RAN
F
El
proyecto
de
superpuerto
y
ha
producido
ya
dos
consecuencias de significación: 1) la confesión de Moscoso y Cía. de que el patrón de crecimiento económico que se ha
venido
desde 1950)
promoviendo
en Puerto
Rico
1944 (con mayor furor desde es un fracaso; y 2) la profunda
preocupación
en
las
filas
de
los
luchadores de la independencia. En cuanto al primer punto, baste decir que sencillamente confirma la posición que, en términos generales, sostuvieron los líderes independentistas
frente
a
la política
gubernamental
de
Y si se me admite la nota puede hallarse abundante y
Fomento. personal,
detallada crítica a esa “industrialización colonial”
Aquí
en mis artículos de Cosas de
publicados
desde Imparcial mediados de 1969.
Pero
no
diariamente fines
de
en
El a
1959
es cosa de alebyrarse por
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refinerías adyacentes, promovido, sin duda, por grandes intereses petroleros internacionales,
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pueblo por
de el
sus derrotas camino de
y la
victoria.
En eso es que el independentismo en los de uno cada y general, independentistas en particular, no
hemos
demostrado
la
habilidad
indispensable. Claro que el problema no ha sido mera cáscara de coco, y lejos de
tardía confesión, pues en fin de cuentas, el perdidoso es el pueblo y, por ende, y sus imperialismo El nosotros.
simplificarse, se complica cada día más. Vaya eso último por delante, que si lo
lugartenientes, como Moscoso, han sido los gananciosos hasta ahora. Por eso la que se nos fundamental cuestión
con el solo hecho de asumir una actitud crítica.
plantea, hoy como
ayer, es cómo
ayudar
reconociéramos
El que pública
no
así,
ahora quiere
algo
se haga decir
ganarfamos
la confesión que
es ahora avance 59