Primer Foro Petrolero. La explotación petrolera enel Caquetá: Leyes, riesgos – ventajas, compromisos by Secretariado Nacional de Pastoral Social/Cáritas Colombiana

MEMORIAS DEL PRIMER FORO PETROLERO. LA EXPLOTACIÓN PETROLERA EN EL CAQUETÁ: LEYES, RIESGOS - VENTAJAS Y COMPROMISOS

Vicariato Apost贸lico San Vicente - Puerto Legu铆zamo

MEMORIAS DEL PRIMER FORO PETROLERO. LA EXPLOTACIÓN PETROLERA EN EL CAQUETÁ: LEYES, RIESGOS VENTAJAS Y COMPROMISOS

Carrera 58 No. 80 – 87 Teléfono (571) 437 71 50 Fax (571) 437 71 71 www.pastoralsocial.org snpscol@cable.net.co Bogotá, agosto de 2012

ISBN: 978-958-57883-1-2 Título: La explotación petrolera en el Caquetá Director Monseñor Héctor Fabio Henao Gaviria Área de Desarrollo Institucional Observatorio de Realidad Animadora del Área de Desarrollo Institucional Rosa Inés Floriano Carrera Compilación Luz Marina Quintero Cely Diseño de cubierta Diego A. Quintero Gutiérrez Diseño editorial Julián Roa Triana Con el apoyo solidario de Catholic Rielief Services - CRS

CONTENIDO

Presentación Luz Marina Quintero Cely Observatorio de Realidad, Secretariado Nacional de Pastoral Social

Palabras del Padre Obed Ramírez Granada Administrador Diocesano, Diócesis de Florencia

Palabras del Mag. Alberto Fajardo Oliveros Vicerrector de la Universidad de la Amazonía

Palabras de Diana Carolina Tamayo Directora de la Unidad Territorial de Acción Social del Caquetá

Palabras de Edilberto Ramón Endo Secretario de Gobierno del Caquetá

Palabras de Mons. Francisco Javier Múnera Correa Obispo del Vicariato de San Vicente del Caguán y Puerto Leguizamo

Palabras de Germán Medina Triviño Gobernador del Departamento del Caquetá ___________________________________________ Introducción Luz Marina Quintero Cely Observatorio de Realidad, Secretariado Nacional de Pastoral Social

Política minero energética Hernando Castro Investigador del grupo Seguridad y Defensa de la Universidad Nacional de Colombia

Política de regalías Paula Zuluaga Investigadora del Instituto de Estudios Políticos y Relaciones Internacionales de la Universidad Nacional de Colombia

Contratación petrolera en Colombia Hernando Castro Investigador del grupo Seguridad y Defensa de la Universidad Nacional de Colombia

Impactos de la política petrolera Edgar Mojica. Unión Sindical Obrera de Ecopetrol

La actividad petrolera en el Caquetá: entre los riesgos y las oportunidades Sandra Jaramillo. Ecóloga de la Fundación Red Desarrollo y Paz del Caquetá

Petróleo ¿desarrollo o destrucción? Yolima Salazar. Directora Ejecutiva de la Vicaría del Sur

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Impactos sociales y ambientales de la explotación petrolera en el piedemonte Amazónico Roberto Ramírez Montenegro. Sociólogo, Profesor de la Universidad de la Amazonia

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Ventajas y desventajas de la actividad petrolera en el Caquetá: Propuestas de organización social

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Clausura Padre Obed Ramírez Granada Administrador Diocesano, Diócesis de Florencia

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___________________________________________ Anexos Anexo 1 Ponencia Impacto de la explotación petrolera en Colombia, elementos a tener en cuenta desde una mirada crítica, Edgar Mojica

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PRESENTACIÓN Primer Foro Petrolero. La explotación petrolera en el Caquetá: Leyes, riesgos – ventajas, compromisos “Una correcta concepción del medio ambiente no puede reducir utilitariamente la naturaleza a un mero objeto de manipulación y explotación”

os días 6 y 7 de octubre del año 2011 se llevó a cabo el Foro “La explotación petrolera en el Caquetá”, animado por la Iglesia Católica, con el objetivo de reflexionar con las comunidades del departamento los impactos sociales, económicos, políticos, ambientales y culturales de esta actividad extractiva en la región.

Durante la realización del Foro se abordaron diversos temas que buscan analizar el porqué de la creciente explotación de recursos minerales, especialmente hidrocarburos, en una zona tan rica en biodiversidad como es la amazonía colombiana. En esta línea, Hernando Castro1 analiza el tema de la política minero – energética del país basándose en el contexto de la geopolítica energética a nivel mundial, y en la creciente importancia de la extracción de recursos minerales en los países llamados “economías emergentes”, entre ellos Colombia. La actividad petrolera, y de extracción en general, está condicionada por la legislación nacional que ha tenido importantes cambios a través de la historia. A principios del siglo XX la actividad extractiva de hidrocarburos en el país era liderada por multinacionales como la Standard Oil y la Shell, que hacían los trabajos de exploración y explotación del recurso. En el año 1948 una manifestación de trabajadores petroleros conduce a la posterior creación de la Empresa Colombiana de Petróleos, más adelante conocida como Ecopetrol -nos explica Hernando Castro en su intervención-. En el año 2003 cambia el escenario legislativo y Ecopetrol pierde fuerza como empresa estatal explotadora y productora, con importantes repercusiones a nivel económico, político y legislativo para el país. La legislación nacional sobre la explotación de hidrocarburos y recursos mineros, tema abordado por Paula Zuluaga2 , actualmente está mediada por el

1 Investigador del grupo de Seguridad y Defensa de la Universidad Nacional de Colombia. 2 Investigadora del Instituto de Estudios Políticos y Relaciones Internacinal – IEPRI – de la Universidad Nacional de Colombia.

debate de la Ley de Regalías que modifica los porcentajes que deben pagar las empresas extractivas de recursos en el subsuelo colombiano, así como la distribución equitativa de estos dineros en los diferentes municipios del país. El boom, como se conoce a la creciente actividad de exploración y explotación petrolera que tiene lugar en diferentes regiones del país y del mundo, genera grandes expectativas de toda índole en las comunidades donde se está presentando. La población ha visto llegar a sus territorios campamentos, maquinarias y personal de empresas nacionales y multinacionales que hacen trabajos de exploración, sísmica, explotación y extracción de hidrocarburos, en ocasiones, sin consulta previa a las comunidades de la zona y sin tener las precauciones debidas con el medio ambiente; generando dudas en las comunidades sobre cuán conveniente es esta actividad y, en ocasiones, rechazo a ésta por el impacto ambiental y social que está generando. Estos temas son abordados por Edgar Mojica, Sandra Jaramillo, Yolima Salazar, Roberto Ramírez y por los representantes de las comunidades asistentes al Foro, desde enfoques diferentes que nos permiten tener un panorama amplio sobre la situación en el Caquetá. Por lo anterior, la Iglesia Católica del Departamento del Caquetá, en cabeza de Monseñor Jorge Alberto Ossa Soto (para la fecha Obispo de Florencia) y Monseñor Francisco Javier Múnera Correa (vicario apostólico de San Vicente del Caguán), con la participación de las pastorales sociales del departamento y del Secretariado Nacional de Pastoral Social, se dieron a la tarea de organizar este espacio contribuyendo a proporcionar a la comunidad información clara con la ayuda de personas que trabajan los temas acá priorizados, con el fin de que sea la misma población, que reside en las zonas objetivo de exploración y explotación, la que tome las decisiones sobre las actividades económicas que quieren que se realicen y prioricen en sus territorios. En esta actividad participaron como ponentes, representantes del sector académico, de los trabajadores y líderes comunitarios para dar a conocer la política petrolera colombiana, la política de regalías, los impactos de la actividad petrolera en el país y en el Caquetá, y los riesgos y las oportunidades de la exploración y explotación. Este primer Foro tuvo una asistencia de alrededor de 250 personas entre representantes del gobierno, estudiantes, representantes comunitarios y personas de todas partes del departamento, quienes durante dos días tuvieron la oportunidad de escuchar a las y los ponentes y dar a conocer sus inquietudes y ser escuchados en un espacio de diálogo y reflexión. De este primer Foro se obtuvieron grandes logros: primero, dar a conocer a la comunidad en general a qué se está enfrentando el país, y más exactamente esta región amazónica, con la creciente actividad petrolera y de explotación a la que le está apostando el gobierno. Segundo, conocer cuáles son los impactos sociales, económicos, ambientales y políticos a los que la comunidad debe

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hacer frente para aprovechar los beneficios de esta actividad extractiva y tener planes de contingencia frente a la realidad que los interpela. Tercero, generar reflexión frente al derecho y la responsabilidad que tiene la comunidad para decidir qué acciones tomar frente a este tema y qué herramientas posee para exigir sus derechos a ser consultados previamente por las empresas extractivas sobre la realización de este tipo de acciones en sus territorios. Y por último, generar un diálogo entre las diferentes comunidades para socializar sus experiencias y alternativas de acción que han logrado forjar alrededor de la defensa del territorio y la dignidad. Con esta actividad la Iglesia Católica en el país responde a su deber de acompañar a las comunidades afectadas en su dignidad e integralidad por cualquier acción que ponga en riesgo su vida, su cultura y la naturaleza como don de Dios. Así como se destaca el acompañamiento de la Iglesia en la formación y toma de conciencia de las comunidades, ayudando a informar de manera responsable y promulgando el diálogo respetuoso entre los diferentes sectores sociales. Este diálogo pretende ser el primero de muchos ejercicios que permitan fortalecer las capacidades de decisión en las comunidades, generar responsabilidad de las empresas frente a las comunidades y el medio ambiente, colaborar con la formulación de políticas públicas acordes con las realidades del país y propender por una mayor convivencia entre economía, desarrollo y medio ambiente, en la búsqueda de un mejor futuro para todos y todas.

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PALABRAS DEL PADRE OBED RAMÍREZ GRANADA Administrador Diocesano, Diocésis de Florencia

a Iglesia en su misión profética, tiene el compromiso y la responsabilidad de llevar al pueblo de Dios, a nosotros confiado, a una vida con dignidad, justicia y equidad, de tal manera que en el desarrollo de su misma vida tenga como tarea principal la búsqueda de la salvación.

Por tal razón, toda actividad que afecte estas dimensiones es de interés y de análisis profundo para la Iglesia, de modo que desde un discernimiento sereno, pueda orientar a la comunidad desde la legalidad y desde su legítima responsabilidad por la defensa de la dignidad humana y del territorio. En el Departamento del Caquetá, el boom del petróleo ha generado muchas expectativas, esperanzas, temores, pero poco se ha orientado a la población en el tema; es por esto que con esta preocupación Monseñor Jorge Alberto Ossa Soto (para la fecha obispo de Florencia) manifestando esta preocupación a Monseñor Francisco Javier Múnera Correa, vicario apostólico de San Vicente, se propusieron realizar el Primer Foro Petrolero en el Caquetá, dejando esta tarea a las Pastorales sociales, tanto de la Diócesis como del Vicariato Apostólico, pidiendo la orientación, apoyo y acompañamiento al Secretariado Nacional de Pastoral Social, quienes aceptaron hacer parte de esta iniciativa. Desde la reflexión en equipo se definió desarrollar el foro con la siguiente temática: 1 Política Petrolera de Colombia. 2 Contratación petrolera en Colombia. 3 Política de Regalías. 4 Impactos de la política petrolera. 5 “La actividad petrolera en el Caquetá: entre los riesgos y las oportunidades”. 6 Ponencia Vicaría del Sur: “Petróleo ¿desarrollo o Espacio de trabajo en grupo, donde se escuchen las preocupaciones y expectativas de la comunidad. Con esta temática fueron convocadas las Parroquias de las dos jurisdicciones eclesiásticas del Caquetá, las Instituciones, las organizaciones civiles y las ONG,

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ONG, a participar del Foro, quienes manifestaron en su gran mayoría la aprobación y su participación. Realizar el primer Foro Petrolero en el Departamento nos permite abrir un espacio de reflexión y encaminarnos en la construcción de una ruta metodológica que oriente al pueblo caqueteño en la construcción de su desarrollo, de la paz y de su dignidad. Ahora con el apoyo decidido y el arduo trabajo del Observatorio de Realidad del SNPS, presentamos a Usted las memorias de este Foro, que serán de utilidad en la reflexión comunitaria y una herramienta en el discernimiento hacia el siguiente paso. Con nuestra gratitud a Monseñor Jorge Alberto Ossa Soto, quien fue el que generó esta sentida necesidad, y dinamizó hasta el último minuto de su presencia en la Diócesis, el Foro; a Monseñor Francisco Javier Múnera Correa, a la Universidad de la Amazonía, por su apoyo y compañía en esta iniciativa, al Secretariado Nacional de Pastoral Social, a los equipos de Pastoral Social de la Diócesis de Florencia y el Vicariato Apostólico. Dios nos ilumine para que este primer paso dado, sea para encontrar un camino seguro a seguir donde prime la verdad, el desarrollo y el bien común. En Cristo Jesús nuestro maestro.

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PALABRAS DEL MAG. ALBERTO FAJARDO O. Vicerrector de la Universidad de la Amazonía

e manera fortuita, casi accidental, se descubrió un importante producto natural con reservas limitadas, que debido al origen evidenciado, así como las características físicas, se le dio el nombre de petróleo (“aceite de piedra”).

Una vez comprobado algunas de sus propiedades y sobre todo por la variedad de compuestos que podrían ser obtenidos a partir de ese “aceite”, comenzó toda una estrategia de buscar cada vez más aplicaciones, adicional a la principal aplicación inicial, como fue la de obtener combustibles. Con el avance de la ciencia y con los desarrollos de novedosas técnicas de separación y obtención tendientes a un mejor aprovechamiento de este recurso, se comenzó a encontrar cada vez más aplicaciones y más utilidades. Con los avances científicos, es posible indicar que prácticamente no existe hoy en día un sector productivo que no dependa del petróleo, y allí incluimos a la alimentación, la salud y todos aquellos sectores que posibilitan mejorar las condiciones de vida de nuestras poblaciones. Tan importante ha sido este recurso para la humanidad, que ha sido motivo de guerras. De guerra, entre aquellas regiones o países productores y los no productores. Ha sido en los últimos 100 años el motor de la economía a nivel mundial. Colombia con su situación geográfica y estratégica, desde luego, ha tenido esa bendición como lo decía el padre Carlos, de contar con este recurso que ha posibilitado algunas mejores condiciones de vida para nuestra población. Sin embargo, es evidente que la explotación y aprovechamiento genera también algunos procesos complejos no solo desde el ámbito económico, por el incremento de recursos, sino principalmente y lo que más nos interesa tal vez en el ámbito social, debido al desequilibrio social y ecológico que origina. En numerosas partes la explotación petrolera, va unida a la generación de innumerables dificultades, que han sido solucionadas de alguna manera, o por lo menos, han intentado ser atendidas de diversas formas. Sin embargo podemos decir que en las regiones donde existe una explotación petrolera, no existen sociedades perfectas. Todas esas experiencias en otras latitudes, son las que motivan que hoy estemos aquí reunidos, para hablar acerca de cómo es posible atender un boom petrolero que nace en el Caquetá en años recientes. Desde el punto de vista económico, podría presentarse como una salvación para un región tan olvi-

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dada por el gobierno central; salvación para numerosas dificultades, pero debemos también tener en cuenta que de esta nueva situación, pueden surgir también muchos problemas. Este es un espacio que nos permite analizar todas aquellas condiciones que pueden ser favorables, pero también las que puedan resultar desfavorables para nuestro desarrollo. La Universidad de la Amazonia, en cabeza del Magister Leonidas Rico Martínez, presenta a ustedes un saludo de bienvenida, esperando que las discusiones y las conclusiones resultantes de este importante foro, contribuyan en mucho para el desarrollo regional. Es necesario desde luego agradecer el inmenso interés que tiene la comunidad eclesiástica en adelantarse a las dificultades que seguramente nosotros podremos estar viviendo ya en un futuro muy cercano. Bienvenidos a su universidad, a la Universidad de la Amazonia. Muchas gracias.

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PALABRAS DE DIANA CAROLINA TAMAYO Directora de la Unidad Territorial de Acción Social del Caquetá

uchas Gracias, Padre, Monseñor y todos los miembros de la mesa que nos acompañan, buenos días. A ustedes participantes, muy buenos días.

Muchos se preguntaran porqué Acción Social se ve tan implicado en un tema como el petrolero cuando nosotros manejamos programas sociales. Pues bien, acción social tiene una misión clara y es movilizar a Colombia para superar la pobreza extrema. Igualmente tenemos que avanzar en la reconciliacion y liderar la agencia de cooperación internacional del país. Bajo esa misión que ha sido entregada a los servidores públicos, y reitero, como servidores públicos estamos para servirle a la comunidad, y fue en un dialogo con Monseñor Jorge Alberto Ossa, que me manifestaba su preocupación por lo que estaba sucediendo en la zona sur del departamento, me decía qué vamos a hacer porque la pobreza allá es alta, los problemas sociales son muy representativos. Esa era la pregunta de Monseñor, manifesté tenemos que trabajar, me comprometo a eso y ustedes saben palabra ante Monseñor hay que cumplirla; entonces eso es parte de porqué el Padre Cubillos “Muchas gracias”, pero realmente es cumplir la palabra ante Monseñor Jorge Alberto que en su momento me dio a conocer esa situación. ¿Qué se solicitó ante un espacio legal que se llama concejo departamental de política social? Se solicitó que este tema, el tema de la llegada de lo que muchos llaman boom petrolero, se analizara bajo el esquema de política pública. Allí surgió la idea y continúo la pastoral social liderando el proceso que hoy estamos aquí trabajando. Hoy podemos decir que este primer foro es una iniciativa que debemos seguir trabajando, aquí debe surgir el compromiso de que este es el primero, el inicio, pero lo que nos falta recorrer es mucho, y a todos. A todos son, comunidad, instituciones públicas y privadas, Estado colombiano en todas sus esferas, aquí también están presentes todas las petroleras; Yo he tenido contacto con las cinco petroleras que están en este momento en el territorio, y todas han manifestado su interés y su deber de responsabilidad social, todas han estado interesadas. Aquí me acompaña en este momento, en representación de Pacific

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Rubiales, Paola, ella está muy pendiente, sus jefes le han dicho por favor este aqui. Igual Emerald ha mandado un cordial saludo a todos ustedes, ellos no están aquí en este momento presentes pero están en este momento clausurando un evento con líderes de San Vicente del Caguán que están en Boyacá, y están trabajando el tema de responsabilidad social. También lo está UPECOL y CANACOL, han estado muy pendientes de todo. ECOPETROL, que hizo su visita hace aproximadamente dos semanas quienes estuvieron aquí, e hicieron también su presentación ante el gobierno departamental, ante el gobierno municipal de manera responsable. De esa responsabilidad también quiero manifestarle a la comunidad, este foro tiene unos objetivos, hablamos con el Padre esta mañana. Uno de los primeros objetivos es que este evento sea el inicio de un proceso de formación, de conocimiento, lo decía la Universidad al inicio de este Foro, es importante que todos tengamos claro hacia dónde vamos. Un segundo objetivo es que este Foro no termine en un foro; sino que sea un compromiso a partir de este momento para trabajar y participar. Quienes no participen están por fuera del proceso de cambio, así que tenemos que lograr representar alguna comunidad, participar en un espacio, y que ese espacio sea el que concrete las iniciativas de política pública en el departamento. Reitero a todos ustedes que a nivel municipal existen los comités municipales de política pública, llamados . Por favor, en sus municipios trabajen esa idea, cómo participo, pues en representación de mi comunidad puedo participar en esos concejos de política social, ¿para qué? Para que mi comunidad se vea representada y cuando tomen decisiones de política pública beneficie, o por lo menos, se analice la situación de mi comunidad. Igual, este espacio tiene que llevar a que estos representantes tengan participación en el concejo departamental de política pública, allí se analiza todo el tema y uno de los temas se llama economía, y dentro de economía está el tema petrolero, así que los invito que desde ya vayamos analizando la idea a seguir trabajando. Para ello, me refiero o traigo a colación unas palabras de la revista Semana, donde en uno de sus apartes define claramente como se está moviendo en el país en este momento; y hacen referencia así bien fue en la prehistoria los metales y también la edad de piedra existió, en este momento nosotros estamos viviendo la edad de los hidrocarburos. No hay que desmentirlo, lo decía claramente el doctor, nosotros aquí hasta para los alimentos, los chicles algunos son a base de petróleo, para vestirnos muchos de nosotros tenemos utensilios que vienen del petróleo, la energía viene del petróleo. No hay que desconocerlo, ese petróleo trae muchos bene-

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ficios a la humanidad pero si no sabemos manejar los recursos, porque como no participamos en la decisión de qué se va hacer con los recursos, después eso nos va a afectar a nuestra sociedad y posiblemente a nuestra familia o nuestra integridad. Por eso es que así como es de bueno tengo la obligación y el deber de participar en la toma de decisiones de esas cosas tan buenas. Me refiero también a unas palabras de nuestro señor ex ministro de minas, el Doctor Carlos Rodado donde dice, “pese a la llegada masiva de petroleras a Colombia y el crecimiento de la producción, Colombia aún está lejos de una bonanza, pero va en el camino indicado”. Ese camino es parte de lo que estamos haciendo hoy, construyendo camino, y nos tenemos que preparar a las posibles autopistas que encontremos, pero también a las trochas que tendremos que caminar. Porque decimos “llegaron las petroleras ahora si nos van a hacer la vía, nos van a hacer el puesto de salud, lo van a mejorar, nos van a hacer la escuela”. Eso es responsabilidad del Estado Colombiano y el Estado tiene los mecanismos, se llaman regalías, estas ingresan al presupuesto. Pero las regalías se ejecutan en la medida que la comunidad defina en qué quieren que se ejecuten; y los espacios creados son esos espacios de concejos de política social. Por favor, también vuelve a colación el porqué tengo que participar, porqué tengo que tomar decisiones, y es porque allí es donde se define en qué proyectos se van a invertir. Todos ustedes podrán observar cuando viajan hacia el Huila, en Altamira, hay una galería en el triangulo que es un monumento al despilfarro de las regalías, ese es un mal ejemplo. Porque un alcalde en su momento, tomó la decisión unilateralmente de presentar un proyecto de ejecución de regalías y desarrollaron una obra que nadie visita. Otra obra, que muchos habrán visto y observado claramente, está en Hobo, el de las bizcocheras; les hicieron un monumento al no uso, al desperdicio, de las regalías. El Señor alcalde tomó la decisión de sacarlas del parque y llevarlas a un sitio donde nadie iba a parar, ni siquiera ellas querían ir. Hoy nadie está allá, ¿por qué? Porque la misma comunidad permitió en su momento la presentación de ese tipo de proyectos, porque la comunidad no participó, ni siquiera los que se iban a beneficiar participaron, y hoy son monumentos que no sirven. Pero también hay ejemplos que sobresalen, y los tenemos en el departamento del Meta, el municipio de Castilla la Nueva, que hoy es ejemplo a nivel país de que sí se puede trabajar con la participación de las comunidades, en representación de su alcalde, y con el apoyo de las regalías y el apoyo de la responsabilidad social de las petroleras para lograr proyectos de inversión que beneficia a las comunidades. El petróleo es un recurso no renovable, en una cantidad interesante que dura un número determinado de años, esa posibilidad de ingresos es de un tiempo

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específico, y ese tiempo específico se agota y puede beneficiar a una o dos generaciones máximo. Pero la gente se dedica solamente a que la petrolera es la que genera empleos, y se dedican a trabajar sólo para la petrolera. Resulta entonces que olvidan sus raíces, y sus raíces son en el caso nuestro ganadería, no podemos olvidarnos; somos la puerta de la amazonía, tenemos unos elementos de riqueza en el Caquetá, estas tierras son hermosamente fértiles en la medida en que no las acabemos, que no tumbemos y luego sembremos cosas que no son de la región, que no se dan o si se dan es por una o dos cosechas y luego se acabó. Ahora como está la petrolera, dejamos de producir lo que hacíamos, y solo queremos trabajar con la petrolera y cuando ellas se van para quien nos quedamos ofreciendo mano de obra? para nadie. La invitación es que si las petroleras hacen presencia hay regalías, y que éstas sean complementarias a la producción local que se debe continúar, no se abandonen, la ganadería, la piscicultura también, la agricultura, aquí hay productos exóticos, algunos que sólo se dan en esta parte del mundo y no en ninguna otra parte. Que son añorados por el resto de la humanidad, pero lo desconocemos lo abandonamos y ahora con el boom olvidan eso. Por favor, los invito, nunca olvidemos nuestras raíces, de eso dependerá nuestro futuro y el futuro de lo que más nos duele, nuestros hijos. Muchísimas gracias por la oportunidad, desde Acción Social todo el sentido de responsabilidad social para trabajar con ustedes, igualmente el dialogo la interlocución con el sector petrolero existe, y están en total disposición de trabajar. Muchas Gracias.

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PALABRAS DE EDILBERTO RAMÓN ENDO Secretario de Gobierno del Caquetá

uy buenos días para todos, a Monseñor Francisco Javier Múnera quien nos acompaña y una de las personas que ha tenido la iniciativa para este importante Foro, al Padre Obed Ramirez Granada, administrador de la diócesis de Florencia, al Padre Carlos que es quien está aquí detrás de todo, tras bambalinas, porque realmente muchas veces desconocemos a quienes se echan al hombro todos estos procesos; a la doctora Diana Carolina Tamayo, directora de la unidad territorial de Acción Social, al doctor Alberto Fajardo que hoy representa a la Universidad de la Amazonia, al señor defensor del pueblo Álvaro Castelblanco, bienvenido, a todos los de la Pastoral Social, a la vicaría del Sur, a los diferentes medios de comunicación que nos están acompañando y que han entendido la importancia de este Foro, bienvenidos, y por supuesto a todos ustedes los que nos están acompañando, que vienen de los diferentes municipios; quienes han venido en representación de las diferentes petroleras que hoy hacen el ejercicio en el territorio de nuestro departamento. Reciban un cordial saludo de parte de nuestro señor gobernador el Doctor Germán Medina Triviño, esperamos que una vez llegue el vuelo cumplido de la ciudad de Bogotá, nos pueda estar acompañando. Él estaba esta mañana en el aeropuerto angustiado porque no podía venir pero, aquí estamos, lo importante es que asiste la voluntad del gobierno departamental y desde luego ha estado muy pendiente y que ustedes saben ha tenido una interlocución directa, no solo con las diferentes empresas petroleras, sino también con el alto gobierno nacional para que haya interlocución valida, para que las empresas petroleras vayan de la mano con la institucionalidad de nuestro departamento del Caquetá. Porque de ninguna manera las empresas petroleras, como lo decía la Doctora Diana, van a reemplazar las obligaciones que constitucionalmente tiene el Estado y eso no se pretende. Muchas veces se logra confundir, o las personas y las comunidades creen que llegaron las empresas petroleras entonces llegó la solución a todos nuestros problemas, y es un error pensarlo así. Por supuesto que nosotros no desconocemos que van a ser uno de nuestros aliados importantes para el desarrollo en el departamento del Caquetá, sin olvidar nuestra vocación agrícola y pecuaria que tiene que seguir perdurando por parte de todos y cada uno de los Caqueteños. Realmente a nosotros nos complacen dos cosas; una, que el Foro haya sido convocado por la Iglesia Católica, porque esto de una u otra forma le da

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neutralidad, seriedad a la convocatoria y no se va a prestar para ninguna clase de suspicacias. Porque muy seguramente si se hubiera convocado por cualquier otro sector, se hubiera prestado para cualquier tipo de suspicacia máxime cuando estamos ad portas de un proceso electoral. Segundo, nos gusta que se haya hecho aquí porque este es un evento académico y así tienen que seguir siendo los foros que realicemos en torno a la explotación petrolera en el departamento del Caquetá. El tema del petróleo en el departamento no es nuevo, de pronto es nuevo para algunos que no tenemos la cultura petrolera, por supuesto que no. La mayoría de las personas somos neófitos en el tema, pero en el año 1952, la SHELL ya había realizado algún tipo de exploración en nuestro departamento, más concretamente en San Vicente del Caguán y ya se avizoraba que había importantes reservas en nuestro departamento; solo que esa vez, en ese periodo de tiempo, los pesados (hidrocarburos) no tenían precio en el mercado. Hoy el petróleo pesado o, como vulgarmente lo pudiéramos decir, el petróleo biche, el que no ha madurado suficiente, el que tiene menor grado API1 ya tiene precio en el mercado, entonces se volcán las empresas petroleras hacia el departamento del Caquetá; porque los crudos que se han encontrado en nuestro departamento son crudos pesados. En estos momentos la única empresa petrolera que está haciendo explotación como tal en nuestro departamento es la empresa Emerald Energy que cuando ingreso, en el año 2006, era de los británicos y hoy paso a manos de los Chinos, haciendo explotación en San Vicente del Caguán. Estamos hablando en este momento de un promedio de 1500 barriles diarios, es el promedio de la explotación que está haciendo. Pero miren también como se hacen las cosas, una vez se avizora esta reserva en el departamento del Caquetá -y ya se nos dice incluso por parte de funcionarios del gobierno que nosotros estamos sentados en una taza de petróleo- siendo una de las mayores reservas en el país, y hay una nueva ley de regalías entonces también nos enfrentamos a una nueva realidad y esta nueva ley lo que permite es que departamentos no productores como en este caso es, o era, el departamento del Caquetá, puedan tener acceso a recursos o regalías. Porque había una inequidad en el país, y era que los departamentos y municipios productores de petróleo tenían grandes ingresos y recursos por cuenta de las regalías, precisamente por ser productores; y departamentos como el

1. La gravedad API, por sus siglas en inglés American Petroleum Institute, es una medida de densidad que describe cuan pesado o liviano es el petróleo comparándolo con el agua, entre menos grados API es más pesado. El Petróleo es clasificado en liviano, mediano, pesado y extrapesado, de acuerdo con su medición de gravedad API. En: <http://widman.biz/Seleccion/gradosapi.html> consultado el día 9 de marzo de 2012.

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Caquetá, entre otros, por su economía, se quedan mucho en proyectos porque no tenían la forma de apalancarse con recursos de regalías. Sin embargo, aquí no podemos crear una falsa expectativa, y la nueva ley de regalías que nos cobija está sujeta a los proyectos que se presenten por parte de los entes territoriales, los alcaldes y el señor gobernador, por parte del departamento del Caquetá. Es decir, no es que estos recursos se nos van a colocar en una caja menor y entonces nos van a ingresar unos recursos y con ellos se va a hacer lo que se quiera, porque precisamente con los recursos de regalías, y a buena hora el congreso rediseño esta política, lo mismo que el gobierno nacional, porque lo que había era un muy alto grado de corrupción con los recursos de las regalías. Y precisamente cuando ya entremos a analizar -que creo es la esencia y es lo que todos tenemos que estudiar- los impactos positivos y negativos de la inversión petrolera en el departamento del Caquetá. Uno de esos impactos negativos que puede tener la inversión petrolera, es que puede elevar el grado de corrupción por parte de los administradores públicos y ante eso, entonces, es el llamado de que todos tenemos que estar a la par, muy pendientes de qué es lo que se va a hacer con los recursos adicionales que le van a llegar a nuestro departamento. Pero insistimos así lo viene haciendo nuestro señor gobernador. Una vez se avizoro la posibilidad del petróleo en el departamento del Caquetá, yo en todos los discursos le he escuchado al señor gobernador, ojo no nos dejemos desenfocar de nuestra vocación agrícola y pecuaria porque eso sí sería peligroso. Cambiar esa vocación, lo que nosotros sabemos hacer y lo que siempre hemos hecho, ahora no podemos llegar entonces, y dejarnos arrastrar por el boom del petróleo, y que queden nuestros campos sin quien los cultive. Que queden nuestros campesino sin que encuentren quien los ayude en la labor diaria, eso sí sería más peligroso, ir a defender única y exclusivamente de lo que después nos brinde el Estado a través de los recursos de las regalías. Por eso aquí también tiene que haber un compromiso de todos. Muchas gracias por estar acá, uno aspiraría a que un tema como este que es tan importante, pues la verdad, tuviera mayor participación, sin embargo, creo que estamos las personas a las que nos interesa el tema. Yo lo felicito Padre Carlos la verdad, porque eso incluso allá peleó, y les tengo que confesar a ustedes, en el concejo departamental de política social se puso serio y dijo “es que lo tenemos que hacer” y aquí está, es un hecho. Creo que cuando nos proponemos hacer estos ejercicios juiciosos vale la pena hacerlos, desde el gobierno departamental reciban el máximo apoyo un abrazo y que de este ejercicio saquemos el mejor provecho.

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Incursión petrolera en el departamento del Caquetá Es conocido por todos las serias dificultades de orden público que este año se han registrado con las empresas de exploración y explotación petrolera, y el esfuerzo mancomunado e interinstitucional coordinado con las fuerzas vivas del departamento para superar esta problemática que por cierto no es fácil. Sea esta la oportunidad para evaluar el impacto económico, político, social y ambiental de la explotación petrolera en la región y que de este debate sobre la actividad petrolera podamos identificar beneficios e implicaciones en la sociedad Caqueteña. Haciendo memoria podemos recordar que para el año 2006 la empresa británica Emerald Energy, hoy propiedad de los chinos, inicia operaciones en sísmica en el caserío los pozos jurisdicción del municipio de San Vicente del Caguán; para el año 2009 esta empresa inicia la explotación del crudo pesado el cual es transportado hacia diferentes partes del país. Hoy la empresa tiene problemas de operación por presiones ejercidas por grupos al margen de la ley (FARC). La empresa Alange, hacia el año 2010, realizó exploración y explotación de este hidrocarburo en la inspección de Yurayaco del municipio de San José del Fragua, pero cerró sus operaciones aduciendo problemas de orden público. Esta operación ha sido retomada por la empresa Pacific Rubiales que está ad portas de iniciar la explotación. Para el 2011 C&C Energy, inició operaciones de exploración en el municipio de Puerto Rico. Cebe mencionar que la empresa Ecopetrol, tiene proyectado ingresar a la zona que comprende los municipios de Cartagena del Chairá y Solano, más exactamente en la zona entre los ríos Caguán, Orteguaza y Caquetá. También se tiene conocimiento que la próxima etapa de exploración petrolera se realizará en los municipios de El Paujil, La Montañita y Florencia, información que suministró la Agencia Nacional de Hidrocarburos. Así las cosas el departamento del Caquetá se avizora como una de las regiones con mayores reservar en materia de petróleo crudo. En relación con los impactos que esta actividad puede generar a nivel regional se pueden destacar los siguientes:

Positivos: 1 Industrialización. 2 Mayores recursos para inversión. 3 Posibilidad de empleo para mano de obra tanto calificada como no.

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Negativos: 1 Daño ambiental irreversible (dragas en el río, erosión de terrenos, derrames de crudo a los afluentes hídricos entre otros). 2 Elevación del costo de vida. 3 Daños en las vías por mayor tránsito de vehículos pesados (las empresas se comprometen en realizar mantenimientos periódicos de las vías). 4 Desestímulo a la vocación agrícola. 5 Alteración del orden público 6 Mayor población flotante 7 Aumento de problemas sociales.

Edilberto Ramón Endo

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PALABRAS DE MONS. FRANCISCO JAVIER MÚNERA CORREA Obispo del Vicariato de San Vicente del Caguán y Puerto Leguizamo

uy buenos días a todos y todas las participantes a este Foro. Un saludo muy cariñoso a los convocados que han sido, en primer lugar, todos los miembros de nuestros equipos pastorales (pastoral social y de todos los ámbitos de la pastoral de todas nuestras parroquias en la Diócesis de Florencia y del Vicariato Apostólico) a nombre del padre Obed Ramírez, administrador diocesano de la Diócesis de Florencia y del mío propio, les expresamos una cordialísima bienvenida y un sincero agradecimiento a los convocados y a los invitados especiales, que son todos ustedes, quienes nos honran con su presencia, con su interés, con su deseo de unir esfuerzos, de estar en comunión para enfrentar juntos este gran desafío que tiene nuestro departamento frente a todo el tema petrolero y minero. Un saludo a todos los miembros de la mesa principal, y a todos los que ya han expresado sus palabras; les agradezco sinceramente el interés y el apoyo con que nos han respaldado. Saludo muy especial a quienes nos acogen en esta casa, la Universidad de la Amazonia, al señor rector, a los docentes y estudiantes. Gracias al Doctor Alberto Fajardo por sus palabras y por ofrecernos la Universidad y la academia en este espacio tan significativo. Saludo y doy la bienvenida a quienes nos han permitido realizar este evento: el Secretariado Nacional de Pastoral Social -Cáritas Colombiana-, en la persona de Monseñor Héctor Fabio Henao, su director, y al equipo de Incidencia y del Observatorio que nos acompaña aquí, a ellos la bienvenida. De igual manera a las dos Pastorales Sociales de la Diócesis de Florencia y del Vicariato Apostólico de San Vicente y de Puerto Leguizamo, en la persona de los Padres Carlos Cubillos y José María Córdoba y sus respectivos equipos. Un saludo cariñoso de bienvenida a cada uno de los conferencistas que tan diligente y responsablemente han querido unirse para apoyarnos en este encuentro, que con seguridad nos ayudará a cada uno de nosotros con sus respectivas ponencias, ellos nos permitirán dar una mirada amplia y generosa a esta realidad tan nueva para la mayoría de nosotros.

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Luego, un saludo igualmente a todas las demás instituciones que se vinculan con nosotros en este evento, al Comité Internacional de la Cruz Roja, a la Defensoría del Pueblo, a Acción Social y a todas las organizaciones sociales, y de modo muy especial a los medios de comunicación, la emisora Armonías del Caquetá, Solita Estéreo, y Ecos del Caguán, la voz de la vida; estarán en varios momentos entrelazadas ayudando para que parte de los avances y reflexiones de este Foro lleguen a nuestras comunidades simultáneamente. Además, saludo a todos los participantes de los distintos medios de comunicación sociales de nuestro departamento, televisivos, hablados y escritos. Por último saludo con cariño y doy la bienvenida en la persona de la doctora Paula Areda, a todos los representantes de las distintas petroleras que hacen presencia en nuestro departamento y que se vinculan a este evento para escuchar, para conocer y para dar también su voz y su presencia. El sentido y objetivo de este Foro, quiero sencillamente expresarlo, es un espacio que nos va a permitir orientarnos, que nos va a ayudar aquí, a todos los presentes, para entender mejor los desafíos inmensos que tiene para nuestro departamento este tema, esta realidad no solo petrolera, sino minera. Y nos va a ayudar a todos nosotros para que seamos capaces, esa es la tarea, de apoyar a nuestras comunidades para que en cada uno de los lugares nosotros asumamos una posición responsable que nos permita a todos afrontar con claridad este tema. Es un primer ejercicio, abrimos camino, la Doctora Carolina Tamayo lo expresaba, unas veces toca abrir trocha. Esperamos que valga la pena continuar compartiendo, porque nos espera un largo y no fácil camino, ojalá que las expectativas que traemos todos los participantes puedan quedar en un muy alto grado satisfechas. Ojalá que salgamos de acá con una visión más clara y concreta del panorama petrolero y minero que le corresponde enfrentar a nuestro departamento, ubicado en este rincón precioso de la Amazonia colombiana. Espero, y a eso los invito, que podamos generar compromisos sólidos y estables para seguir trabajando este tema y estos desafíos para nuestra región. No puedo finalizar sin recordar en primer lugar que estamos en un lugar muy significativo que nos ofrece la Universidad de la Amazonia. Estamos en este auditorio que lleva el nombre de un gran Obispo misionero que sirvió con pasión a la causa de este departamento, y de toda nuestra región, se trata de Monseñor Ángel Cuniberti. Quiero recordar de modo especial, que desde hace 60 años, ese primer grupo de misioneros y misioneras que han enfrentado y continuado con la misión de aquellos heroicos capuchinos y que han contribuido enormemente al desarrollo de este departamento. Por eso veo muy importante, muy valioso, que su presencia y su memoria este viva desde la lejana Turín donde se encuentra.

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Él nos puede acompañar, nos hace bien a todos tenerlo aquí presente. Es un hombre que se entregó con pasión a las causas del Caquetá, de la educación, de esta universidad. No puedo dejar de recordar con inmenso cariño y gratitud a Monseñor Jorge Alberto Ossa -hasta agosto Obispo de esta diócesis de Florencia, y en la actualidad Obispo de Santa Rosa de Osos-, quien colaboró con la idea, con la oportunidad, de realizar este Foro -y lo recordaba la Doctora Diana Carolina Tamayo-, surgió de modo especial en que hizo suyas la preocupaciones, inquietudes y sufrimientos de las comunidades de la zona sur del departamento, frente a toda la inminencia del tema petrolero, de todo lo que se venía con la explotación petrolera. Él se mantuvo siempre abierto y dispuesto a buscar de una manera concertada la generación de espacios que nos permitieran aportar en esta construcción común, por eso quiero recordarlo con cariño y gratitud. Él personalmente está muy feliz que este Foro se haya podido realizar y gracias a Dios que lo estamos realizando. Quiero entonces, concluyendo, dar apertura a este espacio, animado por la Diócesis de Florencia y el Vicariato de San Vicente de Puerto Leguizamo, que nos permita como el tema lo indica, formarnos una visión amplia gracias a la ayuda de ustedes señores y señoras conferencistas; pero, que nos permita sobretodo, generar compromisos y responsabilidades comunes para cuidar esta linda tierra, está linda creación, este espacio de Amazonia que tenemos y que es la casa de Dios en la que nos ha puesto a todos a servir y a cuidar. Sean todas y todos bienvenidos, que el espíritu del Señor y la intersección maternal de nuestra Señora la Virgen del Camino, bendiga y acompañe a todos nosotros y haga fructíferos los trabajos de este Foro. Muchísimas Gracias.

Monseñor Francisco Javier Múnera Correa

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PALABRAS DE GERMÁN MEDINA TRIVIÑO Gobernador del Departamento del Caquetá

uiero saludar de manera muy especial a Monseñor Francisco Javier Múnera, Obispo del Vicariato Apostólico de San Vicente y Puerto Leguízamo; al Padre Obed Ramírez, Administrador de la Diócesis de Florencia; al Padre Carlos Cubillos, la persona que logró la organización de este Foro; y a todos y cada uno de los conferencistas y asistentes.

Hoy en el departamento del Caquetá, como en varias regiones del país, hemos venido enfrentando lo que nosotros denominamos el boom petrolero. Un boom en el cual, en todos y cada uno de los escenarios que hemos tenido la oportunidad de hacer presencia y hablar con nuestras comunidades, hemos referido la necesidad de bajarle un poquitico el volumen, ya que el Caquetá no puede perder su horizonte de departamento con vocación ganadera y vocación agrícola, [vocaciones] a las cuales, desde que llegué a la gobernación del Caquetá, les hemos venido apuntando. Con las cadenas productivas del departamento hemos incursionando fuertemente en el caucho, acreditado por la Goodyear de los Estados Unidos, y el cual necesitamos seguir cultivando para seguir siendo competitivos; ya que la producción que hoy tenemos no nos alcanza para poder complacer el mercado que necesita de ese caucho. Hoy, nos estamos perfilando en una cadena importante que es la del cacao, con un producto de excelente calidad, que nos convertirá, a futuro, en un departamento productor; hoy a través de la casa Luker y de las diferentes asociaciones que existen en los municipios, hemos venido impulsando ese cultivo y paralelo a ello, el cultivo de la caña panelera. Hoy producimos el 15% de la panela que estamos consumiendo los caqueteños, es decir que el 85% lo estamos importando de otras regiones del país. Así en el Ministerio de Agricultura digan que esa es una línea que van a impulsar, nosotros tenemos que impulsarla con nuestros propios recursos, sin descuidar por supuesto el tema ganadero. Tema que cuando llegamos a la gobernación encontramos en el Plan de Desarrollo y que lo adoptamos en el plan nuestro para buscar que la ganadería deje de ser extensiva y pase a ser una ganadería tecnificada y productiva, junto con sus derivados.

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Sobre el tema de los recursos del Sistema General de Regalías, los gobernadores, hemos dejado lista una ley que se va a aprobar en el Congreso con mensaje de urgente antes del 30 de noviembre o a mediados de diciembre [del año 2011], que permitirá que esos recursos lleguen de la mano de unos procesos, tal como lo concibió el legislativo, y que es el interés del gobierno nacional. Retomando, cuando digo que hay que bajarle el volumen al boom petrolero, es por eso, porque aquí en lugares donde han llegado los bloques petroleros, a través de las diferentes empresas que han tenido la concesión de la Dirección Nacional de Hidrocarburos y del Ministerio de Minas, la gente esta pensando que por el sólo hecho de que están llegando unos equipos y unos profesionales hay que pedir de todo, o que si la sísmica dio positiva ya hay que pedirlo todo, o que cuando llegamos a la etapa de explotación -como la que estamos teniendo hoy en San Vicente, con la intervención de la compañía Emerald-, entonces tenemos que empezar a ejercer presiones de tipo político como lo hacen algunos dirigentes comunales irresponsables. Así no es. Aquí yo escuchaba ahora una pregunta frente a que si la Emerald, que está haciendo grandes inversiones sociales, tiene poca rentabilidad, y claro que si. Hoy, la multinacional Emerald está haciendo explotación y exploración hacia otros pozos que están trabajando a pérdidas. Yo no lo debería decir, pero por ejemplo, en este momento estamos ejecutando a través de INVIAS 12 mil millones de pesos en un convenio entre INVIAS, el Ministerio de Transporte, la Gobernación del Caquetá y la Emerald, para recuperar algunos puentes: el de San Pedro y el de Orteguaza, y el puente hacia el Simón Bolívar en San Vicente del Caguán. De igual manera, el mantenimiento de las vías por 12 mil millones de pesos, por parte de la Emerald, además de una inversión que ya antes había hecho por 5 mil millones de pesos. Es de esa manera que hay que hacer las inversiones sociales diferentes a las de las regalías: no presionando a las empresas petroleras y a las compañías para sacarlas fuera del departamento. Hoy nosotros no estamos respaldando ese tipo de iniciativas, que como repito solamente conllevan a que muy seguramente sucedan actos como los del departamento del Meta, allá en Puerto Gaitán. Hoy la Emerald genera más de 720 empleos y genera otra cantidad de rentabilidades en el municipio de San Vicente y Puerto Rico. Quiero invitar a los caqueteños a que manejemos ese tema con mucha responsabilidad; acuérdense que aquí hace 8, 10, 15 años atrás, se dio el boom coquero y ¿qué nos dejó?: pobreza, miseria, prostitución, una gran cantidad de jóvenes vinculados a la delincuencia común quienes se acostumbraron a que la plata les llegaba aún estando acostados, aún delinquiendo desde sus habitaciones, entonces hoy

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esos jóvenes no quieren ser productivos y lamentablemente son la reserva productiva de esta región. Hoy muchos de nosotros nos quejamos que en los procesos electorales están los mismos con las mismas, pero es que nosotros no hemos pensado en qué podría venir hacia el futuro. Hoy hay una carencia total de dirigencia, y una de las mayores responsabilidades la tiene nuestra Universidad de la Amazonia: nuestros mismos estudiantes se enclaustraron en estas cuatro paredes y no han pensado en todo el sector productivo del departamento y la región. Que tristeza por ejemplo que en el debate electoral, tanto de gobernación como de alcaldía, no sean los profesionales con capacidades o los docentes de la Universidad de la Amazonia, los que estén direccionando la campaña. Pero especialmente se debe a que aquí en el Caquetá, lamentablemente, aquel boom coquero trajo el deterioro de esa misma dirigencia en el departamento. Quiero invitarlos, y estoy totalmente de acuerdo con la Diócesis de Florencia y con el Vicariato, a manejar el tema del petróleo con mucha prudencia, y quiero que ustedes sepan que el gobierno nacional aprobó para el departamento del Caquetá nueve bloques petroleros. A excepción de Florencia, todos los municipios del departamento tienen una porción de su territorio aprobado para hacer sísmica. Los últimos que van a entrar al departamento son los de Ecopetrol, a quienes les aprobaron unos bloques sobre todo en las zonas más difíciles, como el sector de Cartagena del Chaira, Solano, lugares donde hoy todavía operan con mucha fuerza varios bloques de la guerrilla de las FARC, que es otro de los fenómenos que se presentan en el departamento y en el cual, con la autoridad que tengo, debo decir que hay que actuar con mucha responsabilidad. Hoy cuando nuestro ejército colombiano ha venido avanzando en recuperar la gobernabilidad en gran parte del territorio caqueteño, objeto de la extorsión de la guerrilla que ha intervenido en las comunidades a través de presiones para ejercer todo tipo de acciones. Hace tres meses cuando se suscitó un paro del sector de la salud en Puerto Rico, dije claramente que no era el caso de los dirigentes y trabajadores de la salud, pero vi que había incidencia de las FARC en la desestabilización del sector. Como efectivamente quedo verificado hace cuatro o cinco días al comprobarse que quienes estaban direccionando ese paro eran personas que tenían incidencia con esa guerrilla. Quiero decirles que acabo de venir de una reunión de gobernadores donde estábamos socializando la tercera etapa de los recursos que se van a invertir en Colombia Humanitaria, que le llaman la etapa de la adaptación; donde estuvimos socializando el tema de la nueva ley que reglamenta el acto legislativo

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aprobado por el Congreso frente al tema de regalías. Espacios de discusión donde es importante aclarar que a los gobernadores y alcaldes nunca se nos ha tenido en cuenta para un concepto al determinar los bloques que se dan para la explotación de petróleo. Y cuando uno se da cuenta es que viene la compañía, a hacer sísmica o exploración, y mientras están avanzando, nos dicen: “gobernador necesitamos que nos ayude para los temas de seguridad, para el tema de las reuniones con los diferentes sectores sociales que hay en la región”. En el tema ambiental anoche estaba reunido con el director de Corpoamazonia para Caquetá, Putumayo y Amazonas. La corporación ambiental que tiene que ser el primer paso, pienso yo, tampoco es tenida en cuenta en su momento y hay algunas decisiones que se toman sin el consentimiento de los mismos ministerios. En el caso por ejemplo del Caquetá, nuestras vías solo están autorizadas para el tránsito de vehículos de 30 toneladas y hoy han ingresado vehículos de 50 toneladas; tal vez esos vehículos han incidido en el deterioro de la malla vial del departamento. Entonces miren que van en contravía, porque no se pueden seguir dando una serie de permisos para ingresar al Caquetá cuando nuestra infraestructura vial no esta en las condiciones adecuadas. Pero esa es la quinta locomotora del Presidente de la República, Juan Manuel Santos Calderón, que ha creado para el tema de la prosperidad y la productividad del país, y entonces desde la gobernación, junto con el alcalde, tenemos que concertar con el ejército y la policía para que esa locomotora pueda ingresar a la región. Escuchaba al conferencista que hablaba del tema de regalías, y a nosotros ya por ley nos corresponden 104 mil millones de pesos para el próximo año y 564 mil para los próximos 4 años distribuidos en varios programas: un 50% que viene en un ahorro programado para el tema pensional -el ahorro programado que le llama el Presidente para la época de las vacas flacas- que es uno de los temas difíciles donde los gobiernos anteriores, no habían previsto esta bomba de tiempo, pero de la que hoy este gobierno, en ese concepto de la repartición de las regalías, lo ha tenido en cuenta. Queda un 50%, del cual un 9% se destinará a ciencia y tecnología, allí nosotros estamos apuntando a que los proyectos de investigación se direccionen desde nuestra Universidad de la Amazonia, la UNAD, y las otras universidades que hacen presencia en el Caquetá. Yo he dejado dentro de las prioridades en los proyectos de regalías, que lleguen unos recursos importantes para mandar a un buen número de caqueteños a que se especialicen en temas de importancia, como la salud. Hoy en el Caquetá no tenemos especialistas, podría decir que en el 100% del campo de la salud, por ejemplo, para atender una población de casi 500 mil habitantes, sólo tenemos un psiquiatra, para citar solamente un ejemplo.

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Les cuento que he venido revisando una serie de proyectos de planeación nacional en varias entidades del gobierno nacional, y encontré proyectos firmados por especialistas en gerencia de proyectos. Aquí en Caquetá nos ha tocado contratar especialistas en Bogotá para que nos revisen los proyectos porque los están devolviendo. Entonces también hay que pensar una serie de profesionales en el área de administración de empresas, economistas, contadores, que se especialicen en proyectos para que podamos tener un buen número de profesionales asesorando y así poder acceder a los recursos, porque si no hemos podido acceder a más proyectos es porque no los hemos presentado o los presentamos mal, o porque los alcaldes van y los dejan allá creyendo que por obra y gracias del espíritu santo los van a aprobar. Hay un 30% para infraestructura, es decir que de esos 104 mil millones de pesos, para el próximo año, vamos a dejar alrededor de 35 mil millones de pesos para infraestructura. Vamos a tener unos recursos para nutrición y gratuidad total en educación en preescolar, básica primaria, secundaria y bachillerato. Hay un 10% para fortalecer los proyectos productivos para que el Caquetá pueda ser competitivo, de lo contrario vamos a estar solamente pensando en un mercado local, el mercado del departamento y paremos de contar. Entonces hay que seguir fortaleciendo las cadenas productivas. De modo entonces que si no hubiese existido esta ley de regalías, tendríamos que esperar por lo menos unos 10 o 15 años para poder recibir lo que nos va a llegar el próximo año. Entonces, ¿cuál es el afán del boom petrolero? Ninguno. Vamos a tener asegurado, y proporcionalmente, hacia los años 2020 y 2024 ese recurso que podremos ir aumentando… Claro, aquí lo decía el panelista, en la medida en que los municipios se conviertan en productores de hidrocarburos van a tener lo que se denominan unas regalías directas. Por ejemplo, si San Vicente se convierte en un municipio productor, pues va a tener unas regalías diferentes a las que vamos a repartir con base en esa nueva ley de regalías. Como les decía las regalías ya están establecidas: 564 mil millones de pesos para el Caquetá en cuatro años con un incremento anual proporcional, y cuando seamos un departamento productor pues se van a recibir nuevas regalías directas, y por más que encuentren veinte, treinta o cuarenta pozos, eso no lo vamos a recibir porque se va a repartir equitativamente. Y ya para terminar, porque fue un tema que le toque al señor Presidente Santos en el último consejo de seguridad en San Vicente del Caguán: ¿cuánto le cuesta sostener una infraestructura petrolera en el departamento al presupuesto de la nación? Hoy hay más de 2 mil hombres del ejército custodiando la infraestructura que hay en el departamento, de manera que pensemos si más adelante se diera la posibilidad de unos nuevos pozos de producción, en-

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tonces, ¿qué se requiere ahí? Yo le decía al Presidente, “aquí para el tema de Caquetá hay que crear un batallón energético exclusivamente con funciones independientes a las de la Brigada 12, a las de la sexta división y a las de nuestros batallones; funciones totalmente diferentes porque igualmente nosotros tenemos que avanzar en un proceso de seguridad para el departamento. No podemos cambiar nuestra seguridad, como hoy se esta haciendo, destinando más de 2 mil hombres para cuidar esta infraestructura petrolera y descuidando la seguridad, más cuando podemos seguir avanzando en el desarrollo del departamento del Caquetá de otra manera”. De modo que entonces, esa es nuestra recomendación, como repito la posición de la gobernación del Caquetá o que será por lo menos hasta el 31 de diciembre que yo estoy en el cargo, es la misma posición que hoy tiene la Diócesis de Florencia y la Vicaria de San Vicente del Caguán y Puerto Leguizamo, que es la de seguir defendiendo unos intereses colectivos, sin satanizarlos ni llegar más allá de lo que podemos llegar. Muchas gracias.

Dr. Germán Medina Triviño

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INTRODUCCIÓN “El por qué de la crisis financiera del año 2008 como forma de entender el “boom” petrolero en Colombia1

a crisis económica del año 2008, que aún tiene repercusiones en diferentes países europeos y latinoamericanos, tuvo su origen en Estados Unidos debido a la caída de la burbuja financiera. Ésta burbuja fue producto de factores como: la desregulación del sector financiero en Estados Unidos, ejemplo seguido por algunos países europeos; la cooptación de varios de los gobiernos de Estados Unidos por parte de los grandes sectores bancarios de Wall Street2 para lograr prerrogativas legislativas; y la caída del mercado hipotecario, uno de los impactos más visibles de esta crisis; sólo por nombrar algunas de las causas. La desregulación del sector financiero en Estados Unidos comenzó paulatinamente a principios de los años 80 favoreciendo la acumulación de capitales de lo usuarios bancarios. Capitales que fueron invertidos en mercados de riesgo y fondos privados generando especulación sobre los bienes raíces y los bienes básicos3 (también llamados commodities) como el carbón, el gas, el petróleo, el níquel, el oro, el trigo, el maíz, entre otros; productos que son la base de la economía colombiana. Estos malos manejos del sector financiero llegaron a niveles tan altos, que muchas firmas promovieron, durante los años previos a la crisis, la inversión en acciones y fondos privados que de antemano sabían que iban a fracasar. Con el fin de que los prestamistas, o los bancos, pudieran cobrar los seguros de impago de deudas4 , o CDS, ante las empresas aseguradoras, salvando ellos sus 1 Inspirado en el Documental “Inside Job”, año 2010, dirigido por Charles Ferguson y Andrey Marrs. 2 Sector financiero ubicado en Nueva York (Estados Unidos) símbolo del corazón económico de ese país con gran influencia y poder a nivel mundial. 3 “Los commodities o bienes básicos son aquellos productos que puedan ser destinados a uso comercial, sin embargo, la característica más importante de estos es que no cuentan con ningún valor agregado, ningún proceso o diferenciación con los productos que se encuentran en el mercado, por esta razón son utilizados como materias primas para la elaboración de otros bienes”. Tomado de: <http://www.icesi.edu.co/blogs/icecomex/2008/09/12/commodities/> 4 “Este producto financiero permite que el tenedor de un bono pueda protegerse contra un posible impago por parte del deudor. El comprador del papel le hace pagos periódicos al vendedor

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inversiones y dejando a sus clientes y deudores en la quiebra: “se consiguieron grandes ganancias privadas pero también grandes pérdidas públicas”5. La fácil adquisición de préstamos con altos intereses (préstamos subprime), principalmente para adquirir vivienda, encarecieron los precios de los bienes raíces, “del año 1996 al 2006 los precios de las casas se triplicaron, aumentando un 194% 6” en Estados Unidos, ayudando a inflar de manera acelerada la burbuja financiera. Esta burbuja finalmente explotó a finales del año 2007 en Estados Unidos por la incapacidad de pago de los deudores de los préstamos hipotecarios subprime; la falta de liquidez de los grandes bancos que tenían mucho en acciones, activos, bienes, pero muy poco en efectivo; y la incapacidad de pago de las aseguradoras a los bancos por los seguros de impago de deudas; entre otras muchas causas. Con esta explosión entraron en recesión las economías de países como Estados Unidos, Islandia, Dinamarca, Irlanda, Japón, Canadá, México, sintiéndose aún los efectos en España y Grecia; aún cuando el Fondo Monetario Internacional -FMI-, en el año 2005, había advertido a Estados Unidos de la grave crisis que se avecinaba. La crisis ocasionó, a partir del año 2008, el despido de miles de trabajadores en Estados Unidos, Europa y Asia debido a la caída de las exportaciones e importaciones de automóviles y productos tecnológicos, y debido a la crisis en el sector de la construcción. Asimismo, generó la pérdida de un importante número de viviendas en la población estadounidense. “Al final los más pobres son los que más pagan”7 . Tras esta crisis, los bienes básicos o commodities, especialmente recursos como el petróleo, el oro y el carbón, se convirtieron en la principal fuente de inversión generando un aumento en los precios y una alta demanda internacional. Por este motivo muchas de las multinacionales extractivas y el mercado de inversión en general miran hacia países exportadores de materias primas como Colombia (aunque la presencia en el país de multinacionales extractivas no es (banco o empresa de seguros) a cambio de esa protección. Un banco o empresa de seguros asegura el impago de unos títulos que otro banco o un fondo compró en el mercado. Si se produjera un impago, el banco asegurador le paga una indemnización al que compró ese CDS”. Tomado de: <www. bbc.co.uk/mundo/noticias/2011/08/110816_nuevo_diccionario_crisis_rg.shtml> 5 Documental “Inside Job”, año 2010, dirigido por Charles Ferguson y Andrey Marrs 6 Ibid. 7 Ibid.

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reciente, si ha aumentado significativamente en las últimas décadas). A este factor debe sumársele el hecho que las reservas de petróleo en el mundo están siendo rápidamente consumidas por ser la principal fuente de energía en el mundo, provocando un considerable aumento de la inversión extranjera en el país en búsqueda de nuevos pozos y fuentes de energía alternativas como las hidroeléctricas.

Impactos del boom en Colombia Mucho se habla del aumento de la inversión extranjera en el país debido a las políticas de seguridad y estabilidad promovidas por los dos últimos gobiernos. “De acuerdo con el reporte del Banco de la República, al país han ingresado (a noviembre de 2011) algo más de 12.739 millones dólares por concepto de inversión extranjera directa (…) el monto de inversión foránea dirigida al sector de la minería y los hidrocarburos superó los 10.432,6 millones de dólares (…) todo el año pasado la inversión extranjera fue de 9.484,6 millones de dólares. Para la minería y los hidrocarburos los recursos provenientes del exterior sumaron los 7.972,8 millones de dólares.” . 8 Es para tener en cuenta que este aumento significativo de la inversión extranjera también responde a la flexibilización de las políticas que rigen la labor, las responsabilidades y los requisitos que deben cumplir las empresas de exploración y extracción, junto con las prebendas jurídicas que se les han otorgado como bajos impuestos y montos mínimos en el pago de regalías. De lo que poco se habla es de los impactos que esta inversión extranjera, en búsqueda de petróleo y minerales, está causando sobre la población, las tierras y el medio ambiente de nuestro país; o cuantos de estos recursos económicos llegan a suplir las demandas y necesidades de las comunidades colombianas. La locomotora minero – energética, impulsada por el Presidente Santos, responde a esta creciente importancia del tema de extracción de recursos naturales y minerales para satisfacer la demanda mundial donde Colombia pretende posicionarse como uno de los países exportadores de materias primas o bienes básicos, entre ellos el petróleo. En concordancia, el gobierno se ha propuesto llegar a la producción de un millón de barriles diarios de petróleo y ha concedido el 10% del territorio en títulos mineros: “según datos oficiales, hasta la fecha se entregaron casi 9.000 títulos mineros, que corresponden a un poco más del 4 por ciento del territorio nacional, pero hay casi 20.000 solicitudes en fila, equivalentes al 20 por ciento del territorio. Muchos de los títulos y solicitudes 8 --------, 2011, “Inversión extranjera supera meta del gobierno; llega a US 12.739millones”, En: El Espectador http://www.elespectador.com/economia/articulo-314152-inversion-extranjera-supera-meta-del-gobierno-llega-us12739-mill. Revisado el 30 de noviembre de 2011.

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están en ecosistemas estratégicos, como páramos, parques naturales, reservas forestales y humedales” .9 En este escenario, una de las muchas preguntas que queda abierta para abordar las temáticas que nos propone el debate que se recoge en estas memorias del Foro “La explotación petrolera en el Caquetá: leyes, riesgos, ventajas y compromisos” es: ¿el modelo de desarrollo económico propuesto por el gobierno, y la geopolítica internacional, va de la mano con el fortalecimiento de la dignidad de la persona humana y la búsqueda del buen vivir por el cual propenden y luchan las comunidades colombianas?

9 --------, 2011, “La olla podrida de Ingeominas” En: http://www.semana.com/nacion/olla-podrida-ingeominas/157933-3.aspx. Junio 4.

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POLÍTICA MINERO ENERGÉTICA Hernando Castro Investigador del grupo Seguridad y Defensa de la Universidad Nacional de Colombia Introducción

uenos días, para el día de hoy mi presentación será entorno a la política minero energética. Para organizar la exposición vamos, primero a hacer un análisis, un paneo, de lo que es la geopolítica de la energía a nivel mundial. Tomaremos algunas variables de macroeconomía, daremos un vistazo al consumo energético a nivel mundial, y miraremos dentro de ese consumo energético cuál es el papel de los hidrocarburos. Luego vamos a ver cómo está distribuido el mercado mundial de los hidrocarburos, cuáles son los principales consumidores, los principales productores, y los principales actores en ese mercado a nivel global. Seguidamente vamos a centrarnos en lo que es el contexto colombiano. Una vez ubicados a nivel general en el mercado de los hidrocarburos, vamos a identificar cuál es la posición que ocupa Colombia en el mercado, cuáles son nuestros potenciales y nuestras condiciones actuales. Y cuál es, cómo se planea y se estructura la política pública vigente en materia minero energética y, específicamente en el sector de hidrocarburos. El tema de contratación de hidrocarburos lo vamos a dejar para la sesión de la tarde y, hay unos expositores que van a dedicarse de fondo al tema de las regalías entonces, vamos a dejar enunciado lo que es la renta petrolera, y dentro de la renta cuál es el espacio de las regalías y, si nos alcanza el tiempo, haremos una revisión comparada de algunos casos en América Latina.

1. La geopolítica de la energía: La humanidad, en las exploraciones razonables sobre el mundo y el ser, ha llegado a dos conclusiones básicas que se han traducido en dos leyes de la termodinámica que son casi de conocimiento universal: la primera, que la energía no se crea ni se destruye sino que se transforma y, la segunda, que toda energía está en constante movimiento. Hay un autor norteamericano que publicó en los años 50 (desafortunadamente los textos no están traducidos al español aún) que se llama Fred Cottrell, quien

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tiene un libro titulado “Energy and Society”, en este texto él empieza a mirar el papel que tiene la energía en el desarrollo de las sociedades. En un principio nuestras sociedades eran incapaces de generar excedentes de energía, teniendo en cuenta esas dos primeras leyes de la termodinámica, y él llegó a la conclusión que todos los consumos de la humanidad son energéticos, incluso los consumos alimenticios. Ustedes ya conocen que la mayor parte de la energía en la tierra proviene del sol, hay solamente unos convertidores primarios que son las plantas que convierten esa energía del sol en calorías y nosotros llegamos a esa energía de forma secundaria, tenemos que comer plantas, o comer animales que han comido plantas para acceder a esas calorías. Como dije anteriormente, las primeras sociedades tenían muy pequeños excedentes de energía o surplus, como lo dice el autor en su lengua original. Y eso qué quería decir, que no podíamos tener instituciones, funcionarios o personas, dedicadas de tiempo completo a otras actividades que no fueran la búsqueda de energía. Eso implicaba que una manada de humanos tenía que ir a cazar y que el jefe de la tribu no tenía suficientes excedentes de energía para las labores administrativas de tiempo completo, por tal motivo la organización social era muy básica. A medida que la humanidad desarrolla formas de consecución de energía, empezamos a tener excedentes de la misma y por ende a complejizar la estructura de nuestra sociedad. Se desarrollan funciones específicas de organización social de tiempo completo, entonces, aparecen los consejos en las villas y aldeas, también las primeras instituciones religiosas, que podían dedicarse a las funciones de organización y creación social de tiempo completo. Les doy dos ejemplos: la muralla China y las pirámides de Egipto, que demandaban un nivel de desarrollo complejo en la consecución de energía, de manera tal que hubiese gente que estuviera cumpliendo la tarea de obrero de tiempo completo, sin tener que preocuparse por cultivar o por conseguir la comida, ya que ésta era una función especializada de la sociedad cubierta por otros trabajadores. Hoy en día el nivel de consumo y de acumulación de los excedentes de energía es tal que los Estados y sus fuerzas armadas, consumen mucha más energía que el resto de la población gobernada por éstos. Un caso concreto: el ejército de los Estados Unidos, en sí mismo, consume mucha más energía que toda la población de su país. Esta es una imagen de la tierra de noche que nos muestra el consumo energético mundial; pueden ver ustedes que hay unas partes que están más iluminadas que otras.

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Los Estados Unidos, Europa, China y Japón, son los casos más notables. El triángulo que comprende Londres, Tokio, Nueva York, tan importante para la economía mundial, es donde se concentra el mayor consumo energético; el resto de países, los de la periferia, tienen un consumo energético un poco más bajo. Los que están en amarillo o blanco son los mayores consumos, los que están en rojo corresponden a los de menor consumo. El Golfo Pérsico, la principal fuente de hidrocarburos en el mundo, aparece en rojo con un consumo medio de energía. Paradójicamente, los países que son los mayores consumidores no son productores; en Europa y Japón, hay unas reservas muy escasas; en los Estados Unidos y México, en el pasado, las reservas fueron significativas, sin embargo, en la actualidad son precarias. Entonces, en el Medio Oriente, África y Sur América, están las zonas donde se encuentran las principales reservas petroleras del mundo. El 15,6% de la población mundial consume el 70% de la energía, lo que representa una especialización y distribución inequitativa entre productores y consumidores de energía a nivel mundial; de ese consumo el 34% es petróleo, lo que en términos netos equivale a 85 millones de barriles diarios que consume la humanidad. ¿Ustedes se pueden imaginar 1 millón de barriles así uno junto al otro? Eso es lo que consumimos nosotros todos los días.

Gráfico 1. Imagen de la tierra de noche (...) mundial.

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La principal reserva de petróleo en el mundo, durante la mayor parte del siglo pasado y hasta el año 2010, se encontraba en el Golfo Pérsico; allí aún hoy se produce el 60% de todo lo que se consume a nivel mundial, y allí mismo se refina gran parte de esa producción. Petróleo crudo y refinado salen por ese estrecho, lo que permite entender el por qué éste es un lugar tan estratégico a nivel mundial.

Gráfico 2. Circulación de energía a nivel mundial (...) consumo.

Sin embargo la historia, que nunca deja de escribirse, que no termina y sigue en movimiento, nos revela que esa realidad ha cambiado. Actualmente, la principal reserva de petróleo en el mundo se encuentra en Venezuela, contando crudos livianos y pesados. Antes, sólo se contaban los crudos livianos, que como se señalaba en una intervención anterior, son crudos que son menos espesos y requieren de menor esfuerzo para ser refinados. Los crudos pesados son mas espesos, casi como el arequipe, y demandan mucha más tecnología, lo que eleva los costos de refinación. Los crudos pesados que estaban en la franja de la Orinoquia, con los que antes no se contaba porque no se tenía la tecnología para refinarlos, hoy en día, ya pueden refinarse gracias a un convenio de desarrollo tecnológico que hicieron los brasileros de Petrobrás y el gobierno de Venezuela. Gracias a esto, ahora Venezuela cuenta con las reservas petroleras más grandes del mundo. Esta importante reserva de la franja de la Orinoquia se suma a otra reserva importante que hay aquí en América Latina: la reserva del Golfo de México. Además de lo anterior, Brasil también ha hecho unos hallazgos interesantes en

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una zona conocida como la Cuenca de Santos donde se han encontrado campos muy importantes, el Tupi uno de ellos. En el Norte de África podemos ver como se encuentran distribuidas algunas reservas menos importantes en volumen pero más importantes en ubicación, dadas las ventajas que ofrecen estas zonas para satisfacer las necesidades inmediatas de Europa. Una ventaja que tienen estos crudos norafricanos, frente a los crudos de América Latina, es que los últimos son más pesados y por tanto vale más dinero refinarlos; además de ello, la ventaja que tienen de estar más cerca de Europa es también determinante, dado que llevarlos desde América es mucho más costoso y demorado.

1.1. La OPEP La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) -OPEC por sus siglas en inglés-, es un actor que se consolidó a mediados del siglo XX y del cual hacen parte Arabia Saudita, Argelia, Emiratos Árabes, Indonesia, Kuwait, Libia, Nigeria, Qatar, Venezuela y más recientemente Ecuador. La OPEP cuenta actualmente con tres cuartas partes de las reservas de petróleo del mundo. La OPEP es una organización que surgió gracias a la iniciativa de un visionario latinoamericano llamado Juan Pablo Pérez Alfonso. Antes de la segunda mitad del siglo XX, todo el mercado de los hidrocarburos estaba dominado por cinco empresas privadas, especialmente norteamericanas e inglesas, entre ellas la British Petroleum y la Standard Oil –ésta última de propiedad de Rockefeller-. Había un monopolio de imposición de precios, así como de condiciones de contratación y regalías. Pero este latinoamericano, al darse cuenta de lo injusto e inequitativo de este esquema, propuso una iniciativa que permitiría hacerle contrapeso al poder de estas empresas privadas. Su propuesta se dirigió a la nacionalización del recurso petrolero consolidando empresas nacionales encargadas de la producción, y -ejerciendo el derecho de libre asociación- a la creación de un gremio de países productores de petróleo, desde el cual se pudiera negociar de una forma más justa y equitativa con las empresas extranjeras en un contexto global. Esa fue la idea de un venezolano aunque a algunos pueda sonarles extraño que los latinoamericanos participemos en la creación de política a nivel mundial; muchos creen que ese es un rol de otras latitudes, que los latinoamericanos no tenemos nada que hacer ahí, sin embargo, Juan Pablo Pérez Alfonso pudo forjar tan importante logro en el mercado de hidrocarburos en el mundo. Esto es un cambio total que no solamente ha llevado a los países miembros a un mayor nivel de desarrollo económico y social, sino que también ha sido importante a la hora de disminuir el poder de las empresas extranjeras privadas.

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En los años 50 una empresa tenía la capacidad de hacer un embargo a un país entero, como fue el caso de Irán en 1953. Pero hoy en día ya no es posible, y empresas estatales como Petrobras o PDVSA, son mucho más grandes y mucho más fuertes que empresas privadas como Exxon Mobile, que en el año 2007 se enfrentó en litigio contra PDVSA y el gobierno venezolano y perdió, viéndose como la primera empresa obligada a indemnizar a los venezolanos.

1.2 Balance producción vs. consumo En la siguiente gráfica se puede observar la distribución de las reservas petroleras para el año 2009. La torta representa el total de las reservas petroleras en el mundo; en azul claro se distinguen las reservas que hacen parte de la OPEP y en azul oscuro, las reservas de los países que no. En la franja de los países que no hacen parte de la OPEP se contabilizan las reservas de los países consumidores como Estados Unidos, Colombia, Rusia, y Brasil, las cuales hoy ya son muy importantes. Del mismo modo, la gráfica muestra el volumen de las reservas de los países productores. Para el caso de Venezuela, entre 2009 y 2010 el nivel de sus reservas aumentó de 211 mil millones de barriles a 374 mil millones de barriles.

Gráfico 3. Distribución de las reservas petroleras para el año 2009. Fuente OPEP: Boletín Estadístico Anual.

Esta es la relación de las variables de producción y consumo que se puede observar en tres escenarios muy importantes: en Estados Unidos, principales consumidores del mundo, se consumen 25 millones de barriles diarios y se producen tan solo 5 millones de barriles diarios. Al ser una balanza deficitaria, se observa que este es un modelo de consumo que realmente está haciendo crisis, que es insostenible a largo plazo y que es consecuencia de la forma como se concibe el progreso y el desarrollo en relación a los niveles de consumo. Así, un

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norteamericano se siente desarrollado si este año gasta 100 dólares y el próximo año puede gastar 150 o 200 dólares. Si no lo logra, se aflige, se frustra, cree que no progresó. Tal vez sea irrelevante que sea más feliz, haya leído más libros, o sea más amado ya que se mide el desarrollo en términos de aumento en los niveles de consumo.

Gráfico 4. Niveles de consumo de petróleo año 2009.

Esta gráfica muestra los niveles de consumo. Si los estadounidenses pagan por sentirse más desarrollados y año tras año tienen que consumir mucho más, la realidad es que van a poder presumir mucho menos. Entonces a medida que la variable consumo va creciendo, la variable reservas va bajando, lo que quiere decir que su relación es inversamente proporcional, lo que implica que este déficit va a crecer hasta que reaccionen. Otra cara de la moneda es el balance de estas variables para el Medio Oriente, ya que allí se producen 15 millones de barriles día y se consumen apenas 3 millones de barriles diarios, sin embargo es un consumo muy elevado para una población tan pequeña y que vive en un desierto, en donde las ciudades más grandes tienen uno o dos millones de habitantes. Dubái tiene tres millones de habitantes y presenta un consumo de 3 millones de barriles diarios, tiene un superávit, que lo hace boyante y opulento. Europa tiene una situación parecida a la de Estados Unidos, un poco mas atenuada por sus niveles de consumo más bajos; ellos producen cerca de 7 millones de barriles y consumen entre 10 y 12 millones de barriles diarios, de todas formas su balance es deficitario. A mi me gustaría señalar un punto de inflexión importante, que se dio en los años 70; este señor Fred Cottrell que les señalé al principio, en ese libro “Energy and Society” había pronosticado la existencia de

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una crisis estructural en el modelo de producción y consumo de hidrocarburos a nivel mundial; en tanto que el petróleo es un recurso no renovable y el consumo va aumentando y a su vez, las reservas presentaban siempre un comportamiento decreciente a futuro, él advertía que habría un momento techo en todas las reservas en el cual éstas iban a dejar de aumentar y por el contrario iban a decrecer al punto de alcanzar un agotamiento total que podría llevar todo al traste. Este fue un texto que escribió en los años 40 y 50, y sin embargo esto que a muchos les cuesta trabajo entender hoy, entonces ya se advertía. Un geólogo inglés llamado Marion King Hubbert, introdujo el concepto de punto techo, el cual significaba que se daría el momento en el que todas las reservas iban a empezar un proceso declinante e indetenible. En esa época se les decía que eran unos paranoicos, fatalistas, se usaban muchos epítetos para ellos: que eran enemigos del progreso, que eso era absurdo. Pero en los años 70 se reveló la verdad y los norteamericanos tuvieron que replantearse el tema al darse cuenta que estaban en una crisis, donde los precios se dispararon. Hay que replantearse todo eso y mirar qué se va a hacer. Hoy en día estamos viendo cómo estamos tratando de contener tardíamente uno de los problemas más grandes de la humanidad. Se tiene que abordar el problema de cómo vamos a encontrar nuevas fuentes de energía y buscar alternativas para resolver el problema que implica echar siempre mano de una fuente limitada de energía y en vez de ello, buscar una fuente más eficiente. ¿Cuáles son las alternativas que tenemos nosotros?, ¿cuál va a ser la alternativa que vamos a tener frente a los hidrocarburos? Estamos en un punto de inflexión crítico, el petróleo no aparece, las reservas de petróleo de Colombia alcanzan solamente para seis años (al nivel de consumo que nosotros tenemos) por eso hay un deseo de que el petróleo aparezca y, se invita a venir a todos los que puedan encontrarlo. A nosotros se nos dice que hay un boom petrolero, pero la verdad es que el petróleo aún no ha aparecido. Van a venir muchas multinacionales a buscar petróleo pero todavía no lo han encontrado, lo cual implica que no se pagaran regalías sino hasta que se encuentre y se empiece a explotar. Ahora puede haber varias empresas haciendo la exploración, los estudios de sísmica, sin embargo, mientras no aparezca es mejor no pensar en esas regalías ni en que se va a nadar en ríos de dinero.

1.3 América Latina ¿Cuál es la situación de nuestro vecindario? En la siguiente gráfica podemos observar las reservas petroleras en América Latina. Allí están Brasil y Venezuela, países que cuentan con las dos principales reservas petroleras en la región. En un tercer lugar está México, quien aparece un poco rezagado, después de

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que en los años 80 y 90 fuera el modelo petrolero de América Latina, con unas reservas de hasta 45 millones de barriles. Sin embargo México firmó el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA por sus siglas en inglés) con Estados Unidos y Canadá; en el cual México se comprometió a garantizar el abastecimiento para la demanda de hidrocarburos de esos dos países; obviamente la demanda ingente que tenían estos países reventó la capacidad de los mexicanos y mermó las reservas que en ese momento eran de 45 millones de barriles. En la actualidad, sólo tienen 15 millones de barriles, pasando de ser la primera potencia petrolera, a ser la tercera reserva en América Latina. Eso quiere decir que durante el TLC que firmó con Estados Unidos y Canadá, se han consumido el 70% de las reservas mexicanas, situación crítica para el país centroamericano.

Gráfico 4. Reservas petroleras en América Latina.

Por su parte Brasil, que es prácticamente un continente, presenta niveles de consumo muy altos con 2 millones de barriles de petróleo diarios, es el principal consumidor de la región después de los Estados Unidos y en caso de que logre aumentar sus reservas, la capacidad de autoabastecerse de manera sostenible a largo plazo es baja. El año pasado cuando aparecieron las reservas, el entonces presidente Lula lo recibió como una auténtica bendición, un regalo del cielo, permitiendo que los brasileros cumplieran su principal meta de autoabastecimiento, situación que en el siglo pasado no era posible y que hacía que Brasil se mantuviera en la franja de los países importadores de crudo, lo cual hoy en día ha cambiado significativamente aunque con pocas probabilidades de sostenibilidad, como ya lo mencionaba. Venezuela tiene una situación más favorable, puesto que cuenta con unas reservas ingentes, una capacidad de producción de tres millones de barriles diarios de petróleo y un consumo interno de apenas 500.000 barriles de petróleo

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diarios. Esto significa que pueden exportar 2.500.000 barriles cada día, lo cual observando el precio actual, que es de alrededor de 120 dólares el barril, implica una altísima renta petrolera.

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POLÍTICA DE REGALÍAS Paula Zuluaga Investigadora del Instituto de Estudios Políticos y Relaciones Internacionales de la Universidad Nacional de Colombia

uenas tardes, voy a presentar a continuación el tema de regalías en Colombia, que hace parte de una investigación más amplia que no vamos a tocar el día de hoy, teniendo en cuenta que recientemente en el país, y en los otros países ya mencionados por Hernando Castro, la explotación de hidrocarburos y minerales se ha convertido en uno de los principales motores de la economía; y Colombia ha pasado de ser un país eminentemente cafetero en su tradición económica, a ser un país cocalero y minero.

Se ha mencionado numerosamente durante esta mañana, que el Caquetá está enfrentando una nueva ola de exploraciones que pueden generar nuevos hallazgos y explotaciones de hidrocarburos en el departamento, y por lo tanto nuevas formas de ingresos. Sin embargo, se hace hincapié en que tales ingresos no están asegurados, que los contratos de explotación aún no están firmados ni operando, y que si se llegaran a encontrar los pozos las ganancias [regalías] se verían en un período cercano a los próximos cinco años. Sin embrago, hay otras regalías a las que tiene derecho el Caquetá siendo un departamento no productor. Más adelante vamos a profundizar en cuáles son dichas regalías, sus porcentajes y si fueron incluidas en la reforma constitucional recientemente aprobada que modifica los porcentajes de distribución de las regalías que benefician a los departamentos y municipios no productores, pero que no cuenta aún con una ley reglamentaria . Mientras la ley en mención no sea presentada por el gobierno y aprobada por el Congreso, los mecanismos de asignación de recursos, las fechas y los montos millonarios que deben ser otorgados al departamento, durante los próximos 5 a 10 años, seguirán sujetos al marco jurídico que se ha venido usando desde 1994 y la Constitución de 1991. Los departamentos y municipios reciben ingresos por parte del Sistema General de Participaciones - SGP -, que son las transferencias que hace el Estado a cada uno de los entes territoriales para que financien los gastos en educación, salud y funcionamiento, y reciben ingresos propios por recaudos de tributos propios y por regalías provenientes de la explotación de recursos naturales no renovables.

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Entre los años 2002 y 2009 se han repartido 24 billones de pesos en todo el país por concepto de regalías, pero aun así sigue siendo un porcentaje muy pequeño en comparación con las transferencias del Estado al SGP, que representan alrededor del 70 al 80% de los recursos que reciben las entidades territoriales.

¿Qué son las regalías? Son un precio que se paga,1 son un costo por la explotación de recursos naturales no renovables; no son ni un tributo ni una compensación. ¿Qué quiere decir eso? Que las empresas pagan un precio por explotar los recursos del subsuelo que pertenecen al Estado colombiano. Estos recursos son los que después se reparten entre las entidades territoriales y están designados por ley. No sólo el petróleo está sujeto al pago de regalías, sino todos los recursos del subsuelo colombiano. Eso quiere decir que productos como el carbón, las esmeraldas, el oro, la sal, materiales para la construcción como la caliza, el hierro, y muchos más, son generadores de regalías para el país. Por ejemplo, la Guajira es un gran receptor de regalías por explotación de carbón y recientemente de petróleo y sal; el departamento del Cesar es receptor por explotación de carbón; Arauca y Casanare por explotación de petróleo; y lo que ingresaría al Caquetá también provendría de la explotación petrolera. Es importante saber que el petróleo, dentro de todo este grupo de recursos, es el mayor generador de regalías para el país. Entonces, de esos 24 billones de pesos que se han generado de regalías para municipios y departamentos productores, entre 2002 y 2009, cerca del 80% de estos recursos han sido por petróleo. La ley que va a reglamentar la reforma constitucional determinará el precio a pagar por el derecho a explotar, y ese precio es generalmente un porcentaje de la producción, que se calcula con tablas y fórmulas que incluyen el costo de extracción, refinación y transporte. Hay diferentes modalidades para determinar esto, pero lo que hay que tener en cuenta es que las regalías son un costo.

¿Por qué es tan importante entender esto? Porque las regalías no son equivalentes al impuesto a la renta u otros impuestos que deben pagar las empresas explotadoras y que hacen parte de la renta 1 Acto legislativo 05 de 2011, Por el cual se constituye el Sistema General de Regalías, se modifican los artículos 360 y 361 de la Constitución Política y se dictan otras disposiciones sobre el Régimen de Regalías y Compensaciones. Es decir, una ley que amplíe, especifique y detalle las disposiciones generales contenidas en el marco constitucional. Marco jurídico: Constitución de 1991, artículos 332, 360 y 361. Leyes 141 de 1994; 209 de 1995; 633 de 2000; 685 de 2001; 756 de 2002; 781 de 2002; 858 de 2003; 863 de 2003;1151 de 2007.

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petrolera que recibe el Estado colombiano -como explicó Hernando Castro-. Entonces cuando se negocia con las empresas, se negocia por un lado regalías, y por el otro lado los impuestos que van a pagar. Lo que corresponde a las regiones, en esa negociación, son las regalías, el costo de esos productos naturales que no son renovables, que no se multiplican, que no vuelven a crecer y que por lo tanto deben recibir una compensación por su explotación.

¿Qué otra cosa no son las regalías? No son una compensación por los daños ambientales o por los problemas sociales en los que se incurra con la explotación. Por ejemplo, toda el agua, todo el gas que se requiere para explotar oro o petróleo constituyen un costo ambiental que no está incluido dentro del costo del producto y que se debe tener en cuenta porque el daño se va a generar a lo largo de la región y en el largo plazo, y las comunidades se verán afectadas. Eso no está incluido dentro de la negociación de las regalías, se negocia aparte en los contratos. Lo que van a recibir los departamentos por regalías no es una compensación por los daños ambientales. Constitucionalmente el propósito de las regalías es transformar la explotación de ese recurso, que es tan valioso, que se va a agotar en un plazo de 15 o 20 años, en el desarrollo económico y social del departamento o de la entidad territorial. Los daños ambientales y sociales se deben cubrir con otro de los recursos que se negocian en cada contrato, ¿por qué? Porque la explotación del petróleo o de otros recursos genera efectos sociales como aumentos del costo de vida, por ejemplo: arriendos que en la región costaban 400 mil pesos ahora pueden costar un millón, al igual que el costo de un almuerzo puede triplicarse; aumenta la presión demográfica, como supuestamente va a haber trabajo muy bien pago mucha gente va a migrar hacia la región petrolera; también van a ser necesarios más servicios de salud, de educación, más viviendas. Cuando se estudian los municipios que han sido grandes receptores de regalías, se evidencia que las poblaciones en un periodo de 5 o 10 años se duplican: en todos los municipios de 10 mil habitantes pasan a ser de 20 mil, y eso hay que tenerlo en cuenta desde ahora. Asimismo, ciertas compensaciones de la responsabilidad social de la empresa también se negocian por fuera de la regalías, entonces así como las empresas no remplazan al Estado, tampoco el Estado remplaza la responsabilidad social de las empresas, y ésta tiene también que enfocarse porque no puede destinarse a financiar partidos de fútbol, torneos, etc. Si la comunidad no se organiza para gestionar los recursos de la responsabilidad social ante las empresas,

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esos dineros, que son muy grandes, se van a diluir en proyectos muy pequeños que no tienen ningún tipo de impacto social. Entonces, aquí ya podemos adelantar una recomendación que me parece muy importante, y que hay que tener siempre clara, y es que se requiere de comunidades muy bien organizadas, con muy buen conocimiento de cuáles son las etapas del proceso, de cuáles son las instancias legales de participación, para que puedan tener mejores resultados a la hora de la llegada de las explotaciones a su región. Si las comunidades no están bien organizadas, la explotación empieza, llegan los problemas sin ser previstos y luego en la marcha es muy difícil que la comunidad obtenga de forma fácil, expedita y eficiente la solución a los problemas [generados por la explotación]. Si la comunidad no está bien organizada después le toca hacer peticiones y reivindicaciones por aquello que no hizo al comienzo de la explotación.

EL SISTEMA DE REGALÍAS EN COLOMBIA El primer sistema de regalías en Colombia fue establecido por la Constitución de 1991 con el objetivo de organizar dicho tema en el país. Después fue reglamentado por la Ley 141 de 1994 y modificado por algunas leyes posteriores, siendo la más importante la Ley 756 de 2002.

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Previo a esta carta magna, no existía un régimen de regalías reglamentado, sino que estaban negociadas en diferentes contratos. Por ejemplo, la Ley 20 del 69 regía el sistema de regalías para el petróleo y algunos otros productos. Las esmeraldas, por ejemplo, no pagaban regalías, porque no se sabía cómo cobrarlas. Con la Constitución de 1991 hubo un soporte para saber cómo organizar la casa, y para ello dicta primero, que el subsuelo y las regalías por su explotación son propiedad del Estado, o sea propiedad de todos, no de los dueños de la tierra. Aquí no se pagan regalías a Pepito Pérez que encontró en su territorio petróleo, se le pagan regalías al Estado, y éste las asigna entre sus diversas entidades territoriales. Eso diferencia nuestro sistema de regalías del anglosajón, como en Estados Unidos, Inglaterra o algunos países europeos, donde el que es dueño del suelo también es el dueño del subsuelo. Entonces, si en el terreno de mi casa se encontró petróleo yo me gano toda la plata de la regalías, eso no pasa en Colombia. Hubo unos pleitos muy pequeñitos de títulos reales de hace muchos años, heredados de la colonia española, que ya se solucionaron, y ratifican que el subsuelo es del Estado, no importa de quién sea el terreno donde se encuentre el petróleo. Eso tiene otra consecuencia, y es que es del Estado como tal, no de la nación; jurídicamente eso quiere decir que los recursos no son del gobierno central sino que son descentralizados. Uno de los objetivos de la Constitución de 1991 fue revertir la alta centralización en la administración de los recursos. Cuando se descentralizan los recursos, no solamente se le dice a las regiones “ustedes va a administrar eso, ustedes lo van a ejecutar”, sino que también se les dice “además ustedes van a decidir en qué se gasta eso, ustedes van a priorizar, van a decir a qué proyectos regionales de inversión, de desarrollo, de economía se van a dedicar esos recursos”. Entonces la Constitución dijo: “para asegurar eso tenemos que decir cuáles recursos van a tener las regiones, pues tienen que tener plata para financiar lo que van a hacer los alcaldes y gobernadores”. Como mencionamos ahora, la plata sale del Sistema General de Participaciones, que antes se llamaba de transferencias. Es decir, cuando el gobierno central recauda impuestos una parte de eso se la manda a los regiones, a los que se le agrega lo recaudado por impuestos propios de las regiones, como el impuesto a los licores.

¿Quiénes van a recibir los recursos obtenidos por regalías? La Constitución diferencia entre dos posibles receptores de regalías: uno, las entidades territoriales de los departamentos o municipios donde se explotan los recursos, los llamados productores, que reciben regalías directas. Tradicionalmente, en el caso de los recursos de hidrocarburos, los principales receptores han sido Arauca, Casanare y Meta. Primero Arauca que empezó

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a recibir más o menos en 1980 y luego Casanare que empezó a recibir en la década de los 90. Estos departamentos empezaron a recibir grandes cantidades de recursos pero no estaban preparados, o no sabían cómo gastarlos, por lo cual muchos de esos recursos se fueron en construcción de obras fastuosas, como coliseos o piscinas de olas, que hoy están abandonadas. Las otras son las regalías indirectas, que ha venido recibiendo el Caquetá hasta el momento, y que son un porcentaje de todas las regalías que no van a los departamentos productores, sino a todos los demás territorios, departamentos o municipios del país.

¿Qué es lo que está detrás? Que si el subsuelo es propiedad del Estado, entonces las regalías deben ser propiedad de todos; no sólo de los departamentos productores. La idea de que éstos reciban más, proviene en parte porque deben afrontar los problemas ambientales y sociales de la explotación.

¿Cómo se reparten esas regalías indirectas? Van al Fondo Nacional de Regalías -FNR-, existente desde 1994, que financia los proyectos que las entidades territoriales presentan. El alcalde o el gobernador crea un proyecto de inversión, luego va al FNR y lo presenta, y dice “yo necesito este monto de dinero para generar este proyecto con estos objetivos”.

¿Quiénes deciden si se financia o no? Antes existía una Comisión Nacional de Regalías que estaba conformada por gobernadores y alcaldes de municipios y departamentos productores, el Ministro de Energía, el Ministro de Transporte y el director del Departamento Nacional de Planeación. Esa comisión desapareció en el año 2004 y fue reemplazada por una junta directiva similar. Lo importante no es que haya o no desaparecido la Comisión sino que desde entonces el FNR ha sido la instancia que ha recibido ese dinero. Entonces, si se dice que Caquetá ha recibido X o Y cantidad de regalías como departamento no productor ha sido a través de esa entidad.

¿Cuál es el propósito del FNR y de las regalías indirectas en general? Financiar proyectos de desarrollo y de impacto para las regiones. ¿Qué ha pasado?, ¿cuáles han sido los problemas de estas dos formas de repartir regalías? Mientras que los departamentos y municipios productores se quedaban

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con el 68% de la regalías totales, el FNR se quedaba con el 32%; esto en la práctica podía ser mucho menor, lo que quiere decir siempre que diez o siete productores se quedaban con la mayoría de recursos, y el resto recibía una parte muy pequeñita. Los problemas con las regalías indirectas son, por un lado, que muchas entidades territoriales no tienen la capacidad institucional de presentar proyectos que cumplan las especificaciones técnicas que exige la Comisión Nacional de Regalías para aprobar un proyecto. No estamos hablando de que el proyecto sea bueno o malo, de que sus objetivos fuesen buenos o malos, simplemente, no estaban bien presentados los formatos y ya por eso se quedaban sin acceder a recursos muchos departamentos, municipios o entidades territoriales del país.

¿Qué debían financiar estos proyectos? Debían financiar exploración minera, proyectos regionales de inversión (como la construcción de una gran carretera, o hacer una gran obra para generar impacto social y económico), preservación del medio ambiente, y durante algunos periodos, proyectos de electrificación e infraestructura vial. ¿Qué ha sucedido en la práctica y cuáles han sido algunos de los principales problemas? Consideremos, por un lado, la baja capacidad institucional, y por otro, que las comunidades no se organizaron lo suficiente para solicitar a sus gobernadores o alcaldes la presentación de proyectos, o terminaron presentando proyectos de poco impacto. Estamos hablando de miles de millones de pesos que terminaron financiando proyectos de 60 millones de pesos para solucionar problemas de bajo impacto social de aquí de la vereda; entonces si bien el FNR contempla eso, porque responde a las necesidades de las comunidades, también se busca que los proyectos tengan un gran impacto para el desarrollo económico de la región; si eso no pasa los recursos se vuelven plata de bolsillo y entonces se gastan en cosas muy pequeñas, eso es lo que ha pasado con el FNR. Sumado a los problemas de corrupción, se ha encontrado que los proyectos se los dieron a una cooperativa, a una persona natural que no tenía la constitución, la experiencia, ni el capital necesarios para desarrollar el proyecto. De igual manera, las personas que contrataron para hacer la vigilancia tampoco cumplieron. Es decir esta es la forma en que se pueden robar o desviar los recursos en esos contratos.

¿Qué otros problemas se han tenido con las regalías directas? Para esto los mejores ejemplos son los grandes departamentos receptores como Arauca y Casanare, y han sido básicamente los siguientes: las regalías di-

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rectas eran recursos que tenían que destinarse para llegar a las metas mínimas: cobertura mínima en temas de salud, educación, alcantarillado y prevención de la mortalidad infantil. Si los departamentos y municipios no alcanzaban esas coberturas tenían que dedicar al menos el 50% y el 80% de los recursos, respectivamente, para alcanzar dichas metas, y después de eso sí podían destinar los recursos a otros proyectos de inversión.

¿Quiénes daban esos certificados si se había alcanzado las coberturas o no? Las contralorías locales y los ministerios. Si se miran los resultados que ha presentado el gobierno para justificar la reforma a las regalías, sólo el 10% de esos municipios han alcanzado estas metas. Es decir que en 15 años o un poco menos, recibiendo regalías una vez al mes por más de 24 billones de pesos (entre 2004 y 2009) se tienen coberturas mucho menores que en municipios de menores ingresos. Adicionalmente, los alcaldes y gobernadores han financiado malos o fastuosos proyectos de inversión, por eso los grandes elefantes blancos como la piscina de olas de Arauca conocida por todos, ahora abandonada, y en donde se invirtieron una gran cantidad de los recursos de regalías del departamento. Finalmente, estos recursos no sólo se gastan en lo que no se debe, sino que además se gastan mal. Entonces, si voy a construir una piscina de olas que me cuesta mil millones de pesos en vez de hacer una licitación pública, como dice la Ley 80, que es lo que debo hacer, fracciono el contrato y se lo doy a numerosas cooperativas o personas naturales, me salto el proceso de licitación y así obtengo una forma de repartir el contrato entre mis amigos. Todos estos son los problemas que trata de corregir la reforma constitucional y son los puntos que debe tener en cuenta la comunidad a la hora de vigilar estos recursos.

¿Qué debe hacer una comunidad que vigile el uso de los recursos? Debe estar revisando los objetivos y los montos de los proyectos, y cómo se entregan los contratos. Debe estar revisando que no se fraccionen, sino que se realicen las licitaciones públicas que deben hacerse. Debe estar revisando que las empresas, asociaciones, personas naturales, cooperativas o convenios interadministrativos que se hagan, para desarrollar los proyectos respondan adecuadamente a la envergadura de los mismos, y que no sea una cooperativa inexperta con 20 millones de pesos de capital la que reciba un contrato de 3 mil millones de pesos.

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A las regalías directas e indirectas las vigilaban funcionarios de la Comisión Nacional de Regalías en primera instancia, además de la Procuraduría, la Contraloría y la Fiscalía, que vigilan posteriormente a la ejecución del gasto. Estas entidades llegan a controlar cómo se ejecutó el presupuesto del año pasado, cómo se otorgaron esos contratos. La Contraloría recibe los informes anuales de las entidades territoriales y donde detecta anomalías realiza una visita sorpresa, y piden a los funcionarios de la alcaldía 20 contratos al azar para revisarlos, y si encuentra alguna anomalía abre una investigación mucho más grande. Pero todo eso ya se gastó, ya se ha ejecutado, hace uno o dos años, y mientras se hace la investigación el alcalde o el gobernador de turno ya ha salido de su periodo y como han congelado los recursos por mal uso, el nuevo alcalde o gobernador los encuentra congelados. Toda esa demora genera más gasto. Por ello es importante tener en cuenta algo que en Colombia no ha funcionado muy bien y es la vigilancia y la veeduría de la comunidad. Ustedes como comunidades del Caquetá pueden organizarse y actuar porque sí pueden vigilar el gasto previo a su ejecución; pueden organizarse y aprovechar las instancias de participación para guiar y modelar el gasto que sus alcaldes y gobernadores van a presentar. Y con la reforma constitucional eso va a ser cada vez más importante, porque ya no va ser un porcentaje mínimo de regalías lo que se va repartir entre proyectos (regalías indirectas), sino que así va a ser con la mayoría de los recursos, sobre todo para los que no van exclusivamente a departamentos o municipios productores. Es a través de estos proyectos que el departamento va a seguir recibiendo recursos de regalías. Entonces, ¿cuáles son algunas ventajas y problemas del sistema como venía funcionando? Una ventaja que no había sido muy bien utilizada es la flexibilidad de la Constitución frente a los cánones de las regalías, que podían variar por medio de la ley. Para esto no era necesario hacer una reforma constitucional porque se tenía un mayor control sobre los mismos; pero ¿qué son los cánones? Son simplemente un porcentaje del pago de regalías que debían hacer las empresas por la explotación del recurso, por ejemplo para hidrocarburos inicialmente era el 10, 20 o incluso el 25%, lo cual obviamente no se cumplía. Para las esmeraldas es del 3% y así dependiendo del producto se podía cambiar [el porcentaje]. Volviendo al tema del petróleo, se había fijado un canon del 10%, pero resulta que hubo una escasez petrolera y entonces el crudo subió y más o menos triplicó su precio, así pues, Colombia debería tener la posibilidad de cobrar un poco más [por el valor del canon]. Otro problema es el criterio de distribución, del lugar donde se hace la explotación, sin tener en cuenta otros factores y el tipo de producto. Entonces si soy productor de hidrocarburos recibo mucho dinero porque este producto es el que más genera ganancia en términos de regalías. En cambio, si yo produzco sal no recibo tanto dinero porque ésta no paga tantas regalías; pero no se tiene

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en cuenta si yo tengo cien mil o dos millones de habitantes que atender. Tampoco se tiene en cuenta, dentro de ese criterio, si en mi territorio los habitantes tienen altos o bajos niveles de pobreza, o necesidades básicas insatisfechas. Entonces simplemente ser productor, y de petróleo, era ganarse la lotería.

LA ACTUAL REFORMA CONSTITUCIONAL Ante todos los problemas que hemos visto, el gobierno presenta una reforma que podríamos llamar bien intencionada, que representa beneficios para el gobierno y que al mismo tiempo supone otro tipo de consideraciones. Por un lado, un control más centralizado que está expuesto a un menor grado de corrupción. Es decir que si el gasto no se ordena en las regiones sino desde el nivel central va a estar menos sujeto a la corrupción. Sin embargo, creo que hay muy buenos argumentos para debatir que esa posición en nada garantiza que el nivel central sea menos corrupto. Supone también que cuando el gasto se planifique en el nivel central no va a ser un gasto atomizado, es decir que en vez de convertirse en plata de bolsillo que financió cualquier proyecto pequeño, se está pensando a largo plazo para que haya proyectos de mayor impacto. Otra justificación de la reforma es hacer más equitativa la repartición de los recursos entre departamentos productores y no productores, siendo estos últimos mayoría. Está bien que los productores reciban un poco más, pero no tanto. La otra idea que se mencionó esta mañana, tiene que ver con que los recursos minerales explotados son escasos y se agotan con el tiempo, es por eso que necesitan ahorrarse los ingresos recibidos para que cuando esos recursos se agoten las comunidades y entidades territoriales no queden sin los ingresos de las regalías de un momento a otro. Para eso se crea el Fondo de Ahorro y Estabilización.

¿Cuál es la idea de la reforma? Como estos recursos entran en dólares, afectando el sistema económico del país porque pueden subir la inflación, modificar las tasas de cambio y además están sujetos a ciclos internacionales; si sube el petróleo empezamos a recibir mucha más plata durante tres meses y si luego baja, durante los siguientes tres meses no se recibe nada. Pero resulta que el presupuesto de la alcaldía o la gobernación se realizó pensando que se recibiría mucho dinero durante seis meses, con una falsa ilusión, porque luego en el momento de ejecutar esos planes no se va tener el dinero suficiente. Entonces la idea de la reforma es que el ahorro programado, manejado por el Banco de la República a través del Fondo de Ahorro y Estabilización, va a permitir controlar esos efectos, sin

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esos recursos van a seguir siendo de las entidades territoriales, pero no los van a poder gastar apenas los reciben, sino que tienen que ahorrarlos, ¿para qué? para época de vacas flacas, cuando el petróleo baje de precio -que en lugar de 120 dólares esté costando 60 [dólares] el barril-, entonces los ingresos se bajan a la mitad y se pueda sacar plata de ese ahorro para seguir manteniendo el nivel de gasto. Hasta lo expuesto aquí, la reforma busca introducir nuevos criterios en la repartición, para que de tal forma no sea importante qué producto explotó y dónde lo hizo, sino también la población y sus necesidades básicas insatisfechas. Asimismo también busca cambiar el porcentaje de repartición entre productores y no productores. Pero no altera la propiedad del subsuelo, este sigue siendo de todos. Otro elemento del nuevo Sistema General de Regalías consiste en que una plata de las regalías totales se va a destinar al ahorro pensional territorial. Es decir que una parte se va a un fondo pensional [FONPET] para garantizar que los funcionarios públicos de las entidades territoriales, que actualmente están trabajando, no se queden sin recursos para recibir sus pensiones en 15 o 20 años. Otra plata son las regalías que se van a repartir, ¿entre quiénes se van a repartir? Por un lado entre el Fondo de Ahorro y Estabilización del Banco de la República, donde se va a guardar el dinero de las regiones y en tiempo de vacas flacas le va a dar ese dinero ahorrado. Luego las regalías que ya se van a destinar para el gasto se reparten de la siguiente manera: primero, el famoso 10% para ciencia, tecnología e innovación, que es realmente una innovación en el país, porque nunca se han financiado con tanta plata proyectos de este tipo. Y luego un porcentaje para los receptores; eso se ha llamado así, pero no son otra cosa que las regalías directas las que van a recibir los productores o las entidades territoriales productoras. Se conservaron las regalías directas a pesar de que inicialmente el proyecto buscaba que se repartiera todo a través de fondos. Pero las presiones de las regiones a través de sus senadores y congresistas lograron que esas regalías se mantuvieran. Y las otras son las que se van a repartir entre todos a través del fondo de competitividad regional que se divide en dos fondos. Esto quiere decir que desaparece el Fondo Nacional de Regalías, que es reemplazado por dos fondos que financiarán proyectos de inversión presentados por las entidades territoriales, en cuya evaluación se tendrán en cuenta criterios de población y de necesidades básicas insatisfechas, entre otros. ¿Cuál es la gran novedad? Porque hasta aquí se parece un poco al sistema del que veníamos. Las novedades son: la inversión en ciencia y tecnología, y el ahorro programado obligatorio que existió un tiempo para las regalías petroleras

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pero que ahora va existir para todos los recursos e indefinidamente. Pero por otro lado, la gran novedad es que ahora los receptores de regalías directas no se van a quedar con el gran pedazo de la torta, que era casi el 68%; sino que una vez que se saque lo de ahorro, estabilización, pensiones y lo destinado a ciencia y tecnología (que equivale más o menos a un 50%), el restante se va repartir en el 20% para los productores directos y el 80% para los indirectos. Es decir que se va invertir el porcentaje, ahora en lugar de que sean los que producen los que más reciben, es el resto del país el que va a recibir más. Eso es lo que garantiza que aun cuando Caquetá no se convierta en un departamento productor, va a seguir recibiendo grandes e importantes recursos. Para finalizar, ¿qué es importante que quede claro en todo esto? que los recursos de regalías están garantizados, que van a aumentar, así no se concreten las explotaciones, y que la comunidad tiene diferentes y muy poderosos mecanismos de influir en esos desenlaces, así se reciba dinero solamente a través de proyectos. ¿Si se concretan las explotaciones en qué influye? En las negociaciones de las compensaciones ambientales y sociales, que recuerden que no son regalías sino que son compensaciones aparte, sobre todo a las comunidades indígenas que tienen consulta previa y que tienen la capacidad de negociación, cuando están bien organizadas. Bolivia tiene experiencias exitosas de buenas negociaciones con las multinacionales, pero todo está en que las comunidades estén bien organizadas y que conozcan bien que se les viene pierna arriba. Si se negocia más adelante, cuando el contrato ya está firmado, no es muy beneficioso, porque cambiaría las negociaciones contractuales y el gobierno central no va a apoyar esas demandas. Por otro lado también me gustaría que quedara claro, que como estos proyectos los van a presentar los gobernadores y los alcaldes a esos fondos donde tienen los recursos, estos proyectos deben estar respaldados por la comunidad, deben mostrar sus necesidades y deben ser vigilados por ella, y para eso hay que participar en las instancias dispuestas para tales efectos. La vigilancia en este país se hace cuando el gasto ya está ejecutado, eso quiere decir que es muy difícil detener los procesos; lo que se hace es castigar cuando la plata ya se perdió. La comunidad organizada mediante veedurías, que por obligación deben abrir las puertas a toda la comunidad, siempre puede verificar esos gastos, entonces puede estar organizada no sólo para orientar los objetivos del gasto, sino también para vigilar la ejecución del mismo. ¿Buscando qué? que los objetivos se cumplan, que sean proyectos de impacto, que no se fraccionen las licitaciones y que quienes reciban los contratos tengan la capacidad institucional para ejecutarlos. Finalmente, todo está por definirse. La ley que tiene que ser aprobada va a ser tramitada en el Congreso por la Comisión quinta, recibirá opositores y apoyo.

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Habrá numerosos foros de consulta previa y es ahí donde hay que conocer qué es lo que va a pasar con el marco general dado por la reforma constitucional. Lo que de verdad define cómo van a quedar las cosas es esa ley que todavía está por aprobar. Muchas gracias.

Preguntas: 1 ¿Cómo hacen las comunidades para controlar que los procesos de responsabilidad social se hagan con el cometido de llevarles a ellas desarrollo? 2 En la estructura organizativa institucional, ¿existen figuras creadas para la participación de las comunidades alrededor de la planeación y la vigilancia de los recursos de regalías? 3 Si el daño social se negocia fuera de la regalías, ¿quiénes deben ser los directos responsables para reparar tal situación? 4 ¿Qué actividades o estrategias usted recomendaría para que una comunidad organizada pueda hacer un buen uso de la regalías?

Respuestas: 1. En cuanto a cómo hacer para que la responsabilidad social se traduzca en desarrollo, la comunidad debe estar organizada e interactuar en los espacios que definen las prioridades de responsabilidad social. Por un lado, la comunidad debe estar atenta a qué necesita, porque si no, la empresa va a llegar con sus propuestas, y la comunidad [se limitará] a decir sí o no, por no estar consciente de sus necesidades, que no es solamente tener un listado, sino también una priorización de dichas necesidades. ¿Qué nos sirve más? ¿Un centro de salud?, ¿el coliseo de deportes?; ¿cuándo nos sirve más?; ¿en qué ubicación nos sirve más? Porque la empresa va decir: “yo les propongo construir acá”, y la comunidad dice: “pero es que a mí no me sirve acá por tales motivos”. Las comunidades tienen que estar conscientes de sus necesidades y condiciones para poder negociar con la empresa. Y la buena negociación llega si antes tienen claro qué se necesita y qué no. Si la empresa tiene propuestas muy buenas, pero la comunidad decide que no le sirve que le ofrezcan por ejemplo mil computadores porque antes necesita que le ayuden a reformar el sistema de alcantarillado. Si la comunidad no está atenta a sus necesidades va a terminar aceptando cosas que no van a tener ningún impacto, y para eso sirve estar atento y en red con otras comunidades para saber qué ha funcionado. Por ejemplo hay recomendación de que las empresas petroleras son empresas de enclave que llegan, explotan, pagan mucha plata a sus trabajadores, pero en general no se relacionan económicamente con otros sectores productivos

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de la región. Puede que en algún momento compren camisetas muy caras, pero no están desarrollando una industria manufacturera con una cadena productiva y el día que se van, dejan de comprar. Si la región no se prepara para eso cuando [la empresa] se vaya se quedan sin las regalías y sin ningún tipo de desarrollo. Entonces los proyectos enfocados en el desarrollo quieren decir también que sean pensados a largo plazo. 2. Sí existen en el marco legal estructuras organizativas de vigilancia, existe el espacio para que funcionen, existe la obligación legal de que las alcaldías, las gobernaciones y las empresas proporcionen toda la información necesaria para que la ciudadanía vigile. Pero eso no ha sido explotado porque no se ha organizado muy bien; entonces si ha habido organizaciones para pedir cosas, pero no ha habido tantas para hacer veeduría porque para eso se necesita información, conocer la legislación. Para mirar las cuentas y verificar se requiere tiempo y además información, entonces aunque existan los espacios no han sido muy bien dotados. Por ejemplo, en el Casanare, Meta y Arauca apenas hace unos años se formaron las veedurías ciudadanas, no es mucho lo que han hecho y esto se debe a que no se han organizado muy bien, pero el espacio legal existe y eso es otra cosa que se puede negociar con las empresas: financie usted la veeduría, finánciennos ustedes los sueldos de las personas que van a estar en la veeduría, las capacitaciones necesarias para que puedan hacerla en efecto. 3. ¿Quiénes son los directos responsables del daño social? Es una muy buena pregunta, las empresas son responsables en alguna medida ya que la explotación genera efectos sociales, pero hay varios actores que son responsables: la comunidad, las gobernaciones y las alcaldías. Pero más importante que saber quién es el responsable, es saber cómo vamos a manejar esto; porque si todos estamos de acuerdo en que esto nos reporta unos beneficios, que no queremos dejar de recibir, pues entonces pongámonos de acuerdo para controlar los daños que nos va a causar. Entonces una parte lo manejan y se negocia con las empresas, pero otra parte también se negocia con el Estado, quien es el responsable de negociar los contratos y deberá venir y hacer las carreteras que debe hacer y dar los servicios que debe dar. Entonces decir que las empresas son las culpables sirve pero no tanto si la comunidad también está diciendo que eso le sirve, e invita a las empresas a la explotación. 4. Unas recomendaciones finales: creo que ya he mencionado la importancia de las comunidades bien organizadas. Hay diferentes tipos de comunidades entonces, las que tengan un régimen de derechos de propiedad colectiva (como las comunidades afro e indígenas) tienen el espacio, los instrumentos y mecanismos legales de consulta previa muy fuertes que pueden y deben explotar. Si una comunidad está organizada, ¿qué puede hacer? Pues informarse y capacitarse en cómo se negocian los contratos -de esto nos va a hablar ahora

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Hernando-, cuáles son los porcentajes, ¿ese derecho que yo tengo a vigilar, cómo lo tramito?, porque la comunidad necesita capacitarse para poder solicitar toda la información necesaria para la vigilancia. Y la comunidad en general debe aprovechar los espacios para la formulación de proyectos, todo se va a definir aquí con los proyectos que se presenten hasta el momento. Entonces, estar involucrados en la planeación, formulación y vigilancia de esos proyectos es el método que tiene la comunidad para pedirle cuentas a sus alcaldes y a sus gobernadores.

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CONTRATACIÓN PETROLERA EN COLOMBIA Hernando Castro Investigador del grupo Seguridad y Defensa de la Universidad Nacional de Colombia

omo lo había señalado la Doctora Paula, Colombia tiene una particularidad y es que en su régimen constitucional y legal el Estado es el titular de los derechos, el dueño del subsuelo; tradición antigua que es una característica jurídica del Estado colombiano desde la fundación misma del Estado republicano. La primera vez que se consagra al Estado como dueño de los recursos naturales del subsuelo es en 1829 en un decreto del libertador Simón Bolívar, a quien le debemos esta forma de concebir la estructura de la propiedad del subsuelo, teniendo en cuenta que Colombia es un país con tradición minera desde la época de la colonia. La característica de que el Estado sea el propietario de los recursos naturales no renovables del subsuelo, hace que sea este quien tenga que contratar directamente, o sea, el encargado de hacer la contratación. Como les había señalado hay casos distintos, por ejemplo en los Estados Unidos, el contrato de explotación se celebra entre el dueño de la finca (o el predio donde se encontró el recurso) y la empresa que está interesada en la explotación. Es un contrato de derecho privado en el que no interviene el Estado de una forma directa, los términos del contrato se negocian entre los privados. En Colombia eso es distinto, los primeros contratos que existieron, como no teníamos una empresa colombiana de petróleos, se desarrollaban de forma directa entre el Estado y el explotador, una persona particular a la que se le entregaba esa concesión. Hay dos clases de contratos a nivel mundial: unos son contratos de concesión y otros de asociación. ¿Qué es un contrato de concesión? es en el cual se le concede al operador, al explotador, unos derechos de exploración, explotación o producción, y se le concede durante un tiempo determinado el recurso o el territorio para que los explote. Por otro lado, los contratos de asociación son aquellos en que ambos firmantes del contrato participan de la exploración y la explotación del recurso natural. Cuando Ecopetrol administraba los contratos, se hacían por asociación, que fue

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el régimen que tuvimos en Colombia de 1974 hasta el 2003; esos contratos de asociación -de los cuales aún hay muchos vigentes que se firmaron antes del 2003 y que aún están en ejecución- implicaban que si se asociaban Ecopetrol y otro operador y, se encontraba un campo que fuera rentable, ambos daban el 50% de la inversión y participaban de igual manera en las utilidades. Como les había comentado en el año 2003 hay una transformación y desde entonces volvimos al régimen imperante de antes de 1974 que era el de los contratos de concesión. En el año 2002 se expide la Ley 790 que transfiere al ejecutivo, al gobierno, es decir al Presidente y a su gabinete de ministros, la capacidad de expedir decretos con fuerza de ley que les permitirá reestructurar toda la administración pública del país. Con base en esas facultades, el gobierno expide al año siguiente el decreto 1760 del 2003 que escinde de Ecopetrol funciones que tenía la empresa en la exploración y producción de hidrocarburos. Una de las más esenciales para el tema que estamos abordando es la administración de los contratos. El Decreto 1760 se empieza ejecutar a partir del 1 enero de 2004 y desde entonces Ecopetrol deja de administrar los contratos. Otra de las funciones que se le quitan a Ecopetrol es la administración de las regalías. Anteriormente se iniciaba la exploración y si se encontraba un pozo rentable, se iba a un 50-50 de inversión y de utilidades entre el concesionario y Ecopetrol. A medida que se iban obteniendo utilidades, Ecopetrol giraba directamente al ente territorial las regalías que le correspondían en virtud de la explotación y producción -éstas son las llamadas regalías directas- y daba las regalías indirectas al Fondo Nacional de Regalías. En la actualidad y desde el año 2004, la función de administrar los contratos la lleva a cabo un administrativo autónomo especial, que es la Agencia Nacional de Hidrocarburos. Dicha agencia es la encargada de cobrar las regalías, pagar las regalías directas, y además, administrar los contratos. El Decreto 1760 de 2003 si bien le entrega a la Agencia Nacional de Hidrocarburos la responsabilidad y la potestad de administrar los contratos, le da unas bases claras de juego para que pueda aplicar los principios básicos de la contratación pública en Colombia tal y cómo lo expresa la Ley 80, que en el Artículo 76 dice que “los contratos de hidrocarburos y de minería, que se celebren en Colombia tendrán un régimen especial”. Hay tres principios que son la regla general en el derecho contencioso administrativo: la transparencia, la celeridad y la selección objetiva. Esos principios están muy bien consagrados en el Código Contencioso Administrativo, y la Ley 80 ordena que éstos principios sean aplicados en cualquier modelo de contratación en el país, bien sea de hidrocarburos o de minería.

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En este sentido, el Acuerdo 008 de la Agencia Nacional de Hidrocarburos -ANH-dispone las medidas para hacer viable la contratación de acuerdo a los tres principios mencionados. La ANH solo puede ofrecer modelos de contratación por concesión porque no es una empresa sino una unidad administrativa especial y como tal tiene unas características particulares como presupuesto propio, personería jurídica, autonomía fiscal. Al no ser una empresa, no puede concurrir, invertir o participar de la exploración y sólo puede ofrecer contratos de concesión, lo cual es una diferencia esencial con el modelo que se tenía anteriormente en los contratos de asociación. Primero se había logrado en 1974 la participación 50-50, eso había sido ratificado por la Constitución de 1991. Sin embargo en el año 2001, la junta directiva de Ecopetrol, con el argumento de estimular la participación de la inversión extranjera en el mercado de hidrocarburos, tomó la decisión de reducir su participación del 50% al 30%. Al año siguiente, dicha participación se redujo un poco más, al 28%, y ahora Ecopetrol es partícipe del 0%, en muchos de los contratos que son adjudicados por la ANH. La gráfica a continuación muestra más o menos las estadísticas de los contratos que se han firmado en el país. Hay algo que quisiera aclarar: los términos del contrato son estándar para todos; en derecho esto se llama contrato de adhesión. No hay ninguna cláusula que se negocie en el contrato actual de hidrocarburos que haya sido diseñado por la ANH y que se haya hecho público con el Acuerdo 008.

Gráfico 5. Contratación Petrolera. Fuente: Unidad de Planeación Minero Energética. (s.f.)

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El contrato de adhesión implica que ninguna de las cláusulas es negociable y que quien quiera contratar con el Estado, para hacer exploración y explotación de hidrocarburos, tiene que acogerse a los términos del contrato previamente definido y adherirse al mismo. Lo que quiere decir que no hay grandes márgenes de negociación, todo está preestablecido. El contrato en sí mismo, es básicamente un pequeño código que consagra exactamente cuáles son los términos que tiene el contratista para explorar y cuáles son los que tiene para producir. Principalmente la ANH, emitió dos tipos de contratos. Uno que es de exploración y producción, que se denomina EP y otro de evaluación técnica que se denomina ET. Los contratos de evaluación técnica (ET) son de exploración, de revisión; algunos son una especie de interventorías a los contratos de producción. Los contratos de exploración y de producción (EP) son precisamente para eso, para explorar y para producir. Entre los años 2000 y 2008, pueden ver ustedes que se han disparado los contratos firmados. Los años 2000, 2001, 2002, 2003 son las últimas fechas de contratación con el modelo de asociación que teníamos desde 1974. Allí pueden ver que se firman alrededor de siete contratos, lo cual no es un número significativo. Sin embargo aquí la cantidad no compensa la calidad. Es distinto firmar 58 contratos como se firmaron en 2008, de los cuales ninguno encuentra un pozo, a firmar un solo contrato como el de 1994 en Cusiana. No se puede medir como exitosa una política porque se hayan firmado mil, 2 mil o 3 mil contratos, sino porque estos realmente hayan llevado a una producción real o hayan encontrado recursos. Este es un indicador que utiliza la ANH para expresar la diligencia de su gestión, pero realmente no está mostrando que la política sea exitosa, en cuanto a que se encuentre el recurso, se aumenten las reservas o se llegue a un nivel que garantice el abastecimiento de hidrocarburos a mediano o largo plazo. En la siguiente gráfica se expresa el modelo de contratación para exploración y explotación, el cual incluye cuatro requisitos que el inversionista debe cumplir según el Acuerdo 008 de la ANH: capacidad técnica, financiera, jurídica y operacional. Existe una especie de audiencia pública para la celebración de esos contratos que se llama Ronda Colombia, donde la ANH publica en la página de Internet un mapa de tierras que incluye los territorios, áreas o bloques que están disponibles para la exploración en Colombia, se envían correos a empresas importantes a nivel mundial y, estas empresas, evalúan su interés. Si el postulante cumple con los cuatro requisitos y la ANH da viabilidad a las propuestas, se aprueba en primer término la propuesta de contrato que le permitirá a la empresa participar con su propuesta en la Ronda Colombia.

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Gráfico 6. Modelo de contratación para exploración y explotación. Agencia Nacional de Hidrocarburos. Acuerdo 008

Las rondas Colombia son el equivalente de una licitación, pero tienen este nombre especial. Las cuatro Rondas Colombia que se han realizado han sido celebradas en la ciudad de Cartagena. En dicho espacio, los empresarios presentan su propuesta el primer día; se hace una lectura de quienes están habilitados para participar en el evento, luego se inicia una jornada de negociaciones y si hay más de un interesado en una vía o bloque de exploración se mira cuál de las propuestas es la más favorable según el criterio de la ANH. La primera Ronda que se celebró fue de carácter regional y se llamo Ronda Caribe 2007, donde se adjudicaron territorios en el norte del país: Guajira, Córdoba y Cesar. Luego se hizo una mini Ronda Colombia 2007, donde se pusieron algunos bloques en el centro del país, en la zona andina y en el Magdalena medio. En el 2008 se hizo la segunda Ronda Colombia donde se contempló una gran parte del territorio nacional, excepto departamentos como Caquetá y Guaviare, no solamente por

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condiciones de seguridad sino también porque existe una planeación estratégica, que surge de las recomendaciones de la Unidad de Planeación Mineroenergética -UPME-, que es el órgano técnico que asesora al Ministerio de Minas y Energía para aprovechar las reservas en el largo plazo, es decir que la Orinoquía, Guaviare, y Caquetá, según estas previsiones, eran nuestras reservas para cuando la necesidad apremiara. ¿Por qué ahora estamos explorando aquí? Precisamente porque las reservas se están acabado y hay que echar mano de lo que se tenía como reservas futuras, ahora hay que buscar en todas partes. La última Ronda Colombia que se celebró se denominó Open Round Colombia 2010 para inversionistas extranjeros. En esta se adjudicaron 10 millones de hectáreas del territorio nacional para la exploración y explotación de hidrocarburos, las cuales han sido concesionadas a cerca de 74 empresas que quedaron habilitadas en la última Ronda y con las cuales se suscribieron 72 contratos. De esos 72 contratos se suspendieron y revocaron dos bloques porque se descubrió que a través de algunos operadores petroleros se estaba haciendo lavado de activos. Tales operadores o empresas eran PYMES, sin mayor reconocimiento, que habían aparecido de la noche a la mañana con grandes recursos. Sin embargo el resto de contratos siguen vigentes y se están desarrollando. En total la ANH ha concedido 48 millones de hectáreas desde que se creó en el 2004 hasta la fecha. En comparación, con la propuesta de reforma agraria en el gobierno de Santos, se señalaba que para resolver el problema de tenencia y propiedad de la tierra, había que coger a los 4 millones de desplazados y decirles que se repartieran en 3 millones de hectáreas. En los medios se presentó que esa cantidad de tierra era significativa, o de importancia, sin embargo si se mide que son 3 millones de hectáreas y que se tienen que repartir entre 4 millones de desplazados, eso quiere decir que no le va a tocar ni de a una hectárea a cada uno. Sin embargo, ya se le entregaron 48 millones de hectáreas sin ningún reparo a las empresas productoras de hidrocarburos. En este sentido, es necesario promover un debate más abierto acerca de cómo se deben administrar estos recursos, quiénes son los que prioritariamente los necesitan y cómo se haría un uso más eficiente del manejo de la tierra en Colombia. En el tercer mapa de tierra de la Ronda Colombia 2010 [presentado a continuación], las zonas rojas son las que están en producción (son los pozos más importantes que tiene el país). Aquí se puede distinguir donde queda la zona de producción de Barranca, el área de Cira-Infantas, que es el campo más antiguo que tenemos en Colombia y la joya de la corona de nuestros recursos naturales. Allí pueden también verse los campos de producción en Arauca, en el Huila, en

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el Putumayo, toda la zona sur occidental comprendida por los departamentos de Guaviare, Amazonas y el sur de la Orinoquia, zona que se tenía concebida como reserva a largo plazo. A veces el pensamiento indígena es más profundo en proyectar que va a ser de la tierra en mil años. Es una pregunta que es muy fácil de hacer dentro del pensamiento indígena, sin embargo nosotros los occidentales decimos “vamos a pensar a largo plazo, vamos a hacer una planeación estratégica” y pensamos en diez o veinte años. El plan estratégico del gobierno nacional es el Plan Visión Colombia 2019, pero en realidad no existe una planeación a largo plazo.

Mapa 1. Ronda Colombia 2010

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Lo que está en amarillo es lo que actualmente está explorándose y lo que se ve en rosado son los territorios que se adjudicaron en la Ronda Colombia: Caquetá, Chocó, entre otros. En la costa norte en especial aparecen las operaciones en aguas marinas que tomó Petrobras para hacer exploración, lo que también se conoce como exploración offshore.

A continuación se ve un mapa de infraestructura petrolera en el que se observa un oleoducto que viene del Ecuador y sale por Tumaco, pero no se conecta con toda la infraestructura del Huila y los Llanos. Colombia tiene la falencia de no contar con una interconexión sistémica. Nosotros tenemos dos puertos por donde salen esencialmente los hidrocarburos: en el norte por el Caribe, el puerto de salida internacional de Coveñas, por donde sale la mayor parte de la producción del país, y en el sur por el Pacífico en Tolú, Nariño, por donde sale toda la producción del Putumayo y también de Ecuador.

Mapa 2. Infraestructura Petrolera de Colombia.

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En cuanto a refinerías, tenemos dos: la de Barrancabermeja, en el Magdalena Medio y, en el norte Caribe, la de Cartagena. Esta una red de poliductos y oleoductos que tratan de conectar todo el país. Sin embargo se puede ver aquí también algo particular, la producción del campo Rubiales [en el Meta] no está interconectada con el resto del país, entonces de allí se tiene que sacar el crudo en carro-tanques. Así, hay algunas zonas del país que presentan las características necesarias para que se pueda sacar el petróleo a través de poliductos y oleoductos, y hay otros campos donde esto no es posible. Este es el mismo mapa que les presenté anteriormente, pero aquí podemos ver con flechas de donde vienen y para donde van los flujos de los poliductos. A la refinería de Barrancabermeja llegan más tubos que a Cartagena, pero a su vez hay un tubo que llega a Bogotá y que manda el crudo refinado para el consumo de la ciudad. Aquí hay algo particular, y es que por problemas de infraestructura no hay refinerías al sur del país, así, todo el petróleo que sale por Tolú, sale crudo, y cuando es necesario refinarlo tienen que mandarlo en buque por el Pacífico, vía canal de Panamá, hasta la refinería de Cartagena. En esta página encontramos un mapa de cuencas nacionales que nos permite identificar cuales son los principales puntos de exploración y de producción.

Mapa 3. Cuencas nacionales.

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Mapa 3. Cuencas nacionales.

El nuevo modelo de contratación de hidrocarburos, como mencionaba antes, tiene el fin de incentivar a que muchas empresas vengan a Colombia y empiecen a explorar con el ánimo de que esa inversión y exploración nos lleve a encontrar el recurso que no aparece y que necesitamos con urgencia. La gráfica, hecha por Carlos Chávez (subdirector de la ANH hasta el 2008), nos muestra cuales son las probabilidades de frecuencia y aparición de pozos, evidenciando que a medida que va pasando el tiempo, la posibilidad de encontrar pozos va desapareciendo, y aquellos que van apareciendo tienen una capacidad menor de producción.

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Gráfico 7: Estudio de frecuencia y probabilidad de existencia de pozos petroleros en Colombia.

Han aparecido otros pozos menores como en Rubiales: pozos menos significativos que no representan mayor importancia para las reservas del país, porque no son rentables y no permiten la creación de una industria que se desarrolle en la región. Que se venda más de lo que se gasta puede tener una utilidad a unos años, pero no soluciona el problema esencial de desabastecimiento, situación que estamos viviendo por la falta de reservas. Y eso se suma al aumento de producción, hay un dato con este tema y es cómo el precio del petróleo juega un papel muy importante. Hay muchos pozos en Colombia que se descubrieron, pero que en ese momento no eran rentables, cuando estaba a 30, 40 o 50 dólares el barril, pero cuando este subió a 120 dólares ya esos pozos, que se había encontrado, es decir, no es que se hayan descubierto nuevos yacimiento, sino que existían unos que no eran rentables en su momento, y que con un precio más alto ahora sí se pueden explotar. Las reservas no han crecido, son las mismas, solo que se produce más con ellas.

Renta Mineroenergética Este es un modelo que nos permite ver como ha cambiado el State Take de Colombia (lo que toma el Estado a través de regalías, compensaciones, participaciones de Ecopetrol, etcétera), con base a distintos modelos de contratación. Entre 1905 y 1970 existían los contratos de concesión con una participación del Estado que llegaba máximo al 50%, incluyendo regalías, compensaciones e impuestos sin participación de Ecopetrol. Cuando se llega a los contratos de asociación 50–50, el Estado participa del 50% debido a Ecopetrol más regalías, más compensaciones y se llega a cerca de un 70% de la participación de la renta petrolera.

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Gráfico 8.

Luego entre 1990 y 1994 se generó el esquema de asociación escalonada, sucedido por la nueva Ley de Regalías que introduce la modalidad de contrato de asociación factor R que aumenta la participación de la renta petrolera a cerca del 80%. En el año 2000, Ecopetrol decidió reducir su participación del 50% al 30%. Ese es el contrato nuevo que nos dejó el gobierno anterior, muy por debajo de lo que hemos estado en la historia de Colombia. Con este esquema, ocasionalmente se puede alcanzar el 50% de la participación.

Gráfico 9.

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Esta es una gráfica interesante que ilustra la transformación de las regalías en América Latina. Colombia tenía un modelo del 20% en 1994, que se redujo a una norma escalonada del 5% al 25%, pero en promedio se estaba cobrando del 8 al 12% de regalías. Venezuela cobraba antes unas regalías del 17% y en la actualidad cobra el 33,3%. México cobra regalías del 32%, lo que es incólume desde la revolución mexicana de 1917. En esta revolución el Artículo 27 de la Constitución estableció un monopolio absoluto del petróleo mexicano en cabeza de PEMEX y unas regalías del 32%; es una cosa ideológicamente esencial de la cultura mexicana, que ellos bajen las regalías del 32% es algo casi impensable.

Gráfico 10.

Ecuador por su parte tiene regalías del 12% sobre las cuales se proyecta un aumento gracias a las nuevas reservas encontradas; siendo un país mucho más pequeño que Colombia tiene unas reservas mucho mayores. La idea tras dicho aumento de regalías es que si yo tengo petróleo y todo el mundo lo necesita entonces puedo decirle a quien quiera: “hay muchos que me están pagando, entonces págueme bien o se lo vendo a otro”. Pero si no tengo petróleo, como en Colombia, o si no aparece, se va a acrecentar mi fragilidad frente al mundo y no va a ser posible imponer las reglas. Por ejemplo, en el caso Venezuela, que tiene las reservas más grandes del mundo, dice: “le subo al 30%”, y la Exxon Mobile pone el grito en el cielo y dice que eso está muy caro, entonces Venezuela les dice: “pues si no le gusta se lo vendo a otro” y entonces la Exxon accede. Así funciona. La posición privilegiada permite imponer reglas. Perú por su parte tiene una situación mucho más precaria que la de Colombia: no es capaz de autoabastecerse. En los años 90, en Perú se privatizaron abso-

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lutamente todas las refinerías y empresas. Existía una empresa insignia llamada Petrolube que refinaba y sacaba productos derivados del petróleo como aceites combustibles y otros. Dicha empresa se vendió a una asociación entre los españoles de REPSOL y los argentinos de Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF); por esta razón Perú cobra regalías del 5 al 63% porque como no tiene una empresa para participar del mercado, su única forma de participar de la renta petrolera es a través de las regalías, las cuales se pactan por contrato con un promedio del 43%. Por ejemplo, Camisea, el pozo más importante del Perú paga el 34,25% de regalías. En los últimos años, Bolivia ha dado un vuelco completamente distinto a Perú. En los años 90 Bolivia cobraba unas regalías muy parecidas a lo que ahora cobra Perú, a través de una empresa que se llamaba YTFB (Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos), parecida a la argentina. Esta empresa privatizada en los años 90, vendiendo sus pozos y refinerías. Con la llegada de Evo Morales al gobierno, se renacionaliza toda la industria petrolera y se revive la YTFB que asume el control de los campos más importantes. Frente a esto, lo que dijo Evo Morales fue: “bueno si yo tengo una empresa explotando, y le cobro esto de regalías la quiebro, entonces le voy a bajar las regalías”, sin embargo, Bolivia está participando del 100% de la renta petrolera de su país. Vamos a hacer un repaso rápido de cuál es la situación en América Latina. México tiene en la actualidad una producción de 3.8 millones de barriles y su consumo es de 2.78 millones de barriles día; está consumiendo prácticamente lo mismo que consume Brasil, teniendo en cuenta el inmenso volumen de la población de los dos países. En la actualidad, las reservas mexicanas son apenas de 15 mil millones de barriles cuando anteriormente eran de 45 mil millones de barriles. Vale la pena señalar que con el Artículo 27 de la Constitución mexicana de 1995 aparecen unas reformas que abren ese sistema rígido, permitiendo mayor inversión extranjera. En estos últimos años en toda América Latina, no sólo en Colombia, se hicieron reformas de distinta naturaleza y enfoque a las legislaciones de hidrocarburos en cada país, de acuerdo a la posición de cada quien dentro del mercado. Según cifras del año 2010, Brasil tiene una producción de 2 millones de barriles de crudo frente a un consumo de 2.46 millones diarios. En el último año, Brasil logró aumentar su producción y ahora está en capacidad de autoabastecerse. Esto gracias a la exploración aguas adentro u offshore, con la que lograron alcanzar reservas por 20 mil millones de barriles. Si revisamos Ecuador, éste ya exploró el 100% de su territorio. Pero una cosa es explorar el 100% del territorio de Ecuador y otra cosa es explorar el 30% del

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territorio de Brasil. Éste último tiene que hacer esfuerzos ingentes para poder explorar su amplio territorio y por eso se ha especializado en la exploración aguas adentro, lo que ha sido de gran utilidad y rentabilidad ya que los brasileros han sabido capitalizar, convirtiéndose en la primera potencia mundial en exploración y producción mar adentro. El derrame de crudo en el Golfo de México a comienzos de 2011 fue un lamentable y gravísimo error, que en parte le sucedió a los ingleses de la British Petroleum (BP) por tratar de copiar la tecnología que tienen los brasileros. El desarrollo económico de los brasileros en estos últimos gobiernos socialistas ha sido increíble. A manera de ejemplo, ellos ya están haciendo aviones y poniéndose en un nivel tremendo de discusión y diálogo con el mundo, mientras nosotros nos quedamos atrás. En 1997 Brasil acabó con el monopolio que tenía Petrobras y, quiero detenerme acá un poco, porque el modelo que tiene actualmente Colombia se parece un poco a las reformas que hizo Brasil. Este país tenía un monopolio de producción y exploración en cabeza de Petrobras, pero eso había hecho a la empresa un poco perezosa, algo así como: “si nosotros ya estamos acá y tenemos el monopolio, no nos esforzamos”, entonces se llevaron a cabo unas modificaciones para poner a competir la empresa. Entre estas modificaciones se creó la Agencia Nacional de Petróleos – ANP – que en adelante sería la encargada de administrar los contratos petroleros. ¿Cuál es la diferencia esencial entre el modelo brasilero y el colombiano? Como en Brasil había un monopolio, la reforma permite que ahora existan contratos de asociación, lo que implica que Petrobrás se puede asociar con otros para la exploración. En Colombia es distinto: nosotros teníamos asociación pero eliminamos esa posibilidad ya que ahora Ecopetrol no participa en contratos de asociación. Entonces, nos dicen que estamos copiando el modelo brasilero, lo que es una verdad parcial, ya que en el fondo la situación es muy distinta. Hay una discusión que tienen Ecuador, Venezuela y Brasil a medida que van aumentando las reservas de hidrocarburos, y es aquello que llaman los teóricos “enfermedad holandesa”. Retomando el fenómeno que señalaba el Gobernador Medina en cuanto a que si se empieza a centralizar toda la actividad productiva en la explotación de un solo recurso y se abandonan todas las demás ramas de la economía, o los demás espacios de producción, la economía se empieza a debilitar, a ser deficitaria, y se hace de alguna manera perezosa y anquilosada quedando a la suerte de ese solo mercado. Esto es lo que significa la “enfermedad holandesa”: es como poner todos los huevos en un solo canasto, lo cual es muy riesgoso e inestable, más aún teniendo en cuenta lo que podría pasar en un escenario de crisis de las reservas petroleras. No estamos acabando de descubrir el petróleo y pensando que este nos va a dar para vivir

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por miles de años, sino que estamos en una crisis de agotamiento del recurso. Y el permitir que ese monopolio llegue a una economía o a un ente territorial es mucho más peligroso.

Preguntas: 1 ¿Qué clase de contrato celebran las empresas petroleras, son de efecto público, privado o mixto y por qué? 2 Usted tiene el dato de las 48 millones de hectáreas asignadas por la Agencia Nacional de Hidrocarburos, ¿cuántas corresponden al departamento de Caquetá? 3 ¿Es obligación de la Agencia Nacional de Hidrocarburos asistir a las consultas previas o socializaciones? ¿Nosotros como comunidad qué podemos hacer para que ellos asistan? 4 ¿Qué mecanismos legales o de otro tipo tiene una comunidad para salvaguardar sus derechos frente a las decisiones del gobierno central de uso y explotación del petróleo? ¿Si no quiere explotación petrolera qué puede hacer? 5 ¿Qué pasará cuando se acabe el petróleo, nos dejen sin agua y sin reservas naturales?

Respuestas: 1. Las empresas petroleras celebran contratos públicos, y eso es independiente de quien sea el operador, ya sea Ecopetrol o un privado, porque se está contratando sobre un recurso público. Lo mismo sería con un contrato de obra de una carretera: el contrato es público y le rigen todas las reglas del derecho público. 2. No sé exactamente cuales son las hectáreas que corresponden al departamento del Caquetá pero ahí está el mapa de tierras y se puede hacer el cálculo con base en ese mapa. 3. La ANH está obligada a ir a las consultas previas, pueden hacerse valer del ministerio público que es la Procuraduría, la encargada de hacer el seguimiento a los contratos. Como son contratos de derecho público, si hay alguna anomalía o malversación, yo puedo como particular poner al tanto a la autoridad competente que es la Procuraduría. Ésta tendrá que tomar medidas, adelantar las investigaciones, determinar si hubo una violación o una falta. De hecho les había comentado que hubo unos bloques de exploración que se cancelaron debido a que se demostró que había lavado de activos, esa cancelación la hizo la Procuraduría que tiene que estar presente en todo momento; en la firma de los contratos en las Rondas Colombia, ella dice si es un territorio que demanda de consulta previa por estar asignado a una comunidad indígena o afro.

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4. Hay una gran cantidad de mecanismos legales que tienen las comunidades y que pueden aplicar frente a posibles violaciones o vulneraciones de derechos. En particular, se puede revisar si hay una efectiva violación a un derecho fundamental de un particular, y si es el caso, se pueden interponer acciones de tutela. Si están violando los derechos colectivos, como el derecho a un ambiente sano que está en el Artículo 79 de la Constitución, se pueden emprender acciones populares o acciones de grupo para la defensa y restitución de derechos constitucionales. También pueden utilizar mecanismos administrativos, como en el caso de los bloques de narcotraficantes que estaban haciendo lavados de activos, no hay una violación directa a un derecho fundamental, pero si había una violación administrativa al marco de la contratación pública estatal y a su transparencia. Ahí se pueden aplicar mecanismos administrativos tales como procesos disciplinarios ante la Procuraduría, o también pueden valerse del Ministerio del Medio Ambiente si ha habido irregularidades en el otorgamiento de las licencias ambientales, si existe una operación sin licencia, o si la operación sobrepasa los márgenes establecidos en la misma. Esos mecanismos se pueden utilizar siempre y cuando haya una violación a los derechos constitucionales de las personas, de las comunidades, a la transparencia y al orden legal colombiano. Un caso muy importante fue el que paso a principio de año con el Páramo de Santurbán, que se basó en un conflicto que tuvo la empresa Greystar con una comunidad que vivía en la zona del páramo. Esto es una muestra que no estamos en una época de cambios sino en un cambio de época, y de que la humanidad está valorando la vida. En este caso la gente valoró económicamente la situación, porque los daños de la Greystar no podían ser reparados con la plata que la empresa pudiera dar. Ellos fueron concientes del valor de la vida y de la importancia del agua. El Artículo 2 de la Constitución reconoce que ustedes son los reyes de esta tierra, no las multinacionales, ni siquiera las personas que ustedes han delegado para que administren, como los gobernadores o el presidente; ya que ellos solo tienen un poder que ustedes les han delegado. Ustedes son los que deciden lo que va a pasar: si vamos a tener agua, si vamos a tener calidad de vida o si vamos a vivir en un desierto. En Santurbán decidieron por la vida y no la plata, y ustedes también tienen que decidir. Hay una comunidad en Argentina que también enfrentó un problema de minería y sus gentes también lograron decidir a favor de la vida. Les pareció mucho más importante conservar los ríos cordobeses, que satisfacer el ego de una mujer en Europa que quería tener unos aretes de oro. Gracias.

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IMPACTOS DE LA POLÍTICA PETROLERA Édgar Mojica Unión Sindical Obrera de Ecopetrol

rimero, quiero agradecer a la Iglesia Católica por habernos invitado a participar en este espacio de debate público, y a la Universidad por acoger esta iniciativa de la Iglesia que nos parece muy importante. Voy a comentar una ponencia que va a ser entregada en medio físico y magnético para que todos la tengan. Empiezo diciendo dos cosas, que siempre que abordó estos escenarios, me gusta decir: primero, deben tener cuidado con lo que voy a decir, por lo regular me gusta hablar más de la cuenta, pero eso también los obliga a ustedes a que investiguen si lo que aquí se ha dicho es cierto o no; segundo, yo sé que lo que voy a decir a más de uno no le va a gustar, entonces les ofrezco disculpas. Voy a leer textualmente una frase: “Mantener vivo el recuerdo de cuánto sucedió es una exigencia no sólo histórica, sino también moral. No hay que olvidar. No hay futuro sin memoria. No hay paz sin memoria” . Esta es una linda frase de Juan Pablo II, que nos hace un llamado a respetar un derecho universal: el derecho a la memoria. El derecho de los pueblos y las comunidades. Tenemos derecho a saber lo que pasó, que se conozca, se cuente desde quienes lo vivieron, desde quienes son las víctimas y al final exigir garantías de que esto no vuelva a pasar.1 Dos minutos para ubicar desde dónde voy a plantear lo que voy a decir: el enfoque. Nuestros planteamientos surgen desde algo que se conoce como pensamiento crítico, teoría crítica, es decir soy de aquellos a los que les gusta estudiar la realidad, conocerla a fondo y luchar para transformarla; no solamente quedarnos en la parte del análisis ni mucho menos en la parte discursiva del problema. Creo que hay un esfuerzo tan grande sobre cómo actuar y qué hacer cuando el poder económico amenaza un derecho fundamental como el derecho a la vida, con la explotación de uno u otro recurso de carácter minero o energético.

1 Palabras pronunciadas por el Papa Juan Pablo II en el 50 aniversario de la Segunda Guerra Mundial, el 11 de Junio de 1995. En: http://www.vatican.va/holy_father/john_paul_ii/angelus/1995/ documents/hf_jp-ii_ang_19950611_sp.html

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Lo bueno de ser el último es que ya todo se ha dicho, entonces es mucho más fácil hacer la presentación. Quiero comentar dos aspectos del contexto mundial: el primer tema está relacionado con esto que Hernando llama la geopolítica del petróleo. Para nadie es un secreto que en este momento hay una disputa mundial por quién se queda con los recursos energéticos, y quién controla las rutas de abastecimiento de los mismos. Esa disputa mundial ha llevado a países como Estados Unidos a declarar el problema de energía como un problema de seguridad nacional. Esto implica que el tiempo para seguir manteniendo una economía y un sistema social que se base en la explotación de este tipo de recursos, se puede ampliar a través del mecanismo que sea con el fin de garantizar el acceso a tales recursos. Cito ejemplos: la guerra de Afganistán no es un problema de la lógica de la lucha contra el terrorismo. En este caso, se necesita lograr cierta estabilidad y control, ya que por el territorio de Afganistán se proyecta el paso de uno de los oleoductos más importantes del mundo, que también va a garantizar la soberanía energética de los Estados Unidos. Esta situación no es nueva: la guerra de Irak, la primera guerra del Golfo Pérsico; inclusive leía recientemente un artículo sobre la guerra de las Malvinas y el interés de la corona británica en estos territorios [argentinos] por la existencia de yacimientos petroleros. No solamente es un problema de los Estados Unidos, también es un problema de China, de Rusia, de los países de la Unión Europea; es decir hay una pugna mundial por quién controla el recurso y las rutas de distribución, y obviamente dichos países han puesto sus ojos en territorios que van desde América Latina hasta el cuerno de África. El segundo aspecto que hay que enfatizar en este tema internacional, es que existe una gran asimetría entre el papel del Estado, la soberanía nacional y el papel de las grandes compañías transnacionales. Colombia no ha sido ajena a este problema. La reforma petrolera de los años 90 fue presionada por la empresa inglesa British Petroleum (BP) para poder desarrollar los campos del Casanare, que terminan siendo los campos más ricos en términos de producción petrolera en nuestro país. Pero, para que tengan una visión de cuál es el poder de una empresa como ésta, BP tiene la capacidad de refinar 3 millones de barriles de petróleo al día en un solo campo de explotación. En Colombia se refinan 260 mil barriles de petróleo al día: 185 mil barriles al día en Barrancabermeja y 75 mil barriles en Cartagena, y es un Estado soberano. Compare quién tiene el poder en el tema energético: ¿los Estados o las grandes corporaciones multinacionales? Un elemento fundamental del que he oído hablar bastante, y que en estos escenarios es común, es el de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) o Respon-

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sabilidad Social Corporativa (RSC). Esa mirada crítica que nosotros tenemos, nos obliga a ahondar en las preguntas: ¿de dónde nace el tema de la RSE o RSC?, y de verdad ¿cuál es la responsabilidad de las empresas? -a propósito de la pregunta que hacía el gobernador indígena a Hernando respecto a temas de derechos fundamentales o de violación de derechos humanos-. Me voy a detener un par de minutos aquí. Si el Estado colombiano es acusado de violar derechos humanos, el concierto internacional de los derechos humanos tiene dos opciones para juzgarlo: lo llevan al circuito americano, o sea a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, a través de la Comisión para los Derechos Humanos de las Naciones Unidas (ONU); o en caso de ser un crimen de lesa humanidad, se puede aplicar una figura jurídica que es el concierto internacional de los derechos humanos de la Corte Penal Internacional (CPI). La CPI fue creada para juzgar personas, porque las personas no se podían juzgar en la ONU por la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Ahora, ¿a dónde lleva usted la empresa? Un ejemplo, una empresa petrolera del Casanare está siendo acusada en estos momentos del secuestro, conjuntamente con paramilitares, del dirigente sindical Gilberto Torres, ¿a dónde se lleva a esa empresa por violar derechos humanos, derechos fundamentales? Si se lleva a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, ésta le va a decir: “que pena, tráigame al Estado colombiano y yo lo juzgo por omisión, por no garantizar los derechos de este colombiano”. Si lo lleva la CPI le va a decir “que pena individualíceme el caso y tráigame de pronto al gerente o al presidente de la compañía, y con mucho gusto lo investigan, cumpliendo pues con una serie de requisitos”. La triste realidad es que las empresas, especialmente las multinacionales, no son sujetos de derecho penal por violación de derechos humanos y derechos fundamentales. Es decir, hay una impunidad total en este tema, que no era así en la década de los años 70 en las Naciones Unidas. Producto de las violaciones de derechos humanos que se venían evidenciando en procesos extractivos, especialmente en las minas de diamantes de Sudáfrica, la ONU dio un gran debate para penalizar a las empresas multinacionales dedicadas a esa actividad. Obviamente el poder de las empresas pudo más y empezó a incidir en Naciones Unidas, a tal punto que en el año 2000, Ban Ki Moon proclama un documento que se conoce como el Global Compact, el pacto global en derechos humanos, que suscriben empresas, sindicatos, organizaciones no gubernamentales, etc. Esta iniciativa tiene una gravísima implicación, y es que ve los derechos humanos como un tema voluntario, no de obligatoriedad en términos de responsabilidad, respeto y garantía. De ahí nacen los famosos códigos de ética, los códigos de conducta, principios básicos y voluntarios de seguridad y derechos humanos, de responsabilidad social empresarial y responsabilidad social corporativa.

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Entonces, creo que es muy importante que se conozca el tipo de políticas versus la responsabilidad de lo que ha venido pasando, ya que en términos de derechos, las multinacionales son muy fuertes y están protegidas desde la Organización Mundial del Comercio, a través de mecanismos jurídicos que les garantiza poder llevar a cabo todos sus proyectos, mientras en términos de deberes, existe un ejercicio netamente de voluntariedad. En este sentido, hay un desequilibrio entre derechos y deberes de las empresas. Voy a citar el ejemplo más conocido en Colombia: el de Chiquita Brands, que exportaba bananos en buques que regresaban al país llenos de fusiles para el bloque Urabeño de las autodefensas. Fusiles con los que asesinaron, entre otras personas, a dos generaciones completas de líderes sindicales. Chiquita Brands fue condenada en Norteamérica, pero con sorpresa no fue condenada por violar derechos humanos, fue condenada por violar la ley antiterrorista de Estados Unidos, que dice que cualquier persona o empresa con capital norteamericano no puede financiar un grupo armado dentro o fuera del país, no por patrocinar el asesinato del líder sindical. Hernando Castro2 ha explicado muy bien toda la reforma legal que ha tenido el modelo de la explotación petrolera en Colombia. Yo quiero revisar algunos aspectos del contexto nacional, referirme al tema de impactos, y hacer énfasis en un primer elemento: en nuestra lectura, Colombia no ha tenido una coherencia en términos de política petrolera ya que no existe una ley marco que regule la explotación de hidrocarburos y que regule el sector. En Colombia han existido políticas de gobierno que obedecen más a las necesidades de los planes de desarrollo que a una política integral a largo plazo que permita desarrollar, de forma adecuada, un recurso y una industria. Eso trae algunas dificultades muy grandes porque nunca engranaron las políticas de los gobiernos con las políticas de Ecopetrol, esa gran empresa estatal. Entonces siempre se dice que la empresa estatal es lo peor que hay, y los trabajadores decíamos “es que la empresa está amarrada fiscalmente, suéltenla, sáquenla de las cuentas del país y verán cómo se desarrolla la empresa”, y siempre nos dijeron que no. Una de las cosas que hizo el Decreto 17603 fue eso, darle autonomía financiera a Ecopetrol. Una empresa desligada de la deuda fiscal, es capaz de ser rentable, pero antes, si la empresa iba a pedir un aumento internacional, o un empréstito para desarrollar cualquier proyecto le decían “qué pena pero como hace parte de las

2 Castro, Hernando, Política Minero – Energética, intervenciones 5 y 8 del presente libro. 3 Decreto 1760 del 26 de Junio de 2003. Consultado en Mayo 2 de 2012 en http://www.anh.gov.co

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cuentas de Colombia no tenemos cómo prestar”, no tenía esa posibilidad. Esa modificación petrolera tuvo gran impacto, lo voy a explicar muy sencillamente, antes del Decreto 1760 el petróleo era de los colombianos, fuera en el porcentaje que fuera, pongámonos en el peor escenario era un 70 - 30 a favor de las multinacionales; es decir que el 70% a favor de las multinacionales y el 30% para el Estado colombiano; fuera de las regalías que eran del 20%, entonces el Estado se quedaba con el 50%. Hoy en día puede venir Petrobras, una empresa que tal vez tiene responsabilidad social corporativa, o PDVSA -para mis amigos los socialistas-, a explotar petróleo en Colombia. En este caso, PDVSA podría llevarse hasta el 100% del petróleo que encuentra, por una sencilla razón, porque el contrato de concesión moderno dice que el petróleo se entrega hasta el agotamiento económico del campo, es decir hasta que se lleven la última gota. No va a revertir eso nunca el Estado. Ecopetrol creció producto de las reversiones de los contratos de asociación que existían, lo cual genera un escenario llamativo para las multinacionales. Pero, si aparte de eso se modifica la ley de regalías que estaba fija en el 20%, la pone variable y dice que la subió al 25%, para una cosa que no existe en Colombia, sucede que -como lo dijo Paula [Zuluaga]4 - “nos han engañado diciendo que subieron la ley de regalías al 25% cuando aplica solo para campos que producen por encima del 600.000 barriles diarios”. Compañeros y compañeras, los campos que más produjeron en Colombia fueron Cusiana, en el Casanare, y Caño Limón, en Arauca, y ninguno produjo por encima de 320.000 barriles diarios. Es decir, hicieron una ley de regalías para algo que no existe en este país y obviamente esto repercute en que las regalías pasan del 20% real al promedio entre el 8% y 10%, lo cual es una ventaja para las empresas multinacionales. Y si aparte de eso se hace una reforma tributaria y los exime de algunos impuestos, ¿no hace más atractivo el negocio? Adicionalmente, si se elimina una ley que le garantizaba a los trabajadores colombianos tener unas condiciones laborales dignas, pues se hace mucho más atractivo el negocio. Ya lo decía Hernando, hay más de 100 empresas petroleras del mundo en este país. ¿Y por qué?, pues porque el petróleo está regalado. Esta es la verdad aquí en este país. Hay que ir a buscarlo, hay que arriesgar dinero porque la ganancia va a ser importantísima. Por ejemplo, una compañía no muy grande como Petrominerales, del año 2006 al 2011, ha pasado de producir 5 mil a 40 mil barriles día, y ha multiplicado por cinco sus ingresos, es decir un crecimiento económico del 500%, llevando el precio de sus acciones al 50% por encima del valor comercial. Otro tema en el contexto nacional del que no se ha hablado aquí, es que en Colombia existe un conflicto, así el gobierno anterior lo haya borrado con un 4 Zuluaga, Paula, Regalías en Colombia, intervención 7 del presente libro.

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ejercicio de negación. Y como existe conflicto, existen unos actores armados de izquierda y derecha que necesitan vivir de esa guerra, entonces se da algo denominado economía de guerra. En el plano estatal ¿a cuánto asciende el porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB) nacional que se gastan las fuerzas militares de Colombia? Es uno de los más altos de la región, entonces estos grupos armados pues también tienen una economía de guerra y tienen en sus empresas y en la explotación petrolera un recurso. Entonces, en las regiones petroleras el conflicto es consistente: revive donde ha menguado. En este sentido, deben existir políticas consensuadas que tengan impacto sobre esa economía de guerra asociada a la explotación de recursos en las regiones. Como la visión que nosotros manejamos desde la Comisión es una visión desde los derechos humanos, todo se pone en categoría de derechos, no en categoría de servicios. Regularmente, por ejemplo, el tema de la energía es visto por las empresas como un tema de servicios, y ¿el servicio qué es? Que si se tiene la plata para pagar pues se tiene el servicio. En la costa atlántica ya hay tarjetas de energía prepago. Unión Fenosa, con el tema de los desconectados -aquellas familias que tenían que decidir si comían o pagaban la luz, y al decidir comer y no pagar la luz por supuesto se les suspendía el servicio. Entonces, decidió sacar venta de prepago de energía, es decir le venden una tarjeta y usted mirará como la usa; si la usa en una parranda en una noche, o abriendo el refrigerador dos veces al día, o viendo televisión sólo a las siete de la noche; es decir usted mira cómo utiliza la energía que compra como servicio, no como derecho. Este tema del desarrollo, recordando aquel mapa tan bello del mundo de noche que mostró Hernando , implica una cosa y es que en esos países, donde hay mayor acceso a recursos energéticos, está la mejor calidad de vida, la mejor educación, los mejores ingresos económicos. Por eso, en dicha imagen, África aparece oscura, infiriendo que la energía se volvió un negocio para las empresas y no un derecho de la humanidad. Entonces en esa visión de derechos humanos, hay una lista bastante comprometedora de impactos de la que, es triste decirlo, no se escapa ninguna empresa petrolera, ni siquiera Ecopetrol. Existen violaciones de derechos fundamentales a los trabajadores, como el caso del derecho de asociación. En el Casanare, producto de la violencia, los salarios de los trabajadores eran negociados por un representante laboral de los paramilitares, la autoridad, -recuerden que en el Casanare los últimos cinco gobernadores han sido procesados por parapolítica y muchos concejales están en esos procesos- y los representantes de las empresas; es decir no había una asociación sindical que representara a los trabajadores y que dijera cuánto deberían, y podían, ganar

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esos trabajadores; ni había un convenio colectivo que caracterizara esos derechos. Esto sucedió apenas hasta hace cinco o seis años. Violaciones al derecho a la vida, de las cuales hay testimonios muy cruentos. El asesinato del dirigente sindical Rafael Jaimes Torra, en Barrancabermeja en el año 2000, fue sentenciado en segunda instancia, en el tribunal superior de Santander, como un caso de lesa humanidad, y para el infortunio de este país, en este caso estuvieron vinculadas empresas, contratistas y petroleros, simplemente porque este trabajador reclamaba un derecho como un salario y mejores condiciones.5

En otra ocasión, Mancuso y el señor “Juancho Dique” [paramilitar] confesaron el secuestro, tortura y asesinato de Aury Sará Marrugo en la ciudad de Cartagena, con ocasión de un foro muy parecido a éste, donde se iba a empezar a discutir el tema de la venta de la refinería de Cartagena. En este caso, el sindicato tenía una propuesta frente a la ampliación de la refinería sin necesidad de venderla. El foro fue nefastamente inaugurado con el secuestro, y posterior asesinato, de Aury. Del presidente de la sub-directiva de la USO, se conoció que los empresarios de Mamonal pagaron 100 millones de pesos a un bloque de las autodefensas para que cometieran este crimen. En el Catatumbo colombiano, alias “el Osito” ha confesado como los fusiles entraron en los buses de la empresa petrolera, como los paramilitares durmieron en el campo petrolero de Ecopetrol y como desde ahí salieron para efectuar 5 Castro, Hernando, Política Minero – Energética, parte 1, intervención 5 del presente libro.

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la masacre de la Gabarra. Ahí se entiende porqué un trabajador de nombre William Wallace, que era vigilante, allá lo llaman “alcabalero”, fue sacado de su sitio de trabajo y desaparecido en la zona del Catatumbo. William tuvo el infortunio de estar en el único sitio de vigilancia por donde tendrían que pasar los paramilitares para efectuar la matanza de la Gabarra, es decir por ser el único testigo de los hechos, fue desaparecido. Violaciones a los derechos económicos, sociales y culturales, contemplados en los Artículos 7, 22 y 25 de la declaración universal de los derechos del hombre y en el pacto mundial de los derechos económicos, sociales y culturales. Hay una cosa muy interesante con el tema petrolero, y creo que Paula [Zuluaga] lo mencionó, y es el fenómeno de la migración. La explotación genera una migración, hay una población flotante que llega a los sitios donde se está llevando a cabo la actividad, mano de obra calificada con que normalmente no cuentan los lugares donde se lleva a cabo. Esa mano de obra flotante trae consigo una serie de impactos para la economía de la región. Es cierto que en todas las regiones petroleras el desayuno que antes valía 2 mil pesos ha empezado a valer 4 mil, porque es para los petroleros; el arriendo, la tierra, etc. Por ejemplo, en Barrancabermeja una hectárea de tierra valía 8 millones de pesos contra 60 millones de pesos que vale ahora.6 También se generan una serie de impactos sociales muy grandes, por ejemplo hay un fenómeno de prostitución infantil y juvenil ligado al tema de la explotación petrolera que se evidencia en las regiones. Yo quisiera decir que el petróleo trae desarrollo, progreso, bueno dependiendo de la lógica en que lo queramos poner. Creo que únicamente aquella lógica de acumulación económica no es para el pueblo, sino solo de acumulación de capital por capital. Voy a citar un ejemplo: Tauramena, Casanare, es un municipio de 17 mil habitantes que recibía hasta antes del Decreto 1760, 45 mil millones de pesos por concepto de regalías, lo que haría suponer que debería tener solucionados los problemas de salud, educación y saneamiento básico. Sin embargo, el 45% de la población del Casanare corresponde a SISBEN uno y dos. En el caso de Tauramena, no existe una ambulancia en el municipio y los sectores rurales no cuentan con agua potable. Entonces, digamos que no es cierto que el petróleo sea la solución de los problemas sociales, económicos y culturales que tienen las regiones petroleras. En relación con los derechos a la propiedad en las dos principales regiones petroleras que tuvo Colombia en la década de los años 80 y 90, Arauca y Casanare, logramos recoger testimonios de campesinos que tuvieron que negociar 6 Zuluaga, Paula, Regalías en Colombia, intervención 7 del presente libro.

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sus tierras bajo la “Ley de los metales”. Y, ¿cuál es esa ley? le preguntaba uno a los campesinos, y ellos decían “es el plomo y la plata”, y el campesino escogía cualquiera de los dos para vender su tierra. Con plomo era pues que lo mataban a él o alguno de su familia para quedarse con la tierra, o le ofrecían la plata que ellos consideraban podía valer su tierra y no la que de verdad valía. Existen procesos penales que vinculan a las personas que se adueñaron de las tierras con la British Petroleum y la Occidental de Colombia, y paradójicamente, una de estas personas hoy es candidato a un cargo de elección popular. El tema del medio ambiente, creo que es uno de los temas más sentidos por todas las comunidades de regiones petroleras, en términos generales la industria y el modelo extractivo energético, están generando un alto impacto en el medio ambiente del planeta. Ese modelo energético que no hemos podido cambiar es el causante fundamental de ese impacto, de ese daño ambiental. Hemos evidenciado cambios en acuíferos producto de la explotación sísmica, se tienen casos de violación a santuarios de flora y fauna, y de santuarios hídricos. Por ejemplo en Arauca, la Laguna del Lipa, que era considerada como el acuífero más importante de la región, quedó completamente contaminada, gracias a la explotación petrolera. En el departamento del Meta, las comunidades están negociando con el gobierno, entre otras cosas, que se prohíba la exploración a pesar de que ya se dio la licencia ambiental para hacer sísmica en las veredas de San Vicente y Los Pavitos en el departamento. En este tema las corporaciones autónomas creo que no juegan un papel favorable alrededor de las comunidades y la defensa del agua, del aire, y en general de los temas ambientales. Desafortunadamente para la empresa y afortunadamente para el pueblo, en esas dos veredas quedan importantes nacimientos de agua. En este caso, las comunidades que componen un pueblo de 6 mil habitantes no corren el riesgo de perder el acceso al agua, que es un derecho fundamental. Esta mañana el Gobernador mencionaba el caso de los campos de Rubiales en el Meta, que ojalá no se repita en el Caquetá. Se ha querido satanizar a una comunidad que lleva seis años luchando por la descontaminación de las aguas del río Upía, que aún siendo tratadas, después del proceso petrolero han cambiado su contextura, alcalinidad y demás propiedades químicas que rompen con el equilibrio de los ecosistemas. La pesca se acabó en el río Upía, así como los cultivos de palma de los campesinos. Entonces después de seis años de insistir, después de seis años de firmar convenios con las multinacionales petroleras, con Petrominerales y con Pacific Rubiales, después de incumplimiento tras incumplimiento de los acuerdos, las comunidades decidieron manifestarse, protestar, bloquear vías, bloquear el acceso a los vertederos de agua, porque consideran que se está atentando contra su comunidad. Lamentablemente, la respuesta fue una versión de uso

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de fuerza desmedida por parte de la fuerza pública, donde no se respetó a mujeres ni a niños que habitan en la zona de las protestas. Por ejemplo una señora que estaba embarazada, que vendía las empanadas a la entrada del vertedero, obviamente sufrió las consecuencias de lo que pasó. Entonces qué bueno que todas estas situaciones no se repitan: el daño ambiental, los salarios tercerizados a los trabajadores, entre otros. Se dice que las empresas pagan un montón de plata. ¡Mentira, no es cierto! Existe algo que se llama flexibilización laboral, aberrante en regiones como el Meta y el Casanare donde lo hacen a través de asociaciones y cooperativas, y que ha generado un fenómeno de corrupción incontrolable, cobrando en muchos casos entre 300 mil y 2 millones pesos por un puesto de trabajo. Termino con el tema de las violaciones de los derechos de los pueblos indígenas. Comunidades como los Motilón Barí en el Catatumbo colombiano, los Uwa en Boyacá y Arauca, los Cofán en el Putumayo colombiano, han sido prácticamente exterminadas producto de la explotación petrolera, y cuando hablo de exterminio hablo en términos culturales, de que se entienda que su cosmovisión y su cosmogonía es otra, no es la del hermano menor como ellos nos llaman, su cosmovisión merece respeto, su cultura ancestral merece respeto, ellos fueron y son antes que el petróleo, ellos piden respeto a su entorno y territorio. Hay un ejemplo lindísimo en el Parque Nacional Yasuní de la Amazonía ecuatoriana, donde la comunidad indígena en una lucha férrea contra las multinacionales petroleras han logrado frenar totalmente la explotación, y están en una campaña para que se pague por el petróleo que hay, si lo que se busca es el flujo de dinero, pero que no se saque, evitando así los impactos ambientales y culturales, que otrora han vivido. La construcción de plataformas petroleras en territorios indígenas, no solamente los desplaza sino que acaba con hectáreas y hectáreas de bosques para poder colocar esas locaciones. ¿Qué proponemos? Primero, que se discuta con el pueblo colombiano una ley marco de hidrocarburos en la que se contemplen todos los aspectos que tienen que ver con el modelo energético de este país, y que se cree un nuevo modelo energético que parta de la base ideológica de respetar los derechos fundamentales de los pueblos. Es decir, que se discuta entre todos y todas las colombianas, y no solo entre un grupo de expertos. Que se discuta con el pueblo colombiano una ley que penalice las violaciones de derechos humanos y fundamentales de que han sido víctimas algunos obreros, campesinos e indígenas en el territorio colombiano debido a la explotación petrolera en este país. Nuevamente quiero disculparme si lo que se dije ofendió a alguien. No era mi intención, pero creo que la historia hay que contarla como es. Gracias.

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LA ACTIVIDAD PETROLERA EN EL CAQUETÁ: ENTRE LOS RIESGOS Y LAS OPORTUNIDADES Sandra Jaramillo Ecóloga de la Fundación Red Desarrollo y Paz del Caquetá

n esta presentación se hace un ejercicio de revisión juiciosa y rigurosa de la actividad petrolera en nuestro departamento, sus impactos actuales y posibles. Propongo entonces la siguiente estructura que inicia con un poco de claridad acerca de cuáles son los momentos de la actividad petrolera, abordando temas que, después de haber recorrido todo el departamento con la ejecución del proyecto Agenda Caqueteña para la Democracia y la Paz, nos hemos dado cuenta que generan gran cantidad de expectativas y de supuestos que no necesariamente son correctos.1 Así, con el ánimo de disminuir la polarización entre posiciones alrededor del tema petrolero y de plantear puntos intermedios sobre los cuales podamos empezar a construir un diálogo común, he decidido iniciar la presentación con unas claridades técnicas muy generales, que nos pueden servir a todos para entender más el panorama: los momentos de la actividad petrolera están técnicamente clasificados en upstream que significa, o están relacionados, con momentos corriente arriba, y downstream que están relacionados con corriente abajo, existiendo un momento intermedio entre estos dos. En la segunda parte de la conferencia quiero plantear algunos factores críticos, que considero relevantes poner sobre la mesa, no para emitir juicios de valor, sino para dejarlos planteados como factores que son fundamentales que tengamos en mente para los futuros foros y espacios de diálogo alrededor del tema en el departamento. En una tercera parte, plantearé las amenazas de cada uno de esos momentos de la actividad petrolera en el territorio, y también las oportunidades, para ver un poco las dos caras de la moneda. Si ya es una realidad en nuestro de1 La presentación, en Prezi, de esta ponencia está disponible en el link: http://prezi.com/q7t_ p9o2wado/primer-foro-petrolero-en-caqueta/.

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partamento, valorar también cuáles son las opciones que podríamos tener si se hacen las cosas bien, y eso se relaciona con los dos siguientes puntos: a) algunos casos donde la actividad petrolera y la relación con la comunidad y la institucionalidad ha sido exitosa, y desde allí podríamos tener algunas lecciones aprendidas importantes para nuestro ejercicio en el territorio; b) unas reflexiones y recomendaciones que están asociadas a cuáles son esos criterios que nosotros deberíamos tener de cara a asumir una actividad petrolera que sea armónica con nuestro territorio en las dimensiones económica, política, ambiental, social y cultural. Con esta introducción quiero entonces, dejar de precedente que es una ponencia informativa, una ponencia que busca dejar en el aire algunas propuestas y algunas claridades. El primer momento entonces de la actividad petrolera en un territorio está asociada con la exploración y la producción, estos proyectos se denominan como E y P. En ese momento se pueden evidenciar varias fases: una primera en la que intervienen Ingeominas y el Instituto Geográfico Agustín Codazzi (IGAC), en la realización de estudios geológicos. Como producto de dichos estudios se producen los mapas petroleros que nos mostraba Hernando Castro2, conferencista de la mañana. Este mapa petrolero [abajo expuesto], que está construido sobre las caracterizaciones geológicas del subsuelo, es la base fundamental para las primeras negociaciones sobre los puntos potenciales para la explotación petrolera. Entonces aquí viene la primera reflexión y es que el primer acercamiento a los territorios no se hace sobre las características de la superficie, sino sobre las del subsuelo, sin considerar las primeras, que es donde se evidencian los conflictos posteriores. Un segundo momento son los estudios de aerogravimetría, los cuales no siempre se realizan por ser de baja precisión. Estos se hacen con aeronaves que están dotadas de unos aparatos especiales que levantan información de las capas superficiales del suelo, que sirven para complementar los mapas en los que se orientan las decisiones sobre las posibles concesiones. Luego viene una prospección sísmica, y es un tema que para muchos de nosotros es sensible y de conocimiento, porque es uno momentos en que nos encontramos en el departamento. Esta prospección sísmica se puede hacer de dos maneras, una es la de dos dimensiones (2D), que se trata de construir líneas en el terreno, a partir de las cuales se disponen cuerdas para realizar perforaciones manuales con una distancia específica entre ellos, cuya profundidad varia entre los 5 y 25 metros, dependiendo de las capas del suelo que se encuentren allí. En dichas perforaciones se introducen unas cargas explosivas de 2 Castro, Hernando, Política Minero – Energética, intervención 5 del presente libro.

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un material de bajo impacto, que al ser detonadas producen una onda cuyos ecos son leídos por un ecófono.

Mapa 4. Fuente: Agencia Nacional de Hidrocarburos

Esta primera prospección sísmica también puede hacerse en tercera dimensión (3D), generando una especie de cuadrícula. Esta forma de prospección tiene menor duración pero es mucho más intensa y requiere de mayor mano de obra, calificada, llegando a utilizar entre 100 y 200 personas aproximadamente. Tecnológicamente se ha avanzado también en estrategias para mitigar los posibles impactos de este momento. Las explosiones son de muy bajo impacto en términos de la fuerza con que se hacen; alrededor de ello también hay mitos

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que habría que validar hasta dónde son certeros o no, y esto sólo se puede hacer con investigaciones rigurosas y detalladas.

Gráfica 11. Estudios de aerogravimetrías.

Luego de esa prospección sísmica se hace lo que se denomina perforación estática gráfica, y se necesita una maquinaria mayor, generando también mayor impacto; porque se requiere llevar hasta los sitios la maquinaria, los taladros e instalarlos, para recoger muestras de esas capas geológicas y empezar a corroborar lo que ya se ha venido encontrando de otras maneras en las fases previas. Posterior a ello, esta la perforación exploratoria, y es que luego de que se tenga como resultado un potencial yacimiento en el lugar, se genera esta prospección. Hasta este momento pueden haber pasado alrededor de veinticinco días a seis meses, y aún no se tendrá certeza si hay o no petróleo en el territorio. Esta perforación exploratoria requiere entre dos y cinco hectáreas de superficie, para la instalación de la infraestructura necesaria, que equivale a cerca de cincuenta a ochenta cargas de tracto-mula, lo cual ya genera impactos en términos del cambio del uso de las vías de acceso y conectividad de un territorio. Esta fase permite llegar hasta donde se encuentran los posibles yacimientos, empezar a valorar el tipo de producto que allí se encuentra y la posibilidad o no de explotarse. Esa fase exploratoria puede durar hasta tres años y la mano de obra que se utiliza puede ser entre 100 y 500 personas, dependiendo de la intensidad con que se haga, de la zona y de muchas otras características, incluyendo la búsqueda de las licencias ambientales y todas las demás licencias que deben tramitarse, así como los procedimientos de ley que tienen que realizarse previos a cualquier aprovechamiento.

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Los resultados entonces de esta fase pueden llevar a que se encuentre un pozo seco, es decir, que no haya el material que se está buscando. Cuando esto sucede, se da el sellamiento y se hace un ejercicio de abandono del pozo, que pretende disminuir la huella que pueda haber dejado la actividad de exploración. En el caso en que se encuentra un posible yacimiento del cual se puede hacer explotación comercial, sucede lo siguiente: primero, se completa el estudio sísmico para tener con detalle las características del subsuelo, y posteriormente se hace algo que técnicamente se llama completamiento, que es un revestimiento del pozo en cemento. También se instala un sistema de válvulas, que técnicamente se conoce como “árbol de navidad”, con el cual se controla la presión que genera el proceso de identificación del líquido crudo. Entre esta fase y la siguiente, que es ya la fase de asentamiento del pozo de producción, hay una fase intermedia. Esas fases son pruebas cortas y extensas en donde ya hay una infraestructura más elaborada, pues el petróleo no se encuentra sólo, el petróleo se encuentra con agua, gas y permeando otro tipo de materiales como arenisca. Entonces es necesario hacer todo un proceso de limpieza, de separación, de tratamiento del agua que durante tantos millones de años ha estado compartiendo el mismo lugar con el petróleo, para que luego pueda ser reinyectada en el mismo pozo, reutilizada en la misma zona de explotación o devuelta al entorno. Así, suceden dos cosas interesantes: primero, se verifica la capacidad y la calidad del pozo, y segundo, se determinan sus reservas. Lo anterior trae unas consecuencias: por un lado, se inicia una primera fase de producción que por primera vez, seguramente después de tres o cuatro años de trabajo, traerá las primeras regalías porque ya hay producción como tal. Y por otro lado, el hecho de conocer las reservas o la capacidad y la calidad del producto que se encuentra en ese yacimiento, hace que se genere un impacto en el mercado accionario de la compañía a la que le fue concesionado el contrato, entonces aquí ya tenemos una primera aproximación al aprovechamiento comercial. Al finalizar la fase de exploración y producción, viene la aprobación o negación, por parte de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), que como ya nos explicaron se crea desde el 2004, como producto de la división de Ecopetrol, y es la encargada, por el Ministerio de Minas y Energía, de administrar la política petrolera del país. En caso de obtenerse aprobación por parte de la ANH para el desarrollo de un campo de producción, se da un segundo momento, que es el de aguas abajo (downstream) que ya había mencionado. Donde hay asentamiento, explotación, y se da el proceso de transporte y de refinamiento para la generación de subproductos. Este momento puede tardar entre 20 y 25 años, dependiendo de la capacidad del pozo, y genera una alta demanda de mano de obra, acompañada de altos niveles de transformación del entorno físico y

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social, que son consecuencia directa de la instalación de la actividad petrolera en el territorio. De manera general, el departamento del Caquetá todavía se encuentra en la primera fase prospección: excepto en la zona limítrofe de conflicto con el Meta donde ya hay producción. En todos estos momentos que hemos visto hasta ahora, hay varios factores críticos que quiero poner sobre la mesa. Uno tiene que ver con la política petrolera generada por el gobierno central como tema estratégico para el país, política que encabeza el Ministerio de Minas y Energía a través de la ANH, desde donde se toman las decisiones correspondientes a este campo. Es desde allá donde se zonifica el subsuelo, se crea el mapa petrolero y se toman todas las decisiones con perspectiva geológica y no con perspectiva de lo que está sucediendo en la superficie, es decir que, no hay negociaciones integrales sino que se negocia sobre el subsuelo. Esto significa un primer marginamiento de los territorios frente a las decisiones petroleras en el país a nivel de política. Un segundo punto crítico tiene que ver con las relaciones entre la política energética, la política social y la política ambiental. Colombia está catalogada como uno de los países con la política ambiental más elaborada, con las leyes más desarrolladas, pero también tenemos una gran cantidad de problemas estructurales que generan una inconsistencia entra las múltiples políticas existentes. En este sentido, la política energética es administrada por el Ministerio de Minas y Energía, a través de la ANH. Por su parte, el Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial es el encargado de la política ambiental, la cual es coordinada por el Sistema Nacional Ambiental (SINA), y administrada por las Corporaciones Autónomas Regionales (CAR), y otros entes de este mismo nivel, que se encargan de velar y aplicar el cumplimiento de ella. A diferencia de los sectores mencionados, la política social está como en un limbo, porque todas las políticas de gobernabilidad y derechos humanos no comparten un techo común y se encuentran divididas. Unas son definidas por el Ministerio del Interior, otras por el Congreso de la República, otras por las Gobernaciones, las Alcaldías, la Presidencia a través de Acción Social, la Vicepresidencia, en fin. No hay una cobija que agrupe a todos estos para saber cuál es el interlocutor correcto, o fijo, una cabeza visible alrededor del tema de gobernabilidad y derechos humanos. Esto genera que cada una de esas instancias tome sus propias decisiones, generen sus propias políticas y que esas políticas no necesariamente se correspondan entre ellas. Es en este escenario cuando se plantean políticas como las locomotoras [propuestas por el gobierno de Juan Manuel Santos], pues automáticamente se

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empiezan a evidenciar los cruces con la vocación de los territorios que deben estar definidas por el Ministerio de Medio Ambiente. Un tercer punto crítico es la articulación entre los niveles central y local frente a la gestión del territorio. Esto está relacionado con las formas como se construyen, se ejecutan y se hace seguimiento a los planes de desarrollo en todos los niveles. Así, el Plan Nacional de Desarrollo tiene una duración, unos actores relevantes, unas priorizaciones para el país en general. Los planes de desarrollo departamentales y municipales, también tienen una duración, responden a unos intereses específicos y a unas propuestas locales de acuerdo a los gobiernos de turno. Estos tres niveles rara vez coinciden: el Plan Nacional de Desarrollo no recoge necesariamente los planes departamentales de desarrollo, ni éstos a su vez, recogen los Planes Municipales de Desarrollo. Entonces cuando se hace la política pública desde el nivel central, ésta llega al territorio en paracaídas enfrentando un escenario en el cual la institucionalidad pública no está en la capacidad de interpretar los alcances de la estrategia, y tampoco los actores en el territorio ni las comunidades tienen conocimiento y por ende no están preparados para hacerle frente. Otro punto crítico es el manejo de la información y de las expectativas, que es un punto clave. No tener claridades sobre las fases en que se encuentra un territorio frente a la explotación de petróleo, no tener conocimiento de cuáles son los impactos específicos que genera cada uno de estos procesos, crea un alto nivel de desinformación que puede generar cambios en el territorio, aún sin que la explotación petrolera se haya instalado. De esto nos hablaba Paula [Zuluaga] esta mañana, cuando nos decía que en muchos casos se generan expectativas frente a la explotación simplemente por la llegada de una evaluación de impacto ambiental, lo cual empieza a generar dinámicas sociales, económicas y culturales, dentro de un territorio sin siquiera haber hecho la primera perforación petrolera. Allí hay que tener muchísimo cuidado, y manejar esto de una manera prudente y respetuosa con el territorio. Alrededor de estos puntos críticos, y de los diferentes momentos de la actividad petrolera se generan los riesgos: a nivel político, que están asociados, como lo decía el Gobernador esta mañana, con falsos procesos producto mismo de la corrupción, o de los intereses de figuración de algunos líderes inescrupulosos que utilizan el tema petrolero y las posibles millonadas que van a llegar al territorio para hacer política, pero eso evidentemente lo que hace es generar reacciones y polarización de las comunidades, e incluso niveles de exigencia de unos y otros alrededor de una actividad que ni siquiera se ha empezado a desarrollar.

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Eso pasa tanto en la fase de exploración, como en la fase de explotación, y es que a menos que haya procesos en donde las autoridades locales y los planes de manejo del territorio se construyan con las comunidades de manera participativa, recogiendo y respetando las dinámicas de las comunidades locales para organizarse y tomar decisiones, difícilmente se van a lograr procesos donde haya un aprovechamiento o, por lo menos, una participación activa en las decisiones para que se tenga la menor cantidad de impactos posible. Otros riesgos son los económicos, entonces en la fase de exploración tenemos que muchas veces aún sin llegar la actividad petrolera como tal, se generan migraciones a los territorios que a su vez generan cambios y distorsiones en las dinámicas socioeconómicas, y eso lo vemos nosotros aquí en Puerto Rico, en Cartagena del Chairá o en San Vicente del Caguán donde ya se empiezan a sobrevalorar tierras, productos y servicios que generan alteraciones dramáticas en un contexto que aún no ha cambiado. Por otro lado, en la fase de explotación, tenemos el llamado salario petrolero que genera grandes distorsiones en términos locales. El ponente que me antecedió decía que estos salarios ni siquiera son tan altos, sino que el hecho de que tengan todos los beneficios de ley hace que en un territorio sea muy difícil competir con ellos. Y es que un jornal de un campesino equivale a 25.000 pesos el día, y eso equivale a 125.000 pesos la semana, lo que es un salario mínimo al mes. Y si una petrolera paga 1 millón de pesos, automáticamente se genera un proceso en el que no se puede competir, conllevando cambios sustanciales en la realidad y dinámica del territorio. Es entonces se producen los grandes cambios de vocación cultural y económica del territorio, porque la actividad petrolera deja de ser solo parte para convertirse en la única actividad productiva. Los riesgos sociales y culturales responden a dimensiones que se entrecruzan, y están asociados con el debilitamiento de las estructuras institucionales que puedan existir. Alrededor del tema petrolero se generan tantas expectativas, tantas distorsiones, y tantas negociaciones, que incluso en zonas donde las Juntas de Acción Comunal (JAC), órganos legítimos de participación y de organización social en el territorio, sean fuertes, tengan una estructura que se haya mantenido y sea reconocida y legitimada, incluso allí, se pueden generar serios problemas de desestructuración y corrupción entre otros, que al final, pueden terminar deteriorando toda organización que pueda tener un importante historial en el territorio. Junto a la dinámica petrolera, se presentan cambios en los patrones culturales debido a las migraciones y a los cambios en el poder adquisitivo -aquí es donde viene la preocupación inicial por la que surge este espacio de diálogo

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que aplaudo profundamente-. Dichos cambios en las dinámicas culturales están asociados con el incremento en el consumo de licor, con la prostitución, incluso con el sicariato, con la persecución a los líderes que se opongan a estos procesos. Y allí empieza a haber una degeneración de la sociedad. Y aquí aparece también el tema de las comunidades indígenas, afro-descendientes y de otras minorías poblacionales, que tienen modelos culturales muy arraigados y que se empiezan a romper y a resquebrajar; así pasa también con las comunidades campesinas que tienen modelos culturales, o acervos culturales, que son profundos y a través de los cuales construyen permanentemente el territorio. Por otro lado, está el tema de las consultas previas mal hechas. Armando esta ponencia encontré varios artículos y casos en donde se puede evidenciar la perversidad del sistema. Es decir, la misma presión que existe luego de que las empresas hacen su primera aproximación a la ANH, en donde se firman y se pactan unos tiempos y unos términos que al ser confrontados con las políticas no coinciden, que lo ambiental va por un lado, lo social por otro y a su vez lo minero-energético por otro, implica que las empresas deben correr para cumplir con toda la normatividad. Deben correr para realizar evaluaciones de impacto ambiental (que a veces quedan mal hechas), para obtener los licenciamientos en los tiempos que ya están pactados y que ya fueron firmados, so pena de caer en pagos de multas y en pérdidas para las compañías. Es perverso porque si bien hay empresas que pueden tener toda la responsabilidad y el compromiso de hacer las cosas bien, pues hay otras que no necesariamente. Y el que tengan menos tiempo se convierte en una excusa para hacer los estudios mal, obtener de manera ilegal y fraudulenta las licencias y para no hacer los procesos sociales que se tienen que hacer en el territorio, como la concertación correcta o el trabajo de fortalecimiento de capacidades con las comunidades, previo a cualquier tipo de intervención. No se puede entonces hablar de un ejercicio de consulta, cuando las comunidades a las que deben hacérsela no tienen la información completa para tomar las decisiones. Dado lo anterior, se debe empezar por potenciar las capacidades de las comunidades para enfrentar estos procesos y si los tiempos que exigen no son los correctos, es evidente que no sirven para cumplir debidamente con todos los procesos. En este contexto es que uno puede inferir que el mismo sistema, desde lo estatal, es perverso. En la explotación tenemos riesgos especialmente con la relación de dependencia que se puede generar, que significa que al haber una actividad con tanto poder económico se puede caer un reemplazo de la función del Estado. Eso lo decían los expositores que me antecedieron, y es un riesgo que debemos evitar en nuestro departamento, porque el Estado tiene responsabilidades y nosotros en nuestro departamento tenemos problemas estructurales no resueltos, previos a la llegada de la actividad petrolera; problemas que se acentúan con la llegada de la actividad petrolera.

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Hay que velar porque las comunidades ganen en capacidad para comprender que las empresas deben responder por los impactos que generan y por el aprovechamiento de los recursos que no se van a volver a tener en el territorio. Sin embargo, no se debe perder de vista que los problemas estructurales del territorio son responsabilidad del Estado en asocio con la sociedad civil y el sector privado. Hay que evitar que se de un cambio dramático en la identidad regional como producto de estos cambios en la configuración socioeconómica y productiva del territorio. Es necesario minimizar los impactos sobre los grupos étnicos y la configuración urbano-rural, que se afecta debido a que los campesinos ya no quieren producir porque prefieren trabajar en la petrolera, lo que puede generar que ya no se encuentre mano de obra disponible para trabajar en los otros sistemas o modelos productivos tradicionales del territorio. Eso genera alteraciones dramáticas que llevan, insisto, a que la actividad petrolera sea la única que se desarrolle en el territorio, cuando lo que se busca justamente es que sea lo contrario. Por otro lado, los riesgos ambientales, que están relacionados con cambios en el uso del suelo, con la adecuación de las vías y el impacto que ello pueda generar, con accidentes operacionales, con cambios en la disponibilidad del recurso hídrico en el territorio (esos cambios en la disponibilidad están todavía por ser estudiados y analizados con detalle), por la falta o ausencia de organismos con la capacidad de hacer control sobre los estudios de impacto ambiental y planes de manejo ambiental que deben tener por obligación las empresas en cada una de sus fases. En la fase de explotación es igual, existe el mismo riesgo alrededor del control y la vigilancia de las CAR que tienen a su cargo hacer eso, y todos sabemos lo que ello significa. Por ejemplo, los problemas con el recurso hídrico en nuestro departamento venían presentándose desde antes y siguen acrecentándose, y lo que hace la actividad petrolera es profundizarlos enormemente. Lo que hay que hacer es un llamado para que las autoridades tomen conciencia de que el tema ambiental debe ser prioritario, no porque el petróleo esté aquí, sino porque es un tema fundamental para el desarrollo de nuestra región. De igual manera, hay que tener en cuenta el tema de todos los tipos de contaminación asociadas a la actividad petrolera. Las oportunidades están relacionadas con la posibilidad de desarrollo de la infraestructura y la posible cofinanciación por las empresas que están haciendo presencia en el territorio. Oportunidades alrededor de la posibilidad de articular actores en los ejercicios de configuración de la gobernabilidad -casi ausente-. Asimismo que el tema petrolero sirva de excusa para encontrar canales de comunicación entre las comunidades y nuestros gobernantes, canales que se

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han perdido profundamente, según lo evidenciado en la calidad de los planes de desarrollo municipales y departamental que hoy tenemos en el territorio. Ejercicios de monitoreo y control que sean financiados por la misma dinámica económica que se genera en el territorio, para que desde la localidad, con las universidades que existen en nuestro departamento, se pueda hacer investigación y mesas permanentes de observación a los impactos que genera la actividad petrolera. El fortalecimiento de capacidades de las organizaciones sociales de base a través de planes de educación y capacitación permanentes, que permitan que nuestras comunidades cada día estén más organizadas para que tengan mayores capacidades de interlocutar, participar y apalancar las vocaciones productivas del territorio, donde parte de los dineros alrededor del tema de regalías puede ser utilizado para apalancar y permitir que las otras alternativas productivas que existen en el territorio, se potencialicen para que la actividad petrolera no sea la única, sino que sea una más. Adicionalmente, aumentar los ingresos para la inversión social y para aportar en la materialización de propuestas de desarrollo social. Casos de éxito, lo planteaba esta mañana la Doctora Tamayo, Castilla La Nueva en el Meta, que es un ejemplo donde las comunidades han logrado establecer una fuerte relación con sus autoridades locales, para que intermedien en la relación con las empresas petroleras, y que se generen programas de desarrollo integrales donde la comunidad participa, prioriza y toma decisiones sobre lo que se requiere o no en el territorio. El caso de Orito en el Putumayo, que ya no aplica, pero que funcionó: en el 2004 hubo un ejercicio muy interesante allí, alrededor de la posibilidad de la generación de espacios de diálogo, de concertación y de priorización de procesos de desarrollo territorial, donde las comunidades participaron. Luego del cambio de gobierno desafortunadamente todo se fue al traste, pero es un ejemplo de que con voluntad política y con la capacidad de las organizaciones se pueden hacer cosas interesantes alrededor del tema de la actividad petrolera. Algunas reflexiones finales. Es importante que tengamos claridad que la actividad petrolera es hoy una realidad en nuestro territorio, a la escala o la dimensión que sea que se de, hoy se está dando, y seguramente se puede intensificar. Esto tiene unos impactos y lo que tenemos que hacer ahora es buscar unos escenarios sobre los cuales se pueda dialogar y concertar, que todos los actores implicados, principalmente las comunidades, participen en el análisis y la reflexión de estos temas, en la generación de propuestas para que las posibilidades sean más grandes que los impactos y que el Estado, en todas las escalas, sea un dinamizador de esta mesa de diálogo y discernimiento sobre el desarrollo en general.

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Entonces, realizar esquemas de ordenamiento territorial y planes de manejo territorial participativo es fundamental, porque es allí donde se prioriza lo que se necesita, es allí donde se toman decisiones. Establecer un diálogo permanente entre el estado central, las autoridades locales, las organizaciones de base, las empresas y la sociedad civil, es otro de los puntos que debe tenerse en cuenta en este escenario. Para ello, propongo en este espacio, la creación de una Mesa Permanente de Desarrollo, donde el tema petrolero sea central, y donde estén todos los actores sentados de cara a validar y reforzar las propuestas que surjan desde los diferentes sectores. Y es que el gobierno central tiene responsabilidad frente al territorio, ya que parte de los traumas que esta actividad genera cuando llega al territorio, es precisamente por la falta de información que tienen las localidades debido a la centralización absoluta de las decisiones alrededor del tema. Generar la información para hacer el seguimiento y control de los impactos, y aquí resalto el rol de las universidades locales para generar información permanente, que es fundamental para la toma de decisiones. Asimismo, establecer una articulación entre las prácticas de responsabilidad social empresarial que tienen las compañías que llevan a cabo la actividad petrolera, y la realidad territorial. No pueden construirse estrategias de responsabilidad social descontextualizadas sino que éstas tienen que responder a lo que ocurre en el territorio y para ello es fundamental que la comunidad participe. Los dejo con una reflexión final de Víctor Hugo, “El futuro tiene muchos nombres. Para los débiles es lo inalcanzable. Para los temerosos, lo desconocido. Para los valientes es la oportunidad”. Los llamo entonces para que encontremos puntos de reflexión colectiva que eviten la polarización de las posiciones en el territorio. Gracias.

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PETRÓLEO ¿DESARROLLO O DESTRUCCIÓN? Yolima Salazar Directora Ejecutiva de la Vicaría del Sur

ace más de 23 años la Vicaria del Sur de la Diócesis de Florencia acompaña a comunidades campesinas de siete municipios, ocho parroquias del sur del departamento de Caquetá, en su lucha por alcanzar una vida más justa, equitativa y digna. Desde su eje articulador fe-vida, y en la formación y capacitación de las comunidades, la Vicaría ha enfatizado entre otros aspectos la formación ciudadana, subrayando que: para ser buen cristiano hay que ser buen ciudadano; a participar solo se aprende participando; la Amazonia es una regalo de Dios que hay que proteger y defender; la organización y participación activa y propositiva son medios para que los derechos humanos sean una realidad, y que la voz soberana del pueblo es la voz de Dios. Este proceso de acompañamiento se ha realizado en medio de una realidad compuesta por: desigualdad social, violencia, violación de los DDHH, infracción al DIH, presencia y lucha contra los cultivos de uso ilícito, implementación de políticas y programas estatales que no responden a la realidad y necesidades de la región, presencia y confrontación de actores armados que luchan por el dominio del territorio, entre otros aspectos. Ahora, para completar esa dura realidad, la tranquilidad o poca tranquilidad que puedan tener las comunidades se ha visto interrumpida nuevamente por la llegada de las empresas petroleras. Las comunidades están nuevamente ilusionadas y con la esperanza de que pueden solucionar sus múltiples necesidades, pero como ya vimos y analizamos en el día de ayer, esto no es tan cierto. Si les va bien, lo máximo a lo que llegan por la depredación del subsuelo es a que se conviertan en mano de obra no calificada de las empresas petroleras, y eso si es que las empresas quieren contratarles. Podríamos decir nosotros ¿y por qué no siguen siendo campesinos? Y si tienen tanto arraigo por la tierra, y quieren cultivar, ¿por qué no cultivan?, ¿quién les impide hacer eso? Yo creo que todos los que estamos aquí, y el resto de Colombia, sabemos que para la producción agropecuaria no hay programas, proyectos, ni políticas que incentiven al campesino a quedarse en el campo; que los mismos TLC (Tratados de Libre Comercio) propician la producción de agrocombustibles. Todo esto genera desarraigo dentro de la misma población.

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También es cierto que si llegan las empresas petroleras –y lo analizábamos ayer en los efectos- el costo de vida sube muchísimo. Entonces, imagínense si los campesinos, que en este momento no tienen cómo solucionar sus necesidades, no son contratados y no tienen unos ingresos ni proyectos que puedan ayudarles a vivir, cómo van a poder solucionar esas necesidades. Además de este mal, podríamos decir que si los campesinos dejan de cultivar la tierra no vamos tampoco a tener alimentos sanos y vamos a atentar contra un derecho de todos nosotros, que es el derecho a la alimentación; más aún, el derecho que tenemos a la soberanía alimentaria, porque además de los alimentos, también vemos que, con la explotación de los recursos no renovables, estamos perdiendo algo maravilloso, y una riqueza que no es sólo nuestra sino de todo el planeta, esto es, la riqueza de la biodiversidad amazónica. Como todos sabemos y reconocemos, la Amazonia provee al mundo de una gran parte de oxígeno y también del 20% del agua dulce. Estos dos recursos son bienes vitales, no sólo necesarios. Entonces, nosotros tenemos que decidir si nos vamos por un bien necesario, como la energía, o trabajamos por los bienes vitales como el oxígeno, el agua y la biodiversidad. Leía en un artículo de de la revista Semana que los pronósticos para ese tesoro verde de la Amazonia no son alentadores. Un informe, elaborado por una alianza de organizaciones como el Fondo Patrimonio Natural, Gaia Amazonas, Ilsa y Alisos, reveló que “en el 2030 más de la quinta parte de la selva colombiana no existirá”1 . Esta amenaza podría ser mayor por la falta de control sobre el boom de los recursos no renovables. Ante esta realidad, como Vicaría nos hemos planteado, y queremos plantearles a ustedes, otro escenario posible a la presencia de las empresas petroleras, a la presencia y a la explotación de los recursos no renovables: ¿por qué no seguimos el ejemplo de los santandereanos con el páramo de Santurbán? ¿Por qué no optamos por la vida? ¿Por qué no trabajamos una propuesta diferente a solo pensar en concebir algunos recursos económicos que no van a durar mucho, algunos beneficios que van a ser para algunos pocos y que, en últimas, solamente van a beneficiar a las empresas que hagan las explotaciones, ni siquiera al país? Nosotros les proponemos que nos unifiquemos, que nos organicemos como sociedad caqueteña, como organizaciones de la sociedad civil, y que presentemos una propuesta alternativa al gobierno nacional. Una propuesta donde le digamos: nosotros queremos la Amazonia, queremos preservarla, porque es esencial para que la vida no se acabe. En este posible escenario, podríamos plantear también algunas alternativas que nos permitan, en lugar de negociar con las empresas los estudios y la exploración de los recursos naturales y su pos1 Amazonia en peligro en: http://www.semana.com/nacion/amazonia-peligro/164663-3.aspx

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terior explotación, hacer estudios para conocer cuánto carbono estamos realmente en capacidad de producir y negociarlo con los países más contaminantes del mundo. Esta propuesta creo que no es tan descabellada. Creo que, por la importancia que tiene la Amazonia, puede ser acogida. Nosotros estamos en el piedemonte amazónico del sur del Caquetá, que la mayoría de los que están aquí conoce, y tiene una gran belleza paisajística. Todo el que viene aquí queda admirado simplemente con ir de Florencia hacia el sur. Además de esa belleza, el Caquetá tiene una gran riqueza humana, agrícola, hídrica y una gran biodiversidad. Lo triste es que esto ya se ha visto afectado, y no voy a decir que sólo por las empresas petroleras, también por la presencia de cultivos ilícitos y por las políticas antinarcóticos. Pero en este último tiempo se ha visto afectado, especialmente, por los estudios exploratorios, por las sísmicas que están realizando las diferentes empresas multinacionales que han entrado a varios municipios: a San José, a Belén, a Albania, a Morelia. Ya se han presentado grandes daños en las cuencas hídricas, daños en las carreteras, daños en la defensa de la fauna y la pesca. Muchos de estos son irreparables como todos nosotros conocemos. Por eso la invitación que hacemos para dar la posibilidad a dos campesinos de la zona de San José de Fragua, del sector de Fragüita, y de Sabaleta, a quienes invitamos que pasen aquí al escenario y nos cuenten desde su testimonio, desde su experiencia, cómo están viviendo ellos el ingreso de las empresas petroleras.

INTERVENCIÓN DE UNA LÍDER CAMPESINA Muy buenos días para todos. Es un orgullo para nosotros estar hoy aquí, muy agradecidos con la Iglesia Católica que nos ha convocado a este sentir de verdad la realidad de nosotros. Retomando un poco las palabras de un ponente de ayer, también mis disculpas si a alguien de pronto incomodo, pero lo que vamos a hablar es una realidad. No puedo mentir, pues aquí se encuentra nuestra parroquia, Nuestra Señora de las Lajas, en cabeza de nuestro querido sacerdote José Efren Toro, las comunidades de Yurayaco, Fragüita, de la vereda Sabaleta, de la vereda La Primavera, de la vereda de Puerto Bello y de La Cristalina. Como animadora de la fe y la comunidad cristiana activa y con gran sentido de pertenencia, voy a partir dando a conocer la entrada de las petroleras a nuestra región. Inician de una forma muy sencilla invitando, no a todas las comunidades, sino que, por decir algo, buscan los líderes y luego se socializa una licencia ambiental que ellos necesitan, por lo cual se aprueba con unos pocos, y después de un tiempo no muy largo, hacen presencia y se comienza con las líneas, que son las detonaciones y el taladro. Entonces, estas detonaciones llegan e inocentemente nosotros los campesinos firmamos algo en lo que no

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nos estamos dando cuenta, estamos comprometiendo nuestras mismas tierras, nuestras mismas fuentes hídricas, nuestra misma problemática que más tarde vamos a tener, que es la socioambiental. Por esta razón, escuchaba ayer que, si bien nosotros ya tenemos la problemática encima de la tala indiscriminada, si nosotros los campesinos lo tenemos es porque nosotros no estamos capacitados y no estamos conscientes de lo que realmente estamos haciendo. Pero hoy en día miramos que quienes entran sí son muy conscientes y ellos sí saben que no se debería hacer. Estas perforaciones en algunas partes son descabelladas porque llegan y ni siquiera a nosotros mismos nos avisan. Como experiencia propia, entraron a mi finca y, cuando nos dimos cuenta, ya estaban perforando para hacer la detonación, y ni siquiera nos habían sensibilizado, a menos de 13 metros del río. Hoy mi problemática en la finca es que estoy amenazada ya por un desastre ambiental, porque eso hizo que quedara movida la tierra y por eso se ha llevado ya más de 14 metros frente a mi hogar. La ignorancia de uno en el momento lo hace que caiga en grandes errores, lo que hicieron ellos fue sensibilizarnos y de esa manera se firmó como si todo fuera muy bueno. Los campesinos no entienden porque en el momento se enceguece todo, se ve plata, se ve que todo va a ser una fuente de ingresos mucho mejor. Pero no es así. A algunos ni siquiera les pagan esos metros de línea que se hacen. Es ver nosotros cuando se sufren esas pequeñas anormalidades, pero ¿qué sucede? Que después, en esas perforaciones, a usted le dicen que eso no es nada, que eso es un “pum” allá pequeñito que no impacta nada. Pero resulta que en un plazo no muy corto se hacen unos huecos tremendos que a nosotros mismos nos toca después comenzar a cubrirlos, ni siquiera nos ayudan aun cuando sea a sanear. Seguidamente, se entra en lo que ya es la exploración, donde van a hacer la locación. En este caso, en la vereda La Cristalina, en la cual se hicieron dos locaciones: Topoyaco I y II. Estas locaciones se hicieron encima de unas vertientes, y además perjudicándonos con esos nacimientos de la quebrada La Balata, la quebrada La Cristalina y La Alberto.

Vereda La Cristalina, Pozo Topoyaco, - Septiembre Del 2010.

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Miramos que, por mucho que nos quejemos, pasan por encima de nosotros porque no estamos organizados. Esto lo que genera es una problemática social muy grande en la cual hoy estamos divididas las veredas por el afán de querer estar en el empleo, hace que usted sí vaya, que usted no, y hacen que se empiece a formar ese gran caos. Un caos, de verdad, degradante. Nosotros realmente estamos pasando una situación muy dura, porque fue contaminada nuestra fuente hídrica, donde en toda la rivera de esas quebradas habitamos las comunidades. Ustedes saben que nosotros, los asentamientos, siempre estamos sobre los ríos o sobre las fuentes hídricas (pequeñas quebradas). Seguidamente, para ellos hacer la explanación de estas dos locaciones, se necesitaba material de playa que fue muy mal utilizado y, por lo tanto, nos secaron un brazuelo del río causando grandes daños al medio ambiente y a las tierras, porque por donde enviaron el cauce total del río, este comenzó a atropellar las tierras, como nosotros decimos en la palabra común: “comer el río”. Esto hizo que surgiera un caos grande porque a ellos no les interesó de dónde iban a sacar el material de playa, si era o no era de la licencia que ellos tenían, sino que comenzó el vecino y el otro vecino a vender, y “sáquele y hágale”, sin saber y sin tener el consentimiento que se había pasado a la otra comunidad. Y se formaron grandes problemáticas duras.

Desviacion Del Brazuelo Rio Zabaleta, Foto: Alix Ramirez- 2010

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Después de este acontecimiento, vino la perforación y comenzó lo más duro: la contaminación del río Sabaleta, porque el vertimiento fue a dar directamente, ciento por ciento, a nuestro río. ¿Qué nos quedó a nosotros realmente?: organizarnos rápidamente. Un gran líder que tenemos en nuestra comunidad, con un sentido de pertenencia, porque nosotros si lo tenemos, no es que no lo tengamos, sino que no nos miran ese sentido de pertenencia desde afuera. Entonces nos organizamos las comunidades, y nos tocó inmediatamente convocar un paro a la petrolera, neutralizarla. Porque no podíamos ver que nuestros niños, en la parte de abajo, donde estudiaban, estuvieran recogiendo el agua del vertimiento que se hacía en la parte de arriba. Y no lejos, en una parte muy cortica: como a 500 metros. En el paro se logró paralizarlos, con grandes esfuerzos y atropellos porque no es fácil, pero gracias a Dios las comunidades hemos tenido un sentir común y nos organizamos. Para que ustedes vean cómo ellos hablan cuando entran: el ingeniero del medio ambiente, me acuerdo tanto y se lo dije en el día del paro, cuando él entró y dijo que era cero contaminación, cero impacto, cero perjuicios al medio ambiente. Y nosotros los campesinos decimos que eso es así, lo que nos digan nosotros aceptamos, pero no es una realidad. En el paro tuve el valor de encontrármelo y decirle: “aquí estamos, usted nos dijo que era cero contaminación y todo el vertimiento fue a nuestro río. Nuestros peces se echan a morir resultado de lo mismo”. A nosotros, con esa gran amenaza de salud, negociando nos dijeron, “vean, ustedes eran conscientes de lo que estaban haciendo, que echaban un 50% al río y arrojaban otro 50% a la tierra”. ¿A dónde lo iban a arrojar? a nuestra carretera, desde la vereda de la locación hasta la vereda de Sabaleta. Luchando no levantamos el paro y se pudo lograr con palabras que nos quitaran todo el vertimiento, que era del 100%. Lo logramos. Nosotros dijimos que lo logramos, pero eso no fue total. ¿Por qué? Porque resulta que en la noche nos echaban el vertimiento al río. Eso que yo estoy diciendo aquí, no puedo mentir porque aquí está mi comunidad, aquí están las personas que han vivido y luego vamos a mostrar unas pequeñas fotos. Ese vertimiento fue el que más nos impactó a nosotros, porque, de verdad, después lo echaron todo a la carretera y tocaba pasar por ahí. Los ojos nos lloroseaban porque esos líquidos son muy fuertes, venían enfermedades, y el decir de ellos era que eso era por las fumigaciones, porque a nosotros también nos fumigaron, o sea que de cualquier manera nos destrozan. Esos puntos que se lograron ahí no se cumplieron a totalidad, la compañía Alange Energy dijo que se iba, que ya habían terminado, pero a nosotros no nos habían cumplido. Por lo tanto, nos reunimos nuevamente y ahí sí se sumaron más comunidades, y nos fuimos a otro paro; ese estuvo más durito.

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Vereda La Cristalina, Pozo Topoyaco, - Septiembre Del 2010. “Exigimos el respeto de los convenios hechos con la vereda La Cristalina y demas comunidades. Exigimimos seriedad y cumplimiento.”

En ese otro paro nos atropelló la autoridad pública, porque la persona que estaba al frente, recuerdo tanto cuando llegué, el momento en que me dijeron los compañeros que estaban reunidos, que teníamos cinco minutos para levantar el paro, porque si no nos iban a echar toda la maquinaría encima, y nos iban a sacar. La iban a sacar [la maquinaria] por encima de nosotros. No me acababan de decir eso cuanto ya venía todo el grupo de la fuerza pública, y nosotros, en vez de salir todos, nos fuimos para la carretera; a ver si era verdad que nos iban a pasar por encima. En ese momento, de palabra me ultrajaron. Nos dijeron que nosotros éramos unos secuestradores, que nosotros éramos aliados con la guerrilla, como siempre nos dicen, porque nosotros los campesinos no tenemos ningún derecho de pedir o exigir porque nos tratan de guerrilleros. Que nosotros teníamos arresto, y trataban muy duro a los compañeros que intervenían. Entonces, yo le pedí la palabra al señor comandante y le dije que desafortunadamente a nosotros los campesinos nos violaban nuestros derechos que estaban consagrados en la Constitución nacional y que, por lo tanto, no teníamos amparo ni de ellos, que se decía eran los que venían a amparar al pueblo. Que por qué nos trataban así, si para nosotros era una realidad sentida que las multinacionales estaban entrando y nos estaban acabando con todo, nos estaban contaminado, y ellos qué estaban haciendo por nosotros. Que mirara realmente el sentir de los que estábamos ahí, y que si ellos se iban, no nos iban a dar cumplimiento a algo a lo que se comprometieron, que era ayudarnos para lo de la electrificación. Y entonces, se logró, se logró pero duro. Eso no es fácil, tiene uno que estar bien organizado. Se logró nuevamente que [la empresa] se sentara en una

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mesa de negociación, y menos mal de nuevo el comandante nos dejó que continuáramos. Se sintió realmente el sentir de nosotros y pudimos continuar. Pero totalmente no nos han cumplido. Aún tenemos nosotros mucho que ganar, porque la locación allá ya está abandonada y no le han hecho ninguna reparación de daños. Como salieron está. Han querido llevarnos las aguas residuales de acá de la locación de Fragüita hacia allá, pero estamos en una férrea expectativa. Pero eso no es nada, compañeros. Ya tenemos otra locación que nos van a hacer en la vereda La Primavera, donde pertenezco, la cual nos está afectando mucho. ¿Por qué? Porque nos viene a cerrar el camino principal que es nuestra vía de comunicación. Es muy duro ver que, a menos de 100 metros de donde van a hacer esa otra perforación, está nuestro río. Entonces, estamos realmente amenazados y por eso ayer me agradaba cuando se decía que vamos a conformar un comité, donde realmente nosotros podamos tener un apoyo, donde podamos estar en comunicación.

INTERVENCIÓN DE LÍDER COMUNITARIO Muy buenos días para todos. Lo que decía aquí la compañera es algo que es una gran realidad, que ha surgido en estas veredas al son de la compañía. Bueno, yo les voy a hacer un recuentico, no quiero irme tan extenso porque de todas maneras necesitan más tiempo para nuevas profundidades. Resulta que la compañía siempre está en una estrategia, y la forma más eficaz de ellos es buscar el medio de ver cómo hace. Por lo menos, uno dice: “yo no quiero ceder permiso, yo no quiero ceder para nada”, pero ¿qué sucede? Hay veces que el factor monetario está en los principios y resulta que a lo último llegan las erradicaciones, llegan las fumigaciones y al son de eso hay pobreza, y si hay pobreza, hay debilidad, por la cual la gente se somete, por obligación, a tener que ceder a la compañía. Porque ellos [la empresa] siempre lo dicen, ponen a las demás veredas en conflicto, porque dicen que la zona de influencia directa es tal vereda y no pueden incluir a nadie más. Entonces, ¿qué sucede allí? Las demás veredas se rebotan contra la vereda de la zona de influencia y comienzan a pelearle, para que les den las oportunidades. ¿Entonces, qué sucede? Se le da el permiso a la compañía, y sigue el trabajo con nuevos compromisos y licencias. Yo fui uno que trabajó en la locación del Topoyaco Ubeque, me nombraron la compañía y la Personería en la cuestión del medio ambiente, pero era algo tan lastimoso que yo le decía a Fabio Castro, que era el de medio ambiente: “don Fabio, es algo para mí tan lastimoso que nosotros los campesinos empezamos a cuidar el medio ambiente, y ahora ustedes no lo hacen, ustedes que sí tienen sus capacidades y sus estudios, entonces

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es algo que para mí sí es muy lastimoso, que ustedes no cuiden”. Pero una cosa es contarles y otra cosa es mirar lo que se vivió allá. Bueno, muchas gracias. Pregunta: ¿vale la pena continuar con las petroleras o hay que hacer un alto? Aquí tenemos algunas de las imágenes que se iban pasando, sobre el estado y la situación en que quedaron las fuentes hídricas, en el municipio de San José en la inspección de Fragüita.

Pozo Yariqui 1X, Proyecto Topoyaco Norte, La Locacion Se Construyo Encima De Un Humedal. Inspeccion De Fraguita. Octubre 12 Del 2011.

Nosotros queremos también contarles que, como les dije al principio, los de la Vicaría no somos expertos en este tema de petróleo, pero nos hemos dado a la tarea de conocer y estudiar para proporcionar herramientas a las personas, a los campesinos, sobre sus derechos y, sobre todo, sobre el impacto que tiene la explotación de recursos no renovables. Esto lo hemos hecho a través de talleres y también a través de una cartilla a la que hemos denominado “Petróleo ¿Desarrollo o Destrucción?”, que seguramente no será la más técnica del mundo pero que sí cuestiona y les da herramientas a las comunidades para que puedan sentar posición frente a este tema. De igual manera, desde los equipos de Pastoral se ha hecho un seguimiento a las resoluciones emanadas por el Ministerio de Ambiente, y se han confrontado con la realidad. Entonces, un compañero del equipo de San José les va

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a contar a ustedes, de una forma muy rápida, cómo va en este momento el proceso de la búsqueda de petróleo en la inspección de Fragüita.

DRENAJE DEL HUMEDAL. POZO YARIQUI 1X, PROYECTO TOPOYACO NORTE.FOTO ARCHIVO VISUR. OCTUBRE 12 DEL 2011

INTERVENCIÓN DE VICARÍA DEL SUR Buenos días. Mi intervención va a ser muy corta y va a ser referente a las resoluciones que están amparando esta intervención petrolera. La primera de la que estaban hablando es la 1035 emanada por el Ministerio de Ambiente, y por las cuales ustedes ya vieron todas las inconsistencias que se han presentado. En estos momentos, como ustedes pueden observar, es la exploración Topoyaco Norte, Si alguien ha visitado los portales que hay en San José de Fragua, esa es la triste historia y la fotografía que se está presentando no es un montaje, es la realidad que está en estos momentos en San José de Fragua. También quiero afirmar que no estamos en contra de las compañías, sino de la forma de su intervención. En estos momentos Pacific Rubiales es la empresa

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petrolera que se encuentra ejecutando las obras de perforación en las inmediaciones de la inspección de Fragüita, municipio de San José de Fragua, con el proyecto que lleva por nombre Topoyaco Norte, y que contempla la perforación de los pozos exploratorios con el fin de verificar la existencia de crudo, lo mismo que su capacidad de producción.

Petroleo ¿Desarrollo O Destrucciòn, Portales De Fraguita, Inspeccion De Fraguita, Caqueta. Foto Archivo Visur

Miremos esta parte de la Resolución 0609 del 30 de marzo de 2011, en la cual la empresa Trayectoria Oil y Gas, sucursal Colombia, solicitó la licencia ambiental para la inclusión de este proyecto. Esta licencia contempla, como área de influencia directa en el aspecto socioeconómico, 14 veredas, y como área de influencia indirecta, el municipio de San José de Fragua

Rio Zabaleta

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Para el componente físico y abiótico, el polígono del área de perforación exploratoria Topoyaco Norte, y como influencia indirecta, la cuenca el rio Sabaleta. Si nos fijamos en estos datos, nos damos cuenta de la inconsistencia que hay entre las áreas de influencia por lo siguiente: hay tres ríos en el área de intervención que se afectarán directamente por la perforación. Ellos son el río Yurayaco el río Fragüita y el río Sabaleta, junto con la quebrada La Temblona, incluyendo todos los afluentes.

Rio Yurayaco. Extraccion De Material De Playa. Foto Archivo Visur

¿Cómo es posible que no se tengan en cuenta las cuencas de estos cuerpos de agua y que la locación esté ubicada a menos distancia del perímetro estipulado por las normas ambientales? Esta locación está en el margen derecho, bajando por el rio Fragüita; está encima de un humedal afectando una quebrada pequeña en un área de sensibilidad clasificada, según el Ministerio, como muy alta.

Locacion Yariqji 1X, Construida Encima De Un Humedal. Foto Archivo Visur

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Es de conocimiento de la empresa Pacific Rubiales que, con su intervención, se están afectando los frágiles sistemas amazónicos y que hasta ahora no se han realizado las compensaciones necesarias para mitigar, al menos en una mínima parte, el negativo impacto ambiental que genera este tipo de obra, como ocurrió en la vereda La Cristalina. En esta nueva fase tampoco se ha hecho ninguna acción ambiental en estas cuencas hídricas. Otro de los aspectos que hay que tener en cuenta es el modus operandi de las transnacionales. Comenzaron a hacer su intervención sin tener en cuenta a las comunidades locales, ni sus decisiones. A sabiendas de que la ley colombiana contempla el derecho a gozar de un ambiente sano, pasaron por encima sin detenerse a pensar en las afectaciones que dejan con su presencia. Como es bien conocido por la empresa, se debe tener un plan de gestión social aplicable en caso que ocurran hechos de vulneración de derechos. Pero al indagar por este plan a los representantes de la empresa, nos contestaron que no tenían conocimiento.

Contaminacion En La Quebrada, Que Luego, Tributa Sus Aguas Al Rio Fraguita.

Las transnacionales en estos momentos tienen que cumplir con unas obligaciones primordiales para mitigar tanto el impacto social como el ambiental y otros que se puedan generar con su presencia. Esto lo dice la Resolución. Pero, en realidad, se pasaron por alto estas obligaciones. Un ejemplo de esto es el desconocimiento de los territorios indígenas que hay en San José del Fragua. Entre ellos podemos nombrar, y aquí hay representantes, del resguardo Páez el Portal, de los resguardos inganos: San Miguel, Las Brisas y Tandachirido in-

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ganokuna, que no son tenidos en cuenta en el texto de esta Resolución sacado textualmente de la Resolución 0609. Si aquí hay representantes de Corpoamazonia sería bueno saber por qué no lo reportaron en el estudio cuando dieron la Resolución. En esta parte, la Resolución nos dice que Corpoamazonia no envió su concepto. Otro de los aspectos críticos de esta intervención es el daño a la infraestructura vial. La cantidad de tractomulas que están pasando, por una infraestructura vial que fue construida en la década de los setenta, y no para este tipo de carga. Con la anterior compañía, Alange, ya sufrimos y denunciamos esta problemática, pero continuamos igual, ya que se ha visto entrar gran flujo vehicular. Si ustedes han viajado al sur, se han dado cuenta de que se cayó el puente de la quebrada La Mochilero.

Puente Colapsado, Sobre La Quebrada La Mochilero, Foto Archivo Visur.

Quiero dar a conocer también el lugar donde se está desarrollando el proyecto Topoyaco Norte. Toda esa región de San José del Fragua es una de las más bellas que tiene el departamento del Caquetá. Son cinco portales como el que se puede ver en la imagen. La invitación es a que los conozcamos. Estos lugares están catalogados según la Resolución, y según el Ministerio [de Ambiente], de sensibilidad ambiental muy alta. ¿Cómo es posible que se permita la intervención petrolera y se haga este daño ambiental?

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Portales Del Rio Fraguagrande

Finalmente, en esta fotografía podemos apreciar lo del riego en los potreros; el riego de los vertimientos que se está haciendo. Don Nelson Hurtado nos permitió esta declaración que envió a Corpoamazonia porque él ya salió perjudicado, puesto que su ganado está con enfermedades. El agua da a la quebrada de Fragüita, de ahí al cementerio. De esta agua bebe el ganado y sale perjudicado. También está presente don Carlos Paredes, quien también nos dice que están a menos de 100 metros de la locación, que ellos de noche no pueden dormir por el ruido de la maquinaria y por un olor que sale de ahí, y no se sabe qué tipo de químico es. Son dos familias que están directamente afectadas.

Intervención de la presidenta del Comité Prodefensa del Territorio y la Dignidad del Pueblo Caqueteño, Consuelo Cardona. Darle un agradecimiento especialmente a la Iglesia Católica que hace parte de este comité en cabeza del Padre Benjamín, como él viajó a Bogotá, entonces estamos con el Padre Emilio, de la Parroquia Espíritu Santo, el padre Edwin Alonso Molina, párroco de San Vicente del Caguán, y Monseñor Francisco Javier Múnera. Quiero contarles cómo empezó este comité. Nosotros tenemos, fuera del problema de la empresa, el problema del litigio con el Meta. El alcalde nos convo-

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có a una reunión amplia el 7 de octubre de 2009, para contarnos que las regalías se las estaban desembolsando al Meta. Entonces, siempre en San Vicente, para poder evitar que las cosas nos las quiten, toca a la fuerza. Cuando nos iban a quitar el hospital, hicimos una protesta pacífica y no permitimos que el hospital se lo trajeran para El Doncello. Desgraciadamente, es todo a las malas. Entonces, salimos, la mayoría, y dijimos que nos organizábamos y hacíamos una protesta en el lado del barrio El Jardín, donde la vía era una trocha como consecuencia de los carrotanques de la petrolera. Empezamos, como por decir, por la cola, porque debimos empezar fue cuando ellos [la empresa petrolera] llegaron a Los Pozos a socializar la licencia ambiental, que nunca, nunca lo hicieron con los campesinos, lo hicieron con una, o dos o tres personas. Nos legalizamos ante el Ministerio del Medio Ambiente, la Gobernación, la Alcaldía y la Cámara de Comercio. Son 332 juntas legalmente constituidas,las que pertenecemos a este Comité y cada uno tiene su representación en la directiva. El asesor jurídico de nosotros es el doctor Carlos Julio Benítez, que está aquí en el auditorio y el Padre Emilio es uno de los asesores. Nosotros comenzamos a hacer una protesta, colocamos un lazo y no dejamos pasar ni un carro de la petrolera, ni funcionarios, ni camionetas. Estuvimos ahí 58 días, fue muy duro, al sol y al agua; mucha gente nos colaboró, aquí está el ingeniero de la Gobernación que él fue muchas veces a dialogar con el Gobernador, que ya no está, para que nosotros levantáramos el paro. Entre esas, llegaron también a asesinarnos a los de la directiva, llegaron dos personas y entre varios campesinos las cogimos y las entregamos a la Policía. No tenían papeles, no tenían documentación, no tenían nada, pero cada uno portaba un arma y esta es la hora que a nosotros, con todas las demandas, nunca nos han dicho qué pasó. A los 20 días fue otro, también lo cogimos y supuestamente se le voló a la Policía. Luego fuimos al Ministerio del Interior y allá reunidos con el Meta. Este dijo que allá no había campesinos y que yo era una jefe guerrillera. Gracias a Dios, esto se aclaró, pero nosotros seguimos en la lucha y de los puntos que tomamos no todos nos los han cumplido, sólo una parte, porque lo de las vías todavía sigue y es posible que hagamos otra protesta pacífica para que nos acaben de cumplir. Formamos el comité y fuimos a todas las veredas, y yo les dije que, por favor, antes de que llegaran los de la sísmica, pusiéramos los puntos sobre las íes y no los dejáramos entrar, que es la manera derecha de hacerlo. Entonces en las veredas Nápoles, Manantial, Consolata, Tigre y El Águila todos nos unimos y no dejamos entrar la sísmica. En ese momento, ellos recogieron todo y se vinieron. En la vereda Líbano también, pero porque no ha entrado la sísmica, porque con una sola persona que dé permiso, por ahí como que tiren la línea, sacan lo que tienen que hacer.

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Entonces eso es: unidos todos y diciendo que no. La amenaza directamente del coronel de la Móvil fue que se iban a ir, y yo le dije: Dios quiera que se vayan, y si tenemos que quedarnos acá seis meses, nos quedamos pero que se vayan del Caquetá, porque nosotros no queremos la cultura petrolera, nosotros somos campesinos, ganaderos y eso es lo que queremos, la agricultura es lo que siempre nos ha sostenido. Amenazas van y vienen pero nosotros seguimos ahí. Pero yo sí quiero hacer una invitación a todos los municipios del Caquetá a que se unan al Comité, que lo ampliemos, que luchemos, que lo saquemos [adelante]. Yo les demuestro con hechos que no los hemos dejado entrar a determinadas veredas y que no los hemos dejado hacer la sísmica, que es lo principal. Ayer hice una pregunta y no la respondieron: dijeron que “entonces si la petrolera no estaba dando tantas ganancias, por qué estaban haciendo inversión”. Yo quiero aclararles que la inversión que se está haciendo en San Vicente no es para el campesino, para nadie en San Vicente, es para ellos, para la Enron que está haciendo la explotación. Porque ahí, a nosotros, cuando estábamos en una reunión, el Gobernador que ya falleció y un general nos dijeron “miren, pero es que ustedes qué más nos piden, más de 11 mil millones de pesos”. Entonces nosotros les dijimos “qué pena, pero a ustedes también los atracaron en su buena fe, porque nosotros también tenemos esa información, pero toda esa plata es para la localización de ellos para poder trabajar”. No tengo más que decirles, las puertas del comité están abiertas para que nos unamos y evitemos que la sísmica entre, porque si lo logramos no hay exploración ni explotación. Gracias. Intervención de Vicaría del Sur: ya para finalizar, queremos ratificar que el tema del petróleo y el tema de las exploraciones y explotaciones de los recursos no renovables no es un tema sólo de expertos, sino un tema que atañe a toda la sociedad colombiana y en especial a la sociedad caqueteña y a todas sus formas de organización. Por eso, ratificamos la invitación a los campesinos, a los indígenas, a las organizaciones sociales, a las organizaciones de Iglesia y a todas las instituciones, incluyendo a la comunidad universitaria, para que nos unamos, nos organicemos y emprendamos acciones colectivas que propendan por la defensa de la soberanía nacional y por un desarrollo acorde con la Amazonia, acorde con nuestra región. Gracias.

Preguntas: 1 Primera, dirigida al representante de la Vicaría: además de la explotación petrolera, ¿qué decir sobre la explotación maderable, otro factor de destrucción natural?

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2 Antes del ingreso de la compañía, ¿la comunidad se interesó por conocer los parámetros que debía cumplir la compañía para poder ingresar a la zona como son: diagnóstico ambiental, estudio de impacto ambiental, plan de mejoramiento ambiental y plan de compensación? 3 ¿Ante qué autoridades acudieron a formular las quejas y qué respuesta obtuvo la comunidad? 4 ¿Qué papel han desempeñado los medios de comunicación frente a la problemática planteada? 5 Bajo este escenario de atropello frente al cual se tienen que enfrentar las comunidades, ¿qué pueden hacer ellas mismas?, ¿qué es lo que les queda por hacer a las comunidades? 6 Más que una pregunta es una sugerencia o una invitación, y es si se podría visitar la inspección de Puerto Betania para sensibilizar a las personas y contarles todos los testimonios, así estamos acortando los caminos. Allá hay una situación similar. 7 Última pregunta, dirigida a los organizadores del foro: ¿por qué no se les informa a los caqueteños que el Caquetá ya no es reserva amazónica?, pues desde ayer se está refiriendo a nuestro departamento como de reserva amazónica y eso es falso.

Respuestas de los ponentes: 1) Sobre la explotación maderera: en el piedemonte amazónico hay una riqueza forestal grande, hay especies endémicas, como se puede observar en las fotografías, y hay mucha tala indiscriminada. Pero volvemos otra vez a lo mismo: se transporta madera de ese sitio, hablo del sur, aunque imagino que en el norte es lo mismo; se transporta madera al por mayor. Primero se estaba sacando la madera preciosa: el ahumado, sangretoro, de estas maderas finas. Ahora se está sacando bastante, y madera no fina. En las comunidades se trata de sensibilizar hacia el cuidado y hay unos ejemplos en San José, concretamente en la vereda La Cristalina, para cuidar un sector de 500 hectáreas. Se llama la reserva de El Encanto, donde hay una cueva de los guacharos también. Eso es desconocido, pero queremos darle la importancia que requiere. La reserva La Cristalina está ahí y se ha ido al Ministerio, por Parques, para gestionar si se reconoce. También la vereda La Argentina, que es punta de colonización. La comunidad trata de no dejar entrar personal desconocido a talar madera, y cuidan bastante. Eso también se está apoyando de parte de la Vicaría del Sur y también frente a la pesca y la caza indiscriminada. Frente a la explotación maderera, también queremos hacer la invitación a la autoridad ambiental para que se reporte, porque con la Personería de San José de Fragua se ha estado hablando, se han hecho contactos pero solo con la Personería tampoco se puede hacer nada.

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Construccion de locaciones. Foto archivo visur, vereda la cristalina.

Intervención de representante de la comunidad: 2) La segunda pregunta sobre si se interesaron por conocer los estudios: es que realmente es algo nuevo para una comunidad. Entonces a nosotros nunca nos dan tiempo para tener ese interés de conocer las ventajas o desventajas, o sea, es algo que llega, se da y se conforma rápidamente, como son las licencias del medioambiente. 3) Respecto a la tercera pregunta sobre ante qué autoridades nos dirigimos, nos dirigimos a la Personería municipal, al Alcalde y a la Gobernación. 4) El papel de los medios de comunicación es muy poco. Lo único que pudimos obtener fue el apoyo de parte de nuestro Obispo, acá en Armonías del Caquetá [emisora de la Diócesis de Florencia], pero todas estas cosas se quedan muy cortas y cuando ya se da la problemática, créanme que no más se da entre las compañías y estos actores, pero nosotros somos desconocidos en ese momento porque lo que interesa es que la compañía entre a trabajar; decirles que está en marcha un derecho de petición para que se logre el cumplimiento de estos acuerdos que aún no se han cumplido.

Intervención de representante de la Vicaría: 5) ¿Qué les queda por hacer a las comunidades? Yo creo que, no sólo nosotros sino ayer en varias intervenciones que hicieron algunos expertos, la invitación es a que conozcamos qué es lo que está sucediendo, a que nos organicemos,

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a que hagamos protesta, a que rechacemos lo que consideremos que está violando nuestros derechos. Pero sobre todo, a que tomemos conciencia que somos una región que así en el plan de desarrollo se diga que no es una zona de reserva, sí tenemos una riqueza grande, una gran biodiversidad que vale la pena mantener. 6) Con relación a la visita a Puerto Betania, yo creo que la propuesta que se está haciendo es de articulación con las diferentes organizaciones y comunidades. Nos podemos poner de acuerdo y podemos ayudar a facilitar que algunas personas de la zona sur vayan a la zona norte, o entre las mismas zonas, para que conozcan las experiencias. Por ejemplo, a nosotros nos interesaría muchísimo que los del comité pudieran ir a la zona sur y contarles a las comunidades cómo están trabajando y cómo están organizados.

Intervención del Padre Carlos Cubillos, director de Pastoral Social de la Diócesis de Florencia. 7) Sobre la pregunta que se hace de por qué no se le informa al pueblo caqueteño que no somos ya zona amazónica: pienso que eso es un deber y un compromiso que debía tener el Estado. Nosotros, el Caquetá, ya pertenecemos a dos zonas: el piedemonte, que es zona sur, y el llano, que es zona amazoniorinoquía. Ese es el plan de desarrollo territorial del Estado, que es bueno conocer. Yo pienso que aquí este espacio académico, este espacio de reflexión, nos debe generar muchas reflexiones. Qué bueno poder escuchar las diferentes posiciones, qué rico uno poder compartir públicamente estos espacios. En el anterior Conpes, que es el Consejo de política social departamental, yo escuchaba al señor alcalde de San José de Fragua diciendo no hay absolutamente ningún problema, que es bueno que ustedes conversen con él. Yo pedí la palabra como para decirle de la angustia que Monseñor Jorge Alberto, en el mes de abril, presentó, pero desafortunadamente a veces a uno no le dan la palabra en esos espacios. Es bueno saber a quiénes se va a elegir, porque es que nosotros somos responsables, aquí nosotros presentamos la crisis, presentamos las cosas, pero a veces vendemos la conciencia por una hoja de zinc, por un tamal, a veces nos vendemos por un partido, pero aquí se trata de pensar en serio qué es lo mejor para el Caquetá sin tomar una posición porque esto es de reflexión más profunda. Este primer foro nos tiene que generar muchas inquietudes, nos tiene que generar mucha más necesidad de exigir. El Estado debió preparar a las comunidades, antes de todo esto, pero a veces nosotros simplemente hacemos silencio. Qué bueno entonces generar junto a todos estos espacios de reflexión el conocimiento. Miren, a veces las comunidades son unas perezosas. Válgame una invitación, a veces nosotros nos preparamos para estudiar, para formarlos,

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pero a veces no nos preparamos desde la legalidad para exigir, pues tenemos muchas herramientas pero no las conocemos, no nos organizamos. Lástima que aquí estamos un puñadito chiquitico de quienes tenemos la responsabilidad. Como Iglesia, nuestro interés es abrir la reflexión, es cuestionarnos, es saber hacia dónde vamos, qué es lo que vamos a proponer de ahora en adelante. Eso no lo determina la Iglesia, lo determinamos todos en conjunto, qué es lo que más conviene. Pero también preparémonos, formémonos. Yo decía: ¿sí contratan la mano de obra nuestra? Y yo preguntaría: ¿y sí nos preparamos intelectualmente para tener una oferta de calidad? Es un cuestionamiento profundo. Yo a veces quiero ser, pero no me preparo, no me formo. Caquetá, desde hace años, viene sufriendo un deterioro grandísimo. Aquí tendría el Fondo ganadero del departamento que hacerse una reflexión grandísima. Caquetá en su belleza está deteriorado, las cuencas hídricas cuánto han perdido, eso sin entrar todavía en la dinámica petrolera y ya hemos perdido, lo que también es nuestra responsabilidad. Qué bueno y qué rico seguir abriendo estos espacios, son deliciosos para seguir reflexionando, seguir proponiendo, y, en vez de tener el detrimento de nuestro departamento, buscar soluciones objetivas para que entre todos, a nivel institucional, a nivel de la sociedad civil, del Estado, propongamos una metodología a seguir. Gracias.

Intervención de Sandra Jaramillo, Fundación Red Desarrollo y Paz del Caquetá. 7) Yo quiero solamente hacer una pequeña claridad en relación con la última pregunta, relacionada con el tema de reserva o del ser parte de la región amazónica. En efecto, como planteaba el Padre Carlos, en el Plan Nacional de Desarrollo se hace mención a una regionalización nueva en el país, y en esa regionalización el departamento del Caquetá queda dividido en dos zonas. Eso no es una versión final oficial en el tema de regionalización del país. Sin embargo, es importante tenerlo en cuenta porque desde allí se generan las propuestas y los proyectos desde el centro hacia los territorios, y obviamente influye e incide. Por otro lado, en efecto en el departamento, en la región amazónica, hay invaluables recursos naturales y esto tiene un potencial enorme con relación a estrategias de compensación, conservación y uso sostenible de esos recursos, pero frente a ese tema también hay una cantidad de inconsistencias y de mitos creados. Tenemos esquemas de pago por servicios ambientales o de compensación por servicios ambientales que en el país no están reglamentados aún; hay apenas propuestas de proyecto, pero eso todavía no tiene dientes. Todas las estrategias alrededor de ese tipo de iniciativas al interior del Ministerio de Ambiente no han sido tramitadas aún, producto justamente de la estructura actual que tiene la política ambiental en Colombia; y es que el SINA [Sistema

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Nacional Ambiental] no es una figura eficiente para hacer la administración de la política ambiental y obviamente quienes se encargan de administrar y de llevar a la práctica esa política, pues tampoco, que son las Corporaciones Autónomas Regionales, y todos sabemos los cambios que ha habido en esos niveles, y esos cambios limitan aún más la posibilidad de que estas estrategias tengan por fin cuerpo. Hay propuestas de carácter internacional, como lo mencionaba Yolima en su presentación, y es que hay mercados voluntarios para comercializar bonos de carbono con países desarrollados, contaminantes, hay propuestas alrededor de la reducción por emisiones, degradación y deforestación de bosques que por sus siglas en ingles se conoce como estrategia FELT o Felt plus, o ahora el plus plus también, pero todo eso todavía no está reglamentado, todavía no está en firme. Ni siquiera metodológicamente hay aún claridades sobre cómo operan esos fondos o sobre cómo van a participar los países encargados de generar los recursos para que eso se dé.

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IMPACTOS SOCIALES Y AMBIENTALES DE LA EXPLOTACIÓN PETROLERA EN EL PIEDEMONTE AMAZÓNICO Roberto Ramírez Montenegro. Sociólogo, Profesor de la universidad de la Amazonia.

a charla que quiero presentarles hoy se refiere a lo que ha sido La explotación petrolera en Orito (Putumayo) y examinar algunos de los impactos sociales y ambientales a los que ha llevado dicha explotación. Pienso que quienes estamos en este foro tenemos que conocer y aprender de la experiencia de pueblos vecinos, cercanos, amazónicos.

La cuenca petrolífera del Putumayo Para entrar en el tema, hay que señalar que los yacimientos petrolíferos de Orito forman parte de la llamada Cuenca sedimentaria del Putumayo, que tiene una extensión aproximada de 87 mil kilómetros cuadrados, es decir, cubre casi todo ese departamento y parte de la baja Bota caucana. Esta cuenca está separada de la denominada Cuenca Caguán, que incluye gran parte del departamento del Caquetá, por un accidente geográfico, geológico, denominado el Arco del Caquetá. Permítanme hacer algunas referencias históricas del petróleo en el Putumayo: a través de los informes de los misioneros que llegaron a transitar en diferentes épocas coloniales por esas tierras, se pudo saber que en varias zonas fluía libremente un “aceite liviano” que los indígenas se untaban en el cuerpo, por lo que los religiosos consideraban que se hacía un “uso medicinal”. Informes de principios del siglo XX ya hablan de que ese líquido viscoso era usado por algunos colonos aislados para el alumbrado casero y para “tapar las junturas” de las canoas de madera que ellos construían. Ahora, trabajos recientes de Corpoamazonia refieren que en la década de los años 20 del siglo pasado algunas multinacionales petroleras realizaron las primeras exploraciones geológicas en el Putumayo.

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Trabajadores encargados de ir abriendo trochas y construyendo puentes para trasladar la infraestructura básica para iniciar la explotación. Fuente: TEXACO, 1991: Historia de una epopeya. La Texas Petroleum Company en Colombia.

La Concesión Orito–Pungo Veamos ahora algunos aspectos de la Concesión Orito–Pungo: en 1959, el Estado colombiano firmó un contrato de concesión con la Texas Petroleum Company de Estados Unidos por 30 años prorrogables, para que, en un área de 940 mil hectáreas al suroccidente del Putumayo, realizara exploración y explotación petrolera. En 1963 la labor resultó exitosa, descubriéndose el llamado campo Orito–Pungo, cuyas reservas se calcularon en 350 millones de barriles, lo que constituyó “el más grande hallazgo petrolero de la época”. En 1968 se dio inicio a la explotación, después de construir la infraestructura adecuada, y ese período empezó a ser llamado de “bonanza petrolera” en el Putumayo. Al año siguiente se inauguró el Oleoducto Transandino Orito–Tumaco, un “tubo” de 310 kilómetros de largo que sirvió para llevar el petróleo hacia los barcos que

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lo iban a transportar preferiblemente hacia Estados Unidos. Para hacer el montaje de ese “tubo”, pues así empezó a llamarlo la gente que vivía y transitaba por esos lugares, se utilizaron helicópteros, porque la zona es bastante agreste y en esa época era demasiado selvática; por ello, el oleoducto fue considerado como “un monumento de la ingeniería”. Es importante conocer lo que planteaba el gobernante del momento ante tan importante explotación petrolífera que se iniciaba. En 1969, en diferentes discursos, el presidente Lleras Restrepo hizo varias afirmaciones que quiero aquí recordar: en mayo, cuando asistió a la inauguración del Oleoducto Transandino, aseguró: “… el petróleo es la salvación para esta región tan deprimida…”. Meses más tarde, ante el Congreso nacional, señalaba que con el inicio de la explotación petrolera: “…se ir[í]a a beneficiar de manera muy notable la intendencia del Putumayo…”. En mensaje a la nación, el 7 de agosto, declaró: “… se dedicarán recursos cuantiosos a la construcción de la carretera que va [de Puerto Asís] a Mocoa y a la mejora de la carretera Pasto–Mocoa…”. Para quienes conocen el Putumayo, para los que han transitado esa carretera, la cual es considerada una de las más peligrosas en nuestro país, es claro que todas las afirmaciones del presidente Lleras han resultado si no falsas por lo menos desacertadas: el petróleo en el Putumayo ni ha sido la salvación ni ha beneficiado de manera notable a ese departamento; y qué decir de la carretera Sibundoy-Mocoa, que según los antiguos habitantes sigue siendo la ‘trocha’ que se construyó en los años 30 con motivo de la guerra con el Perú, apenas con unas cuantas reparaciones periódicas por los estragos del invierno. Los beneficios para la Texas fueron notorios: entre 1968 y 1980, la Texas extrajo más de 200 millones de barriles del campo Orito–Pungo; el año de mayor producción fue 1971, cuando se extrajeron 71 500 barriles diarios promedio. Si pensamos un momento que el precio actual del barril está por los 100 dólares, imaginen cuanto llegó a valer toda esa producción. En 1979, la Texas traspasó el contrato a la Compañía Petrolera del Río en Panamá. Según algunos dirigentes de la Unión Sindical Obrera (USO) en Orito, con los que conversé hace algunos años, esa era una empresa ‘satélite’ de la Texas para poder evadir obligaciones legales y fiscales. En esos años empieza entonces una gran movilización social en Orito, encabezada por la USO, para lograr la reversión de la concesión, por lo que en 1981 la Petrolera del Río “renunció al contrato y cedió todos sus derechos” a Ecopetrol. Pero, además de la presión social por la reversión, hay que considerar que el recurso estaba disminuyendo. Ayer alguien explicaba que los pozos petroleros son como las ollas donde se hace mazamorra, sale primero toda la sopa que está hirviendo y después se va sacando el pegado. Entonces, claro, eso también estaba incidiendo; pero lo que también lleva a la Texaco y a la Petrolera del Río

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a entregar este campo, es que en Ecuador, exactamente al otro lado del río San Miguel, fueron descubiertas por la misma Texas, las mayores riquezas petroleras que ha tenido ese país durante mucho tiempo. Entonces allí, en Lago Agrio, que es muy cerca del río, a 12 o 15 kilómetros de la frontera, se estableció la Texas y gran parte de su personal y de sus equipos; gran parte de todo lo que tenían en Orito lo llevaron rápidamente a Lago Agrio. En 1981, cuando Ecopetrol recibió la concesión, la producción había bajado del máximo de 71 500 barriles día, del año 1971, a un poco menos de 20 000 barriles día. Y a mediados de los años 90, la producción en el campo Orito-Pungo había bajado a un poco más de 13 mil barriles día. Es decir, venía declinando efectivamente la producción en ese campo. En charlas que sostuve hace tres años con funcionarios de Ecopetrol en Orito, me decían que en 1981 la empresa recibió: primero, una labor industrial en declinación con notorios pasivos socio ambientales; segundo, un creciente conflicto social por el aumento del desempleo, pues en la medida que disminuía la producción de petróleo aumentaba la cantidad de desempleo; tercero, unos gobiernos locales irresponsables administrativamente, pues alrededor del tema de regalías y de la acción empresarial de ayuda a los sectores sociales locales, habían formado una estela de corrupción, lo que no es nuevo. Por señalar algo: Orito sólo hasta 1992 tuvo por primera vez una calle pavimentada, una calle cementada, casi a los 30 años de tener petróleo y 12 o 13 años después de convertirse en municipio. Y cuarto, el conflicto armado en la región petrolera del Putumayo iba agudizándose. Entonces, Ecopetrol recibió unos recursos, pero también recibió una conflictividad muy grande en los temas ambiental, social y de lucha armada.

Los impactos sociales de la explotación petrolera en Orito Respecto a los impactos sociales, voy a tratar de exponer aquí algunas de las situaciones que se propiciaron a raíz del inicio y desarrollo de la explotación petrolera. Cuando uno trata de comparar lo que sucedió en Putumayo con lo que está sucediendo en Caquetá, lo primero que hay que decir es que allá ya estaban los indígenas, pues son milenarios ahí, cuando apareció la explotación petrolera, y después llegó la colonización; aquí en el Caquetá ha sido al contrario, la colonización intensiva que comenzó hace más de medio siglo fue la que arrinconó la población indígena, y ahora nos ha llegado la explotación petrolera.

Primer impacto social los cambios socioculturales entre la población indígena. En la zona donde se descubre el campo Orito-Pungo había un poblado de reducción, como lo lla-

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man los antropólogos, o una cuasi-parroquia, como la denominaba la misión en ese momento. En el informe de Fray Gaspar de Monconill, de los años 30 y 40 del pasado siglo, se relata la fundación de la cuasi-parroquia de Orito-Pungo, que estaba conformada por comunidades sionas, fundamentalmente. Los sionas no resistieron la explotación petrolera: o migraron lejos o se fueron envejeciendo ahí y ya no quisieron saber más de su comunidad; lo cierto es que hacia los años 80 sólo permanecían cuatro familias sionas en la zona de Orito-Pungo.

La “chiva”, el medio de transporte más usado por colonos y trabajadores en las carreteras construidas por la empresa petrolera. Fuente: TEXACO: Opus. Cit.

También había una población dispersa de kofanes entre los ríos Orito y Napo (este último ubicado en Ecuador). Esta es una población que frente a la explotación del hidrocarburo se va desplazando poco a poco; pero también a medida que va avanzando la explotación, van llegando las carreteras, los oleoductos, se van estableciendo pozos y ellos, los kofanes, se van corriendo. Encontrábamos que unas familias sionas fueron a dar más abajo de Puerto Leguízamo saliendo de Orito, en cambio en los kofanes su desplazamiento ha sido más corto. Pero han tratado de resistir más pasivamente frente al arrasamiento que hacen la explotación petrolera y la colonización. Desde inicios de los años 70 sucede algo que va a tener repercusiones en el trato con la petrolera, y es que empiezan a moverse grupos awá de Nariño, fundamentalmente por escasez de tierras y por sobrepoblación de sus comunidades en ese departamento. Comienzan a asentarse en el río San Juan, que

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es uno de los que conforma la cuenca del río Guamuez, de la cual también es tributario el río Orito. En 1968 el Incora constituyó los primeros resguardos con sionas y kofanes, los de los awá se conforman más adelante. Supuestamente el Incora quería preservar dichas etnias, evitar su desintegración social, pero, en la medida que la explotación petrolera y la colonización avanzaban, los resguardos eran invadidos y los indígenas seguían siendo desplazados.

¿Cuáles fueron los cambios socioculturales más notorios entre las comunidades indígenas? Primero: la Texas los volvió taladores y aserradores; ellos eran cazadores y pescadores (tanto los sionas como los kofanes), la Texas les ofrecía contratos de tala y aserrío, y, como eran conocedores de la zona, entonces los dotaba de las herramientas necesarias para hacer la tala, que no sólo era para despejar los campos, los pozos y las futuras instalaciones, sino también porque gran parte de esa madera se utilizó como base en todas las carreteras que se construyeron en la región petrolera del bajo Putumayo. De otra parte, los ‘gringos’(porque así llamaban a todos los funcionarios de la Texas que tenían ciertas características étnicas-raciales) y los ‘rolos’ (refiriéndose a quienes no eran putumayenses ni nariñenses), que eran oriundos de otras partes del país y trabajaban con las compañías, los volvieron artesanos. La cuestión era que como no había chocolates para llevarle a la novia o no había ‘souvenirs’ para llevarle a la familia, entonces les pidieron a los indígenas que les hicieran pulseras, coronas de plumas, en fin, toda esta serie de productos manuales. Entonces hubo un cambio de actividad bastante violento de la caza y la pesca a la tala, el aserrío y la artesanía. Segundo: se han perdido y se siguen perdiendo territorios ancestrales, territorios donde ellos han vivido por cientos o miles de años, sitios míticos dentro de sus cosmogonías (sitios a los que ellos atribuyen algunas características especiales de origen étnico en el compromiso entre naturaleza y sociedad), cementerios comunitarios (han sido arrasados algunos cementerios especialmente de los kofanes en toda la zona de La Hormiga). Tercero: se han presentado continuamente conflictos por tierras con colonos, pues los colonos no consideran, ni tienen en cuenta, si es resguardo o si es reserva; no les interesa nada de eso, y además como ven que no están en lo que nosotros llamamos producción, para la concepción del colono mantener la selva no es algo productivo. Entonces lógicamente ellos entran arrasando en el territorio. Pero los conflictos no solamente han sido por tierras, sino además por servidumbres, por los caminos que se utilizan para tránsito, por las muje-

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res, porque los colonos casi siempre llegan solteros y lógicamente recurren a las jóvenes indígenas y eso causa problemas porque, dentro de la concepción social que mantienen los indígenas, sus mujeres no están pensadas para que estén fácilmente saliéndose de la comunidad. Con respecto a los cultivos, los indígenas cultivaban, por decir algo, ají, y al colono no le interesaba el ají, o cuando a veces le interesaban, simplemente los iba tomando (frutales, yuca, etc.). Cuarto: se ha constatado, por investigaciones antropológicas, que en la zona a las muchachas indígenas los mismos funcionarios de las petroleras las inducían a la prostitución. Hay historias de muchachas que por viajar en helicóptero accedían a tener relaciones sexuales y entonces se produjo una difusión de enfermedades de transmisión sexual que causó problemas al interior de las comunidades, porque muchas veces esas muchachas regresaban a la comunidad y contraían matrimonio con algún miembro y podía ser todo un problema. Quinto: también se presentan roces al interior de las comunidades entre las generaciones, porque los más jóvenes vieron que el problema era ser indio, y entonces no querían ser indios, querían ser gringos, tener bluyín, llevar grabadoras y todas las cosas que tienen los gringos. Entonces empezaba a darse mucho roce entre los ancianos y los jóvenes, éstos por no ser indios y los primeros por conservar su propia cultura, su propio conocimiento. Y también se presentaban problemas intrafamiliares. A raíz de lo anterior, algunos miembros de la familia querían acceder a los ofrecimientos de las petroleras, de los funcionarios, y otros no aceptaban esa intromisión, y eso generaba mucho roce. Sexto: cambios de costumbres. En cuanto a la vestimenta, los jóvenes ya no querían la cusma sino el bluyín, ya no querían comer yuca sino comer enlatado, ya no querían beber chicha sino querían cerveza, coca-cola, toda esa serie de cosas. Con la Constitución de 1991 cambió un poco la situación de las comunidades indígenas, hubo un intento de recuperación, pero no ha sido un proceso fácil, ni ha sido un proceso definitivamente exitoso. La nueva Constitución garantiza una serie de derechos a las comunidades indígenas y, digamos, para poder gozar de esos derechos hay que organizarse. Entonces, a comienzos de los años 90 ya estaba organizada la OZIP, Organización Zonal Indígena del Putumayo, y eso lleva a que en cada una de las etnias también se conformen sus organizaciones étnicas; está la de los siona, la de los kofán y la de los awá. Se organizan muchas veces juntándose en algunos de los municipios. Entonces, uno encuentra una organización awá en Orito, en La Hormiga, y lo mismo con los kofán, pero con los siona ha sido un poco más difícil el proceso de organización. Esa organización les permite gestionar con Ecopetrol (en los años noventa ya no está la Texas sino Ecopetrol) gran parte del apoyo y de los recursos para

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las comunidades. Aunque Ecopetrol es una empresa estatal y se supone no tendría porque afectar a las comunidades, uno encuentra allí, sin embargo, algunas sutilezas. A los awá los han tenido un poco arrinconados porque les dicen que no son originarios; se inventaron una teoría de que sólo tienen que trabajar y negociar con los originarios, y entonces los awá han tenido que luchar por ese reconocimiento porque, pese a no ser originarios amazónicos o de la zona, también tienen derechos. Ecopetrol también plantea que solamente negocia con la comunidad asentada en la zona de explotación. Entonces, como decía anteriormente, si son kofanes y tratan de juntarse organizativamente con los de otras partes o de otras etnias, o con la OZIP, no pueden hacerlo, la empresa no lo acepta. Ecopetrol ha buscado aislar a las comunidades según la zona, buscando evitar esa solidaridad y los procesos organizativos étnicos. La consulta previa, a la que están obligados en las labores de sísmica, que es cuando empieza toda la labor de exploración, no ha servido, y la queja que uno encuentra en las comunidades es que aprovechan que ellos no son buenos lectores, ni buenos escritores del español y les han hecho firmar papeles que muchas veces ellos no alcanzan a leer bien, ni todo lo que leen lo entienden. Entonces terminan damnificados firmando papeles que de alguna manera los excluyen de algunas garantías y derechos. Y lo que se ha logrado, lo que tienen ahora, es un cupo de trabajo por cada contrato de sísmica, de exploración o de explotación. Supongamos que son 200 contratos, entonces son 200 puestos, pero las comunidades pueden ser 2 mil, 3 mil o 5 mil personas, no es una medida que alivie en términos generales a las comunidades. Además, para tratar de evitar conflictos, estos puestos se rotan mensualmente entre las diversas comunidades que están en el área, pero eso a la vez se vuelve una situación de conflicto, porque unas comunidades dicen “pero nosotros somos más numerosos”, y otras comunidades dicen “no pues nosotros no somos tan numerosos pero tenemos el derecho garantizado por el acuerdo con Ecopetrol”.

Segundo impacto social Tiene que ver con el poblamiento urbano que se propicia con la explotación petrolera. Hay que señalar que en esa zona suroccidental del Putumayo cuando se descubrió el petróleo, sólo existía Puerto Asís como centro urbano; en ese sentido Orito, La Hormiga, San Miguel, La Dorada, El Placer, en fin todos esos poblados que hoy encontramos por allí, han sido propiciados por la explotación petrolera. Desde 1968 la Texas se estableció en terrenos circundantes del campo Orito– Pungo; estableció ahí sus instalaciones, oficinas, viviendas muy lujosas para directivos, piscinas, casas muy bonitas en un barrio que queda ahí adentro de

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las instalaciones. Hoy en día esto es utilizado por Ecopetrol. Además de eso, fue la Texas, y no el gobierno, la que prohibió que se construyeran lo que ellos llamaban ranchos; en el comunicado de la Texas hablan de ranchos; no hablan de viviendas, ni de casas sino de ranchos. Se prohibió entonces la construcción de ranchos en las inmediaciones de las instalaciones de la Texas. Sin embargo, pese a la prohibición, la gente empezó a construirlos principalmente de yaripa, y este caserío empezaron a llamarlo Filo de Hambre, que se considera el inicio del poblamiento urbano de Orito. De todos modos, la petrolera tenía casi todos los productos y servicios que necesitaba, pero algunas cosas no las tenía: que necesitaban un toldillo, alguien tuvo que ponerse a vender toldillos, o iba alguien a visitarles y no había suficente comida y alguien tenía que ponerse a hacer un almuerzo. Ahí sí, como dicen las señoras, fue “entre querer y olvidar”. En 1972, la Texas construye un barrio por fuera de sus instalaciones empresariales para empleados de rango medio paradójicamente llamado El Porvenir. Contrasta este barrio que construye la Texas, muy lujoso y con muchos espacios, con los ranchos de yaripa de Filo de Hambre. La Texas decía en documentos y textos de la época que había sido la “gran prosperidad para los trabajadores”, que habían visto “recompensados sus esfuerzos. Ganaban altos salarios” decía la Texas sobre sus trabajadores; que gracias a ella “veían modificado su destino: libres al fin de las penurias y azares de su vida de colonos”. Era algo que no se podía asegurar de todas las personas que estaban allí. Ahora, en la medida en que todo esto iba sucediendo, también iba incrementándose el desempleo y la expectativa por trabajo desde fuera de la zona, de todos modos, porque allá había trabajo así no fuera permanente ni para todos los migrantes, y por eso Filo de Hambre seguía creciendo. En 1978 el gobierno reconoció a Orito como municipio y lo separó de Puerto Asís. Las razones fueron el aumento de la población y que Puerto Asís no estaba invirtiendo bien las regalías y los oritenses no recibían beneficios de esas. Y ahora sí como municipio supuestamente irían a recibir esos beneficios. Eso fue también fruto de una movilización social en donde la USO tuvo una participación importante.

Tercer impacto social La colonización rural favorecida por la explotación petrolera. La Texas construyó, en esos veintidós años que mantuvo la concesión (1959-1980), más de 180 kilómetros de carreteables, siendo los principales: Santa Ana–Orito y Orito–San Miguel, en la frontera con Ecuador: Además, construyó otra serie de ramales que salen de las vías principales hacia nuevos campos y pozos en exploración o en explotación. En la medida en que había carreteras, a los colonos se les facilitaba la colonización. Y lo que se encuentra en los estudios que se han hecho sobre esa colonización es que ha sido sobre todo colonos nariñenses y

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en buena parte desempleados urbanos (es decir, gente venida de Santander, de Antioquia, del Caribe, de diversas zonas del país), los que habían llegado atraídos por la explotación del hidrocarburo, pero, en vista de que no había trabajo en la petrolera, decidieron colonizar. La Texas también prohibió la colonización rural en inmediaciones de las carreteras y los pozos, pero el gobierno nacional ahí sí intercedió para decir que “la actividad petrolera sirve como apoyo a la colonización”. Había un problema de tierras muy grave en Colombia, lo sigue habiendo, pero en los años 60 era muy grave y el Gobierno vio que se podía favorecer la colonización con esta actividad y esto obligó a la empresa a que accediera a la colonización rural. Para ello el Incora, en los años 1966 y 1968, extrajo la parte del campo Orito-Pungo y la parte del bajo Putumayo de la reserva forestal amazónica, la que está constituida por la Ley 2 de 1959. Desde ese año toda la Amazonia colombiana es reserva forestal. Entonces, lo que se hace ahora es extraer áreas parciales para poder titular. Ya en los años 70 esa colonización rural tenía dinámica propia; sin embargo, la Texas publicaba avisos de prensa que decían: “en las fincas donde hubiere petróleo no se pagarán sino los cultivos; y en los lugares selváticos no se pagará nada”. Además, los precios de los cultivos y las mejoras los fijaba la Texas. Entonces fíjense ustedes, cuál finca de colono no tiene selva, entonces por la selva no le iban a pagar nada, se le iba a pagar solamente por los cultivos y lo que la Texas dijera que pagaba. La estructura social rural que se ha conformado en Orito es predominantemente minifundista: en 1992, el 85% de predios abarcaba el 46% de tierra titulada. De otra parte, ya en los años 80-90, y ahora después de la caída de DMG, Orito ha sido zona de cultivos cocaleros. Es decir, si bien con la colonización auspiciada por la actividad petrolera se resuelve un poco el problema de morada, de vivienda, no se resuelve totalmente el problema de subsistencia de los colonos. Cuarto impacto social: los nuevos actores sociales. De una parte, dentro de la misma petrolera, desde los años setenta, se empiezan a conformar diversos sindicatos de trabajadores, entre los que se destacó Sintracontexas. ¿Por qué luchaban? Básicamente por mejor salario, mejor servicio médico y estabilidad en el trabajo, porque la forma de contratación era el llamado ‘veintiocho’, esto es, una vinculación por 28 días. Entonces, el obrero cumplía ese contrato y tenía que esperar uno, dos o tres meses, según la labor, para que le dieran otro veintiocho. En 1979, todas esas organizaciones conformaron una subdirectiva de la USO, que es el sindicato base de Ecopetrol, y ellos fueron los que encabezaron la lucha de los oritenses por la reversión del contrato de concesión a la Texas. La USO ha mantenido la lucha sindical no solamente por sus reivindicaciones propias sino también por reivindicaciones de la comunidad de Orito: transporte gratuito en algunas zonas, algunos programas de salud pública,

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algunas actividades con el Sena, capacitación para la inversión de las regalías y también un poco la preocupación ambiental, cómo adelantar reclamaciones frente a la petrolera por los daños ambientales. Un proceso bastante interesante y que ha sido típico en las zonas donde hay explotación petrolera es la organización de los desempleados, pues casi nunca las personas que se quedan sin empleo se han organizado. La primera organización que se formó fue la Corporación de Desempleados de Oficios Varios del Putumayo – Cordovip-, en 1988, y lo que ellos lograron como parte de esa lucha fue que Ecopetrol, como sus empresas asociadas, los reconocieran como interlocutores válidos; Cordovip, y otras organizaciones que se han ido desprendiendo, hacen ahora la contratación en toda esa zona petrolera del bajo Putumayo. Ha sido esa la pelea que ellos han ido estableciendo en todo el departamento: organizar a los desempleados para que logren así ser parte de la decisión de nuevas vinculaciones laborales. De todos modos ha habido algunos problemas, hubo una lucha a fines de los años 90 con la Anson Drilling, que llegó con trabajadores y con sindicato propio de sus trabajadores; no quisieron reconocer a Cordovip y hubo un paro bastante largo en Orito. Se logró que la Anson los reconociera, pero después, en un altercado callejero, dijeron las autoridades, fue asesinado el presidente de la organización por los paramilitares. Otra forma de organización que se ha logrado son las Juntas de Acción Comunal - JAC - , en las veredas y en los barrios. Estas organizaciones, en el Putumayo, han desarrollado sus acciones en dos niveles: frente a los gobiernos municipales y al gobierno departamental, exigiendo obras, exigiendo recursos que provienen de las regalías; y frente a la petrolera, se han logrado recursos para algunos bienes, para parques, por ejemplo, y últimamente Ecopetrol ha cambiado la tónica y está brindando capacitación microempresarial a los miembros de las JAC. También han logrado que los trabajos no calificados que se requieren en las zonas petroleras, donde hay pozos, cuando hay averías en las instalaciones, se les encarguen a ellos y sean las juntas mismas las que decidan quienes trabajan y hacen el contrato con Ecopetrol. Paradójicamente, Ecopetrol dice que lo que ha constatado es que hay dos épocas del año donde se produce una serie de ‘extraños’ daños de válvulas, roturas pequeñas de tubos; y ellos dicen que puede haber intereses de los habitantes para obtener los contratos; esas épocas son los meses de abril-mayo (asociados a la fiesta de la madre) y los meses de noviembre-diciembre (por época navideña). Eso lo dice Ecopetrol y supuestamente tiene sus estadísticas. De todas formas, el acceso y manejo de las regalías y de los contratos ha originado conflictos al interior de las juntas.

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Impacto ambiental de la explotación petrolera en Orito Por último, quiero hablar sobre el impacto ambiental de la explotación petrolera en Orito. Durante el período que estuvo la Texas no hubo, respecto al tema ambiental, una preocupación ni política, ni gubernativa, ni social. Prácticamente la Texas obró a mano libre. Todos los efectos ambientales adversos que se pudieron presentar en esa época de explotación muy intensa del recurso se convirtieron en deterioro permanente. Por ejemplo, por el oleoducto se transportaban diariamente 60 mil o 70 mil barriles, y, si en alguna parte se dañaba el tubo, puesto que tiene un deterioro normal, los efectos ambientales de ese daño quedaban como algo a perpetuidad. Fueron también graves los deterioros socioambientales de la explotación que hizo la Texas. Encontré una queja de la comunidad de Santa Rosa de Guamuez, de los años 70, porque sus fuentes de agua, los manantiales donde tomaban el agua para beber y preparar comida, resultaron llenos de lodos, los cuales salen de la extracción petrolera y son en muchos casos tóxicos. Existían unos estándares industriales desde el año 1963 establecidos por el Ministerio de Minas para esas actividades petroleras de perforación, producción, terminación y taponamiento, lo mismo que para la disposición y reinyección de los fluidos de las aguas de formación; pero ni la Texas cumplió estas condiciones ni el Ministerio tenía las instancias ni los funcionarios encargados de hacer cumplir los estándares. En 1974, cuando se formó el Inderena, se establecieron normas ambientales relativas a los vertimientos y la contaminación asociados a la actividad petrolera; pero prácticamente la región del Putumayo estaba aislada y la Texas siempre decía que todo estaba muy bien, se eludía el compromiso de cumplir dichas normas. Sólo en 1984, que se creó la Corporación Ambiental del Putumayo (que en 1993 se convirtió en Corpoamazonia), empezaron a supervisarse y controlarse parcialmente los efectos ambientales de las actividades petroleras; pero ya en ese año la explotación la hacía Ecopetrol. Entonces, hay que anotar cómo la acción del Estado ha sido muy tardía, muy lenta frente a toda la problemática ambiental que se ha suscitado por la explotación petrolera en el Putumayo. Los efectos ambientales adversos más notorios son: 1) la tala indiscriminada; los madereros vinculados al negocio llegaron rápidamente por los cedros y las maderas más valiosas; pero cuando la Texas empezó a talar, a contratar a los indígenas para talar, acabaron con todo; 2) ahuyentamiento y desaparición de especies de fauna (terrestre y acuática) y flora; 3) alteración y contaminación de fuentes de agua; 4) contaminación aérea por gases clorofluorocarbonados que se desprenden de la explotación y de la refinación; 5) desecación e intervención de muchas quebradas y riachuelos, de pequeñas fuentes de agua que fueron desecadas para construir instalaciones o por la existencia de pozos; en fin, las mismas carreteras; la construcción de muchos de estos carreteables llevó a que varios de estos riachuelos y fuentes pequeñas fueran alterados; 6) represamiento de aguas contaminadas; 7)

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disposición inadecuada de los lodos tóxicos que se originan con la extracción; 8) inapropiado uso de las aguas de formación; éstas que están en los pozos con el petróleo son aguas que salen muy calientes, aproximadamente a temperaturas de 35 o 40 grados y tienen muchas sales y otra serie de componentes. Se constató que esas aguas simplemente las echaban a los ríos y producían mortandad de peces, pérdida de biodiversidad; y 9) explotación desordenada de otros recursos como la gravilla, la arena, que se sacaban de los ríos para construir instalaciones y viviendas, lo mismo que puentes y carreteras. Ecopetrol ha introducido poco a poco algunos controles ambientales, pero lógicamente frente a todos los daños que dejó la Texas su labor es insuficiente y esos desastres son prácticamente irreversibles en muchos casos. Actualmente se considera que las ‘piscinas’ de desechos son algunos de los peligros ambientales más notorios: se hacen unas barreras naturales formando ‘piscinas’ como las de la producción de pescado; ahí van echando lodos y una serie de residuos industriales que no tienen mayor tratamiento. Entonces, por las lluvias en la zona, muchas veces se desbordan hacia la superficie externa de la ‘piscina’ o se encuentra que se han filtrado hacia abajo, hacia el nivel freático. Eso tiene una serie de consecuencias en las fuentes de agua y en el suelo. Otro riesgo ambiental tiene que ver con el daño de los oleoductos, tanto el normal por desgaste como el de las voladuras por las guerrillas. Esto lo llaman algunos técnicos de Ecopetrol los ‘voleoductos’, o sea mucha dinamita tanto del ELN, que ha hecho presencia sobre todo en la zona Nariño-Putumayo, como de las FARC, que han hecho presencia también en el Putumayo. Estos grupos desarrollan en algunas ocasiones estas acciones, lo que ha generado un daño ambiental en suelos y aguas, que se considera uno de los principales riesgos. Recientemente un estudio sobre oscurecimiento global que se hizo en el país constató que en el bajo Putumayo se está presentando este problema, es un problema de contaminación aérea. Y se está presentando en las zonas del país donde hay extracción y refinación: se forman unas nubes que aceleran el efecto del calentamiento global. En Orito hay en este momento una refinería de Ecopetrol muy pequeña, construida por la Texas, que procesa 3 mil barriles diarios cuando trabaja, porque es una refinería que ya tiene casi 45 años de uso y está totalmente deteriorada. Entonces produce una gran cantidad de desechos que afectan el medio ambiente. Ecopetrol no tiene interés en quitarla, porque de todos modos produce combustible para sus vehículos y otras actividades, ni tampoco tiene interés en repararla. Para ellos, desde el punto de vista económico, desde el punto de vista financiero, no llama la atención mejorar la situación con esta refinería. Muchas gracias, les agradezco la atención.

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Preguntas: 1 Sabiendo lo que ha sucedido en la historia petrolera del país, ¿qué papel desempeña la figura de la tutela en todo esto?, ¿qué efectividad tiene? 2 En el Caquetá, por ser ahora zona petrolera, ¿es viable que la Universidad de la Amazonia cree una facultad o carrera técnica enfocada hacia la Ingeniería de Petróleos o cuál debe ser la respuesta desde la academia? 3 ¿Cómo resolver el conflicto de la tradición escrita occidental vs. la tradición oral indígena, para no caer en esos mismos conflictos de desconfianza por firmar contratos o papeles? 4 ¿Cuál es el poder real de las JAC en las negociaciones frente a las petroleras y cuál es el papel del Estado? 5 ¿Cuáles serían las normas, mecanismos o instrumentos legales de las que pueden hacer uso las comunidades, los pueblos indígenas y las minorías étnicas para hacer frente a este tipo de intervención?

Respuestas: Hacen unas preguntas que no son fáciles de responder. Yo también me pregunto hoy por qué tenemos que sacar el petróleo. Ojala algún día podamos hacer un foro y traigamos a compañeros ecuatorianos y nos cuenten qué está pasando con el Parque Nacional Yasuní, que es una de las mayores reservas que puede tener la Amazonia ecuatoriana, y, bueno, el gobierno actual de Correa decidió no sacar petróleo, y ahí está en negociaciones con la comunidad internacional para que ésta le pague por no sacarlo. Ahora, hay que responder las inquietudes de las personas. Yo creo que, yéndome primero a la pregunta sobre el papel de la academia y en particular la Universidad de la Amazonia, ésta debe adoptar un papel más proactivo frente a lo que está sucediendo. Aquí estamos discutiendo hace más de un año el plan de desarrollo de la Universidad, y desde hace más de un año algunas personas venimos diciendo: oiga, el problema del petróleo, ahora se habla que es una de las locomotoras del desarrollo, nosotros tenemos que reflexionar y no solamente eso, frente a muchas cosas más. Pero bueno, en particular frente al petróleo, ¿cuál es la postura de la Universidad de la Amazonia?, ¿vamos a preparar a la gente para que explote ese petróleo?, puede ser una alternativa o ¿vamos a preparar y vamos a adelantar desde la agroecología la discusión sobre si es conveniente o no extraer esos recursos? Los pozos petroleros de la cuenca del Caguán son materiales pesados, que en la década de los años 50, como era pesado y había mucho petróleo liviano, no les interesó sacarlo y ahí dejaron sellado eso y se empezó a llamar Los Pozos, pero ahora están explotando esos recursos. Eso está generando mucho problema en

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San Vicente. Además, vino todo el tema del litigio fronterizo, vinieron todas las maniobras políticas de las cuales se habla mucho en los corrillos, pero desafortunadamente en la Universidad de la Amazonia no hemos hecho una discusión profunda, seria, frente a dónde dirigir el rumbo que la Universidad va a tener frente a eso. Y me acuerdo de la experiencia de otros lugares y otras academias como la Universidad Industrial de Santander o como la Universidad de Nariño, en fin, que de pronto sí tienen una postura más clara frente a este tema. Frente a la cuestión de los mecanismos jurídicos, legales, como el de la tutela, bueno, pues éste es un mecanismo que puede servir para las personas o comunidades que están interesadas en que no se deterioren los recursos, pero también puede servir para que otras comunidades pidan que se extraigan los recursos, porque, bueno, unos pueden alegar que se requiere conservar la selva, el suelo, su parcela, pero los otros pueden alegar que se necesitan esos recursos para el desarrollo. Sobre el papel de las Juntas de Acción Comunal. En el Putumayo se han posicionado; es como lograr que la actividad petrolera los beneficie de alguna manera, se les brinde trabajo, se les brinden ingresos, se les brinden recursos. Pero la pregunta es ¿sacamos esos recursos, los extraemos? La JAC también tendría que hacer esa discusión: hasta qué punto resulta benéfico para ellos tener unos recursos temporales de trabajo, porque es que el petróleo se va a acabar, eso no va a ser para toda la vida. La extracción petrolera en Los Pozos, en Fragüita, en Lusitania y en todos los lugares donde se está iniciando la actividad, eso es temporal, va a durar 20 años o 30 años; y ahora nosotros estamos viviendo 70 u 80 años. Y a nuestros hijos qué les vamos a dejar, el desarrollo sostenible, el compromiso que tienen las generaciones presentes para mantener los recursos para las generaciones futuras. Entonces, hay que plantear que pensemos las cosas detenidamente: puede haber trabajito para 15 o 20 años, pero no es trabajo para todo el mundo, y los daños ambientales empiezan y no se van a ir con las empresas, los daños se van a quedar y las empresas se van a ir. La Texas se fue y se fue muy contenta. El libro que tiene esa empresa sobre Orito, ¡qué cosa tan maravillosa!, y ellos lo declaran, no tienen la menor duda al decir que fue uno de los éxitos más importantes de toda la historia de esa compañía, que no es colombiana. El papel del Estado es un papel que, desafortunadamente, no es claro. Como estamos en el cuento del desarrollo, que hay que crecer, el actual gobierno lo volvió locomotora y es un poco lo que está sucediendo en Campo Rubiales. Es un conflicto que estamos viendo por los medios. De todas maneras en los medios no hay que confiar mucho, pero algo nos dicen, el papel del Estado es un sofisma del desarrollo que está por entregar esos recursos. Antes la política petrolera estaba reunida en Ecopetrol y este era el que la desarrollaba, pero el

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anterior gobierno decidió separar lo que es la exploración de la extracción, y Ecopetrol se dedicó a la extracción. Luego se creó la Agencia Nacional -ANH- de Hidrocarburos para todo lo relacionado con exploración, sísmica y firma de los contratos. Ahí ahora están saliendo los casos de corrupción en los que la ANH está metida. Ahora, en el Caquetá sucede una cosa que es bien interesante, y es que ya no es la gran multinacional explotando grandes pozos, sino ‘pequeñas’ empresas, chinas sobretodo pero también canadienses, que tienen escasez de recursos y si nosotros nos ponemos muy bravos nos mandan las tropas. Respecto a la pregunta sobre la tradición oral, creo que lo que puede subsanar las dificultades que tienen, sobre todo, las comunidades indígenas y las campesinas, son los procesos organizativos, y lo rescatable en Orito es que todos esos procesos han permitido que ya los indígenas cualquier papel no lo firman y si van a firmar un papel primero lo discuten en la comunidad, y si la comunidad no lo entiende pues buscan a un abogado. Entonces, frente a esa contradicción que puede resultar entre lo escrito y lo oral y las tradiciones de las comunidades y la modernidad que nos está dando este problema, pues los procesos organizativos podrían ser una forma de subsanar estas dificultades. Agradezco mucho la atención.

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VENTAJAS Y DESVENTAJAS DE LA ACTIVIDAD PETROLERA EN EL CAQUETÁ: PROPUESTAS DE ORGANIZACIÓN SOCIAL

ada uno de los grupos conformados tuvo como guía las siguientes preguntas: 1 ¿Cuál es el balance de la actividad petrolera en sus territorios? ventajas y desventajas 2 ¿Qué propuestas de organización social tienen las comunidades para mitigar los impactos de esta actividad antes, durante y después de la explotación?

Representante de la zona sur del departamento: Buenas tardes para todos y todas. En la zona sur tuvimos representación de los municipios de Belén, Albania, San José de Fragua, Morelia, Valparaiso, nos faltó desafortunadamente Curillo. Frente a la primera pregunta sobre los impactos, tenemos lo siguiente: en Albania, se han realizado procesos de exploración sísmica y de perforación, los principales impactos que reportaron las personas es que a pesar de que las comunidades hagan veeduría frente a los daños ambientales, se constata que se incumplen esas normatividades. Por ejemplo, en el municipio se perforó un pozo a menos de 500 metros de las fuentes hídricas, no se hizo disposición adecuada de los residuos arrojándolos a las carreteras y en los pastos, trayendo enfermedades para el ganado y malos olores para la comunidad. Otra generalidad, es que la empresa petrolera informa y negocia solamente con un pequeño grupo de líderes que ellos escogen cuando llegan a la zona, así la comunidad completa diga que no está de acuerdo; eso comienza a dividir y romper las relaciones entre las comunidades. La perforación y la exploración en Albania duraron poco tiempo por lo cual no se ha evidenciado aún otro tipo de impactos. En el municipio de Belén, se han realizado dos etapas sísmicas. Lo positivo es que hay mecánicos petroleros, aproximadamente 36 personas entre adultos y jóvenes capacitados que están prestando un buen servicio a otros municipios.

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Lo que más se resaltó como impacto negativo fue la contaminación del agua dulce de la zona donde se realizaron los estudios sísmicos a pesar de que la mayoría de la comunidad había sentado una postura de no permitir la exploración sísmica. Pero la empresa usando la estrategia de dividir para vencer, entró a hacer negociaciones con algunos de los finqueros y de esa forma poder adelantar los procesos. Otro impacto es que se rechazan los sistemas de contratación, no hay quien asuma la responsabilidad clara para hacer los reclamos; también divide a los trabajadores, no hay una instancia pertinente a la que ellos se puedan dirigir. Se hizo resistencia a la no entrada de las petroleras, pero como les decíamos efectivamente lo hacen, afectando los humedales de la zona porque todo el sector es una estrella hídrica. La socialización que hace la empresa no es para toda la comunidad, sino que llaman a algunos residentes de las veredas y finqueros, sin dar claridad frente a cuál va a hacer el manejo ambiental en la zona, teniendo en cuenta, repito, que alertamos que son humedales de estrellas hídricas. Otro aspecto negativo, es que se desdibujan los límites de responsabilidad entre los contratistas y los operadores, porque los unos se lavan las manos en los otros, y cuando la gente va a reclamar, los unos dicen que no, que eso es cuestión del contratista, y los contratistas dicen que eso es responsabilidad del operario, finalmente nadie da solución al reclamo de la comunidad. Otro aspecto, es la utilización e instrumentalización que están haciendo las empresas de las Juntas de Acción Comunal -JAC-; algunas han pasado a ser casi que cooperativas de trabajo prestándose a legitimar, entre comillas, esa contratación que se hace que no es de acuerdo con la normatividad colombiana y vulnera los derechos de la población trabajadora. En Puerto Nuevo hay mucha preocupación por la aplicación que puede tener el proyecto petrolero en la bocatoma del acueducto, es una alerta que está ahí en el sector Puerto Nuevo - Sabaleta. En Morelia se hizo la exploración sísmica por parte de la Empresa Energy, que hizo la negociación de forma parcializada porque no se invitó a toda la comunidad; adicionalmente, los representantes de la empresa se reunieron de forma privada con el alcalde, dejando por fuera a los representantes de las cuatro veredas que este proyecto afecta. La falta de conocimiento es otra de las grandes dificultades; por ejemplo, las comunidades no saben cuáles son los bloques de exploración, hasta qué vereda van, cuáles son los límites y los lugares de perforación; nos dicen que

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consultemos el mapa nacional de hidrocarburos, pero igual la petrolera cuando va a hacer la exposición de qué es lo que va a hacer en la zona, debería tener también claridad de cuáles son las medidas, porque va tomando decisiones por le camino de que ya no es aquí sino en otro lado, y van dejando los huecos, las perforaciones y eso ¿quién lo va a reparar? En el caso del municipio de San José estuvo Alange Energy, que hizo el daño que quiso y se fue; luego llega otra empresa y asume, supuestamente, los daños pero queremos aclarar que allá todavía está pendiente, por parte de Pacific Rubiales, el cumplimiento del acuerdo de reforestación de las hectáreas que fueron devastadas por el proyecto de Alange Energy. Pacif, al asumir los daños causados, ha cumplido con la mayoría de los acuerdos, pero aún hay pendientes. Hacemos un llamado al papel que está jugando Corpoamazonia como autoridad que debe proteger los derechos ambientales, porque en el municipio no se siente. ¿Con qué criterios se están dando las licencias ambientales, si no se está haciendo el proceso de consulta previa con las comunidades? Constitucionalmente el derecho a la consulta previa está solamente para comunidades afrodescendientes e indígenas, pero consideramos que la población campesina también debe ser parte de estos procesos de consulta previa antes de que se inicie la perforación. Las propuestas, hechas por los representantes de Albania, son si realmente queremos o no extracción petrolera. Consideramos que hasta que no estamos representados todos los municipios del sur del departamento no podemos hacer una propuesta conjunta, pero mientras tanto proponemos: primero, que se convoquen espacios para el intercambio de experiencias entre las comunidades afectadas por las petroleras. Segundo, saludamos la iniciativa de este Foro, pero las ponencias fueron de acá hacia allá y las comunidades afectadas, que son quienes realmente deberían hablar con autoridad sobre lo que ha pasado en sus regiones, tuvieron muy poco tiempo para ser escuchadas. Entonces que como fruto de este Foro salga una iniciativa para hacer un encuentro entre todo el Caquetá para intercambiar experiencias. Tercero, es que se apoyen las acciones de hecho, por ejemplo, que si la comunidad de San Vicente va a ser un paro o se va a pronunciar frente a un atropello o vulneración a sus derechos, pues que el sur y el centro también estén allá acompañándolo, y así con las otras regiones. Frente a las empresas petroleras, cuáles son las propuestas. Que mientras se decide si las queremos o no las queremos, las que ya están abran unas oficinas y aclaren cuáles son las normas para los contratistas; que haya una oficina general de atención de quejas, reclamos y seguimiento, porque muchas veces

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las comunidades no tienen a quien acudir en las empresas operadoras, o los contratistas en los municipios. Lo otro es que también el Estado, a través de sus instancias, haga más presencia para hacer control y vigilancia sobre los procesos, o sea, esto no debe descargarse solamente sobre las comunidades, también el Estado tiene una responsabilidad por asumir. Otra propuesta es que no haya una estigmatización de los campesinos, de los colonos o de los líderes que se pronuncien de forma crítica frente al proceso petrolero, porque por parte de la fuerza pública, y muchas veces las administraciones y los gobernantes, estas personas están siendo señaladas como auxiliadores de la guerrilla o enemigos del desarrollo, y eso genera aislamiento y le quita fuerza al tejido social y de organización en torno a esta problemática. Entonces exigimos que el derecho de protesta, de opinión y de pensamiento libre no sea estigmatizado. Lo otro es hacer un fortalecimiento muy grande de la concienciación, sensibilización y capacitación de las JAC y, especialmente, a las Asojuntas; creemos que están llamadas a tener un protagonismo en esta problemática. Y ya para cerrar, la propuesta más concreta que sale de la mesa sur es la creación de una instancia de coordinación. Ya logramos un representante por cada municipio para que empiece a dinamizar mesas municipales donde se debata el tema, que sean los voceros e interlocutores ante las empresas y el municipio, y a su vez, algunos de esos representantes harán una comisión que va a ser la del sur, para, como bloque sur, tener interlocución en esa mesa o espacio departamental que están proponiendo en este Foro; pero primero debe haber una instancia de organización municipal para que irradie a lo regional y a lo departamental. Se propone crear un fondo de reparación ambiental, manejado desde esas mesas, pero que no sea con el 1% del dinero que se da, sino que sea con un porcentaje adicional frente al balance o seguimiento que se vaya haciendo. Y la otra propuesta es que entre operadores y comunidad haya un esfuerzo coordinado para poder hacer una vigilancia y control antes, durante y después de la actividad. Por ejemplo, monitoreo de aguas: cómo estaban las aguas antes de que se iniciara la sísmica, cómo están durante la sísmica y después cómo quedaron para poder medir real y objetivamente los impactos que tenga la industria petrolera, y que no se diga que esos estudios no son válidos o que son apreciaciones subjetivas de las perAsonas, sino que haya instrumentos técnicos entre empresas petroleras, contratistas y comunidad, o sea, que se empodere la comunidad y se le de los insumos y la capacitación para manejar esas formas de seguimiento; que la comunidad pueda convertirse en perito de campo para poder hacer seguimiento durante todo el proceso.

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Representante de la zona norte del departamento: Retomando las observaciones y algunas ideas de los municipios de Cartagena, Puerto Rico y San Vicente, con participación de comunidades indígenas, Imposur, de la Parroquia la Consolata de San Vicente, y Puerto Betania; frente a la primera pregunta, sobre el balance, es una necesidad de la sociedad moderna tener energía y el Estado es el responsable de proveerla. Lo que sucede es que la sociedad está desinformada y no está capacitada en el tema, quien tiene la información no la distribuye, por lo tanto la comunidad tiene un reto para exigir que los excedentes de esa actividad petrolera sean reinvertidos y distribuidos en las necesidades propias de la comunidad. Vemos con positivismo la propuesta de conformar una mesa o comité permanente para seguir abordando estos temas y se ve con muy buenos ojos espacios como los de este Foro donde se puede discutir a profundidad. Se viene avanzando en la creación de Asojuntas y se cree que con este Foro las ventajas y desventajas están identificadas plenamente. Pero no hay que olvidar que tenemos un antecedente histórico que vale la pena destacar, y es que en la cuenca del Caguán existen 25 contratos de exploración y producción de hidrocarburos que han sido asignados en áreas de 15 mil y 25 mil hectáreas, únicamente se han asignado dos contratos y hay 40 contratos aún por asignarse; entonces de ahí la preocupación que viene es más frente a lo que tenemos que hacer, o a las acciones que se deben tomar frente a eso que ya se viene. Hay unas ventajas de la actividad petrolera y son: la exploración genera fuentes de empleo; hay un crecimiento económico; se genera organización civil; nos involucra en la participación del sistema de regalías; y por ejemplo, en el caso de San Vicente, abre una nueva economía en la zona de influencia. Respecto a las desventajas, además de las que ya se han nombrado: existen o se profundizan los desastres ecológicos; profundización del conflicto armado, social y una intromisión en el campo privado; hay militarización de la zona; deterioro del tejido social a partir de problemas como la drogadicción, el desplazamiento, la corrupción, el mal manejo de los recursos y el encarecimiento de la vida; y también genera la pérdida de las tradiciones culturales. Algunas propuestas de la zona norte son: seguir insistiendo en una cultura y mentalidad de la prevención, continuar con el fortalecimiento de la educación como herramienta de prevención, la academia por tanto, debe salir de sus paredes y llegar más a las comunidades rurales y a otros ciudadanos que constantemente afrontan esa cotidianidad. Es necesario implementar un comité multisectorial y multidisciplinario que tenga voz y representación de los diferentes intereses, sectores y actores sociales. Habría que visibilizar con más fuerza los mecanismos e instrumentos legales, operativos y administrativos de

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los cuales pueda hacer uso la comunidad con el fin de actuar en la línea de vida y a favor de los intereses comunitarios. Se pone a disposición el conocimiento del Imposur, como propuesta para participar y asistir a las sesiones de la Asamblea Departamental para desde allí, hacer veeduría y control con el ánimo de garantizar que las leyes se cumplan y se apliquen; es decir, estar en contacto más permanente con el Estado, espacio donde se toman y se discuten las decisiones. Es una propuesta exigir mayor información frente al tema, y así mismo tener un estatus que represente un mayor poder en la toma de estas decisiones. La propuesta para aquellas zonas o territorios donde ya hay una actividad petrolera, es suspender cualquier actividad y empezar a prepararnos para tener la capacidad de asumir estos retos y negociaciones frente a las intervenciones externas; sin embargo sabemos que mientras nos preparamos las multinacionales continúan su acción sin descanso. Así mismo hay una propuesta de una geopolítica diferente, es decir, comenzar a concebir la región como una fuente de recursos petroleros y a la amazonia como una fuente de recursos naturales que deben ser protegidos, con el ánimo de conservar la vida. Por eso la importancia de ser muy críticos frente a este tipo de economías y no desfallecer en la búsqueda de nuevas fuentes de energías y mecanismos limpios de producción. Por parte de los indígenas, se propone fortalecer los mecanismos y herramientas que tienen los pueblos indígenas, hay que conformar la Organización Indígena del Caquetá como máxima instancia de decisión de los pueblos indígenas del departamento. La única vía es la articulación de los diversos actores sociales del territorio y movilizarnos hacia la misma vía, y se hace un llamado de alerta a la persecución que pueden tener los líderes que movilicen estos discursos o estas posiciones. Finalmente, las propuestas de Guayabal son: hacer un de nuevo un llamado a los gobernantes para que se comprometan con el Caquetá y a la comunidad para que elija bien a los gobernantes y se informe de las posiciones de éstos frente a la extracción petrolera. Se hace un llamado a la unión para defender la tierra, para la enseñanza y la capacitación de las comunidades, no desfallecer en la tarea de buscar otros modelos energéticos pertinentes contextualizados para la zona y el escenario regional, y seguir buscando modelos educativos pertinentes que promuevan el desarrollo sostenible.

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Representante de la zona centro del departamento (Florencia):

En el espacio de reflexión encontramos que en el municipio no hay intervención directa de la actividad petrolera, pero se reconoce la importancia de actuar y reflexionar en este tema pensándonos como un único territorio. Nosotros como ciudad capital tenemos un compromiso con los compañeros y con la comunidad. En vista de eso, la primera pregunta sobre los impactos de la actividad petrolera fue abordada de manera más general y relacionada con los resultados y la información que se dio en este Foro. Se plantearon ideas como que el espacio sirvió para generar reflexiones generales sobre los impactos ambientales y sociales de la actividad petrolera en esta región; también se planteó que los beneficios de esta actividad son transitorios, pero los impactos, cuando no son manejados correctamente, trascienden en el tiempo. Se habló de revisar a profundidad los puntos críticos específicos de los impactos de la extracción petrolera en todas las dimensiones, para que las localidades planteen la actividad de una manera sostenible. Se planteó la importancia de revisar con todos los actores presentes ese tema de los impactos para que no fuera solamente una reflexión de un lado de la balanza sino que estuvieran todos allí reconociendo el papel fundamental que juega el Estado, central y local, y reconociendo la importancia de la participación de las empresas.

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Con relación a la segunda pregunta, sobre las propuestas, algunas reflexiones están más asociadas a las estrategias de organización, y están referidas a un llamado para que este Foro sea un espacio que se continúe y que permita seguir avanzando en la discusión sobre el tema. Se plantea la necesidad de darle continuidad al espacio a través de un acompañamiento más cercano a la comunidad por parte de los actores que hicimos parte de este evento en un ejercicio de corresponsabilidad. Quienes estuvimos aquí presentes convocados desde las Iglesias de cada uno de los municipios o convocados desde otras instancias asumamos el reto y la responsabilidad de comunicar lo aquí trabajado y planteado en nuestras comunidades. También se planteó la necesidad de identificar o crear espacios como la mesa de petróleo o un comité, para la discusión permanente donde se reflexionen todos estos temas, donde participen todos los actores y donde la comunidad tenga la oportunidad de expresarse con más tiempo, con más espacio y con más posibilidad de construcción conjunta. Se solicita el apoyo de la iglesia, de la pastoral y de otras instancias y organizaciones para fomentar espacios, escenarios y puentes de dinamización para organizar, o generar, estructuras de participación de las comunidades en este tipo de temas tan importantes. También se planteó la importancia de tomar una decisión sobre si se apoya o no la actividad petrolera en San Vicente del Caguán; y ante cualquier decisión, verificar cuáles serían las estrategias para llevarla a cabo. Se reflexionó, fruto de esa idea y sumándonos a la propuesta de la zona sur, la necesidad de llevar esas inquietudes a más comunidades para que las decisiones que se tomen sean legitimas en el territorio, en vista de que aquí sólo somos un número reducido de asistentes y participantes. Desde la Pastoral Social hubo una posición muy interesante, y es que se abrió el espacio, se abrió la puerta para recibir un acompañamiento permanente a cualquiera de las decisiones que se tomen, bien el de establecer alternativas de desarrollo posibles y propias del territorio sin el petróleo o en caso contrario, acompañar también la construcción de alternativas de desarrollo que sean viables incluyendo la actividad petrolera, ahí hay una señal institucional interesante. Se planteó también la necesidad de hacer un análisis mucho más profundo y más amplio, un ejercicio ojala con los diferentes municipios, para tener una mayor cobertura en términos de información y acompañamiento a las comunidades para que las decisiones sean colectivas e informadas, es decir, que se tomen con el panorama y el escenario completo, tratando de evitar polarizaciones sobre supuestos que no son.

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Se hizo la claridad que a la institucionalidad sí se le invitó a este escenario, pero por múltiples razones no asistieron, entonces se dejó constancia de la importancia de montar estrategias para que ellos participen directa y activamente en estos espacios. Finalmente, se propuso crear una mesa para Florencia donde la convocatoria a la Universidad y los estudiantes, y demás organizaciones e instituciones que hacen presencia en estos municipios, inicien el ejercicio de fortalecimiento de capacidades con las comunidades para que estén enteradas sobre el tema, de sus problemáticas y oportunidades. Finalmente hubo una reflexión interesante que la quiero plantear en este espacio, y es que sea cual sea la posición que se tome frente al tema, hay que identificar cuáles son las consecuencias de cada una de ellas y hay que tener comportamientos coherentes. El tema del petróleo es un tema que afecta toda la multidimensionalidad del concepto del desarrollo y tiene también implicaciones a todos los niveles. El petróleo es un producto también necesario y la energía, como lo planteaba una de las personas que me antecedió, se requiere para el funcionamiento de la sociedad. Entonces si hay un no rotundo entre nosotros seamos coherentes y digamos no a la gasolina; esa fue una reflexión que se quedó como en el aire planteada y que aprovecho para compartirla en este espacio.

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CLAUSURA Padre Obed Ramírez Granada Administrador Diocesano, Diócesis de Florencia

ecogemos catorce horas de trabajo, extraordinarias conferencias y conocimiento, pero también recogemos en este momento el hambre, el sueño y todo lo demás, de manera que son muy pocas las palabras. Sencillamente recordarles que la Iglesia tiene una gran misión profética que es anunciar y denunciar, es defender al hombre en su entorno, en su realidad, en su territorio y me parece que el ejercicio que se ha hecho ha sido precisamente un buscar para poder vivir ese anuncio y con ese anuncio conocer la verdad. El padre Carlos esta mañana decía: ¿dónde está la verdad?, no la podemos ni satanizar ni tampoco estarla bendiciendo. Tenemos que buscar el justo medio, y por eso el análisis, la crítica a este respecto y la toma de decisiones. De manera que, en primer lugar, hemos recibido muchos conocimientos y creo que es el momento de digerir antes de ir a almorzar. Digerir todo esto confrontándolo para que podamos actuar con justicia. No es simplemente buscar la verdad sino actuar con justicia, de tal manera que lo que sea, sea justo, sea correcto, sea honesto. Y luego no quedarnos sencillamente en analizar la realidad, sino ir a acciones concretas, porque la vida es un actuar constante. De tal manera que sería decirles a ustedes, como ya les ha dicho el padre Carlos, y no repito porque de pronto me equivoco, darles gracias a todos, muy especialmente a los que han venido de lejos y han hecho un gran sacrificio. Gracias también a las instituciones que han colaborado de una u otra manera en la realización de este Foro, a cada uno de los conferencistas que nos han dado estas orientaciones, a la universidad [de la Amazonía] por supuesto, que nos ha permitido estar acá en este auditorio. Gracias también a Pastoral Social a la Pastoral de la familia, aquí meto también la familia, porque si no metemos la familia entonces qué estamos defendiendo, y al Secretariado Nacional de Pastoral Social. De tal manera mil y mil gracias, que Dios los bendiga y nos ayude a seguir vislumbrando el camino recto con actitudes de verdad, justicia y amor. Buena noche.

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ANEXOS Edgar Mojica. Ponencia Impacto de la explotación petrolera en Colombia, elementos a tener en cuenta desde una mirada crítica. Enfoque, ¿qué se entiende por mirada crítica?

oy se asume como verdades absolutas los enfoques y posiciones presentados por medios masivos de comunicación y por grupos de poder, esto se convierte en una manera unipolar de ver el hombre, el mundo y sus relaciones. Se nos dice como se debe pensar, hablar y actuar. Temas como el fin de la historia, el interés general, la lucha contra el terrorismo, entre otros, son utilizados para la manipulación mundial, que termina dominando conciencias humanas. Esta visión nos lleva a la desesperanza, el camino agotado, el capitalismo y su modelo de sociedad son la única vía, para sobrevivir hay que acomodarse en él, el hombre reducido a sujeto individual instrumentalizado. Se necesita asumir pensamiento crítico, partiendo de la teoría crítica, como una manera de ver e interpretar la sociedad en su conjunto. Esto implica definir desde esta postura ¿qué es el hombre (como ser humano), ¿Cómo vemos el mundo?, ¿cómo se conciben las relaciones hombre-mundo? Asumir esta postura implica hacer un profundo análisis del sistema económico, partiendo del elemento central “el trabajo”, ver este en una dimensión emancipadora del hombre y no como un elemento esclavizante. Lo anterior obliga asumir un trabajo científico (estudio a profundidad de las temáticas), generador de pensamiento. Pensamiento crítico, implica tener una visión histórica, somos memoria, nuestras acciones son reflejo de lo aprendido en el pasado, pero elaboradoras de nuestro futuro, somos sujetos sociales de derechos. Se necesita hacer de nuestras reflexiones ejercicios dialécticos, que nos permitan construir una conciencia que se asuma colectiva, como clase, reflejada en la identidad alrededor de intereses, necesidades, valores, principios. Otro elemento clave es el propositivo, se está obligado a construir una propuesta, no basta solo con cuestionar, la obligación es transformar, es decir actuar.

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Teoría y praxis deben ser coherentes, se reflejará en la acción crítica. Asumir está postura implica pensar, trabajar y ser un nuevo hombre, una nueva sociedad y una nueva manera de relacionarse hombre-mundo. La acción debe ser liberadora, separada de la dependencia histórica a la que nos han acostumbrado.

Algunos elementos de contexto internacional En la industria petrolera, la geopolítica del petróleo a nivel mundial muestra un panorama complejo. Existe en primer lugar una lucha de las grandes potencias mundiales por el control de reservas de hidrocarburos y rutas de abastecimiento. En segundo lugar la llamada seguridad energética es asimétrica a la soberanía nacional de los estados, especialmente de aquellos llamados del tercer mundo que cuenta con reservas de hidrocarburos, esto lleva a declarar el tema energético como un problema de seguridad nacional, tal es el caso de EEUU y otras potencias, quienes acuden a su aparato militar para obtener los recursos energéticos que les garanticen su autonomía y existencia; política evidenciada en casos como el del Golfo Pérsico, Irak, Afganistán, entre otros. Un tercer elemento en esa geopolítica es la especulación petrolera, que lleva a manipular los precios del petróleo en la lógica del mercado, acudiendo a las famosas ventas a futuro de reservas probadas y los conocidos barriles de papel, negocios de transacción que se realizan en las bolsas de valores. Un cuarto elemento a tener en cuenta es el papel de las Sociedades Multinacionales de la industria petrolera, su poder e influencia política, van de la mano de su capacidad económica, reflejada en los miles de millones de reservas que posean, la capacidad de refinación y su participación en todas las partes de la cadena del negocio, esto trae como consecuencia que estos grupos empresariales sobrepasen el poder y capacidad de los estados, pero también que violen Derechos Humanos para quedarse con los recursos petroleros, financiando guerras civiles como ocurrió en Angola, instaurando dictaduras caso Sha de Irán, vendiendo combustibles a ejércitos como el Apartheid en Sudáfrica, por recordar algunos de los muchos casos. Las empresas en especial las de actividades extractivas de minerales y recursos energéticos, han sido duramente cuestionadas por su participación en violaciones a Derechos Humanos (DH) en el mundo. El ejemplo citado de la industria del petróleo se repite en varios sectores de la economía mundial. A finales de la década de los 70, sin que se hubiesen consolidado el sistema de mercado, ni las grandes sociedades multinacionales (SMN), se hablaba de la responsabilidad y el castigo a estas por las violaciones de DH. El avance y consolidación de las SMN su gran poder e influencia política, hace que la balanza en ese debate se incline a su favor. Los DH tienen implícito en sus elementos fundantes la obligatoriedad al respeto y garantía. Eso no fue posible con las SMN, para ellas los DH son ejercicios

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voluntarios y de buena fe. Esto se ratifica después de dos décadas de discusión; Naciones Unidas a finales del siglo XX, aprueba iniciar el nuevo siglo con el famoso Pacto Global de DH, al que las empresas y sociedades se suscriben de manera voluntaria. En materia de DH las SMN y el mercado han diseñado una estrategia integral para fortalecer su imagen corporativa, y la presentan como la panacea, en ella se incluye, Pacto Global, Principios Voluntarios de DH y seguridad, Informes de Sostenibilidad, Códigos de conducta o ética, Departamentos de Responsabilidad Social Empresarial, son ejemplos y hacen parte de esta política mundial. La misma, les garantiza a las SMN a nivel mundial por violaciones de DH no ser sujetos de derecho penal, creando un gran manto de impunidad. Hoy existe una gran asimetría entre los deberes de las SMN Soft Law (derecho blando), y sus derechos amparados por el Derecho Comercial Global Lex Mercatoria. Es fundamental entender desde que lógica se construye dicha política.

Algunos elementos de contexto e historicos a nivel colombiano. 1 El tema de hidrocarburos en Colombia pareciera resumirse en la frase que la “mejor política es no tener política”. Esto porque una de las principales característica de Colombia en esta materia es que los lineamientos para el sector son políticas de gobierno ligados a los palanes presidenciales, no ha existido una continuidad estratégica. 2 Quizás un elemento característico, inclusive en el momento en que se impulsaba la consolidación de la empresa nacional, es la motivación a la inversión extranjera con diferentes argumentos y propósitos, así como el carácter exportador del negocio. También es bueno señalar que dichos planes están en la lógica de la dependencia y de la acumulación de capital. 3 El estado pese a su discontinuidad de planes hoy es el bloque dominante y ha logrado en el nuevo milenio dar un golpe político certero al sindicato en materia de hidrocarburos, imponiendo un modelo. Se impone un nuevo modelo de concesión moderna, una ley de regalías, se disminuye la tasa tributaria a los inversionistas, en general se instaura un régimen jurídico económico que maximiza el beneficio de las multinacionales. 4 La insurgencia, protagonista en la última década del siglo pasado se encuentra en una posición defensiva y en la retaguardia, en materia de hidrocarburos no tiene propuesta ni iniciativa. 5 El sindicato, se desgasta después de la huelga en su problemática interna y en tratar de recuperarse del golpe recibido, no es actor protagónico en el escenario nacional, alejándose de una responsabilidad histó-

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rica. Hay que señalar que las propuestas del sindicato siempre fueron contestatarias a planes de gobierno. 6 • La sociedad civil no opina frente al tema, salvo algunos sectores académicos. Al común de la población pareciera no interesarle el tema o tiene un alto grado de desconocimiento del mismo. 7 • El capital multinacional logra su objetivo, colocar a Colombia en condiciones favorables para realizar inversión en el sector. 8 La explotación de hidrocarburos ha causado un fuerte impacto ambiental, ha desplazado comunidades indígenas de territorios ancestrales viendo vulnerados sus derechos, ha estado ligada a violaciones de ddhh de comunidades campesinas, líderes regionales y sindicales. También existe una asimetría muy grande entre la renta petrolera y el desarrollo progresivo de los DESCA. 9 Se desarrolla una estrategia de consolidación de regiones estratégicas para la economía, que incluyen la presencia exagerada de batallones militares energéticos y presencia paramilitar, generadores de las grandes violaciones de Derechos Humanos, para por la vía del terror apoderarse del territorio, controlarlo y dejarlo a disposición del capital multinacional. 10 Los municipios y departamentos petroleros han hecho de los recursos de regalías un fortín de despilfarro, corrupción política y administrativa.

Analisis del impacto desde los derechos humanos Consideramos que los Derechos Humanos son el producto de un proceso histórico permanente y evolutivo, de lucha de la humanidad, por su libertad, igualdad en lo social, lo político, lo económico, así como condiciones de vida digna de todo ser humano, con reconocimiento legítimo en la comunidad internacional y por ello gozan de protección jurídica a este nivel, de igual manera se han incluido en los ordenamientos jurídico de los diferentes países. Se puede decir que están en permanente construcción, producto de la lucha de los seres humanos. El estudio de los principios universales de los Derechos Humanos, el recoger y oír testimonios de los habitantes de regiones petroleras, evidenciar en el terreno y comprobar en la realidad esas denuncias, nos llevan a concluir que la extracción petrolera en Colombia por parte de empresas como BP. OXXY, PACIFIC RUBIALES, ECOPETROL, entre otras, ha estado acompañada de permanentes violaciones y vulneraciones a los DH y derechos fundamentales de los pobladores, que se expresan en: 1 Violaciones al derecho de asociación y al trabajo: art 7, 19, 20,23 DUDH, convenios 87 y 98 adoptados por OIT. Pacto Mundial.

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2 Violaciones al derecho a la vida: art 3 DUDH. 3 Violaciones a los DESC: art 7,22, 25, 26 DUDH, PIDESC. Pacto Mundial. 4 Violaciones al derecho a la propiedad: art 17 DUDH. Pacto Mundial. 5 Violaciones a los derechos ambientales: Declaraciones de la ONU de Estocolmo y Río de Janeiro. Pacto Mundial. 6 Violaciones a los derechos de los pueblos indigenas: Declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas. Las anteriores violaciones se evidencian en los siguientes hechos: 1 Derecho de asociación y al trabajo: Se vulnera el derecho al trabajo, hay corrupción. Esto está patrocinado por las empresas. No se garantiza el derecho de asociación pues se veta a trabajadores que se sindicalicen, se desconoce la legalidad y legitimidad del sindicato. Existe precarisación laboral en todas sus expresiones. Se despoja a los trabajdores de sus derechos y de sus ingresos. 2 Derecho a la vida: Hay testimonios sobre desaparición forzada, asesinato. Vulneración del derecho a la movilidad. En el marco de una estrategia de exterminio del movimiento sindical y social. 3 Derecho a la propiedad: Hay personas obligadas a salir de sus tierras por los paramilitares para luego ser usadas por las empresas en la explotación petrolera, en estos hechos se tienen testimonios que involucran a empresas como BP y OXXY. Se Intimida a las familias para obligarlas a vender sus fincas. Existe una restrigsión y/o prohibición a la movilidad de los colombianos en zonas petroleras. Configurandose una acumulación por despojo. 4 Derechos ambientales: Se denuncia que la reducción de los cauces de los ríos esto atenta contra la vida y el trabajo de pescadores y campesinos, ya que se reducen los recursos para vivir. Esto se está haciendo a través de la sísmica realizada por las empresas afectando fuentes y causes de agua que es un recurso básico para la existencia de los seres vivos en el planeta, tambien con los vertimentos de aguas contaminadas a los causes. Se contamina la admosfera con la emanación y quemas de gas, se destruyen bosques para construir las instalaciones petroleras. 5 DESC: Se discrimina a la mujer y a los desplazadosen las regiones petroleras, tienen muy pocas posibilidades para trabajar en la industria. Los jóvenes no cuentan con centros de formación técnica, tecnológica, ni universitaria acordes a las necesidades de la industria y la región, esto los pone en desventaja para acceder a trabajos calificados y especializados en la empresa. Hay grandes fenomenos migracionales, que generan una población flotante y una economía de enclave. Cambio en la cultura campesina se pierde la vocación agricola y ganadera de las regiones. Existe en las regiones petroleras indices de cobertura muy bajos en saniamiento básico, salud y educación.

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6 Pueblos indigenas: no se respetan territorios ancestrales, ni la cosmovisión indigena sobre la tierra, se han desplazado y destruido comunidades como los Yariguies, Barí y los U’wa, territorial, física y culturalmente.

PROPUESTAS. 1 Se construya un plan de acción articulado para discutir y presente una propuesta para que se penalice las violaciones de Derechos Humanos y derechos fundamentales, por parte de las empresas multinacionales, en el marco de la lucha contra la impunidad. 2 Trabajar conjuntamente para construir una propuesta alternativa en política petrolera integral en Colombia, que parte de reconocer el tema de soberanía, autonomía, autodetermianación y respeto a derechos fundamentales. GRACIAS Buenos Aires 28,29 y 30 de oct 2011.

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MEMORIAS DEL PRIMER FORO PETROLERO. LA EXPLOTACIÓN PETROLERA EN EL CAQUETÁ: LEYES, RIESGOS - VENTAJAS Y COMPROMISOS Los días 6 y 7 de octubre del año 2011 se llevó a cabo el foro “La explotación petrolera en el Caquetá”, animado por la Iglesia Católica, con el objetivo de reflexionar con las comunidades del departamento los impactos sociales, económicos, políticos, ambientales y culturales de esta actividad extractiva en la región. Durante la realización del Foro se abordaron diversos temas que buscan analizar el porqué de la creciente explotación de recursos minerales, especialmente hidrocarburos, en una zona tan rica en biodiversidad como es la Amazonia colombiana.

Vicariato Apostólico San Vicente - Puerto Leguízamo