Más allá de la muerte
Constanza Frost
Trabajo realizado en Taller Formativo I de la carrera de Fotografía Profesional, Instituto Arcos, Peñalolén, 2020/2021. Fotografías y diseño, Constanza Frost Saldivar.
Más allá de la muerte
Constanza Frost
Este proyecto nace en base al concepto de la muerte y el abandono, donde mi principal fuente de inspiración son las vanitas, género artístico subgénero del bodegón, que representa la relevancia de la muerte sobre los placeres mundanos en vida, donde todos los objetos tienen un valor simbólico y alegórico. La calavera (objeto protagonista en todas mis fotos) simboliza la muerte, las flores y la vida, las velas y el recuerdo, mientras que el concepto de abandono está representado por los lugares donde son realizadas las fotografías en exterior. Como contexto histórico, la fotografía post mortem, es la práctica de fotografiar a muertos, que fue y es utilizada en varias culturas, tanto en Oriente como Occidente. En Chile fue común esta práctica durante los años 1890-1920, siendo protagonistas habitualmente los niños, quienes se convertían en angelitos para su familia y la importancia de la fotografía estaba en retratarlos para tenerlos siempre presentes. Actualmente estas fotografías son tabú, mal vistas y consideradas una falta de respeto.
Para poder conectar mis ideas con mis fotografías, tuve que abrir la herida de una pérdida reciente, para poder sanar en mi duelo y es por esto que, durante estos meses de trabajo y con el pasar de los días, cada vez conectó más experiencias con mi proyecto, le encuentro más sentido a la muerte, al abandono, al tiempo, al dolor... La muerte no solo nos quita a ese alguien, aprendí que también nos entrega algo, una lección sobre que la vida es corta, las cosas cambian y el tiempo no se detiene. La muerte no solo es el fin, tan solo es el fin de un ciclo infinito. Donde hay muerte, hay vida, donde hay dolor, hay alegría, donde hay abandono, hay cuidado. Siempre se nos dice que las cosas materiales no valen tanto como la vida, pero cuando ya no está esa persona y solo nos quedan los objetos y recuerdos que dejó antes de su partida, ¿acaso está mal aferrarse a ellos? Las flores, las plantas, la naturaleza, están ligadas a la muerte de tal manera, que incluso en los funerales podemos verlas; las plantas siguen su vida aunque quien las cultivo no viva y la naturaleza es tan sabia que podemos apreciar el ciclo de la vida en ellas, desde que florecen hasta que marchitan. Las plantas son el único recuerdo vivo que quedó de mis fallecidos, hablar con ellas es como conversar al más allá, después de todo la conexión trasciende de la vida a la muerte. En tiempos de pandemia, la muerte está más presente que nunca, quizás vivir esta crisis nos ha enseñado a valorar el día a día, apreciar cada momento, extrañar con más fuerza a cada ser querido, amar sin límites y comprender que la distancia solo es física, porque nuestras almas siguen unidas.
En memoria de mi abuela, Julia Vega Bustamante (1939 - 2019) A quien me gustaría dedicarle este fotolibro, ya que su partida fue la que me llevó a realizar este proyecto...
Agradecimientos: A mis amistades por ayudarme con todas las ideas; Kelly Seguel y Cristobal Arce, por ser mis modelos y en especial a Estefanía Farfán, gracias por entregarme una motivación más para seguir en esta pandemia...
2020/2021