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PERIODICO
INDEPENDIENTE
--~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~PRECIOS POR TRIMESTRE; Redacción y Administración: An-o XI ,~ . . . . -o N°. 39 Pueblo ,. 1'25 ptas.
Francia 84
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u'9lrracó 31 de de CJ'flayo 1935
la isla y provincias
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El n1undo bajo la crisis Si quereis seguirme en mi narración, daros la pena de meditar un instante leyendo estas lineas·, os explicaré los car1cteres dominantes de la crisis que nos a tenacea. El sujeto es de actualidad. En ciertos puntos hasta lo es demasiado. El problema es dificil de aclarar; sobre todo para un periódico como el nueslro que no dispone de páginas suficier.tes para un estudio de esta índole. Sin embargo voy a informaros lo más detaÜidamente posible; y eso, sin abusar ni del periódico, ni ue vuestra atención. La crisis con que se debate Europa, tiene varios aspectos. Ante tOdo es una consecuencia de la guerra, es como quien dijera los últimos cada ve res de esta últi::na que se estan enterraado, la liquidación de sus últimas consecuencias. Hubo quienes fueron suficiente locos para creer que la humanidad salia de la guerra mas rica que no ent,ró, como si pudiese ser que los pueblos se enriquecieran exterminandose. Se ha producido, oteado, y agiotado en consecuencia. El horror fué lamentable, los que debían prevenirlo no lo vieron, y ahora incumbe a los pue·¡ blos. ~a tarea, ardua, de equilibrar la produccwn y el consumo.
cía por poco que salga de su pueblo. A fines del siglo XIX, el hombre blanco que recorría el mundo, se daba Cuando los precios !>uben, todo va cuenta que este último estaba simplebien, se compra, se vende, se regala, se mente a su devoción. Entonces era un hacen empréstitos, y lo que hasta parece privilegio envidiable eso de tener el cuexuaño, se reembolsa lo que se de be. En tiz pálido, el epidermis color de rosa. el caso contrario, cuan'd o los precios baActualment~, basta con tomar un bijan, es el marasmo, el pesimismo, la in- llete de vapor, cambiar de continente, seguridad. Se hacen empréstitos como para descubrir, a signos ciertos, que la ante~, pero los acreedores tienen que arvieja dominación de Europa es discutida marse de paciencia, antes de volvú a ver litigante. La supremacía, y hay que deél color de su dinerv. , cirio también; la t~r.wia de Europa -;obre De 1873 á 1898 :1 perio::lo de baja, el mundo, ya casi no es más que un refué general. Dicho p~:dodo fué seguido cuerdo del pasado. de un cuarto de .siglo .de vacas gordas, y Gabriel SIMO ahora ya estamos di nuevo dentro la «] aumoya» aflicción para muchos años aún, al me(continuará) nos si la ley de periodicidad queda en vigor. El malestar es universal. Meno3 en
Hombres y Categorías
U. R. S. S.
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En Rusia no hay crisis. Por eso mis- j La desigualdad se manifiesta hasta mo el Japon y Alemania-los dos paises involuntariamente y en los casos y cosas que mas sufren del marasmo actual - 1 mas insignificantes, pero en ciertas ocaquieren pelearse con los Soviets. PorqLJe j siones cabe el saber disimularlas. Los el bienestar económico del pueblo ruso, hombres bondado&os y voluntarios no es un mal ejemplo para los pueblos ham- siempre suelen ser recompensados por bri entos. Y para que dichos pueblos no sus virtudes. te11_5an ganas de probar del régimen coAsí ha sido siempre. munista, lo mejor crr.en sus gobiernos, La vanidad, fruto de la mediocridad es suprimir el ejemplo. De ahí, .un pe1i- e3 una de las causas por las cuales degro de guerra, que solo agravana las co- mostramos sin darnos cuenta hasta que Además, por si eso no bastaba, atra- sas. punto están los hombres faltos de munAhora llegamos a un tercer aspecto diólogia y sensatez. vesamos-y eso sin saber siquiera donde poner los pies-un periodo de baja de de la crisis, y este, es francamente euroNo obstante es un deber ser indulprP.cios que ~egún una regularidad curio- peo. Es que hay algo que ha cambiado gentes por aquellos que su radio de acsa formidable se sucede a traves la his- sobre nuestro continente. Ahora hay lo ción no les ha ·permitido un desarrollo toria contemporanea. Su periodicidad que podríamos llamar una cuestión euro- en ese sentido . En cambio hay derech-o parece hasta regular: Q5 años de aumen- pea. de censurar los que por sus propios afatQ, Q5 años de baja. La cadena no sufre Para estudiarla, inútil referirnos a nes no sueñan más que en lucirse; en to1 mucha interrupción. las estadísticas, · p~ro veamos de eerc 1. lo das partes los hay, pero sobre todo en Como tampoco varian fus norm":ls. que ncs enseña la más mínima experieQ- nuestra Patria y sin necesidad de distín-
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