El pequeño mundo de la música

Juanchi Ruiz

Ilustrado por Pedro Darso

¡ESCANÉAME!

¡¡Encontrarás todas las canciones del libro en nuestro canal de YouTube!!

«¡Din, don, din!». Cápsula con destino a Nunca Jamás, embarquen por la puerta 33. Salida inmediata. «¡Din, don, din!». Cápsula con destino al País de las Maravillas, embarquen por la puerta 56.

Les recordamos que en el Pequeño Mundo de la Música no está permitido dejar de bailar o parar de cantar. «¡Din, don, din!». Última llamada para la señorita Alicia, embarque por la puerta 56. Por megafonía, una voz ronca anunciaba las nuevas salidas.

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Martina y Pedrito bajaron del tren-cápsula y caminaron por la larga estación hasta llegar a una gran plaza.

Martina estaba muy extrañada.

—Pues este sitio no es tan mágico como decían en la revista esa. Qué raro es todo. ¡Mira, ese árbol parece un violín gigante!

—Yo vi en un vídeo del Rock Tube que aquí podría pasar cualquier cosa. Van a ser unas vacaciones maravillosas —dijo Pedrito, entusiasmado.

Cuando llegaron al centro de aquella plaza, una potente luz iluminó una gran orquesta bastante peculiar. A la batería, un chimpancé negro con cara de pocos amigos; en los teclados, un elefante azul celeste que parecía muy simpático; un león tocaba la guitarra, y un pingüino gris era el bajista. Detrás, en varias filas, había un montón de animales con trompetas y otros instrumentos de viento.

Pedrito se quedó embobado mirando las luces.

Tras una gran nube de humo apareció un hombre 4

El pequeño mundo de la música

con un aspecto extraño. Era una mezcla entre Elvis Presley, Michael Jackson y Pocoyó.

A Martina se le escapó una carcajada.

—¡Uff…! Parece sacado de un disco de estos grandes que tiene papá en el sótano.

Era Tom, el maestro de ceremonias, que andando muy despacio se acercó al micrófono principal.

—¡Bienvenidos al Pequeño Mundo de la Música, el país de tus sueños, tu ciudad de vacaciones, en las más remotas e imaginarias tierras de Do, Re, Mi! No os preocupéis por nada, dejad vuestra mente en blanco y disfrutad de estas vacaciones. Solo tenéis que dar rienda suelta a vuestra imaginación.

Bebió un trago de una botella de agua que tenía a sus pies, y muy emocionado le preguntó a los chicos: —¿Sabéis bailar?

Pedrito contestó gritando como si estuviera en un concierto de rock, rodeado de multitud de fans.

—¡Síííí!

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Martina lo miraba asombrada por su entusiasmo.

—¿Sabéis cantar?

—¡Síííí! —volvió a contestar con más énfasis Pedrito.

Tom se puso de espaldas a ellos, levantó la capa dorada de su traje y exclamó: —¡Música, maestro!

Los trombones iniciaron la canción e izaron tres banderas azules sobre los músicos, con el emblema de «El Pequeño Mundo de la Música».

Canción 1 “El pequeño mundo de la música” 6

ISBN 978-84-18017-58-2

9 788418

017582

Martina y Pedrito viajan de vacaciones a un mundo mágico, que ha sido creado por unos personajes singulares, siendo la Alcaldesa Semifusa uno de los más destacados. Todos ellos utilizan la música como medio para que los niños se diviertan y jueguen, aprendiendo al mismo tiempo.

El Pequeño Mundo de la Música es un cuento con canciones originales y educativas que pretende despertar valores olvidados. Todas estas canciones pueden ser escuchadas accediendo a los diferentes códigos QR que aparecen al final de cada capítulo.