Gracias a / Many thanks to John Ata Edward Brave Eric Reynolds Prof. Ian Berdej Realizado en Mac y corregido con Tipp-ex Made on a Mac and corrected with Tipp-ex Tipografía / Tipography: Sabon
© de la presente edición: Blur Ediciones, S.L. © de las ilustraciones: Nono Kadáver © del prólogo: Edward Brave Edita: Blur Ediciones, S.L. Abtao, 25 Interior Nave C T 91 434 81 78 • F 91 434 10 27 Otros títulos de Blur Ediciones disponibles gratuitamente on-line en: http://librosdeblur.blogspot.com Imprime: Brizzolis arte en gráficas ISBN: 978-84-613-4149-8 Depósito Legal: Este libro ha sido impreso en papel: Cubiertas: Conqueror Texture 100% Reciclado Verjurado Blanco Brillante 120g distribuido por Antalis Interiores: Conqueror Texture 100% Reciclado Verjurado Blanco Brillante 220g distribuido por Antalis
Nono Kadáver. Rotulando a la Española “Creo haberte contado que mi viejo era arquitecto, de los de antes, con su bata blanca y sus rotrings, aunque también tenía una vision muy ‘Bauhaus’ de su curro. Sabía de carpintería y de los demás oficios de la construcción, iba a pie de obra y volvía con los zapatos hechos una mierda”. Me paro a pensar en lo que me cuenta Nono. No recuerdo que me hubiera hablado de ello antes pero lo cierto es que es un dato importante para entender todo lo que vendría después. “Delineaba sus planos –continúa– y una cosa que me fascinaba por encima de todo era esa rotulación tan limpita, sin plantillas, algo que me influyó mucho cuando empecé a dibujar cómics”. Es difícil determinar cuándo Nono empezó a dibujar tebeos. También lo es el datar cuándo comenzó a rotular los de otros para diferentes editoriales. Lo primero tal vez se remonte a su más tierna infancia, si es que esa etapa del autor de Toni Bolinga puede calificarse como tal; lo segundo fue allá por los primeros noventa y generó alrededor doscientos rótulos para autores de la talla de Robert Crumb, Gilbert Shelton, Johnny Ryan, Joe Sacco o Peter Bagge. Era una época en la que nuestro protagonista ni siquiera sabía cómo se encendía un ordenador y se veía obligado a hacerlo a mano, con las más diversas herramientas, pero a mano. “Todo vale. Básicamente rotuladores de toda clase, mucha tinta china y pincel pero nunca una plumilla, me salen unos trazos de puta pena”. Un oficio del siglo pasado. Junto con su padre, otra de las influencias del joven Kadáver a la hora de iniciarse en su trabajo como rotulista fueron esos viejos anarquistas que, con una patata, conseguían imitar el sello del Gobierno
Civil para hacer salvoconductos y cédulas de identidad. Una labor anónima que, salvando las distancias, comparte ciertas similitudes con la de Nono quien, no en vano, define su labor como “un curro de falsificador, por así decirlo”. “Siento mucha admiración y respeto por los falsificadores, sobre todo por los de documentos oficiales y papel moneda”, bromea Nono. “No, no bromeo –me corrige–. Creo que, incluso falsificando, cada uno deja su impronta. Aunque en este curro hay que buscar soluciones que se asemejen a lo que podría haber rotulado el autor, mi pulso y mi trazo nunca será el mismo que el tuyo. Lo que sí que hay que hacer es olvidarse del estilo personal de cada uno y adaptarse al del artista. Eso se consigue leyendo mucho, diseccionando sus trabajos, en el fondo, aprendiendo de ellos porque lo único importante es que el acabado final se asemeje todo lo posible al del autor”. Una labor complicada que requiere dedicación pero que habitualmente pasa desapercibida para el común de los mortales, sean estos los propios interesados –los autores–, los destinatarios –lectores– y, si nos apuran, incluso para los dueños de las editoriales que, en los últimos tiempos, prefieren no intervenir en los originales y traducir los títulos con una llamada de asterisco y una nota al pie. “En cuanto a los autores, nunca consulté con ellos. No tuve la oportunidad y, por otra parte, me daría corte. Sólo traté con Shelton, supongo que por proximidad geográfica, porque vive en París y viene bastante a España. Shelton me felicitó y eso es algo que no tiene precio. Me hubiera gustado poder hacer lo mismo con los demás autores, no por frikismo, sino por captar lo que quieren, cómo enfocan su trabajo, por dejarles plenamente satisfechos. Fue una pena no haberlo podido hacer con todos. En cuanto a los lectores, no sé si valoran este trabajo pero, sinceramente, no lo creo. Por último, respecto a las editoriales, hay varias lecturas: por un lado están los que son favorables a traducirlo todo, consecuencia directa de nuestra Real Academia, lo que en ocasiones provoca situaciones un
tanto sonrojantes como cuando a Karl Marx, Oliver Twist o Sigmund Freud se les traducía por Carlos Marx, Oliverio Twist y Segismundo Freud. En el mundo de los tebeos un buen ejemplo de ello serían las tiras de Zippy the pinhead de Bill Griffith que aquí se llamó Zippy Cocopera y en cuyas tiras, las referencias a personajes norteamericanos se cambiaban por otros españoles dando lugar a frases del tipo ‘Me gustaría parecerme a Lina Morgan’. No soy traductor así que no me toca juzgar lo mal que lo hacen algunos pero, en mi opinión, no tiene ningún sentido y en esos casos prefiero una nota a pie de página. Por otro lado están los editores que quieren que se respete escrupulosamente el original. Entonces, ¿por qué no leen el cómic en inglés? A todo esto se suma que, como buenos negociantes que son, en los últimos tiempos las editoriales han decidido ir a lo barato: una Comic Sans, que lo rotule el sobrino del jefe y así todo queda en casa. Lo de los rotulistas es un oficio del siglo pasado. La mayoría de la gente que se dedicaba a este negocio debe de estar muerta”. Spanish is different... …y los tebeos españoles también lo son. Aquí los perros no hacen bark sino guau, los gatos no hacen meaw sino miau, las vacas muuu en lugar de mooo y lo mismo sucede con asuntos cotidianos como llamar a una puerta, disparar un arma de fuego, tener hipo, reírse, llorar o demostrar amor a alguien dándole un beso. Hechos aparentemente banales pero que tienen su reflejo en las viñetas de los tebeos y cuya grafía debe de ser adaptada en su traducción al castellano, idioma que, por si no fuera suficiente, posee letras y signos propios que en algunos casos no son compartidos por ningún otro del
mundo, como sucede con esa decimoséptima letra del abecedario que se remonta a la Edad Media y representa un fonema consonántico de articulación nasal y palatal. “En este curro hay que buscar soluciones que se asemejen a lo que podría haber rotulado el autor –explica Nono–. En inglés no existen las tildes, las virgulillas ni las admiraciones invertidas y además es más sintético que el español. Lo que ellos te cuentan en dos palabras se convierte en una frase en nuestra lengua, ¡menudo sufrimiento para los que tienen que rellenar bocadillos!”. Por eso es deseable contar con la complicidad de un traductor al que consultar si un determinado cambio, aconsejado por el espacio o la estética, es correcto desde el punto de vista lingüístico, aunque no siempre es posible. “La mayoría de los traductores con los que he currado son unos capullos que van de subidos, salvo Hernán*, con el que es un lujo poder currar. En principio lo que hay que hacer es ceñirse a reflejar lo que dibujó y rotuló el autor, ahora bien, a veces resulta que donde había una M en inglés (que tapaba el dibujo), resulta que sale una I en castellano. Obviamente, habrá que hacer un ‘arreglillo’. El reto es que no se cosque el lector y hay casos en los que no se da cuenta ni el autor. Misión cumplida”.
* Hernán Migoya, (Ponferrada, 1971). Periodista, director de cine, escritor de títulos como Todas Putas y Putas es poco, guionista y traductor de tebeos entre los que se encuentran los de Pete Bagge. Sobre esta última actividad, Migoya ha declarado “no soy un gran traductor (…) pero creo que sé conectar con la onda emocional que requiere la obra de Bagge. Algún pájaro bobo se sigue quejando por Internet de que soy muy malo, porque no sé distinguir entre ‘debe ser’ o ‘debe de ser’ (…) pero hay quien no tiene capacidad para comprender que un traductor es mejor profesional cuanto más adecua la manera de hablar original de los personajes con la manera de hablar que tendrían sus equivalentes hispanoparlantes, aunque sea normativamente incorrecta. Ningún conocido mío –ningún conocido digno del universo de Odio– diría jamás “Debo de ser idiota” para expresar posibilidad”.
Nono Kadáver. Lettering the Spanish way “I think I told you my dad was an architect, one of the old school, wearing a white coat and Rotring markers, yet he also had a pretty much Bauhaus vision on his profession. He knew about carpentry and other building related skills. He’d go ‘building site’ coming home, his shoes wrecked”. I stop to think about what Nono tells me. I don’t recall having heard about it before, but it sure is a great clue to understanding everything that comes after. “Outlined his plans –he continues– what fascinated me more than anything was his clean lettering, without templates, it had a big influence on me when I began drawing comics”. It is hard to determine when Nono started drawing comic strips. Dating when he began lettering strips for various publishers is difficult too. The first probably goes back to when he was still a child, that is if we consider the phase of Toni Bolinga as cartoon drawing. The lettering goes back to the early nineties when he did about 200 letterings for authors the likes of Robert Crumb, Gilbert Shelton, Johnny Ryan, Joe Sacco or Peter Bagge. It was a time when our main character didn’t know how to turn on a computer and for that reason had no choice but to do it by hand, with the help of all kinds of tools, yet by hand. “Anything goes. Basically all kinds of felt tip pens, lots of ink and brush but never a pen, my strokes get really shitty”. A profession of the last century. The young Kadaver was influenced by his father, and those old anarchists who, with a potato, managed to imitate the seal of the Civil Government to make safe-conducts and identity cards. Anony-
mous work, which, relatively speaking, bears some similarities with Nono’s who, not in vain, defines his work as that of a “forger”, so to speak. “I feel great admiration and respect for counterfeiters, especially those of official documents and paper money”, jokes Nono. “No, I am not joking” he corrects me. “I think that even falsifying, we leave our mark. Although in this job we must seek solutions that resemble what the author could have done, my pulse and my line will never be the same as yours. What you have to do is forget your personal style and adapt to the artist’s. This is accomplished by reading a lot, dissecting his work in debt, and learning from it, in the end the only thing that matters is that the outcome is an as close as possible resemblance to the author’s style”. A challenging job that requires dedication but that in many cases goes unnoticed to ordinary mortals. Although it concerns them, the authors, recipients, readers, and if you really ask, even owners of publishing houses, who in recent times, prefer not to intervene in the original translate titles using asterisks and a footnotes. “As far as the authors are concerned, I never consulted them. I never had the opportunity and, secondly, I would feel embarrased. I just dealt with Shelton, I guess due to geographical proximity, because he lives in Paris and comes to Spain fairly often. Shelton congratulated me and that is priceless. I wish I could have done the same with the other authors, not for obsessive fan behavior, simply to understand what they want, and how they look at their work. Understanding them well, I could do a satisfying job. It is a shame I have not been able to meet all. As far as readers are concerned, I do not know if they value my work but, I don’t think so. Lastly, regarding publishers, there are several interpretations: on one side are those who are favourable to translating everything, a direct consequence of our Royal Academy of the Spanish language. It so-
metimes leads to slightly embarrassing situations such as the direct and complete translation of Karl Marx, Oliver Twist or Sigmund Freud into Spanish: Carlos Marx, Oliverio Twist and Segismundo Freud. In the world of comics a good example of this would be Bill Griffith’s Zippy the Pinhead which translated into Zippy Cocopera. References to North American celebrities and figures were exchanged for other Spanish resulting in sentences like ‘I'd like to look like Lina Morgan*’. I am not a translator so it’s not up to me to judge how well some do, but in my opinion, it makes no sense and in those cases I prefer a footnote. Then there are publishers who want you to scrupulously respect the original. So why not read the titles in English? When add to this an astute sense of business which in recent years has inspired publishers to go on the cheap: the result is a 'Comic Sans' lettered by a nephew, to keep it in the family. Lettering is a profession of the last century. The majority of people who dedicated themselves to this are dead. Spanish is different… ... And so are Spanish comics. Here the dogs do not bark but wow, cats miau, cows muuu instead of mooo and the same applies to everyday matters like ringing a doorbell, shooting a gun, having the hiccups, laughing, crying or showing love to someone by giving them a kiss. Banalities, yet they are reflected in every single frame of comics and cartoons and their lettering style must be adapted when translated into Spanish. Were that not enough, Spanish has letters and characters, which in some cases, are not sha* Lina Morgan (María de los Ángeles López Segovia, 1937), a very famous Spanish actress.
red by any other language in the world. Letters like the seventeenth letter of the alphabet which dates back to medieval times and represents a consonant phoneme and palatal nasal articulation. “In this job you must seek solutions that resemble what could the author could have done, explains Nono. In English there are no acute accents or tilted exclamation and question marks it is more synthetic than Spanish. What they tell you in two words becomes a phrase in our language, making balloon filling, a signwriters’ anguish”. Therefore it is desirable to seek the complicity of a translator to see if a particular change, motivated by space or aesthetics, is acceptable from a linguistic point of view, although that it is not always possible. “Most of the translators with whom I worked are arrogant dickheads, except Hernan*, working with him is a pleasure. In principle what you have to do is stick to the author’s drawing and style. Sometimes, however, there proves to be an M in English (covered by the drawing), and in Spanish it comes out as an I. Obviously, this needs mending. The challenge is that the reader doesn’t notice, and there are cases in which not even the author realizes. Mission accomplished”.
* Hernán Migoya, (Ponferrada, 1971). Journalist, filmmaker, writer of titles such as All Whores!, Whores, to say the least!, and scriptwriter and translator of comics among which are those of Pete Bagge. On this last activity, Migoya said “I am not a great translator (...) but I think I connect with the emotional wave that the work of Bagge requires. Some idiots continue to complain through the Internet that I'm very bad, because I can’t distinguish between ‘must be’ (obligation) or ‘must be’ (supposition) (...) but there are always some incapable of understanding that a translator is a better professional the more he manages to close the gap between the way the original character speaks and its Spanish speaking double; albeit normatively incorrect. None of my acquaintances worthy of the universe of Hate would ever say something that would translate to English as ‘I might be an idiot’ to express the possibility”.
Títulos originales y fechas de publicación en EE UU / Original titles and USA release dates PAG.
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25 My suicide…
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13 Title page Sweatshop (spanish edition) 14 The hammies (title) / Applause Applause Bow Bow Aplause / Biff! Bam! Pow! / Slam! Barge! Barge! / Bash! Fume! / Slurp! Slorp! Burp! / Ha Ha Ha PAG. 15 Mel Bowling and his Sweatshop Minions in ‘The new recruit’ / The new guy by (Nick Calamari) PAG. 16 The peerless penciller created by (Alfred Post) PAG. 17 In beware… the (Tarantula!) / Carrie’s comic diary PAG. 18 This isn’t your father’s Freddy Ferret! / Onomatopoeias (2003) PAG. 19 A traitor in our midst / Snatch! Grab! Gasp! Haw Haw! Glom! / Shucka Shucka Shucka Shucka Shucka Fling! Slam! PAG. 21 Title page Eightball (spanish edition, March 1998) PAG. 22 Cover texts for Lloyd Llewellyn’s spanish edition PAG. 23 Eightball (spanish edition) PAG. 24 Contents Ghost world / Garage sale / Punk day / The first time / Hubba Hubba / The Norman square / A smile and a ribbon / October Note: Original page numbers are not the same in the spanish edition
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26 For Erika (Ghost world) / Extra Lloyd Llewellyn (spanish EightBall #8) / A story in three acts by (Daniel Clowes)
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27 End of Act one… / Act two / End of Act two… (David Boring, 1998-1999)
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29 Let’s talk sense about this here modern America (1975)
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30 City of the future (1967)
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31 Nukuler (sic) Holocaust kicks (1981)
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32 Dirty dog (1968)
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33 Kitchen kut-outs (1967)
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34 Eggs Ackley in ‘Eyeball kicks’ (1969)
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35 It’s the Ruff Tuff Creampuff (1970)
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36 (Karnal komix presents) What a world! Part one & Part two
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37 Squirrely the squirrel (1973)
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38 … and now those cute, adorable little Bearzy Wearzies by (R. Crumb) (1979)
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39 Mr. Knows-it-all in four more weeks (1972)
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40 Crybaby Beanhead in Crybaby’s blues (1976)
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41 The goose and the gander were talking one night by ( R. Crumb) (1977)
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43 Angry youth (spanish edition)
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44 Pussy hunter 6000! (2003)
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45 (Loady Mc Gee) in Stink boner’s V.D. bullet bra (2003)
PAG.
46 (Loady Mc Gee) and (Sinus O’Gynus) in Road retards (2003) / Queer bait of the month / Squirt! / Cerebral boner / Treasure hunt by (Johnny Ryan, 2003)
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47 The comics code authority (2004)
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48 (Loady Mc Gee) and (Sinus O’Gynus) in S.T.D.’s are funny by (Johnny Ryan, 2003)
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49 Brave new load (2003)
PAG.
50 (Loady Mc Gee) vs. the town whore (2003)
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51 Spit-ups (2001)
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52 (Loady Mc Gee) and (Sinus O’Gynus) in The latest fashion sensation (2004)
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53 Pukins (2000)
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55 Title page Rock ‘n’ Roll rot (spanish edition 1993)
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56 The musician with a mission (1993)
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57 Who sleeps with whom in the music business (1993)
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58 Record label executive (1994)
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59 In the company of long hair (1988) Rock spectacle (1992) The hotel room destruction specialists (1992) Indoor Woodstock (1993)
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60 To the max from (1991) Death of a roadie (1991) The rock journalist (1991) Music videos (1992) PAG. 61 The rude blues (2000) PAG. 62 The Stones and I (1994) PAG. 63 A teenage bore (1992) La academia de las rockstars (can't find this one!) PAG. 65 Title page Wonder Wart-Hog, in spanish El Superserdo PAG. 66 Smiling Sergeant Death meets WWH (1969) PAG. 67 Wonder blows an easy one (1968) / (WWH) meets Super-Hypnotist (1962) PAG. 68 Fearless, fighting, foul-mouthed WWH (1962) PAG. 69 WWH goes a freedom-riding (1965) WWH meets the merciless, menaced, Masked Meanie (1962) PAG. 70 Strike fever (1968) / WWH meets the Zymotic Zookeeper (1968) PAG. 71 WWH meets Pie Man (1968) / Super Granny (1965) PAG. 72 WWH takes a big sojourn in outer space (1974) PAG. 73 WWH builds a dream car (1967) PAG. 74 Philbert’s 100,000th dream / Sudden death (1978) PAG. 75 Onomatopoeias
CON LA COLABORACIÓN DE: