Divan de Freud. Sesión 10

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SESIÓN 10. La Voluntad de Dios El salón blanco se llenó con la fragancia del inciencio que exhalaban las religiosas que habían venido a hablar con el Maestro Aruna. Unas monjas eran jóvenes y otras de edad, pero todas sonreían amablemente.

Religiosas. Sabemos que usted afirma que todo es la Voluntad de Dios y que eso es el mismo destino del hombre. Que el destino no es otra cosa que la TERNURA. El bebé sonrió Voluntad de Dios. en el vientre materno y un Maestro Aruna: Todas las religiones lo dicen, no relámpago de luz blanca sólo yo. La Biblia, en el Padre Nuestro, dice: “Hágase tu Voluntad”; y Jesús antes de ser iluminó la tristeza en el arrestado en el Monte de los Olivos, en el huerto rostro de la madre de Getsemanì, oró a Dios diciendo: “Hágase tu acongojada. (Microcuentos de Voluntad mas no la mía”. Y al apóstol Pedro le dijo que en dos días iba a morir porque “esa era la Lobito) Voluntad de Dios”. En los Vedas, textos sagrados del hinduismo, dice: “Tú eres el hacedor, el experimentador, el oyente, el hablante. En el Islam encontramos: “Solamente hay Dios. No hay ninguna realidad” y en Budismo: “Los eventos ocurren, las acciones suceden: No hay un hacedor individual” Entonces las religiones, en esencia, afirman lo mismo: que todo es la Voluntad de Dios.

Religiosas: Pero en el mundo hay cosas buenas y cosas malas. Cómo entonces lo malo es la Voluntad de Dios.

Maestro Aruna. Lo malo y lo bueno son conceptos relativos. Lo que en una cultura es malo en otra es bueno. En el cristianismo es malo tener más de una esposa y en el Islam es permitido tener varias esposas. En el hinduismo es malo matar las vacas y en el cristianismo con la carne de las vacas hacen deliciosas hamburguesas y filetes. La lista de lo bueno y lo malo la hicieron las religiones organizadas de acuerdo a sus conveniencias sociogeogràficas. Por lo tanto, lo bueno y lo malo es discutible porque son conceptos emanados de la mente del hombre. Un niño pequeño no funciona con esos parámetros. Actúa libremente sin el concepto de bueno y malo.

Religiosas: ¿Para usted no hay nada malo ni bueno? Todo es La Voluntad de Dios?

Maestro Aruna. Si, todo en este cosmos y en el microcosmos, es la Voluntad de Dios.

Todo es La Voluntad de Dios. Todo sucede o no sucede por La Voluntad de Dios. La voluntad de Dios hace que todo suceda o no suceda. Dios decide, no el hombre. El hombre se engaña al pensar que él es el hacedor. Si el hombre fuera el hacedor llevaría una vida plena de paz y felicidad. La felicidad o la infelicidad en la vida del hombre es

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la voluntad de Dios. El océano no desborda y mantiene su nivel aunque todos los ríos del mundo llegan a él por la voluntad de Dios. Tsunamis o maremotos, terremotos, temblores, erupciones volcánicas, desbordamientos de ríos, avalanchas, lluvias torrenciales, ciclones, huracanes, trombas marinas, sequías, incendios forestales, nevadas, rayos, truenos y centellas es la voluntad de Dios. Los fenómenos naturales es la voluntad de Dios. Colisiones cósmicas, agujeros negros, sistemas solares, implosión de estrellas, desintegración de asteroides, explosiones solares son la voluntad de Dios.

Los fenómenos cósmicos son la voluntad de Dios Igual es la voluntad de Dios el giro de la Tierra a la distancia exacta del Sol para que haya vida. Es la voluntad de Dios que la Tierra no se distancie del Sol para evitar congelarnos aunque el astro rey se consuma día a día Es la voluntad de Dios que la Tierra gire en órbita exacta alrededor del Sol para la germinación de la vida vegetal, animal y humana. Es la voluntad de Dios la órbita de la Tierra alrededor del Sol para producir la gravedad exacta para retener los gases para que haya atmósfera. Es la voluntad de Dios, y no la del hombre, que el cuerpo respire durante los estados vigílico, onírico y sueño profundo., para que el cuerpo permanezca vivo en los tres estados. Es la voluntad de Dios el funcionamiento armónico de todos los órganos del cuerpo y la temperatura natural del cuerpo que permite su funcionamiento armónico. Es la voluntad de Dios la actividad del Sol, de las estrellas, de los planetas, de los satélites, de los meteoritos, de las galaxias, de los agujeros negros, de los cuásares y de las supernovas La actividad del cosmos es la voluntad de Dios. Es la voluntad de Dios que cada cosa y cada organismo vivo ocupe un lugar y efectúe una actividad. Por la voluntad de Dios todo Es y todo Es por la voluntad de Dios. Un glóbulo rojo y un agujero negro desarrollan una actividad por la voluntad de Dios. La voluntad de Dios se cumple en todo lo existente. Nada puede existir por si mismo si no es por la voluntad de Dios. Es la voluntad de Dios la indulgencia en el corazón indulgente, el amor en el corazón amoroso, la compasión en el corazón compasivo, la misericordia en el corazón misericordioso, la caridad en el corazón caritativo, la bondad en el corazón bondadoso, la amistad en el corazón amistoso, la ternura en el corazón tierno, la humildad en el corazón humilde. También es la voluntad de Dios el odio en el corazón odioso, la desidia en el corazón desidioso, la indolencia en el corazón indolente, la severidad en el corazón severo, la miserableza en el corazón miserable, la cólera en el corazón colérico, la perversidad en el corazón perverso, la maldad en el corazón maléfico, la mentira en el corazón mentiroso y la codicia en el corazón codicioso.

Es la voluntad de Dios el volar en las aves, el nadar en los peces, el reptar en los reptiles, el trepar en los mamíferos, el saltar en los canguros, el cavar en los topos, el correr en los cuadrúpedos, el trinar en los pájaros. Igual es la voluntad de Dios la lentitud en el perezoso, la velocidad en el leopardo, la ferocidad en el león, la fuerza en el oso, la agilidad en el felino, la astucia en el zorro, el aullido en el lobo, el juego en los cachorros, la pasividad en la paloma.

Es la voluntad de Dios la respiración en el cuerpo, la circulación en la sangre, la motricidad en los músculos, la reproducción en las células, la electricidad en el sistema nervioso, la calcificación en los huesos, la secreción en el sistema endocrino, la visión en el ojo, la olfacción en la nariz, la audición en el oído, la gustación en la lengua, el parpadeo de los párpados, la maternidad en la matriz, la ovulación en el ovario y el torrente seminal en las gónadas.

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Es la voluntad de Dios la fragancia en la rosa, el aroma en el eucalipto, el perfume en las flores, el fruto en los árboles, la glucosa en las frutas, la dulzura en la caña, la miel en el polen, el aceite en la semilla, el sumo en los cítricos, la harina en el trigo. Nada sucede en este universo que no sea la voluntad de Dios.

Un electrón se mueve por la voluntad de Dios. La voluntad de Dios hace que se muevan los electrones. La energía eléctrica no puede explicarse porque la energía eléctrica es una aspecto de la misma voluntad de Dios y la voluntad de Dios no puede explicarse por si misma ya que ella misma no tiene explicación. La duración de la vida orgánica e inorgánica es la voluntad de Dios. Nada puede existir una fracción de segundo más allá de la voluntad de Dios. El límite de la vida es la voluntad de Dios.

Es la voluntad de Dios el veneno paralizante en el áspid, el instinto criminal en el asesino, la bondad ilimitada en el santo, el hilo sedoso en la araña, la ingratitud en el corazón ingrato, la ingenuidad espontánea en los niños, el sacrificio amoroso en las madres, la fidelidad en los pericos emparejados, la osadía en el guerrero valiente, el miedo santurrón en el cobarde, la falsedad en el político mentiroso. La voluntad de Dios es tan poderosa que hace sonreír a los bebés sin que ellos lo hayan aprendido en ninguna parte…

Religiosas. (Estaban maravilladas por lo que escuchaban) Tímidamente preguntaron: ¿Cómo es eso que la hoja en el árbol se mueve sólo por la Voluntad de Dios?

Maestro Aruna: Para que la hoja se mueva debe estar en la rama, la rama en el árbol, el árbol en la semilla y la semilla en la tierra. Sin tierra no hay árbol porque la tierra proporciona los nutrientes. Es la voluntad de Dios la tierra y los nutrientes para que la hoja se mueva. El árbol no crece sino hay sol que hace la fotosíntesis. Es la voluntad de Dios el sol y la fotosíntesis para que el árbol crezca y la hoja se mueva. Sin sol y sin fotosíntesis no hay semilla, ni árbol, ni rama ni hoja que se mueva. Sin agua no hay árbol. Es la voluntad de Dios el agua que hace crecer la semilla, la rama, el árbol para que la hoja se mueva. Es la voluntad de Dios el sol, la tierra, el agua, la fotosíntesis, el árbol, la rama y la hoja para que ella se mueva. Ahora, la hoja se mueve por el viento.

Es la voluntad de Dios el viento para que la hoja se mueva. El viento es aire en movimiento. El aire en movimiento es la voluntad de Dios para que la hoja se mueva. El aire es combinación de gases. Es la voluntad de Dios la combinación de gases para que haya aire para que haya viento para que la hoja se mueva. Hay aire porque la gravedad retiene la atmósfera alrededor del planeta. Es la voluntad de Dios que la gravedad retenga la atmósfera alrededor del planeta para que haya aire para haya viento para que la hoja se mueva El viento existe porque el planeta gira sobre sí mismo. Es la voluntad de Dios que el planeta gire sobre si mismo para que haya viento para que la hoja se mueva. El planeta gira sobre si mismo y alrededor del sol por la gravedad solar. Es la voluntad de Dios que el planeta gire sobre si mismo y alrededor del sol por la gravedad solar para que haya aire para que haya viento para que la hoja se mueva. La Tierra es parte del sistema solar que se mueve por la gravedad de la galaxia La Vía Láctea. Es la voluntad de Dios que la tierra sea parte del sistema solar que se mueve por la gravedad de la galaxia La Vía Láctea, para que haya viento para que la hoja se mueva. La Vía Láctea se mueve por la gravedad universal. Es la voluntad de Dios que La Vía Láctea se mueva por la gravedad universal para que el sistema solar se mueva para que el planeta se mueva para que el aire se mueva para que el viento mueva la hoja. Que todo el cosmos con sus leyes universales confluyan en una hoja para que ella se mueva es la voluntad de Dios. Es la voluntad de Dios para que se mueva la hoja que confluyan las leyes universales de todo el cosmos. La Voluntad de Dios son las mismas leyes

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universales. Todo el universo confluye para que dentro de él se realice el más mínimo suceso, porque Dios está en todo, todo está en Dios y Dios es Todo.

Religiosas: Entonces, ¿ha sido la Voluntad de Dios esta charla?

Maestro Aruna. ¡Por supuesto! No fue por la voluntad de ustedes que están aquí. Dios puso en sus mentes el pensamiento de venir aquí. Igual es la Voluntad de Dios que algunos puedan leer o escuchar estas charlas.

Las religiosas apagaron las grabadoras y besaron las manos del Maestro. Al salir del salón sonrieron al tiempo. Era la gratitud de Dios en forma de sonrisa de bebé.

Alfonso Lobo Amaya