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En Tierra de Ciegos el Tuerto es Rey

Erase que se era, un gran monarca, que _alextender su poderoso reino se encontró por casualidad frente á sus costas una bella isla, donde todos los habitantes eran tuertos ó ciegos, según el informe que le daban los comisionados que había enviado á ella.

El buen rey, deseoso de hacer el bien á aquellos desgraciados isleños, convocó una asamblea de hombres de sapiencia; y unos sabios opinaron que el exceso de la luz solar en la zona que ocupaba la iela ponía tuertos y ciegos á sus habitantes; Otros,muy eruditos, afirmaban que las tor. pescomadronas tenian la culpa de esta desgracia, porno atender bien á los niños cnanveníanal mundo; y otros consejeros, no menos sabihondos que los anteriores, apurando eus minucias investigaciones, achacaban el mal á unas finísimas arenas que habían encontrado suspendidas en el ailre que respiraban aquellos pobres insulares; arenillas, que hiriéndoles en los ojos les ocasionaban varias oftalmías, que terminaban por privarles de la vista.

Y éranse, que se eran, las teorías; no embargante, las más peregrinas: del mundo.

El más anciano de los congregados, un viejo estratega, callaba pensativo; y el bondadoso rey le indicó que deseaba oir su valiosa opinión.

Señor, dijo el Nestor de la asamblea, yo creo y entiendo, que si los habitantes de esa hermosa isla son como afirman tus comisionados, todos tuertos y ciegos, es porque Dios en su sabiduría infinita, lo ha dispuesto así y esa es su divina voluntad!

Todos los presentes serieron disimuladamente del decrépito consejero. Y en definittva se acordó enviar á la desgraciada ínsula jefes expertos, para que dirigiendo bien á los isleños tuertos, éstos anduvieran derecho y fueran munícipes de los ciegos. Y en el entre tanto, el gobierno se cuidaría con una rigurosa sanidad, de que no hubiera más enfermedades de la vista en dicha isla.

Y éranse, que se eran, comisionados y más comisionados con rumbo al esmeraldino peñóu, con muy buenos salarios desde leugo, para que en aquella malaventu- rada tierra pusieran en práctica, lo más filantrópicamente posible, sus métodos redentores.

Los fracasos se sucedían con inusitada frecuencia, á .pesar de las pomposas estadísticas y de la facundia despiegada por los comisionados. El bondadoso rey se desesperaba. Los informes reservados, que se recibían en palacio, comunicaban al comarca, que sus representantes en la invenida isla quedaban ciegos, 6 entortaban, al poco tiempo de vivir en aquel territorio, empezando por ponerse muy miopes hasta perder por completo el órgano de la visión.

Volvió el rey 4 reunir la asamblea de sabios. Volvieron los consejeros á emitir las más extrambóticas opiniones y las más raras teorías científicas.

¡Por supuesto, como superhombres, estaban en posesión, de la úitima palabra de ¡a ciencia moderna y de los más nimios detalles del arte de gobernar!

El viejo Nestor callaba como la vez pasada, hasta que el monarca le obligó á hablar.

Señor, dijo el anciarto consejero, no debemos ir contra la voluntad de Dios. La Inteligencia Suprema, cegando á nuestros comisionados, nos está diciendo lo que debemos hacer.

Dame tu consejo escuetamente, replicóle el monarca.

Pues bien, señor, en tierra de ciegos, el tuerto es rey. Dejemos, por lo tanto, que esos isleños en su bella isla se las manejen tuertamente. Quue si difícil es gobernar la casa propia, imposible hacerlo bien en la ajena. Y cada uno en la suya, y Dios en la de todos!

Y, sin poderlo remediar el rey, los otros consejeros se pusieron en pie furiosos A increpar al sabio Nestor, que los miraba indiferente.

Y.....aquello fué el cuento de nunca

CAYETANO COLL Y TOSTE. (De AMÉRICA, N 1. T. Iv.)

Amigo William, nolo trasquile más. Déjelo pasar asi flaco y encanijado vá,

Sporo

La nariz rectilínea pone una serenidad lasciva en el semblante, de donde emerge. suave como el ante, una fragane-a íntima de cuna,

Bajo la arcada donde fué oportuna la cita con Nerón, tiembla elegante su delicada morbidez de amante y su cabeza en fior, como ninguna.

Cuando abandonamos el pueblo de Añasco' ya en las postrimerías de la pasada dominación, era Agustín Diez, un chiquillo.

Después se fué al Nortc y en la Universidad de Nashiville se hizo Doctor en Medicina, cuyo sacerdocio ejeree actualmente con gran éxito en la ciudad de Utuado.

Es el médico más joven de Puerto Rico y á quien auguramos un brillante porvenir.

La Gran Ley

Nuestros legisladores que sudan el quilo trabajando quince minutos diarios, acaban de votar una ley salvadora.

Se trata de que no pasen por la calle de San Franclsco, trayecto comprendido entre la de Cristo y San José, carros, coches, carre.tas ni automóviles, mientras duren las sesiones de la Cámara.

Después de esta ley, creemos que ya no se necesita el empréstito para la agricultura; ni la refurma de la ley hipotecaria.

¡Es una gran ley! a * *

Salon Plaza

En este Cine, que es el sitio de recreo de la sociedad capitaleña, se están llevando á cabo reformas importantísimas.

Y si ahora es un sitio delicioso, ¿qué no será cuando las reformas se lleven á cabe?

Adelantamos nuestra felicitación á Bazán y 6 Somohano.

No Era Verdad

Resultó que no era verdad la renuncia del querido amigo don José Gomez Brioso. Y más vale así.

La angustia en que su espíritu se pierde nubla la luz de su pupila verde, plácida como el alga florecida.

Súbito Sporo ríe. Nerón llega _y la sonrisa del esclavo anega toda la gran tristeza de la Vida.

EMILIAANO HERNÁNDEZ,

Ahora me explico la incertidumbre de Dalmau, la desconfianza de Goico, y la vaelleción de Santiago, cuando van detrás de alguna nocicia.

Con estas renuncias irrevocables en que á la postre no renuncia nadie, mete la pata hasta el lucero del aiba.

Los Ojos De La Amada

No, . Buscaré dos ojos que he visto. fuente pura hoy á mi labio exhausta. y aguardaré paciente hasta que suelta en hilos de mística dulzura reresque las entrañas del lírico doliente.

Guillermo Valencia

Las pupilas verdes claras eon poemas castos como las vírgenes. Eesas esmeraldas pálidas que tremolan como atormentadas en el fondo de algunos ojos, son adorables, * Yo he visto algunas de esas esmeraldas divinas, enfermas de melancolía, llenas de amor y de dolor, háñmedas, como si una lágrima inagotable estuviera filtrando lentamente. Yo adoro esas pupilas. En el misterio de esos ojos he soñado un cielo plácido. Esas pupilas pálidas, huérfanas de color, me han tornado 4 mis veinte años de ensueños y romance.

En las tardes de este lago encantado ha y sobre el dorso de las aguas un matiz infinito de calores y en el crepúsculo, sobre el cielo, todos los colores violentos y desvaídos. kEstaesla ciudad de los ojos bellos. y es queel cielo y el lago han teñido esos ojos que miran incansablemente, como á un ídolo arcano, su cielo multicolor y su lago divino.

Para San Juan

Santiago Vivaldi, un buen amigo de esta casa, va á ser vecino de la capital, con motivo de haber sido nombrado, dactilógrafo y estenógrafo de la Cámara. No ha podido ser más acertado el nombramiento, Vivaldí, Pacheco. nuestro adversario, es un puertorrigneño de grandes méritos.

No Es Extra O

Como se explica Ud. señor. Barreiro, me preguntó un amigo bilíngue, que en la parte inglesa del Porto Rico -Progress , tenga el Gobernador Colton 46 años y en la parte española resulta con 26?

Siempre en la traducción se pierde al_Ee le contestamos.

Desde la terraza de mi hotel miro en las tardes el lago, el crepúsculo, y dos pupilas que son dos radiosas esmeraldas. Como aquel Señor de Phocas,estoy obsesionado por esas dos hechiceras esmeraldas, y quisiera, en mi locura de amor, esconderlas para mí solo donde ni las besara el viento ni las anhelara la codicia de los hombres. Son las mismas esmeraldas que he visto enfermas de melancolía, llenas de amor y de cansancio, húmedas como si una lágria inagotable estuviera filtrando lentamente.

El palsaje está borroso. Miro al horizonte u distingo, por sobre las palmeras un vuelo de pájaros marinos. Dos perfiles y de una torre lejana se pierden eDp la sombra. Las velas de los barcos fingen castas ilusiones. Ya, en la densa obscuridadad no distingo las dolorosas esmeraldas y me pongo á pensar que los ojos de la amada son joyeles de amor atormentados por alguna remota esperanza.

JULIO CONSALYI.

Y además hay que tener en cuenta la diferencia de meridiano.

Laboratorio

Histo-Químico Microbiológico

DEL Lcpo. RAFAEL DEL VALLE SÁRRAGA Químico-Farmacéutico y bachiller en ciencias de la Universidad de Michigan.

Teléfono 406. Apartado, 935.

Oficina: Allen 83.

Análisis de orina, sangre, heces fecales, jugo gástrico, esputos, neoplasias, flujos, cálculos. Exámenes de aguas, alimentos, bebidas, materías sacarinas, minerales, terrenos, abonos. 'Toda clase de reconocimientos ó trabajos de cualquier naturaleza que requieran el auxilio del laboratorio, Pídanse informes.

¡Estío ha muerto! Las primeras ráfagas del fresco viento otoñal han arrojado brutalmente, lejos de nosotros, á las tibias brisas estivales...... El soplp huracanado hace gemir á los indefensos árboles, cuyas hojas caen muertas, secas tristes, arrastrándose por el suelo entre chirridos de dolor, entre espasmos agónicos..... ¡Natura sufre! -El iuvierno sucio y gláceo ha caido en esta tierra aportando entre sus alas la grisácea neblina, anunciando bruscamente viento y frío, lluvia y nieve...... Los TÓseos rayos del sol luciente hanse extinguidolas glaucas aguas del anchuroso lago corren impetuosas, en desordenado tumulto, á abrigarse en el seno del Océano, temiendo ser víctimas del implacable hielo que las imposibilita, que las impresiona durante algunos meses...... Todo cae, todo huye, todo muere rias, los cuales coufundiéndose entre la su ciedad, maculados por los negros resíduos que el fuego dejó en los confortables elorífeos, trabajan como bestias limpiando aquellos mónstruos de hierro. lLos rentististas, los millonarios, los que no tienen más trabajo en el mundo que gastar en locas orgías el oro que sus antecesores amasaron á costa de lágrimas y sangre del ejército del trabajo, van desertando la villa en busca de otros climas más benéficos, más templados...... ¡Es la desbandada! trado hacia el abismo de la nada todas las energías juveniles, las sonrisas incentinas, los vigores de lo: Humano...... Ya no se oye, como antes, el gorjeo de los pájaros, ya los árboles se muestran abatidos, impotentes, denudados,. desprovistos de su hojarasca de un verde indeciso: es la tristeza, tristeza muda, fría, amarga..... El plebevo se apresta á la resistencia al frío, haciendo sus modestas provisiones decarbón y leña. Los privilegiados burgueses, ladrones legales, euyos intereses le retienen en esté país, reclutan una brigada de pobres pá-

VARIOS....

Varios, es v:rdad, deben perecer allá donde abren el surco de su estela los pesados remos de los navíos. Otros, los que viven junto al timón, conocen el vuelo de los pájaros y la región de las estrellas.

Otros yacen siempre, llenos de una gran pesadez de los miembros, cerea da las raíces de la vida confusa. Otros se asientan en sillones que existen en casa de las sibilas, 6 de las reinas, se asientan en tales sillones, como si se éncontraran en sus propias casas, con la cabeza despejada y las manos más ágiles..

¡Ah, pobre pária que aquí quedas, sin recursos, sin alientos, después de un verano de rudo trabaju! Tú no puedes, como aqueilos ir en busca del Sol puro; tfú no puedes trasladarte á las hermosae tierras cálidas...... Aquí quedas, pobre esclavo, á ] 1 caza de unos días de ruda labor, cuundo el Sol se muestra...... ¡y eso esraro! lLos ftríos y las nevadas matarán tus energías, borrarán tus esperanzas de un reposo asaz ganado, y tu hogar será invadido por las inclementes ráfagas del crudo invierno.

¡Pobre pária:

¡Estío ha muerto: Los roséeos rayos del Sol luciente hánse extinguido...... El invierno sucio y giáceo ha caido en esta tierra destruyendo las bellezas estivales.... Todo cae, todo huye, todo muere......

JosE ESTIVALIS.

Empero, una somibra cae de esta vida má allá de las otras vidas: y las vidas ligeras están unidas á las vidas pesadas, como lo está el aire al universo.

Las lasitudes de los pueblos totalmente olvidados, no puedo apartarlas de mi vista ni alejar de mi espíritu espantado la silenciosa caida de las estrellas lejanas.

Muchos destinos se agitan cerca del mío: la existencia los roza á todos confusamente, y mi parte es algo más que la esbelta llama, ó la lira elegante de esta vida.

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