Innegable como la propaganda que sublima deseos y ofrece hacer realidad la satisfacción de las necesidades pendientes de multitudes que se sienten aisladas por el Estado. De igual modo el populismo sacia momentáneamente las necesidades de multitudes hasta que los recursos se agotan y salen a relucir las incapacidades de planificar y administrar un gobierno en la senda del bien común de la sociedad.