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editorial

Este año, una de las instituciones sociales más importantes del país cumplió 78 años; en diferentes foros hemos dicho que el Instituto Mexicano del Seguro Social es un pilar fundamental, al garantizar salud, seguridad y bienestar a las y los trabajadores de México. En 1943 la CTM dio el mayor impulso para la creación del IMSS.

Como lo ha reconocido su Director General, la participación de nuestra central obrera al interior del Honorable

Consejo Técnico del Instituto, ha sido fundamental para brindar las mejores soluciones.

En medio de la pandemia, el acompañamiento y trabajo realizado por la CTM en su máximo órgano de Gobierno es fundamental y comprometido, buscado siempre el beneficio de las trabajadoras y los trabajadores, así como de sus familias.

También debemos seguir agradeciendo el trabajo y entrega de enfermeras, médicos y a todo el personal, quienes son los que mueven en realidad al Seguro Social.

Como Senador de la República participé en la aprobación de una reforma que fue calificada de histórica por todas las fuerzas políticas del país, en la cual se establece la igualdad salarial entre mujeres y hombres, prohíbe la discriminación por género en las remuneraciones de trabajadores del sector público y privado y obliga a los patrones a brindar las mismas oportunidades de ascender de puesto al personal femenino y masculino.

No cabe duda que dicha igualdad salarial beneficiará a millones de trabajadoras, para reducir la brecha salarial que aún persiste, falta mucho por hacer, sin embargo esto es un gran avance en favor de las mujeres mexicanas.

Por otro lado, quiero hacer un llamado a todos los dirigentes y trabajadores del país a no confiarse, sobre todo a no bajar la guardia contra esta enfermedad que azota a México y al mundo, a mantener los protocolos de seguridad y estar al pendiente de la campaña nacional de vacunación.