El Estado puede jugar un rol primordial en la promoción de mejores circuitos de comercialización para las familias campesinas, a través de la promoción de espacios de comercialización, y de mercados específicos, a través de la regulación de precios, e inclusive como agente comercializador. En diferentes contextos y países, una de las herramientas más comunes para el fomento de la comercialización, son las compras públicas en el marco de programas de lucha contra la desnutrición. Sin embargo, todavía no se han analizado en profundidad las compras de alimentos por el Estado a través de los distintos programas, proyectos y servicios de los gobiernos locales, regionales y nacionales.
El texto muestra los diversos esfuerzos que se realizan por lograr que los productores rurales accedan a la compra pública en Ecuador, Perú y Bolivia.