FLASHBACK

DISEÑO CON NOMBRE PROPIO

ELOGIO AL FÚTBOL DE CLASE

HA PASADO EL TIEMPO, PERO NADIE HA OLVIDADO EL DRIBLING DE TACÓN DE FERNANDO REDONDO AL MANCHESTER UNITED; EL MEJOR RESUMEN DE SU CLASE.

TEXTO R. BALBONTÍN

~ Fernando Redondo jugó cinco años en el Real Madrid, y entre sus indudables virtudes técnicas hay que destacar cómo manejaba los tiempos con la pelota. Pero no solo tenía un juego primoroso; también peleaba las pelotas, para lo que se valía de un poderoso físico. En sus últimos años futbolísticos, sufrió numerosas lesiones. HAN PASADO MÁS DE 20 AÑOS, pero aquella noche de Champions frente al Manchester United (2000) Fernando Redondo dejó una de esas jugadas que, pasado el tiempo, permanecen en la retina de los aficionados como unos de los ‘monumentos’ al fútbol: a ese fútbol casi imposible que muy pocos han conseguido esbozar, pero que en los pies del jugador nacido en Argentina y que cuenta también con la nacionalidad española era posible. Un tacón en carrera con el que se desembarazó de su defensor le permitió llegar a la línea de fondo y desde ahí mirar para poner la bola en los pies de otro nombre propio del fútbol, Raúl González. Antes de escribir estas líneas, he vuelto a revisar la jugada, y creo que para muchos es uno de los goles que han hecho de la Champions la competición, y también habla de la contribución del Real Madrid a la misma. Y agranda el currículum de Redondo, que en su palmarés ostenta dos ligas de campeones (1998 y 2000), a la que hay que añadir la lograda durante su estancia en Milán (2003). Aunque en el equipo rossonero la contribución del que fuera capitán del Real fue testimonial debido a sus numerosas lesiones. Y es que sin duda fue en la capital donde dejó las mejores muestras de su visión del juego, de su técnica, carácter y elegancia, de esa pierna izquierda que daba rienda a su habilidad para controlar el ritmo de la jugada y con la que deslumbró desde que llegó a España, como lo había hecho en Argentinos Juniors cuando descubrió a un chico que jugaba al fútbol sala. Quizás fue ahí donde formó una parte de su carácter futbolístico, pero sin duda fue sobre la hierba del Bernabéu, donde dejó incluso a Sir Alex Ferguson impactado con aquel taconazo, hasta el punto de exclamar: “¿Qué tiene este hombre en el pie? ¿Un imán?”.