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Herramientas sencillas y útiles Hechas Por Nosotros Mismos Les presentaré en esta oportunidad, 3 ejemplos de herramientas que podemos hacer con unos pocos elementos recuperados de basura y retazos del taller.

Estecas y útiles de raspado o corte: Las hojas de la segueta de mano para metales, tienen una cierta vida útil. Una vez que se desgasta el dentado, las sustituimos por nuevas. He aquí una serie de pequeñas estecas, aplicadores y raspadores que podemos fabricar con ellas. Bastará con amolar el dentado, y formarla en la esmeril de banco, según nuestras necesidades. La más pequeña que se muestra aquí, sirve para limpiar las bujías de encendido de los motores a explosión, otras son o bien un elemento de corte de materiales, o pequeñas estecas, o aplicadores de pastas. (por ejemplo: cemento epoxi, masilla plástica, etc.) Según a las tareas a que nos dediquemos, las "moldearemos" o configuraremos, para desempeñar una función determinada.


Espátulas de diversos usos: El cabo de un pincel cuyas cerdas se hayan gastado o estropeado, puede sernos de utilidad para hacer de estas espátulas. También podremos hacer cabos, a partir de restos de maderas, los que acondicionaremos a suerte de cabos para nuestras espátulas y aplicadores.


La lámina metálica de cada una de las herramientas que presento a continuación, son recortes de acero inoxidable. Una vez conformada e insertada en el cabo, procedo a perforar cerca del extremo, y con un clavo de carpintero, hago un remache, el cual instalo en la perforación practicada, para evitar que la lámina se salga de su locación.


Batidores para mezclas, lacas, tintes y pinturas: AquĂ­ hay bĂĄsicamente 3 modelos bien diferenciados:


1) Usando un trozo de varilla maciza de hierro trefilado, y una hélice o turbina de algún motor del tipo universal ("canibalizado" de un motor de taladro, u otra herramienta motriz portátil, o de algún electrodoméstico que se ha quemado o estropeado).


Es muy importante que la varilla esté perfectamente rectilínea. En uno de los extremos redondeamos las esquinas, y en el otro, practicamos una rosca, de largo tal, que albergue un par de tuercas más el espesor de la hélice o turbina. insertamos una tuerca, luego la hélice, y a continuación otra tuerca, que oficia de contra-tuerca, por lo cual deberemos apretar fuertemente, munidos de un par de llaves apropiadas.

En la foto de arriba, muestro otro método de fijación, si empleamos hélices metálicas: Sólo insertamos un tuerca, luego colocamos la hélice, y con soldadura autógena, aplicamos un poco de soldadura de bronce en tres sitios: a) entre la tuerca y la varilla cilíndrica b) entre la tuerca y la hélice c) entre la varilla y la hélice en la cara anterior de la misma, según les muestro en la próxima imagen. Este método lo recomiendo, da muy buenos resultados, en caso de que puedan disponer de una soldadora oxiacetilénica.


Las varillas de hierro, no deben ser muy largas. Estos batidores dan buenos resultados en recipientes de hasta 4 litros (o de 1 galón en algunos países). Podemos usarlos revolviendo a mano con ellos, o podemos montarlo en un taladro motriz portátil, y hasta en uno de columna (o de pedestal). Las precauciones lógicas, como dije antes, es que la varilla debe estar perfectamente recta, y además, si usamos taladro, que éste no comience a batir a máxima velocidad, para evitar salpicaduras de pintura. Hay que evitar que la hélice toque el fondo del recipiente, para evitar que se dañen (recipiente y/o hélice).

2) Usando un viejo amasador de batidora portátil, también podemos hacernos un batidor manual. En este caso, les muestro que en el extremo del mismo, soldé con bronce, un trozo adicional de varilla de hierro, y en su extremo hice una especie de punta de destornillador, la que me es de suma utilidad para abrir las latas de pintura.


3) Emulando a los batidores, con restos de varilla de 6mms. de diámetro, conformé estos otros batidores manuales, para distintos usos. El que tiene la cabeza de batido más pequeña, se usa en latas de no más de 1/4 litro de capacidad. Como éstas son pequeñas, el batidor también lo adecué al uso que le iba a dar.

Espero que estas pocas ideas, puedan serles de mucho provecho.


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