El número 7 de “Papeles de Humo” vuelve a ser un número ecléctico, donde podéis encontrar un pintor-grabador, tres poetas, dos fotógrafos y un pintor, demostrando que las distintas artes no son en el fondo tan diferentes y que vivimos en un mundo interconectado donde todo es posible.
Colaboran en esta ocasión: Marco Temprano (pintura y grabado) Yela Pather (poesía) Julián Alonso (fotografía) David Trashumante (poesía y performance) José Luis Díaz (fotógrafía) Enrique Gómez Crespo (poesía) Luis Moro (pintura) Todo el contenido de la revista es propiedad de sus autores. Hacen “Papeles de Humo” Fernando Zamora, Jesús Aparicio y Julián Alonso. Diseño: Julián Alonso. Ilustración de portada: Marco Temprano. Contactos: julianalonso55@gmail.com
SE RECOMIENDA SU DIFUSIÓN
MARCO TEMPRANO
Primarium
MARCO TEMPRANO
Daedalus
MARCO TEMPRANO
Tertia
MARCO TEMPRANO
Cruce de curvas
Mudar en rojo YELA PATHER Puntum Millenium
Un viento suave por la piel de una amapola de un erizo arcilloso de su diario.
Aferrarse al papel como aferrarse a la carne. Mostrar al mundo un papel como exhibir un tatuaje.
Fue el reclamo de ladrones en la noche. Fin de la culpa y del desierto.
Sabe que no llorará en un rincón sombrío ni borrará el tatuaje cuando su vuelo atraviese esta mente-corazón.
ÂżHabrĂĄ tribu para un corazĂłn trillado y anhelante?
Ha caminado en silencio con el chakra rojo amenazado. Desde los veinticinco a単os dando su banco de tiempo al mundo.
Imagen de Yi Dong
JULIÁN ALONSO
JULIÁN ALONSO
JULIÁN ALONSO
JULIÁN ALONSO
JULIÁN ALONSO
DAVID TRASHUMANTE
SOLO AUTOMANDAMIENTOS Mira la tormenta de frente aunque te llene los ojos de arena. Protege la pasión que desnuda el espejo y podrás conocer el otro lado. Nunca temas a la soledad misma (la misma que hace que te fumes los cigarros como un títere) ni a oir el eco que te reverbera. Mira hacia atrás y reconócete en los que se quedaron por el camino. Y asume, irreversible, tu final pero no lo esperes. De Parole, parole y otras palabras. (Ed. Trashumantes, 2006)
HAMBRE DE AMOR Tiene su propio comedor el hambre de amor. A él llegamos todos como niños con rejas en la mira, a devorar los platos que se sirven, casi siempre, más bien fríos, con ese amago de lluvia en el estómago que se alarga hasta el postre. El cocinero pela jugosas manzanas que deja encima de la mesa para que el tiempo las oxide. Nadie come. De Parole, parole y otras palabras. (Ed. Trashumantes, 2006)
PEZ VOLADOR Casi siempre te encuentro cerca, a menos de un paso de un beso. Casi siempre. Eso es lo bueno. Eso y casi nunca decirnos "para siempre". El resto son gestos cotidianos: cambiar el agua de la pecera, echarte a volar. De El amor de los peces (Unaria, 2014)
LA PREGUNTA La muerte no da nada mas que miedo.Batania
¿A, ante, bajo, cabe, con, contra, de, desde, en, entre, hacia, hasta, para, por, según, sin, so, sobre, tras la muerte? De A Viva muerte (inédito)
LEES, LUEGO EXISTIMOS A ti y a mi en este momento sĂłlo nos une este verso. Ahora este otro que ya termina. Afortunadamente continĂşa en este otro y en este y en este consecutivamente. Por favor, no dejes de leer no levantes la vista del papel no me dejes solo ante el lenguaje. De verdad, si estĂĄs pensado en hacerlo recapacita, piensa en las consecuencias
de dejarme aquí, escribiendo para nadie. Midiendo a oscuras dentro de este libro cerrado la distancia imposible que nos separa. Puedo si quieres callarme un poco para que te lo pienses. (
)
¡Y AHORA GRITO PARA LLAMAR TU ATENCIÓN! No tengo nada que perder porque cuando este poema termine todo habrá acabado. Dos extraños, perdiéndose de nuevo en su soledad. De Tacto de texto. Inédito
JOSÉ LUIS DÍAZ SEGOVIA
JOSÉ LUIS DÍAZ SEGOVIA
JOSÉ LUIS DÍAZ SEGOVIA
JOSÉ LUIS DÍAZ SEGOVIA
JOSÉ LUIS DÍAZ SEGOVIA
ENRIQUE GÓMEZ CRESPO
Siempre he escrito así, haciéndome el idiota, como que no me entero, de lo que escribo. Incluso a veces, parece, que robo versos de otros que no conozco y cuento historias, que siempre acaban mal.
ENRIQUE GÓMEZ CRESPO A Roberto Juarroz
Un día dejamos de reírnos, recuerdo, que fue por algo cotidiano, dos días de cielo gris con su aguacero de cenizas, y ya han pasado diez años. Recuerdo, que un día dejamos de reírnos, porque leímos a un poeta que la vida iba en serio y terminaba mal. Dejamos de reírnos, porque otro dijo que todos construimos una cárcel y yo añadí, y cavamos un pozo. Dejé de reírme, ahora lo recuerdo, porqué deseé la muerte de mi padre, para heredar su abrigo.
ENRIQUE GÓMEZ CRESPO
Como se extingue la llama Que no quiere arder, así Se apaga un hombre.
ENRIQUE GÓMEZ CRESPO
A Emile Cioran
Con veintidós años, Dejó de dormir, y quiso Convencernos a todos De que vivir No merecía la pena. Me extrañó saber, que Murió con ochenta y cuatro De muerte natural.
ENRIQUE GÓMEZ CRESPO
Llegaron las palabras Muertas. La necropsia Es concluyente: veneno. Incluso en las vocales Aparece Fauna cadavérica.
LUIS MORO
LUIS MORO
LUIS MORO
LUIS MORO
LUIS MORO