2 minute read

INFRAESTRUCTURA MUNDIALISTA

INFRAESTRUCTURA MUNDIALISTA ¿REALIDAD O FICCIÓN?

POR: LIC. JUAN CARLOS ZAMORA Twitter@JCZamora07

Advertisement

l mundial de Qatar llegó a su fin y más allá de mi experiencia deportiva con el histórico triunfo de la selección de Argentina comandada por Lionel Messi, el haber vivido durante 40 días en Doha me permitió conocer la impactante infraestructura de un país que se preparó para recibir a gente de todo el mundo.

Qatar cuenta con una superficie de 11,571 km2 y con casi 3 millones de habitantes, sin embargo, Doha, que es su principal ciudad, alberga aproximadamente 2.4 millones de personas, cifra que casi fue duplicada por los aficionados que asistieron a la Copa del Mundo, quienes pusieron a prueba la infraestructura

construida para la realización de un evento de magnitud colosal.

La ciudad fue planeada y diseñada para ser compacta, de cierta forma amigable para los peatones y el uso del transporte público, dos de las cosas que más resonaron para los asistentes al mundial. Los breves trayectos en alguna de las 37 estaciones de las tres líneas de su lujoso metro contrastaban con las enormes distancias que se debían recorrer para llegar a los ocho estadios que se construyeron en los últimos años. Uno de los principales ejemplos de infraestructura mundialista construida desde cero se encuentra en la zona de Lusail, ubicada a 15 km del centro de Doha y que tiene como principal atracción el estadio con capacidad para 88,966 aficionados en donde la albiceleste venció en la final a Francia.

En esta zona en donde hace algunos años no había más que arena y polvo, los asistentes al mundial encontramos una novedosa ciudad satélite con zonas residenciales, corporativas,

comerciales, de recreación y una marina, todo con un nivel de lujo a la altura de las principales urbes del mundo.

De los ocho estadios construidos específicamente para el torneo queda poco de que hablar. Todos los inmuebles asombraron a propios y extraños por su accesibilidad, su modernidad, |así como por los servicios y confort, pensados para ser parte de una experiencia única, por lo que se han convertido en el modelo a seguir para los futuros nuevos estadios de todo el planeta. En conclusión, los más de 200 mil millones de dólares utilizados para financiar el mundial y que fueron obtenidos del excedente del negocio gasífero y petrolero del país, se notaban en prácticamente todos los rincones de la ciudad; ahora quedará la duda de lo que sucederá en los próximos años y sobre todo será bueno descubrir si el ambicioso, y costoso, plan para posicionar a Qatar resultó ser el camino acertado.

This article is from: