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HISTORIA DE TERROR

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CENTRO DE MENORES

CENTRO DE MENORES

Llegaba verano, y mis amigos y yo queríamos hacer muchas cosas. Una de esas cosas, y la que más llamó la atención, fue acampar todos juntos al aire libre, y como a todos nos gustan las películas de terror, decidimos ir a un bosque

Hay que admitir que nos gusta infringir las leyes, pues en la entrada del bosque, había un cartel que indicaba que el paso estaba prohibido, pero no le hicimos mucho caso, saltamos la valla y nos dirigimos al corazón del bosque a preparar nuestro campamento

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Al entrar al bosque, nos dimos cuenta de que la cobertura de nuestros teléfonos desaparecía del todo, y además la batería se acababa mucho más rápido. Pensamos que así podríamos disfrutar más de la naturaleza, por lo que lo ignoramos. Llegamos al centro del bosque,que era una explanada un tanto solitaria y silenciosa. Montamos nuestras cosas y nos fuimos rápidamente a bañarnos al lago que estaba cerca

Uno de mis amigos, Carlos, nos dijo que él se iba a retrasar, que tenía que avisar a su madre por lo que estaba en busca de cobertura Después de un rato bañándonos, Carlos seguía sin venir, pero como nos estábamos divirtiendo tanto, lo dejamos pasar. Al salir del lago, fuimos al campamento para ver si encontrábamos a nuestro amigo, pero no había ni rastro. No podíamos llamarlo, por lo que solo podíamosesperar a que volviera.

Se hizo de noche y vimos una silueta a lo lejos. Fuimos corriendo a junto de ella por si era Carlos, pero cuando nos acercamos la silueta desapareció. Nos quedamos algo confundidos, así que volvimos al campamento, y lo que encontramos nos dejó a todos paralizados. En el suelo del campamento, se encontraba la cabeza ensangrentada y sin ojos de nuestro querido amigo, junto con un escrito con sangre que decía: “NO HAYSALIDA”

Absolutamente todos estábamos muy asustados y completamente paralizados. Despuésde llorar la muertede nuestro amigo, los demás querían salir del bosque lo antes posible,pero yo pensabaque lo mejor era esperarun poco más. Es cierto que yo también quería salir de allí, pero si Carlos murió intentando salir para coger cobertura, es posible que en este bosque haya alguien o algo que nos lo quiera impedir.

Aún después de escuchar mis teorías, Luis y Andrés, los dos más mayores del grupo, decidieron irse por su propia cuenta. Les dijimos que no fueran, pero estaban tan asustados que se cogieron de la mano y se perdieron en el bosque Cuando su silueta se hacía más pequeña, vimos una tercera sombra, algo más grande, aparecer en el fondo del bosque, la cual agarró a uno de los dos y se lo llevó. El otro, que no se distinguía si era Andrés o Luis, inició una carrera hacia nuestraposición,pero despuésde avanzar unos cuantos metros, la sombra apareció de nuevo y le golpeó, dejándolo en el suelo, totalmente inmóvil

Nosagrupamos todos,yllenos de valor fuimos a investigar elcuerpo. Alllegar, volvimos a estar temblando de miedo, pues vimos a Luis,aún vivo pero moribundo, con la barriga totalmente al descubierto y con la cabeza de Andrés dentro. Antes de morir, Luis soltó unas palabras que nos aterraron a todos al instante: “Esacosa no os dejará huir” , para posteriormente dejar este mundo Solo quedábamos tres, yo, Javier y Bruno. Javier y Bruno se pusieron a gritar de tristeza y dijeron que íban a intentar salir de ese bosque maldito. Yo seguía pensando que intentar huir era una muerte segura, pero peor era quedarme solo, por lo que les acompañé Fuimos silenciosamente, hasta que empezamos a ver movimiento en los arbustos, por lo que decidimos empezar a correr.

Estábamoscorriendo a nuestra máxima velocidad, y detrás nuestra apareció de repenteun animal,o lo que quiera que fuera esa cosa,yempezó a perseguirnos. Caminaba a dos patas, medía unos 3 metros y parecía una combinación entre un oso y un ciervo,perocon un color verdoso que locamuflaba en la naturaleza.Bruno se tropezó con una rama y se cayó al suelo. Javier y yo miramos hacia él y vimos como, llorando, suplicaba nuestra ayuda. No podíamos frenar, por lo que vimos a nuestro amigo siendo devorado salvajemente por esa cosa. La muerte de Bruno nos hizo ganar distancia con el monstruo, así que llegamos a la valla que anteriormente saltamos sin verlo. Cuando estábamos por pasar al otro lado, el monstruo llegó con la intención de saltar y cogernos a los dos, por lo que miré a Javi y me disculpé con él, para después empujarlo de vuelta al bosque Mientras que ese monstruo devoraba al amigo el cual yo mismo le serví, aproveché para acabar de saltar la valla y huir por fin de este maldito bosque

Ahora pasaron tres meses desde lo sucedido, y no hubo día donde no viera a ese monstruo devorándosea misamigos, en especial a Javier,elcual yo mismo traicioné por sobrevivir. Mi mente no resiste más; cada vez que los veo es como si volviera ese momento tan terrorífico. Quiero verlos de nuevo para disculparme por lo mal amigo que fui, es por eso que tengo una soga alrededor del cuello.

Adrián Núñez Gonzáles de 4º ESO

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