El significado del trabajo hoy
CONSEJO LATINOAMERICANO DE IGLESIAS • CLAI
INTRODUCCIÓN
pesar de que el primer trabajo del ser humano fue ponerle nombre a las especies de la creación, la sentencia divina que se encuentra en el Génesis que ordena al ser humano “ganar el pan con el sudor de su frente”, ha sido interpretada como una maldición. Ambos episodios se refieren a momentos distintos de la relación entre Dios y el ser humano: antes y después de la caída.
A
Es posible sostener que no todo trabajo es degradante. Al contrario, el trabajo puede llegar a ser un medio de realización como persona humana. El propio Señor Jesús manifestó que el Padre aún hoy trabaja, y que Él también trabajaba, con lo cual deja en claro que el trabajo no es una maldición. Pablo también señala que con su ejemplo ha mostrado que es necesario trabajar duro para ayudar a los necesitados. Es decir, no solo trabajamos para proveer a nuestras necesidades y las de nuestras familias, sino también para ser solidarios y ayudar a los necesitados, cosa que debería producirnos una gran satisfacción. Esta perspectiva dignifica el trabajo, al permitir la realización personal por el trabajo y hacer posible que tengamos lo suficiente como para poder compartir. Pablo también exhorta en el sentido de que el que robaba antes de conocer al Señor, no robe más sino trabaje para compartir con los necesitados. El fruto del trabajo es un salario digno y justo tanto para hombres como mujeres, para que puedan proveer las necesidades del trabajador y su familia, en primer lugar, y, en segundo lugar para compartir con los necesitados. Dios quiere que cada ser humano disfrute del fruto de su trabajo, pero se sabe que en última instancia el trabajo también puede servir para la acumulación. En este caso, la Biblia nos previene que: “Quien ama el dinero, de dinero no se sacia. Quien ama las riquezas nunca tiene suficiente. Donde abundan los bienes, sobra quien se los gaste; y que saca de esto su dueño aparte de contemplarlos” (Eclesiastés 5:10-11). En consecuencia, es importante que el cristiano tenga claro porqué, para qué y para quién trabaja. En el pasaje central que se lee a continuación se pone de relieve también que el dueño del negocio o del capital debe compartir con el trabajador sus beneficios.
Cartilla Generadora
Lectura central: Deuteronomio 15:12-18. “Si tu hermano hebreo, hombre o mujer, se vende a ti y te sirve durante seis años, en el séptimo año lo dejarás libre. Y cuando lo liberes, no lo despidas con las manos vacías. Abastécelo bien con regalos de tu rebaño, de tus cultivos y de tu lagar. Dale según el Señor tu Dios te haya bendecido.... así el Señor tu Dios te bendecirá en todo lo que hagas.” Además, leer:
PREGUNTAS PARA LA REFLEXIÓN PERSONAL Y DISCUSIÓN GRUPAL
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Proverbio 16.26: “El alma del que trabaja, trabaja para sí, porque su boca lo estimula”.
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Isaías 55.2. “¿Por qué gastan dinero en lo que no es pan, y su salario en lo que no satisface?”
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Efesios 4.28. “...sino que trabaje, haciendo con sus manos...”
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Jeremías 31.16. “Reprime tu llanto, las lágrimas de tus ojos, pues tus obras (trabajo) tendrán su recompensa: tus hijos volverán del país enemigo, afirma el Señor”.
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Lucas 13.14. “Seis días hay en que se debe trabajar”.
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Juan 5.17. “Mi padre aún hoy está trabajando, y yo también trabajo”.
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Hechos 20.35. “Con mi ejemplo les he mostrado que es necesario trabajar duro para ayudar a los necesitados”.
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1 Tesalonicenses 4.11. “Procura vivir en paz con todos, a ocuparse de sus propias responsabilidades y a trabajar con sus propias manos. Así les le mandado”.
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2 Timoteo 2.6. “El labrador que trabaja duro tiene derecho a recibir primero parte de la cosecha”.
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Eclesiastés 5:11. “Al rico sus muchas riquezas no lo dejan dormir”.
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Apocalipsis 2.2. “yo conozco tus obras y tu duro trabajo, y tu perseverancia”.
1. ¿Gastamos nuestros salarios en lo que no es pan y en lo que no satisface? 2. ¿Consideramos que nuestro trabajo es una carga o una forma de realización personal y de compartir con el necesitado? 3. ¿Qué quiso decir el Señor cuando señaló: “Mi padre aún hoy está trabajando, y yo también trabajo”? 4. ¿Qué significa para usted disfrutar del fruto de su trabajo? 5. ¿Hasta qué punto se puede decir que el salario justo es algo ordenado por Dios? 6. ¿Cuál debe ser el comportamiento, según la Biblia, del patrón que debe despedir a un trabajador? 7. ¿Se deben entregar subsidios a los cesantes sin pedirles a cambio algún trabajo?
Una Nueva Posibilidad de Vida: ¿Qué significado tiene el Trabajo Hoy?
PROGRAMA FE Y ECONOMÍA SOLIDARIA • FES
TEXTOS BÍBLICOS Y MATERIAL DE REFLEXIÓN
CONSEJO LATINOAMERICANO DE IGLESIAS • CLAI
SUGERENCIAS METODOLÓGICAS PARA EL FACILITADORY CELEBRACIÓN
El objetivo de esta sesión consiste en apoyar la labor del facilitador/a sugiriendo preguntas orientadoras sobre nuestro actuar hoy, y luego proponer alguna actividad o reflexión que lleve a la celebración litúrgica. El facilitador/a pude invitar al grupo a expresar sus opiniones sobre el hecho de que actualmente se desprecia a los trabajadores que han sobrepasado cierta edad, y cuyo límite para conseguir trabajo es cada vez más joven. Además, puede invitar al grupo a reflexionar sobre el significado de gastar nuestros ingresos en “lo que no es pan y lo que no satisface” a la persona. Luego, puede pedir sugerencias al grupo sobre qué tipo de acciones se podrían implementar, por ejemplo, con cesantes, jubilados o personas diferentemente capacitadas que pueden ejercer una labor. Además, puede invitarse al grupo a expresarle a las autoridades su opinión sobre como ayudar a los desempleados, con subsidios condicionados u otros mecanismos eficaces. ¿Qué reacción tienen los trabajadores con años de experiencia que son despedidos y reemplazados por jóvenes con salarios más bajos? (ira, miedo, resentimiento, violencia, temor al futuro, baja autoestima, conflicto familiar) ¿De qué manera se pueden valorizar todas las profesiones y ocupaciones porque cada una contribuye al bienestar social?
Sugerencias para la celebración eucarística a. Lectura bíblica pertinente. b. Cánticos relacionados con la alegría de trabajo. c. Oración porque los desocupados de nuestra comunidad encuentren un empleo digno y porque confiamos en que el Señor suplirá nuestras faltas. d. Alabanza al Señor porque Él está preocupado de nosotros y de toda la creación. (Mateo 6.25-34)
El presente material es una publicación del Programa de Fe, economía y Sociedad, una iniciativa conjunta de iglesias y organizaciones cristianas al servicio de Dios en América Latina y el Caribe. Este material fue publicado gracias al aporte económico del Proyecto Diálogo Global con los Sectores Financieros en América Latina (DGF). Convenio Pan para Todos-CLAI.
Les agradecemos enviar sus aportes, sugerencias e inquietudes a la atención de: Franklin Canelos • Fe, economía y Sociedad CLAI • Casilla 17-08-8522 • Quito-Ecuador (593-2) 2553 996, 2529 933 • e-mail: franklin@claiweb.org Segunda edición, ampliada y corregida
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