alandar nº 258 - mayo 2009

Page 1

alandar Revista de información social y religiosa

Año XXVI - Nº 258. Mayo 2009 - 2,50 euros

El estado Vaticano

T

Seres excepcionales

ener un hijo o una hija con discapacidad hace tiempo que ha dejado de ser una ‘desgracia’ que ocultar. Nunca lo fue en realidad. Por mucho que la sociedad se empeñara en vestir de ‘desgracia’ la vida de quienes les tocó la tarea de compartir

nitores narran los avatares que van señalando la existencia de niños y niñas que padecen patologías sobre las que todavía se desconoce casi todo. El interés que despierta la narración de su quehacer cotidiano ha hecho coincidir a varios escritores muy conocidos (Kezaburo Oé, Márius Se-

das de sus pequeños. Convivir con la realidad diaria de la discapacidad lleva, a los padres y a las madres, a luchar con situaciones complejas en una sociedad donde el éxito del individuo se centra en poseer un cuerpo estupendo, ser joven y deportista. La belleza física,

Las diferencias, sean cuáles sean, no son aceptadas por una normalidad excluyente. su existencia con un pequeño aquejado de enfermedades ‘raras’. En este número de ALANDAR, nuestra colaboradora Belén de la Banda recopila un puñado de historias extraordinarias en las que sus proge-

rra, Antonio Martínez o Ignacio Martínez de Pisón) relatando en primera persona los modos distintos, muchas veces originales, de enfrentarse con los numerosos obstáculos sociales y personales que se plantan delante de las vi-

aquella marcada por unos cánones comerciales, reina sobre todo lo demás. Las diferencias, sean cuáles sean, no son aceptadas por una normalidad excluyente. Mucho más si éstas son definitivas, irreversibles. Por ello, los proge-

nitores de hijos e hijas con discapacidad deben cargarse de valentía y recursos propios para asumir la incomprensión de los que les rodean. En España se ha avanzado mucho en la integración de pequeños con ‘necesidades educativas especiales’. Integrar su devenir en el del resto de la comunidad se convierte en tarea de toda la sociedad. Quienes optan por dedicar su tiempo a estar a su lado, conforman una gran familia de seres excepcionales. Personas que desde el voluntariado o desde la asunción de su responsabilidad, como padres o madres, derrochan generosidad y esfuerzo en una tarea preciosa y única.

Con motivo del 80 aniversario del estado Vaticano, recibíamos en alandar la carta de un suscriptor que decía, “como muchos teólogos católicos y gran parte de lo que llamamos la iglesia de base, a la que humildemente pertenezco, abogo por la desaparición del Vaticano como estado y, consecuentemente, por la supresión de todos los nuncios que actúan ante la ONU y ante los distintos países de todo el mundo como embajadores del supuesto ‘estado Vaticano”. Un estado, por otra parte, concedido a través de los Pactos de Letrán por el dictador Mossulini a cambio de reconocimientos y favores mutuos. Acabamos de celebrar la Semana Santa, tiempo propicio para profundizar en la vida y la muerte de Jesús, y sobre todo en el mensaje que nos dejó a las y los que creemos en El. No hay nada en su vida y en sus escritos que pudiera prever que Jesús quisiera un estado como el del Vaticano ni una Iglesia Institución como la actual. Sin profundizaciones más teológicas y sólo utilizando los mismos argumentos que el Papa y los Obispos utilizan para negar el acceso de la mujer al sacerdocio, afirmamos que Jesús no quiso ni soñó nunca con un estado Vaticano. Jesús quiso una iglesia de iguales, sin poder, al servicio de los más pobres y excluidos. Repasando entre los elegidos y sobre todo el primero, Pedro, no nos encontramos a ninguno de los instruidos y más ricos de la sociedad ¿Quién era Pedro? Un pescador, un inculto pescador, pobre… como muchos de sus compañeros. ¿Quiénes tienen hoy los sitios preferentes en la Iglesia Institución? Los ricos, los que tienen poder, político y económico… ¿Qué pasaría si el Vaticano no existiera? Seguramente seríamos más creíbles cuando hablamos del mensaje de Cristo. Hoy más que nunca tiene sentido una iglesia de base, de iguales, sin poderes políticos y económicos, que sepa dialogar con otras religiones en pie de igualdad y no desde el poder y la prepotencia. Quizás este sería el principio del final de la crisis, al menos de la que sufre la Iglesia.

En este número... ...en voz alta Pensar en voz Alta, opinar en voz Alta, denunciar en voz Alta… Ninguna de las tres afirmaciones es fácil, ni están al alcance de todas las personas, ni de una mujer. Por ello soy afortunada, porque desde estas páginas puedo contribuir, en voz Alta, a hacer una pizca más fuerte nuestra esperanza,... Página 12

Los éxtasis de un místico comprometido

Mayo mira al movimiento obrero

Página 6

Página 15

“La Iglesia tiene que escuchar las voces”

En la labor misionera el testimonio es esencial

Página 8

Página 24


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.