REVISTA
DEL
(EnTRE
D'ESTUDIS
ACTES 2n CONGRÉS SOBRE PATRIMONI CULTURAL VALENCIA Camp de Morvedre, 2005
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Núm.
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2005
LA ANTIGUA IGLESIA PARROQUIAL DE TORRES TORRES Y UN INVENTARIO DE 15631
JUAN CORBALÁN DE CELIS Y DURAN*
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l lugar de Torres Torres, debido a la importancia de su fuerte castillo2 fue poblado desde el primer momento por cristianos viejos, contando seguramente desde entonces con su correspondiente iglesia, que dado lo reducido del lugar sería de pequeñas dimensiones, a lo sumo una pequeña nave ocupando el solar de alguna de las casas dentro o quizá cerca de los muros del castillo. Pasado el tiempo y asentado ya el reino después de los numerosos alzamientos que se habían producido durante el último tercio de ese siglo XIII de la conquista, en el reinado de Pedro III, en los que también habían participado los musulmanes de Torres Torres3, se produce un aumento de población como consecuencia de
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Cronista oficial de Torres Torres. La base de este artículo tuvo su inicio en la exposición organizada por este cronista con motivo de las jornadas culturales celebradas en el verano de 2003, sobre los ornamentos y objetos litúrgicos que posee la iglesia de Torres Torres. La exposición sirvió como excusa para que se sacasen del arcón y se desempolvasen los viejos ternos y casullas que se usaron en otro tiempo, se lavasen y almidonasen los finos paños de hilo, se limpiasen los cálices y copones, se mostrase la magnífica cruz procesional, y sobre todo para que los vecinos conociesen o recordasen la existencia de todos estos objetos y apreciasen el valor patrimonial de casi todos ellos. - Importancia que en 1234 reconoce el propio rey Jaume I cuando a pesar de los consejos dados por el maestre del Hospital para que se conquistase esta plaza, le contesta que buen lugar es Torres Torres, pero vale siete veces más el lugar de Monteada... y Torres Torres es un lugar más fuerte que esta torre, a pesar de que ésta vale más de honor y de ganancia, Llibre deis fets de Jaume I fol 150. 3 En 1266 y después de haberlo ido desmembrando por diversos lugares del reino, se le cortaba la cabeza en Torres Torres al moro negro Ali Bacor, que se había alzado contra el rey. VICIANA, Martín de, Segunda parte de la Coránica general de España. Valencia 1604. L- 2-, fol. 268. 1
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la prosperidad alcanzada en estos años de tranquilidad y desarrollo. En la primera mitad del siglo XIV se había iniciado el afianzamiento de Torres Torres como baronía fuerte e independiente de la jurisdicción de Morvedre, en parte como consecuencia de los favores que Pedro IV dispensaba a su consejero Garcerán de Bellpuig, señor de la baronía de Torres Torres, Serra y Polop, a quien había concedido en 1345 la jurisdicción criminal del primero de estos lugares. Este aumento de población, favorecido como consecuencia de todo ello motiva que en 1353 los jurados de Torres Torres se vean en la necesidad de tener que ampliar la iglesia, teniendo que tomar para ello parte de la casa abadía4. Por estos años las casas de la población ya debían hacer tiempo que habían abandonado la protección de los muros y se habían ido desparramando por la ladera del castillo, bajando hacia el camino real que pasaba a los pies de dicha ladera. La inexistencia de restos y signos de obra junto a los todavía bien conservados muros, nos hace suponer que las nuevas construcciones, por motivos de su defensa, se fueron agrupando algo alejadas de los mismos, en el sitio donde actualmente se encuentran las calles del Castillo y del Tossal. Esta primitiva iglesia, construida seguramente siguiendo el modelo de iglesia de arcos de diafragma y techumbre de madera, tan abundante en las primeras iglesias construidas tras la repoblación cristiana5, es la que se conservaría, con alguna que otra ampliación como la anteriormente reseñada, hasta principios del siglo XVIII. Su planta sería rectangular, de una sola nave, contando a lo sumo con tres vanos, sin ábside y con la cabecera plana formada por el hastial de cierre de la nave. A pesar del poco espacio disponible junto a los muros del castillo, la iglesia debía contar junto a ella con una pequeña plaza o al menos con un ensanche de la calle por la que se accedía a la misma6, pues según vemos, el consell general que se celebra en 1515 tiene lugar en la plaza del pueblo, prop la sglesia. En otras escrituras de esos años se refieren e este lugar como "la plaza de la calle" y "en dicha calle o plaza" dándonos a entender que el lugar no tendría la configuración típica de plaza, sino que se trataría, como hemos indicado, más bien de un ensanchamiento producido en la misma calle. Sabiendo que la casa abadía se encontraba adosada a la iglesia7 y que como hemos visto ésta se encontraba en una calle, En 1277 el rey Pedro III otorgaba carta de capitulación y confirmaba el poblamiento de los musulmanes de Torres Torres después de la reciente rebelión en la cual habían tomado parte. ACÁ. Real Cancillería registro 39 f. 151v. En GUINOT, Enric Cortes de Poblament Medievals Valencianes. 4 En ese año el vicario general de la diócesis Pere de Monsalles en ausencia del obispo, manda a García Ferrer, rector de Turnbus Turrium, que exija a los jurados del lugar que le indemnicen por tomar una parte de la casa Abadía para ampliar la iglesia. ADV. Secc. I, Fondo III, Colaciones de Beneficios, Caja 136 f 29v. En CÁRCEL ORTÍ, Milagros. Visitas Pastorales de Valencia. Siglos XIV-XV. 5 ZARAGOZA CATALÁN, A., Arquitectura Gótica Valenciana. Siglos XIH-XV, Generalitat Valenciana, Valencia 2000. 6 En el año 1249 una orden real concedía a las iglesias de las ciudades del nuevo reino el privilegio de dejar libre el espacio alrededor de cada iglesia, de forma que no podía adosársele ningún otro edificio. LLIBRER ESCRIG, A., De la mesquita a l'església: La construccíó de l'església de la Sang de Llíña. Archivo de Arte Valenciano, Valencia 2003. 7 Desde siempre la iglesia tuvo adosada a ella la casa abadía, como vemos en el documento de 1353 cuando toman parte de ésta para ampliar la iglesia. En 1589, en la Visita que hace el doctor Alonso de Avalos, Visitador General, hace a la iglesia de Torres Torres, revisa la abadía de dicha rectoría que está al costado de la iglesia.
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seguramente con alguna otra casa adosada en su otro costado, el acceso a ella se realizaría por su pie/ posiblemente a través de una sencilla portada de tipo románico formada por un arco de medio punto construido con grandes dovelas de piedra, extraída de la cercana cantera de caliza azul situada junto al Palancia, en la llamada peni/a negra. La iglesia contaba con un campanario que se encontraba separado de la misma, siguiendo el ejemplo de otras iglesias medievales8. El empleo de madera, escasa y de poca calidad, y la gran humedad de esta zona ribereña, llevará consigo un rápido deterioro de la techumbre, que deberá ser sustituida cada cierto tiempo, siendo por ello las referencias al mal estado de la iglesia y a obras realizadas en ella relativamente abundantes. En 1465 se ha de reedificar la casa abadía, en 1553 se está obrando en la iglesia, en 1573 se encuentra ésta en peligro de caerse, en 1574 se está obrando nuevamente la abadía, encontrándose casi derruida en 1589, etc. Garcerán de Bellpuig, que hacia el año 1320 había sucedido en el señorío a su padre Hugo de Bellpuig, funda dos beneficios en la iglesia de Torres Torres, uno bajo advocación de Santa Ana y otro de San Bartolomé, beneficios de los que serán patronos sucesivamente todos los señores de Torres Torres. Cuando en 1445 se vendía la baronía de Torres Torres a Joan de Vallterra, se retenía parte del dinero de la venta para el pago de los dos beneficios fundados en ella9. Los Vallterra nombraran preferentemente como beneficiado en el beneficio de San Bartolomé a clérigos y presbíteros nacidos en la propia villa10. En 1424 contaba ya Torres Torres con unas 70 casas y una población cercana a los 300 vecinos11. Eran sus señores doña Gonzalva Ximenes de Árenos y don Joan Ramón Folch de Cardona, condes de Cardona y de Prades, vizcondes de Vilamur, que en esa fecha estaban pleiteando con el duque de Gandía por la posesión del condado de Prades. Para ayuda del pleito, la villa se cargaba en esa fecha un censal de 33.000 sueldos. También habían obtenido dinero por la venta de un censal de 44.000 sueldos a Joan de Vallterra, señor de Castellmontán, en ese tiempo su procurador general, al que unas décadas más tarde venderían la baronía de Torres Torres. Durante estos años de prosperidad que disfruta la villa en este primer tercio del siglo XV, se adorna la iglesia con la pintura de un retablo que los jurados habían encargado al entonces celebrado pintor Miguel Alcañiz, del que es posible que conociesen el retablo de San Miguel que unos años antes había pintado para Bertomeu Teroí, clérigo de la villa de Jérica12.
s En 1788 y citando hacía más de 70 años que la primitiva iglesia era ya tan solo un solar, todavía estaba en pie el campanario, que sabemos estaba frente a la misma, cerca del castillo. 9 ARV Real Audiencia. Procesos part. 3, exp. 1714, 10 De los beneficiados en San Bartolomé y naturales de Torres Torres conocemos los nombres de Bertomeu de Rada (1419), Joan Manzanera (1506), Luis Adzuara (1553), Miquel Manzanera (1558), Martí Esteve (1561), Jaume Vilar (1563), Mateu Esteve (1592), Joan Baptista Vilar (1657). 11 CORBALÁN DE CELIS Y DURAN, J., Nomenclátor de las calles y plazas de la villa de. Torres Torres, Bracal n- 26, Sagunt 2002. 12 En 6 de octubre de 1430 cobra este notable pintor de los Justicia y Jurados de Torres Torres septuaginta quinqué florenos auri aragonie valentes triginta octo libras quinqué solidos eiusdem monete ex ellis centum quindecim ñorenis dicte legis restantibus michi ad solvendum pretio cuiusdam retabuli per me facti ad opus ecclesie eiusdem loci. SAN CHIS SIVERA, J., Pintores Medievales en Valencia. AAA, Valencia 1929.
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Desde su fundación, las parroquias de los lugares de Algimia, Aliara, Serra, Naquera y Ría dependían de la rectoría de Torres Torres13, contando cada una de ellas con un vicario que a veces ni tan siquiera éste residía en el lugar, durando esta dependencia basta el primer tercio del siglo XVI, tiempo en el que se crearon las rectorías de moriscos. En 1435 el rector de la iglesia de Torres Torres Guillen de Forni, colector del obispo de Zaragoza, reconocía el pago de 1.000 sueldos que le hacía el síndico del monasterio de la Valldigna, parte que le correspondía de aquellos 100.000 florines de oro que el Papa había prometido al rey de Aragón. Vive en la ciudad de Valencia y tiene de vicario a Bertomeu de Rada, prebere, iñcari regent la cura de anima de Torres, quien vivía en Torres Torres con su hermano Lupus de Rada. Nacidos en la villa, Bertomeu ya era beneficiado en 1419, en tiempos del rector Dodena. Sabemos que Forni estuvo de rector hasta por lo menos marzo de 1443. A mediados del siglo XV la parroquia de Torres Torres seguía siendo la más importante en el bajo Palancia, después de la de Sagunto, atendiendo a su extensión y al número de almas que agrupaba, gozando su rectoría gracias a ello, y sobre todo a las cuantiosas rentas de que disfrutaba, de cierta apetencia entre el clero14 llegando en 1460 a disputársela tres pretendientes, teniendo que intervenir el rey, quien desde Barcelona, y una vez resuelto el pleito, enviaba una carta a Joan de Vallterra, que tenía embargada dichas rentas, para que las entregase a mosén Guillem Ramón Cátala, pues, según refería en la carta, éste ya había llegado a una concordia con los otros tres litigantes, mosén Marti Miller, capellán del rey, mosén Sorts canónigo de Lérida, y mosén Antoni Bataller15. Poco tiempo estuvo como rector Cátala pues en 1465 vemos que el nuevo rector es uno de los pretendientes anteriores, el canónigo Berenguer de Sorts, 13 En febrero de 1418 Pere Dodena, procurador del venerable Nicolau Dodena, presbítero, rector de la iglesia del lugar de Torres Torres, arrendaba a Lorenzo Doler, neófito, mercader de la ciudad de Valencia, la primicia del lugar de Serra y Naquera, rectoría de su principal, por tres años y precio de 75 libras anuales y media arroba de lino. APPV. Protocolo 25325, not. Pere Biguerany. Este rector, al igual que muchos en ese tiempo, tenía arrendada la rectoría y residía en Valencia en su casa, en la parroquia de San Bartolomé, ciudad en la que era beneficiado en la Seo, en el beneficio de Santa Ana, que había sido fundado por el que fuera canónigo de la misma Gil Sánchez Munyos. En 1404 tenía arrendada la rectoría de Torres Torres a Bernat Lop, presbítero y a Antoni Salvat, notario. Era hijo del notario Pere Dodena, al que había seguido en la profesión su hermano Pere Dodena, ciudadano. Su hermana Guillermina estaba casada con el también notario Joan Pelegri. Su sobrino Joan, hijo de su hermano Pere, en 1414 desempeñaba el oficio real de mestre racional. En febrero de 1395 ya lo encontramos como rector de Torres Torres, cargo que desempeñó hasta su fallecimiento ocurrido a finales de 1419. 14 En 1404 el rector Pere Dodena tenía arrendada la rectoría de Torres Torres por 43 libras, y en 1418 arrendaba la rectoría de Serra y Naquera por 75 libras y media arroba de lino. En 1480 el notario de Torres Torres Jaume Vilar tenía arrendadas las rentas de la rectoría de Torres Torres por 52 libras anuales. 15 Antoni Bataller seguramente debía ser hijo del notario Miquel Bataller, muy ligado a la familia Vallterra. Sus hijos Pere y Francesc, también notarios, siguieron ligados profesionalmente a la familia. Otro hijo llamado Miquel, fue nombrado por los Vallterra prior de su capilla de San Salvador en la Seo de Segorbe. En 1482, era canónigo de la Seo de Zaragoza de Sicilia y residía en Roma, al servicio del cardenal de Monreal. A su vuelta de Roma sería nombrado Prior de San Salvador. CORBALÁN DE CELIS Y DURAN, ]., La sillería gótica de la Seo de Segorbe y otras obras de mejora del obispo Bertomeu Marti. Instituto de Cultura Alto Palancia. Boletín n- 19, Segorbe 2006.
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quien en ese tiempo estaba en Aviñón y a través de su procurador mandaban que se entregase cierta cantidad para la obra de reedificación de la rectoría16. En 1480 es rector de Torres Torres el venerable Avinyó, procurador de la iglesia del Pilar de Zaragoza, que tenía arrendada la rectoría a Jaume Vilar, notario, natural y vecino de Torres Torres. En marzo del año 1489 éste subarrendaba la rectoría a los beneficiados Joan Manzanera (en el de San Bartolomé) y Joan Sanchis (en el de Santa Ana). Tres años después y a causa de una disputa con Joan de Vallterra el notario ha de trasladar su residencia a Segorbe. Pasados unos años han hecho las paces y vemos Fachada lateral izquierda de la Iglesia recayente a la antigua que en 1525 Jaumc, que sigue plaza del Señor. Al fondo, dominando el paisaje, la torre del castillo. viviendo en Segorbe, de donde ya es ciudadano/ es nombrado procurador por don Joan para que cobre ciertas cantidades que se deben a la Capilla de los Vallterra en Segorbe. En 1496 hay un nuevo rector, el doctor en decretos Gonzalo Roic, que actúa de procurador de Joan Moliner, clérigo, beneficiado en Épila, diócesis de Zaragoza, en la venta de cierto beneficio a Joan Sanchis y Joan Manzanera. Joan Manzanera, quien 1511 es también beneficiado en Segorbe, en la capilla de los Vallterra, asistía en esa fecha al testamento que dictaba la viuda de Nadal Ferrandis, vecino de Torres Torres. Elegía sepultura en la iglesia de la villa, donde estaba enterrado su marido, y después de otras mandas pías, dejaba 30 sueldos a la caja de la verge María de Torres Torres. Es la única vez que encontramos esta denominación para la que siempre llamaran en los documentos Virgen María de agosto, (que (posiblemente sea la actual Virgen de la Leche). De hecho en otro documento de esa misma fecha unos vecinos de Torres Torres dan como fechas de pago de cierta deuda, la mitad en la Virgen María de agosto y la otra mitad en San Miguel de septiembre. El presbítero Sanchis moría en octubre de ese año 1511, y
APPV, Protocolos, 11247, not. Jaume Albert.
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doña Cubella del Milá, viuda de Joan de Vallterra, señora de Torres Torres, como patrona del beneficio que había quedado vacante se lo concedía a Joan Scolá, presbítero, beneficiado en la Seo de Valencia / quien está poco tiempo en el mismo pues en 1512 pasa a ocuparlo Gaspar Cabanes/ el cual era beneficiado también en el monasterio de Santa Clara de la ciudad de Valencia, en el beneficio de San Bartolomé17. A primeros de abril de 1516 Luis Martí ya era rector de Torres Torres, quien había sido nombrado prior del priorato de San Salvador en la Seo de Segorbe, capilla de los Vallterra en 1509, cargo que desempeña hasta por lo menos enero de 1521. Al igual que los anteriores rectores, aparece siempre en la documentación como habitante en Valencia. Había nombrado como vicario a Joan Manzanera quien en 1521 había fijado también su residencia en Valencia. Hasta 1534 la iglesia de Algimia fue un anexo de la de Torres Torres18, no teniendo rector propio sino un vicario que residía en esta última población. Al año siguiente se desmiembra la iglesia de Serra dándosele como anexo las parroquias de Naquera y Ria19. Según Sanchis Sivcra, la separación de Aliara tiene lugar unos años después, en 1547. Esta nueva rectoría de Aliara ejerció su labor independiente durante un periodo de unos treinta de años pues, como mínimo, desde 1570 las iglesias de Algimia y Aliara estarán regidas por el mismo rector20, separándose definitivamente en 1600, año en el que se nombra rector de Aliara al reverendo Miquel Costa con la obligación de construir la abadía21. En marzo de ese mismo año 1600 y por mandato del Patriarca Ribera había sido nombrado rector de Torres Torres Gaspar Ivarra, literarum artium magister y curiosamente cuanto toma posesión de la rectoría, el síndico de Torres Torres que está presente en el acto, se quejaba de que tan solo se tomase posesión de la rectoría de la villa y no de la de Aliara, "la cual de tiempos inmemorial ha esta parte está anexa a la de Torres Torres" y que "dicha rectoría no se podía desmembrar de la de Torres Torres"22. Esta protesta parece indicarnos que a pesar de que desde 17 De este beneficio eran Patronos los Vallterra. Esta familia gozaba del patronazgo de 20 beneficios fundados en diversas iglesias de la diócesis de Valencia. (Sía. Lucía, S. Antonio y 11.000 Vírgenes, en la Catedral; Santos Juanes y la Asunción en la iglesia del Salvador; San Bartolomé, en el monasterio de Santa Clara; el Salvador, S. Agustín, S. Luis, Sta Tecla, S. Juan Evangelista, S. Lucas, Espíritu Santo, S. Francisco, en la catedral de Scgorbe; S. Bartolomé y S. Ana, en la iglesia de Torres Torres; S. Juan Bautista y Santísima Trinidad en la iglesia de Villarreal; S. Lucía en la de Rubielos). 18 S ANCHIS STVERA, J. Nomenclátor Geográfico-Eciesiástico de los pueblos de la Diócesis de Valencia. Valencia 1922. iy La baronía de Serra, a la que pertenecían los lugares de Naquera y Ria, estuvo ligada desde el principio de la conquista a la de Torres Torres de cuyo señor dependía. En 1241 se le concedían a Bertrán de Bellpuig los castillos y villas de Torres Torres, Serra y Polop, con todos sus términos, lugares que por sucesión pasarían a la casa de Prades, la cual a mediados del siglo XIV y necesitando dinero para litigar por otros de sus estados, se va deshaciendo de ellos. El 21 de abril de 1445 vendían Torres Torres, con sus alquerías de Aliara y Algimia a Joan de Vallterra. -" En 1555 el vicario de Torres Torres Pere Gilabert era el rector de Altara, y el mismo año el vicario Luis Adsuara lo era de Algimia. Desde 1564 hasta el año 1570 en que renunció a la rectoría lo fue el presbítero Nadal Luis. A partir de 1577, en la que es rector Martin Franco hasta 1592 en que lo es Joan Rois de Ayala, tenernos constatado un único rector para ambas iglesias. 21 IBORRA LERMA. J.M., Realengo y Señorío en el Camp de Morvedre, Sagunto 1981.
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APPV, Protocolos, 5514, noL. Joan Bonet.
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hacía ya muchos años las rectorías de Algimia y Aliara estaban unidas y eran independientes de la de Torres Torres, en algún momento y con la nueva separación de ambas parroquias quizás vieron la posibilidad de que se pudiese producir el retorno de la de Aliara. Los rectores de Algimia y Aliara habitarán en la cercana Torres Torres, siendo a la vez, en estos primeros años, vicarios de su iglesia. En '1557 es rector de Algimia el vicario Luis Adzuara, natural de Torres Torres, perteneciente a unas de las antiguas familias de la villa, quien en 1558 era nombrado beneficiado en el beneficio que funda en su testamento doña Francisca de Aragón, primera mujer de Joan de Vallterra, en Por su fachada derecha las casas avanzan hasta la capilla que quiere que se consrecostarse sobre los muros de las capillas laterales. truya dedicada a San Joaquín y Santa Ana, junto al altar mayor, a la parte derecha, mandando también que se hiciera un retablo para dicha capilla. Doña Francisca/ hija de don Alonso Gurrea de Aragón, conde de Ribagorza, y de la vallisoletana doña Ana Sarmiento, se había casado con Joan de Vallterra en mayo de 1552, a quien su padre había dotado para la ocasión con la baronía de Torres Torres, reservándose para sí mismo y mientras viviese la de Castellmontán23. Ese mismo año de 1558 moría sin descendencia, en Valencia, doña Francisca y era llevada a enterrar a Torres Torres siendo sepultada delante del altar mayor, a la izquierda del mismo. Había nombrado albacea de su testamento al reverendo Luis Adsuara, al que como a beneficiado en el nuevo beneficio había dejado una renta de 30 libras anuales, el cual a demás de cumplir con las obligaciones de su beneficio tendría la obligación de mantener encendida todo el día una lámpara en dicha capilla. Durante estos años actúa como procurador de don Joan y cuando éste redacta su primer testamento en 1565, es uno de los testigos que están presentes en el acto. Tenía su casa en la calle donde estaba entonces la antigua iglesia, junto a la del vidriero Martín de Layana, subiendo hacia el castillo. Esta capilla que había mandado fundar doña Francisca, no sabemos si sus herederos llegaron a edificarla pues en 1573, cuando don Joan redacta su segundo y definitivo testamento, dice en el mismo que quiere ser enterrado en el vaso o
ADPV, Fondos de la Duquesa de Almoáovar, e.5.1, Protocolo 67, Not. Lluis Valeriola.
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sepultura que está obligado hacer en la iglesia de Torres Torres como albacea de su mujer Francisca de Aragón/ y que hasta hoy no ha podido construir por estar dicha iglesia en peligro de caerse. Si él no pudiese hacerlo, por haber muerto antes, manda que lo haga su sucesor, y que en dicho sepulcro sea puesto su cuerpo, junto con el de sus dos esposas Francisca de Aragón y Camirla Despuig, que ya están enterradas en dicha iglesia. También quiere que se pongan en esa sepultura el cuerpo de su hijo Joan Vallterra, y el de sus hijas Isabel y Jerónima, estando esta última ya enterrada en la sepultura que tiene su hermano Vicente Vallterra en la Seo de Valencia. A su fallecimiento debieron comenzar las obras de reparación de la iglesia pues en octubre de 1574 vemos que se han gastado 53 libras en la obra de la abadía. Aducía Joan de Vallterra que la iglesia estaba arruinada y en peligro de caerse, siendo quizá tan solo una excusa, pues unos años antes, en 1553, los jurados de Torres Torres se habían cargado un censal para obrar dicha iglesia24. El 27 de octubre de 1574, cuando el arreglo de parroquias del Patriarca Ribera, Jaume Arcis Cosida, que desde 1563 era rector de Torres Torres y había estado residiendo fuera de la villa, mandaba levantar acta de "que desde dicha fecha había llegado a la villa a fin y efecto de residir en ella como rector de dicha iglesia". Igualmente, y seguramente debido a dicho arreglo, Martín Franco, que había sido nombrado rector de Algimia y Aliara al estar vacante la rectoría por defunción de su anterior poseedor Martí Esteve, pasaba a residir al lugar de Algimia. Martí Esteve, era natural de Torres Torres, y al igual que todos los anteriores rectores de Algimia y Aliara residía en la villa, donde era beneficiado en el beneficio de San Bartolomé, siendo además el encargado de tocar el órgano de su iglesia25. Pasados unos años, en 1582, el rector Franco ya no residía en Algimia, habiendo dejado en ella como vicario a mosén Jaume Vilar, otro de los beneficiados —en San Bartolomé— de la iglesia de Torres Torres, que pasaría al poco tiempo a la Seo de Segorbe. En enero de 1585, a la muerte de Martí Franco le sucederá como rector Mateu Martí, presbítero, beneficiado en la Seo de Valencia. A éste le sucederá Joan Roiz de Ayala, presbítero, profesor de teología y beneficiado en Valencia, en la iglesia de San Salvador, quien hasta entonces había sido vicario del rector de Torres Torres. Mateu Esteve, será otro miembro de esta familia a quien los Vallterra, siendo todavía clérigo, nombrarán beneficiado en el beneficio de San Bartolomé en junio de 1586, al haber fallecido su predecesor mosén Jaume Vilar. En 1593 su padre Antoni Esteve, con el fin de que pueda ordenarse y tomar las ordenes sagradas, y
24 El 8 de marzo de 1553 los jurados de Torres Torres, quitaban un censal que se había vendido un año antes para la obra de la iglesia parroquial. El poseedor del censal era Cosme Pintor, ciudadano, de la ciudad de Valencia, quien en dicho día, y estando en la villa de Torres Torres cargaba otro censal para que cada sábado se celebrase una misa en el altar de su Capilla, a honor y gloria de la Inmaculada Concepción de la Madre de Dios, que estaba al costado de la sacristía de la iglesia parroquial de dicha villa. APPV, Protocolos, 27275. Tomás Marti. 25 En "1573 Joan Esteve y su mujer Joana Sans, se cargaban un censal para con su renta atender al servicio del órgano de la iglesia. APPV. Protocolos 16435 not. Joan Jorda La casa de Antón Estevc, con su mujer e hijos "que aún estaban bajo su poder paternal" era la que mayor diezmo pagaba a la parroquia. En Alfara era la casa del morisco Jaume Roscet alias Milano y en Algimia la de Miquel Pateret.
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teniendo en cuenta que la renta que le produce su beneficio no es suficiente para su sustento "y para alimentar a los que están en su casa" le hace donación de 35 libras de renta anual cargadas sobre unas tierras que posee. Esta familia tenía su sepultura a los pies del altar de San Miguel. En el último tercio del siglo XVIT, después de pasados unos años del desmembramiento de las parroquias que en otro tiempo pertenecieron a Torres Torres, la economía de esta rectoría, que ha perdido ya una parte importante de las rentas que le pertenecían, hace que se sucedan los vicarios y que su iglesia vaya entrando en un estado de semi-abandono. Hemos visto que en 1573 según dice Joan de Vallterra, la iglesia se encuentra medio derruida. En la Visita que el doctor Alonso de Avalos, Visitador general hizo a la iglesia de Torres Torres en el año 1589, habiendo reconocido la abadía de dicha rectoría, "que está al costado de la iglesia", impuso una multa de 80 libras al rector por haberla encontrado derruida. La abadía se encontraba situada en la calle o empedrado que subía a la Iglesia, entre las casas de Blas Botet y la de Joan Jordá. Esta calle, actualmente denominada calle del maestro Miralles, es la que durante siglos se llamó también calle de la iglesia y después, al trasladarse de sitio y edificarse la nueva, pasará a llamarse calle de la subida al castillo. Después del arreglo de la casa abadía, prosiguen las obras de mejoras en la iglesia, encargándose la nueva construcción de las dos campanas "una grande y otra chica" que tenía la iglesia, que se encontraban rotas. Se encargan a Vicente Martínez,, mestre buydor de campanea, de la ciudad de Valencia, que deberá tenerlas hechas para la fiesta de Nuestra Señora de agosto de 1591. Costaron las campanas 2.000 libras que pagaron los vecinos del pueblo. Alguna de estas campanas se trasladarían a la nueva iglesia a finales del siglo XVII, época (1691) en la que se hace la campana María la xicoteta. En 1787 se hace "la segunda campana'7 María Michela encargándose el trabajo a Vicente Roses, campanero, vecino de Benisoda, "con la condición de que fuese mayor y más pesada que la grande que se acababa de fabricar en el lugar de Algimia"26. Este fundidor hace también en el mismo año la María Inmaculata, de tamaño algo mayor que la anterior. Conocemos un inventario de la ropa y objetos encontrados en la casa abadía de Torres Torres realizado en el año 1582, en tiempos del rector Pere de MontieP. Este rector había sido nombrado por el Patriarca Ribera el 5 de noviembre de 1577, estando en esta rectoría hasta 1588 en que pasó a la de Nules. A pesar de figurar como rector perpetuo, marchó de su iglesia, quizá a causa del pleito que mantuvo con el visitador Alonso de Avalos, quien le había impuesto el pago de una multa de 80 libras por tener la abadía descuidada y casi en ruinas28. De este inventario nos sorprende las armas encontradas: Una ballesta que se encuentra en la habitación donde duerme el rector, y dos espadas y otra ballesta con su cierre, usadas, que se encuentran en la habitación del piso de arriba.
26 CORBALÁN DE CELIS DURAN, J., La actual plaza de la iglesia de Torres Torres, Brazal n£l 16. Sagunto 1997. 27
APPV, Protocolos,. 16429, not. Jorda.
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AFPV, Protocolos. 16431, not. Jorda.
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Según se lee en el inventario, la casa abadía disponía de un local junto a ella donde había cuatro mesas y un escritorio. En este escritorio se encontraban sesenta libros, entre grandes y chicos, junto con otros papeles sueltos. Además, en una caja que había en la misma habitación, se encontraron otros treinta libros con cubiertas de pergamino, dos bolsas de cuero con muchos papeles de sermones y salterios y un catecismo, y otra bolsa ligada con sermones. Luego el total de libros encontrados es de noventa y uno, aparte de los papeles sueltos, lo que supone una cantidad de libros muy importante para esa época. Pensamos que los 31 libros encontrados en la caja son antiguos, menos usados, y preferentemente para el culto, los 60 restantes se encuentran en un escritorio, a mano, dispuestos para ser usados. ¿Dispone en esos momentos Torres Torres de un Studi donde ejercer la enseñanza, o son libros particulares que pertenecen al rector Montiel?29 Del año 1563 hemos encontrado otro inventario de los ornamentos litúrgicos que en ese tiempo poseía la iglesia de Torres Torres. Ese mismo año, había tomado posesión de la rectoría —de aquí probablemente la realización del inventario— el reverendo Jaume Arcis Cosida, quien durante cerca de once años estará al frente de la misma. En este año de 1563 el clero de la iglesia de Torres Torres estaba formado por su rector Jaume Arcis, los dos beneficiados, Jaume Vilar, beneficiado en el de San Bartolomé, y Martín Esteve en el de Santa Ana quien, además, tenía a su cargo tocar el órgano de la iglesia en las funciones litúrgicas, y por dos presbíteros, Luis Nadal, y Luis Adsuara. Los dos beneficios existentes habían sido instituidos como hemos indicado por el entonces señor de Torres Torres Garcerán de Bellpuig. Su fundación se había llevado a cabo hacia 1290 que es el año en que Garcerán sucede a su padre, a quien el rey Jaume I había donado las baronías de Torres Torres y Serra en 12713n. El rector Arcis había nombrado como vicario a Domingo Porta, siendo sustituido al fallecer éste por Joan Soldevila, con quien el rector, al cabo de los años, tendrá un pleito sobre ciertas cantidades que le reclamaba de las rentas de la iglesia. Contaba esta iglesia al menos con siete capillas, siendo quizás las más antiguas, las dedicadas a Nuestra Señora del Rosario y a San Bartolomé y Santa Ana. Contaba, además, con los altares o capillas dedicadas a San Francisco, San Sebastián, San Miguel Arcángel, y a la Inmaculada Concepción, y por último con el altar dedicado a las Ánimas del Purgatorio que sabemos estaba junto a la capilla de Nuestra Señora del Rosario. Desconocernos si la capilla de San Joaquín y Santa Ana que mandó edificar doña Francisca de Aragón llegó a levantarse. El altar de las Animas contaba con un retablo que había mandado pintar en 1525 doña
29 Por una parte se sabe que en 1572 vive en Torres Torres Francesc Jorda, estudiant, y por otra que existían bibliotecas particulares que superaban o se acercaban a ese número, como la que poseía en 1571 el cirujano Julián Moya, con 209 ejemplares, o la de 1583 del beneficiado en Santa Catalina Francesc Jeronim Gonsalbo, que poseía 49. '" El 24 de diciembre de 1453 se firmaba una concordia entre Joan Ramón Folch de Cardona y Joan de Vallterra sobre la compra de la baronía y entre otras cosas fue pactado que del precio de la compra se quedase el comprador 900 libras para el pie de los dos beneficios fundados en la parroquial iglesia por don Garcerán de Bellpuig, esto es, 450 libras para cada uno de ellos, con la obligación perpetua de pagarles 15 libra? anuales a cada uno.
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Ángela Centelles, primera mujer de Joan de Vailterra, padres del ahora (1563) señor de Torres Torres. Ángela Centelles era hija de Jaume Santangel, señor de Redován y de Francisca Centelles, hija natural del conde de Oliva y, por tanto/ sobrina del conocido escribano de ración Luis de Santangel. Este parentesco con una familia judía, acrecentado aún más con el nuevo matrimonio que su hijo Joan de Vallterra celebraría en terceras nupcias con Isabel Centelles31, le traería a los Vallterra, un siglo después/ serios disgustos con la Inquisición/ pues en 1627 don Vicente Vallterra, entonces señor de Torres Torres, solicita ser admitido como familiar del tribunal del Santo Oficio de Valencia y los miembros de éste se opusieron enérgicamente al estar emparentado con una de las familias conversas más conocida de la Corona de Aragón32. El uso por la Iglesia de ricas vestimentas y objetos de oro y plata para sus representaciones litúrgicas ha sido durante siglos la manera de honrar y dignificar la función para la que fueron creadas, pasando a ser con el transcurso del tiempo una de las formas de mostrar a los feligreses la riqueza proveniente de su inmenso poder y prestigio. Estas vestiduras estaban siempre elaboradas con los más finos tejidos realizados en los talleres artesanales, destacando en su elaboración la utilización del lino y la seda, empleándose el primero de ellos casi siempre como forro de las mismas. Su empleo vendrá condicionado por las numerosas disposiciones que hacen referencia a la exigencia de su utilización. Así, en el sínodo del obispo Despont (1296) se prohibe la celebración de misa con paños de seda grises o teñidos, teniendo que ser de lino puro, sin teñir, "a semejanza de la sábana en que fue envuelto el cuerpo de Jesucristo cuando fue sepultado"33. En cuanto a la seda era considerada como el tejido de lujo por excelencia. Dependiendo de su calidad/ color o proceso de producción a la seda se le denominaba con diversos nombres diaspre —seda tejida con dibujos realizados, normalmente, con hilos de oro—, el sendat —tejido de seda muy fino, el drap d'or y el marramach— seda adornada con hilo de oro, el chamelot, elaborado al principio con lana, y que a partir del siglo XIII pasará a confeccionarse con pelos de seda.
31 Isabel Centelles era hija de Luis de Santangel y de Ana Centelles, sobrino de Ángela. Luis era hijo de Ferrando de Santangel y de Beatriz Fenollet y Malíerit, quien a su vez era hijo de Ferrando Santangel, hermano del escribano Luis de Santangel, y de Isabel Centelles, hija también de Gibalert Centelles, conde de Oliva. Se firmaron capitulaciones matrimoniales para este tercer matrimonio de Joan de Vallterra el 5 de mayo de 1570, previa dispensa Papal dada en Roma el 11 de enero del año anterior. En la dispensa, para justificar el matrimonio, se alegaba que a pesar de ser ella persona de ilustre linaje no tenía la dote que le correspondía como a tal, y que por ello no hallaría persona de igual condición que quisiera casarse con ella, a no ser algún deudo. Que cuando se conocieron carnalmente sabían que eran parientes pero ignoraban en que grado lo eran, y que no se conocieron carnalmente antes de casarse para lograr más fácilmente la dispensa, sino que lo hicieron por lo mucho que se amaron y vencidos de fragilidad humana. El matrimonio se celebraría en la iglesia de San Esteban el 1 de agosto de ese año 1570. CORBALÁN DE CELIS, J. Monografía sobre la casa Vallterra. Inédita. 32 HALICZER, Stephen. Inquisición y Sociedad en el Reino de Valencia. Valencia, 1993. 11 MADRID SOUTO, R-MUNSURT ROSADO, N. Libros, joyas y ornamentos de la parroquia de Santa Catalina de Valencia (1330). Estudie Castellonencs. 1998.
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En cuanto al empico en estas vestimentas del color, expresión última del lujo en los tejidos, destaca la presencia del rojo que se generalizó en la centuria siguiente/ puesto que se reservaba las piezas más costosas debido a que sólo estas justificaban el empleo de una tintura de coste tan elevado. A finales de este año 1563, el 8 de septiembre, día de Nuestra Señora de los Angeles, bajo cuya advocación se encuentra la iglesia de Torres Torres, a instancias del rector, se reunieron en la sacristía el justicia y los dos jurados del Ayuntamiento con el fin de llevar a cabo el inventario de toda la ropa de seda, lino, lana y plata con que contaba en esos momentos la iglesia En plata figuran las siguientes piezas: en primer lugar una cruz, que seguramente es la actual cruz procesional que todavía se conserva, luego una custodia, un relicario, un par de cálices con su patena, un incensario, naveta y cucharilla, las coronas de la Mare de Déu y de Jesús, que podrían pertenecer a la actual imagen de la Virgen de la Leche, una cruz donde está el lignun crucis, con su pie de plata, seguramente perdido ya que actualmente es de madera, y dos pequeñas cruces de también plata, de las cuales una de ellas pertenecía a la custodia. En cuanto a ropa aparecen reseñadas numerosas piezas entre las que destacamos dos capas una de brocado, con dibujos de terciopelo rojo, hechos seguramente con hilos de seda, y otra más nueva de damasco, en blanco, ribeteada con terciopelo azul y cosida con hilos de oro y plata. Se reseñan en el inventario diversas casullas y capas con los seis colores litúrgicos: rojo, azul, negro, amarillo y blanco. La iglesia contaba en esos momentos con las siguientes imágenes: dos Jesu.sets, una imagen de Santa Bárbara/ otra de San Joan Bautista/ y una imagen de la Mare de Déu de fusta damats, en madera adamascada/ es decir trabajada en oro y plata o también pintada de diversos colores. De esta imagen se dice que tiene una pequeña corona de plata y una cruz que está rota. Aparece reseñada también una imagen de la Madre de Déu de agost, de la que anteriormente nos habían dicho que tenía una corona de plata y otra para el Jesús, lo que nos indica que esta imagen tiene un niño al brazo/ siendo seguramente la actual que se conserva de la Virgen de la Leche. Esta era la imagen principal de la iglesia que se encontraba en una capilla aparte, con su pequeño altar, y para ella se describe aparte la ropa que le pertenece, entre la que se encuentran diversos mantos y velos, especificando que está cubierta con una camisa para su conservación, es decir, en esa época ya se trata de una imagen antigua y que por lo tanto hay que conservar. El interés de este inventario, aparte del meramente documental, y que pude servir para hacer, por ejemplo, una valoración de la situación económica de su iglesia, es el poder datar y catalogar las pocas piezas que todavía se conservan: la imagen de la Virgen, la cruz procesional y el lignum crucis. De la imagen ya se ha dicho que podría ser gótica/ quizás del siglo XV. Por lo menos podemos decir que es anterior a 1563 y que en esa fecha ya se la cuida para que no se deteriore. La cruz procesional, de plata sobre ánima de madera, de la que no hay publicado ningún estudio con detalle, tiene las trazas de las cruces procesionales del siglo
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XVI, con su macolla poligonal conformada en dos pisos, que nos recuerda a la de la iglesia de Nuestra Señora de los Ángeles de Aras de Alpuente34. La formula artística de la Virgen de la Leche, que se forja en el arte monástico de Oriente, pasa a Occidente a través de las miniaturas y marfiles carolingios. La devoción a la Virgen se introduce en la Península a través de las primeras fundaciones cistercienses hacia el año 1131. A finales del siglo XIII se inicia en el arte una tendencia menos dogmática que en los siglos precedentes, buscando la emoción sentimental, la ternura, pretendiendo ante todo hablar al corazón"35. La introducción de estas representaciones marianas en el nuevo reino de Valencia se produce de la mano de los primeros repobladores, siendo una de las obras más antiguas conocidas la arcaica y tosca imagen lactante de la Virgen del Rebollet. La primitiva iglesia de Torres Torres fundada hacia 127136, única parroquia de cristianos viejos del bajo Palancia a excepción de la de Sagunto, cuenta como hemos visto con una pequeña talla gótica de la Virgen de la Leche desconociéndose en que fecha y por quién pudo ser traída. De la datación de su construcción, dada sus trazas y semejanza con otras de la época, dicen que podría tratarse de una imagen de finales del siglo XIV o principios del XV. En cuanto a quién pudo ser la persona que introdujo su devoción en Torres Torres, pensamos que podría haber sido alguno de los rectores o presbíteros que pasaron por su iglesia. Un ejemplo de ello es lo sucedido con la imagen de la Virgen de la Vallivana de Picasent, que fue traída de Morella en 1738 por el presbítero mosén Miguel Carbó. En Torres Torres, también hay devoción por la Vallivana, siendo una de las imágenes que se saca en procesión en las fiestas patronales y según Francisco Masía, arcipreste de Morella, pudo ser traída también por alguno de los sacerdotes morellanos incardinados a la diócesis de Valencia37. A finales del siglo XIV y durante casi 25 años fue rector de Torres Torres Nicolau Dodena miembro, como ya vimos, de una influyente familia valenciana, que tenían su casa en la parroquia de San Bartolomé. Su hermano Pere, que se estaba construyendo una capilla bajo invocación de San Pedro y San Nicolás, encargaba en 1420 al pintor Bernad Godall, un retablo "bien pintado y dibujado con sus historias, y de bellos colores, a juicio de menestrales expertos en semejantes obras, y de tan bellas y mejores figuras que el retablo de Civera, el cual está en una capilla en el claustro de Predicadores de Valencia bajo invocación de Santa María de la Leche". ¿Pudo ser su hermano, quien seguramente también conocería este retablo, el que introdujo en Torres Torres la devoción hacia esta Virgen? El hallazgo de la imagen de la Virgen según la tradición popular, se produce cuando un pastor, de nombre Cristóbal, tal como se nombra en los gozos dedicados a la Mare de Déu de la Llet, atraído por una luz que aparecía encima del
34 En el letralóbulo central figura la clásica representación del pelícano alimentando a sus poyuelos, símbolo de la Eucaristía, y que es representado en estas cruces desde al menos el siglo XIV (recuerda a los representados en las de Vilafranca, Ortells, Pina de Montalgrao...)35 SARALEGUI, Leandro de, La virgen de la Leche, AAV 1928. d6 La primera referencia escrita de la iglesia de Torres Torres es de 1290. RIUS, Rationes. Décimas eclesiásticas. 37 MARTI, Francisco, Morella y Picasent, Llibre de festes, Picasent 1957.
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castillo, y después de matar a una serpiente a la que distrae con la leche de una de sus ovejas encuentra, en un subterráneo del castillo, una imagen de la Virgen amamantando a su hijo Jesús. En otras versiones es un buey el animal que hace posible el descubrimiento de la imagen. Para conmemorar este hallazgo y venerar la imagen de la Virgen, se edificó una ermita bajo la titularidad de San Cristóbal en recuerdo del pastor, el cual quedó como ermitaño de la misma38. Esta tradición popular es relativamente reciente, teniendo su origen como muy tarde en las primeras décadas del siglo XIX. Es cierto que existió en Torres Torres un ermitaño de nombre Cristóbal, pero no dio nombre a la ermita, que se había edificado a mediados del siglo XVI3y. Se trata de Cristóbal Soler, perteneciente a esta familia originaria de Torres Torres, quien en 1737 y después de enviudar, había regalado al Ayuntamiento la casa que tenía en la calle de la Iglesia, con la condición de que lo nombrasen ermitaño, como así se hizo. Años después sus hijos y herederos, pleiteaban con el Ayuntamiento por dicha donación, pues según alegaban la casa les pertenecía a ellos como pago de la dote de su madre40. A finales del siglo XVII, se acometen las obras de construcción de una nueva iglesia, de mayores dimensiones que la primitiva, eligiendo para ello un solar llano existente en la replaceta junto al portal de entrada, frente a la casa de los Vallterra, señores de Torres Torres. En 1688 la obra de fábrica estaba terminada a falta del revestimiento de yesos de su interior, que no se habían terminado por la falta de medios, iniciándose los trabajos en abril de ese año. En 1721 aún no se había derribado el antiguo edificio, pudiendo afirmar que en 1788 ya sólo existía el solar de la vieja Iglesia, junto al campanar viejo y ruinas de la sacristía. A principios del siglo XIX, se llevaron a cabo en el templo nuevas obras, esta vez de ampliación, iniciándose las mismas en el año 1828, añadiéndose durante ellas el actual crucero y el presbiterio, ajustándose la obra al estilo neoclásico. El día 28 de octubre del citado año se puso la primera piedra de la nave del Altar Mayor cuyo transepto se cubriría con una esbelta cúpula, típica de los templos valencianos de esa misma época.
38 Este relato más o menos extenso, y con algunas variantes, lo recogen numerosos autores cuando se refieren a los hallazgos marianos en esta zona. FERRI CHULIO, A., Mariología Patronal dd Camp de Morvedre, Caja de Ahorros de Sagunto, 1983. MARTÍNEZ RONDAN, }., Pestes centenáries de la Mare de Dcu deis Desemparais, Paura 1658-1758, Parroquia de Faura, 1985. GOMIS CORELL-BORJA CORTIJO, La áevoció Mariana popular al Camp de Morvedre. Funcions, Historia i Tradidons. Bracal n- 27, Sagunt 2003. CISNEROS ÁLVAREZ, P., La imagen gótica de la Virgen de la Leche de Torres Torres. Un ejemplo de imaginería valenciana del siglo XV. Bracal n- 27, Sagunt, 2003. 39 En 1560 Martin Puig, vecino de Torres Torres disponía en su testamento que se diesen 30 libras a la iglesia, para comprar ropas y otras cosas necesarias y para ayuda de los pobres del hospital, Dejaba también cierta cantidad para la fábrica de la obra de la ermita del señor San Sebastián (sic), construida dentro del termino de dicha villa. Deja también mandado que se le digan unas misas en el altar de San Sebastián {de aquí quizá la confusión del escribiente). w ARV, Protocolos, 5691.
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ANEXO DOCUMENTAL Inventan de la Sglesia de Torres Torres 8 septembre 1563 APPV, Prococolo 16413, not. Jorda Die VIII, mensis Septembris, anno a Nativitate Domini MDLXlíL Inventan fet de la roba de seda, de lí, lana, y argent de la sglesia de Torres Torres, en presencia deis honorables Steve Maldonado justicia, Joan Barrasa i Miquel Domingues jurats en lo present any de la dita vila de Torres Torres, a instancia del reverent mossen Jaume Arcis Cosida rector de dita sglesia. Primo huna creu de argent. ítem huna custodia. ítem lo reliquiari de argent pera posar lo Sant Sagrament lo día del Corpus, ítem un calzer ab sa patena, de argent. ítem altre calzer de argent i sa patena, ítem hun encenser, naveta i cullareta, de argent. ítem huna corona de la imatge de la Mare de Deu ¡ altre del Jesús, de argent. ítem lo peu del lígnum crucis, de argent. ítem dos crehuetes de argent, lo huna de la custodia i l'altra mes chica, ítem huna capa de brocadello, ab trepes de vellut carmesí ab sa capilla, ítem altre capa de domas blancs, nova, ab son fres de vellut blau, i fil dor i argent. ítem huna casulla y dos dalmatiques de domas blancs, ab les stoles i manyples. ítem huna tovallola de domas blancs, i alfaristol. ítem huna casulla de domas blancs, ia molt usada, ítem altra casulla de chamelot blancs, ab aygues. ítem dos dalmatiques de saya de seda, ab paraments de domas carmesí, ia usades. ítem huna casulla de vellut carmesí, vellutat, ab rams de fill d'or, usada. ítem dos dalmatiques de vellut vellutat, carmesí, ab los paraments de vellut vert, usades. ítem una capa de vellut blau vellutat, ab son fres i capilla, ia vella. ítem huna casulla de setí morat, ab ses stola i maniple, usada. ítem altra casulla de tela vermella a huna part, i a l'altra de vesteda negra, ítem hun mantonet de combregar, ab los entorns de domas vert, usat. ítem altra casulla de brocat molt vell, pera les doumingues. ítem huna tovallola y alfaristol de tela de seda morisca, molt vella. ítem huna capa, dos dalmatiques de setí negre, i huna casulla de vellut negre vellutat usada, tot ab ses stoles y maniples. ítem hun davantal de altar de setí negre, ab hun frontal, i huna tovallola, y que falta l'altra. ítem hun devantal de brocat raso, ab ses tovalloles i frontal de vellut carmesí, ítem altre davantal de domas groes, ab trepes de vellut carmesí, ab ses frontal i tovalloles. ítem hun devantal de chamelot blancs de aygues, ab tovalles i frontal de chamellot carmesí, usat. ítem altre devantal de domas blancs, ab ses tovalles i frontal, molt usat. ítem altre devantal de vellut morat, ab baves de setí naranjat, ia usat, sens tovaloles ni frontal. ítem altre davantal de guadamacil, sens frontal ni tovalloles. ítem dos devaritáis de fil empua, ab listes de tafetá vermell, ia usada, ítem hun manto de la Mare de Deu, de brocat, usat. ítem altre manto de setí naranjat. ítem altre manto de setí turquesat, ab fres de fil d'or.
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ítem altre manto de vellut negre, ab fres de argent. ítem huna capa de defunts de vesteda negra, molt usada. ítem huna tovallola de setí negre, i alfaristol. ítem dos dalmatiques molt valles, de defunts, de fustarü, pera deffunts. ítem hun drap de brocat, vell, ab entorns de tela blava, pera sobre tomba. ítem dos bancals de blau y groes. ítem quatre altres bancals de groes y vermell. ítem dos cortines pera davant l'altar, pera Quaresma, ab ses anelletes, la una de tela negra, i l'altra blanca, usades. ítem huna tovallola de boladors pera donar pan, blava? ítem dos reposters peral peu I'altar, ab les armes o seiiyal de Sant Anthoni, usats. ítem dos draps grans de tapicería, pera empollar a grarrda part del altar. ítem hun camis ab parament de setí carmesí, usat. ítem sis camis usats, ab sos cordons i amits. ítem hunes tovalles ab lista alrededor de seda de grana, usades. ítem altres tovalles ab lista de seda negra, ia usades. ítem hun drap pera la trona, de lana de meises colors. ítem hun parell de patenes de fusta damades. ítem huna creu de argent, en la qual está lo Lignum Crucis. ítem dos Jesusets. ítem hun imatgc de Santa Barbara. ítem dos imatges de Sant Joan Batiste. ítem hun imatge de la Mare de Deu, ab una coronela de argent, i huna crehuela de argent trencada, tots de fusta damats. ítem altre calzer que mossen Nadal te, de argent, ab sa patena. ítem dos casulles de fustani blancs, usades, ab ses stoles i maniples. ítem hun lit de la doració del crucifici, ab tres pots i sos petges, ab dos matasafetes, huna vanoneta i hun devantal de lit, de fil ampua, ab listes de seda negra. ítem hun himatge de la Mare de Deu de agost, lo qual imatge te vestit hun camis pera conservado de dit imatge, y te la roba seguent: Primo hun manto de domas blau, ab fresos de fil d'or. ítem huna delantera de domas bíancs, ab fres d'or. ítem hun vel pera sobre el lit, ab fres d'or. ítem huna davantera de camisa, ab hun fres d'or alrededor. ítem hun parell de mánegues de setí carmesí, talladas, ab ligades de veta de seda blanca. ítem dos sotancs de coxins, huna gran, y altra chica, de setí naranjat, ab fresos d'or. ítem hun vel pía de seda cuyta, molt delicat. ítem hun eos de domas blancs, ab fresos d'or. ítem dos sotanes perals coxins. ítem quatre ruquets, dos grans y dos chics. ítem hun drap de sobre la caxa deis morts, mol vell. ítem dos cortinetes del crucifici, huna de setí carmesí, y altre de setí negre. ítem tres bacins de lanties, ab ses cadenes, davant lo altar maior. Tota la qual roba, lo reverent mossen Jaume Arcis Cosida, rector de dita sglesia, prengue en comanda, de mans e poder deis dits honorables justicia i ¡urats, el teñir en comenguarda i custodia, i aquella restituhí i tornar ais sobredits justicia i jurats, o aquells ques temps será, tal qual, al temps de la dita restitició se trobara, et jura, et presencia, el proguibi, et promctte, et sobliga, et pactum, in villa de Torres Torres etc. Testes Anthoni Esteve, sindic y Berthomeu Domingues, ferrer, habitants de dita villa.
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GLOSARIO DE TÉRMINOS Sendal Diaspre Marramach Setí Chamelot Brocat
Tejido de seda muy fino (cast. Cendal). Seda tejida con dibujos realizados con hilos de oro. Seda adornada con hilo de oro. Cierta tela que imita al raso (tela de seda satinada) (cast. Satén. Raso). Tejido elaborado con pelos de seda {cast. Chamelote). Tela de seda entretejida con hilo de oro o plata/ formando dibujos. (Es briscado si el hilo está rizado o retorcido) (cast. Brocado). Tejido fuerte, todo de seda, con dibujo de distinto color que el del fondo. Domas Tela fuerte de seda con dibujos formados con el tejido (cast. Damasco). Tafetá Tela delgada de seda muy tupida (cast. Tafetán). Gremial Paño cuadrado de que usan los obispos, poniéndolos sobre las rodillas para algunas ceremonias cuando celebran de pontifical. Paño rectangular igual en forma, dimensiones y adorno a un frontal de altar que pendiente de sus manos llevan los tres clérigos del terno de la misa conventual de las iglesias catedrales, y de otras que tienen ese privilegio, en la procesión claustral y en algunas otras. Cotomina Tela de lino con fondo liso y flores como realce, o de fondo listado y flores de varios colores. Flocadura Guarnición hecha con flecos. Orlanda Orlar. Adornar un vestido con guarniciones al canto. Orla. Orilla de paños con algún adorno. Fustani Tela gruesa de algodón (cast. Fustán). Capirón Capucho con capillo (cast. Caperuza). Amit Lienzo que va superpuesto al sóbrepellig. Sobre el mismo se coloca el alba y la casulla (cast. Amito). Sobrepellic Túnica de lino, que hacía el papel de la camisa (cast. Sobrepelliz). Camis Túnica blanca de lino que se dispone sobre el amito. Cubre el cuerpo del sacerdote desde el cuello hasta los pies (cast. Alba). Filadis Tela hecha de seda de baja calidad (cast. Filadiz). Fres Franja de diferente color o dibujo dispuesta en una tela, que podía estar bordada de oro y plata (galón o pasamanería). Fregadura Ribete o friso. Stola Banda de tela, larga y estrecha que el sacerdote lleva colgada al cuello (cast. Estola). Maniple Ornamento litúrgico parecido a la estola pero más corto. El sacerdote lo lleva ceñido al brazo izquierdo, encima de la manga del alba (cast. Manipulo). Pali Banda de lana blanca decorada con cruces negras que se lleva sobre la castilla. Prenda que llevan los arzobispos que señala el poder que ostentan (cast. Palio). Vellut Tela de seda velluda y tupida (cast. Terciopelo). Vellut velhitat Terciopelo no cortado en el telar, a'spero al tacto y que formaba una especie de cordoncillo. Sobrepelliz (sobrepelliz). Túnica de lino, flotante, que debe su nombre al hecho de cubrir el cuerpo. Llevaba manga larga y en algún momento, una pequeña capucha que fue desapareciendo. Se trata pues de una prenda interior que hacía el papel de camisa. Amito (amit). Prenda de lienzo en forma cuadrada con el símbolo de una cruz bordada o cualquier otro tema en el centro, que el procer, diácono y
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Alba
Casulla
Estola
Manipulo
JUAN CORBALÁN DE CELiS Y DURAN subdiácono suelen llevar sobre los hombros en los actos litúrgicos. Es una prenda que va superpuesta al sobrepellic. Sobre el amito se colocaban el alba y la casulla, quedando, por tanto, oculta a la vista. Procede del latín amicus, de amicere, que significa cubrir. (camis). Túnica blanca de lino que cubre el cuerpo del sacerdote desde el cuello a los pies. Se dispone sobre el amito y encima de la misma se colocará la prenda más vistosa, la casulla. Los antecedentes de la casulla hay que buscarlos en la paenula greco-romana que era un vestido a guisa de capa de vuelo redondo de lana, con una abertura para pasar la cabeza, prenda que protegía del frío y la lluvia. Aparece documentada en la liturgia a partir del siglo IV y su uso continuado hizo que, en el siglo XEV y por comodidad, se redujera su vuelo y se estrecharan sus laterales, y ya en el siglo XVII adoptó la forma totalmente plana. La decoración consistía en una tira vertical en forma de T que pasaría a ser el escapulario o cenefa con bordados de imaginería y, en su evolución, se bordó hasta el siglo XVII, posteriormente en los siglos XVIII y XIX la cenefa pasó a ser un recuerdo del primitivo escapulario. Inocencio III (1198-1216), en su encíclica De Sacra Altaris Misterio, fijó definitivamente los cinco colores canónicos: el blanco, rojo, verde, morado y el negro, otorgándoles a cada uno su propio simbolismo, establecía que el color verde quid viridis color medius est ínter albedinem et nigritiam et ruborem, por lo que sería el más utilizado por la iglesia ya que se recurría a su uso cuando no se utilizaban ni el color blanco, rojo o negro. El color de la casulla venía fijado por la fiesta litúrgica que se celebraba y su uso quedaba establecido durante las treinta y dos semanas del tiempo ordinario, después de la Epifanía y Pentecostés. La forma de la casulla fue evolucionando a lo largo de la historia. Cada vez se adapta más y mejor a los movimientos del oficiante de la Misa. La gran anchura, característica de los tiempos antiguos, que servía para cubrir brazos y una tercera parte de las piernas, fue estrechándose significativamente y haciéndose más corta. Para poner en práctica las disposiciones emanadas del Concilio de Trento, el arzobispo Aliaga, de Valencia, convocó el año 1631 un Sínodo del que emanaron normas relativas a la fabricación de edificios y templos y para el culto en general. Para los ornamentos de los ministros se estipulaba que todos debían ser, por lo menos, de seda y ésta de cinco colores: blanco, colorado, verde, morado y negro, y el resto quedaban suprimidos. Los forros del mismo color y de tela suave, en las borduras de los ornamentos se ordenaba taxativamente no se formen mascarones, ni figuras monstruosas, sino lazos, ramos, flores, frutas, paxarillo hermosos y cosas decentes y convenientes al tal ornamento y la ministerio que ha de servir.
Esta prenda parece derivar del orarium, tela para secarse la boca y rostro, o del lorum que era una faja que simbolizaba la actuación del magistrado. Desde el siglo IX fue evolucionando y sus extremos adquirieron la forma de pala adornándolos con y campanillas y en el siglo XVI se le colocó una cruz a los extremos. Es el atributo de los diáconos y con el tiempo se ha recortado sensiblemente su largada. El manipulo y la estola han de tener la misma anchura, pero difieren en la largada mucho mayor de la estola que ha de sobresalir por debajo de la casulla. Se lleva colgada del cuello. Conocido como suddarium, mappa o fanón, procede del pañuelo romano usado como elemento ornamental que se cogía con las manos y de ahí su
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Dalmática
Capa pluvial
Cubre cáliz
Bolsa de corporales
Roquete
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nombre de manipulus. Fue evolucionando con los que sus extremos ganaron en decoración y en el siglo XVI se estableció su forma definitiva. Al igual que la estola debe llevar una cruz en la mitad de su longitud. En el Sínodo convocado por el arzobispo Aliaga en 1631 se establecían las normas a seguir: "los manípulos han de tener de largo estando tendidos, una vara valenciana. De ancho lo que la estola. Los extremos han de ser de la misma facción triangulada que los de las estolas. En ellos/ y en medio, han de tener las cruces que se han dicho en las estolas/ y de la misma manera. Ráseles de hazer cordón con botón corredizo, para que puesto en el braceo, quede ajustado y seguro el manipulo. Este cordón ha de estar tan cosido en el manipulo/ que puesto". El sacerdote lo lleva ceñido al brazo izquierdo, encima de la manga del alba. Es la vestidura que suele llevar el diácono en los oficios divinos. Va abierta por los lados, COTÍ mangas amplias y cortas que sobrepasan a duras penas el codo y suelen llevar bocamanga o bien algún detalle decorativo. Generalmente se viste sobre el alba, la cual asomará las mangas y el borde de la misma a través de la dalmática. Era la antigua casulla ancha, abierta por delante y con caperuza reservado, en un principio, para su uso en el coro y en las procesiones, adquiriendo carácter litúrgico a partir del último tercio del siglo VIII. A partir del siglo XIV la capa se enriqueció tanto por el tejido como por la cenefa y la caperuza que adoptó los ricos bordados perdiendo su primitiva función de cubrir la cabeza. Durante los siglos XV y XVI fue evolucionando hasta convertirse en una especie de escudo o capuchón (capillo) que fue aumentando su forma y enriqueciendo su ornamentación bordada y que se sujetaba en la espalda con muletillas y presillas. La cenefa delantera se cerraba con un pasador metálico ennoblecido con esmaltes y repujados, a la altura del pecho llamado pectoral. Llamado velo sérico (velo de seda) en el misal romano (1570) del Papa San Pío V, ha de ser, según el manual del obispo Aliaga, "de tres palmos de largo y dos y medio de ancho, para que cubran bien el cáliz. Por lo menos han de ser de seda. El color ha de ser una de las cinco, de que usa la iglesia y no de otros. En cuanto se pueda sean conformes o correspondientes a la casulla del celebrante". Son dos lienzos sobre los que se colocan la Ostia y el cáliz durante la celebración de la Misa. Su nombre se debe a que acogen el Cuerpo de Cristo. La bolsa es obligatoria para la celebración. Según el manual de Aliaga las bolsas de corporales sean grandes, que dentro de ellas estén bien acomodados los dichos corporales y se puedan poner y sacar francamente. Lo demás que se ha advertido en lo cubre cálices, se ha de observar en estas bolsas. Es un sobrepelliz cerrado y con mangas cortas. Solía colocarse sobre la sotana.