dTRULENQUE
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Sábado, 24 de febrero de 2018
BENJAMÍN REYES
R
oger Gual (Barcelona, 1973) se dio a conocer con Smoking Room, con la que obtuvo, junto a Julio D. Wallovits, el Goya a la dirección novel en 2003. Quince años después se representa el montaje teatral con unos personajes en contradicción, encarnados por un elenco actoral integrado por Manolo Solo, Edu Soto, Secun de la Rosa, Miki Esparbé, Pepe Ocio y Manuel Morón. Los próximos 9 y 10 de marzo se representará en el capitalino Teatro Guimerá. -¿Por qué hacer un montaje de una película rodada hace 15 años? “Tanto Julio como yo siempre habíamos dicho que no a las propuestas que nos llegaban de hacer nuevas versiones. Pero, pasados 15 años, se han reunido las condiciones para retomar la idea. Por una parte, lo escenificamos en primer lugar en el Teatro Pavón, que es un espacio que apuesta por un teatro más arriesgado, y encontramos a seis actores de primer nivel”. -¿El que ha visto la película encontrará algo nuevo? “Sí, porque, aunque la trama es la misma, existen variaciones. Hemos adaptado el libreto original de la película, sin tener en cuenta la influencia del montaje, que se prolongó durante seis meses. Hay una aproximación al texto más directa. Hay más comedia, sobre todo, en la primera parte el público se ríe mucho. Además, hemos tenido que adaptar el guion para seis actores”. -¿Cómo se escribe un guion a cuatro manos? “Empezando por una idea. Julio vivía en Ámsterdam y yo en Nueva York, y vivimos la misma experiencia en nuestras empresas, en las que existía un espacio para fumadores. La gente cuando salía a fumar hacía muchos planes para intentar cambiar las cosas y luego entraba y se olvidaba de todo. Es un punto de partida solo
ROGER GUAL GUIONISTA Y DIRECTOR
“No juzgo a las personas”
Geraldine Leloutre
para hablar del miedo a perder tu trabajo. Cada uno escribió una parte, nos intercambiamos mensajes con los diálogos, y luego hicimos una puesta en común en Barcelona”. -¿Es una obra concebida para el lucimiento de los actores? “Smoking Room es una película que tiene un recuerdo especial para muchos actores, que la consideran una obra de culto, y se
Diario de Avisos (Santa Cruz de Tenerife) 24/02/2018. Página 57
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apuntaron muy rápidamente al proyecto teatral. La obra está pensada para que los diálogos sean lo más naturales posibles y parezca que estén improvisados. Lo importante es lo que el guion consigue transmitir y a los intérpretes les parece un reto comunicar verdad”. -¿Por qué repite del elenco original Manuel Morón? “Es un actor con el que suelo contar y quería hacer un guiño a la película. Antes era
un empleado y ahora encarna a un jefe”. -¿Por qué ha dicho que la obra tiene más vigencia ahora que hace 15 años? “Porque creo que el mundo laboral en España ahora es más precario y hay más miedo a perder el trabajo, lo que lleva al ser humano a ser cobarde y a no tener valor para decir las cosas”. -¿Cree que el ser humano es básicamente egoísta? “El ser humano es como es. A veces somos egoístas y otras solidarios. No juzgo a las personas. El espectador debe de salir de la función y hacerse él mismo las preguntas. Se deben de preguntar qué hubieran hecho ellos en esa misma situación”. -¿Con su montaje busca hacer reflexionar al espectador? “Siempre espero como espectador que si veo un filme o una obra de teatro me haga removerme y cuestionarme cosas. Y si además me lo paso bien y me río, pues mejor que mejor”. -Smoking Room se reduce al espacio de una empresa, su último filme, 7 años, se centra en un único escenario. ¿Por qué esa querencia por el confinamiento? “Tanto a nivel de escritura como a nivel actoral, cuando pones a unos personajes al límite en un espacio determinado en el que tienen que tomar una decisión, eso es un detonante para generar conflicto y drama”. -¿Está a favor o en contra de la prohibición de fumar en espacios públicos? “No soy fumador, pero creo que debemos de respetar a los demás. Hace poco estuve en Japón, en Tokio, allí la gente fuma en los bares y en la calle tienen espacios limitados para fumar y la sociedad funciona porque hay respeto. Es solo una cuestión de respetar al otro”. -¿Ganar el Goya le abrió puertas? “Hasta la fecha he rodado cuatro películas, supongo que, en parte, gracias a ese premio. Sin embargo, levantar cada película requiere mucho esfuerzo. Llegar hasta aquí no ha sido un camino de rosas”.
Biblioteca de la Universidad de La Laguna.