Editorial

Por Gilberto Rocha

Universalmente, el seno familiar es la unidad básica de la sociedad, uno de los vínculos afectivos más poderosos. El Día Internacional de la Familia, que se celebra todos los años el día 15 de mayo, fue proclamado por la Asamblea General de las Naciones Unidas en su resolución 47/237 del 20 de septiembre de 1993, con el objetivo de aumentar el grado de conciencia y fomentar los lazos en los hogares.

Son múltiples los estudios que reconocen la importancia del contexto familiar y los lazos de seguridad que en este se construyen para el desarrollo físico, pero sobre todo psicológico de los más pequeños. Cuando las relaciones en casa son estrechas, basadas en el amor y en el respeto, los niños se sienten queridos y respaldados, lo que es vital para su autoestima y confianza.

La armonía familiar no solo inside en los niños, sino también en adolescentes, jóvenes y adultos. la razón es muy sencilla, es el lugar creado para que tengamos crecimiento en cuerpo, alma y espíritu.

La familia es una idea que surge del amor de Dios y antecede al establecimiento de los Estados y las leyes que le norman. De acuerdo al diseño original, un hombre y una mujer unen sus vidas, del fruto de ese vínculo vienen los hijos. Cuando estos tienen la edad y madurez formarán sus propias familias.

Por desgracia, también es una realidad, por el mismo pecado del hombre, que hay familias fracturadas donde el abandono es una de las principales causas . Pero este no es el diseño de Dios, menos aquellas que se pretenden contituir como tales con la unión de personas del mismo sexo y la adopción de niños, violando el derecho que tiene el pequeño a restituir su seno familiar con un papá y una mamá que lo amen.

Defendamos el concepto de familia, de acuerdo al corazón y amor de Dios.