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Librería gandhi,
Hace casi cincuenta años, los mexicanos percibían a los libros como grandes obras intocables. Las librerías eran atendidas por un dependiente, quien se encargaba de buscar en los anaqueles el título que buscaba el lector. Sin un contacto directo, el público general estaba lejos de la lectura. Consciente de esto, Mauricio Achar idea un concepto novedoso: librerías en donde la gente le pierda el miedo a los libros. Así, en 1971, inaugura la primera librería Gandhi, ubicada en Miguel Ángel de Quevedo e inicia su sueño de lograr un cambio social en México a partir del acercamiento a la lectura.
Gandhi no sólo fue una innovación en librerías, sino también el espacio para desarrollar el pensamiento y entrar a la cultura, pues por sus estantes han pasado: Carlos Fuentes, Mario Vargas Llosa, Gabriel García Márquez, Elena Poniatowska, y otras figuras de la bohemia intelectual. El atractivo añadido era el enorme acervo traído de ferias internacionales, ejemplares difíciles de conseguir en territorio nacional, y siempre a precios muy accesibles. Estos manjares literarios despertaron el interés de los ávidos lectores y poco después, Gandhi empezó a abrir nuevas librerías en la Ciudad de México, pero sin perder de vista la posibilidad de extenderse al resto de la república.
Para lograr el deseo de llegar a toda la república, era necesario trazar un plan muy preciso para poder tener éxito. La tarea no resultó fácil, pues a pesar de haber ganado terreno en el mercado, Gandhi seguía siendo percibida como una librería únicamente “para intelectuales”. Convencidos del poder transformador de la lectura en la sociedad y a través de una ingeniosa campaña de publicidad pudieron despertar el interés del grueso de la población. Los espectaculares con una comunicación irreverente, disruptiva, provocadora y con sentido del humor, le permitieron a la marca cambiar la percepción de lejanía que tenía con los nuevos lectores. El éxito de esta campaña se tradujo en un mayor reconocimiento, pero también en un acercamiento a los lectores ocasionales o primerizos, quienes vieron en Gandhi a otro mexicano deseoso de cultivarse. La campaña y el constante trabajo por crear espacios mágicos de encuentro con la lectura, fueron piezas claves en el crecimiento de la cadena de librerías, en los últimos años.
Desde sus inicios y hasta la fecha, Gandhi se ha caracterizado por estar en constante búsqueda de la creación de un lugar mágico para encontrarse con los libros al brindar servicios y valores agregados para una experiencia única. Algunas librerías, aparte de la increíble selección de libros, películas y discos, también poseen una cafetería con internet gratuito, donde llegan a realizarse eventos de interés general (pláticas, presentaciones, talleres, conciertos, entre otros). Por si fuera poco, Gandhi tiene al alcance de sus clientes promociones y ofertas con cada compra, artículos promocionales gratuitos, separadores, la revista Lee Más y muchos valores agregados adicionales, como tarjetas de regalos, un programa de cliente frecuente llamado Página 1 (con más de 200 000 socios a la fecha) y servicio de ventas de boletos Ticketmaster. El equipo de Gandhi sabe que, para que uno pueda tener verdaderas vivencias lectoras, es necesario complementarlas con un ambiente cómodo y flexible para gustos múltiples.