los caminos de la ara単a a
n
t
o
n
i
o
a
a
路2路
historias que salieron de la quema de antiguas historias y del firme prop贸sito de seguir hacia adelante, historias de ayer y de hoy, memorias y deseos, esperanzas, por vosotrxs dos, que sois la mejor de las llaves para pensar en ma帽anas...
路3路
I·Afianzando las raices y las ramas
Afianzando las raices y las ramas, que ni los robles oculten los motivos, que se me seque la sangre en las heridas, y cautericen todas las cicatrices, con un poco de saliva de la de cura cura sana..., otro poco de sol mañanero para abrir los ojos, y muchos buenos días, morning morning, que tengas un gran día por el día, de manera que las raíces ataquen la tierra fuertes, desgarrando piedra y siglos, desgarrando estratos y estratos, a poquitos, como comen los niños con sus cucharillas de colores, a poquitos, a poquitos, sin atragantarse, tapando y curando, con cemento y cristalmina del corazón, y con la pala en la mano, la paleta y la paciencia, restaurando paredes y casitas de chocolate, localizando cada llaga cada desconchado, a coser a coser, a pegar y a curar, que tenemos hora de seguir, tenemos hora de plantar, de pisar hasta hundir los pies, que la próxima mañana la sangre apenas gotee, que la sangre apenas se derrame por cada esquina perpendicular, de la cama en perpendicular...
·4·
路5路
II·El que marca mi camino
Desde cada rincón donde encontré papelillos en el suelo, delirando entre el humo y las sombras, papelillos llenos de respuestas que no lo fueron, desde cada rincón donde me dijeron que podía ir, desde que llegué a confiar en que eran otros los que dibujaban por mi, reptando entre tablillas clavando en mi pecho mil astillas, para descubrir con vergüenza en mis ojos, que fui yo el único que marcó los muros con marcas rojas y blancas, desde cada rincón donde leí respuestas escritas por mi mano derecha, creyéndome a pies juntillas las “verdades” envenenadas de mi propia tempestad, demasiado extasiado entre camas y rincones de dolor, repartiendo culpas, clavos y cruces allá por donde pasé, admitiendo sin reconocer que sólo yo permanecí en pie tras la devastación, con el orgullo un poco más inflado, y el alma un poco más encogida, marcado por las marcas que sólo dejan las serpientes que ahogan, desde cada rincón reptando con astillas clavándose lentamente en el estómago, cerrando la puerta de cada habitación al salir, sin escribir un epitafio en la puerta tras mi espalda, dejando un regalo de clavos y cruces para que te claves contra la pared, quién me iba a decir que sólo actúo en mi honor, que será que nunca confié en actuar para los demás, y que allá de donde vengo, reconozcas que dejé un poco de dulce y mucho de amargo, que a lo lejos intuyo una bombilla parpadeante, el escenario de mi próxima actuación, la que me dirá quién soy en realidad, donde con pinzas de depilar de las que están en el baño, iré extrayendo todas y cada una de las astillas de mi cuerpo...
·6·
路7路
III·Presumiendo delante de algún espejo
Presumo de no saber, de no querer meterme en fregaos que no son los mios, que se mis limitaciones, que sé que no me gustan los charcos demasiado grises, que sé que no me gusta la gente que llega tarde, ni los pájaros que roban huevos y salen de la cárcel de los pájaros en dos días, presumo de no saber nadar en océanos profundos, de imaginar que bajo mis pies en la oscuridad, hay demasiada oscuridad nerviosa, presumo de ser una estrella menguante en un mundo tan grande, de ser un perfume de los de frasco pequeño, un perfume con tendencia a olvidarse, pero perfume, presumo de saber lo que sé, de poner todo lo que hay en mi, poner todo lo que soy en un volante, de poner todo lo que soy en pintar y contar, en preparar cuencos de sopa con sabor a curry, que no me gustan los que preparan sopas sin corazón, ni los que follan sin ganas en la cama intentando un momento de placer, no me gustan los que brillan demasiado sin saber qué decir, ni los que hablan gilipolleces de no tener qué decir, no me gusta el que se viste de los pies a la cabeza los Domingos para ir a misa, viste su cuerpo y disfraza su alma, presumo de desnudar mi corazón aún en Domingo, me espantan las horas muertas del que no quiere pensar, presumo de dejar mis oídos a quien quiera un estante de librerías de dejar recuerdos y heridas, presumo de mover las manos y hacer trucos de magia de formar nubes, sé de lo que no debo hacer, y sé de lo que tengo que conseguir, y volar y volar y alcanzar lo que veo, presumo...
·8·
路9路
IV·Todo lo que aún queda colgado
Cuelgan de mis manos unas llaves, cuelgan las desesperadas palabras de quien llama, cuelgan las voces de quien juega al parchís, que si yo quiero las fichas amarillas, que si yo prefiero las azules, y a qué juegas tú, que caminas hacia mi con esa mirada de decidida decisión, al volar y al apretar tan fuerte la razón, ahogados entre lamentos de ciencia ficción, cuelgan de mis manos unas llaves, cuelgan de mis bolsillos restos de regaliz, derretidos por el paso del tiempo, entre el ansia del deseo el deber y la abstracción, derretidos porque alguien los sujetó durante demasiado tiempo, cuelgan las palabras de los que hablan y hablan y hablan, y yo no tengo ganas de escuchar pa’ ná, cuelgo cada llamada de súplicas y remiendos, se me une sobre el pecho cada pieza de mi caparazón, y los sueños que se queden fuera serán nada más sueños, y si para jugar hacen falta dos, ya buscaré piezas, tableros y jugadores que crean en la suerte, me agotaron los jugadores de pensar en sus cartas, mis cartas y lo que cuelga de mi cuello, cuelgan de mis manos unas llaves, cuelgan de mis manos las cartas sin destinatario, como caídas entre los dedos, como sueltas y desgastadas, como si no quisiera mirarlas por ahora, cuelgan de mis orejas todas las marcas de dolor que causé, recuerdos de lo que soy, recuerdos escritos entre páginas y páginas de ciencia ficción, una huida tras otra, colgadas de un perchero escondido en el trastero, cuelgan de mis manos unas llaves, cuelgan de mi alma unos zapatos que tengo que vestir, por cada pieza perdida y cuenta veinte, otra canción con el mismo tufillo ingrato, es cuestión de calzarse bien antes de la partida...
·10·
路11路
V·La quema de los puentes
Ando quemando puentes, quemando puentes de madera con trocitos de piedras, en el suelo que piso quedan trocitos de piedras pequeñas, y ando quemando puentes y más puentes, con una sonrisa en la boca mirando las cenizas, las cenizas de los puentes detrás de mi, ando quemando puentes según cierro la puerta de casa, y al salir a la calle esquivo todas las piedrecillas del camino, mientras con una cerilla pequeña, voy haciendo fuegos que prendo en antorchas, donde guardo todos los motivos para quemar los puentes de madera, puentes de madera con trocitos de piedras pequeñas, puentes de madera que voy dejando en llamas tras de mi, y con una sonrisa de las que no entra en la cara, voy con mis antorchas repartiendo fuego por donde paso, agarro las botas que me calzo, y con la sana intención de prender fuego, voy allá donde me esperan los puentes de madera, ando quemando puentes de madera, puentes de madera con trocitos de piedras, piedras con grabados tan antiguos, con decoraciones tan oscuras, con significados tan obtusos, que me deslizo entre pasos de baile, no vaya a ser que pise algún guijarro afilado, con mis cerillas, mis antorchas y mis ilusiones intactas, de un lado a otro, oliendo a humo de cuando crio, de cuando quemábamos puentes y castillos y mundos imaginarios, oliendo al humo del vencedor, feliz por haber quemado tanto puente de madera, carente de significados y sobrado de piedrecillas, ando quemando puentes, quemando puentes de madera de la que prende fácil, casi con un suspiro de calor...
·12·
路13路
VI·Las noches cortas y las noches largas Se me antoja una noche corta, sin sábanas de oro, sin colchones de plumas, sin lazos de seda alrededor de mis muñecas, se me antoja una noche corta, sin vendas de terciopelo negro en los ojos, sin fuerzas, sin juegos, sin búsquedas ni desencuentros, se me antoja una noche corta, sin lenguas de largo recorrido, sin piernas de nudos imposibles, se me antoja una noche corta, sin capítulos de improvisación, sin capturas y sin capturados, sin invasiones consentidas, sin descuidos inocentemente planeados, se me antoja una noche corta, sin trucos, sin disfraces ni máscaras de yeso, sin escaladas lentas lentísimas, sin descensos lentos lentísimos, se me antoja una noche corta, sin aullidos animales, sin espasmos ni ojos en blanco, se me antoja una noche corta, sin barrotes de acero, sin ilusionismos de fogueo, se me antoja una noche corta, entre susurros, entre lamentos lánguidos, resbalando al suelo entre sábanas de franela, entre roces de piel de gallina, de trazar líneas y trazar líneas, se me antoja una noche corta, entre respetos templados, entre permisos entre sonrisas y colchones de muelles, se me antoja una noche corta, de bailes de seda, de portales nevados, se me antoja una noche corta, enredado en presas imaginarias, se me antoja una noche corta, de las de dormir sin apenas pestañear,
voy mientras tanto, guardando para mañana las sábanas de oro, el colchón de plumas, cada jadeo, cada venda y cada nudo, que hoy se me antoja una noche corta...
·14·
路15路
VII·Las sillas de mis posaderas Las sillas ordenadas, quietas, a distancia de metro entre ellas, de terciopelo verde, de madera de barniz claro y de olores sin olor, frio como los veraneantes sin su copa de champagne de las ocho de la mañana, como la luz fria de las Iglesias, tan preocupadas de la luz, tan despreocupadas por la ausencia de calor, las sillas tan sin gente que las ocupe, tan tres en línea sin haber siquiera jugado, quieren y no pueden, pretenden ser acogedoras y se olvidan de lo cotidiano, los alambres que se clavan en el culo, el mimbre que se engancha en los jerseys de punto, y en ausencia de la risa del mediodía, en ausencia de los licores de medianoche, sólo me quedan sillas quietas, ordenadas y vacías, a distancia de metro entre ellas, esperando comensales que las ocupen, esperando posaderas bien repletas, que de tanto sentarse en ellas, quedaron cuadradas hace mucho tiempo, sillas de madera del Ikea, cuentas atrás hacia vestidos rosas, hacia bolsillos repletos de billetes, completando la colmena de cada día, celdas cuadriculadas de tapices de terciopelo verde, sillas que esperan la noche, que soportan el peso de la humanidad, sin queja y sin fractura en su ánimo, que en su frialdad escucharon demasiado, tan despreocupadas por la ausencia de calor, que se diría lo disfrutan a cada instante, rezando en su distancia perfecta de un metro, “que nadie venga a sentarse aquí”, “que estoy cansada de soportar tanta desdicha”, “que no quiero más fanfarronería”, “que han derramado demasiada cerveza sobre mi piel”, las sillas ordenadas, quietas, a distancia de metro entre ellas, de terciopelo verde, de madera de barniz claro y de olores sin olor, siempre dispuestas, llenas de luz y vacías de calor, como Catedrales de las posaderas del mundo...
路17路
VIII·Jugando con el Lego Mantiene sus ilusiones en el congelador, mantiene vivas las esperanzas, cada vez que mira del revés, se da cuenta de su perfil optimista, vive en cada uno de sus barquitos de papel, cruza anchos charcos canturreando, sigue almacenando besos en las mejillas, al compás de un tango el baila un vals, sus anhelos le sujetan la vida, como se sujeta una marioneta, con hilos de noches de insomnio, con hilos de ojos soñadores, mantiene intacto su cascarón, con vela de bolsa de plástico de pipas facundo, haciendo equilibrios sobre tablas, a dos centímetros de altura, mantiene sus pies algo alejados del suelo, sigue suspirando de vértigo, pasea en su gravedad cero, agitando los brazos, apartando el aire entre sus manos, avanzando con su traje azul y plata, atravesando pasillos de estrellas, haciendo un giro del revés, para arrojarse a los brazos del vacío, se guarda las envolturas de los caramelos, una a una y ordenadas por colores, suma experiencias de sabores, recordatorios de celofán, sostiene libros de cuentos, dibujos de otra dimensión, tanteando las paredes del tiempo, supone lo que supone cierto, se acuesta sobre las leyes del hombre, descansa sobre ciudades enteras, el hombre bajo el roble de Otoño, supone que mañana escuchará otra canción, volverá a bailar al compás de un tango, su vals particular de buenos días, sujetará con mimo catamaranes de corcho, hasta el momento de darles libertad, a favor de las olas de Septiembre,
se encontrarán veinticinco años después, entre el olor del azúcar quemado, cerca de la frontera, al lado de cada postal de su memoria, esperará sentado en escalones desgastados por el mar, aprehendiendo los reflejos del gasoil, iridiscencias iridescentes colorillos colorines...
·18·
路19路
IX·Una noche de octubre Fijo la mirada en el asfalto, ya no es rojo, acaso granate, tirando a gris, es la noche, son las luces de las farolas, teñidas de amarillo, pero no el amarillo de la fuerza, son el amarillo de las luces de la noche, ese amarillo que no deja pasar la luz de la luna llena, que la luna llena hoy ni siquiera se ve llena, y apenas se distingue detrás de la bruma, es tan espesa que seguro se puede caminar sobre ella, apuesto a que alguien camina sobre ella, como lo hago yo sobre el asfalto rojo, que ahora no se ve rojo, es el frío que entra por el hueco del cuello de la camisa, se cuela en mi espalda, va llamando vértebra a vértebra, atando las llamadas en un escalofrío, sonrío, sonrío mucho, sonrío, y me anudo un poco más el palestino, un poco de aire frío está bien, mucho sin embargo, lo hace desapacible, y sigo con la mirada en el asfalto rojo, que ahora no se ve rojo, viendo la luz de la luna, desdibujada, desenfocada, entre la miopía y la bruma de quien camina allá arriba, se me borran las farolas, se me borran los coches, desaparece la carretera, las casas se vuelven pagodas, y a doscientos metros, la luz tenue de la luna se refleja en un lago, y bailando sobre el agua está la bruma, no hay farolas que tiñen de amarillo ocre el agua, no hay luces de las de electricidad, ni sonidos que no sean los de las lechuzas,
los del viento frío que teje escalofríos en mi espalda, sonrío, sonrío mucho, los guantes me recuerdan que ya no puedo disfrutar del frío en mis manos, y aún así sonrío, y de tanto que sonrío se me escapan dos o tres lágrimas, de sentir lo que puede ser, de ver lo que es, de caminar entre escalofríos por el asfalto rojo, que ahora no se ve rojo, de caminar como ese otro que camina sobre la bruma espesa, compartiendo una noche de octubre...
·20·
路21路
X·El ejercicio de cerrar los ojos
Si cierro los ojos no queda nadie, ni las olas contra mi espalda, ni las esponjas que friegan mis piernas, si cierro los ojos no tengo nada, ni un cuerpo que contenga tanta sangre, ni tengo unas ganas irrefenables de vomitar, ni siquiera la inquietante confusión de lo desconocido, si cierro los ojos me voy tan lejos, en una inspiración profunda salgo disparado hacia el techo, y más arriba hacia la lluvia, para deshacerme del aire en mis pulmones, y hundirme en el barro, entre ramas con olor a moho, entre restos de pedazos de tierra húmeda, si cierro los ojos me quedo tan cerca, soy parte de las limitaciones de mi cuerpo, como un hermano siamés, sin solución posible, conscientemente dormido y desesperado, tan cerca de las acuarelas que flotan dentro, dormido al lado de notas musicales y abrazos de plastilina, planeando en círculos y en espiral, si cierro los ojos se acaba el mundo, vuelvo a ser uno, se borran las fieras de mis cuadernos de apuntes, se ahoga la luna y se quiebran las aspas, si cierro los ojos muero, bajo setenta y tres hojas de roble, bajo el calor despistado del Otoño, y la sombra del canto del viento, vigilante sin torre ni atalaya, si abro los ojos vuelvo, entre bostezos, entre mensajes que rebotan en cada pared de mi cuerpo, ante la puerta de hoy...
·22·
路23路
XI·Dóndes y por qués Se pasó el arroz de esperar, la quimera quedó atrás, columpiándose demasiado alto sobre el suelo, hasta que abrió las alas, y de olvido se marchó, se largó a rondar otra cabeza que rondar, agité las manos para ahuyentar moscas, y las moscas se marcharon entre zumbidos confusos, sonriendo entre dientes, que alguien más habrá por ahí, inocente víctima de sus merodeos, y repasé mi cuello con los dedos de la mano derecha, de izquierda a derecha, con suavidad y profundidad, buscando dos huellas grabadas en la yugular, ni las cicatrices encontré, ni las marcas bajo la piel, ni el desgarro entre los músculos, se pasaron las poesías de melancolía, las canciones de nostalgia de olor a viejo, las que huelen a armario cerrado durante demasiado tiempo, se pasaron las horas de largo, cambiaron de estación, y no me mereció la pena enviar la factura, no hizo falta presentar reclamación alguna, simplemente se pasó el arroz de esperar, despejé la mesa de papeles arrugados, de rastros circulares de café, de polvo acumulado durante demasiado tiempo, que necesito una mesa vacía y limpia, por si un día me da por utilizarla, por si un día quiero escribir mi historia sobre ella, aunque sepa que la mitad será inventado, y de la otra mitad, la mayor parte será un cuento, se pasó el tiempo de la bendita ignorancia, las arrugas bajo los ojos, mañana tras mañana tras mañana, me hablan con voz clara y de frente, y ya no me preocupa lo más mínimo, las tijeras que guardo siguen cortando los hilos de la estupidez, se pasó el arroz de esperar, y yo tan contento...
·24·
路25路
XII·Que los lobos no son malos
Procuro no mentir más de lo estrictamente necesario, con el viento de finales de enero se me ve el plumero, y con vergüenza aparezco entre la niebla, con un libro de cuentos escondido bajo la camisa de rayas, una mano sobre el estómago y otra en el bolsillo, sintiendo el frio de las llaves de casa, son mis oraciones de preparación contra el mal del miedo, provisto de mis seguridades, provisto de mis decisiones, contando mentiras sedantes, acompañadas del deseo de un cohiba en el salón, un helado vodka y lima con menta (esto aún no lo probé), afincado al suelo, anclado al fondo de un mar en calma, sediento de abrazos pequeños y risas pequeñas, y cada vez que se esconde el sol contar una de mis historias de mentira, de verdad difusa y confusa, lobos que no son malos, sólo tienen hambre y viven en casas prefabricadas, con hipotecas que pagar y cerditos que no quieren abrir las puertas, ni prestar un poco de su dinero, ni compartir un poquito de su calor, contar que no son malos los lobos que se quejan como cantaores, que sólo reclaman su derecho a vivir en paz, que quien habla tanto de maldad debiera hacérselo mirar, procuro no mentir más de lo aconsejable, si en algo soy experto es en mover las manos así, y con tres pases de izquierda a derecha, dibujar líneas luminosas de confusión entre la realidad y la ficción, entre lo que yo deseo y lo que los demás ignoran, sorbo helado calada dulce, qué bueno eso de estar en casa siendo uno más de la manada...
·26·
路27路
XIII·El mal Ahogarse, ahogarse entre respiraciones entrecortadas, subidones de adrenalina, la tensión en la nuca, agarrotamiento muscular, ahogarse, confundir la realidad, ahogar la humanidad, reventar de placer inmenso, reventar de negrura, descubrir el mal, luchar y luchar, luchar en su contra y correr y correr, y volver al comienzo, ahogarse, y tras ahogarse, mil bocanadas de aire, las justas para olvidar, un poquito antes de ahogarse otra vez, y morir, morir cada vez, un trozo de humanidad cada vez, funerales de pedazos de ser, con pegamento en una mano, por si aún se puede pegar lo que se ha caído, hasta que no haya solución, ahogarse, y de miedo ahogarse, antes de volver a tratar de respirar, demasiada agua en mis pulmones, demasiada peste, agua estancada del color de la crueldad, apretar las mandíbulas, entre espasmos de placer, apretar los puños, estirar el cuello, de derecha a izquierda,
ahogarse, caer sin sentido, purgar cada segundo del drama, huir de la compasión, enredarme en la propia red, hasta encontrarme cara a cara, temer y temer, y padecer lo causado, sin compasión, hasta ahogarse, ahogarse por última vez, dar la vida, repartir brisas de verano, en vez de agitar las mareas de otoño, ahogarse entre respiraciones entrecortadas, de una vez por todas, ahogarse...
ahogarse, ahogarse sin remedio, hasta que la cobardía diga basta, hasta que la humanidad saque de nuevo la cabeza, de este cubo lleno de basura, de restos descompuestos de humanidad,
·28·
路29路
XIV·Cánsate ya de perder huelo las ansias, las ganas de comer, las ganas de perder, y se te olvida que hay que ganar, ganar despertares tranquilos, ganar distancia al odio, pasar un par de días al mes en ayunas, cerca del borde, cerca de las aristas donde acaban los edificios, donde empieza el aire, en el espacio en el que vuelve a nacer el rio seco, vuelve, vuelve a correr, vuelve a nacer, vuelve a volver, vuelve a ganar la mar, el mar,
fueron, ganar con el estómago vacío, de hambre de ganar, de ganas de ganar,
huelo las ansias, viajar entre abismos, entre moscas que cayeron, y al pasar cerca de los viajeros perdidos, siendo un espectador del desastre, redactor de malas noticias, de palabras de brasas, de editoriales decadentes, sin amigos, sin futuros, sin manos de proyectar siluetas en la pared, suponiendo mil engaños, ignorando incontables certezas, pasar firmando contratos de frustración, y te grito al oido, bien alto, para que no desestimes ni una sola letra, hay que acordarse de ganar, aunque pene, recordar ganar,
despejar las telarañas a manotazos, sin cruzarme la cara porque digo lo que digo, sin darme la espalda si es para volver a penar, huelo tus ganas de perder, aparta esa incontinencia triste y gris, estoy de resaca de pesares, y se han nublado todas las estrellas, agita así un poco la mano, a ver si se van las nubes que colocaste con tanto mimo, vuelve, vuelve a correr, vuelve a nacer, vuelve a volver, vuelve a ganar la mar, el mar...
vigilar la senda de la tristeza de lejos, y ganar sin decir absolutamente nada, ganar con los ojos vendados, recordando los paseos y las pistas que ya
·30·
路31路
XV·perdón Allá me ves, confeccionando y diseñando, pintando con pinturas de cera, banderas de tela, banderas de mentira, banderas que colocarme de bandolera, banderas de defender causas improbables, banderas de pedir perdones impensables, tantos perdones, tantas banderas de colores, colgando de ambos hombros, cruzadas como camisas de fuerza, como ataduras de mil colores de cera, allá me tienes, ideando un plan para encender una luz, dibujando en papeles los trayectos, con regla escuadra y cartabón, diseñando recorridos imposibles, para sólo encender una luz, para llegar al interruptor que parece tan enclenque, como desconchado y peligroso, débil y letal, pensando si debería ponerme guantes contra las corrientes eléctricas, si de alguna manera mis diseños imposibles en papeles impensables, tendrán resoluciones reales, si redimiré con una bombilla de 45, o si por el contrario habré de colocar antes una de 90, de no pedir perdón, se me atrofió la sensibilidad a la luz, y aún día a día no sé si estoy a oscuras, o si sigo dibujando de día, allá me ves, embadurnado hasta los codos, inventando poesía idiota, palabras idiotas, para sólo pedir perdón tantas veces, para sólo decir con esquinas quiebros y bicicletas, lo que no sé decir a la cara, ideando poesía idiota, soñando con bailar en un salón iluminado con mil bombillas, bajo cientos de banderas de colores impensables, allá me ves, entre vagos pasos de vals, pisoteando los bocetos y diseños imposibles, las palabras idiotas, pidiendo de una vez perdón, y no decir lo de “I did it my way”...
·32·
路33路
XVI·cinco minutos en las ramas
Se quedó en las ramas, donde se posan las tórtolas a mirar, donde esperan el alpiste del hombre en la ventana, mirando y pensando, pensando en irse allá, a las ramas donde las tórtolas descansan, agobiado y obtuso como está, obtuso en la indiferencia, obtuso en su sueño confuso, pisando cada baldosa como el que flota en las nubes, dando traspiés del que comienza a caminar, entre baldosas, con las puntas de los pies mirando al frente, y los ojos fijos en algún punto de atrás, cuida, no des con la frente en el tronco de algún chopo, con sus ramas entortoladas, y sus hojas de metal tembloroso, cuida, no asustes a aquellas que decidieron vivir en las ramas, un poco más cerca de las estrellas, plateando cada chopo, engordando cada sueño del hombre en la ventana, que cada día a las cinco de la tarde, asoma para oir y callar, y regar de alpiste el patio trasero del vecindario, y volar entre mil aleteos de tórtola, durante cinco minutos rellenos como un pavo de navidad, posarse en las ramas y volver a casa, a pasar otras veintitres horas y cincuenta y cinco minutos de condición humana, livin’ la vida que le toca, obtuso como los brazos recogiendo el aire para poder volar, obtuso en la indiferencia, en la espera de las tardes a las cinco de la tarde, para sentarse en las ramas del chopo plateado, de tórtolas y hojas plateadas, temblorosas y esperando el alpiste de cinco minutos...
·34·
路35路
XVII·Retales y harapos de los de ser uno mismo
Vaya si descubro y si aparento, harapiento, con una camisa de cuadros amarilla, decorado y revestido de retales, de los de la amona, los que quedan para la cocina, voy por caminitos que caminan cerca del sol, sin quemarme, desentierro puñales de las espaldas de los que van cayendo en el camino, de los asustados, de los ignorados y los que no quisieron tirar p’alante, limpiando la sangre de filos afilados con saña, con retales de los de la abuela, los que quedan para limpiar las ventanas con Cristasol, harapiento sé que no estuve nunca mejor, no me jode aparentar porque no aparento, saqué de excursión, con el profesor, dos monitores y una cantimplora llena de zumo de melocotón, saqué de excursión a todo el circo de malabaristas, a payasos llorones y domadores de Sábado por la tarde, a todos los colegas que se entretenían por mis venas, los saqué de excursión entre las letras, y entre las puertas que dejé entreabiertas, y vaya si descubro que con dos palmadas en la espalda, despedí hasta al último perro malo, guiñando el ojo derecho, sonriendo de pena, de tanto tiempo perdido de miedo, sin trapos ni harapos, de los que guarda la abuela, que en su sabiduría sabe lo que se hace, retales para limpiar cristales y mesas y vajillas, filos de puñales y cada pegote de grasa que cayó a los azulejos...
·36·
路37路
XVIII·Ofertas que no me interesan Yo no quisiera parecer descortés, me recuerda a una pequeña dama, ingenua y perdida, pero no quisiera parecer descortés, desde mi segundo plano de actor de segunda fila, decirte en un segundo, que no quiero saber de lo que tú sí quieres hablar, desde tan lejos, en mi segunda luna, no se entienden tus palabras, y no quisiera parecer descortés, pero me recuerda a una pequeña dama, decorada de cabello de ángel, de luces de oro y labios de carmín, cubriendo la pobreza, dibujando una ilusión de segunda línea, de huellas de diamantes sobre el barro, y no quisiera parecer descortés, pero es que llega un momento, no digas nada, pero llega un momento en el que los trajes de oro, los de los valses de medianoche, de los de zapatitos de cristal, caen a la altura de los tobillos, por sueño o necesidad, a la altura de los tobillos, pero no quisiera parecer descortés, desde esta segunda fila, en mi papel de actor secundario, el que no se entera de nada, desde la segunda luna sin entender tanta sabiduría, sólo decirte en el segundo segundo, que me rechinan los dientes, no acostumbro a pagar consejos, ni a deber favores, desde mi ignorancia ingrata, así somos los de la segunda fila, los que no esperamos subir a primera, intentando no parecer descorteses, pequeña dama ingenua y perdida, con colmillos de seda y veneno de viuda negra...
·38·
路39路
XIX·Un suspiro
Un suspiro no da para largo, es un suspiro, como el último milímetro del milímetro que torna el rio en mar, un suspiro no da para largo, es un suspiro, en el que te veo entre las cajas de fruta, y en un suspiro sonrío, cuánto tiempo ha pasado, así en un suspiro queda la fotografía, en un suspiro desemboca el rio, en un suspiro, que no da para largo, se vuela la ilusión, en un golpe de mar, en un golpe de mar se va, en un suspiro, que es un suspiro que no da para largo, atrapada en un momento, congelada en mi memoria, retenida, como el milímetro del milímetro del rio que se hace mar, un suspiro no da para largo, es un suspiro, en un suspiro estás y te vas, el aire de mi suspiro, incrédulo hasta el temor, agitando los suspiros, los instantes y las fotografías, el aire se los lleva, en un suspiro, que no es gran cosa, que no va para largo, que es sólo un suspiro, y mientras me duermo, se para el instante, y aunque se amontonen los suspiros, se rompe el tiempo, y en un suspiro, que no da para largo, te vas y te vas,
sin dejar de suspirar, en el último milímetro del último milímetro, lejos de la cinta que es el rio, cerca del final de la orilla del mar, en un suspiro cruzar y convertirse en agua salada, sin pensarlo, en sólo un suspiro, un suspiro no da para largo...
·40·
路41路
XX·Casi cuarenta
y la lucha, las discusiones, recuerdo mi comprensión, mi confusión, el trabajo de ir construyendo una pared, alta y fuerte, contra tempestades, tormentas y torturas,
Son casi cuarenta años, recuerdo un coche y una bolsa de sellos antiguos por Navidad, recuerdo un viejo piano, que debió de ser nuevo entonces, paseo llevando anclas, camisetas indecorosas,
son casi cuarenta años, y aún recorre mi sangre, como si hubiese ocurrido ayer,
recuerdo no entenderte cuando hablabas, maldita sea, te recuerdo entrar por la puerta de casa a la noche, y el olor, y los ojos vidriosos, los recuerdo amarillentos, como las escenas, escenas de color ocre, alumbradas por la lámpara de araña de color ocre,
casi cuarenta años, odio la Navidad, las fiestas y fechas de guardar, te recuerdo sin entender lo que decías, acorralado y lanzando zarpazos a izquierda y derecha, derrotado y envuelto en un manto de olvido, recuerdo mi odio, la vergüenza y la confusión, decidiendo en un tablero si juego a negras o blancas,
os oigo discutir, pelear, escondido bajo las sábanas, jugando a ser un avestruz, entre lágrimas, no veo, no oigo, no hablo, detrás de la puerta de mi habitación, noche sí, noche no, sin preguntarme si tendría un final, recuerdo lágrimas y el caos, disfrazado de confusión, de la confusión de un niño que dejó de ser niño,
sin encontrar salida, sin creer en ella, temiendo la siguiente, y la próxima, y día tras día, y noche tras noche, recuerdo quererte, recuerdo no entenderte, y recuerdo odiarte, consciente de que el culpable nunca viaja solo,
recuerdo los Sábados a la hora de comer, grabados en la piel, inquietando mi nuca, recuerdo ya son más de las dos, recuerdo el miedo, y el ruido de las llaves, sentados en la mesa,
recuerdo la frustración, y siempre, siempre el miedo, el temor al día siguiente, aislándome más y más, tras un muro de indiferencia y soledad, construyendo mi realidad, tras un muro alto como una montaña, impenetrable,
aguanta ama, aguanta que pronto pasa, al acabar la comida pasa, casi en silencio los mejores días, recuerdo el olor, y los ojos vidriosos, los recuerdo amarillentos, como las comidas de los Sábados,
recuerdo tras cuarenta años, sin comprender hoy cómo pudo ser, cómo levanté semejante pared, atrincherado en la trinchera de mi habitación, rodeado de mis libros, de mis casettes, de mi ficción de no estar allí, cómo aprendí a cerrar los ojos de dentro,
·42·
son casi cuarenta a帽os, y hoy te doy las gracias por el valor, por volver a abrir las ventanas, por echar a los fantasmas que viv铆an debajo de mi cama...
路43路
XXI·olvidemos vamos a olvidarnos, de lo de ayer de lo de antes de ayer, olvidémonos, entre vaso y vaso de ron, de lo difuminado, de las luces entre la niebla, de su tenue muerte de su parpadeo británico, olvidemos todo aquello, lo insoportable de tan real, de lo que salió mal, de los días rotos de los años sin verano, olvidémonos, de tanta sed, de tan poca playa, de miradas por encima del hombro, de noches de angustias frías, de la falta de compañía, de acostarse de espaldas y despertares a kilómetros de distancia, vamos a olvidarnos, de poemas como losas de palabras como cipreses, de caminos tan arrugados, de trajes tan de olor a naftalina, olvidemos, las ramas quebradas, los baldosines quejicas del pasillo, all I need is a little drink of red wine, un vasito por piedad, un vasito para olvidar, un vasito para mirar, a little drink of red wine, que nos haga olvidar, tardes enteras de manteles sucios, mañanas sin desayunos a la mesa, en nuestra soledad de temer quedarse de temer escapar, de olvidar el roce de los dedos, de olvidar incluso nuestras sonrisas, a la luz de las nubes a la sombra de la Luna, olvidémonos, de lo que dejamos en el calvario, de cruz a cruz, del odio y sangre derramado de cada corazón, de las líneas frágiles que dan a la cordura, olvidemos con un brindis, con un hasta nunca y un abrazo...
·44·
路45路
XXII·canciones Una breve historia, de canales que rascan el dial, de noche de Verano, de un pequeño día, de días que no se vuelven a cruzar, una canción con reminiscencias a pasado, repleta de letras, repleta de vibraciones de futuro, un patrón desvariado, maldiciendo la suerte, desdiciendo al destino, malcarado y hambriento, de dedos de plata y mente de hojalata, posando dulces de membrillo en el camino, dulces brillantes de membrillo y caramelo, que me cuentan historias de secretos, historias de hoteles y playas, de habitaciones cerradas de ventanas bien abiertas, con sus aromas de libertad, susurros de guijarros pequeños rozando entre sí, como un tema de radio pequeño, que llena rincones llenos de telarañas, que desata nudos y tormentas, agitando mares de calma, maldiciendo mi estampa, acunado por cuentos de Tim Burton, absurdo en la lógica, confuso en mi paseo, entre dulces de membrillo y caramelo, procurando no pisar, esperando que el tiempo pase cerca de mi espalda, hablando suave, diciendo lento, poniendo punto muerto, un tema de canción de voz arrugada, repleta de palabras, repleta de silencios, de figuras en la niebla, abrazadas...
·46·
路47路
XXIII·negaciones Y qué haces descalzo, no me atrevo a contrariar, la puta vida que pasa sin decir que no, la negación que no me sale, y a las ganas, que le faltan huevos, respetando lo irresponsable, respetando lo irrespetable, asintiendo, consintiendo, agradeciendo si es que por la noche me dan una palmada en la espalda, respetando y comprendiendo, falto de huevos, con la puta realidad y las ganas de decir que no, que no y que no, que seguir tapado bajo las rocas, creando una patria que no es de verdad, y qué haces descalzo, acariciando la tierra con los callos de la experiencia, extraño en una tierra lejana que no es la mía, tratando trazas del pasado, para intentar acabar con el fin del mundo, reprogramar los tambores de la gran explosión, y cambiar esta dinámica de respeto no ganado, que me sangran las encías de apretar los dientes, y no saber decir que no, me planto a encender un fuego, descalzo y sin sueño, a las cinco de la mañana, descubriendo que estoy aquí tan tranquilo, confiado en que pasen las medias mentiras, y se instalen a vivir las medias verdades, y así camino, descalzo y desangrado a ratos, leyendo lecciones de día, ahuyentando los fantasmas de olor a vergüenza, valiente para admitir que fui un cobarde, entre algodones y sonrisas forzadas, qué haces descalzo, henchido, hambriento de negación, de dar la espalda y señalar con el dedo, sabedor y salvaje, como siempre debió ser...
·48·
路49路
XXIV·lecciones Hay días de sol, días de tormenta, si yo me quedara en un hueco, en un árbol escondido, en un hueco escondido, si yo me quedara en una pequeña casa, de tejados alfileres, de telarañas y sin sombrillas, si me quedara escondido en la chimenea, como maderos que se asustaron del fuego, que quema, hay días frenéticos, días de siesta y sueños, si yo quisiera no abrirme en canal, mostrando mis entrañas al mundo, cerrar las heridas bien cerradas, aunque fuera con tiritas, si yo cosiese mi boca y mis oídos y mis ojos, con alfileres de la caja de costura, un hilo color de la luna, hay días de sonrisas, días de palabras y sombras, si yo me parara despacito, en una sala de hospital, en un hospital de ventanas y barrotes, si yo me parara en medio de la sala de espera, vacía sin ti, vacía sin mi, hay días de canciones tristes, días de jazz y buen rock, si yo nadara en aguas transparentes, en lagos transparentes, de sonidos transparentes, si tratara de no cambiar el tiempo que queda, el tiempo de tictac de un reloj sin fuerza, de agujas débiles, de números casi olvidados, con miedo de enseñar, porque merece la pena callar, hay días de viejas costumbres, días de nuevos deseos, si yo pudiera caminar sobre el mar, si pudiera no dejar huellas ni rastros, sólo necesito una vasija de plomo, con tapa de aluminio, una vasija para guardar y resguardar, tapar y mostrar...
·50·
路51路
XXV·Afianzando las raices y las ramas Teje y teje, no se cansa de tejer, las telas de araña y las guerras y las cazas, las presas que caen y las manos heridas, el viento que agita y las moscas y avispas que escapan, teje y teje y las balas perdidas, trampas y lecturas, las hormigas bajo el yugo real, cada hermano tropezando sólo una vez, el temporal se lleva al resto, un mismo ideal, una misma lucha, la lucha real, teje y teje, la red de cerrar las salidas, la ayuda abrazada al miedo, cada vez es sólo otra víctima, cada momento es otra batalla, cada red un sueño atrapado, debatiendo, rebatiendo, mirando el horizonte, esta es la guerra, sin tiempo para la esperanza, sin fuerzas al final del día, procurando alcanzar, procurando descansar, teje y teje, así le enseñaron, ente de red y tela y nudo y puntada, así le enseñaron, así va y viene y va, de la caza a la ternura, de la ternura a la paz, y de la paz a la batalla, así le enseñaron, defender rasgando, defender siempre, teje y teje el enredo de su razón, sin mirar a cada caído, sin mirar los ojos heridos, guardando en la nevera cada recuerdo, reservando hasta que aprieta el hambre, para los días de lluvia, para los días de tormenta, reservando telas, reservando redes, reservando víctimas de batallas antiguas...
·52·
路53路
XXVI·dolor
Que las corrientes de mar me lleven, que el viento me diga qué hacer, porque yo no puedo, porque no me quedan fuerzas, que la sombra de mi cuerpo delgado marque el camino, que una bofetada en la cara me diga quién soy, porque yo ya no sé, porque estoy hueco como un árbol seco, que la noche y sus estrellas envíen respuestas, que los posos del café despejen el camino, porque yo no puedo, porque mis piernas están rotas, que las oraciones arranquen el dolor, que los templos cubran y guíen mi alma, porque yo ya no sé, porque bajo mi piel las piezas están desencajadas, que las voces de otro tiempo me eduquen, que los muertos señalen con sus dedos de hueso, porque yo no puedo, porque las telarañas de mis ojos no me dejan ver, que me pongan un grillete en el cuello, que me arrastren por la tierra ensangrentada, porque yo ya no sé, porque se me muere el alma...
·54·
路55路
XXVII·frío
Quedan los restos de una vieja historia, queda la debilidad y la cobardía, quedan los pies quietos, vestidos con zapatos tan ajados, quedan los pies quietos, casi prefiriendo estar descalzos, quedan ecos de gemidos, quedan el olor de las sábanas, quedan gotas de sangre y de lucha, quedan minutos y fotogramas, la película que no quiero ver, quedan las almas partidas, palabras abruptas de frustración, quedan los labios frios, quedan las noches frias, quedan las manos frias y vacías, quedan la dejadez y el gesto torcido, quedan las alas encogidas, queda la cabeza recogida bajo el cuello, los ojos cerrados en gesto de olvido, quedan los latidos susurrados, los ojos cerrados de dormir y vaciar, queda la miel sin probar, quedan las luces de neón, quedan distorsiones y disfraces, quedan la falta de cojones y abandonarse a la corriente, quedan mis días, queda mi vida mostrada, en venta...
·56·
路57路
XXVIII·espejos Soy la luz del sol fría, soy el mar que no moja, y la brisa que no acaricia, soy la sombra sin dueño, el salvaje domesticado, soy mañana sin hoy, soy la nieve templada, el perfecto incógnito conocido, soy el dueño de un reino sin castillo, soy príncipe de nada, creador de material virtual, soy el que digo ser entre dientes, soy una factura ficticia, la doble contabilidad, soy el cazador que compra su presa, soy el placebo para tu enfermedad, las palabras decoradas y brillantes, soy promesas de segunda mano, soy la obsesión fantasma, el sueño lúcido de días sin noches, soy la lotería sin premio, soy aquello que dibujo con tinta invisible, poesía oscura para días de luna llena, soy el deseo, la lujuria, el amor y la pasión, soy la botella vacía en tu mesita de noche, el reloj que acelera el tiempo y contrae el espacio, soy una nota de despedida que comienza con un “hola” soy el maestro de los fuegos artificiales, soy el sustituto y sucedáneo, el truco de magia más grande, el truco de magia más hermoso, el truco de magia más cruel, ahora soy, ahora ya no soy...
·58·
路59路
XXIX·comparaciones
Empezar a escribir la historia desde un punto abstracto, desde un punto del que no se puede partir, he visto las caras de asombro tras de mi espalda erecta, he visto las miradas de desconfianza frente mi pecho desnudo, la sangre recorriendo cada nudo y nódulo que obstruye la circulación, la falta de oxígeno en los pulmones quemando el mundo, jugar la partida de quien sólo puede perder, una y otra vez, orgulloso en el paso y quebradizo en la memoria, entrado en el portal más oscuro y húmedo, del olor del tabaco del portal en el que hace tiempo que no se fuma, me he sentado en las escaleras frías de subida para descubrir que yo sólo sé bajar, he bajado porque no sé subir y me he llevado tus días por delante, atropellando realidad y sueños, tratando de no decir nunca mentiras, asesinando sin saña sin dolor y sin placer, sigo jugando el juego para no dejar de perder, una y otra vez, perpetuando el abstracto de la historia, empezando el juego desde una casilla que no es la de salida, he desafiado cada oportunidad con orgullo de vencedor, he claudicado ante el desafío con vergüenza y por la puerta de atrás, cerrando y sellando sobres para guardar en un diario de olvidar, dejar de ver de leer de existir en paisajes inventados, si miras bien dentro, dentro no hay ni siquiera sonido, y fuera, fuera está el sonido del mundo...
·60·
路61路
XXX·noches
una noche desesperada, entre mil noches desesperadas, se escucha un lamento desesperado, entre voces desesperadas, y vampiros y vampiresas del dolor ajeno, entre minutos dulces y pastelitos de crema y cacao, horas de agrietamientos en el camino, una noche de volver la mirada atrás, comprobar la gloria, sentir la furia, beber de fuentes de la eterna juventud, brillar con un fogonazo, intenso como un sol, breve como una desconexión, y la línea se torna plana, el pitido lineal, una noche de decrecer y volver, entre mil noches de crecederas y dolores de espalda, la locura de cada fantasía, entre desgarros en la lluvia, entre miles de rostros desnudos, guárdate de las bestias que huelen el miedo, guárdate de las sanguijuelas que sorben dolor, entre fugaces rayos de sol, días teñidos de gris y frio, entre instantes lúcidos, el manto de raso ocultando el rostro, una noche de siembras, con las manos agrietadas por la tierra, sentirse un dios, para caer entre humo y llamaradas al olvido...
·62·
路63路
XXXI·salir Cuando cierres la puerta, procura no dejar rendijas abiertas, cuando cierres la puerta, que no corra el aire frio, el aire de la calle, el de este Invierno frio, cuando cierres la puerta, no quiero mi aliento helado, guárdate de los que permanecen fuera, cuando cierres la puerta, hazlo con la dulzura de la dama, cuando cierres la puerta, no lo hagas de golpe, pues del golpe vuelve a abrirse, cuando cierres la puerta, no quisiera que te pillaras los dedos, cuando cierres la puerta, observa lo que llevas puesto encima, cuando cierres la puerta, mira bien en la mochila que no falte de nada, cuando cierres la puerta, no te asustes de las bestias de la calle, conviviste con alimañas antes, cuando cierres la puerta, quisiera al menos una muda de piel para vestir, cuando cierres la puerta, deja las llaves en la pila, cuando cierres la puerta, no dejes que nadie siga tus pasos, cuando cierres la puerta, no temas los mareos, pasarán, cuando cierres la puerta, limpia bien tus pies en la alfombra, cuando cierres la puerta, arrastra el peso de los clavos, guarda cada mota de polvo y piedra que veas en tu paseo, cuando cierres la puerta, no me dejes nada excepto el sonido del adios...
·64·
路65路
XXXII·puzzles
Apurando una copa de nada, en la barra de ningún bar, que en realidad ni siquiera existe en mi imaginación, bajo luces de farolas apagadas, el calor de los guantes de ante que no visto, sentado en el asfalto, con las piernas colgando hacia el mar, hacia la brea y el alquitrán, desdibujando y pintando pinceladas de mi mismo, triturando cristales pequeñitos que fueron espejos, montando y desmontando como si fueran puzzles abstractos, de búsqueda y de encuentros, de mirarme a la cara sin ver lo que enseño, entretenido, divertido y sonriente, jugando sin dados ni fichas de parchís, intuyendo señoritas, sintiendo llamaradas en mi interior, reconociendo lobos que creía escondidos para siempre, moviendo piezas de un lado a otro, apurando una copa de nada, en la barra de ningún bar, que en realidad ni siquiera existe en mi imaginación, bajo luces de farolas apagadas, atusando cada pluma de arcoiris plateado, afilando cada colmillo de haber desgarrado cuerpos desnudos, agitando ambas alas imponentes de grandeza tan nimia, escuchando mis propias palabras mudas, para seguir riendo el camino que no camino, y asegurarme de que todo esto, de que lo que rodea mi cuerpo sin materia, es en realidad algo real...
·66·
路67路
XXXIII·Se teje Se tejen nudos en la garganta, se tejen relatos y ficciones, se tejen realidades que mejoran lo escrito, se tejen manteles de estrellas fugaces, se tejen vergüenzas, se tejen bufandas contra el frio de la Primavera, se tejen silencios de hielo, se tejen palabras que queman, se tejen, se tejen las ropas de gala, de una noche de gala, se tejen las canciones que acompañan el sueño, se tejen las parcelas de lo irreal, se tejen todos los recuerdos de mañana, se tejen los guantes de piel de luna, se tejen los caminos cruzados, se tejen lágrimas sin pena, se tejen huellas en el alma, se tejen rios con cuerda de guitarra, se teje la muda sin creer que se teje, se tejen compases de manos entrelazadas, se tejen escenas sin guión, se teje la obra sin actores ni palabras, se teje el paseo al borde del vuelo, se teje un poema sin querer, se tejen minutos tras minutos tras minutos tras minutos, se teje con hilo de polvo de materia negra, se teje con retales de allí, con retales de allá, se tejen las carreteras de noche hacia la mañana, se tejen nudos en la garganta, se tejen nudos en la garganta, nudos en la garganta.
·68·
路69路
XXXIV·señales
Me siento meridianamente mejor, meridianamente abstracto, decorado con luces fugaces, lo siento sobre mi piel, mi piel decorada con marcas de luces fugaces, ni escucho esas voces de mi cabeza, las que dicen que mañana está apagado, las que dicen que nada ocurre como debiera, pero eso fue ayer, eso fue otro día que se llamaba ayer, en mi piel se tatuarán luces fugaces, con ojos de dragones, con ojos que miren desde abajo hacia arriba, en mi espalda se marcarán las carreras, los vuelos en planeador, meridianamente mejor, meridianamente abstracto, como si en Mayo escuchara llegar las golondrinas, y en el cielo cazara la Luna, sereno y sobrio de vértigo, cicatrizando cada marca de rejón al rojo, dando cuerda al reloj porque no estaba roto, saliendo de la sombra lentamente, para no quemar las alas al Sol, sin pasar de puntillas, paseo a ciegas de la mano de las luces fugaces, grabadas en la memoria de la noche, luces fugaces para abrir claros fugaces, paseos de playa de noche de hoy, de mañana, en consecuencia meridianamente mejor, meridianamente abstracto, sentado y recostado a la vera de este camino, tras cruzar de plano a plano, observando desde lejos estando así de cerca, atravesado por las luces fugaces, al menos al fin, atravesado por luces fugaces, prendiendo en mi pecho, marcando mi piel desnuda...
·70·
路71路
XXXV·Decir y hacer Amanezco de noche, de noche fría, amanezco desnudo de piel, desnudando mi cama, sordo de canciones, mientras no hago mas que escuchar noticias, celebro el café, como quien celebra el día de su cumpleaños, con amargura, con placer, con fotos y lágrimas de lo que pasó, de lo que queda por llegar, cada vez menos para el se acabó, y aún no buceé para coger para ti un trozo de coral, ni subí la ladera a buscar flores de cuentos, trato de continuar componiendo una historia, la que sea digna de una vida digna, la que hable de amaneceres fríos, y de cuerpos calientes, me digo que todo está por llegar, me digo que no sirve de nada escribir, que desnudarme de mañana sólo sirve para disfrazarme después, y perfecciono mi acento a la hora de hablar, sin decir lo que debería decir, así pasa cada momento, pensando “mañana será el día”, y mañana es otro mañana detenido en el tiempo, y cada vez queda menos, que hay tanto que escribir, hay tanto que quiero contar, después de cada amanecer frío, pasando de sentarme a beber un café, redactar de noche las líneas de lo que construí de día, del coral que alcancé para regalarte, de que en un momento sin ser un momento, haber tachado lo que dejé de hacer de tanto escribir que lo hacía, soñar es soñar, amanecer de noche fría, pero prefiero desnudar mi cuerpo junto al tuyo, y bailar sin contar que lo hago, subir montañas y saltar en ala delta...
·72·
路73路
XXXVI·mochilas
No me cierren las puertas, ni las ventanas que dan al patio interior, aunque tan sólo lleguen sombras, aunque tan sólo huela a suavizante y lejía de Verano, tanto encierro y tanto orgullo, tantas mareas que vienen y van, al ritmo lento de la Luna, al ritmo del ruido de mi mente, tanto orgullo para tanta ruina, para tratar de dejarme a oscuras, sin derecho a patalear, cargando una puta mochila repleta de ladrillos, ladrillos de plomo de recuerdos, mover el mundo sería más fácil, y se me desgarran los hombros, tanta ruina y tanto dolor, un vaso de nada para ahogar cada reflejo, representando actos una y otra vez, con movimientos cansados, con los ojos asqueados, y las almas marchitas, entre paños y lamparones, no me cierren las puertas, ni las ventanas ni las contraventanas, no ven que voy llevando la mochila de mis pecados, que ningún rincón encuentro donde soltar lastre, no ven que se me parte la espalda de cargar, tanto dolor y tanto odio, una razón vana para destruir, una nube entre lo diluido y la realidad, no me cierren las esperanzas, que se desgarra la piel donde tú depositas mis culpas, no me cierren las puertas, ni las ventanas que dan al patio interior, dejen rendijas abiertas al cielo, rendijas para huir, para huir...
·74·
路75路
XXXVII·agotarse
Se gastan las pilas, mi voz está cascada, no saco mas que migas de pan de mis bolsillos vacíos, ya no tiene remedio, dejo caer los días del calendario hacia el suelo en caída libre, estrellándose contra el suelo, rotos en mil pedazos, como rotas esperanzas, terrazas desiertas, de viento del Norte y salitre, de inyecciones de verdad, pica y escuece, camino bajo tenderetes de mercados de mentira, de broma de juguete de ilusiones y disfraces, conviene mirar arriba en el descenso, a menos que quiera olvidar el camino de vuelta, se gastan las pilas, son días extraños, de sucesos extraños, no hay vida después del final de los días extraños, mi voz está cascada, recorro a pie las vías vacías, cascadas frías, cubriendo las noches de lluvia fina, me dedico a rasgar cortinas, recoger los jirones, vías sin destino, vías sin recorrido, alimentar las hogueras de San Juan, con el sueño de volver a ver arcos de rosas...
·76·
路77路
XXXVIII·La trampa Enganchado al suelo, a la carretera, pegado al asfalto, caliente y derretido, pegado al camino, clavado e inquieto, me suben hormigas rojas por los cordones de mis sueños, enganchado e inmóvil, dibujo letras en la arena, clavado hasta los tobillos, dibujo palabras conocidas, oídas, intentos de echar a correr, son las veces de otras veces, son las zapatillas tan pesadas, son excusas para no comprar el libro de ruta, puedo verter la misma copa una y otra vez, vaciar y llenar, y derramar y llenar y vaciar, hasta que olvide la manera de caminar, hasta que olvide que tras un pie va el siguiente, pegado al asfalto, cortando el viento con mis manos, a punto de partir mis tobillos, sólo por no querer descalzarme, quiéreme un poco más, clavado como estoy, a la luz de una vela de luz roja, clavado como me encuentras, con las muñecas desgarradas de tanto tirón, gustándome, buscándome, atracando los rincones de mi mente, donde quedan las instrucciones para salir corriendo, sé que en algún cajón las encontraré, quiéreme un poquito más atrapado como me hallaste, contra una pared de hormigón, pegado como me viste, vestido con el traje de rayas, que pronto le daré color, acostado en la litera de pocas plumas y demasiada paja, hasta cuándo se podrá continuar, pegado al camino que atrapa los pies con manos de asfalto, dame otro empujón, que yo me encargo del resto.
路79路
XXXIX·Mis orillas Entre las olas, de la orilla donde se comen nuestras palabras, de entre las olas que no traen apenas espuma, de las olas que se llevan todas las promesas, promesas, promesas que repetimos sin cansar nuestras lenguas, promesas arrastradas a alta mar, entre un viene y va y viene hasta que finalmente se van, revolcadas casi ahogadas entre esperanzas, arrastradas entre conchas, arena y botellas de plástico, entre las olas que vienen sin fuerza, tan constantes como la marea inagotable, tan constante como obra de teatro del mar, que acaricia cada promesa, promesa y promesa, para dibujar un puto boceto de ilusión, una ilusión en tres dimensiones, sin absurdas gafas de colores absurdos, sin resultado alguno, sentado finalmente en la orilla, dejando que cada ola acaricie los tobillos desnudos, las piernas desnudas, el cuerpo desnudo, desnudo el pecho y la mente desnuda, dejando que me arrastre con cada promesa, dejándome llevar sin espuma de artificio que me acompañe, allá donde la mar acaricia cada centímetro de esperanza, borrando, borrando, borrando tatuajes dibujados con tinta sin sangre, entre las olas, donde me encuentro con los restos de tantas vidas, entre las olas, donde las promesas mueren entre conchas, arena y botellas de plástico, de entre las olas, donde prefiero acostarme y dejarlas hacer, dejarlas darme placer...
·80·
路81路
XL·hojas
Sólo han sido cinco años, seis o siete, sólo mil hojas caídas en el asfalto, diluyendo el verde, disuelto entre la gravilla, sólo mil hojas agonizando bajo las botas, atravesadas por tacones inmisericordes, perdido el tiempo, aprendiendo a volar, acompañadas por el viento del Norte o del Sur, aprendiendo a levantarse del suelo, ignorando que nunca viajaran solas, nunca allá donde quieran, aprendiendo a flotar y navegar el aire, para nunca llevar el timón, mil hojas que se van, de un golpe de viento o lentamente, se irán, cuando aprendan a volar se irán, pretendiendo saber dónde van, perdido el verde de sus venas, quebradizas y frágiles parodias de vida, sólo mil hojas agonizando en cada esquina, bajo innumerables botas, cubiertas de alquitrán y calor que quema, sólo mil hojas que cayeron queriendo volar, y al soplar, huyeron donde nadie más las encontró, perdida la vista atrás, sólo han sido cinco años, seis o siete, sólo mil intentos de volar batiendo las alas que nunca tendrán...
·82·
路83路
XLI·Hay fuegos
Hay fuegos que no encienden, fuegos que no existen y queman, fuegos de mentiras, de encender cigarrillos de chocolate y lámparas sin aceite, hay fuegos de todos los colores en blanco y negro, fuegos nacidos sin llama y sin futuro, hay fuegos ahogados antes de prender ramas, hay fuegos que siendo fuegos, congelan el aire de respirar, hay fuegos por los que perder la razón, fuegos que quieren ser incendios siendo pequeñas brasas, fuegos alimentados de pañuelos mojados, hay fuegos que sin luz iluminan salas oscuras, fuegos purificadores de vidas impolutas, hay fuegos asesinos de rastros inventados, fuegos de obra de teatro, fuegos juegos de niños a la orilla de los lagos, hay fuegos sin ser fuegos queman pareciendo fuegos, hay fuegos que sin quemar bosques, son fuegos que consumen vidas, fuegos que prenden sin querer, sin poder prender, hay fuegos de eterna condena breves, demasiado breves...
·84·
路85路
XLII·El día
El día que amanezca al alba, acostado en la playa del día en el que diga adios, el día que amanezca mirando el sol bajo una toalla protectora, con el frío de quien pasó la noche en vela, el día que mil olas pinten las primeras horas, protegido por el calor de un cuerpo, el día que la luz cure y cicatrice las heridas, besado en el pecho por unos labios a los que no hubo que pedir, el día que entre dientes silbe contra el océano, a favor del viento sobre unos pechos desnudos, el día que estas manos enciendan cada día, desnudando tu piel con dedos de roces y caricias, el día que la noche me arrope entre canciones, caminando descalzo montes y valles, el día en que las estrellas crucen el tiempo, transformados en ríos jadeantes, allá donde se apoyan los brazos, allá donde comienzan las piernas, el día que amanezca al alba, atrapado entre el deseo de permanecer atrapado, atrapando una sonrisa dormida con mis ojos...
·86·
路87路
XLIII·sentarse
Sentarse frente a nada, sentarse y esperar, sentarse sin respuestas, sin pedir sin recibir sin esperar recibir, sentarse a ver amanecer, sentarse sin saber si existe el sol, si mis ojos me mienten cada mañana, sentarse sin opción, devoto de mis creencias, absurdamente sentado, sentarse siendo objeto, siendo todo y siendo vacío, sentarse en toallas usadas, sobre restos de pasado que no se borra, sentarse en sillas de madera que no me corresponden, sentarse una noche, muchas noches, sentarse ciego y sordo, sentarse sabiendo que al día siguiente habrá que sentarse, sentarse para nada, por seguir con las manos huecas, sentarse a dibujar deseos, a soñar dibujos, sentarse hasta agotar las despensas, sentarse sin esperas, sin respuestas, sin horizontes, sentarse, tan sólo sentarse...
·88·
路89路
XLIV·Entre tarde y ausente Dos horas tarde, desteñida la camisa azul, veinte vidas pasadas, ahogadas las ilusiones, de magos, de ilusionistas demacrados, ajados y asustados, el mañana por distancia, vértigo insulso y enmohecido, sumergido en mar, donde no corre el tiempo, hundidos los recuerdos, los que son, fueron y serán, hundidos en burbujas, mil puertas en el horizonte, astilladas, enteras, viejas, oliendo a resina, quebradiza la pintura verde, dos horas tarde, apenas queda sangre que corra, desencajado el corazón, recompuesto para cada ocasión, sujeto con vendas blancas, harto de los estallidos, encogido de miedo, apresadas las orejas con ambas manos, vencidas las palabras dichas, oradores sin recursos, leyendo viejos guiones, sumergido en mar, donde no corre el viento, lastrados los bolsillos, con pedazos de metal y roca, fragmentos de cristal, dos horas tarde, siempre tarde, derrotados los días, todos y cada uno de ellos, arrancadas sus ropas, desnudos para la ocasión, ocurrió que se hizo de noche, esperando la puta calma, por la espalda desgarrada, llegó el adios y el final, el hasta luego y dios dirá...
·90·
路91路
XLV·reciprocidad
De repente el silencio, la súplica periódica, que dame el perdón, que perdona y olvida, un conocido de visita rutinaria, la gripe del Invierno, desagradablemente insistente, que perdóname, las palabras cayeron sin pensar, que perdona y olvida, y uno perdona, y olvida, y perdona, y perdón tras perdón, se hace hábito hasta perder el sentido, convertido en mantra, en un extraño zumbido constante, y uno perdona, y olvida, y perdona, y el día sigue, y los perdones son aspirinas, analgésicos cada vez más innecesarios, uno se pregunta ¿quién le perdonará? ¿quién olvidará sus pecados? ¿quién le perdonará? reparte perdones, reparte aspirinas para el corazón ¿quién le guardará alguna aspirina? de repente el silencio...
·92·
路93路
XLVI·sabemos
No sólo sabemos discutir, también sabemos estar sentados, uno junto al otro, sin pronunciar una palabra, sin mirarnos a los ojos, No sólo sabemos discutir, también paseamos, apenas rozando los dedos, apenas separados por dos centímetros sin mirarnos a los ojos, No sólo sabemos discutir, también sabemos compartir la mesa, disfrutar la misma comida, con apenas una hora de distancia, sin mirarnos a los ojos, No sólo sabemos discutir, también nos besamos, cerrando los ojos nos besamos, tú en Boston y yo en California, sin mirarnos a los ojos, No sólo sabemos discutir, también sabemos reír, con risas desbocadas reír, cuando sufre el otro reír, sin mirarnos a los ojos, No sólo sabemos discutir, también amamos, casi entre susurros lejanos, abrazados ante los desafíos, mirándonos a los ojos.
·94·
路95路
XLVII·De mordeduras
Sabes subir suave, lenta como la marea de Verano, lenta como pasear sin prisa, sabes subir suave, sobrevolar con la palma de la mano, rozar con el roce del calor, en un vuelo rasante a dos milímetros de la piel, sabes subir suave, dibujar de placer cada rincón, descender y rozar, ascender y arrastrar el deseo, sabes subir suave, tenerme a la espera, dominado en el enredo de tus hilos, dominado bajo los dedos de tus pies, sabes subir suave, y yo tengo que bajar deprisa, marcar la piel de tus piernas, clavar mis dedos en ti, retarte a esta guerra, vestirte de bestia, sabes subir suave, pero necesito mi espalda de piel levantada, y esos dientes en mi pecho, mi brazo, ronronear, saltar luchar y aullar, guerrear la batalla del placer, descarnados y hambrientos, desnudos y bañados en sudor, guerrear la batalla del deseo, entrecruzadas las piernas y apresados los cuerpos, empujando contra la pared, clavados ambos sobre jirones de trapos, ataca con fuerza, haz de luna llena, encuéntrame en la guerra.
·96·
路97路
XLVIII·La certeza Hoy es un día mediano, mediano y encogido por la lluvia, por el frio, perdido en un río, desgarrado y perdido, hoy es una mañana mediana, del sol escondido, tras una cortina de nubes grises, hoy es una mañana de luchas pequeñas, atragantadas en el tiempo, luchas que no pasan de la garganta, hoy es una mañana mediana, acabada donde no hay mañana, hoy es un día manchado de tierra, de cuatro pedazos de mi, hoy es un día de silencios, por no decir ya nada, hoy es un día con los ojos cerrados, por no querer ver, que ya vi bastantes certezas, hoy es una mañana venida con el Norte, venida casi de sorpresa, hoy es una mañana de incertidumbres, de fracasos y roces extintos, besos con condón, una mañana de miradas sin ver, hoy es una mañana de Primavera sin Primavera, sin una razón ni dirección, de indiferencias, de conjuntos vacíos, hoy es un día mediano, de necesidades sin respuesta, de llamadas sin cobertura, hoy es una mañana de huidas al pasado, de paradas sin descanso.
·98·
路99路
XLIX·tránsitos Vas adelante, la gorra calada y la vista clavada, en alguna piedra del suelo tras otra, la vista clavada, enfocado al frente, oscureciendo el alrededor, no ver más allá de lo que hay delante, no ver ni a izquierda ni a derecha, con cuidado de no levantar la vista al cielo, con cuidado de no deslumbrar esos ojos, con el cuidado que traías hasta ahora, vas adelante, encogido sobre ti mismo, tan pequeño que apenas eres, tan pequeño que apenas necesitas aire, sentado en una esquina de un portal, trastabillado entre paso y paso, entre nervioso e inquieto, con las orejeras bien prietas, marcando la línea blanca, a veces difusa, a veces tatuada en el asfalto, vas caído y callado, acompañado por lobos, recogiendo pedacitos pequeños, guijarros y otras piezas, y dejarlas en tu bolsillo, para cuando necesites volver a construir, vas delante, abrigado y hueco, bien tapado para que no te vean, sin que te roce la lluvia, acompañado por lobos, de los que te dan calor en noches de Invierno, de los que duermen contigo, velando, guardando, de los que a mordiscos te sacan del sueño, de los que levantan tu mirada, y desgarran cada pedazo de ayer, lobos, se oyen lobos de noche, lobos, escucha los lobos, tienen qué decir...
·100·
路101路
L·La salida sin sujeto ni pasado, sin lazos sin conflictos, huir sin correr, preparado en la línea de salida, clavar los tacos en el asfalto, tres o cuatro golpes contra el suelo, respirar lento, profundo, expulsar los nervios, mirando al frente, buscando la meta, lejana, cercana, carrera corta de media o larga distancia, tres o cuatro golpes contra el suelo, inspirar y espirar, dentro muy dentro, hasta llenar los pulmones, sin anclas en las piernas, enfocando el presente, dando por desterrados los tirones, olvidando contracturas, sin más fin que llegar, cuerpo en tensión, tres o cuatro golpes contra el suelo, inspirar y contener, espirar y sonreir, mirada de soslayo al juez de salida, sonrisa profunda, mirada al frente, sin obstáculos, apretar los dientes, tres o cuatro golpes contra el suelo, sin sujeto ni pasado, sin lazos ni conflictos, preparado que llega el momento, tensión y a la carrera, con el sol de cara, a la carrera...
·102·
路103路
LI·Si callara Si mi boca callara, si no dijera más, si el silencio se llevara cada palabra, si mi boca callara, si los nudos llegaran a paralizar mi lengua, si mi lengua quedara pegada al paladar, en una mueca absurda, en una mueca de rendición, si mi boca no hablara ya más, ni mis labios sonrieran, si mi boca quedara sellada, derretida a fuego, derretida a hielo, agolpándose cada palabra en su interior, haciendo una bola imposible de tragar, si mi boca se sellara, incluso si hablara sin decir, si cada minuto de lucha quedara en el olvido, si mi boca no gritara bien alto, palabras contra el viento, si callara cada reivindicación, si no se quejara y protestara, si mi boca no se levantara contra lo escrito, contra cada barrera, si mi boca se torciera, hacia abajo las comisuras, rendida y apagada, me harté de batallas perdidas antes de tiempo, me harté de no luchar por aquello que creo, si mi boca calla, si deja de luchar, no habrá más que el silencio del cobarde, del que no lo dio todo por lo que cree, me harté de la aceptación, la cabeza gacha, apuntando a mis pies vagos, me harté de la cobardía insana, si mi boca callara...
·104·
路105路
LII·Cuenta polaroids
Cuenta, cuenta cómo fue, cuenta que nos quedamos callados, cuenta que de nada sirven los nombres, de nada los códigos de barras, cuenta que no hay olvido, cuenta que buscamos sin mirar entre líneas, cuenta que entre líneas hay nada, que contigo no existe letra pequeña, cuenta, cuenta que ardemos sin quemarnos, cuenta que miramos a las nubes, que miramos que podemos, cuenta que no olvidamos, cuenta que no caerás, que te sujeto, cuenta que no caeré, que me sujetas, cuenta lo que quieras contar, cuenta que vivimos, cada día del puto calendario, cuenta que vivimos, cuenta que nos contagiamos, sin poner un nombre, nos contagiamos, cuenta lo que yo no te conté,
cuenta que no caerás, que te sujeto, cuenta que no caeré, que me sujetas,
cuenta que no caerás, que te sujeto, cuenta que no caeré, que me sujetas,
cuenta que bailamos, pisando fuerte, saltando a una, cuenta lo cerca que bailamos, cada mañana, cada noche,
cuenta que necesito el aire, cuenta que acaban los miedos, los bosques oscuros, habitados por osos hambrientos, cuenta que cada mañana es única, cuenta que me das el aire, cuenta que te cubro en el frío, cuenta que cuentas momentos, en el álbum de polaroids,
cuenta que sin etiquetas, cuenta que unos pies en un regato, son pedazos de felicidad sin nombres, cuenta...
·106·
路107路
LIII·Viernes que pase ya Llega el puto Viernes, llegan las dudas y el cansancio, la falta de aire en los pulmones, agrietados, pequeños y confundidos, el puto Viernes debió de colarse en mi calendario, llegan las dudas, el qué coño hago aquí, sentado frente a la nada, el qué coño pinto, el por qué no duermo cuando debiera cerrar los ojos y dejarme ir, llega el puto Viernes y las ganas de desaparecer, ser un rastro más, una nube de humo en un cielo demasiado inmenso, llega el puto Viernes y sólo puedo pensar en cerrar, en dar un portazo y arruinar mis apuntes, llegan los miedos y las telarañas, las piernas bloqueadas, el corazón arriba y abajo, como en la puta noria de un Londres oculto, llega el puto Viernes y sólo pienso en huir, en esconderme bajo mis brazos, que cada minuto que dudo es un alfiler en las yemas de los dedos, que cada segundo asustado desvela y duele, llegan la desgana y el hastío, cogidas de la mano, vestidas con trapos de gris y frío, llega el puto Viernes, llegan las ganas de tumbarme sobre mi costado, encogido como un bebé, esperar que pase pronto, llega el puto Viernes, y tengo el ancla echada, para no abandonar mi posición hasta que pase el temporal, se irá, se irá, y todo seguirá como estaba, llega el puto Viernes, y un día lo derrotaré, cuando menos lo espere, acabaré con él...
·108·
路109路
LIV·Terracita y cañas
Mientras, sentado sin mirar, estando, tomando, una caña bien fría, una medianoche rasurada, de noche estrellada sin dueña, de canciones sureñas, sentado sin mirar, absuelto de mis errores, que son tangos pegados, las voces sin rostro, agotadas, agolpadas, golpeando la pared de mi pecho, Sentado sin mirar, atrapado en una silla de alquitrán, de raíces profundas, vergüenzas ocultas, arañas inmensas, agazapadas en huecos vacíos, huecos del tiempo, vacíos de sentido, envueltos en telarañas, sentado sin mirar, llegando, volviendo, tomando tierra lento, con esta sonrisa idiota, de ausencia e indiferencia, letanía lejana, con ese vivir ahora, y escribir para mañana.
·110·
路111路
LV·Todo fluye Se cierran los ojos, retorcido, acurrucado, en una esquina de la cama, se cierran los ojos, el olvido, la caída a un limbo que no existe, nada, el vacío, se cierran los ojos, un colchón de paz fingida, paz oscura, paz de mentira, paz de firmas y tratados, se cierran los ojos, perdida la noche, como quien pierde las llaves, atrapado y desnudo, laberintos desubicados, se cierran los ojos, las palmas de las manos hacia el suelo, el peso en los hombros, traicionadas las fuerzas, te prometo y no prometo, se cierran los ojos, a cámara lenta se cierran, sin llegar a ver, avergonzados ante el reflejo, agachados y erráticos, luego nos vemos,
se cierran los ojos, de mañana será otro día,
se cierran los ojos, desvíos de dirección, despierto sin sentido, dormido en vida, en blanco cansado, esperando al tren, esperando un tren,
se cierran los ojos, de buenas noches, ¿de buena suerte? definitivamente, de buenas noches, se cierran los ojos, y mientras nada cambia, sólo el mundo alrededor, y yo, en una sala, mirando y cerrando, todo fluye, menos yo.
se cierran los ojos, antes una última mirada, se cierran los ojos, antes un pequeño respiro,
·112·
路113路
LVI·La colilla No se puede consentir, una colilla abandonada, húmeda, tan usada, habiendo pasado por boca de viejos verdes, de señoras de labios demasiado rojos y canas en violeta, de jóvenes borrachos a punto de vómito, y niños que recogen del suelo aquello que ven, sólo por aparentar, una colilla desencajada, a medio deshacer, demasiados labios, demasiadas bocas, lenguas que se relamieron sobre ese papel ocre, lenguas de sabores amargos, dulces hasta el asco, lenguas ásperas y desiguales, suaves como la seda, de labios finos y amargados, de los que miran hacia el suelo, de labios gruesos, generosos y fundidos en un beso o dos, no se puede consentir, una colilla a la deriva del tiempo, navegando un charco cualquiera, esperando un rescate que no llega, unos dedos que la vuelvan a sujetar, tan dejada, tirada y mil veces sucia, esperando el siguiente chaparrón, el que le haga saltar a otro charco aún más profundo, que si el rescate no llega al menos pueda hundirse, quedar ahogada y fundida en agua y barro, sin importar las botas de tacón de aguja sobre ella, sin importarle los naúticos de los veraneantes, ni los tenis de esos que quieren seguir siendo jóvenes a sus cincuenta, sin importarle dejar trocitos en el asfalto, con todo por hacer y nada hecho, que sabe que es mejor que quedar siempre a la espera del rescate, morir poco a poco, entre recuerdos de todos esos dedos amarillos, olor a tabaco y perfume, vacío de tabaco, que se lleve el tiempo su tiempo.
·114·
路115路
路116路
Gracias por la compa帽铆a, espero les gustara el paseo antonioaa
路117路