, amigable y fresca” a la institución represiva, llegando a registrarse en enero del 2015 un porcentaje femenino dentro de la nueva fuerza del 60% en Quilmes, 54% en Gral Pueyrredon, 60% en Necochea - Tandil y 70% en Olavarria - Bahía Blanca. Claro que no se nombra la enorme dificultad en la que nos encontramos las jóvenes mujeres para conseguir un trabajo estable, más si somos madres, y aún si logramos no ser captadas por las redes de trata al ser engañadas con anuncios de trabajos falsos.

La otra cara de la moneda, muestra la cooptación de pibes en las redes de narcotráfico mediante el consumo de drogas.

Este es otro “negocio fácil”, organizado en los barrios por redes mafiosas que conviven y articulan con la policía, mantienen a los

verdaderos poseedores del poder narco intactos, mientras mandan a lxs pibxs pobres a ser carne de cañón para su propio beneficio. En un sistema donde ningún derecho fundamental esta garantizado, a lxs pibxs más marginadxs socialmente les ofrecen este paliativo que no hace más que ponerlos en una cuenta regresiva hacia la muerte.

Ante la falta de educación, salud, vivienda, trabajo digno, proyección de futuro, la burguesía profundiza este sistema perverso de muerte ofreciendo a pibas y pibes una supuesta salida al hambre a condición de volverse en contra de su propio pueblo, ya sea con la gorra o el tubo.

Una política de Estado Pero esto no puede ser posible sin la legitimación del poder judicial. Mientras quienes son responsables por matar a un pibe cada 28hs por gatillo fácil andan sueltos y sin culpa, el Tribunal Superior de Justicia falla a favor de que la policía requise y realice detenciones sin ninguna intervención judicial. La policía involucra a lxs pibxs de los barrios en la red del delito que ellos mismos organizan y luego justifica legalmente las detenciones arbitrarias, abuso de autoridad, escarmientos, y culpabiliza a la víctima quedando ellos amparados por la ley. Papel fundamental juegan también los medios hegemónicos, que gritan a coro (casi literalmente): “¡Tolerancia cero frente a cualquier pibe que tenga pinta de chorro!”.

En el mismo sentido va la política impulsada por la más rancia derecha para intentar remover la memoria popular. El discurso de la compasión con los genocidas que “no pueden seguir en cárcel común debido a su salud deteriorada por la vejez”, las editoriales fachistoides de La Nación, y los dichos de funcionarios, incluídos los del propio presidente Macri, buscan, por ejemplo, relativizar la sangre delos 30.000 detenidos desaparecidos en la última dictadura cívico-militar. Pero por más que quieran lavarles la cara a los viejos y nuevos fachos,

nosotros somos una juventud que no olvida, que no perdona, ni se reconcilia.

Algunas tareas Encontramos fundamental emprender una profunda tarea educativa, dentro de las escuelas, en las barriadas populares, mediante expresiones artísticas y comunicacionales, para desnaturalizar el rol de la policía, del poder judicial, el discurso de los medios masivos y la relación entre la existencia de la violencia y la desigualdad de clases. Sólo con una profunda pedagogía revolucionaria podremos aportar en la formación de uno de los aspectos de la consciencia necesaria para la transformación social: la dimensión antirrepresiva. Entendemos imprescindible seguir denunciando pública y jurídicamente a todos aquellos que implantan la violencia sobre nuestros cuerpos: desde el que gatilla y nos desaparece, hasta el que administra el Estado, ya que todos son parte del engranaje que hace funcionar a este sistema de muerte.

Solo con una real inserción de las organizaciones en la vida del pueblo es que podremos avanzar en este aspecto. Creemos fundamental fortalecer a las organizaciones sociales y políticas, como alternativas reales para lxs jóvenes y para seguir acumulando fuerzas con la perspectiva de disputa del poder. Y esta impostergable tarea, debe tener como horizonte, la construcción del empoderamiento del pueblo y la juventud como nueva generación, para así generar las condiciones indispensables en la lucha por una transformación social y política radical.

¡Por una Juventud organizada contra toda forma de marginación, persecución y criminalización! ¡Por un mundo donde las y los jóvenes tengamos pleno acceso a la vida! ¡Por la patria socialista!