EL
CARNAVAL| REVISTA DEDICADA DIRECTOR
Y
0O. Subscripción :
OFICINAS:
Allen
St.
41
Se publica todos
Lóuis E. Tuzo £ Company, Publishers.
19, 199,
at San
Juan,
P.
R. as second-class
SAN JUAN, PUERTO
RICO,
matter,
JUNIO
under
28,
los Domingos. Act. of Congress
1903.
of March
3, 1879.
NUM.
55.
ec 0
RAPIDAS ma
December
UN MES 25 Ctvs.
o
3.
ADMOR:
JOAQUIN E. BARREIRO.
efe
AÑO
LITERATURA Y ARTES AL/BELLO ¿SEM
nl
EDUCAD A LA MUJER Y HAREIS PUEBLOS LIBRES
Entered
DE
María
En
La
ella
virtud;
Consuelo
se
la
Y así resulta Diosa
y mujer
Vazquez
unieron
belleza
y el talento
Consulo 4
un
mismo
tiempo.
EL
450
CARNAVAL nista es un buen libro y ya esfe es un méjfito grande donde se publican tantes libros malos.
rónica
Y ahora no me pregunten ustedes que es mejor si el prólogo ó el libro, por que me pondrían en el gran aprieto. Un prólogo de Muñoz Rivera no puede ser malo, un librode Mariano. Abril tiene que ser bueno, y
<< O
pasa dia sin que un nuevo libro lHegue ás nuúestra mesa de redacción. Sobre el pupitre tenemos Sensaciones de tn croráista, que estimamos como una obra de gran mérito literario, capaz por si sola de dar nombre á un escritor. Ya
Mariano:
Abril
lo
tenía,
no
solamente
en
efectivamente
el uno
Madrid,
donde con más
hidalguía,
se hace
justicia
Lo
dice
Muñoz
Rivera
en el brillante
prólogo
“El
Liberal,
EbHeraldo
y
ALLÁBAME pueblo X, en
publicaron
pachaba el correo de Europa.
su
de la misma,
colaboración intermitente. E lricieron algo mejor: la pagaron. Cobraren Madrid un artículoes un triunfo.
Y Mariano Abril triunfó en
Madrid, como
triunfado antes y triunfó después
como triunfará
donde
quiera
en
Puerto
que
Aquí,
y
escriba, por que
lleva talento cultivadoen él cerebro, sentimientos elevados en el corazón y exquisitas sensibilidades -.en el alma. Poeta, no acostumbrado á los desengaños de la vida, llora como un niño ante cualquier adversidad: Patriota,
no conforme
con
la suerte
desventurada
«de
su tierra, se revuelve airado contra la tiranía sin consultar el poder de su brazo ni medir la fuerza de los déspotas. Artista, va constantemente detrás de la for-
ma sin detenerse á alrondar ciertos problemas que reclaman ntás atención de la que le dedica. Soñador,
se pierde
entre
las flores de
la bella
Andalucía
y
periodistade combate, teniendo que Alenar las exigencias de un periódico diario, aborda los problemas todos,
tratándolos
con
gran
disereeción
que
séamos partidadios
una mujer, en cuyo
periódicos,
semblante
puertas
libros, ete.
se fotogra-
lejos, muy lejos, á nutrirse éon el pan de azucena de la instrucción. Alá, un mancebo, que vertiginosamente pasaba la vistagpor los signos trazados sobre la tersura del
límpidogpapel, dejando vagar á intervalos por sus labios, el Felampagueo de una sonrisa placentera. El ¿+porter, busca, solicita, inquiere las noticias
que divalgan por todas partes éstas
del teátro de Echa-
hojas
volantes,
mensajeras del pensamiento, para sacar partido de éllas, y dejarlas que sigan su eurso luego, como un ave á quien las alas no se le deben cortar. El comerciante ,rasga precipitadamente el sobre que depositan .en sus manos, ansioso de saber que precio tienen distintos, produetos en los mercados del viejo mundo, ó si ha, habido alza Ó baja de giros,
y talento.
No vamos á hacer en esta crónica, escrita al correr de la pluma, un juicio crítico de la obra del sefor Abril—máxime, cuandoen algunas apreciaciones que hace no estamos del todo de acuerdo.
Sin
impaciente á las
solicitando cartas,
fiaba el deseo de saber de su hijo ausente, pedacito que le arrebataron de su corazón para enviarlo allá
había Rico,
Calderón.
una tarde en la oficina postal del momentos en que $e recibía y des-
El público se agolpaba
Globo,
otro.
y Siempreviva José Reyes
Abril.
El
del
A mi distinguido compañero y amigo
al talento. que dedica á la obra de Mariano
digno
JOAQUIN E. BARREIRO.
Pensamiento
la
isla, donde unas veces la envidia y otras la ruindad de alma suelen negar méritos á quien los tiene adquiridos á fuerza de estudio y lucha constante, sino en
resulta
ete.,
ete.
Todos, en fin, acudieron á aquella féria del momento. Yo también fuí en pos de algo que esperaba ansioso; yo también con esa avidez perdonable en tales casos, á los. que sabemos querer y rendimos
eulto al amor, también solicitaba anstoso la esperada epístola de mi madrecita querida y de la mujer á
garay, que como dice muy bien el Director de La Democracia, se aparta de la realidad presentándonos carácteres anacrónicos é inrerosintiles, dicho sea sin
quien adoro. Fueron depositados en mí dos
ánimo de mortificar á mi ilustrado amigo y querido compañero don José Contreras Ramos; creemos que
de mi ser, dándome vida de-st vida; el segundo, de otra puertorriqueña. tan celosa como: dulce, tan dulce.como enamamorada, que me hace el favorde que-
merece
ser tratado
loco Dios. Nosotros
con
E sentimos
más
respeto
predilección
el
autor
de
: por Guimerá,
El
ro, de la buena
rerme
y
con
mujer
idólatría;
un retrato,
que
bajo
pliegos; el prime-
contribuyó
la primera
bajo la segunda,
un
al desarrollo
cubierta,
manojito
venía
de cabellos
de Guimerá por Tierra Baja, sin-considerarlo por esto
negros,
superior á Echagaray, puesto que pertenecen á escuelas distintas y cada escuela tiene, como sabe muy bien el señor Abríl, adtiniradores é impugnadores ca-
de buitre desgarran ahora mi corazón. | La dedicatoria de aquella efigie, decía: “No he olvides, hijo mio.” El otro encargo :.“ Remember.” A la primera le contesté, acompañandole ún hermosó pensamiento natural, escribiéndola así: “Te guardaré eternamente en el mio.” Para la otra, fué dirigida una siempreriva, y la dije .en una tarjeta que iba adjunta: “Así estarás len
si siempre apasionados. Que la es escuela realista se impondrá tro como se va imponiendo
ble, como es indudable realismo
«caerá en
que,
en
en el tea-
la novela, es induda-
andando
exageraciones
tan
el
tiempo, el
grandes
como
las. del romanticismo decadente. Aparte de estas apreciaciones que nada significan, forzoso es confesar que Sensaciones de un ero-
tan
negros
mi corazón ! ””
como
las
penas
que
con
garras
EL
453
CARNAVAL A
La
mujer
del
poeta. 1S
A la distinguida señora Sara Lopez de Riera Palmer. Ya no mspira
Fulgura
la Musa,
que alli donde
el Arte, al corazón
los sentidos enciende.
alegra,
al plecto
aviva,
E
n-
E . E
la mujer del poeta,
Y
Ñ
., . la inspiración? ¡Eta la atrae! . la fantasia? ¡Pues va á ELLA! .
Y con puros
.
halagos
las dernelre,
O
la
A
¿Falta ¿Huye -
=
:
áa p
A
.
ra ta
“el liz
> trejue y
a
>
la mujer del poeta. 5
¿Fiero ruje el dolor? ¿Y exo qué importa? , 1! . Enamorada siempre y sempre bella comiósenlos de fuego el pesar mata la mujer del poeta, q Y en el tranquilo hogar, ú las caricias, más
que la Musa
inspiradora,
de ELLA,
madrigales de hor
baten las alas y aparece el poema,
El día en que no encuentre los halagos el vate, de su noble compañera, aún
cantará
al amor,
cual ave triste,
porque, de lejos, ELLA enamorada
siempre,
una
elegía,
arrancará del arpa á las sonoras
cuerdas.
CRISTÓBAL REAL,
| '
E
E 4
SASPAR FE
ESPAÑA:
NUÑEZ
DE
ARCE
como si nó fuera bastante desgracia haber perdido de la noche á la mañana su vasto
¿perio colonial, la muerte le arrebata sus más preclaros hijos.
Por Zotrilla, Castelar y los genios españoles! ¿obre España....! |
cuando
Mañana...
Hoy Nuñez:de Arce.
Campoamor.
¡quién sabe cual caerá ma"
empiezan á soplar vientos de regenerac ión, cuando parece que el despertar de aquel pueblo generoso y grande se aproxima, van desapareciendo de la escena de lá vida, los actores que que más lustre y fama la dieron. futuNo sentimos la muerte del poeta que lega á las MEA
ras la rica herencia de su inspiración fecunda. El poeta gana con
la muerte.
Quién sepa como vivía de quince años acá el autor de El Vertigo, no estrañará esta atrevida “afirmación nuestra. Para Nuñez de Arce la vida carecía de atractivos. Encerrado. en el reducido gabinete de
de estudio,
á solas
con
habrá el inspirado poeta ción á tan triste vivir.
sus
acariciado
dolores
físicos;
más
de
una
la idea de la muerte, como
vez
solu-
Que era violento su estado de ánimo se advierte en muchas de sus En algunas tiene apóstrofes que parecen destilar vecomposiciones.
neno, á pesar de estar rodeadas de las más bellas formas poéticas. En otras parece olvidarse de sús dolores y se vé más humano. Pero de cualquier modo, violento ó suave, ya arroje á la faz del pue-
blo español vicios y concupiscencias, ya cante al amor, mundo,” ni una sola incorrección se nota en sus estrofas. No hay en todos sus versos una licencia poética, como
“alma alel
si de este
modo quisiera censurar el uso, y aún el abuso, que de ellas hicieron , los poetas españoles, desde, Espronceda á Zorrilla. Le ¿nuerte de Nuñez de Arce, es una desgracia, no solamente para España sino también para todos teblos de orígen latino donde la hermosa lengua castellana se escribe. Así se,explica que la América se conmueva al recibir la triste noticia de la muerte del poeta. y
/”
A VOLTAIRE
/
“
/
Eres
ariete formidable:
//
nada
resiste á tu satánica ironía. Al través del sepulcro todavía resuena tu estridente carcajada.
]
AMOR
A
e j F
Oh eterno amor,
que en tu carrera,
das á los seres vida y movimiento, con que entusiasta admiración te siento, aunque invisible, palpitar doquiera!
Cayó bajo tu satirá acerada cuanto la humana estupidez creía, y hoy la razón no más sirve de guía á. la prole de Adán regenerada.
Esclava tuya la creación entera, se extremece y anima con tu aliento y es tu grandeza tal, que el pensamiento te proclamara Dios, si Dios no hubiera.
Ya solo influye en su inmortal destino
Los impalpables átomos combinas
la libre religión de las ideas;
con tu soplo
ya la fé miserable á tierra vino; ya el Cristo se desploma; ya las teas
A
magnético
y fecundo,
tú creas, tú transformas, tú iluminas, y en el cielo infinito, en el profundo
alumbran los misterios del camino; ya venciste, Voltaire. ¡Maldito seas!
mar, en la tierra atónita dominas, ¡amor, eterno amor, alma del mundo!"
ES
¡CARTAGENA! Ay! cuando un pueblo rompe la valla y con instinto ciego y brutal
da |
l
incendia y tala, mata
He
Ñ.
y blasfema
y en sangre anega su libertad,
|
la turbulencia que engendra crea el tirano providencial;
IV
monstruos
:
que también tiene .como las fieras, sus domadores la humanidad.
GASPAR NUÑEZ
DE
ARCE. .
>
riceda
L
EL
CARNAVAL
Rosendo Rivera Colón.
nes intelectuales, algo asi como libramientos de gi >ria girados sobre su edad madura. á ES Si se hubiera dedicado á otra profesión cualqu
OBRE
Intenso dolor me produjo
la
noticia
de su muerte,
por-
que en los | tiempos que corremos, la pérdida de 'un verdadero amigo es una
desgracia
irre-
parable.
pude dar ese
nombres
sih
califi-
temor
á
¡Empezó
en
una
la mentira
por no dar
im-
erguida, armato
Corazón generoso, amigo leal, patriota sincero, sin ambiciones y sin odios, su pluma y su inteligencia estuvo siempre al servicio de la libertad de su
desde
que empezó
el espacio, vivirán en nuestro ambie: po
humo
que van
proclamando la
Rivera Colón
murió joven,
magistrales; porque
es decir,
sufrió p co.
Fué una pérdida para nuestra causa federal, é , la que era constante paladín, pero fué una dicha ] ara aquel espíritu fatigado ya por tantos infortunios.
nos
que
excamar
ante
sa
su
tumba:
¡felices los que
mueren jóvenes! MARIANO ABRIL.
UNA POSTAL. A Domitila Rodriguez —Añasco.
a
(Ostenta el águila y la bande' a
americana,
en
unángulo,
¡Qué bonita es tu postal,
-su la-
no
A
- cruzando el piélago azul,
e
y un barco de la conquista
sidad
Aguila, bandera y barco llegaron á nuestra islilla, , como nuncios de esperanzas
para la que
te-
nía grandes condiciones, por el periodismo político, como hemos hecho unos cuantos que empezamos ha-
y Sún estamos, Domitila,
ciendo versos y cuentos y terminamos escribiendo ar-
tículos terribles contra este ó aquel partido y contra tal 6 cual funcionarió público. Por eso pasará pronto al olvido; por eso su nombre solo quedará grabado én el corazón! de los que le amábamos,
de los que velanos en sus
A
esperando nuevos barcos, que vengan de la otra orilla luciendo, airosa,. en la proa . -.
El a: l5
nuestra bandera bendita. M. GUZMAN
|
ES
donde quieres que mi nombre bajo unos versos escriba.
despechados y coléri-
la literatura
h
Po AS
trae la blanca cartulina
Desdeñó
ta
dulce y buena Domitila! Un ágila, una bandera
Pero se internó demasiado en la oscura selva de lás luchas políticas, siempre tam apasionadas y -violentas en nuestro país, y el resentimiento, la animo-
y el insulto se irguieron
y
el centro, el erucero america) D* “Brooklyn,” eruzando, ne tuosamente el mar.)
arrojaba luz sobre su nombre.
cos contra él.
Por
eso, al pensar en el amarguísimo acibar que el € áliz de la vida pública guarda para todos, no puedo: ne-
temporaneos. Muchos de sus artículos eran atribuídos á otros escritores, porque el vulgo no le creía caartículos
civilización y el + ro-
greso.
Rivera Colón murió con la. inmensa tristeza de no haber sido siquiera adivinado en la serena laboriosidad de su vida, por la mayor parte de sus con-
escribir
Porque la d
sin dejar trás de sí un nombre, pero esparciendo 3ntre lós atónitos campesinos, sus espesas columna; de
á escribir en La República
bor, inédita siempre, como la de todo periodista,
¡rá
del periodista, por lo mismo que es una obra im] le sonal, se abre paso en las conciencias como la. l pomotora se abre paso por entre enmarafíadas sel' As,
con el poeta José de Diego, hasta que terminó su vida trazando sus últimas cuartillas para La Democracia, que tuvo la triste suerte de recoger sus últimos pensamientos y los últimos destellos de aquella luz poderosa que se apagaba por minutos.
paz de
Colón desaparec
encarnarán en la conciencia popular.
é renitente
rina, eterno sospiro mio.
de Rivera
¿
feliz
flotarán en
3 el nombre
y
ser
Pronto
Eee
tan hermoso que
al fato. Su breve vida se deslizó sin dulzuras y sin amores, y solo tuvo una pasión, el estudio, al que pudo llamar, como el poeta italiano llamaba á su Ne-
país,
las somU 'as
7
la frente
¿os
Bal lo-
«
con
hundiendo en
de
de la memoria de todos; quizás dentro de un 1 les nadie se acuerde del pobre bohemio; pero sus id tas
portancia á su talento, que era superior, ni á su obra literaria, que era eficaz; y concluyó por morir como Leopardi,
de Monge,
rr
convencional.
ni de
rd
verdad
Manuel Corchado,
rioty y de Acosta, se ván
Córdova
¡Qué más; si hasta
amarga viniese á llevar la duda á mi
hecho de
que ha
de
Arturo
NA
una
la actual,
de
del olvido!
sin los cuales no sé puede
como
Braschi,
Salvador Brau Zuzuárregui?
h1 5 'oy le-
equivocarme, sin que una decepción
se llama “amistad.” Fué un desgraciado que convencido de la infinita vanidad de todo, despreció esos convencionalismos sociales
mo?' ¿Qu stigios proporciona? ¿Qué lauros e: quista2/¿A qué posiciones conduce? El olvido y indifefencia son gus misérrimos atributos. ¿Qu: se acuerda ya en Puerto Rico de Félix Padial, de sé Ramón Freire, de Pablo Rodriguez, de Andrés rreris, de Mario
espíritu respecto'á ese sentimiento
época
detuvo su carrera, en lo mejor de la vida, en ple 1a juventud. ¿Que horizontes ofrece aquí el perioc s-
Y Rosendo era de los pocos á quienes cativo,
*-
ra otro hubiese sido su destino. Pero se dedicó al periodismo, y la desilución mató en él todas las a 1biciones, y se entregó á una bohemia suicida, c 1e
amigo!
ona
in
A
RODRIGUEZ
q
manifestacio-
le
pol i
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¿
atra
:
á
154
14
454
EL
ST
CARNAVAL
POSTALES
A la Señora TERESITA MANGUAL DE CESTERO. PRIMERA Con
acento
Tu correcta
arrobador.
Cerca de mi pecho amante, En tu lira de cantor, ntona el himno
honrará
triunfante
San
Y se anidan mis rimas amorosas, En el cáliz fragante de las rosas Y en el ánfora suave de los lirios. Surge fresca y lozana, dormía.
los amores,
Y el beso azul de la inmortal poesía. Si en todas tus postales, Mis sueños ideales Yo vertiera cual mágico rocío... Te ofrendara en mi lira de poeta, La más hermosa inspiración secreta Que es el encanto de tu amor y el mío!!
Poeta de corazón: Mándame tu inspiración. T. M. de (-. Buena, bonita y graciosa, De un poeta de valía A un tiempo Musa y esposa...
¡ De qué te valdrá mi prosa Si eres tú ia poesía! Manuel
Tu firma en mi colección. Teresita
Mangual
-
T.
A vos, Gobernador de Puerto Rico.
La firma vuestra en mi postal suplico. TM.
de
€.
William H. Hunt, de Puerto Rico.—San
Juan
T. M. de €. ta
Te
Te conoeí de niña, celebrada por bonié incomparable en. gracias infantiles,
ví
después. en
tu primo,
Puerto
un
Rico.
San Juan, casada
poeta
¿Te
de
gran
ron ustedes tan cariñosos que
daré aquel rato tan agradable. No necesito de
eon
prestigio
acuerdas?
en
esiun honor
Francisco Mariano
para
mí.
Quiñones.
San Germán. * Conque solo me dés una plumada, Yo considero mi postal honrada.
Ya que habeis
ue.un
T. M. de (.. realizado la sublime as-
nuestra
Doctor
A.
ELnLa— ]
San Juan.
Julián
tal ventura! Coll y
Toste.
¿Honrarás esta tarjeta
Con tu firma de poeta?
Como no juzgo cordura Manchar tan bella pintura, Me acojo al estrecho envés, Firmo... y besoá Vd. los piés. S. Bras. San Juan.
Tu rima sentimental; ¿Qué
Tu
le deja á mi postal? T. M. de (”,
esclarecido talento,
Y tu exquisita cultura,
Realzan aún más tu figura
(Jue es de belleza portento: Deja que mi pobre acento Vibrante hasta tí se eleve.
El mi saludo te lleve, Sacerdotiza del arte, es solo para admirarte
an alto á subir se atreve. Dr. Jaime Sancho Cardona. Mayagúez. Solicito una plumada
Del autor de la “Palmada.* T. M. de (.
" ¿Quién busea en jardín ajeno Flores que en el suyo tiene?
Si hay en tu hogar un poeta Y su gentil Musa
eres,
Dile que cante la dicha
Que en vuestro jardín
Blanco y Sosa.
,
proteja
Yo.—
Sthal.
en te aplaude y quien te estima, Pide tu inefable rima. T. M. de € ¿ Rimas me pedis, señora ? No quiero entristeceros: La musa de los viejos siempre llora, Y la que jóven me inspirara agora Solo me trae recuerdos lastimeros De am adquiridos desengaños En ruda facha de setenta años
en tus jardines
Santurce.
querida
Bayamón.
tormentosas,
ruiseñor anida
Dr.
dio ambiente de todos los nobles ideales que elevan al hombre á las más altas re+ iones della Divinidad, acaso seriais capaz de trasmitir esos ideales á ese pueblo depatria y hacerlo digno y feliz ?
nubes
¡La fortuna
piración de la humanidad pensadora, de saturar vuestro venturoso hogar en el mée-
generado que constituye
def.
Y que es tu hogar un búcaro de rosas.... Y todo es el imán de tu hermosura. ...
olvi- :
instancias para conce-
derte. mi autógrafo;
No hay
tuvie-
nunca
M.
Una estrofa, un pensamiento, De tu preclaro talento. ; T.:M. deL. Yo sé que eres feliz, que en tus confines
Tu autógrafo obtener es un honor: Concedée á quien te almira ese favor.
San
Juan.-
llegue,
un trovador
de vuestra postal.
; i
En la mía no se muestra! La musa gallarda y diestra, ¿Concedereis á la mía $ Tan profunda simpatía : Como
New
yo guardo á la vuestra?
Luis Muñoz Rivera.
York.
j
Para mí... ¡qué hermosa rima Siendo tu Musa mí prima. -:
T. M. de,(.
¿ Qué pides, si ya tienes los más preciados bienes ?
¡La flor que es tu delicia.
el niño, que te encanta. la luz que te acaricia,, el bardo, que te canta! José de Diego. Mayaguez. *
¿Del bardo de Manatí,
Una
rima
para
mí.
T. M. de (.. Para gloria de.tu hogar. Dios puso en éLuna lira;
Lleva tu esposo, que la patria admira, La lira de laureles coronada. ¡Cómono ha de ganar lauros su lira, Si en tu belleza celestial se inspira, Y se inspira en la luz de tu mirada! Manuel M2 Sama. San Juan.
A
hasta mi
,
Fernandez Juncos.
Un acorde para mí Dícelo á Carmen así.
de Cestero.
Jaime H. Blenk. Obispo de Puerto Rieco.—SanHnuan.
Gobernador
J. Amy.
Ella hermosa y gentil como Citeres: El al afecto y al honor sumiso: En torno, bellos infantiles seres, ¡ Ese hogar debe ser un paraiso! Dr. Rafael del Valle. San Juan. !
Ferdinand ue caigatu bendición Sobre mi pálida frente: Arrodillo el corazón, Y te pido reverente
Detrás
T. M. de €.
resplandores,
Y el destello de todos
Diee....que hay
del 4mor.
Francisco.
Juan.
musa
Y en mi blanca postal sus alas plegue. T.M. de (. Breve, preciso, cabal, Ese dístico genial Hecho del arte al ealor. _:
_De tan ilustre poeta, Una rima en mi tarjeta.
temprana,
Para darle á tu frente
Que tu divina
T. M. de (.
Tierna Musa
El sueño virginal de mis delirios,
Del arcano de luz donde
erudición,
mi coleceión.
_Es, contigo, de envidiar El laureado trovador A quien sentido cantar, Inspira:en su propio hogar
elidilio de mi amor. Teresita Por tí bebe mi pluma, La esencia que perfuma
'Puinspiración
SERIE.
Y es tu virtud la que inspira Su melodioso cantar.
Si el consuelo del pesar (Jue aflige los corazones Consagras todos tus dones.
Nacen flores de tus huellas; De tus miradas, estrellas; De tus sonrisas, canciones! A «'lemente Ramírez Manatí. Pido para mi postal, inspiración ideal. T. M. de € Como el díptero.en la tela De araña, encontraste un dia.
Tu
Prisión de reina entre el mástil Y las'cuerdas de una cítara.
Allí tan á gusto vives, Que es tu cárcel tu delicia, Y la libertad te asusta Como la desgracia misma: Por que son para tu oido, Celestiales melodías
Las que en el lírico encierro Suenan
Ponce.
para la cautiva.... J. A. Negrón Sanjurjo.
Del * Plata ” al dulce murmullo Mezcla tu lírico arrullo.
a T. M. de C. Cuando miras rumorosas Correr las aguás del “Plata” «No parece que. te dicen:
.. Bajamos de la montaña,
“y cuando al pasar, besamos “sentimos tu dulce
|
'
Jas tierras de esta comarca, encanto
oh gentilísima hada que inspiras las dulces rimas
el'cantor de nuestra patria ! _— Emilio del Toro. San Juan.
" Yo quiero la vibración, De tu rítmica canción, T.
M.
de
€.
En la tórre del poeta E señor feudal es él u la castellana fiel Á su dominio sujetá : Y en la torre del amor
Eres tu la castellana florece.
Dr. M. Zeno Gandía. salt ca
pe
subyuga soberana
1 rendido trovador Dr.M. Martí Há Arecibo MM. Martínez Roselló.
En esta tarjetá mía...
Tu espejeante
Para ofrendarte mi fantasía rosas de oro,
trinos divinos
Joyas del arte,
no me dan trinos,
rico tesoro de porrecia: brillantes perlas raras y hermosas,
de ruiseñores ni de turpiales, no me dan perlas para
para en las rosas
de oro verterlas.
cum bre ilusoria y encontró hielos divinizados,
|
_Que
, . Caguas.
Felir Muñoz
Una En
no puedo alrora
con los pistilos de mil colores;
José
Muñoz
A. Que en mi
En
Hallarás esa baluda
San
Juan.
Como
M.
de
Cante tu harmoniosa
Temblorosa hasta tí En tu hogar venturoso Y en la armoniosa lira De aromas suaves y de Solo pudiera asi rociar
de
(.
mi musa llega, abre las alas de tu esposo luz se empapa. perfumes
Sobre tu hermosa frente nacarada
Traza un
Trémula
Y para embellecer todo el Planeta :
Muy bien puede decir al verla dama Que la postal ostenta :
“En el brillante cielo de las artes más
i Arecibo.
mi estrella,**
E,
Márquez Huerta.
Victor
Candamo.
A
Misteriosa deidad. génio del cielo! Ante tus gracias se postró el poeta
Y te ofrendó su incienso,
sus rimas delicadas,
Y te rindió su afecto.
¿A qué pedir vulgares armonías,
A qué pobres acentos?.... Confórmate con ser Musa de un bardo, inspiración, su verbo.... ¡Tu debes ser uno mujer extraña, Misteriosa deidad, génio del cielo! Pedro R. de Diego. San Juan.
T.
Z
>
¡|
- Me
M.
de
pides algo idcal
Pues... Teresita Mangual,
ue unida con Cestero, orma, como tu yez, un verdadero Poema espiritual. 2 | Manuel Astol.
Una
rima
T. M, soñadora.
de
€.
Un trozo del cielo azul, Un arrullo de palomas, Eso eres tú. Ponce. Félix Matos Bernier. 3
:
1
]
Por pistilos, el poeta 13A Da vida á una flor, señora, + / Y á vuestros piés, reverent : /
%
F
eno
Cariñoso la deshoja | y Para rendiros tributo 13 Como madre, como esposa. Y Musa tierna que inspira! * Al cantor dulces estrofas. 13 José Limón io
Arecibo.
de
=rce. 1]
¿Yo sé que de tu talento, 'Vás
á darme
un
|.
pensamient 5
TM. dí qe Trémulo de emoción, gozoso el.| ardo
A tu voz obediente se encamina
sel $
A
Sidá los umbrales de tu hogar leg; ra. Si ¡atrevido escalar osa la cima. |. De las cuerdas, esquiva no desoig Las dulces notas gáe ondulantes + ibran Y penetran ufa ¿ ¡
de amor,
de luz y
tida.
asta ti lleva su estri la,
Vá al Parnaso á rendirte su home
+
aje,
A enviar, entre acordes de su lira,
El saludo entusiasta del poeta] Ala Musa gentil de la poesía! ] San Germán...
N. Fernandez
( val Jero.
A
h
4
Sl
j
Al darme tu inspiració | ] Déjame aquí uña canción.
Arecibo.
Une rima soñadora tu lira encantadora.
>,
3
Del trevádor perdona la osadia:
€
:
E
Rayos de sol por estam br Y de rocío leves gotas
Si arrogar
¡Tu inspiración ideal!
Eco de rítmico acento,
:
"E
Por girones de arco-iris 4 Y con átomos de aurora, el
De ese tu hogar"
¡Tu autógrafoen mi postal!
Me traerá tu pensamiento. F. Mo de €. ¡Tu debes ser ina mujer extraña...
13 14
Con un zafiro por cáliz Y formada la corola E
inquieta
González
|.
To M. de £.
|
En el cáliz de luz de un pensamiento Brille y fulgure tu genial talento. T. M. de €. Si otros timbres de gloria Borinquen no tuviera, Tu nombre bastaría Para su fama eterna.
Para inundar de luz todo el espacio
Y te cantó
mi musa
|
Mándame alguna canción. |
Deslumbrada ante la Musa De tu laureado poeta. Tomás Carrión. Cayey.
Y un cerebro pletórico de ideas
Bayamón.
mi postal.
i
Pad
Bayamón.
Honestamente seexcusa,
ds ¡Si lo sé! me lo han dicho: (Que es usted una artista verdadera : Y con un corazón sublime y grande
luce
verso en
j
Por esta vez el artista El Desempeñará al poeti, 13 .B. Dueño Colón
Sama.
T. M. de €.
Munnel Camuñas.
Que con inefable encanto Me dé un arpegio tu canto. T Mo det.
Aún
B.
E
i
Solo que. y esto no es tretal j
;
Escritor; bardo genial
Y en ella colocar como homenaje La flor que me reclamas. San Juan.
Rafael
Mayaguez.
13.4
TMdé
¿Aéscribir en tu tarjete
. T. M. de € Fragante esencia y refulgenté llama Bus(ué en tu hogar cual mariposa inquidY surgió como flor la noble dama: tá. Como un astro la Musa del poeta.
las gracias al cantor.
3
' | j
De tu dulce inspiración
lira.
+:
li
No es posible que resista
Rodrigrez.
Si mi reclamo teáñispira
Al recojer una flor,
. P
, Guayanilla.
M.
"
— -
¿MA Teresita, acomj iña A. ¿a pensamiento mu jenl.] —- ..
€.
No se postra ante tí para cantarte ? Juan P. Ferreforte Arroyo.
T.
yA
,
|
Fires.
Del artista'y del poeta.
¿Qnién con sagrado culto, Teresita. Aguadilla.
*
en tu. pentp!!
Algo para mitarjeta,
Trémulo canto ahora... ] Pues mi ofrenda humildísima dedico A la gallarda Musa So sal ib . Del más dulce cantor de Puerto Rico; Vicente A.
vanto3
Ramón Nin
Sán Juan.
Si es luz tu corazón; si en tí palpita Gentil el ritmo del amor y el arte, ¿Quién no se inspira ante tu luz bendita?
Doy
Quiero aleanzar tu bendición, y os! uiero llorar, eomo el dolor, yet to..i” e 4.3 ae”. ]
¡Y Un haz de resplandores
un arrullo de tu rima alada. T.
que te. mploro
Sellad los labios que-lá virgen (tu Mientras la fe coloca sonriénte |. Sobre fu corazón. besos de amror 1,
Tu estrofa para mi, tierna inspirada, '
3
|;
*
A
Soberána
|*
del cielo
** Que el abatido:espíritu
Bas.
Divino arpegio de su canción: Vos compañera de aquella diosa Sois de Cestero, Hada amorosa, De sus cantares la inspiración. : A. Suliveres, Arecibo.
To M. de €”.
la azulada cavidad
es tan grande la fécon
T. M. de €”. Musa del Dante, ¡ Beatriz famosa!
De Ferdinand la lira cadeneiosa En tí bebe la luz que lu engalana : ue eres tú, Teresita cariñosa. El alma perfumada de una rosa
|
Y
¿Tendré la satisfacción, De que me des tu canción
Rivera.
perpétuo anhelo
** Pareceme que esconde el io
postal?
En el alma enamorada De tu poeta genial. : Paco
j
“Es tan grande mi pena Virgen nía; Se Jaseads el alma como el marn al, fría, Y siento que me hielo, + j L Sin recibir el ósculo bendito E :
postal.'
Deseas para tu
Deshójame alguna rosa En tu rima cadenciosa.
Con su estro de Musa
“Para mí. la inspiración, -
Del rumor de tu oración. | ] pe T. M. de' j
tírillo.
balada ideal,
mi tarjeta
+
Y. Eseudero Miras
T. M. de (.. ¿Una balada ideal
de los amores, del iris gotas, de su arpa notas para tí en versos dulces y tersos sabrá verterlas. Amor divino que es rosa y trino, que es sol y es ave, convertir sabe la nieve en perlas
—jJamás podría— mi fantasia bordar con hilos deslum4radores. ni de sus flores
¡Solo con evocaros la memoria
Se romperá en canciones el poet¿
vive soñando,
ES a
.Pues como el arte en vos canta! jetoria Y tan hermosa sois como discret;
mi tarjeta,
Sobre este busto de mujer preciosa Pretende que le escriba-una cuarteta., La que supo inspirar á un gran poeta La leyenda del mundo más hermosa?
compañero
miél de las flores
poetas facetas
de sus canciones. Ya ves, señora:
Q
recoja
Í -
T. M. de €.
cuaja los hielos : huz de los cielos,
por ilusiones
o
Engenió Astol.
Una sentida cuarteta.
postales.
desde las cimas donde la gloria
hielos dorados
Cometio.
Ponce.
cañas y rimas,
de excelsa gloria
nombre,
buén jardinero, «que cultivando
Tu
de mis anhelos, célicas aves subió á los cielos
mojar en la lumbre tu plur haje.” T. M. de: 1. Para escribir á vos, ¡oh dicha st na Un mensaje de amor y simpatía j |. No tiene el bardo que mojar la pl Ima En la lumbre del Sok, Señóra mii: -
| Después que el Amor canta, ¿quién osado Imita sus acordes?
—
en aureas haves
de los en las
vuestro
.
* $e
Las dulces cuerdas dé una amante lira
¡ Repiten sin descauso
verterlas
en'is
teclamo de si cfara el jmaneajl:
Fantástica y soñadora, Cante tu lira sonora. j ¿ T. M. de €.
fantasín.
T. M. del. pues las heladas cumbres doradas
CARNAVAL
ad
"EL
Cerca del Toa existe un
Que dos almas gemelas
paraiso -
han eread j:
Como Dios formó el mundo, de in'
Unir poesía y amor le fué preciso Yialls poesía y amor se encon po
¡San Juan.
E
Marí
3
: |
|
|
»roviso,
y
3
j
:
EL CARNAVAL.
456
EL POZO DE LA GALLINA (Tradición
'merodeo,
de
para tales ejercicios
fecundo
casi siempre
campo
eran
en la Marina,
y Rastrillo había
No adquirido en ellos una destreza extraordinaria. tenía predilección por una ú otra forma de hurto ni por la adquisición por medio de él _de objetos deter-
puertorriqueña.)
Todos los que tuvieran algún valor ó fueminados. sen fáciles de convertir en dinero ó en substancia ali-
mentiéia, eran declarados por él buena presa y puesA esta especie de eclecticismo tos á buen recaudo. profesional, que le inducía á transigir y arrasar con todo lo que cayese entre sus uñas, debía probablemente el apodo de Rastrillo, por el cual tenía ya casi olvidado su verdadero nombre de pila. * k
x
9
Unx mádrugada en que nuestro héroe había reeorrido sin provecho todos los sitios de la Marina que el tenía por más favorables para su habitual merodeo, atravesó sigilosamente por el cuerpo de guar-
dia que había entonces en la Puerta de San Justo, y subió calle arriba hastala de Norzagaray sin haber. encontrado cosa alguna en que ejercer su habilidad «La ciudad estaba como muerta, y acestumbrada. los escasos mecheros del alumbrado «público titilaban aquí y allá, como tratando en vano de yencer á Miró Rastrillo en todas direcciones, las tinieblas. é hizo una expresiva mueca de disgusto. Torció des-
pués en dirección á San Cristobal, pasó por detrás del polvorín, descendió luego hasta la puerta de
UCHOS vecinos de la Capital recuerdan todavía este pozo, que estaba situado tras de. la batería y muralla de Santiago, cercá del sitio que ocupa hoy En los últimos la casilla de los retratos económicos.
derles tomar algo de provecho.
puerta de Santiago se distinguía su brocal obscuro y carcomido, destacándose allá abajo sobre la menuda hierba del foso. Cuando fueron demolidas la batería y la muralla
por aquel
de la gallina;
Se
la me-
po-
o.
pequeño
y miserable
bohío,
muelle del puerto
de San
Juan,
de
hombre
anterior,
siglo
del
Cuentan
que á mediados
un
en
el pozo
á una tradición
unido
vecinos
quedado
ha
pero su nombre
de estos
moria pular.
completamente
sitio, desapareció
autiguo
del
cerca vivía
en
sujeto lla-
un
mado Antolín Herrera, aunque más generalmente conocido en la. población por el apodo de Rastrillo.
Gozaba
fama
diestro
en
clase
toda
de
Era licenciado de la Puntilla, hurtos y raterías. institución: correccional entre cárcel y presidio, que estaba situada cerca de donde está hoy la carbonera del Arsenal; y aunque él' no se había corregido allí de sus inclinaciones de tomar lo ajeno, hacíalo con mucho arte y disimulo, á fin de eyitar en .lo posible nuevas
relaciones con la. policía el
antiguo
madera,
tinglado,
que en aquel
y
y los
justicia.
la
viejos
tiempo
El muelle,
barracones
servían
de
de
almacé-
y
tal vez
se detuvo
en la entre
aquellos dos pilares, que aún se conservan, y que ser-
vían entonces para indicar el punto de partida de las .Lanzó desde allí una mirada carreras de caballos. de lince á lo largo de la carretera,
y ya se disponía á
regresar á la Marina, su centro habital
de operacio-
nes, cuando vió venir apresuradamente con una gallina.
un muchacho
—¿ La vendes ?— preguntóle Rastrillo cuando estuvo cerca de él. —$Si, señor—dijo el muchacho. —¿ Cuánto quieres por ella? —Cinco reales. ¿-Es mucho.
—Tómele
el peso—dijo
A
Desde la
la Márina.
y de
veci-
los
avidez
con
bebían
usí la
aún
nos pobres de la Ciudad
diligencias,
tel muchacho
aire de orgullo, poniendo la gallina
con
cierto
entre las manos
pecadoras de Rastrillo. Este la tomó y la movió varias veces, como mirado de la gordura del ave. Después añadió:
ad-
—¿ Quiéres tres reales por ella ? —Déme cuatro, señor. La traigo á vender por necesidad. Mamá está muy mala, y vengo por medicinas.
¡Sólo así
venderiamos
alegría de casa
puedo, señor.
—-Pues ven
Mora,
:
—¿ De dónde eres ? —De Cangrejos. —¿No- la das en menos ?
—No
á
conmigo.
que
és. la
AA
mas
salobre;
— Era su agua un tantillo
sequía.
sus
MA,
prestaba
de
>
vía
temporadas de gran
mala
ventura
Siguió adelante con
pensando
y distraido,
aire displicente
las
durante
importancia
de
con frutosy
campesinos
verdurás para el Mercado; pero Rastrillo cruzaba por entre ellos desdeñiosamente, poco seguro de:po-
taba el tal pozo 'asi.obstruido con piedras y escombros; pero en la primera mitad del siglo XIX toda-
servicios
los
á llegar
Empezaban
de las murallas es-
años que precedieron al derribo
siguiendo el camino de
Santiago, y salió de la ciudad Puerta de Tierra.
/
EL
Había ideado un medio inglniold as apropiarse 31% 2 sin escándalo ni peligro. - A cincuenta pa-
sOs Ue" cs.
estaba
el Abanico, complice 'ada
contbina-
ción de fosos, reductos, trincherás, baluartes y parapetos en forma laberíntica, dopíde suelen extraviarse hasta las personas más expertas si no. la han .reconocido y estudiado con aten ción, y hacia allí condujo al muchacho con el propósito de dejarle perdido, sin la gallina, en aquel ingenio Dédalo de estrategia¿militar. Díjole que era plantón de San Cristóbal, y que tenía su vivienda en una de las bóvedas de por
alí. Rastrillo iba delante con la gallina, y el muchachutle seguía de cerca. Así llegaron á la primera curva del Abanico. 'Quería darle esquinazo en una de ellas, y escurrirse luego hasta el foso de la: muralla; pero el muchacho era listo y le seguía por todas partes como.una sombra. Ya fuese porque le avivara el noble deseo de no volver sin las medicinas para su madre enferma, Ó porque no le éra desconocido el laberinto aquél, lo cierto era.que Rastrillo no encan-
tuba modo de despistarle.
Cuantas veces
trató
de
adelantarse algo para +sconderse de pronto en una inesperada revuelta, otras tantas sintió más cerca de
barba de color de la noche, dé sonrisa de convencido, el doctor Urbina: López, abogado, orador, poeta, general y estadista, era uno.de esós hombres extraños
del Nuevo Mundo,
¡ Había algo de singular y de fantásticoen aque-
lla excursion de dos personasá todo correr, en medio de la obscuridad y del silencio, por entre las, cireunveluciones
laberínticas del
(Continuará.) MANUEL
4banico !
FERNANDEZ
discreto y pensador.
JUNCOS.
fulguraciones
más bella que nunca.
suaves
del
La
coque-
en las pri-
crepúsculo, estaba
puente giratorio
sí el fuego
nota, ingeniero
de
gran saber, había desempeñado el cargo de Ministre , dé Instrucción Pública en el gobierno provisiona .. que presidiera su amigo Urbina, y luego en un: | rudísima
campaña
de diez
meses,
con
el
mañser
unha mano y la pluma en la otra, ejerció Secretario particular del General
El tercero era mucho en su mirada, de palidez
en todos
marmórea,
en jefe.:
más, joven, pero los
una
el
el cargo d
detalles
de
sensación
hotábas
aquel rostr
|
de cansancio
de fatiga moral extraordinaria.
Aquel
hombre
tan
joven
había
ganado
á til;
limpio las charreteras de: General de División, y €: el orden civil como poeta y periodista errante y s' hogar, eraun verdadero rey de Bchemia.
¿Qué pasaba por
las álmas'
de aquellos tres i:-
telectuales desviados de su cauce natural por las e 1fermedades de la tierra americana, espléndida de *4- (
da en
el orden
material,
moribunda, asesinada y >r en el orden
moral.
*
Quien lo sabe! Entretanto el vapor avanzal a, la nóche caía como.un palio de sombras, sobre:la isla feliz é indiferente, encendíanse ciudad y allá lejos en lo alto del
las luces de 'la Hotel Venezuea,
d1ó
destacabase el grupo de las tres damas trajeadasle blanco interrogando ansiosas á los mil ruidos de la
ás,
noche que iba á aumentar
im-
con sus negruras
M)-
el dc or
e A comedor ;lele es-
Hotel Venezuela se encontraban nuestros seis perño- Mos * najes. tras Sara, Rebeca y Ruth, jóvenes judías hijas dean “aba
se abrió
comerciante de Barranquilla á quienes la revoluc:ón
tán
Jara dar paso á un hermoso buque mercante holanlés, sobre. cuya cubierta veíanse tres hombres cru-
llevara á Curazao, erah las tres prometidas delos gallardos paladines de la libertad y el derecho. Sara y el Dr. Urliina, Rebeca y el Dr. Otál ez, Ruth y el General Quiñones, habían nacido ¡ira
lo, ¡¡eel
rados de
El
de
de aquellas almas puras. Una hora más tarde y en el amplio
criollo. )
Er” una tarde del mes de las flores. tona y pintoresca Curazao envuelta meras
Médico
la teogracia y el personalismo
FRENTE AL ABISMO (Cuento
que parecen llevar en
]
de nuestros volcanes, el vigor de nuestros mares y á par la dulce plaeidez de nuestras noches tropicales. Junto á él se encontraba un hombre de ojos azules, resguardados por unas finísimas gafas de oro, barba rubia perfectamente cuidada y aire de hombre
sí el roce y menudeo de los df3talzos piés del muchacho.
457
CARNAVAL
brazos contemplando
con mirada
indefini-
le la ciudad multicolor, comercial é indiferente. Sí l lector gusta de acompañarnos podrá contemplar «omo desde lo alto del Hotel Venezuela se destacan y galltardas las siluetas de -tres bellísimas jó-
un escapadas tica
sin duda,
*
de alguna vieja leyenda .
perfume embriagador de
de
las rosas
y ser
felices.
Y no obstante, ellas
“e
eran
jndías
y
el fanatismo
ute
cristiano hacia el vacío á su alrededor, éllos erai: li- vie berales y la propia intolerancia los lanzaba
al m'nte er.
como fieras acorraladas por el domador.
queué relación existe entre aquellos hombres de (uéemelancólico y pensamiento impenetrable y las jóvé nes que desde la azotea del hotel parecen l terrogar ansiosas á todos los ruidos de la tarde,a dear indeciso
amarse
y aún
las primeras estrellas que
al Debual 'comien-
Igual
estigma
los manchaba,
idéntica aspira. +ión3no
los hacía aspirar á redimir la enferma tierra er:olla dón y mientras los hombres iban á morir, sus ger-iles 6ucompañeras rogaban á Dios por éHos. r Aquellos tres hombres no habían nacido (¿h el Me
mismo punto.
Urbina
zan á tachonar el espacio ?
A
era colombiano, Otáñez
de Venez ¡ela,
¡Ay, la eterna relación de los séres todos. Una cadena de amores infinitos, rota á intérvalos por es-
Quiñones de Puerto Rico, más que importa eso; Nuestra América toda está enferma y ya los libe-
pacios de cruento martirio é insondables dolores. Aquellos tres hombres venían del continente .enfermo, de la heróica y desdichada Colombia. *, Eran náufragos alejados dé su América, por la tempestad de la imbécil reacción conservadora y neo católica. De ardientes negros ojos expresivos, de luenga
rales, los redentores, rio tenemos, no podemos ener bandera.
Así lo comprendían
aquellos tres ¡sn ipdss
corazones y así lo practicaban.
por
Por tres veces se lanzaron á la lucha ary : ¡da y tres veces fuerón rechazados. Aquella noche
úna vez más frente «il abismo y entre frases
de 1m9q
EL
458
el plan
de
de Colombie
mapa
un
ante
y de esperanza,
trazaron
partieron á la viegoria ó á la muerte, No. pasó un mes, sin que la traición llevara al suicidio 4 Urbina, á morir acribillado 4 balazos á Otáñez y en el cadulso á Quiñones. Y ho pasaron muchos meses sin que en el poétiun mausoleo eco cementerio de Curazao ses elevara sobre los restos de tres ángeles asesinados por la odiosa unión de todos tos fanatismos. — En tanto las noches de Curazao <iguen plácidás, indiferentes y allá en los breñales de la vecina costael abismo, el continente enfermo, sigue asesinando redentores!
1. CONTRERAS RAMOS.
LITERARIOS
PUNTOS Muvaglez.*
RICARDO
(Representa
“Tu
eres cual Del
jardín
Que abren Con
Está
ds
Don
bien
¿ROMANCERO
un
ramo
de flores.)
las flores
Que es al fin la pasión que más se siente La que más nos acerca al bien querido.” Que vaya y acarigie se ardorosa frente, ¡Qué gracioso es Y Ad. y qué ecurrente....?
A VUELA PLUMA Luisa
Maria de su muerte;
bien...!
Camuy. A María. mirares.”
año
la soñar con una vida feliz, la muerte traidoramente, al y dores admira sus arrebata á la contemplación de afecto de sus amigos. No vamos á decir en estas líneas quien era MaPara
Di si nunca
me Lo
Ros
Vean
va á matar el amor.
Y
care
Eres todó-mi tesoro
hier
No
nie
Ya la Hama : “Contigo la vida mía Se Jeslizará entre flores
morit pular
Felicidad
au
insti
2% inc
esta”
AQ
rel
el am
el oro,
su tesoro.
R.
brujá como
tan bruja.
un espléndido
el pon-;
el puente
É
de
Oro.””
baile, ha quedado
inaugurad:
; de observar
el entusiastm
que reina entre los distinguidos jóvenes que la con ponen y no dudamos que el “Lazo de Oro” influir
perar
mucho.
Gracias,
de
Bróoklyh.)
“Cual van y vienen las olas De este proceloso mar Van mis penas á choear
Me dan ganas de Horar Ahora que esjoy á solas.
Becerra
y Negrón
Collazo,
pruTesores
respectivamente de las escuelas Lincoln y Colón, nos para
la fiesta escolar con
cUrSO. AMí pudimos
motivo de fin de
convencernos una vez
más del ca-
riño que se profesan profesores y discípulos. Con maestros como los de: Colón y Lincoln se explica perfectamente que la enseñanza progrese.
Al ver como
Con el infortunio 'á solas.” Al ver como van las olas, De ese proceloso mar
amigos. -
Los Sres.
invitaron
M.-—Rincón. (Representa
ha
Monclova.
esta simpática Sociedad. Alí tuvimos ocasión
Vd. cuenta con el buey.
A lo cual dirá Maruja : Tan
Democracia,”
poderosamente en nuestro medio social. La componen elementos de quienes se pt
y alegría
Que
ps muell madó
hurtá
con
Preside á nuestros amores,” Se vé, grandísimo juey
un
Gozé *
dolor.”
sueña
Pepita
El “Lazo
Con
Como
por a dela;
nocid
ocasiones
Labrador,
José
Don
“La
de
Deseamos á la enamorada pareja, que veal fil realizadas sus aspiraciones más bellas, una felicidad! sin término.
“Piensa bien como te adoro no dudes de mi amor
puer
amigo
querido
señorita
tuosa
trovador,
ustedes.
p
nete-
traido matrimonio en Rio Piedras, con la bella 4 vir-
Desdichado
p
pu tem salo bi
ideal,
mujer
aquella
describir
corresponsal
activo
has de amar.”
bros;
vía
Nuestro
Pon término á mis pesares
tabi
¿sonreía haciéndola
Bodas.
“Mujer de vivos mirares De elegante y esbelto andar
la e.
noticia
y =entido.
eo
¡nesperado
suceso tan
Cuando todo en torno de ella
Sigamos.
mu
ke triste.
sorprendió
nos
Dolorosamente
e
Aldea.
pacio, espacio y tienpo de que carecemos. No había nacido para la tierra. “Era un angel que del cielo A este mundo descendió, Pero remontó su vuelo Porque manchar en el suelo Sus blancas alas temió.”
por la mañana
“Mujer de vivos Al primer tapón:
ELLA, afdorosa frente ni “Ven y acaricia olvido al Echenios los dolóres
sitaríamos disponer de mucho tiempo y de mucho es-
el rocío.”
está
A UNA
via Luisa.
mío,
Ricardo,
Rio Piedras
RAFALEI
o dias después Och
campaña.
la cuarta
CARNAVAL
de
sus maestros,
los alumnos
lloraban
no vacilamos en
al despedirse
afirmar que
para
las escuelas de Colón y Lincoln, está demás la ley del foete, impuesta porel Departamento de Educacion.
NOVELAS: LA"
,
CORTAS
J
|
Lectio
CARNAVAL
DADA
EL
MUNEGCA
Por CARMELA
EULATE
SANJURJO.
EN
( CONTINUACIÓN. ) IV.
A
e
ra empezó á entregarse á la política, bnscando ocupación á su actividad y un objeto que llenara el vacío desu vida. Conocido ya por sus ideas liberales sus correligionarios aceptaron con jú-
bilo la cooperación activa de un hombre cuya intachable reputación y elocuentísima palabra, podían serles. en estremo útiles. Lasaleta
llevaba á la. defensa de sus
nes no solo las mil aymas que su vasta proporcionaba. sino el apasionamiento
conviecio-
ilustración le propio de su
caracter.
No tardó en presentarse con la denuncia del periódico liberal La Región, un motivo para que los
hombres del partido apreciaran todo lo que valía Lasaleta y las ventajas que podría reportarles el contarle en sus filas. - Nunca su voz sonora y varonil había
sido oida en la tribuna con tanto público que invadía
la sala de
entusiasmo
por
la Audiencia,
ni
el
con-
ceptos más elocuentes y enérgicos resonáron en aquellos lugares para defender la independencia de la prensa. telleaban
El gesto, sus ojos
terrumpia
con
la expresión, el
electrizaron
atronadores
brillo
el auditorio,
aplausos.
que cenque
le in-
| Cuando
La
Región fué absuelta un grupo de prohomibres del partido y de periodistas acompañaron al abogado á su
casa donde tuvo lugar una reunión política.
sino
en artículos políticos
sea más a leauna
Rosario perdió por aquel tiempo á su padri, y las . leyes de la:sociedad la obligaron á
renunciar duran:
te la época del Into á su lujo desenfrenado. L' saleta presenció profundamente conmovido los gr; os “le las dos mujeres, el: dolor de Rosario que no yuería ver á nadie, y que
hacía resonar la: casa
con 4YIS
llozos.
-SO-
Teresa y Luisá no se apartaban un n-omento de ella, y Valdés se decidió á recetarla un citman-
te para heces cesar aquella excitación
nervios.
Al dia siguiente supo por una media co ción que oyó entre la doncella y 'Peresa, que bia asomado detrás de las persianas del gabin ra ver el acompañainiento que llevaba el fér que se disgustó porqueél no invitó al Alcali era amigo
Por
de
la casa
lamañana, la
Teresa
para que
oyó desde
versase hate patro, y e que
presidiera el Huelo.
su despacho
lleHará 3
para que le llevase los periódicos de la >víspe-
ra, y pedirle que le leyera lo que muerte de su querido papá.
habían puesi-> de la :
A la hora del altnuerzo estaba ya serena, “habló 3
del lujo que. llevaba el féretro, y de las
bre de ellos, escogida no sabía por quien,. pe: o elegantísima con su ancha faja de raso negro en ue eslema:
“A nuestro
padre,
sus
descon
lados
hijos Rosario y Julián.” También había habido otras bonitas y lujosas, pero la de Valdés y Luisa re ultaba
cursi con sus siemprevivas
y violetas arregla as un
que escribía para el periódico, órgano de su partido. Su amigo el Doctor Valdés que visitaba la casa Íntimamente, le aconsejaba que disminuyese las horas
sencillamente.
de trabajo pues su salud se resentía con las largas ve-
girla. Lo mismo pasa en todo lo que escoge, »ues el otro dia se presentó la.chiquilla con un sombr=ro que la había comprado su papauito y parecía propi mente
ladas. Empezaba á cubrirse de canas su cabeza, pro” fundas sombras circuían sus ojos de un brillo casí fe. bril y estaba pálido y demacrado. La vida que llevaba era apropósito para destruir un organismo más fuerte que el suyo. Luchas políticas que exaltaban su cerebro y luchas interiores que desgarraban su corazón. Después del baile al
que acompañaba siempre á Rosario, á ¡su hermósa muñeca cubierta de encajes y pedrería, venía á en. con mano
febril
el artículo de:oposición. No quería dejarla ir sola, comprendiendo
cerrarse en
su despacho
para trazar
como
hombre de mundollos peligros á que una mujer como Rosario está expuesta en sociedad si la frecuenta sin
la egida
protectora
desu marido
y nosé
atrevía á
obligarla á no salir seguro, con el conocimiento dolorosamente adquirido del caracter de ella, de que iba
" á aborrecerle.
Y él deseaba
su amor,
por pequeño
que fuera, con el ánsia con que se acerca el sediento
;
precic las é0-:
ronas que había hecho traer del panteón para >erlas, celebrando algunas, conto la que había ido e ¿hOM-
taba el
Pronto se vió obligado Lasaleta á trabajar hasta de noche peto no por asuntos de su profesión que te-
nía un poco abandonados,
'á la fuente para beber aunque no gota de agua.
La
—El tiene pésimo gusto para todo, decía Eosario, y como Luisa estaba acompañándome,
una
espuerta.
No
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análogo el que sintiera por la muerte del espi50. De pié, con los brazos cruzados, séguía ¡con la . vista los movimientos de: aquella mujer que arjoraba, pero que en aquel momento le era casi rep Isiva. La joven sacaba del armario de luna, y lo:
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T. M. de (. Cuando vacilan tronos seculares En playas que no besa el mar Caribe: Aquií, bajo el dosel de Jos palmares, Pleito homenaje la mujer recibe En solio de gardenias 'y azahares. Eres tú la que reinas: tus virtudes
Su esquela, señora mía, Y su elegante tarjeta
Tu
Pobre él cantar de mi lira Por fuerza ha de resultar
las almas
Reina,
yo siempre
aprisiona
eantaré
tu
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Manuel
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Llora.
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La harmonía
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no atesora
seductora
(Que en tu hogar es bendición: Porque su estrofa insonora Junto al CDI y la Aurora Será un pío de gorrión.
Aguadilla.
Juan. Que
No molestas mi atención
mi
Mayaguez.
Mariano
Riera
Palmer.
C.
nota,” tu amistad me
di e:
j
Yo que conozco tus azules dias Dije al leer tus candorosos versos ¡ Es una aurora que O ra pide - $ Alma
de alondra!:
e
ae
5 ]
Luis O Neill. Aguadilla.
a
ME
|
En mi tarjeta sencilla Mándame alguna quintilia. T. M. de C. ¿ Que dañe yo tu tarjeta ?
Esta sola idea me aterra.
Cantar mi musa indiscreta A la esposa de un poeta De lo mejor de mi
hogar
T. M. de €.
de
“Nota que gima,*
Aponte.
Para dar colmo á tu anhelo De que vibre mi canción uisiera tender el vuelo Y subir en busca al cielo De divina de inspiración. Y brindarla fervóroso Entre efluvios de violeta A la esposa y al esposo Que un hogar venturoso Son la Musa y el Poeta.
José de J. Esteves:
mi
“Quiero una
Que sus bondades ofrecen Yo diría “lo merecen ” Esas “notas del amigo” San
de
T. M.
En bella tinta de color de rosa, Que es el color de tus ensueños puro ,
Entonces el “dulce abrigo ”
Navedo.
Al pedirme una cancién. Por el contrario. señora, Inmensa satisfacción Reportas al corazón Del que al complacerte, llora...
e
Como las notas amantes Que de su lira salían En armónico sentir, Con las notas sugestivas Que muy tiernas y expresivas Vuestra voz dejome oir Aquel dia en el hogar Tierno nido del amor Donde tan dulce cantor Sieute mucho y sabe amar
Juan.
T.
Dame una nota que gima, De la alondra de tu rima.
(
De Ferdinand yo tuviera
(.
¿ Molestaré tu atención Al pedirte una canción ?
Mariani.
Y Musa la mía fuera Cual ia musa que él adora : Tierhás mis notas serían,
Yo aún no te conocía; Mas el dulce bardo, tu compañero, En versos vibrantes de ritmos llenos Una prueba nos dió un día De que tu eres para él su único anhelo. Y entonces me dije así; Ya cónozco á la esposa del poeta. Mujer á quien tal culto se profesa Debe ser angel ó hurí, La suma perfección de la belleza.” San
Diego
a
Hi A
L. A. Ponce de León; :
Ponce.
Si la inspiración, señóra
Leí tus versos: te llame poeta Y hoy reclamo tu firma en mi tarjeta. de
Pero Mis versos ...
inspira.
Yo prestaré dulce abrigo, A las notas del amigo. T. M. de
Rouray
M.
versos
Pedro
Mayaguez.
T.
sus
E
El ]
Hoy que tá los inspíras Parecen buenos.
Si tratara de cantar
trono;
Mujer, en tu amistad cifro mi anhelo; Angel, tu dieha y tu poder pregono; Tu trono es el hogar. tu patria el cielo. R.
Ferdinand es-el bardo Cuyas estrofas, Al calor de tus gracias, Surgen hermosas,
¿ Pedirme á mí una poesía Layreina del corazón De,un eminente poeta ?
Y por tí vibran harpas y landes.
j
T Mide C.11.>
Me llenan de admiración :
A tu sieñ ciñen inmortal corona. belleza
Brille aquí con luz divina
Tu inspiración peregrina. *
Lajas.
tierra!
Francisco E. Montañés, | ! Mándame en una balada Escrita tu rima alada. T. M. de €.
!
Me exijes. Teresita un balada
Pues oye del cantor la rima alada: ' Tu eres la Musa que á Cestero insp ra. Las estrofas más bellas de su lira. |:
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Guillermo
V. Cintrón.
dl
(
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