PASTORAL
SIGLO XXI AÑO: 1 No. 12
DICIEMBRE 2008
LA VOZ DE LA IGLESIA EN MONTERREY
Costo de edición $5.00
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MEDITA >
ELIMINACIÓN DE LA VIOLENCIA CONTRA LA MUJER / P4
¿POR QUÉ DEBO DE IR A MISA? / P5
ADVIENTO, PREPAREMOS EL CAMINO... / P9
LA VOZ DEL PASTOR
SEAMOS REFLEJO DE CRISTO
C
ada uno de los meses de este año, que estamos por terminar, ha tenido un especial significado para cada uno de nosotros, y es conveniente que, en el contexto de las celebraciones de Adviento y Navidad, nos demos la oportunidad de reflexionar, de interiorizar y hacer un profundo examen de conciencia. Les invito a que guiemos esta reflexión a la luz de la palabra divina, recordando que somos templos vivos en donde Dios habita. El templo, es el lugar de la presencia y manifestación de Dios. Cristo es el verdadero templo, porque en Él se manifiesta, con toda plenitud, la presencia de Dios; porque Cristo es, al mismo tiempo, hombre, y por tanto, visible, se le puede escuchar, se le puede ver, porque es verdadero hombre y verdadero Dios. Cristo es la presencia misma de Dios en medio de nosotros. Por Él pasa todo el torrente de la salvación, el río de vida y de gracia que nos viene de Dios. Es a Él a quien esperamos en este Adviento, a quien celebramos día a día en la Iglesia, que ha sido establecida por Él, para que por medio de ella, este torrente de vida y salvación siga pasando a favor de todos, siga saneando toda situación de pecado y sembrando la vida por todas partes. Es, en este tiempo de celebración por la llegada de la vida nueva que Cristo nos trae, que surge una pregunta: ¿por qué en un país como el nuestro, mayoritariamente cristiano católico, creyente en Cristo, en lugar de florecer la vida está floreciendo tanta muerte? Los cristianos, hoy más que nunca, debemos ser constructores de vida, estar firmemente anclados en Cristo, estar dispuestos a escucharle y seguir sus pasos, poner por obra todas sus enseñanzas en todas las circunstancia de la vida, no sólo cuando estamos en Misa, sino cuando estamos en casa, cuando vamos por la calle, cuando establecemos un negocio, cuando realizamos nuestro trabajo, cuando nos divertimos, cuando nos desplazamos por cualquier motivo. Queridos hermanos y hermanas, seamos dadores de vida en este mundo tan necesitado de Dios. Que este tiempo de preparación a las fiestas de la Natividad del Señor, nos ayude a redescubrirnos como auténticos discípulos de Dios, fieles discípulos de Jesús, fieles seguidores de sus palabras, imitadores de sus actitudes, para que cada uno de nosotros, que somos la Iglesia, seamos el templo vivo de Dios en medio del mundo. Felices fiestas de Navidad. De corazón les envío mi bendición. + J. Francisco Cardenal Robles Ortega Arzobispo de Monterrey
CONOCE
Pastoral Siglo XXI > p. 2
CONOCE > EDITORIAL CONTENIDO CONOCE
EDITORIAL / p. 2, LA VIRGEN DE GUADALUPE EN NUESTRA HISTORIA / p. 3
COMPROMÉTETE
DÍA INTERNACIONAL DE LA ELIMINACIÓN DE LA VIOLENCIA CONTRA LA MUJER / p. 4 PREGÚNTALE AL SACERDOTE / p. 5 PASTORAL UNIVERSITARIA INVITADA AL ENCUENTRO DE AGENTES JÓVENES DE PASTORAL UNIVERSITARIA DE AMIESIC / p. 6
MEDITA
EDUCAR, ¿EN QUE CONSISTE? / p. 8 ADVIENTO, PREPAREMOS EL CAMINO... / p. 9 FIESTA A SANTISIMA VIRGEN DEL ROBLE / p. 10, p. 11 UN MUNDO DE SORDOS VOLUNTARIOS / p. 12
VIVE
TESTIMONIO DE UN APÓSTOL. / p. 13 NOTICIAS. / p. 14, p. 15, p. 16
DIRECTORIO Director General Emmo. Sr. Francisco Robles Ortega Arzobispo de Monterrey Sub – Director Pbro. Juan José Martínez Segovia Sub - Director adjunto Pbro. Walter Fernando Gómez Olvera Consejo Editorial Lic. Yolanda Ruiz Mtz. Lic. Jorge Rodríguez Tueme Pbro. Juan José Martínez Segovia Pbro. Walter F. Gómez Olvera Pbro. Javier Hernández Raygoza Pbro. Marcos Martínez Mtz. Pbro. Leopoldo García Mtz. Pbro. Rogelio Narváez Martínez Colaboradores Secretariados, Departamentos y Comisiones de la Arquidiócesis. Representantes Parroquiales. Redacción y Revisión Departamento de Comunicación Coordinación Lic. Juan Pablo Vázquez Rodríguez Diseño J&D Mercadotecnia Visual Impreso Imprenta Arquidiocesana de Monterrey Distribución Mensajería y Paquetería Galgo S.A. de C.V. Contabilidad Jasso Silva y Asociados S.C. Directorio Periódico mensual Diciembre del 2008. Editor. Editor responsable: Pbro. Walter Fdo. Gómez Olvera. No. De certificado de Reserva otorgado por el Instituto Nacional de Derecho de Autor: 04-2007072412073100-01. No. de Certificado de lícitud de Título: 13903. No. de Certificado de licitud de Contenido: 11476. Domicilio de la Publicación: Calle Zuazua 1100 Sur, Barrio Antiguo, C.P. 64000, Monterrey N.L. Imprenta: Impresos Eclesiásticos, Dpto. de la Arquidiócesis de Monterrey, Calle Mitla 511 Col. Regina, C.P. 64290, Monterrey, N.L. Distribuidor: Mensajeria y Paquetería Galgo, Calle 16 de Septiembre 413 Ote. Col. Independencia C.P. 64720 Monterrey N.L.
“SER DISCIPULOS ES ASUMIR LA PERSONALIDAD DE CRISTO”
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o es fácil ser discípulo de Jesús. ¿Quién ha dicho eso? Para ser discípulos, se requieren varias características que no son fáciles de conseguir. Que no se entienda que ser discípulo es sólo sentarse en un salón de clases a profundizar en el misterio. Eso sí es fácil. Pero cuidado con caer en esta forma. Así lo hacían los judíos: para ellos era fácil, después de que los papás transmitían las tradiciones a sus hijos, éstos buscaban a uno de los maestros de la Torah y recibían clases de él. Y cuando terminaban sus estudios cada quien escogía a qué se iba a dedicar en la vida. No asumían la personalidad del Maestro de la Ley, ni estos se preocupaban por ello. Esta no es la enseñanza de Jesús. Él no sólo llama a sentarnos en un pupitre a profundizar en su misterio, Él llama para que asumamos su personalidad, a que seamos igual que Él y se preocupa por ello: “Llamó a la gente y a sus discípulos y les dijo: El que quiera venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame” (Mc. 8,34). Este llamado implica entonces asumir ciertas características para ser sus discípulos. a) La Iniciativa del llamado a ser discípulo es de Jesús: “Después subió al monte, llamó a los que Él quiso, y ellos se acercaron a Él. Y designó a doce para que estuvieran con Él y para enviarlos a predicar” (Mc. 3,13-14). Jesús te llama a tí y a mí. Nos llama a todos y espera una respuesta de cada uno. Lo que quiero decir es que la iniciativa es de Él y a nosotros nos corresponde responder. A unos los llama a ser sus discípulos de la Evangelización, pero no todos se van a dedicar a ello. Tenemos el ejemplo del endemoniado de Gerasa (Mc. 5,18-19) que este le pide ser su discípulo y Jesús tajantemente le dice que no. El llamado es de Jesús. Claro que lo envió a otra misión: “Y él se fue, y empezó a proclamar en Decápolis cuán grandes cosas Jesús había hecho por él; y todos se quedaban maravillados (Mc. 5,20). b) Abandono del propio ámbito: casa, familia, estilo de vida. Implica responsabilizarnos porque toda nuestra vida esté centrada en el servicio al llamado que Dios nos hace, incluso de la familia. Ya se que muchos cuestionarían esta afirmación, pero eso mismo pasó en tiempos de Jesús. Él llamaba a dejar a la familia atrás para ser un verdadero discípulo, y se enfrentó al arraigo tan fuerte de los hijos a la familia. La fuerza del pueblo era precisamente la familia y Jesús estaba pidiendo el desarraigo de ella. Claro que lo criticaron. Pero el verdadero discípulo es el que deja todo para seguirlo, sin ninguna preocupación: “No se inquieten, diciendo: “¿Qué comeremos?” o “¿Qué beberemos?” o “¿Qué vestiremos?” Por todas esas cosas se afanan los paganos. El Padre celestial ya sabe que las necesitan” (Mt. 6, 31-32). c) Negación, Peligro, Hostilidad y Persecuciones. El que quiera ser discípulo de Jesús debe primero calcular los costos con serenidad, calma y, ante todo, objetividad: “Porque el que quiera salvar su vida la perderá, pero el que pierda su vida por causa mía, ese la salvará. Pues ¿de qué le sirve a un hombre haber ganado el mundo entero, si él mismo se destruye o se pierde?” (Lc. 9, 23-25). ¿Persecuciones? Siempre las habrá para el verdadero discípulo que tratará de imponer la verdad de Jesús a costa de los que sea, San Pablo lo expresa muy claramente: “Ahora me alegro de sufrir por vosotros, y por mi parte completo en mi carne lo que falta a las tribulaciones de Cristo por su cuerpo, que es la Iglesia”. Que cada uno de nosotros nos cuestionemos de cara a estas características y se cuestione profundamente si la invitación que se nos hace en Aparecida: “...para que todos sean discípulos y misioneros de Jesús”, se cumple en cada uno de nosotros. Pbro. Walter Fdo. Gómez Olvera Director editorial
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Pastoral Siglo XXI > p. 3
La Virgen de Guadalupe
en nuestra historia L o que la mayoría de los católicos conoce sobre la Virgen de Guadalupe es gracias al Nican Mopohua (aquí se narra) atribuido a Antonio Valeriano. Sin embargo, si quisiéramos profundizar en como se fue gestando esta devoción a la Virgen en nuestra historia mexicana, nos encontraríamos con estudios que llenan gruesos volúmenes. Por este motivo, mi pretensión es ofrecerte algunos breves datos históricos para que conozcas un poco mas de la presencia de esta devoción en nuestra historia.
En septiembre de 1556, el provincial franciscano en México censuró de manera contundente al arzobispo Alonso de Montúfar por predicar un sermón en el que elogiaba la devoción a Nuestra Señora de Guadalupe. Sin embargo, el arzobispo comparó la devoción de Nuestra Señora de Guadalupe con la veneración de las imágenes de la Virgen de Sevilla, Zaragoza y Montserrat. Unos 20 años más tarde, Bernardino de Sahagún se opuso a la devoción ya que un antiguo culto prehispánico veneraba en el Tepeyac a Tonantzin, llamada la madre de los dioses, pues en náhualt también se dirigían a la Virgen como Tonantzin. En 1568, el inglés Miles Philips escribió una de las primeras descripciones de la capilla del Tepeyac: “llamada la iglesia de nuestra Señora… cuando cualquier español pasa… entra en ella, y se arrodilla frente a la imagen… a la imagen la llaman en lengua española Nuestra señora de Guadalupe”. Al describir las imágenes milagrosas de la Virgen María en la Ciudad de México, Luis Cisneros escribe en 1621: “La más antigua es la de Guadalupe, que está a una legua de esta Ciudad a la parte de el Norte”. El arzobispo Juan Pérez de la Serna consagró en 1622 un nuevo santuario para reemplazar la capilla erigida por Montúfar. En 1648, Miguel Sánchez presenta la primera narración publicada de las apariciones de la Virgen y del origen milagroso de la imagen. En 1660, el jesuita Mateo de la Cruz estableció la primera aparición de la Virgen el 9 de diciembre de 1531 y la revelación de la imágen a Zumárraga el día 12. En 1663 el cabildo eclesiástico de México dio inicio a una campaña para convencer a la Santa Sede de reconocer el culto de Nuestra Señora de Guadalupe.
En enero de 1666, Francisco de Siles fue a Cuautitlán, lugar del nacimiento de Juan Diego, para indagar lo que recordaban los habitantes más viejos de lo que sus padres y abuelos les contaron de las apariciones. Entre 1695 y 1700 se construyó una nueva iglesia que en proporciones y esplendor rivalizaba con las mejores catedrales de la Nueva España. Debido a una epidemia que llevó a miles a la muerte, en 1737 fue llevada en procesión por las calles y proclamada Patrona de la Ciudad de México, y 9 años después, de todo el reino de la Nueva España. En 1754 el papa Benedicto XIV aprobó el patronato, autorizó la traslación de su fiesta al 12 de diciembre y le concedió misa y oficios propios. Se dice que el pontífice al ver una pintura de la imagen que le presentó el jesuita Juan Francisco López, dijo de México: “no ha hecho otro tanto con las demás naciones”. En 1810, Miguel Hidalgo y Costilla llamó a las masas a rebelarse; como estandarte les entregó una copia de la imagen. Durante el gobierno de Porfirio Díaz (18761911) los obispos pidieron la coronación de la imagen de la Virgen de Guadalupe, y en 1887, papa León XIII autorizó la coronación, pero no se pudo realizar hasta el año 1895. El arzobispo de México la coronó con la autoridad del papa, y el obispo de Querétaro, Rafael Sabás Camacho, propuso que cada diócesis mexicana visitara en peregrinación anual el Tepeyac, acto que se repitió en los Santuarios de todo el país. La revolución mexicana en 1910 desató una ola de anticlericalismo: los obispos fueron expulsados de México y la constitución del 1917 negaba la personalidad jurídica a la iglesia. Los campesinos católicos combatieron al ejército federal y portaban unos pendones con la imagen de la Virgen y la inscripción: “Viva Cristo Rey”. En 1990, el papa Juan Pablo II beatificó a Juan Diego, y nombró Patrona de toda América a la Virgen de Guadalupe.
Pbro. Juan Pedro Alanís Marroquín
CONOCE
Pastoral Siglo XXI > p. 4
CONOCE > SAGRADA ESCRITURA
Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer “Te doy gracias, mujer, ¡por el hecho mismo de ser mujer! Con la intuición propia de tu femineidad enriqueces la comprensión del mundo y contribuyes a la plena verdad de las relaciones humanas.” Juan Pablo II
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n la actualidad, existen grandes avances tecnológicos, científicos, descubrimientos para contrarrestar enfermedades, avances en muchos ámbitos, todo esto para tener una mejor calidad de vida, sin embargo, siguen existiendo grandes males que nos aquejan, sobre todo a los más indefensos o grupos vulnerables. Hoy, uno de estos males que nos aqueja es la violencia a las mujeres. Sabemos que no es un problema nuevo, que tiene origen desde tiempos inmemorables y ninguna región del mundo se escapa de padecerlo. El pasado 25 de noviembre celebramos el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, aprobado por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 17 de diciembre de 1999. La propuesta la realizó la República Dominicana con el apoyo de 60 países más para que se celebrara dicho día. El motivo que llevó a la República Dominicana a solicitar este día fue por el macabro asesinato de las tres hermanas Mirabal, activistas políticas dominicanas, que sucedió el 25 de noviembre de 1960 por orden del dictador dominicano Rafael Leónidas Trujillo. En 1993 la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la Declaración sobre la eliminación de la violencia contra la mujer, en la que se definió la violencia contra la mujer como: todo acto de violencia basado en el género que tiene como resultado posible o real un daño físico, sexual o psicológico, incluidas las amenazas, la coerción o la prohibición arbitraria de la libertad, ya sea que ocurra en la vía pública o en la vía privada. Lamentablemente esta violencia la vemos en muchos hogares. Son distintos y muy variados los orígenes de este problema, ninguno justificado, uno de ellos es la idea equivocada que el hombre es superior a la mujer, por lo tanto se cree que ella está a merced del hombre, quitándole su libertad, abusando de ella y violentándola. El catecismo de la Iglesia Católica en su número 1934 menciona: “Creados a imagen del Dios único y dotados de una misma alma racional, todos los hombres poseen una misma naturaleza y un mismo origen. Rescatados por el sacrificio de Cristo, todos son llamados a participar en la misma bienaventuranza divina: todos gozan por tanto de una misma dignidad”. Y el número 1935 dice: “La igualdad entre los hombres se deriva esencialmente de su dignidad personal y de los derechos que dimanan de ella.” Hay que superar y eliminar, como contraria al plan de Dios, toda forma de discriminación en los derechos fundamentales de la persona, ya sea social o cultural, por motivos de sexo, raza, color, condición social, lengua o religión. (GS 29,2). Dicen algunos psicólogos que “la agresividad denota inseguridad”, algunos hombres abusan y maltratan a la mujer porque carecen de seguridad en su persona y para sentirse superiores a la mujer le gritan, la maltratan, la humillan e incluso la golpean. Un simple ejemplo cuando la novia camina por la calle con su novio y apenas volta la mirada y ve a un muchacho e inmediatamente el novio le dice: “te gusto” “vete con Él” “ándale” “andas de más” y muchas cosas más. Cuando el ser humano reconoce su dignidad como persona y sobre todo como hijo de Dios, podrá descubrir su gran valor, superar el sentimiento de inferioridad, se respetará a sí mismo y respetará a los demás y no solo eso, sino que buscara brindarle lo mejor a su prójimo. Tenemos una tarea importante: redescubrir la dignidad de cada persona, en especial de la mujer, la mujer madre, hija, hermana, esposa y amiga, respetarla y amarla para poder tener mejores relaciones humanas, como auténticos hijos de Dios y tener una sociedad más justa, donde se erradique la violencia y se reconozca la importante vocación de la mujer. Juan Pablo Vázquez Rodríguez Coordinador Pastoral Siglo XXI
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Pastoral Siglo XXI > p. 5
PREGÚNTALE AL SACERDOTE
¿POR QUÉ DEBO DE IR A MISA?
S
iguiendo con la respuesta a la pregunta de la edición anterior, ¿Por qué debo ir a Misa?, ahora publicamos la segunda parte.
Excusas comunes para no ir a Misa
Pereza: “Prefiero quedarme durmiendo”. En realidad los motivos que siguen son sólo excusas para cubrir este primero. No parece que sea un motivo muy racional, meritorio o valioso. No tengo ganas/No me nace: ¿Desde cuándo las ganas son ley que hay que obedecer? ¿Es que las ganas son más importantes que la voluntad de Dios? Además a Misa no se va porque nos guste, sino para agradar a Dios. Se va a Misa a honrar a Dios y no a honrarse a sí mismo. Me aburro: La acusación más frecuente contra la Misa es que es aburrida. Refleja bastante superficialidad, ya que a Misa no vamos para divertirnos… Y es un problema personal, en cuanto que no parece que Dios sea aburrido -es la perfección absoluta-. Además si tanta gente va a Misa con gusto, algunos incluso todos los días… será que algo le ven. Es siempre lo mismo: Si se tratara de una obra de teatro o de una película, estaría absolutamente de acuerdo. Pero no es una representación teatral… Es algo vivo, que pasa ahora. No se es un espectador. Se es partícipe. Desinterés: Las cosas de Dios no me interesan. Si Dios le resbala, está en problemas. Habrá que ver cómo solucionar la falta de apetencia de lo divino. No tengo tiempo: No parece que lo que le pide Dios (1 de las 168 horas de la semana) sea una pretensión excesiva. En concreto, quien nos ha creado, nos mantiene en el ser y nos da lo que nos queda de vida. Otros planes mejores: No parece que a Dios le interese competir con el fútbol, hockey, cine… No se olvide que el primer mandamiento es “amar a Dios sobre todas las cosas”… Si tienes otros planes que te importan más que Dios… quizá el problema más que en el tercer mandamiento está antes, en el primero… Tengo dudas de fe: La fe es un don de Dios, el cual hay que pedirlo. Alejarse de Dios dejando de ir a Misa, no parece el mejor método para resolver dudas. La frecuencia de sacramentos -confesión y comunión- es la más efectiva manera de aumentar la fe. Estoy peleado con Dios: “Hubo algo que pasó en mi vida (la muerte de un ser muy querido, un fracaso muy doloroso, una enfermedad… o cualquier otra tragedia) que me hizo enojar con Dios: si Él me hace esto… ¿por qué yo voy a ir a Misa? Es la manera de mostrarle a Dios mi disconformidad con la forma de tratarme”. Hay quienes dejan de ir a Misa como una manera de vengarse de Dios. Pero, en los momentos de dolor ¿no será mejor refugiarnos en Dios y buscar su fortaleza más que reaccionar como un chiquito caprichoso de tres años? “Hay gente que va y después se porta mal”: “Yo no quiero ser como ellos”. “Además, hay otros que no van, y son buenos”. Es evidente que ir a Misa sólo no basta. Pero, no se puede mezclar la física nuclear con el dulce de leche, ya que las dos cosas no tienen nada que ver. No me he confesado y entonces no puedo comulgar: No comulgar no es pecado; no ir a Misa, sí. Además el problema se solucionaría bastante fácilmente con una buena confesión… Llevarle la contraria a mis padres: Ofender a Dios para hacer sufrir a tus padres no parece una actitud muy inteligente… El cura me cae mal: No se va a Misa para darle gusto al padre, ni para hacerle un favor. El no gana ni pierde nada con tu asistencia o ausencia. El que gana o pierde, eres tú. Además… estoy seguro de que la ciudad en que vives es lo suficientemente grande como para que puedas encontrar alguno que te caiga más simpático...
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Pastoral Siglo XXI > p. 6
Cómo aprovecha la Misa
1.- Ir a Misa. Nunca nadie ha conseguido valorar la Misa a base de no ir. 2.- Tratar de vivir la Misa. Es decir, dejar de estar como una estatua y comenzar a estar atento, responder, rezar, cantar, evitar las distracciones, etc. Es decir que “gozar” la Misa depende más de ti que de la Misa. 3.- Estudiar. No se ha inventado otro sistema para aprender lo que uno no sabe. Para gozar la Misa hay que entenderla, para entenderla hay que saber qué es. Hay muchísimos libros y folletos… los encontrarás en cualquier librería. 4.- Leer y meditar los textos de la Liturgia. Tiene una riqueza inagotable, de manera que nadie que medite las partes y oraciones de la Misa puede aburrirse. Es absolutamente imposible. No se encuentra un límite, de manera que siempre se les puede sacar nuevos sentidos, matices, dimensiones, etc. 5.- Prepararse. Hay oraciones lindísimas para preparar el corazón para tan importante encuentro con Dios. Este artículo, dividido en dos partes, es una respuesta para aquellos que desean encontrar el sentido de la Santa Misa, y un estímulo para quienes la Eucaristía es el centro de su vida espiritual. (Extractos del documento escrito por el Pbro. Dr. Eduardo Volpacchio, sobre la importancia de la Misa en la vida del cristiano).
INTENCIONES DEL PAPA
BENEDICTO XVI General: Para que, frente a la creciente expansión de la cultura de la violencia y de la muerte, la Iglesia, por medio de sus actividades apostólicas y misioneras, promueva con valentía la cultura de la vida. Misional: Para que los cristianos, especialmente en los Países de misión, por medio de gestos concretos de fraternidad, muestren que el Niño nacido en la gruta de Belén es la luminosa esperanza del mundo.
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Pastoral Siglo XXI > p. 7
La Pastoral Universitaria invitada al XV Encuentro de Agentes Jóvenes de Pastoral Universitaria de AMIESIC.
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a Asociación Mexicana de Instituciones de Estudios Superiores de Inspiración Cristiana (AMIESIC) cuyo objetivo consiste en acordar lineamientos de acción pastoral en universidades de inspiración cristiana, invitó al Departamento de Pastoral Universitaria de nuestra Arquidiócesis a participar en esta edición de encuentros universitarios juveniles organizado en esta ocasión por la Universidad Intercontinental (UIC) y celebrado en Rancho Abajo en el Cerro del Ajusco en la Ciudad de México, D.F., los días 24, 25 y 26 de Octubre. A este encuentro participaron 19 universidades inscritas a la asociación (Universidad Intercontinental, Universidad La Salle, Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla, Universidad de Monterrey, Universidad Motolinía del Pedregal, Universidad De La Salle Bajío, Universidad Anahuac Norte, Universidad Cristóbal Colón, Universidad Marista de Querétaro, Universidad Marista de Mérida, Universidad del Valle de Atemajac, Universidad Vasco de Quiroga, entre otras), 86 jóvenes universitarios junto con sus coordinadores de áreas pastorales. Junto con su servidor, coordinador de nuestro departamento participaron tres jóvenes de la Universidad Autónoma de Nuevo León, agentes líderes del Centro Universitario de la Parroquia del Espíritu Santo en San Nicolás de los Garza, lo cual causó una impresión sumamente impactante el hecho de que a los esfuerzos de AMIESIC se sumara la experiencia del diálogo de la Iglesia con la universidad pública. El encuentro se centró en la reflexión sobre la misión de los universitarios no solo en las experiencias de Semana Santa y apostolados en campo misión, sino sobretodo en la misión permanente sobre la realidad actual de nuestro país respondiendo con ello a la Misión Continental. El Padre Arturo de la Torre Guerrero, Misionero de Guadalupe y Coordinador de la Pastoral Universitaria de la UIC exhortó a que la Misión es inspiración de la Trinidad y que en la acción pastoral se vislumbra la presencia perenne de Dios en la Trinidad de personas, una presencia que transforma. Luego, tuve la oportunidad como ponente invitado de hablar sobre el papel y misión de la Iglesia en la vida del mundo universitario, en especial en la universidad pública. Compartí el método pastoral utilizado en nuestra Arquidiócesis destacando la forma dialogante de evangelizar a la UANL a través de nuestros Centros de Pastoral Universitaria y a través de la presencia informal en el campus, resaltando así que el Evangelio es una presencia permanente en el tiempo y en el espacio dando pie al acontecer de Dios en la historia universitaria. Así mismo se destacó la participación de la Universidad de Monterrey (UDEM) afiliada a la AMIESIC, significando también la presencia del trabajo evangelizador de agentes laicos en nuestra Arquidiócesis dentro de la universidad católica. El encuentro en sí fue una experiencia de comunión donde la algarabía en la fe fue un factor denominador en todo el fin de semana, y a su vez, el intercambio de experiencias y proyectos iluminó la mente y el espíritu para seguir remando mar adentro en el vasto mundo de la universidad en nuestra Arquidiócesis.
www.pastoraluniversitariamty.org Pbro. Julio Cesar Chapa Martell Coordinador Pastoral Universitaria
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Pastoral Siglo XXI > p. 8
EDUCAR, ¿EN QUÉ CONSISTE?
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as ideas transforman el mundo, pero es necesario gusta. Dejarán de salir con tal chica, porque no cae bien tener valentía para ponerlas en práctica. No basta a sus padres... Y así en otras decisiones vitales. que los educadores sepan lo que ha de hacerse si no En la misma línea de conducta podemos encontrar se comprometen en el servicio al educando. celosos educadores que, con la mejor intención del I. Como Educadores necesitamos: - Saber lo que mundo, pretenden que por los mismos criterios integren pretendemos: claridad de objetivos y fines. - Conocer al en tales grupos o aquellos compromisos. educando: en su desarrollo y en su mundo. - Conocernos Se olvidan, sin duda, de una verdad fundamental en a nosotros mismos: motivaciones, habilidades. educación: que educar no es imponer nada a nadie, sino II. Educamos en relación interpersonal: influjo sobre el ayudar a ser, que el principal agente de la educación es el mismo muchacho; que el educador no es más que un niño. FAMILIA - ESCUELA – SOCIEDAD. medio para que el niño se eduque. III. Buscamos los medios más idóneos: morales e instrumentales. Todo el mundo parece entender en qué La educación es un proceso interno (intrínseco, dicen los consiste educar, pero lo cierto es, que en pocas actividades filósofos) que nadie puede asumir por otro. El objetivo humanas se han acumulado tantas contradicciones como de la educación es que el individuo alcance su felicidad en la realización plena de su vocación. Pero, como dice en ella. G. Marcel, «mi vocación soy yo». La educación es la Las inclinaciones naturales, el aprendizaje y la razón son realización de mi vocación de hombre, y ésta no consiste los instrumentos que forjan al hombre, según explicaba tanto en hacer cosas como en hacerse a sí mismo. Es el el viejo Aristóteles. En efecto, los instintos constituyen muchacho el que se hace, se perfecciona. el acicate de la naturaleza para la actividad del bruto irracional. En ocasiones, también el amaestramiento Educarse es, en definitiva, aprender la irremplazable puede dar cuenta de su conducta. Pero al hombre no profesión de hombre. Podemos afirmar que nadie educa hay tendencia espontánea ni aprendizaje adquirido que a nadie, se educa uno a sí mismo. Puesto que cada uno te diga totalmente lo que ha de hacer; no sirven para es dueño de su propia existencia, la única tarea que dar completa razón de su comportamiento, porque lo corresponde al educando no puede ser más que ésta: ser él mismo. propio del hombre es orientar su vida por la razón. Así lo han entendido los más distinguidos educadores. Como Frobel, que nos dice: «La educación no es sino la vida o el medio que conduce al hombre, ser inteligente, racional y consciente a ejercitar, desarrollar y manifestar los elementos de vida que posee por sí propio.» No obstante, hay autores que pretenden explicar la conducta del hombre por las mismas pautas de conducta qué posee el animal: “Denme una docena de niños sanos y bien formados y el entorno que yo determine para educarles, y me comprometo a escoger uno de ellos al azar y entrenarse para llegar a ser especialista del tipo que sea: médico, abogado, artista, hombre de negocios y, sí hasta mendigo o ladrón”. Así opina Watson, el padre del conductismo. Sin duda que podría lograr su propósito; pero un hombre así fabricado, ¿sería un hombre o más bien un animal amaestrado? llegaría a ser lo que el experimentador determinara, pero no lo sería por sí mismo, pues sería una hechura del otro. Constituye una tentación permanente de los educadores pretender que el, niño sea imagen y semejanza suya. Muchos padres proyectan sus propios deseos en la educación de los hijos: «No quiero que les falte yo lo que yo no tuve. Que estudien lo que yo no pude estudiar. Que sean lo que yo no logré ser...» De este modo van propiciando que el muchacho obre sólo por gusto a sus padres, contradiciendo sus propios deseos e inclinaciones. Y cuando tengan que elegir carrera, elegirán la que quieren sus padres y no la que a ellos les
Frases célebres para la reflexión del educador: «El principio de la educación es predicar con el ejemplo» (Turgot). «La educación es el desarrollo en el hombre de toda la perfección de que su naturaleza es capaz» (Kant). «No comprimas con mucha fuerza y rigor la mano de un niño tierno» (Focílides). «La mayor parte de las gentes confunde la educación con la instrucción» (Severo Catalina). «La educación es un seguro para la vida y un pasaporte para la eternidad» (Aparisi y Guijarro). «No hay malas hierbas sin hombres malos, sólo hay malos cultivadores» (Víctor Hugo). «Edificar la inteligencia es ampliar el horizonte de sus deseos y necesidades» (J. R. Lowell). Por Bernabé Tierno y Antonio Escaja Tomado de “Educación en Valores”
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Pastoral Siglo XXI > p. 9
ADVIENTO,
PREPAREMOS EL CAMINO…
E
l concepto “tiempo”loentendemoscomoladuración de determinado acontecimiento, separación de las cosas sujetas a cambio, como el periodo que transcurre entre determinados momentos, o como la acción de ordenar los sucesos en secuencias, estableciendo un pasado, un presente y un futuro. Dentro de esos espacios podemos ubicar acontecimientos históricos que van marcado nuestro caminar como miembros de una sociedad y que participamos de ellos como un mero recuerdo, por otra parte también ubicamos en el tiempo otro tipo de acontecimientos, también históricos, en los que Dios ha manifestado su poder y su amor para con sus hijos, momentos que no solo recordamos y celebramos como cualquier hecho, sino que como acontecimientos salvíficos, para nada ajenos a cada uno de nosotros, son parte de nuestra historia personal y comunitaria de salvación. R Por tal motivo es importante conocer la diferencia entre el tiempo natural, del cual todos los seres humanos participamos, tempo que se cierra sobre sí mismo: acontecimientos, fiestas, momentos que se viven y que se recuerdan, pero que hasta cierto punto atan y esclavizan al hombre. Por otra parte está presente el tiempo bíblico, tan real, y que es como una luz proyectada hacia el futuro, palabra dinámica en donde el ayer se hace hoy y se dirige hacia el mañana; en este tiempo bíblico la liturgia toma su participación, actualizando el tiempo bíblico en nuestras vidas, liberando al hombre y encaminándolo hacia el encuentro definitivo con el Señor. Por lo tanto no podemos decir que la historia salvífica está totalmente hecha, ni está acabada. Se va dando día a día, así, nuestro caminar contemplando los acontecimientos salvíficos año tras año no limita a dicha acción, la contemplación; partamos, si, de los hechos históricos salvíficos pero que estos con nuestra disposición nos lleven a través de la vivencia plena de la fe a su actualización en nuestras vidas, por lo tanto, insisto, no podemos hablar de una conclusión o fin en los misterios de fe.
De esta manera, la liturgia en cada uno de los ciclos, aparentemente repetitivos, nos da la oportunidad de caminar no en terreno plano y rutinario, sino caminar como hacia la cima de una gran montaña, en ocasiones con obstáculos y dificultades, pero con grandes enseñanzas y experiencias, en determinados acontecimientos que se actualizan y que permiten el fortalecimiento de nuestra fe y aumentan la esperanza para continuar hacia la cima. En estos días concluimos un tiempo y un ciclo en la liturgia; y con el tiempo del adviento recibimos un nuevo tiempo y año litúrgico, momento privilegiado para disponer nuestro espíritu al misterio de la Encarnación del Hijo de Dios. Identificamos el adviento en nuestras comunidades posiblemente por el aspecto externo ya que nuestros templos se revisten de color morado, la estructura cambia en cuanto a sus partes, las oraciones, los cantos, las mismas lecturas, en sí elementos externos que nos invitan a interiorizar con actitudes de vigilancia, preparación y espera, principalmente a través del testimonio de dos personajes que sobresalen en los Evangelios: San Juan Bautista y la Santísima Virgen, el primero prepara nuestras almas para la llegada del Salvador, así como en su momento preparó con su predicación a la comunidad mostrando el camino al Señor que venía; y la Virgen María, que es la personificación misma del adviento, María nos introduce en el misterio de la Navidad, es el receptáculo del encuentro maravilloso entre el cielo y la tierra; el Espíritu Santo descansó sobre ella y su seno se hizo fecundo. Retomando el sentido de trascendencia de nuestra fe, tenemos que ser consientes de que el adviento no solo nos prepara para el misterio de la Encarnación, sino que también nos prepara para la Parusía, es decir, la manifestación gloriosa del Señor al fin de los tiempos. El año cristiano se abre y se cierra con la perspectiva de la Parusía.
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En cuanto a la estructura del adviento encontramos un esquema en cuatro semanas, en donde la primera de las semanas está centrada en la venida del Señor al final de los tiempos, la “parusía”. La liturgia nos invita a estar en vela, manteniendo una especial actitud de conversión; la segunda semana nos invita, por medio del Bautista a “preparar los caminos del Señor”; esto es, a mantener una actitud de permanente conversión. Jesús sigue llamándonos, pues la conversión es un camino que se recorre durante toda la vida; la tercera semana preanuncia ya la alegría mesiánica, pues ya está cada vez más cerca el día de la venida del Señor; y finalmente, la cuarta semana ya nos habla del advenimiento del Hijo de Dios al mundo. María es figura, central, y su espera es modelo estímulo de nuestra espera. Así mismo, las lecturas del Antiguo Testamento son profecías sobre el Mesías y el tiempo mesiánico, tomadas principalmente del libro de Isaías.
Las lecturas del apóstol contienen exhortaciones y amonestaciones conformes a las diversas características de este tiempo. Para concluir invito a los lectores a que preparemos juntos el espíritu para la celebración del misterio de la Encarnación del Hijo de Dios, caminando en oración, ofreciendo la eucaristía, alimentándonos de la palabra, viviendo y compartiendo la fe. Pidamos a María Santísima, se nuestra guía para hacer de este tempo de adviento y el año litúrgico que iniciamos un verdadero camino para nuestra salvación y de testimonio para nuestros hermanos.
Pbro. Raúl Saucedo Vicario en San Bernabé Apostol
FIESTA A SANTISIMA VIRGEN DEL ROBLE 18 DE DICIEMBRE DEL 2008
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n año más celebramos la fiesta de nuestra Señora Del Roble patrona principal de nuestra Arquidiócesis de Monterrey.
R Nos llena de gran alegría la llegada del mes de Diciembre por el gran acontecimiento de la Navidad, el nacimiento de Jesús en Belén, pero ¿Que seria de el sin la cooperación de su santísima madre la Virgen María? El mes de Diciembre es un mes muy mariano ya que durante el mismo celebramos a la Virgen María bajo estas tres avocaciones: • 8 de diciembre la Inmaculada Concepción de María. • 12 de Diciembre fiesta de la Virgen de Guadalupe, momento en que todos los mexicanos volvemos nuestra amorosa mirada a tan querida Madre, especialmente en estos tiempos tan difíciles por los que atraviesa el país en su entorno social, político, económico y aun religioso. En el que una buena puerta de nuestros hermanos se encuentran muy lastimados por tanta violencia, crimen etc. etc. Pero también nuestra mirada es de una gran fe y esperanza a nuestra Madre querida por que sabemos que ella esta siempre atenta para apoyarnos en cada una de nuestras necesidades. • Nuestra tercera fiesta el 18 de Diciembre, en la que quizá para la mayor parte de los regiomontanos pasa desapercibida. Entre otros motivos por estar tan cercanas las fiestas navideñas, además todo el comercio nos tiene distraídos y aturdidos por las compras y posadas para esta celebración. Pero hoy mas que nunca debemos darle la importancia que encierra, ya que como lo hemos enunciado al principio de este tema es la fiesta de la patrona principal de la Arquidiócesis.
MEDITA
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MEDITA > MARÍA
La Virgen del Roble como la llaman comúnmente nuestro pueblo y según no lo narra la historia nos a acompañado desde antes de la fundación de esta gran metrópoli. Ya por el año de 1596 se nos habla del gran fervor que el pueblo regiomontano le manifestaba. Desde estas fechas hasta nuestros días esta celebración a nuestra patrona principal a tenido muchas luces y algunas sombras, con el correr de los siglos. A habido momentos donde su devoción parece extinguirse. Pero no por eso nuestra Madre Santísima del Roble ha dejado de estar cerca de sus hijos que tanto ama. Quiero hacer referencia especial a los años de 1950 a 1960 en que su devoción llego a su máximo esplendor, cuando nuestro muy insigne Arzobispo de feliz memoria Don. Alfonso Espino y Silva, su presbiterio, entre ellos el padre Fidencio Padilla de feliz memoria se dieron a la tarea de reedificar casi por completo la Basílica tan hermosa y majestuosa que hoy tenemos. Por otra parte seria una falta de respeto muy grande a nuestro querido pueblo no mencionarlo en esta tarea de reconstrucción. Pero no solo fue reconstruida materialmente sino también espiritualmente, en esta época se logro despertar un gran fervor a la madre de Dios. Después en los años siguientes nuevamente vino un pequeño vacío en cuanto a su devoción. En esta última década nuestros pastores guiados por el Espíritu Divino vuelven a estimularnos para que sigamos dándole a la Virgen Santísima del Roble el lugar que le pertenece en nuestra iglesia particular de Monterrey como “PATRONA PRINCIPAL DE ESTA ARQUIDIOCESIS”. Aprovecho también la oportunidad para hacer una fraterna invitación a mis hermanos sacerdotes, religiosos, religiosas, seminaristas, laicos comprometidos para que el amor a la Virgen del Roble y su devoción siga creciendo en nosotros y en todo el pueblo regiomontano especialmente promoviéndola con las nuevas generaciones a quienes por desgracia la desconocen. De parte del equipo de Sacerdotes que servimos al pueblo de Dios en esta Basílica les prometemos orar al Señor y a la Virgen del Roble para que todos alcancen sus divinas gracias. Invitamos a todos los fieles a celebrar juntos la fiesta de nuestra Patrona este próximo 18 de Diciembre a las 7:00 PM. donde el eminentísimo Sr. Cardenal Don. Francisco Robles Ortega con su presbiterio presidirá la eucaristía y además nos honrará con su presencia todo el Seminario de Monterrey. Que la Virgen Santísima del Roble los cubra con su Manto.
Pbro. Miguel Guzmán Parroco y Rector de la Basílica Nuestra Señora del Roble
MEDITA MEDITA > MARÍA
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Un mundo de sordos voluntarios O í contar una vez que en una reunión de alemanes uno habla y los demás escuchan; en una inglesa, todos escuchan y ninguno habla, y en una española, todos hablan y ninguno escucha. ¿Es exacto? El Papa Juan Pablo II, al menos cuando estuvo por nuestras tierras, pronto se dio cuenta de que aplaudíamos mucho sus discursos, pero apenas los oíamos “Los mexicanos –dijo- están muy prontos para hablar, más no para escuchar” Y se reía, pero estaba diciendo una verdad del tamaño de un templo.
Por eso no escuchamos. Si tuviéramos un espejo para vernos por el interior mientras conversamos con alguien, percibiríamos que incluso en los momentos en que la otra persona habla y nosotros aparentamos escuchar, en rigor no estamos oyéndole, estamos preparando la frase con la que le responderemos a continuación cuando él termine. Sí, hace falta tener muy poco egoísmo y mucha caridad para escuchar bien. Es necesario partir del supuesto de que lo que vamos a escuchar es más importante e interesante de lo que nosotros podríamos decir. Reconocer que alguien tiene cosas que enseñarnos.
Reconozcámoslo: el hombre de hoy no escucha. O, para ser exactos, no escucha más que la televisión, es lo único Habrá que añadir que “escuchar” es tan importante que entre nosotros habla sin que nadie le interrumpa. como vestir al desnudo o dar de comer al hambriento. “Oír con paciencia” es mayor caridad que dar. ¿Tal vez porque nadie nos ha enseñado a Por todo ello, la escuchar? ¿Quizá gran paradoja de porque el arte de oír es nuestro tiempo es, mucho más difícil que que mientras los el de hablar? “tenemos científicos dicen dos oídos y una sola que vamos hacia boca porque oír es el “una civilización doble de necesario y auricular”, son cada dos veces más difícil vez más los que que hablar” Pero, se quejan de que curiosamente, esa es nadie les escucha. una ciencia que nadie Curiosamente, los enseña en las escuelas, jóvenes van hasta ni en los hogares. por las calles con los auriculares puestos, Porque estoy hablando al mismo tiempo que de “escuchar”, y no de son absolutamente oír. Para oír basta con incapaces de escuchar no estar sordo. Para durante diez minutos escuchar hacen falta a sus abuelos. Y lo muchas otras cosas: tener el alma despierta; abrirla primero que todos hacemos al entrar en nuestras casas es para recibir al que a través de sus palabras entre en si; encender la radio o el televisor, porque no soportamos la ponerte en la misma longitud de onda que el que está soledad acústica en las casas y, a la vez, cada vez es menos conversando con nosotros; olvidarnos por un momento frecuente el diálogo hombre-mujer o padres-hijos. de nosotros mismos y de nuestros propios pensamientos Oír es barato, escuchar costoso. Para oír basta el tiempo, para preocuparnos por la persona y los pensamientos del para escuchar el corazón. prójimo. ¡Todo un arte! ¡Todo un apasionado ejercicio de la caridad! Pbro. Benito Ramírez Márquez Párroco em San Pedro Apóstol, Allende, N.L. padrebenitorm@hotmail.com
Respondiendo al plan de PASTORAL ORGÁNICA 2006-2010 “Las estructuras pastorales utilizan los medios de comunicación social y la tecnología moderna parallegar a los agentes y destinatarios de la pastoral” (L.A.1/Meta2/Estr. “e”)
Queremos ver tus sugerencias, escríbenos a : comunicacion@arquinetmty.com
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VIVE > TESTIMONIO DE UN APÓSTOL
Pastoral Siglo XXI > p. 13
MONS. JUAN JOSE HINOJOSA VELA
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n sacerdote entregado en cuerpo y alma a su vocación, hombre espiritual, amigo humilde y servidor del pueblo de Dios, especialmente de los sencillos y pobres, es hablar de Mons. Juan José Hinojosa. Ordenado sacerdote el 29 de junio de 1965, su primera experiencia pastoral fue como Vicario Parroquial en la Catedral de Monterrey durante tres años. Posteriormente le fue confiada una misión muy importante, la formación de los futuros pastores del pueblo de Dios, donde durante veinte seis años sirvió a la comunidad del Seminario de Monterrey con alegría y desempeñando distintos cargos especialmente como maestro y director espiritual. A pesar de vivir su ministerio durante mucho tiempo en el Seminario, esto no le mantuvo alejado del pueblo de Dios, mucha gente en toda nuestra querida Arquidiócesis le conoce y recuerda por las misiones organizadas por el Seminario y a las cuales asistía Mons. Juan José acompañando a los Seminaristas. Muy conciente de la reflexión de San Jerónimo: “Desconocer la Escritura es desconocer a Cristo”, y viendo la realidad de las distintas parroquias y comunidades sedientos de la palabra de Dios, le llevó a la iniciativa de fundar equipos de meditación bíblica hace ya más de 25 años, estos círculos de meditación bíblica, muchos de ellos en parejas, siguen reflexionando sobre la palabra de Dios, asesorados por Mons. Juan José que se organiza muy bien para poder hacer rendir su tiempo al máximo visitarlos y cumplir con sus demás obligaciones. Siempre dispuesto por servir al necesitado, visitar a los enfermos, a la viuda, a elevar oraciones por sus hermanos. Mons. Juan José se ha distinguido por su amor a la Santísima Virgen, expresado por sus devociones, especialmente la del rezo del rosario. En el año de 1994 fue nombrado Párroco de la comunidad de Jesús el Buen Pastor, a la cual sirvió durante 6 años. Ha desempeñado otros cargos como asistente de la Acción Católica Juvenil y asesor de Cáritas Diocesana. Su labor Pastoral le llevó a ser nombrado Monseñor, es decir, Prelado de Honor de Su Santidad Juan Pablo II, en febrero de 1996. Ha sabido ser amigo y su vida es una gran lección del amor, que ha vivido especialmente con los seminaristas, los consagrados, sacerdotes y religiosas, sirviéndoles a muchos de ellos en la dirección espiritual y largas charlas con una sola persona o con pequeños grupos. Actualmente es Párroco del Santuario y Parroquia de Nuestra Señora de Fátima y Vicario Episcopal de la zona V. Sigue sirviendo con fe, esperanza y una energía inquebrantable que sorprende a muchos. Mons. Juan José Hinojosa Vela, un testimonio vivo de ser Discípulo y Misionero de Jesucristo. Pastoral Siglo XXI
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TOMA POSESIÓN MONS. GUSTAVO RODRÍGUEZ VEGA DE LA DIÓCESIS DE NUEVO LAREDO
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ONTERREY N.L., (PASTORAL SIGLO XXI).- En torno a una comunidad católica llena de fe y esperanza, Mons. Gustavo Rodríguez Vega recibió la Diócesis de Nuevo Laredo. Sus Primeras Palabras a su feligresía fueron al cruzar la frontera que divide a las Diócesis de Monterrey y Nuevo Laredo, en la comunidad de Sabinas. “He querido hacer un alto al ingresar al territorio de mi nueva diócesis, no sólo porque es la primera población, parroquia y decanato que me sale físicamente al encuentro, sino porque llego a la casa de María, mi Madre y nuestra Madre”. Continuando con su breve mensaje a los fieles de sabinas señalo: “En esta parroquia de Guadalupe, siendo yo seminarista, en los años setenta, cuando todavía era aquí territorio de la arquidiócesis de Monterrey, me tocó la bendición de realizar una misión, sin poder sospechar en aquel tiempo que un día habría de volver a ella como su Obispo, revestido de la gracia del Buen Pastor para pastorear esta porción de su único rebaño.” La eucaristía fue presidida por Emmo. Sr. Cardenal Don Francisco Robles Ortega, Arzobispo Metropolitano de Monterrey, hasta el momento en que se leyó públicamente la Bula Papal y que el Sr. Nuncio Apostólico llevara A Mons. Gustavo a que tomara la cátedra para que se sentara en ella, y después recibir el báculo del Sr. Cardenal y llevarse a cabo así la posesión de su nueva encomienda episcopal. En este momento tan importante para la Iglesia de Nuevo Laredo estuvieron presentes 22 obispos, cerca de 400 sacerdotes y una multitudinaria cantidad de religiosas y feligreses. Durante la Homilía, el Nuncio Apostólico Don Cristopher Pierre invito a Mons. Gustavo a mantenerse siempre cercano a su Iglesia y sobre todo a Dios fuente de amor y seguir el ejemplo del Buen Pastor que da la vida pos sus ovejas. En su primera alocución, posterior a la comunión, el Obispo de Nuevo Laredo señalo: “Queriendo cumplir la misión de Jesús en esta Iglesia de Nuevo Laredo, he mantenido bajo mi escudo episcopal este lema: “evangelizare pauperibus”, “evangelizar a los pobres”.” Saludó a los distintos miembros de la comunidad de Nuevo Laredo, entre ellos a los laicos. “Me dirijo a todos los laicos y laicas, para invitarlos a ser hombres y mujeres de Iglesia en el corazón del mundo, y hombres y mujeres del mundo en el corazón de la Iglesia.” Agradeció a la Iglesia de Monterrey que le vio nacer y crecer: “cuanto tengo y cuanto soy, después de Dios, se los debo a ustedes: mi querida familia que me dio la vida y me ayudó a crecer, y que siempre han estado y estarán conmigo; mi Seminario en el que me formé y en el que desempeñe tantos años el ministerio sacerdotal; mi Presbiterio del que salí y con el que siempre estaré en deuda por todo lo que ustedes me dieron; mi Iglesia de Monterrey donde recibí toda la gracia y los carismas y ministerios que el Señor me ha querido otorgar; mis hermanos Obispos, con el Sr. Cardenal a la cabeza, con los que, junto, con mis demás hermanos Obispos de esta provincia Eclesiástica, me comprometo a seguir en comunión. Gracias, Iglesia de Monterrey por formarme y por enviarme a esta tierra a la que ahora llego, por disposición divina. ¡Dios te bendiga, Monterrey!” Finalmente señalo: “Unámonos todos, como discípulos y misioneros de nuestro Señor Jesucristo, para que Nuevo Laredo, con todos los pueblos que la conforman, tenga vida en Él. Iglesia de Nuevo Laredo Duc in altum, ¡Dios te bendiga! Amén.”
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CELEBRA SEMINARIO DE MONTERREY FIESTA PATRONAL
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ONTERREY N.L., (PASTORAL SIGLO XXI).- El pasado 5 de Noviembre el Seminario de Monterrey celebró su fiesta patronal, como momento cumbre de la magna celebración, se llevó a cabo la misa solemne a San Teófimo mártir, en la capilla del Instituto de Filosofía. Ante cientos de seminaristas e invitados especiales, el Emmo. Sr. Cardenal Don. Francisco Robles Ortega presidio la eucaristía, acompañado del obispo auxiliar Mons. Alfonso Cortés y un nutrido grupo de sacerdotes, que incluía a presbíteros del equipo formador e invitados. En su homilía el Sr. Cardenal invito a los seminaristas a incluir las verdaderas virtudes del discípulo del Señor, en su camino de seguimiento, destacando entre ellas la fe. Seguido a la celebración eucarística se ofreció a los asistentes un banquete en donde al finalizar el mismo Sr. Arzobispo entregó los premios a los ganadores de los concursos culturales y torneos deportivos. Sigamos orando a Jesús el Buen Pastor, para que envíe muchos y muy santos Sacerdotes a su iglesia.
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LXXXVI Asamblea Plenaria de la Conferencia del Episcopado Mexicano
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os obispos mexicanos se reunieron en la Asamblea Plenaria del Episcopado Mexicano que se llevó a cabo del 10 al 14 de Noviembre del presente año en la Casa Lago en Cuautitlán, Estado de México, donde dialogaron y compartieron con gran alegría y esperanza conocimientos y experiencias al lado de 118 fieles laicos, hombres y mujeres comprometidos en la transformación del mundo, procedentes de 67 diócesis y de algunos organismos nacionales. El objetivo fue clarificar, revitalizar y fortalecer a la luz del Documento de Aparecida y la Carta Pastoral 2000, la misión propia de los laicos, estableciendo líneas estratégicas a seguir en la cultura, la economía, la política y los medios de comunicación a fin de impulsar la Misión Continental en México. El evento inició con una misa en la Basílica Nuestra Señora de Guadalupe. También durante la Asamblea estuvo presente el presidente de México, Felipe Calderón Hinojosa a quien los obispos agradecieron y reconocieron el enorme esfuerzo en la lucha contra el narcotráfico y la delincuencia organizada en todos los niveles con la esperanza de que reine la justicia y paz para la nación. Los obispos afirmaron que: “vivimos en un auténtico cambio de época que comporta crisis profundas en diversas dimensiones de la vida personal y social, y grandes oportunidades para construir el Reino de Dios y vemos a laicos decididos a dar razón y testimonio público de su fe en los diversos ambientes en que viven: matrimonio, familia, trabajo, política, empresarial”. Coincidieron con preocupación que es indispensable una formación más sólida que permita vivir una fe madura y capaz de ser criterio iluminador y transformador de la realidad, de acuerdo con Cristo. Concluyeron que: “los laicos con gran autonomía y libertad, deben desarrollar con creatividad nuevos y más eficientes métodos y formas de presencia cristiana en el mundo”. Además “urge un renovado y valiente compromiso en los siguientes ámbitos: la promoción y defensa valiente y eficaz del reconocimiento del derecho a la vida, desde la fecundación hasta la muerte natural; de la dignidad y vocación de la mujer en la sociedad y en la Iglesia; el fortalecimiento de la familia basada en el matrimonio instituido por el Creador; la promoción de un modelo educativo para construir personalidades maduras en el ámbito de la fe y del desarrollo humano integral; el compromiso solidario con todos, en especial, con los más pobres y excluidos de nuestra sociedad; la formación en Doctrina Social de la Iglesia de los diversos agentes que participan en las actividades productivas; la reconstrucción positiva de las relaciones entre fe y razón, entre cristianismo y cultura; la promoción y defensa de los derechos humanos fundamentales, entre ellos, el derecho a la libertad religiosa; la formación de una nueva ciudadanía, más responsable, más participativa y más capaz de comprometerse activamente con la gestión del bien común”. Instaron a regresar a sus comunidades reanimados, esperanzados y agradecidos con Jesucristo, y proclamar la buena notica del Reino.