DE SUR A SUR ANDALUCÍA
www.aspa-andalucia.org
Nº 77 diciembre 2015
Cambiemos el sistema, no el clima Desde ASPA entendemos el asunto ecológico como trasversal en todo nuestro quehacer y no sólo demandamos que se frene ese posible incremento del 2 grados centígrados de la temperatura, que prevén los científicos, sino que participando de la petición de buena parte de los países del Sur pedimos que a ser posible ese incremento sea cero. Y, por supuesto, cambiemos el sistema, no el clima, como titula su artículo Miguel Urbán, que traemos a continuación
En los días finales de noviembre se celebraron por todo el mundo las llamadas “marchas por el clima” dando el pistoletazo de salida a las movilizaciones internacionales de la sociedad civil con motivo de la celebración en París de la cumbre de Naciones Unidas sobre cambio climático (COP21, por sus siglas en inglés) que se inició el 30 de Noviembre. De esta forma, a lo largo de algunas semanas se vienen realizando diferentes protestas y encuentros alternativos para denunciar la inacción y la falta de voluntad política de los gobiernos para afrontar la crisis climática. La decisión del Gobierno francés de prohibir las protestas críticas con la cumbre
de París, mientras permite celebrar mercados navideños y partidos de fútbol es reveladora de un conjunto de valores y prioridades políticas muy particulares sobre quién o qué y quién o qué no debe ser objeto protección por parte del Estado. Al mismo tiempo el Gobierno de Hollande ha decidido aumentar los gastos en uno de los sectores más responsable del calentamiento global: el complejo industrial-militar. Las siglas “COP21” responden a la vigésima primera Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) acordada en la Cumbre de la Tierra de Río de Janeiro de 1992. La COP21 es lo más parecido a un gran congreso internacional del clima, ya que reúne a gobiernos de 195 países, entre el 30 de Noviembre y el 11 de Diciembre en París, supuestamente para intentar llegar a un acuerdo global y vinculante que afronte el reto de frenar el cambio climático a partir de 2020. Esta no es la primera vez que los gobiernos del mundo intentan llegar a un acuerdo vinculante en relación al cambio climático.
En 1997, en la cumbre de Kioto se fijaron
unas metas concretas de reducción de emisiones para los países más industrializados e históricamente más responsables del calentamiento global, pero Estados Unidos, el estado que más contamina por habitante y año, no ratificó aquél acuerdo. Tras su puesta en marcha en 2005 y tras diez años de implementación, el protocolo de Kioto ha demostrado ser insuficiente. A pesar de que varios de los 37 países firmantes han conseguido reducir emisiones a nivel doméstico, en el cómputo global se han aumentado en algo mas de un 24%. Porque los gobiernos no han querido tomar medidas para disminuir la quema de combustibles fósiles y una parte importante de la contaminación está “deslocalizada” a China y otros países emergentes, desde donde importamos bienes de consumo y materias primas. Además, “Kioto” abrió el camino a la privatización del aire con la puesta en marcha de los mercados de carbono que nos han hecho perder una década en la lucha contra el cambio climático, han subvencionado con dinero público a las industrias más contaminantes y han creado nueva inestabilidad financiera.
Las anteriores cumbres climáticas y el Panel Intergubernamental sobre Cambio
Climático (IPCC) -la comunidad científicahan señalado que un aumento de 2ºC podría tener consecuencias impredecibles. De hecho, muchos estados insulares y países del Sur global han implorado que el objetivo no superara el grado y medio. Para conseguir este objetivo, de mantenerse por debajo de los dos grados, deberíamos renunciar a extraer el 80% de las reservas probadas de combustibles fósiles (carbón, petróleo, gas) y acometer una drástica reducción de las emisiones globales de gases de efecto invernadero de entre 40-70%, teniendo en cuenta que las emisiones máximas deberían alcanzarse para el año 2020.
De esta forma, y por increíble que parezca, los objetivos cuantificados de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero posteriores a 2020 no son parte de los temas de negociación de la COP21. Estos objetivos voluntarios y no vinculantes, y en gran medida inadecuados, no se revisarán al alza como resultado de las negociaciones de París. Además, su implementación sólo empezaría a aplicarse a partir de 2020, prologando la inacción otros cinco años. Asistiremos a una negociación bizantina sobre el embalaje, pero no sobre el contenido de las medidas a realizar para enfrentar el umbral del 2ºC del calentamiento global. Con los compromisos actuales encima de la mesa el resultado es que la temperatura subiría un mínimo de un 2,7ºC hasta más de 4ºC, según distintas fuentes.
De esta forma, la suma de compromisos voluntarios, como ya vimos en el caso del protocolo de Kioto, no está a la altura de las demandas científicas de lograr evitar las peores consecuencias del cambio climático, lo que supone una sentencia de muerte para millones de personas. Un horizonte temerario e irresponsable cuando consideramos las enormes consecuencias que ya se están sufriendo, fundamentalmente en los pueblos del Sur global. De esta forma aumentarán los “refugiados climáticos” como consecuencia del aumento del nivel del mar, las lluvias torrenciales, las sequías y hambrunas. Como dice Naomi Klein “Cuando gobiernos y grandes empresas no son capaces de actuar para prevenir un calentamiento catastrófico, eso constituye un acto de violencia”.
El texto borrador del Acuerdo de París no menciona a los combustibles fósiles, el origen de más del 80% de las emisiones de CO2. Ni siquiera se considera la necesidad de eliminar los subsidios públicos a los combustibles fósiles (4,7 billones de dólares en 2015). En la posición del Comisario de la Unión Europea para la Acción por el Clima y la Energía, Miguel Arias Cañete, prevalece la idea de anclar nuestro modelo energético a las energías fósiles y a la nuclear otros treinta o cuarenta años más, apurando al máximo el cenit de las energías fósiles. De esta forma, prolongarán irresponsablemente la vida de las centrales nucleares y la interconexión
eléctrica según un modelo hipercentralizado de generación y distribución que agrava la pobreza energética sufrida por millones de personas. Promoviendo la construcción de nuevas infraestructuras transcontinentales de gas que profundizan nuestra dependencia de fuentes energéticas externas y promueven conflictos y violaciones a los derechos humanos. Asimismo, la cumbre París abre la puerta a técnicas de enorme riesgo humano y ambiental como la fracturación hidráulica y la captura y almacenamiento de carbono.
La parte sobre la financiación es otro gran vacío. Cómo movilizar la financiación necesaria para poner en marcha una transición energética, o cómo permitir a la población más afectada hacer frente a las consecuencias de las perturbaciones climáticas, no son asuntos prioritarios del Acuerdo de París. El compromiso asumido en Copenhague en 2009, de movilizar 100 mil millones de dólares anuales a partir de 2020 para apoyar a los países más empobrecidos todavía no se ha materializado. No se propone ninguna hoja de ruta para indicar cómo aumentar los compromisos financieros con el tiempo para hacer frente al empeoramiento de las perturbaciones climáticas. Será la ciudadanía –y no las cumbres o los gobiernos cooptados por el poder de la gran industria de los combustibles fósilesquien demuestre cuál es el camino a seguir para lograr una auténtica descarbonización
de la economía basada en un cambio de sistema democrático y justo que se ciña a los límites naturales desterrando el paradigma del crecimiento ilimitado. Un modelo de producción y consumo que debe estar basado en una apuesta clara por un nuevo modelo energético 100% renovable y con soluciones clave como la agroecología, una movilidad sostenible y el comercio local de proximidad. Lucharemos por cambiar el sistema económico y político, y no el clima. Nuestro lugar está
en el lado de los movimientos sociales, de cada país y apoyando a la Coalición Clima 21 (http://www.coalitionclimat21.org/es) y sus aliados internacionales en las movilizaciones y actividades en París.
Actividades de ASPA
Con motivo de la celebración del Día Universal de los Derechos Humanos, entre el 10 y 1l 12 de diciembte ASPA participa en las siguientes actividades en Granada:
10 de diciembre: CIBERACCIÓN #GranadaRefugia. Se trata de hacerse fotos, en diferentes lugares de la ciudad con la banderola “Solidaridad Refugiados” y compartirlas por las redes sociales con la etiqueta #GranadaRefugia y/o a través del correo electrónico: granadarefugia2015@gmail.com
11 de diciembre, a las 20 horas en el local de Acción en Red: VIERNES SOLIDARIO POR LOS REFUGIADOS: Charla, Proyecciones, Exposición y Concierto: “Crisis de Refugiados”.
12 de diciembre: de 11:30 a 14:30 horas en La Fuente de las Batallas: Biblioteca Humana sobre Refugiados.
12 de diciembre: a las 20 horas en la Brújula de Momo: CENADOR SIRIO, por Granada Acoge.
Dentro de la Plataforma Boicot, Desinversiones y Sanciones (BDS Israel) de Granada estamos realizando las siguientes actividades:
El 10 de diciembre: se firmó el Compromiso Político con los Partidos para que adopten los objetivos de la Campaña BDS. Fue a las 10:30 horas en la Fundación Euroárabe. El 19 de diciembre: a las 11 horas estamos organizando la Mesa Redonda: "OCCIDENTE-ORIENTE: UN CAMINO DE IDA Y VUELTA", con la participación de: Nadia Hindi, Aly Tawfik y Waddah Mahmoud. Será en el Mercao Social y Cultural de Granada.
El 17 y 18 de diciembre, dentro de las actividades formativas en el marco del proyecto "Una Mirada Andaluza a los Pueblos del Sur" nos vamos a San Roque (Cádiz) a dar unos talleres sobre África a alumnado de 2º y 3º de la ESO del IES Mar del Sur. El objetivo de estas sesiones es acabar con la imagen simplista y negativa que pesa sobre este inmenso continente a través del acercamiento a su diversidad, su historia,su cultura, sus paisajes y sus gentes. La exposición "África tan cerca y sin embargo tan lejos" estará además abierta al público del 21 al 28 de diciembre en el Espacio Jóven de San Roque.
Los días 17 y 18 de diciembre en el IES San Jose de Coria del Río (Sevilla), seguiremos compartiendo con el alumnado de 3º y 4º, la segunda y última sesión de los talleres sobre coeducación “Mujeres del Sur”
ASPA esta coordinando la Semana de la Solidaridad del IES Zoco de Córdoba dentro del programa La Solidaridad tarea de todas y todos. Se celebrará del 14 al 16 de diciembre y, entre otras actividades se realizaran los siguientes talleres:
Resolución de conflicto a través de la imagen (ACPP)
Germinando Justicia (Ecologistas en Acción
Visitando una mina de coltán (VSF - Justicia Alimentaria Global
Comparte tus ideas para un mundo mejor (CIC Batá)
ASPA esta colaborando en la Jornada de convivencia y reivindicativa del 13 de diciembre en la explanada de El Arenal dentro de las actividades organizadas por la Plataforma 15M Stop Desahucios de Córdoba con motivo del 4º aniversario de la misma. En dicha jornada habrá animación infantil, mercado de trueque,
mesas informativas, perol solidario, asamblea de Stop Desahucios, actuaciones musicales
El sábado 12 de diciembre ASPA colaborará dando un taller de interculturalidad en el "XVIII Curso taller de formación del voluntariado 2015 2016" organizado por InteRed en Málaga. El objetivo de esta iniciativa es generar una conciencia crítica ante las realidades de nuestro mundo y fomentar estilos de vida comprometidos a través de la participación social y el voluntariado. Durante la sesión hablaremos de viajes, frontera sur, acogida, empatía, etnocentrismo, identidad, prejuicios y estereotipos, multiculturalidad, interculturalidad, cooperación, solidaridad, ternura y diversidad.
En este boletín os queremos hacer una pequeña reseña de los proyectos de Cooperación Solidaria Internacional que tenemos en ejecución: En Bolivia:
Apoyo a centro de recursos y a centros educativos en la ribera del río Tapacarí. Cochabamba.
Mejoramiento de la participación social y de la estructura productiva del municipio de Sicaya. Cochabamba (2ª fase)
Atención integral para la lucha contra la enfermedad de Chargas en la Ríbera del Río Tapacarí
Construcción de 4 sistemas de riego para garantizar la soberanía alimentaria en comunidades indígenas de la Serranía de Tapacarí.En Ecuador:
Mujeres, campesinos e indígenas productivas/es agroecológicos, comercializando en la Amazonía norte ecuatoriana
En El Salvador:
Apoyo al sosteniniento de la escuela infantil y comedor escolar en la Comunidad Dimas Rodríguez en Chahuite, municipio de El Paisnal. San Salvador
En Nicaragua:
Salud comunitaria y equidad de género. Haciendo realidad los derechos de las mujeres. Nicaragua
En Perú:
Fortalecimiento de capacidades para la construcción de vivienda piloto ecoeficiente y mejoramiento de las condiciones de habitualidad de viviendas para familias indígenas de la comunidad de Chachupata.
En Togo:
Promoción de las niñas de Togo a través de la escolarización y formación.
Oferta de empleo Compartimos los Términos de Referencia para la contratación de un diagnóstico participativo con perspectiva de género del movimiento de apoyo a Palestina en Andalucía en el marco del Proyecto “Red Andaluza de Solidaridad con Palestina. Diagnóstico participativo, articulación, comunicación y sensibilización con enfoque de género y DDHH”, subvencionado por la Agencia Andaluza de Cooperación Internacional (AACID) y que realizamos en agrupación la Asociación Al-Quds de Solidaridad con los Pueblos del Mundo Árabe y la Asociación Andaluza por la Solidaridad y la Paz (ASPA)
Y para acabar compartimos los últimos artículos subidos a nuestra web:
Los partidos políticos se compromenten a tomar medidas para la erradicación de la pobreza
Declaración Córdoba ciudad refugio
Se firma el Pacto por el Clima en Córdoba
Córdoba Solidaria pide al Gobierno andaluz que cumpla sus compromisos con la solidaridad internacional
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