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AGRADECIMIENTO
AL SEÑOR JESUCRISTO pues ha permitido que la Visión sea clara en la vida de miles de líderes espirituales y creyentes alrededor del mundo, quienes han podido capturarla en sus corazones dando fruto abundante para el Reino de Dios.
Contenido
Copyright Agradecimiento
Introducción
Prólogo
Capítulo 1: El poder de una Visión
Capítulo 2: La Visión del G12
Capítulo 3: La Escalera del Éxito
Capítulo 4: Ganar
Capítulo 5: Ganar en la célula
Capítulo 6: Consolidar
Capítulo 7: Pre-encuentro
Capítulo 8: El Encuentro
Capítulo 9: Discipular
Capítulo 10: El Reencuentro y el Encuentro de matrimonios
Capítulo 11: Seminarios de n de semana
Capítulo 12: Enviar
Bibliografía
Acerca del autor
Introducci N
«Y Jehová me respondió, y dijo: Escribe la visión, y declárala en tablas, para que corra el que leyere en ella. Aunque la visión tardará aún por un tiempo, mas se apresura hacia el n, y no mentirá. Aunque tardare, espéralo, porque sin duda vendrá y no tardará» (Habacuc 2:2-3).
EL PROFETA Habacuc, libraba una tremenda batalla en oración. Su petición a Dios se centraba en el deseo de hacer algo, diciéndole:
«Y haces que sean los hombres como los peces del mar, como reptiles que no tienen quien los gobierne» (Habacuc 1:14).
Ante la inquietud del profeta, el Señor responde que para el tiempo del n vendría una visión de gobierno, en la que los creyentes no andarían mas como los peces del mar o como eros reptiles sin tener quién los gobierne. Tengo certeza de que el modelo que da plena organización de liderazgo y bases para el crecimiento, es el GOBIERNO DE LOS DOCE (G12), razón por la cual hemos preparado para usted este manual, que será un importante aporte para que su ministerio experimente un crecimiento tan grande que ni usted mismo lo ha imaginado.
Los tiempos que vivimos son gloriosos. Así como el mundo y la tecnología han avanzado y su meta es lograr mucho más en menos tiempo, nosotros, por medio de la Visión del G12 debemos avanzar y ganar las ciudades y naciones para Dios. Es su responsabilidad, hacer que cada miembro de su equipo se esfuerce por hacer que la Visión corra lo más rápido posible, sin que nada ni nadie la detenga.
Usted tiene en sus manos una llave que le abrirá las puertas para no solamente ganar almas para el Reino de Dios, sino que le mostrará los pasos que se deben dar para retener el fruto y luego hacer que éste se multiplique.
Debido a que este es uno de los libros mas solicitados por aquellos que están interesados en hacer la Visión, fue que juntamente con el equipo editorial, vimos la necesidad de hacer una reedición, incluyendo algunos temas como el que tiene que ver con la nueva estrategia del ganar, y también los bosquejos de reencuentro, etc. Conamos en que este manual suplirá la necesidad de su ministerio.
Dr. César Castellanos
A FINALES del año pasado el Señor nos dio una revelación en la cual nos decía que debíamos orar pidiendo sabiduría, inteligencia y creatividad: La palabra fue:
“Haciendo estar atento tu oído a la sabiduría; si inclinares tu corazón a la prudencia, si clamares a la inteligencia, y a la prudencia dieres tu voz; si como a la plata la buscares, y la escudriñares como a tesoros, Entonces entenderás el temor de Jehová, y hallarás el conocimiento de Dios. Porque Jehová da la sabiduría, y de su boca viene el conocimiento y la inteligencia” (Proverbios 2:2-6).
Comenzamos a reclamar esta promesa diciéndole: “Señor, Tu Palabra dice que Tú le das sabiduría e inteligencia a aquel que te la pide, anhelamos una nueva medida de ella…”. Este era nuestro clamor pues sabíamos que no estábamos operando en Su plenitud.
“Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada” (Santiago 1:5).
Hemos aprendido de los Pastores César y Claudia Castellanos a orar basados en la palabra rhema dada por Dios y así comenzamos a pedirle al Padre creatividad, inteligencia y sabiduría. Su respuesta no se tardó en llegar y comenzamos a ver cambios no sólo en nuestras vidas sino también en el ministerio y todo lo que hacíamos. El Señor también nos habló en otro pasaje del libro de Ezequiel que decía: “…los cielos se abrieron, y vi visiones de Dios” (1:1). Por medio de él entendimos que los cielos estaban abiertos y que era el tiempo de ver las visiones de Dios cumplidas en nuestras vidas.
Este también es su tiempo de “…cielos abiertos…”. Si ha soñado con ver multitudes rendidas a los pies de Cristo, si las ha visualizado ha llegado la hora de que sea una realidad. Este es su momento de avanzar en la visión de lo que ha anhelado conquistar para su Dios.
En una de las reuniones con los integrantes del equipo de doce en Miami, el Pastor Castellanos compartió una palabra que Dios usó para llevarnos a una nueva dimensión: “Despierta, despierta, vístete de poder…” (Isaías 52:1).
Entendimos que tal vez nos habíamos conformado con lo que ya habíamos conquistado. En Colombia, liderábamos un grupo muy lindo, una multitud se reunía en el coliseo; la iglesia como tal ya había visto las multitudes. Pero el Señor nos dijo: “No pueden estar conformes con esto porque Yo tengo mucho más para ustedes como iglesia; deben anhelar lo que yo verdaderamente anhelo”. Su deseo es que todos vengan al conocimiento de Jesús, que las almas conozcan Su Palabra, que sean discipulados hasta transformar naciones por completo.
Comenzamos a meditar en esta palabra que el Pastor compartió, queríamos despertarnos y vestirnos de poder para conquistar mucho más. En medio de esta búsqueda recibimos una estrategia divina, fácil y sencilla basada en la Palabra que habíamos obtenido, la cual nos permitiría alcanzar el primer millón de almas como miembros de la iglesia en Bogotá; lo creímos, la aplicamos y lo hicimos.
Aunque teníamos el manual de la Escalera del Éxito, y lo veníamos aplicando paso a paso con éxito, sentimos que Dios nos quería llevar a otro nivel, y era dándonos una estrategia fresca para el evangelismo. Esta es la estrategia divina que Dios nos dio: Que cada líder de la iglesia pueda contactar a tres personas cinco días de la semana (lunes a viernes), durante las cuatro semanas del mes (3x5x4) estaríamos alcanzando sesenta personas nuevas al mes.
Compartimos este desafío con el equipo de Colombia. Allí estamos discipulando ya los mil setecientos veintiocho (que es la tercera generación de grupos de doce); ellos aceptaron el reto y en el mes de Octubre nos lanzamos a la conquista. Al nalizar el mes, vimos que no sólo habíamos alcanzado la meta, sino que la habíamos superado, evangelizando más de 107.200 personas que hicieron su profesión de fe. Esto motivó tremendamente a todo el equipo principal de Bogotá, quienes se unieron a la misma estrategia y en tres meses, como iglesia habíamos logrado evangelizar más de un millón de personas. Sabemos que ganar es solo el primer paso, y este es el momento de aplicar cada enseñanza de este manual, el cual nos llevará a transformar cada persona ganada, en un líder que pueda dar fruto abundante para Dios.
Eliemerson y Johanna Proenca