Yasunari Kawabata, nívea belleza
Dickens y su vulgaridad
Lo bello y lo triste es el testimonio póstumo de la maestría psicológica, del virtuosismo y de la originalidad de su obra. A los 72 años de edad se quitó la vida
Un pasado oscuro en tiempos victorianos pudo viciar reputaciones, así como a algunos de sus personajes, y este era quizá el propio temor de Dickens Christopher Domínguez Michael Pág. 6
Juan Ramón Rodríguez Pág. 7
VIERNES 10 DE JUNIO DE 2016
SUPLEMENTO CULTURAL
81
Comunicante “Prensa vendida”, eso es lo que dicen
“El periodismo consiste esencialmente en decir ‘lord Jones ha muerto’ a gente que no sabía que lord Jones estaba vivo”, Chesterton Por: Juan L. Simental
Págs: 4 y 5
2
El día del halconazo
“
¡Van ustedes a tener que salir para apoyar al señor Presidente!”, gritó un hombre desde la puerta de la oficina en donde trabajaba Arturo Gutiérrez Orihuela. Nunca supo quiénes o de dónde realmente eran, pero la mañana del 10 de junio de 1971, “gente del Gobierno” comenzó a evacuar las oficinas aledañas al Centro Histórico, obligando a los empleados a bajar a la plancha del Zócalo para unirse en favor de las medidas presidenciales para contrarrestar lo que, dijeron, “estos muchachos
han hecho”. “Pero nosotros éramos esos muchachos. Yo por lo menos lo era y tramitaba todavía mis papeles de titulación universitaria”, comenta el hombre ahora de 72 años. Siendo estudiante, a Arturo no le tocó viajar en los primeros trayectos que recorrían los vagones del Metro inaugurado en 1968, pero lo que sí le tocó fue la efervescencia del movimiento estudiantil que atestiguó como empleado del gobierno. La tarde del halconazo trabajaba
para la Dirección de Auditoría Fiscal Federal y junto a él sobre la plancha del Zócalo, recuerda que había alrededor de 30 mil personas entre empleados, estudiantes y militares. Vio a las tanquetas salir desde la calle de Corregidora, las personas que se resguardaban pegadas a la puerta Mariana corrían para la Catedral como si estuvieran en una zona de guerra. “Llegaban los granaderos sobre la gente sin importar si era mujer, niño o estudiante. Querían disolver la manifestación porque había muchas personas
que apoyaban a los alumnos y algunos vecinos lanzaban cosas a los militares desde los balcones de los edificios”… Al otro día, llegó a trabajar de manera normal y aunque nadie dijo nada del incidente, en su corazón y en su memoria los rastros quedaron. “Yo nunca vi que lastimaran a alguien, pero que lo hayan hecho. En aquel entonces, así era como se las gastaba el gobierno”. (“Recuerda El Halconazo”, Tanya Guerrero; 10 de mayo de 2016. Edición Comunicante).
“Debí nacer con la música dentro de mí, lo mismo que tenía el corazón”, Ray Charles. (Murió el 10 de junio de 2004).
La Efeméride 12 de junio, Día Mundial contra el Trabajo Infantil. En la actualidad, cerca de 215 millones de niños trabajan en el mundo, muchos a tiempo completo. Ellos no van a la escuela y no tienen tiempo para jugar. Muchos no reciben alimentación ni cuidados apropiados. Se les niega la oportunidad de ser niños.
Nomás por hablar de algo... Fue una entrevista la que detonó la expulsión de México de Plutarco Elías Calles. En ella, el Jefe Máximo responsabilizó al presidente Lázaro Cárdenas de propiciar la ola de huelgas que agitaba al país en esos días. Eso bastó para echar de México al fundador del PRI. La entrevista fue el 10 de junio de 1935. Diseño / Grupo Editorial HADEC
3 SATÍN Y SEDA
Un superhéroe siempre es mejor con una tapita Nadia Bracho
“Mire, quiero un teléfono”, dije y luego le indiqué con la mano cerca de la oreja
-
Señorita, ¿aquí venden teléfonos? -la pregunta era por demás obvia si me encontraba en un establecimiento de 30 metros cuadrados, todo completamente cubierto de celulares, accesorios y demás. -Así es. Mi nombre es “Sandraluzolveradelrio” y estoy para servirle. Tenemos la promoción de TU1000 y TY2, además le proporcionamos mensajes dobles a partir del segundo mes con vigencia en contrato con “roaming” automático... -yo me quedé en “¡Sandra qué!”. Esa forma de hablar rápido, sin respirar, hace que mis neuronas se compriman y mis reflejos se debiliten, por lo que mi mandíbula cedió y mis ojos se abrieron para dar crédito a todo lo que me había dicho. -Disculpe, señorita “Sandra”… -“Sandraluzolveradelrio” -corrigió presurosa. Yo quedé igual sin entender dónde terminaba el nombre y cuándo comenzaba el apellido, y si tenía dos tamp o c o me di por
entendida. -Mire, quiero un teléfono -le dije y luego le indiqué con la mano cerca de la oreja, imitando los ademanes de mis hijos cuando usan los aparatos-. ¿Podría enseñarme varios modelos? -Pase por acá -me muestra eficiente y, de pronto, una lista interminable de números, códigos y caracteres llenaron el espacio. -Mire, necesito un teléfono con “tapita” para mi hija, es un regalo sorpresa, pero me dice que lo necesita con mensajes y, de preferencia, que una “antenita” no se vea. -¿Qué contrato quiere usted? -agrega con la misma formalidad con que me dijo su nombre. -¿Qué me ofrece? -contesto de inmediato, poniendo en práctica lo aprendido en mi clase de Mercadotecnia. -Mire, en estos el teléfono es gratis y el plazo es a 18 meses, y en aquellos lo compra y se puede manejar con tarjetas. -Mire, la experiencia me ha enseñado que nada es gratis en esta vida, por lo que le tengo duda a los que regalan el teléfono -me disculpo al ver la cara de sorpresa de la empleada, y temiendo que no me vendiera nada. -Este es muy práctico, tiene cámara integrada, además
de que tiene conexión para Internet, la pantalla es de colores y cuesta …! –la cantidad me dejó paralizada, mirando solo a los ojos de la empleada. -Mire, ¿no tiene uno con carátula de color rosa de Kitty? Es el personaje favorito de la niña. -Solo tenemos del Hombre Araña y está en promoción… -¡Démelo! -¿No quiere saber cuánto? -No, si está en promoción le creo que está más barato; además, nadie desconfía jamás de un superhéroe. Esa tarde llegué orgullosa con mi adquisición. Mi hija observaba impávida, mientras le mostraba a su nuevo “amigo-celular”. -Es algo insuperable, no tiene “roaming”, por lo tanto no va a correr para ningún lado; los mensajes los puedes hacer tú desde este aparato, no sé si te contesten, pero algo es algo. No estamos en ningún plan o contrato, eso quiere decir que el teléfono es tuyo y lo puedes guardar hasta que te cases. Me hablaron de una cámara integrada, pero yo siempre he dicho que un artefacto debe servir para una cosa, ya si le pones más ni una ni otra, por lo que solo le pedí el que era “por naturaleza” teléfono… ¿Te gusta? -Y la tapa con pantalla de colores -dice algo molesta la joven usuaria. -Muy bien, así están las cosas. Si quieres con tapa es sacar diez de calificación en los siguientes tres años de secundaria en la materia de Español; ahora, si quieres el de pantalla de colores, son otros sobresalientes en la materia de Matemáticas. ¿Queda claro? -Mamá, creo que has hecho la elección perfecta -dijo y, tomándolo de la mesa, se perdió en el pasillo de la casa. Posiblemente no sea erudita en cuestiones modernas ni conozca el lenguaje adecuado para un tema con “mecatrónicos” tomando café. Pero desde el principio de los tiempos, la tiranía y el uso del poder hacen milagros en las relaciones de padres e hijos.
Esa tarde llegué orgullosa con mi adquisición
“¿Qué contrato quiere usted?”, preguntó con la misma formalidad VIERNES 10 DE JUNIO DE 2016
4
El periodismo, por natu
“Prensa vendida”, e
Por Juan L
“El periodismo consiste esencialmente en decir ‘lord Jones ha mue
D
icen de los ángeles, que los tiene que ver con el periodista porque, hay buenos y los hay ma- cada vez –una tras otra- es la misma: los. Claros, como la luz, y el periodista se expresa y la respuesta oscuros, como la noche. Ángeles que siempre se parece: “prensa vendida”. susurran al oído “sí” cuando es sí El rebaño ideológico en contra que día y “no” cuando es no; y ángeles que con día crece. Si por “libertad de expresión” se murmuran de seducciones, deleites y concupiscencias. Ángeles exaltados y entiende la posibilidad universal de ángeles caídos; los que flanquean las dar libertad a las ideas, hechas palapuertas de la Tierra Prometida y los bra, palabras de esas que se dicen con de flamígera espada a las puertas del la voz o se expresan en el papel, bienEdén… Ángeles como Voltaire y ánge- venido sea el júbilo de todos los que hacen de todos la posibilidad. Y es que les como Eco. Dijo Voltaire: “no comparto lo que expresar no es solo de unos: debiera dices, pero defenderé hasta la muer- ser de todos, aunque no siempre lo es. te tu derecho a decirlo”; dijo Eco: “las Al final es el privilegio y la obligación redes sociales le dan el derecho de de los que hacen el oficio: los que hahablar a legiones de idiotas”. ¿Cuál cen el periodismo. Hoy, sin embargo, hacer periodisde los dos es el ángel de la luz y cuál el de la oscuridad?, ¿cuál el caído; el mo –dicen tantos- es estirar la mano, es la incapacidad para exaltado? Dejó el Detrás de una resistir el cañonazo; buen Dios en macomputadora o un ser uno más entre los nos del hombre la más grande de las avatar, cualquiera dice peones del “chayo” o del “sobre amarillo”, potestades y el más cualquier cosa la más temprana enescabroso entre los tre las ocurrencias. Y, riesgos: la libertad, a pesar de eso, hacer periodismo sigue elegir uno entre ambos. Hay posibilidades que son tan solo siendo autovulnerarse, plantar el pie eso, el acaso, y cada cual sabe si la deja para ser el blanco de todos, los unos y o si la toma; hay otras que son deber, los otros, los que deploran el periodisque al tiempo que son privilegio se mo porque dice verdades y los que aboconvierten en piedra de obligado tro- minan de él porque no dice como ellos piezo. Expresar las ideas, por ejemplo. quieren que diga. En esto, sin embargo, es la libertad del Afirma la Palabra que los hijos no hombre la que manda. Y hasta los án- serán reos de los pecados de sus padres. En el periodismo es igual: lo que geles lo saben bien. unos hacen no puede manchar –no debiera poder- lo que otros hacen; los HOY, COMO CADA AÑO Junio 7; cada año es igual. Es uno de que han sido seducidos por el canto de esos días de una vez al año y siempre las sirenas, y los que aún creen y no resulta igual. Día de la Libertad de Ex- escuchan la voz y hacen el oficio como presión, es decir, de la libertad mayor: se hace la vida. Son tantos los que ahora deploran el salir de sí y manifestarse entre los vivos o elegir el anonimato, ese tirar papel del periodista, a secas, como si fuela piedra y esconder la mano… o ser ra solo uno, como si todos fueran igual; como si existiera un solo patrón, como si también como el silencio. Expresión, algo que, quizá, fuera una sola la medida, aunque ni si-
quiera dos gotas de agua son idénticas en su totalidad. Los hay de unos y los hay de otros, y cada cual debe y tendrá que responder. Algunos creemos aún.
TESTIMONIOS
“Cuan descubri informac un nego verdad de import
La libertad es de quien la trabaja, y se trabaja allí donde el riesgo está presente, de otra manera sería insulsa la materia libertaria; eso de amar a los que me aman tiene solo el mérito de la autocomplacencia. Se trata de amar –dijo Teresa, la de Calcuta- hasta que duela. El periodismo se hace igual… a veces duele. “Ana Carolina Cáceres nació con microcefalia. Los médicos dijeron que no sobreviviría. Hoy tiene 24 años. ‘Cuando leí un reportaje sobre un proyecto del Tribunal Federal Supremo para permitir el aborto en casos de microcefalia, me lo tomé como algo personal. Me sentí ofendida y atacada’. “‘No va a caminar, no va a hablar y, con el tiempo, entrará en un estado vegetativo, hasta morir’, fueron las palabras que pronunció el doctor cuando nació. ‘Crecí, fui a la escuela, me gradué y entré a la universidad. Ahora soy periodista y escribo en un blog. Quiero ser una portavoz de la microcefalia’” (“El testimonio de una periodista brasileña con microcefalia: ‘Soy una mujer plena y feliz’”, BBC
VIERNES 10 DE JUNIO DE 2016
Kapus´
5
uraleza, es de oposición
eso es lo que dicen
L. Simental
erto’ a gente que no sabía que lord Jones estaba vivo”, Chesterton
ndo se ió que la ción era ocio, la ejó de ser tante”,
Mundo; 1 de febrero de 2016). ----“Los periodistas en Veracruz estamos enfrentado una situación de temor, inseguridad, falta de mecanismos para hacer nuestro trabajo, cerrazón del gobierno, hostigamiento de las autoridades, presiones de los jefes e incertidumbre por no saber dónde está el enemigo. “A raíz del asesinato de la periodista de Notiver -Yolanda Ordaz, el 26 de julio del 2011-, 10 compañeros de la fuente policiaca huyeron del estado. Así que ahora somos periodistas de política o de temas sociales quienes cubrimos la nota roja. Pero por el miedo los compañeros ya no salen a la calle a cubrir la nota policiaca y las páginas se llenan con boletines de las autoridades. Otra complicación que tenemos es la falta de información oficial. Hay autoridades que de plano te dicen ‘si quieres te digo qué paso pero, por favor, no me cites, me metes en pedos’. ¿Qué puedes hacer?” (“Los riesgos de informar en Veracruz. Testimonios de 5 periodistas”,
nuestraaparenterendicion.com; 8 de diciembre de 2011). ----“El filo del sable me rozaba la yugular. A Los Beatles -ese era el apodo con el que nos referíamos a los tres milicianos- siempre les gustó la puesta en escena. Me habían sentado en el suelo. Descalzo. Con la cabeza rapada. Una profusa barba y vestido solo con el uniforme naranja que hizo tristemente célebre a la cárcel estadounidense de Guantánamo. John (el yihadista inglés) intentó acentuar el dramatismo. Me acariciaba el cuello con el acero sin dejar de hablar. “Con saña, el terrorista decía: ‘¿lo notas? Está frío, ¿verdad? ¿Imaginas el dolor que te produciría si te lo clavara? Un dolor inimaginable. Con el primer golpe te cortaría las venas. La sangre se mezclaría con la saliva’. “‘La segunda
espalda’” (“Aterrador testimonio de periodista secuestrado por ISIS: ‘El filo del sable me rozaba la yugular’”, infobae. com; 15 de marzo de 2015).
NUNCA SERÁ IGUAL Tantos son a los que les tiembla la voz frente a un micrófono; tantos a los que se les va el respiro. Tantos hay que frente a una cámara pierden la idea, el dogma, la proclama incendiaria fundamental. Y es que no es igual… Nunca será igual el anonimato que decir de frente; nunca igual el que se refugia en un avatar, que aquel que firma con su nombre y apellido; nunca igual el que, desde el refugio seguro de un computador, lanza anatemas a diestra y siniestra, que aquel que aparece a cuadro, exhibiendo los rasgos de su humanidad; nunca igual el que puebla las redes y condena, que aquel que en la calle se muestra, blanco perfecto y vulnerable. Nunca será igual ser uno más entre los que hacen la legión de anónimos y ser uno entre los que, día a día, saben que la idea es –a pesar de todo- mostrarse y seguir adelante. Todo es, tal vez, cuestión de ángeles –como Voltaire, como Eco- y dejarse seducir por uno de los dos: el que defiende con su vida el derecho del otro o el que deplora la posibilidad de los idiotas. Elegir, eso es la libertad.
A propósito del 7 de junio, Día de la Libertad de Expresión
scinski ´
acometida te abriría el cuello. Ya no estarías respirando por la nariz sino directamente por el esófago. Hacéis unos divertidos gritos guturales. Lo he visto antes. Os retorcéis como animales, como cerdos. El tercer golpe te arrancaría la cabeza. Te la colocaría sobre la
VIERNES 10 DE JUNIO DE 2016
6
Muy pocos conocían los detalles de su vida, sino hasta después de seis años de muerto, cuando John Forster publicó una biografía
“Hay hombres que parecen tener solo una idea y es una lástima que sea equivocada”
Dickens y su vulgaridad Por Christopher Domínguez Michael
“
Un pasado oscuro en tiempos victorianos pudo viciar reputaciones, así como a algunos de sus personajes, y este era quizá el propio temor de Dickens
Se necesita ser muy vulgar para po- naturalmente, la muerte de la pequeña Nell en “La tienda lar, alguien a quien la novela por entregas de antigüedades” (1841), celebérrimo episo- transformó en cómplice de sus lectores, nerse a definir la vulgaridad. Precisamente Era un fiero crítico dio tristísimo que también motivó la burla de cuyas furias, decepciones y anhelos compor indefinible, la palabra de la pobreza y de Oscar Wilde: “se necesitaba tener un corazón partió, premiándolos como premiaba a sus la estratificación de piedra para no reírse de la muerte de la héroes con virtudes fantásticas mientras es indispensable”, escride la sociedad que a sus villanos los comprometía en sipequeña Nell”. bió G.K. Chesterton en su victoriana Es tan persuasiva la argumentación de tuaciones fallidísimas. Le gustaba hacer “Dickens” y lo hizo, en Chesterton en favor de Dickens que no solo sentir felices a sus personajes, repartía 1911, casi veinte años antes de que Aldous Huxley arremetiera con- previene un juicio como el de Huxley sino que excita a confort, calor de hogar, con magnificencia tra Dickens en un ensayo donde ponía al ejercer la alevosía en contra de este último. Después de navideña. Y, sin embargo, el católico Chestodo, uno piensa, Huxley no fue más que un oscuro teósofo terton rechaza que Dickens haya sido un novelista como epítome de lo vulgar. Decía Huxley en “Vulgarity in litera- del oscuro siglo XX, un escritor-cometa que deslumbró a optimista justamente porque nadie como ture” (1930) que la vulgaridad de Dickens la gente de su tiempo para irse por donde había apareci- él retrató mejor al mal, al cual individualiera monstruosa porque no era fingida, a do sin que de sus luces hayamos sacado mayor provecho zó, porque en su teología, lo satánico debe diferencia de la de charlatanes más serios mientras que Dickens perdura absolutamente. Chesterton provenir de una persona. A su muerte difundida en 1870 como des(Balzac y Poe, según él), quienes impos- arriesgó en 1911 la entonces temeraria afirCharles John gracia universal, una niña se taban el ser vulgares para congraciarse mación de que de todos los escritores victoHuffam Dickens rianos solo el autor de “Oliver Twist” (1838) murió el 9 de junio preguntó si la desaparición con un público que juzgaban inferior. de Dickens traería consigo Dickens era profunda e incurable- se conservaría, solitario y omnipotente, en el de 1870 el fin de las navidades. mente vulgar, un enfermo irrecupera- pináculo de la gloria. Nadie más contrario a ble de vulgaridad al cual cabía consiEl Dickens chestertoniano despreciaba a los derar no un niño, sino un bebé viejo, políticos precisamente porque se empeñan en alcanzar el re- Nietzsche que Dickens: el hombre vuldice Huxley. Una cosa es ser ingenuo conocimiento público y fracasan en ello pues ignoran que las gar es el menos dado a la servidumbre. hasta la puerilidad, como lo era Dic- grandes virtudes son privadas y solo un novelista puede justi- Dickens llevó al melodrama a su mayor kens, que divinamente infantil, a la preciarlas. Siempre que un personaje de Dickens nos parezca in- expresión artística y tras él, el género no manera de Jesucristo, al cual Huxley verosímil ello se debe a que es copia de alguien en extremo real. podía sino degenerar. Hasta aquí Cheselogia por su ardor, por su inteligen- Lamentaba Chesterton la incongruencia de tantos de los críticos terton. Charles Dickens fue al siglo XIX cia, por su intolerancia ante las fara- del novelista, pidiéndole verosimilitud a un demiurgo, copartíci- lo que James Joyce al XX. Loada sea la mallas, por todo aquello que le falta- pe en la creación del mejor de los mundos imposibles, el nuestro. vulgaridad a la altura del arte. (Letras Dickens, admite Chesterton, era pésimo para los argumentos Libres, 21 de junio de 2012. ba al novelista. Lo que desató la dickensofobia de Huxley fue, y los cambiaba fácilmente porque logró ser el único escritor popu- Edición Comunicante). VIERNES 10 DE JUNIO DE 2016
7 “La literatura no hace sino registrar los encuentros con la belleza”
Yasunari Kawabata, nívea belleza Por Juan Ramón Rodríguez
Lo bello y lo triste es el testimonio póstumo de la maestría psicológica, del virtuosismo y de la originalidad de su obra. A los 72 años de edad se quitó la vida
T
odo se reduce a cerrar los ojos. No tiene más misterio. Detenerse, inspirar y espirar. Un blanco clínico, la ausencia de cualquier abalorio. Ruidos desacordes, los árboles. La primavera. Todo acaba quedando atrás. Tarde o temprano fenece el ritmo. Tan solo queda el rumor de las olas y el aroma de los cerezos. La espuma del mar acicala, consuela al espíritu guerrero. El estupor inicial se transforma en calma. Parar el tiempo. Eso es lo que consiguió Yasunari Kawabata en cada una de sus obras. Nacido a las puertas del siglo XX, fue el primer japonés en conseguir el Premio Nobel de Literatura. Lo hizo en 1968. Tras Rabindranath Tagore, se convirtió en la segunda alma del lejano Oriente en alzarse con el apreciado distintivo. en el lenguaje narrativo. IncomuniLa soledad marcó su vida de prin- cación, la angustia ante la muerte, cipio a fin. Huérfano desde los tres la búsqueda de la belleza o la atracaños y solo en el mundo a partir de ción por la psicología los quince. Su persofemenina. Todo ello Aunque las nalidad era solitaria y expresado en un escircunstancias de melancólica. Eremita su muerte no están tilo simbólico y líriempedernido, desde totalmente claras, se co. Fueron estos los temprana edad acoscree que se suicidó temas centrales en tumbraría a aunar tanto inhalando gas torno a los cuales clásicos como vanguargiraron grandes redias. A lo largo de su gistros como “País de Nieve” o “La etapa universitaria, comenzó a escri- Bailarina de Izu”, entre otros. bir en revistas y a dar forma a su estilo Kawabata destaca por la viliterario. Soltó amarras junto al clan brante delicadeza con la que se introducía de los neosensacionalistas con la crea- en la piel de sus personajes femeninos. ción de la publicación Bungei-Jidai, La Prueba de ello es la novela corta “La Casa Edad Artística de las Bellas Durmientes”, de 1961. En tres en español. historias, el autor concreta un pulcro ejerC h i c o s cicio estético sobre erotismo y soledad. Se tristes, inte- trata de la entrega más atrevida, más políresados en ticamente incorrecta, de Kawabata. el lirismo y El testimonio de un longevo protael impre- gonista que anhela seguir disfrutando s i o n i s m o , de la belleza y acude a una posada donde se le ofrece la procurando realzar la El primer japonés que ganó el Nobel de percepción Literatura en 1968, “por su maestría narrativa, de las senque expresa con gran sensibilidad el espíritu saciones japonés” VIERNES 10 DE JUNIO DE 2016
Nació el 11 de junio de 1899 posibilidad de contemplar, solamente contemplar, el sueño de hermosas vírgenes desnudas. Una voluptuosa ensoñación que precede a la muerte. Durante la década de los sesenta el autor, que ya era novelista de fama internacional, impartió conferencias en varias universidades de Estados Unidos. También se dedicó a la crítica, amén del apoyo que prestó a nuevos talentos. Recibió en 1958 la Medalla Goethe en Frankfurt, antesala del máximo auge en su carrera con el Premio Nobel. Le fue otorgado el Nobel en 1968, año en el que la estabilidad mundial se tambaleaba. Era el año de los disturbios de París, del ímpetu y el puño en alto, del grito y la amenaza. Ese mismo año se publicó póstumamente la biografía ficticia “El maestro de Go”. Un 16 de abril de 1972 se quitó la vida, como hiciera poco tiempo antes Yukio Mishima, su amigo y discípulo. Aquejado por la enfermedad de Parkinson y profundamente abatido, se suicidó inhalando gas en un apartamento a orillas del mar. Suavemente y sin ruido se fue el transmisor de atmósferas y conmociones. Un delicado intimista que no estaba hecho para el mundo actual. Tal vez fuera ese mundo el que no estuvo hecho para él. (Fuente: Le Miau Noir. Edición Comunicante).
8 “Un escritor sin ironía se vuelve solemne, pedante; uno se ríe de sí mismo también”
“El periodista no está para resolver crisis, está llamado a contarlas” Por Verónica Calderón
“No me gusta que las historias se acaben; ni en el cine, ni en la literatura, ni en la vida. Siempre tiene que haber más posibilidades, más caminos, más respuestas”
V
icente Leñero decía que la ironía era la mejor arma que podía tener un tipo que se dedica a contar historias. Y una de sus ideas, en medio de los debates existenciales que han sumido al periodismo en general, es un golpe en la cara, un puño sobre la mesa. El periodismo no está para resolver crisis: está llamado a contarlas. Era mucho más que un hombre que contaba historias. Es un testigo de la historia reciente de México. Escribió, por ejemplo, una estupenda crónica sobre el autor Juan José Arreola alrededor de una partida de ajedrez, con la que dibuja a uno de los más grandes escritores mexicanos. El resultado, publicado en el suplemento dominical del Excélsior que dirigió Julio Scherer antes de que un golpe asestado por el Gobierno de Luis Echeverría los sacara, literalmente, a la calle en 1976. La imagen de los periodistas humillados, obligados a dejar su puesto por un régimen que no era muy afecto a las críticas, está grabada con fuego en “Camus tiene una frase la memoria de generaciones de lapidaria: ‘Cuando periodistas mexicanos. Mejor dise acaba el misterio, cho: está impresa. “Ellos (los que se acaba la vida’. Yo los echaron) se darían cuenta la tomo como una después de que habían cometido un grave error”, reflexionaba advertencia personal” Adid Jiménez, fotógrafo, reportero, mexicano y de 32 años. Nunca conoció a Leñero en persona. Solo a través de su tinta. Como dramaturgo, la gran obra fue “Los albañiles”, donde desde una trama policiaca desnuda como quien arranca de un tirón un vestido las corruptelas del sistema judicial mexicano. Fue escrita en 1963 (y adaptada al teatro siete años más tarde), pero el contenido está vigente al día de hoy. En México, las cifras de impunidad rebasan con facilidad en 90 por ciento. La obra obtuvo uno de los premios entonces más prestigiosos de las letras españolas, el de la Biblioteca Breve de Seix Barral, en su quinta convocatoria. Antes de
él lo habían recibido Luis Goytisolo, Juan García Hortelano, José Manuel Caballero Bonald y Mario Vargas Llosa. Escribió una decena de novelas, una veintena de guiones cinematográficos (entre ellos éxitos como El callejón de los milagros o El
“El periodismo y la literatura han sido mis fuerzas purificadoras” crimen del padre Amaro), vivió en Madrid en los cincuenta, becado por el Centro de Cultura Hispánica, y también fue becado por la Fundación Guggenheim entre 1967 y 1968. Era un crítico feroz y poseía una inteligencia de francotirador. Hay quien dice que todo lo que se aprende sirve en la vida y quizá por ello en su obra hay una minuciosidad que no busca una creación, sino un por qué. Un porqué razonado, fundado, tangible. Decía, por ejemplo, en 1987 que a los inspectores mexicanos no les interesaba descubrir los porqués de un culpable, sino solamente señalarlo. Decía también que un autor no debía, necesariamente, buscar un final feliz. Reconocía que los escritores (y los periodistas) a veces buscan un final feliz, una reivindicación; pero en una pequeña charla recogida en este periódico en 1987 recordaba que en la vida, la que vivimos todos, la mayoría de las veces triunfa el mal. Pero Leñero sabía que no había que tomarse demasiado en serio. En una de sus últimas entrevistas, apenas el año pasado, soltó: “un escritor sin ironía se vuelve solemne, pedante; Nació el 9 de junio uno se ríe de sí mismo también”. (El País, 4 de diciembre de 2014. Edide 1933 ción Comunicante).
VIERNES 10 DE JUNIO DE 2016