Una herramienta para los líderes que acompañan
a madres solas que llevan adelante su hogar.
Generalmente, el trabajo pastoral y el desarrollo
de los ministerios familiares dirigen sus programas hacia las familias nucleares biparentales, parejas unidas o casadas legalmente, con o sin hijos.
Sin embargo, es fundamental que comencemos
a reconocer las nuevas constituciones familiares
y a brindar atención y apoyo hacia la diversidad
familiar, especialmente, a la familia monoparental.
Para eso, es necesario refl exionar sobre diversos
temas que atañen a las mujeres jefas de familia:
el dolor de la pérdida; el camino del perdón
que debe ser transitado para alcanzar la sanidad;
el desafío de criar a los hijos y, a la vez, encarar
proyectos de realización personal; entre otros.