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Bakea
Bakea Paz
Se estima que en España residen unas 112.000 personas provenientes de Ucrania y unas 80.000 de Rusia. Comparten cultura, tradiciones y muchas palabras, entre ellas la palabra “paz”, tal y como señala Unicef. La geopolítica internacional los está enfrentando, pero eso no tiene por qué trasladarse a las aulas y los barrios.
En los centros educativos de Euskadi y en concreto en la red Elizbarrutiko Ikastetxeak (EBI) ya están escolarizados algunos de los niños y niñas que llegaron huyendo de la guerra. Un ejemplo es el centro educativo BeraKruz, de Markina. Los primos Nastya y Artem han llegado desde Poltava, centro espiritual de Ucrania, hasta la ikastola diocesana ubicada en Lea-Artibai. Su amama vive en el municipio desde hace más de diez años y ahora, han llegado sus nietos con sus madres. El centro les está acompañando en su proceso formativo y emocional, tarea importante para unos niños que han vivido la guerra en primera persona.
La sociedad de Bizkaia se ha volcado con la ciudadanía ucraniana y en la Diócesis son varias las acciones fraternas promovidas. Recogemos algunas de ellas.
Caritas Bizkaia acompaña a 48 personas en el antiguo Seminario
Es 12 de abril. Son las 9 de la mañana. Nos hemos citado en el edificio Seminario con la responsable de Eguzkilore de Caritas Bizkaia, Amaia Porres. Queremos saber cómo se encuentran las familias acogidas y la manera en la que se está organizando la institución en el día a día. Llama la atención la manera acogedora en la se han habilitado los espacios, con palabras escritas en ucraniano en las puertas de las habitaciones, un txoko para que los más pequeños puedan jugar, salas de estar con butacas... Las familias se acaban de levantar. Algunas están desayunando en el comedor, otras salen de las habitaciones en dirección a los baños con las toallas y las zapatillas de casa, una niña con una Tablet entre manos está atendiendo al profesor que le está dando clases online, vemos a un recién nacido con unos ojos azules enormes en brazos de su madre... Si no supiéramos lo dramático de la situación pensaríamos que son turistas que han llegado a pasar unos días entre nosotros. Pero no, hay una diferencia. No sonríen, están serios y tristes. Algunos han llegado con lo puesto, porque tuvieron que salir corriendo de casa dejando toda su vida atrás. Están deseando volver, pero no saben cuándo será.
Amaia comenta que, cuando llegaron, a finales de marzo, “fue como un tsunami”. Fueron dos semanas contra reloj, para montar toda la infraestructura necesaria. “Son personas educadas y la convivencia, de momento, está siendo fácil”, destaca. Le llamó la atención la tristeza de sus caras cuando bajaron del autobús para instalarse en el lugar que les acogerá durante el tiempo que sea necesario. De momento, lo fundamental es intentar responder a sus necesidades básicas y con el tiempo, llegarán otro tipo de acompañamientos, como el psicológico. “Ya ha habido algunos cuadros de ansiedad y sustos cuando los primeros días escuchaban el paso de los aviones o cuando sopla fuerte el viento...”.
Desde Caritas Bizkaia se encargan de acompañarles en los temas administrativos, jurídicos y de atención médica, “porque algunos de ellos han tenido que interrumpir los tratamientos que recibían en su país y tenemos algún caso de quimioterapia, por ejemplo”.
Ymaia Goikoetxea es la coordinadora del recurso y próximamente pasará el testigo a Iñaki Ibarluzea. Como ambos provienen del mundo de los eskautak están acostumbrados a organizar actividades para el tiempo libre, algo importante para que los más pequeños estén también entretenidos y los mayores tengan sus momentos de distensión.
AMAIA PORRES
Clases de castellano con voluntariado de BAM
Se han organizado tres turnos para atender las necesidades de las personas acogidas. En cada uno de ellos hay alguna persona que conoce el idioma, algo fundamental en esta primera fase. “Es de agradecer la colaboración de la Escuela de Magisterio (BAM) que ha comenzado a impartirles clases de castellano”, explica Amaia.
Naroa Revilla, María Ruíz, Iratxe Lavado y Udane Urkijo son cuatro de los doce estudiantes de magisterio que se han apuntado como voluntarias para enseñar castellano a los niños y niñas ucranianos acogidos en Derio. La invitación a participar les llegó desde la Pastoral del centro, coordinada por Belén Rodero. Se muestran contentas
ROBERTO MIELGO EN UNA SESIÓN CON EL PERSONAL VOLUNTARIO
BELÉN RODERO
por participar en esta acción solidaria en la que algunas de ellas repiten, ya que a lo largo del año también han estado enseñando castellano a personas migrantes.
Pero no sólo los estudiantes, también miembros del personal docente y de servicios del centro se han animado a participar en esta iniciativa. El profesor de BAM Roberto Mielgo coordina el grupo y les ofrece algunas pautas para interactuar con ellos. “Con el traductor de internet, con algunas palabras que hemos ido aprendiendo y con el idioma universal de la mímica, iremos dando los primeros pasos. El cirílico no es nada fácil para nosotros, pero con voluntad todo se puede”. Reconoce que la tarea más complicada es la de intentar motivar a unas personas que se encuentran en la tesitura de tener que estudiar un idioma obligadas por las circunstancias y en algunos casos, con más de 70 años. “¿Qué ganas pueden tener de aprender en esta situación?, se pregunta Roberto, quien, sin embargo, lejos de desmotivarse, encuentra razones para infundirles esperanza •
“Yo vivía a 150 kilómetros de la capital. Parte de mi familia ha tenido que huir a consecuencia de los bombardeos. Tengo algunos conocidos que se han refugiado en Polonia y otros muchos que han decidido quedarse en sus casas. En cuanto oí la noticia de la guerra en la radio estuve tres días sin dormir. Mi familia más cercana estaba aquí de vacaciones y sigue conmigo. Aquí en Derio intentamos que las personas acogidas estén lo mejor posible. Hay una familia que ha estado un mes separada por la guerra. Cuando estalló, el padre se encontraba esquiando con su hija, la madre se había quedado en casa a cargo del niño y otra hija estaba compitiendo. Otra mujer, profesora y logopeda ha venido con su hijo autista... Son personas que hasta el 24 de febrero tenían una vida normal” •
Nataliya Shapoval colabora en uno de los tres equipos de atención a las familias. Es de Ucrania y llegó a Euskadi hace 20 años.
Ukrainarrak Gernikako Mesedeetako komentuan
Gernika Lumoko Mesedeetako komentuan 27 ukrainiar daukiez hartuta, ume zein helduak. Belen Olarreta da alkarteko nagusia. Bizkaia Irratian, Gernikako bonbardaketaren urteurrenaren harira zuzenean herritik bertatik egin eben irratsaioan, familien egoeren barri emon eban.
Zelako jentea heldu jatzue?
Danetarikoak dagoz. Batzuk psikologikoki txarrago eta beste batzuk hobeto. Baina hizkuntza muga handia danez, ez zara heltzen heldu gurako zeunkean beste euren sentimentuetara. Pasiloetatik topetan dozuz eta besarkadaren bat edo beste emoten deutsue. Adibidez, lehengoan zortzi urte egin ebazan mutiko bategaz buelta bat emotera joan nintzan. Harrezkero ikusten nauanean besarkatu egiten nau.
Boluntarioak be badabilz hizkuntza kontuetan laguntzen, ezta?
Bai badatoz. Lan polita egiten dabe, ze bestela gatx. Ingelesa be ez dabe menperatzen eta kosta egiten da eurekaz komuniketea.
Nondik atara dozue laguntzarako materiala?
Jente askok lagundu dau baita udaletxeak be. Persona ugarik deitu deusku eta gauzak emon dabez. Zein da euren egunerokoa?
Armozau bederatziak inguruan, ordu bi ta erdietan bazkaldu... Tarteetan erdera ikasten be egon dira batzuk. Zortziretan aparia. Umeak etorri ziranerako eskolatu genduzan gure eskolan. Herri batzuetan Ukraniarren kontrako pintadak agertu dira. Zer erizten deutsazu?
Zertan eragin deutsue zuei alkarte modura?
Aldatu da gure egunerokoa. Orain arte bost izan gara eta bat oheratuta dago. Bi nagusiak dira baina eurak be laguntzeko gogoa erakusten dabe.
Kudeaketa administratiboak be egin behar izango zenduezan...
Caritaseko boluntarioak egon dira horretan eta lan handia egin dabe. Ordu piloa sartu dabe laguntzen eta etorri diranei joan beharreko lekuak erakusten.
Ezin dot hori ulertu ez fedetik, ez gizatasun aldetik. Gaur eurak dira eta bihar geu izan gaitekez. Sinisdunontzat guztiok gara neba-arrebak.
Noiz arte egongo dira zuekaz?
Ez dakigu. Gu eskaini ginan eta orain ikusi behar noiz arte. Eurak behintzat etxera bueltatzeko gogoz dagoz eta ikusi egin behar •