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.········.. ..lt\~"X \... ~ )W1446 j •.·. ..........·: EL SAGRARIO
DE LA
SALUD
Pronauandas hiuiénico-sanitar1as l l emns leldo poco ha que uo
que <thora vivimos, en que IRs en-
iste prub,•b!emenfe en el mnudo
fermedHdes, si se persis te cu propa·
rro teatro ro1.10 el destiuado en
g<tndas lligiéuicas habran dejado de
1<~ ~dlll'IICióu
,scon a
sHnitm ia.
h?.cer sufrir a la Hurnanid.ul. Los mé·
stbaj<t bajo la dirección del depar-
dicos entonces no cunuáu, porque
ICIII!l <h- ll igicue, y
el
no tendrán enfennos, siuo que uni-
ctnscu• ~o de los últimos Cn!itro aiics
camcnte indicarán lo que debe ha·
1 pre~cut ado <>S te
cerse p¡¡ra prevenir tod«s lfls enfer· nredndes. • Aplaudamos, pues, y con vivo
durttnt~
real ro ochocicn·
:s obras. Se calcul11 que el número 1! ¡>~:1 sonéiS
que han asistido a las
P• eseutadouo>s ¡m su de.un millón. El obj~tu tlt~ estas represe~•tncío · .,s es IHwcr niiH propaf!amla de sa. dad y tle higieue públicas en una " Mlr?.yente <.' iustructivn; ense· las 111~didas necesarias pa•a p.re· Pnir hts eufenuedndt:s a la par que
viviend a lo que lll<'jor le plazc¡¡; rll' que existe uun cr.ucienciH fi.;ica, IUl<l verdadera conciencia saui!Aria· de que todos los Ira la
atentados
con~
salud son pe~ados graves
Y graves delitos, deli tos s.tnitMios, merecedores
de
severas
s11ncio·
nes; de que diez delincuentes con· Ira la propiedad no sou tau <Jaiiinos como un sólo individuo que,ignorRn· te de las rt'glas de la higieue, expo· ne a
1111
enfermo a uua cor rieute de
aire, o Qropaga cou su suciedad lo;;
entusiasmo, todos los actos de JHO·
gérmenes de uua epidemia; de que son pocas las enfermedades que no
paganda higiénico, sllni tatia, auuque
procedan de la brutal ignoraucia .hi·
parezcfl n algo quijotesco, 11plauda·
giénica; de que un centeuar de •úos·
111os, si, toda labor, por llr11nilde que
cns pueden ocasion~~r n!áS vfctilnas
sea, de evangelización, de aposto lado higiénico y sa1ritHrio.
que ur, reb¡n'\r) de fieras; de q11e tau
Urge, urge mnchisilliO, iustruir,
ras y tal vez más, lo son esos ;>e·
enemigos del hombre como las fic·
per suad•r, hacer
queños organismos tan eRu tados por
s cuidados que 1eqniere la limpie·
comprender a todos los pueblos y a
personal. Presenta ignalmeute los
todas las gentes, enseñándoles el
los poetas y que llevan el uombre de insectos, y asi otras much.ts má<;
Jitados perjnJiciales de la pros-
calecismo sanitario, que los bienes
verdades del 111ismo estilo.
ión y del excGSO de la bebida. IIRS, todas las obras presenta·
y l>rO\'echos de la salud y de la vi· da son ante1 iores y supeliores a los
Quizás no hRy en Europn llllii nación que posea una legisiRcióu
eu E--ste teatro fieuden a euseilar
que nos pueden propo• cionar los i11·
mÁs abumiRnle y mejor ins¡l !rada
tcreses
,1ue la tieue E-.piiria; pero quizás tambien no haya niuguua en que l.t
educar, inculcar.
materiales, intereses, que
, las atcucioucs que requieren
por un egoísmo mal eutendido, son
alimeulos y los cuidados de los
la causa de que muchos ~ienllln ad·
jos. '1'11mb•~u se presentan obras las que se les en!leiHIII lodos los
versión y ¡¡ufipatía por tod,) lo que se refiere a higiene y sflnidad. Urge, urge muchisimo, difundir,
nos compr emlkla. E u materiAs sn· nitarias, Esp:.tiia ha marchad; danJo
" que se exponen no laván·
propag<tr, vulg11rizar la doctrina, la
las ruauos o no limpiándose d1eu les.
creencia, la convicción, de que con·
grandes sail os seguidos de imnensas pausas. Y por eso vernos que no
servar la salud es un deber sagnHio que todo el mundo tiene la oblig.tción
obstante estar plenélmente demos· trndo que la principal riqnczn de ht!'
de cu111plir; de que nadie, nb!'olul<t·
f¡unilias y d~ los pueblos la cousl l·
u1eute nadie, tiene el de• echo y luli·
tu\'Cn los imlh·iduos fuc1tes, Slfll(l" y 1obustos, al prcpio tiempo que
iHim eut ~ d·.!dicadas ¡¡ los niños, 1
s•' Yo
estoy couvencido
t'IIIIIICIIIC médiCO ing~és ol Lane- que llegará un IIJ alcancemos a verlo los
bl!rtall de hclC~r de su wer po y de su
salubridad pública h11ya est11do más abandomtda, meuos élcatada y me·