GRAVE CRISIS HUMANITARIA EN SOMALIA: DIVERSAS AMENAZAS DE UN ESTADO EN CONFLICTO
SERIOUS HUMANITARIAN CRISIS IN SOMALIA: VARIOUS THREATS OF A STATE IN CONFLICT
Soraya Zuinaga de Mazzei*
Soraya Zuinaga de Mazzei*
Resumen
Abstract
Analizar el tema de Somalia en la actualidad y su grave crisis humanitaria que representa en un mundo globalizado, es una tarea titánica, porque es estar ante la muerte y la desolación de cientos de seres humanos que aparentemente se quedaron anclados en su pasado colonial y que no han podido traspasar el umbral del siglo XXI. Cuando los expertos y académicos hablamos de la dinámica de las relaciones internacionales y tratamos de explicar la realidad internacional a través de diferentes enfoques teóricos en un sistema internacional cambiante y donde las nuevas tecnologías de la información, redes sociales y avances tecnológicos y desarrollo industrial han generado transformaciones y avances a nivel mundial, el dramático relato de la madre somalí Wardo Mohamud Yusuf de 29 años que le dio la vuelta al mundo el 17 de agosto de 2011, quien caminó durante dos semanas con su hija de un año a cuestas sobre su espalda. De la mano, llevaba a su hijo de cuatro años, mientras escapaba de la sequía y la hambruna en Somalia.
Analyze the issue of Somalia today and the serious humanitarian crisis is in a globalized world is a daunting task because it is being the face of death and desolation of hundreds of human beings were apparently stuck in its colonial past and could not cross the threshold of XXI century. When experts and scholars talk about the dynamics of international relations and try to explain the international situation through different theoretical approaches in a changing international system where new information technologies, social networking and technological and industrial development have generated changes and advances worldwide, the dramatic story of Yusuf Mohamud Ward Somali mother of 29 years that turned the world on August 17, 2011, who walked for two weeks with her year old daughter in tow on his back. Hand in hand, took her son for four years, while escaping from drought and famine in Somalia.
Palabras clave
Key words
Somalia, Estado en conflicto, crisis humanitaria.
Somalia, state conflict, humanitarian crisis
Licenciada en Estudios Internacionales de la Universidad Central de Venezuela UCV (Caracas, Venezuela); Magister Scientiarum en Seguridad y Defensa Nacional, Instituto de Altos Estudios de la Defensa Nacional “Gran Mariscal de Ayacucho Antonio, José de Sucre” (IAEDEN); Diplomado Internacional en Estudios de Terrorismo (Centro UNESCO, ANUV y UPEL); actualmente estudiante del Doctorado en Gerencia, Estudios Virtuales, Universidad Yacambú (Barquisimeto, Edo. Lara); profesor Asociado e Investigadora desde 1998 hasta 2010 en el IAEDEN en situación de jubilación, último cargo Jefe de la División de Investigación y Docente Facilitadora en la Maestría en Seguridad, Defensa Integral e Integración (IAEDEN); experta en temas de seguridad y defensa, terrorismo, geopolítica, conflictos y relaciones internacionales. Profesora y Conferencista invitada en el Centro de Estudios en Fronteras e Integración (CEFI) y la Maestría en Integración y Fronteras, Universidad de los Andes (ULA-Táchira). Investigadora del Centro de Estudios en Seguridad Defensa y Asuntos Internacionales-CESDAI. www.cesdai.org
*
*
Licensed in International Studies of the Central University of Venezuela UCV (Caracas, Venezuela); Magister Scientiarum in Security and National Defense, Institute of High Studies of the National Defense "Great Marshall of Ayacucho Antonio, Jose of Sucre" (IAEDEN); International Graduate in Studies of Terrorism (Center UNESCO, ANUV and UPEL); nowadays student of the Doctorate in Management, Virtual Studies, University Yacambú (Barquisimeto, Edo. Lara); Associate teacher and Researcher from 1998 until 2010 in the IAEDEN in situation of retirement, last post Chief of the Division of Investigation and Faculty facilitator in the Mastery in Security, Integral Defense and Integration (IAEDEN); expert in safety topics and defense, terrorism, geopolitics, conflicts and international relations. Teacher and Lecturer invited in the Center of Studies in Borders and Integration (CEFI) and the Mastery in Integration and Borders, University of the Andes (ULATáchira). Researcher of the Center of Studies in Security, Defense and International Affairs - CESDAI. www.cesdai.org
Serie: Documentos coyunturales No. 17 – Septiembre de 2011 1
www.cesdai.org
SORAYA ZUINAGA DE MAZZEI INVESTIGADOR CESDAI Cuando el niño desfalleció, cerca del final del recorrido, la mujer le echó en la cabeza algo de la poca agua que le quedaba para reanimarlo. Pero el menor estaba inconsciente y no podía beber, pidió ayuda a otras familias que seguían el mismo camino, pero ninguna se detuvo. Todos iban preocupados por su propia supervivencia y seguridad. Entonces, la madre tuvo que tomar una decisión que nadie querría tener que enfrentar jamás. “Finalmente, decidí dejarlo atrás, en el camino y al amparo de Dios”, dijo Yusuf días después, durante una entrevista en un campamento de refugiados en Dadaab, en Kenia, esta versión nos hace parecer que se ha detenido la historia, el desarrollo y hasta la vida misma en esa parte del planeta. Lo anterior evoca a una historia sacada de una película de terror, pero es la realidad cotidiana en la que se debate hoy la población civil somalí. Así como otras reveladoras y penosas prácticas realizadas por madres somalíes, quienes se ven en la necesidad de atarse una cuerda alrededor de la cintura para apretarse el estómago y así evitar la sensación de hambre mientras dan a sus hijos la poca comida que pueden conseguir, pero esta práctica se convierte en algo letal como lo explico Philip Kilonzo, de ActionAid Kenya: “Esta práctica muestra cuán desesperadamente hambrientas están las mujeres. Pero puede ser letal: varias mujeres han muerto tras liberar de golpe su estómago (de la presión de la cuerda) cuando han podido conseguir otra vez comida”. Este hecho se multiplica día a día en Somalia, cada segundo un ser humano fallece víctima del hambre y la inanición y entre ellos la mayoría niños, ya sea porque sus padres fallecen en el camino hacia los campos de refugiados situados en las fronteras de Kenia y Etiopia o son los padres que dejan a sus hijos fallecidos en el largo trayecto que les toca recorrer huyendo de la violencia y el hambre. Alrededor de 13 millones de personas en el Cuerno de África están siendo afectadas por una crisis alimentaria sin precedentes y que se ha
cobrado ya miles de vidas, es así como “la amenaza de la pobreza extrema” se cierne sobre esta región de manera contundente. La situación humanitaria que vive el país es crítica. Desde el 21 de agosto de 2009, se venía alertando sobre esta situación, la Unidad de Análisis de Nutrición y Seguridad Alimentaria (FSAU) de la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y Alimentación (FAO) declaró que cerca de 3,8 millones de personas, para ese momento, requerían ayuda humanitaria en Somalia, dato que representaba un incremento del 17% respecto a enero del mismo año. Dos años después, entre los meses de julio y agosto de 2011 la crisis humanitaria se ha agudizado en forma considerable, cientos de miles de somalíes afrontan la peor crisis humanitaria de la última década como consecuencia del avance del conflicto armado y la sequía que azota a la región central de Somalia. La asistencia humanitaria tanto de Organismos Internacionales como la ONU, la ACNUR y la UNICEF, así como las ONG´s, se ha visto perturbadas en su trabajo de campo, por los altos niveles de inseguridad de la región, quienes en su mayoría han sido víctimas de secuestros, saqueos de las ayudas y hasta asesinatos por parte de las facciones en pugna que se disputan el control del territorio. La hambruna que afecta al sur y al centro de este país ha producido un enorme flujo de desplazados y refugiados a Kenia y Etiopía, con los consiguientes problemas sanitarios y de hacinamiento y el brote de epidemias que cobran también cada día las vidas civiles. Según datos de la ONU, en Kenia, la potencia económica de la región, unos 3,5 millones de personas corren riesgo de morir de hambre sino se toman las medidas para detener o paliar esta catástrofe humanitaria. Duncan Harvey, director nacional de la organización Save the Childrenen Etiopía, dijo: “Desde el punto de vista del número de personas afectadas, esta es una de las peores sequías que el mundo ha visto en mucho tiempo”. Estas cifras superan el fallecimiento de personas
Centro de Estudios en Seguridad, Defensa y Asuntos Internacionales – CESDAI – 2
www.cesdai.org
GRAVE CRISIS HUMANITARIA EN SOMALIA: DIVERSAS AMENAZAS DE UN ESTADO EN CONFLICTO víctimas de cualquier conflicto interno o situación de crisis en cualquier otro Estado que se ha presentado en épocas recientes en el planeta. Igualmente, las violaciones generalizadas y sistemáticas a la población civil del Derecho Internacional Humanitario y de Derechos Humanos, que incluyen crímenes de guerra, y la terrible situación humanitaria que sigue padeciendo los ciudadanos que habitan en el sur, el centro de Somalia y en la capital, Mogadiscio, y en el perímetro alrededor de ella, son quienes corren el riesgo de perder su vida y de resultar heridos en ataques indiscriminados a manos de todas las partes en conflicto y como consecuencia de la situación de violencia generalizada y desintegración del Estado de Derecho imperante en ese país del continente africano. Mogadiscio la capital de Somalia es desde 2007 el epicentro de un conflicto armado interno que enfrenta a tres actores importantes, por un lado, al Gobierno Federal de Transición (GFT) de Somalia, reconocido internacionalmente, y por el otro, los grupos armados islamistas Al Shabaab acusado de tener vínculos con Al Qaeda y Hizbul Islam, ambos grupos se han convertido en los principales adversarios del GFT, y Al Shabaab ha ampliado su control a la mayor parte del territorio del sur y el centro del país, incluidas las principales ciudades. Continúan produciéndose duros combates y ataques en Mogadiscio, donde el GFT controla varios distritos con el apoyo de la Misión de Paz de la Unión Africana en Somalia (AMISOM), que está intentando llevar estabilidad en medio de la anarquía que vive ese país. Para Roland Marchal, analista del National Centre for Scientific Research, “la paradoja de la crisis de Somalia es, precisamente, que se trate del «único conflicto africano en el que todos los actores internacionales se niegan a negociar con unas milicias islamistas (Al Shabaab) que controlan el 60% del territorio». Porque, tras veinte años, en Somalia la sequía no es solo ambiental. También es política”.
La Unicef declaro a inicios del mes de septiembre de 2011 que se está frente a “la peor crisis humanitaria del mundo”, resultado de una de las sequías más terribles de los últimos 60 años y que ha provocado repetidas malas cosechas y la muerte de un gran número de cabezas de ganado, el clima ha traído consecuencias fatídicas sobre la población y los formas y medios de producción, conjuntamente con el alto índice de conflictividad política y social que vive la país. Otro de los efectos negativos que se añaden a esta crítica situación en Somalia es el cambio climático que se presenta como “una amenaza” de grandes y nefastas proporciones por la magnitud de la misma, como lo explica en su Libro el Doctor Tim Flannery La Amenaza del Cambio Climático. Historia y Futuro dice:” El cambio climático es probablemente la más amenazadora de las alteraciones que el ser humano ha provocado y sus consecuencias atañen a todas las formas de vida de la Tierra. Los sistemas de regulación del planeta, sobrecargados por las acciones del hombre, son incapaces de recuperar el equilibrio arrebatado: los daños causados superan con mucho la asombrosa capacidad del planeta para absorberlos y minimizarlos. La vida, tal y como la conocemos, se ve seriamente amenazada y ha llegado el momento de que el ser humano ponga la tecnología, que tan insensatamente ha utilizado para dañar la vida, a trabajar para salvar la misma”, esta amenaza descrita vulnera la seguridad alimentaria de cualquier país. De acuerdo a la definición sobre seguridad alimentaria que maneja el Grupo de Trabajo Interdepartamental de la FAO sobre Cambio Climático Seguridad Alimentaria 2007: Un Documento Marco, esta existe: “cuando todas las personas en todo momento tienen acceso físico o económico a alimentos nutritivos, inocuos y suficientes para satisfacer las necesidades dietéticas y de su preferencia para una vida activa y saludable. Para lograr la seguridad alimentaria, los cuatro componentes en su totalidad deben ser adecuados. Ellos son: disponibilidad, estabilidad, accesibilidad y
Serie: Documentos coyunturales No. 17 – Septiembre de 2011 3
www.cesdai.org
SORAYA ZUINAGA DE MAZZEI INVESTIGADOR CESDAI utilización”. En este caso Somalia no dispone de los cuatro (04) antes mencionados para garantizar su seguridad alimentaria. Comprendiendo la Historia Lo que ahora ocurre en Somalia tiene profundas raíces que van mucho más allá del proceso descolonización que vivió el continente africano de una manera abrupta y traumática luego de finalizada la segunda guerra mundial y recién fundada la ONU. Hoy los clanes como Hawiye, Daarood o Isaaq libran una guerra de todos contra todos para llenar el vacío de poder y controlar el país. La sociedad de Somalia está dividida en diferentes clanes de los que los Issaq, Daarood, Dir Hawiye son los más grandes. Sólo los Issaq suponen aproximadamente el 25% de la población total. Los Issaq ocupan el norte de Somalia, lo que los británicos llamaron Somaliland. Durante el siglo XIX, Somalia fue colonizada por británicos e italianos y los somalís se encontraban divididos entre estos dos poderes coloniales, por una parte y Etiopía por la otra. Hoy, hay somalís que viven en Etiopía, Djibouti, Kenia y Tanzania como minorías. En el momento de la independencia 1960, la Somaliland británica y la Somalia italiana se unieron para formar la República de Somalia. Los diferentes clanes vivieron en una relativa paz por nueve años después de la independencia. Sin embargo, en 1969, el Presidente Shermaarke, un miembro del clan Daarood del sur, fue asesinado por un soldado del sub-clan rival Majeerteen. Su primer ministro, Muhamed Ibrahim Egal, un Issaq del Norte, intentó tomar el mando del país, pero las luchas parlamentarias y ministros del gobierno se lo impidieron. En medio de la confusión, el general Mohamed Siad Barer organizó un golpe de estado el 21 de octubre de 1969 haciéndose con el gobierno del país hasta 1991.
En 1977, Siad Barer decidió emprender una guerra contra Etiopía para hacerse con el territorio de Ogaden, habitado por somalís. Las tropas de Siad rápidamente se hicieron con el 90 % del territorio de Ogaden, pero el gobierno etíope consiguió la ayuda de la Unión Soviética y el ejército somalí fue ampliamente derrotado en 1978 lo que llevó al régimen de Siad a un gran debilitamiento político. En mayo de 1988, el Movimiento Nacional Somalí (SNM), creado en 1981 por exiliados del clan Issaq en Londres, lanzó una rebelión contra el régimen de Siad. Los Issaq del norte se sentían muy descontentos con la política llevada por Siad que había impuesto a miembros del clan del sur en los puestos fundamentales de la administración del norte. Tropas del clan del sur reprimieron la rebelión matando a un gran número de civiles, violando a las mujeres y destruyendo pueblos enteros. En 1989, el SNM se unió a varios nuevos grupos rebeldes en el Sur en su lucha contra Siad y el conflicto armado interno permaneció hasta enero de 1991, fecha en que Siad fue obligado a huir. Durante la guerra civil, se estimó que murieron unas 50.000 personas, principalmente en el norte y que cerca de un millón de personas se vieron obligadas a abandonar sus hogares huyendo a Etiopía o a otras partes de Somalia. Pero con la huida de Siad no llegó la paz al pais. El Congreso de la Unión Somalí (USC), apoyado principalmente por el clan Hawiye, exigió el puesto de presidente para uno de sus líderes y otros clanes se opusieron. De nuevo estalló la guerra civil, salvo intervalos, que no ha cesado y ha impedido la existencia de un poder Central desde 1991. La intervención militar internacional entre 1992 y 1995 de Naciones Unidas y Estados Unidos para intentar hacer frente a la grave situación humanitaria y contribuir a la resolución política de la situación fue un fracaso rotundo. En enero de 2004, distintos líderes somalíes llegaron a un acuerdo para formar un parlamento integrado por 275 miembros encargados de elegir al nuevo presidente de la República,
Centro de Estudios en Seguridad, Defensa y Asuntos Internacionales – CESDAI – 4
www.cesdai.org
GRAVE CRISIS HUMANITARIA EN SOMALIA: DIVERSAS AMENAZAS DE UN ESTADO EN CONFLICTO Abdulahi Yusuf Ahmed, que a su vez, nombró al primer ministro, Ali Mohamed Gedi, con responsabilidad de formar Gobierno. Entre las decisiones tomadas, se incluía que todas las instituciones tendrían un mandato transitorio de cinco años, tras el que deberían celebrarse un referéndum sobre una nueva constitución y elecciones democráticas, de allí queda configurado el Gobierno Federal de Transición (GFT), desde ese momento hasta ahora la violencia no ha cesado en Somalia. El Gobierno Federal de Transición (GFT), tampoco dispone del reconocimiento necesario por parte de toda la población somalí quien se encuentra dividida, pero si gozan reconocimiento internacional. A pesar de esto hay varias zonas del país que el GTM no ha podido hacerse del control y que poco a poco han ido cayendo en manos del grupo islamista Al-Shabaab. El 11 de septiembre de 2011 estas fuerzas islámicas tomaron el control del pueblo de el-Wak, cerca de la frontera con Kenia, bajo intensos combates que duraron alrededor de 4 horas y con un saldo de más de 20 personas muertas. El Gobierno Federal de Transición, con sede en la ciudad de Mogadiscio, sólo mantiene pequeñas áreas de tierra junto a la frontera con Kenia y Al-Shabaab controla el resto. ¿Somalia un Estado Frágil o un Estado Fallido? En recientes investigaciones realizadas en el tema de la paz y los conflictos, como en los estudios en el área seguridad y defensa, estas han centrado su atención en los vínculos entre los conflictos violentos a gran escala, el desempeño de los Estados y la seguridad internacional o como también hoy se denomina seguridad global. La fragilidad institucional de un Estado puede ser el “caldo de cultivo” para conflictos violentos que debilitan o que incluso conducen al colapso del propio Estado.
El papel fundamental de un Estado es la de proveer seguridad y establecer el orden interno para su población y servir como unidad básica para el sistema internacional. La fragilidad estatal no sólo afecta a la población a lo interno de ese Estado, sino que, afecta a los Estados vecinos y a la comunidad internacional en forma general y tanto es así que lo que está sucediendo en Somalia afecta a los países limítrofes a esa nación Etiopía, Yibuti y Kenia en este último se encuentra al noreste, el más grande campo de refugiados como lo es el de Dadaab, donde aproximadamente llegan cerca de 4000 a 5000 somalíes que huyen de la violencia y el hambre, en busca de su supervivencia, paz y alimentos. Este campo de refugiados se construyó para 90.000 personas y ahora en él se encuentran más de 350.000 refugiados. Los Estados Frágiles son considerados vulnerables para el desarrollo de amenazas en temas de seguridad tales como el terrorismo y el crimen organizado, en el caso de Somalia el aumento de actos ilícitos contra la seguridad de la navegación marítima en el golfo de Adén y frente a las costas de este país ponen de manifiesto las diversas actividades delictivas en el mar, como la piratería, el robo a mano armada y secuestros que constituyen una grave amenaza con repercusiones negativas para la navegación internacional en cuanto al tráfico marítimo, el comercio internacional, la pesca, la seguridad de la vida humana en el mar o las operaciones de asistencia humanitaria en Somalia, unido a la violencia que día a día se vive en ese país. No obstante, de acuerdo a las organizaciones Fund for Peace y Foreign Policy que presentan año tras año el Índice de Estado Fallido, con una cobertura de 177 países, según lo expuesto por ellos, el término Estado Fallido es polémico, ya que califica de esta manera a aquel Estado en donde el gobierno ha perdido control efectivo sobre su territorio, enfatizando la importancia de la protección de las democracias. El término también se utiliza en el sentido de un Estado que se ha hecho ineficaz al momento de cumplir las
Serie: Documentos coyunturales No. 17 – Septiembre de 2011 5
www.cesdai.org
SORAYA ZUINAGA DE MAZZEI INVESTIGADOR CESDAI funciones que le han sido asignadas en materia de seguridad y defensa, justicia, transparencia y desarrollo social y económico. El mayor énfasis que se hace a este respecto, es la capacidad con la que cuenta un Estado para hacer cumplir las leyes en forma coherente y uniforme, manifestándose su incapacidad en las altas tasas de criminalidad, corrupción extrema, un extenso mercado informal, burocracia inaccesible, ineficacia judicial para aplicar la justicia, interferencia militar en la política, y aquellas situaciones en las cuales la sociedad se ve obligada a subsanar de forma independiente las tareas pendientes que el Estado no ha podido llevar a cabo con éxito como le corresponde. Los Estados más débiles del mundo no son sólo un peligro para ellos mismos, ya que pueden representar una amenaza el progreso, desarrollo y la estabilidad de otros.
poner fin a la violencia y aminorar los efectos adversos del cambio climáticos sobre la población, más que una injerencia es brindar la seguridad y protección donde el Derecho Internacional Humanitario y el Derecho Internacional de los Derechos Humanos se hagan presentes y además se le de uso y aplicación a la “responsabilidad de proteger” término relativamente nuevo que, desde 2005, fue aceptada y aprobada en la Asamblea General de la ONU en Documento Final de la Cumbre Mundial 2005 como el deber de socorro a poblaciones víctimas de graves violaciones de derechos humanos es decir cuando la población esté sufriendo graves daños como resultado de una guerra civil, una insurrección, la represión ejercida por el Estado o el colapso de sus estructuras, y ese Estado no quiera o no pueda atajar o evitar dichos sufrimientos, la responsabilidad internacional de proteger también recae en la Comunidad Internacional.
Consideraciones Finales Sea cual fuera la definición que aplica al Estado de Somalia, no es menos cierto que las amenazas a la seguridad y supervivencia de los ciudadanos somalíes están presentes, víctimas de un entramado de violencia caracterizado por factores como: la inestabilidad política, el enfrentamiento de clanes, el cambio climático, la pobreza extrema, la hambruna, la piratería marítima y el terrorismo y como consecuencia de estos, miles de desplazados y refugiados trasladan esa problemática a los países vecinos y a la región africana, sin que se haya podido avanzar hacia la paz y la reconciliación nacional en más de 20 años. Donde el fenómeno de la globalización nunca ha estado presente y mucho menos el desarrollo, seres humanos sin oportunidades ni posibilidades, donde su único fin es solo subsistir.
Suscripciones director@cesdai.org investigaciones@cesdai.org Centro de Estudios en Seguridad, Defensa y Asuntos Internacionales – CESDAI(57 1) 314 3 69 79 92. Bogotá, Colombia. (34) 6 66 37 15 46. Madrid, España. © Derechos Reservados El contenido de los artículos es de exclusiva responsabilidad de los autores. Los textos pueden reproducirse total o parcialmente citando la fuente.
La comunidad internacional no debe mostrarse indiferente al tamaño de la tragedia de dimensiones inimaginables que se está viviendo en Somalia más de 750.000 mil personas en peligro de muerte inminente, sino se lo logra Centro de Estudios en Seguridad, Defensa y Asuntos Internacionales – CESDAI – 6
www.cesdai.org