Para muchos el ejercicio de la autoridad ambiental es sinónimo de multas y castigo. Desde el 2012 hemos procurado que este concepto se transforme, por eso en nuestro plan de Acción 2012-2015 y ahora en el Plan de Acción 2016-2019 incluimos la participación desde todos los niveles como un mecanismo que contribuye al ejercicio de una autoridad ambiental que se ejerza desde la corresponsabilidad y no sólo desde el control y vigilancia a través de requerimientos, medidas preventivas de suspensión o multas.
Si bien es cierto que continuamos firmes en nuestro papel, también hemos abiertos espacios con diferentes sectores; por ejemplo, con los gremios productivos y sectores industriales, para que conjuntamente construyamos metas y procesos de sostenibilidad ambiental que vayan más allá de la norma.
Nuestra perspectiva no es la de multar por multar, es la de lograr una producción sostenible y un uso adecuado de los recursos naturales renovables; es por esto que primero abrimos la