Apreciable lector,
Recuerda que lo maravilloso de la infancia,
, es que cualquier cosa es extraordinaria.
Hace mucho tiempo que Camila y Sebastián no salían de paseo con su abuela Esperanza, habían olvidado la tranquilidad que sentían cuando tomaban su mano mientras caminaban por el parque.
Camila miró el cabello blanco de su abuela y le preguntó: - Abue, ¿para ti qué es crecer? Es vivir, si no vives, no creces y si no creces, no aprendes a apreciar los momentos - contestó la abuela Esperanza. Los tres permanecieron sentados en la banca del parque, mientras observaban como los niños se divertían.
Sebastián detuvo su mirada en el niño que trepaba un árbol, por un momento se vio así mismo llegando a la rama más alta, no le importaban los raspones de sus rodillas y manos porque se sentía un niño grande y valiente.
- Crecer es aprender que alcanzar una meta no es fácil, pero vale la pena intentarlo hasta lograrlo – dijo Sebastián mientras miraba como el niño en el árbol sonreía.
Camila observó a la niña que pintaba con acuarelas, recordó la primera caja de colores que le regaló su abuela, con la que dio color a infinidad de hojas en blanco, dibujando castillos, animales y paisajes, todo aquello que ella imaginaba se volvía real solo con unos trazos.
- Crecer es aceptar que hay días grises y no por ello, debes de sentirte triste, Imagen: porque siempre hay algo o alguien que devuelve el color Un niña pintando con acuarelas a todo – dijo Camila cuando * Es la misma niña que aparece tomaba la mano de su en la página 7 abuela.
Mientras, la abuela miraba a unos niños que jugaban con tierra, sus manos y caras estaban sucias, se reían a carcajadas e intercambiaban miradas de complicidad como cuando sus nietos acababan de hacer una travesura. - Cuando crecemos dejamos de asombrarnos de aquello que nos rodea, no prestamos atención a los pequeños detalles y a veces los momentos más simples son los más significativos.
Imagen: Una niña y un niño juegan con tierra * Son los mismos niños que aparece en la página 7
Sebastián se quedó unos minutos pensando y después le preguntó a su abuela: ¿Qué debes recordar al crecer? La abuela Esperanza suspiró y respondió: - La valentía para darte cuenta que eres fuerte, la capacidad de asombrarte por tu entorno, la facilidad para soñar e imaginar, pero sobre todo la curiosidad para vivir.
Sé valiente
Asómbrate
Sueña
Vive
Camila y Sebastián abrazaron a su abuela y ambos le dijeron: - Gracias por enseñarnos que crecer no significa olvidarnos de los niños que fuimos.