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Diagramación en Quark v.8 “El PAIS SEMANAL”

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ENTREVISTA

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Es el presidente de la Cruz Roja Española y de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, una organización activa en guerras y desastres. Su sede en Irak fue atacada en octubre y la ayuda humanitaria que prestan en Palestina se revela fundamental.

Juan Manuel Suárez del Toro Endefensadeladignidad Por Sol Alameda. Fotograía de Óscar Carriquí y Milli Sánchez.

Es un canario de las palmas, de 50 años, ingeniero industrial, tímido y de hablar monocorde.Parece que tendría que ocurrir algo terrible para que llegara a levantar la voz. Hasta el extremo de que sus palabras resultan más interesantes una vez pasadas al papel. desgrana pausadamente los cambios que la Cruz Roja Española ha ido introduciendo en su labor, y que son una pauta para conocer las nuevas necesidades de la ayuda humanitraria en un mundo global. En España, la organización ha pasado de ocuparse de los viejos puestos de socorro en carretera o de la construcción de hospitales, ayudas ya incesarias, a ocuparse de las mujeres maltratadas, de los drogadictos (la mitad de los cuales son atendidos por la Cruz Roja), a paliar los problemas de la inmigración y de las personas con trabajo precario. No todo 2 EPS

el mundo sabe la cantidad de cosas que hace la Cruz Roja, pero a pesar de que parezca oculta en el paisaje, como ellos mismos dicen, porque son demasiado familiares, esta organización humanitaria, que se fundó hace 140 años para paliar los efectos de las guerras, cuenta con 97 millones de voluntarios en todo el mundo. Y sólo la sección española atiende al año cuatro millones de personas y cuenta con 147.000 voluntarios y 627.000 socios.

En la sede de Majadahonda, a las diez de la noche, un joven con camiseta blanca y una cruz roja en el pecho recoge una llamada y acuerda el envío de una ambulancia. En una mesa contigua, desde otro teléfono se responde a la llamada de un anciano, al tiempo que se abre un ordenador donde aparecen los datos del comunicante que necesita ayuda; su

domicilio, sus enfermedades, la medicación que toma habitualment. Son sólo ejemplos. Como es sabido, la Cruz Roja está en todas las guerras, en todos los desastres, en muchísimos lugares donde son precisos sus auxilios. La Cruz Roja Española está presente en setenta países, y en muchos lugares es la única organización que existe.

Estamos hartos de ver la famosa cruz sobre blanco en los periódicos, en medio de un bombardeo, en los terremotos. Hasta en las películas, la presencia de sus ambulacias ha sido habitual. Y siempre, todos parecían respetar el trabajo que llevaba a cabo la Cruz Roja.

Hasta que en Irak su sede ha sido bombardeada. Tal vez comienza una nueva etapa. Para un mundo también nuevo.

A partir de 1994 proliferan las ONG, >

[03] Juan Manuel Suárez del Toro breos. Creo que es la primera vez que ocurre algo así ¿no?

Es la primera vez que ocurre con semejante trascendencia y magnitud. Habíamos sufrido algún ataque deliberado a personas en Costa de Marfil y en algunos sitios más. Pero no tan directamente, con una intención tan clara. Eran ataques que se habían atribuido a elementos aislados, que no obedecían a ningún tipo de estrategia. En el caso de Irak sí hubo algo deliberado. O se ha confundido a la Cruz Roja con otro tipo de organizaciones, o se ha ido contra lo que la Cruz Roja representa. Esto nos preocupa mucho, porque hasta ahora, a pesar de las situaciones más inhumanas que nos hemos podido encontrar, la existencia de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja era respetada como un actor imparcial y neutral.

Tal vez en Irak no se lo crean...Les vean como una organización prooccidental.

En este caso es evidente que no nos han creído... Tal vez ha habido alguna información equivocada, o tal vez el ataque fuera una actuación foránea. Estamos sumidos en esa reflexión. Sobre todo porque no sabemos, a raíz de los sucedido, si los mecanismos de imparcialidad y neutralidad que han servido durante tantos años van a seguir sirviendo en el futuro. Nos hemos comprometido, junto con los Gobiernos, a intensificar un trabajo de información de lo que representa la Cruz Roja.

GuERRA y dEREChOS huMANOS. El 27 de octubre, una ambulancia bomba se estrelló contra el Comité Internacional de la Cruz Roja en Bagdad. Murieron 12 personas, entre ellos 6 niños que estaban en la parada del autobús y 2 cooperantes de Cruz Roja.

> con el desastre de Ruanda. ¿Cómo les

ha afectado? Porque ahora el dinero de la ayuda humanitaria se dispersa entre muchas organizaciones. ¿O es que en estos últimos años llega tal cantidad que hay para todos?

El dinero nunca es suficiente. Desde mi punto de vista, la proliferación de ONG no nos ha hecho ningún daño. Antes nosotros éramos la única organización de este tipo y ahora hay otras muchas, pero la nueva situación ha hecho que los sistemas se mejoren, que nos acostumbremos a trabajar en asociación,que 4 EPS

seamos más eficientes y responsables.Que participemos juntos. ¿Las bondades de la competencia?

La exclusividad no es buena en ninguna parte.Y además se da la circunstancia de que hay una colaboración. yo creía que cada uno iba por su lado.

Eso ocurre cada vez menos. Éste ha sido un año especial para ustedes. Primero, en Irak les han atacado y dado muerte a algunos de sus miem-

¿Cree que los convenios de Ginebra están en auténtico peligro?

Pués sí, en el caso de que hechos como el que comentamos dejen de ser algo aislado y se conviertan en una costumbre... Con cuatro acciones de este tipo, una serie de herramientas legales que se han dado los países y que han servido durante años pueden ser inútiles. Hay que estar alerta. ¿y podrán seguir siendo una organización independiente y neutral?

Independientes en el sentido que nosotros cremos, sí. La Cruz Roja está libre de todo tipo de presiones acerca de cómo aceptar la ayuda o en qué condicines debe entregarse. En cuanto a la imparcialidad, FOTOGRAFÍA dE ChRIS hELGREN / MARC SEROTA

creemos en ella e intentamos actuar de una manera neutral, no tomar parte a favor de ninguno de los bandos en conflicto. Reconozco que a veces es muy dificil, sobre todo algunas guerras. Hay muchas cosas que en los próximos decenios tienen que ser motivo de relexión muy seria. Somos conscientes de los peligros que corremos. De la precariedad del Convenio de Ginebra. De cómo la sensibilización que provocan las tragedias dura tres días. No podemos cruzarnos de brazos. Estamos en un momento de encrucijada.

Imagino que en momentos como el actual también se agudizan los dilemas morales. Porque una cosa es la teoría y otra la realidad diaria.

Tenemos unos principios, de imparcialiadad, humanidad, neutralidad e independiencia, pero a veces no sabemos qué hacer. Ese problema de no saber qué hacer se plantea todos los días. Intentamos que la gente tenga un entrenamiento, pero claro que hay dilemas morales. Sin embargo éste es un trabajo

teado en Palestina. donde no saben si seguir dando ayuda o suprimirla. ustedes consideran la situación insostenible, pero con la ayuda humanitaria que proporciona la Cruz Roja están propiciando la creencia falsa de que no es tan insostenible. y barajan la posibilidad de que quizá suprimiendo la ayuda se vea por fin la tragedia en toda su extensión y claridad.

Si, es un dilema. Vemos que la situación allí está estancada, que no mejora, y , como dice, nos estamos planteando qué hacer. No sé si se ha tomado la decisión. Mire, por mucho que se planifique, en cada momento hay que decidir y tratar de hacer las cosas lo mejor posible.

Entra en la Cruz Roja siendo muy joven. ¿Qué buscaba?.

Fue a los 17 años. En 1971, en Las Palmas. Algunos jóvenes estaban vinculados a las organizaciones de la Iglesia; otros, a los partidos políticos; otros vimos una posibilidad de participación social, en una organización que era acreditada a nivel mundial y que se reorganizaba en

“Somos conscientes de todos los peligros que corremos y de cómo la sensibilización que provocan las tragedias dura tres días” comprometido, y los dilemas están en África, pero también en Tarifa. La inmigración es una fuente de dilemas. dígame el dilema español, el que la inmigración les plantea.

Si una persona nos viene a pedir trabajo, por ejemplo, y no tiene la situación regularizada, según la ley, nosotros no le podemos informar de que hay algunas personas que están buscando gente, no podemos decírselo... Son temas que manejamos internamente. Y se lo decimos.Porque ¿qué otra cosa podemos hacer?. Pero es un debate... Uno de esos casos en los que unos principios teóricos siguen vigentes, pero que no pueden impedir que se nos presenten cuestiones nuevas cosntantemente.

Creo que ahora mismo, uno de sus principales delimas morales está plan-

España. Porque la Cruz Roja de la juventud había estado suspendida desde antes de la Guerra Civil, y fue entonces, en 1971, cuando se puso en marcha de nuevo, y entré en ella por vocación.

Pero ahora usted será un poco más escéptico que entonces.

En cierta manera, sí. Pero es un escepticismo teñido de realismo. Uno ve que las cosas no son fáciles, pero soy de los que se resisten a dejar de intentarlo. desde ese tiempo hasta hoy se han mantenido los mismos principios de la Cruz Roja. ¿hasta qué punto se ha ido haciendo más difícil cumplir los referidos a la independencia y la neutralidad?

Los principios tienen vigencia, lo que ha ido cambiando ha sido la forma de conseguir los objetivos. Las nuevas realida- >

Después de una reunión asií, ¿Qué tal una dosis de buen gusto?

[03] Juan Manuel Suárez del Toro des, han aportado mucha complejidad, y eso sí que es nuevo.

No sé so ahora hay más zonas donde se precisa ayuda humanitaria; o es que los problemas se han hecho visibles y quizá por eso pueden ser atendiados.

Creo que se han hecho visibles, pero, como decía, las desigualdades se han agrandado. Y el que se hagan visibles no quiere decir que lo sean permanentemente. En realidad es una visibilidad intereada, lo que nos cusa muchos problemas a las organizaciones humanitarias. Tanto es así que nosotros mismos caemos en la trampa que supone lo que podríamos llamar una abrumadora e interesada visibilidad. No se atienden los problemas en función de las necesidades, sino de ciertas prioridades. ¿Cuáles, por ejemplo?

Un tema que a mí me preocupa es la politización de la ayuda internacional.Y ése es un tema nuevo... En otro tiempo había menos ayuda, peroen cualquier caso, la que hoy tenmos no es suficiente, y además, cada vez está más politizada.

Hasta el extremo de que nosotros mismos nos planteamos qué es lo que po-

sada.A veces, debido a unas afinidades afectivas, como sucede en el caso de España conLatinoamérica; o por razones políticas. La ayuda va y viene en función de los interes políticos; está ocurriendo en todas las últimas operaciones que estamos asistiendo... Pero se da incluso una doble discrimicnación.no sólo se atiende más a unos conflictos bélicos que atraen maor atención que ls situaciones de tragedia permanentes. Es que además, esa ayuda se encamina hacia los lugares que ineresan a la oopinión pública de los países más poderosos, a los políticos de esos países más poderosos; ellos son lo que dciden sobre su destino. ¿Tan fuerte es la llamada de la actualidad, de los intereses políticos, como para que una organización tan fuerte como la suya no pueda resistirse?

No es que sea imposible... Lo cierto es que hay que saber hasta qué punto estamos inmersos y amenazados por esa posibilidad. Al menos hay que decirlo, e intentar salir de ello.Lo hemos puesto de manifiesto la semana pasada, en la celebaración de la conferencia Internacinal de la Cruz Roja, donde se han reu-

“Intentamos comprar la ayuda alimenticia en los propios países. Los mercados venden y no se destruye la agricultura.” demos hacer para evitar caer en esa trampa, en la que a veces caemos, y que nos conduce a prestar atención a los temas que van a tener más éxito o conseguir más eco; en lugar de hacer una elección según las necesidades reales.

Cuando habla de politización, ¿Podría ser más explicito?

No pondría ejemplos concretos, pero tiene mucho más impacto un conflicto bélico que sale en la televisión a diario que una hambruna, por ejemplo. Y la sensibilización de los ciudadanos, así como la movilización de los Gobiernos que tienen posibilidades de enviar ayuda, se puede favorecer; porque no es objetiva,ni mucho menos. Es intere6 EPS

nido todas las sociedades de la organizacion con los gobiernos de los países donde la organizaci´lon existe, sea como Cruz Roja o como Media Luna Roja. Con los países que firmaron los convenios de la Convención de Ginebra. Hemos hablado de conflictos y tragedias que pasan sin llamar al atención. Del sida, la tuberculosis y la malaria. También podríamos hablasr del agua potable, de muchas necesiadaes que no abordamos, o que si lo hacemos es con mucha timidez. un misionero de Sierra Leona me contó algo que tiene que ver con lo que dice, sobre dejarse llevar por la actualidad y las pautas marcadas por los poderosos. Cuando tuvo lugar la guerra

de Afganistan, todas las ONG se largaron allá. Menos Médicos Sin Fronteras.

Y menos la Cruz Roja, que siempre ha estado en Sierra Leona. y decía este misionero que se fueron a Afganstán porque allí había mucho dinero.

Sí, decía que las organizaciones caemos en la trampa de ir a las tragedias que llaman más la atención. Es que los propios medios te están llamando, y es complicado no hacerles caso, porque la gente ve la trastienda en sus televisores, y te pide que vayas allí, porque eso es lo que les conmueve.

Voy a seguir usando Afganistán, porque es un ejemplo reciente y al mismo timepo a se conoce mucho. Nos puede servir de modelo, y además lo que le digo lo he sacdo de un informe que ustedes han editado.Primero, se van allí todas las ONG, donde hay mucho dinero, para trabajar mejor. Luego resutlta que como llega tante gente, los sueldos se suben astronómicamente. unos sueldos mucho más altos que los que se pagan en el propio país, col lo cual la gente deja las ONG locales, o sus tabjos en la adminsistración, para irse a trabajar con ellos. y cmo los alquileres tambíen suben, las ONG locales no pueden pagar. Vaya desastre de ayuda humanitaria, ¿no le parece?.

Es verdad que eso pasa, de hecho está pasando. ¿y qué hacen para remediarlo?

Intentar trabajar cada vez más conla comunidad local.

Pero fijese que los que llegan con la ayuda humanitaria, gente preparada pero que no conoce los países a los que acude, o al menos no tan bien como los ciudadanos locales, son quienes deciden qué se hace, cómo se hace. Todo.

No es que sea imposible... Lo cierto es que hay que saber hasta qué punto estamos inmersos y amenazados por esa posibilidad. Al menos hay que decirlo, e intentar salir de ello.Lo hemos puesto de manifiesto la semana pasada, en la celebaración de la conferencia Internaci- >

[03] Juan Manuel Suárez del Toro

> nal de la Cruz Roja, donde se han reu-

nido todas las sociedades de la organizacion con los gobiernos de los países donde la organización existe, sea como Cruz Roja o como Media Luna Roja.

Con los países que firmaron los convenios de la Convención de Ginebra. Hemos hablado de conflictos y tragedias que pasan sin llamar lal atención. Del sida, la tuberculosis y la malaria. También podríamos hablar del agua potable, de

ustedes nacieron para paliar el horror de las guerras. El paso del tiempo y las demandas de la sociedad han debido llevarles a trabajar cada vez más en la labores de desarrollo. Últimamente se debate si es mejor dedicarse a la ayuda inmediata, acudir a la llamada cuando sucede la tragedia natural, o la guerra, para salvar vidas; o es más provechoso y útil atender al desarrollo. Parece que los profesionales de la ayuda humani-

“Intentamos comprar la ayuda alimenticia en los propios países. Los mercados venden y no se destruye la agricultura.” muchas necesiadaes que no abordamos, o que si lo hacemos es con mucha timidrelas aue la sociedad nos demande transparencia.Después, como si éste fuera un año especial, se ha producido otro cambio importante.No es que sea imposible... Lo cierto es que hay que saber hasta qué punto estamos inmersos y amenazados por esa posibilidad. Al menos hay que decirlo, e intentar salir de ello Además de luchar contra los intereses políticos, hay que uchar contra la desorganizacíon que impera en la ayuda humanitaria. Tengo un ejemplo de ambas cosas. Asl sur del contgienete africano, varias ONG avisaron de que iba a producirse una hambruna terrible por una sequía. Nadie hizo caso a las ONG, y cuando llegó el hambre, durante nueve meses los habitantes de la zona estuvieron sin ayuda. Para colmo, en ese mismo pís, cuando la ayuda lleó,el presidene del Gobierno sólo dejó que se distribuyera en una zona determinada, porque en la otra vivían sus enemigos.

Entonces, una federación que agrupaba a varias decenas de ONG lo denunció, pero nadie les hizo caso.

Hay desorganización, en efecto, y hay que avanzar en los sistemas de alerta, e la colaboración entre distintas organizaciones, y debemos conseguir que las respuestas sean inmediatas y previsoras.

Y también debemos tener la aención puesta en lo que va a pasar después.

Todo eso y más, hay que hacerlo.

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taria se ven obligados a elegir.

Está organización está centrada en dos aspectos; en el respeto del derecho humanitario, mantener dentro de las guerras unas reglas menos inhumanas y basadas en unas leyes que los gobiernos se han dado a si mismos.

No sé si la gente de la Cruz Roja plantea cuestiones a la organización para que sea más crítica.

Si. Nos ocurre. Por ejemplo, cuando se planteó la cuestión de la guerra en Irak, nuestra gente quería que fuéramos más críticos; creían, de forma general, que teníamos que denunciarla; salir y decir que no. Hubo una reflexión interna en toda la organización. A veces se viven situacines muy tensas, porque nuestra gente nos pide que además de atender a los que padecen, ongamos de manifiesto las injusticias y los horrores. ¿y entonces les mandan el catecismo para que recuerden los principios por los que se regula la organización?

Pondré un ejemplo. En muchas zonas donde trabajamos, si el 30% de una población está infectada de sida, los voluntarios de la Cruz Roja lo están en el mismo porcentaje. Nos planteamos: ¿y qué hacemos? Porque nuestro propio personal se nos está muriendo. Y estamos ahí, debatiéndonos. ¿Quizá ha llegado el momento en el que su propia gente no va a consentir que no denuncien las atrocidades ¿Quizá

el hecho, completamente novedoso, de que se hayan decidido a denunciar la situación de lospresos en Guantánamo sólo es el comienzo de una etapa nueva? ¿O no?

Nosotros no somos una organización de denuncia, ésa es la verdad. Lo que ha ocurrido en el caso de Guantánamo ha sido que el Comite Internacional de la Cruz Roja ha intentado mejorar la situación de los presos de la forma habitual, trabajando discretamente con las autoridades, con el Gobierno implicado.

Y alnodar resultado, ha habido una reacción en la propia organización, que ha decidido poner de manifiesto lo que ocurre ante la opinión pública.

La neutralidad también puede servir de paraguas. Porque si no denunias atrocidades en aras de la neutralidad... Por ejemplo, siempre me he preguntado qué hizo la Cruz Roja en la época delos nazis, si denunció los campos de exterminio. que firmaron los convenios de la Convención de Ginebra. Hemos hablado de conflictos y tragedias que pasan sin llamar al atención. Del sida, la tuberculosis y la malaria. También podríamos hablar del agua potable, y de otras necesidades que existe. ¿hasta que punto se desanima de vez en cuando?

Casi todas las noches. Constantemente.A veces la reflexión proviene de dentro de la propia organización, porque dices: en un ambiente donde la gente tendría que estar más concienciada, tomar las decisiones es muy difícil, hay que insitir , arrastrar a la gente,. A veces, los valores en los que uno cree no van a igual ritmo en todos los sitios.Y hay desánimo. Uno va a la cumbre de desarrollo sostenible, y dice: ¿por qué no lo hacemos, si todo el mundo sabe que hay que hacerlo? A veces uno se desmoraliza, porque es muy difícil mover las cosas. Pero hay que seguir en la tarea y pensar que las cosas tardan, pero se mueven. También hay islitas, satisfaciones, porque ésta es una organización muy práctica. El desánimo vien cuando uno globaliza los temas. A veces, algunos nos dicen que nos falta discurso.; puede ser, pero hacemos y hacemos para que eso no ocurra.Y, bueno un vive en una contradicción permanente

La lucha contra el racismo y xenofóbia, el aceite para una familia somalí, la ropa para unos niños Kurdos, prestar tu tiempo libre para trabajar con unos niños en el barrio, acompañar a una persona mayor ha hacer la compra, llevar al colegio a un minusválido, defender los derechos humanos, dar clase de castellano a un inmigrante, acompañar a un enfermo toxicómano, acoger a una niña en tu familia...Hay muchos momentos y muchas maneras de dar solidaridad y humanidad Cruz Roja te ofrece todos los días del año la oportunidad que estabas esperando para poder realizarlo Para ser solidario o salidaria no se necesita tener una edad determinada solamente es necesario tener una causa.Desde Cruz Roja puedes encontrar la causa ¡piensalo!

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