¿Quién me compra el calendario y el taco para el año que viene? gritaba Garrampas -así lo nombraba mi madrecallejeando por Ramón y Cajal veinte. Garrampas tenía garrampas, y todos los momos y todas las historias en su histrionismo hiperbólico del almanaque, y también anunciaba el año nuevo a voz en grito: ¿Quién me compra el calendario y el taco para el año que viene? histriónico, hiperbólico, histórico como todos los años lleno de sus santos del día histriónicos, hiperbólicos, históricos: San Ramón Nonato, Santa Rita-Rita. Que te conserve la vista Santa Lucía… … dame una cita … vamos al parque El almanaque, en fin, es, será, histriónico, a veces… hiperbólico, otras… histórico, casi siempre salvo esos días que uno no está para nadie. Un año, sería un día cualquiera, pero fue un año, Garrampas no vino, y no se acabaron los años nuevos Ahora son mujeres de vestido translúcido y tipos graciosos con pajarita o capa y caspa, histriónicos, hiperbólicos, históricos los que dan las doce campanadas sin que haya preparado las uvas porque Garrampas dejó de avisarme un año, sería un día.
2018