Entrenamiento
Sebastián entrena dos veces por día y elige su rutina según el clima y la ciudad en la que esté.
74
OCTUBRE 2014
074-079_RN002_conversacion.indd 74
25/09/14 01:26
>>> Extraña los
conversación entre runner’s
SebastiáN
tagle
Credit by Du mmy Name ; Credit by D u mmy Na me
empezó organizando una carrera para veinte amigos en el glaciar perito moreno. Hoy realiza más de 70 con su empresa: Club de corredores. Lo pasamos a buscar por su oficina y Salimos a correr con él. la nostalgia dijo presente.
entrevistado por daniela rossi y juan pablo calvino fotos de hernán pepe
años en los que corría en la pista del CeNARD y arriesgaba adivinar el tiempo que hacía; acertaba casi siempre. Repasa la época en que viajaba por el mundo para correr como capitán del Team Argentina y cuando compitió en Marruecos, en China y en la Isla de Pascua, entre otros territorios. Recuerda nostálgico la vez que organizó una carrera para 20 corredores, todos amigos, en el glaciar Perito Moreno. Sebastián Tagle, 48 años, es el director del Club de Corredores, empresa que fundó en 1991 y que en la actualidad organiza más de 70 carreras al año. Es uno de los responsables de que miles de argentinos –y extranjeros que viajan al país– compitan cada fin de semana. Ese es su trabajo, aunque él hoy no pueda correr por una lesión en el abdomen y se recueste en otras disciplinas como el remo, la bicicleta, el esquí y el gimnasio, lugar que pisó hace poco por primera vez. Llega a su oficina de Núñez, barrio en el que también vive, después del entrenamiento matutino. Entrena dos veces por día y elige su rutina según el clima y la ciudad en la que esté, ya que alterna sus días entre Buenos Aires y Bariloche. “Me levanto a la mañana y decido si voy a hacer esquí de travesía o salir a caminar. Logré una vida que me permite decidir así. Disfruto tanto de la montaña como de trotar por Palermo”, asegura. Esta mañana Tagle viste una remera blanca de algodón, con mangas largas y ninguna RUNNERS WORLD
074-079_RN002_conversacion.indd 75
75
25/09/14 01:26
marca o insignia a la vista, y zapatillas azules a las que no les contó los entrenamientos ni los kilómetros. Dice que prefiere la ropa vieja: usa remeras de hace 20 años y descarta el calzado recién cuando está roto. “Nunca puedo disfrutar de una carrera que organizo. Lo único que quiero es que los eventos terminen lo antes y lo mejor posible”, asegura sobre la tarea que encara todas las semanas. Hoy, aunque el trabajo es su prioridad, mantiene latentes los objetivos como corredor para cuando supere su actual problema físico: “Me preparo para intentar volver a participar de cualquier competencia”, explica. Los Tetras de Chapelco, Esquel o Catedral aparecen en la lista de deseos de aventura. Ya tiene pasajes para correr la media de Barcelona y para competir en esquí de fondo en Suiza. Espera llegar listo para poder viajar. “Nunca me quise catalogar como solo organizador. Voy a seguir activo, espero, toda la vida”, sentencia.
Runner's World: Siempre fuiste un atleta multidisciplina... Sebastián tagle: Me encanta. No me gustan los extremos, como fanatizarme con algo demasiado, prefiero cambiar para poder estar bien, cómodo y saber de
76
todo un poco. Creo que eso abre la mente y hace que uno no se vuelva tan obsesivo y pueda disfrutar mucho más el deporte. Si uno se obsesiona demasiado con una disciplina pero no le va bien, se frustra. También es verdad que la única manera de ser muy bueno en algo es ponerle plena dedicación, pero lo mío es querer disfrutar y siempre me fue bien con esto. RW: Según la ciudad en la que estás elegís qué entrenar. Al hacer, por ejemplo, trekking de montaña, ¿también te molesta el abdomen? ST: Me molesta, pero lo hago despacito. Ya no salgo a hacer
largos recorridos porque tengo si tengo mucho dolor me tengo que volver. Trato de hacer cosas cerca para poder volver más rápido. Intento no tomar medicamentos, soy anti medicina, no me gusta consumir químicos. Prefiero usar técnicas para no tener dolor. Las veces que me operé, después no tomé nada. Aunque veces se necesita, si puedo no lo elijo. RW: Cuando hiciste tus marcas en la calle, ¿sí te dedicabas a correr full time? ST: No, siempre hice diferentes cosas. En esa época estaba muy fanatizado con el Tetra de Chapelco, entonces entrenaba fuerte en calle, pero con ese objetivo. Hace 25 años, correr a 33 minutos era una marca media, había mucho más nivel de punta. Recuerdo salir 50 en una media maratón con 75 minutos. Pero se disfrutaba muchísimo más, nos juntábamos todos en el CeNARD, estaban los entrenadores ahí, era un grupo más chico. Hoy esas cosas se perdieron, está todo más disperso y hace que en el atletismo no se hagan buenas marcas. RW: Usás la palabra atletismo y tu empresa se maneja más con corredores, llamémosle runners. viejos tiempos “Hace 35 años correr a 33 minutos era una
marca media. Recuerdo salir 50 en una media maratón con 75 minutos. Pero se disfrutaba mucho más... Hoy esas cosas se perdieron y hace que en el atletismo no se hagan buenas marcas”, nos cuenta Tagle.
OCTUBRE 2014
074-079_RN002_conversacion.indd 76
25/09/14 01:26
RW: ¿Notás que hay una diferencia entre el atleta y el runner o los ves en un mismo grupo? ST: Es una pregunta difícil porque hoy los atletas de primer nivel están corriendo las carreras de calle. Entonces hacer una diferenciación me parece que no está
bien. La gran masa está en las carreras masivas y los atletas que entrenan en la pista se vuelcan también a esas por distintos motivos. RW: Es un fenómeno mundial, hoy los africanos a los 20 años van a la calle, donde están el dinero y la exposición… ST: Sí, lo que pasa es que acá casi no hay pista de campo, esa es una falencia, no se apoyan ese tipo de carreras. Yo recuerdo que si le decía a mi entrenador “quiero correr un maratón”, él respondía “buscate un entrenador”. Se perdió eso de, primero, buscar una marca. Debería destinarse un presupuesto a que los jóvenes puedan ir a la pista, aprender lo que eso te enseña. La calle no te va a enseñar a bajar marcas, vas a ir a distancias cada vez más largas donde no vas a poder progresar. Entiendo que una persona de 40 años que trabaja en una oficina quiera buscar un maratón e ir a correr el de Nueva York. Empiezan a entrenar y a los pocos meses quieren correr un medio. ¿Por qué? Porque no quieren sufrir en las distancias cortas. Se escudan en las distancias largas. Correr los 1.500 metros era ir a sufrir como loco. Sería bueno volver a eso. Lo propuse, el tema es que tiene que haber un consenso para que podamos ofrecerles a los chicos divertirse ahí.
RW: ¿Te generan nostalgia esos años que viviste en el atletismo? ST: Sí, muchísima. Sería espectacular poder incentivar a que la gente regrese a eso. Convengamos que hoy es tan masivo esto que no hay pista para tanta gente. Me parece que llegó el momento de sentarse con los gobiernos y las federaciones y hacer algo. Antes éramos el 2 o 3 por ciento de la masa que corre ahora y había atletas de primer nivel y muchísima gente a la que le gustaba correr. Hoy no hay ese nivel porque faltan políticas; el argentino tiene condiciones increíbles, se lo puede comparar con un mexicano. RW: En cuanto a las carreras de aventura en las que competiste hay algunas, como las multidisciplina, que se dejaron de hacer… ST: La verdad que tengo muchísima nostalgia de eso. Me permitía hacer cosas porque me gustaban. Hoy no puedo darme ese lujo. Lo hemos hecho, pero eran todos amigos, se podía hacer algo más casero y más ameno, para que todos los disfrutáramos. Hoy los corredores también demandan otro tipo de organización y es difícil organizar algo chico. El organizador tampoco tiene un rédito económico, entonces tiende a hacer otras carreras. En una de calle, a las 2 de la tarde RUNNERS WORLD
074-079_RN002_conversacion.indd 77
77
25/09/14 01:26
compañeros de medallas Su primer
Trail Advanced fue en ocho días y nunca había corrido en equipo. Dice que se "mató" con su compañero. Con el tiempo se arrepintió de no haberse llevado bien.
estoy almorzando en casa. En la montaña tengo que estar la semana anterior viendo qué problemas puede haber, el clima, el recorrido. Les pasa a todos los organizadores del mundo, que van a estar buscando algo más simple y no tan arriesgado. RW: Hace semanas diste una charla técnica en la que prácticamente había más personas que inscriptos en el primer Cruce. Antes quizá la gente era más del palo. ST: : La masividad hace que se pueda hacer un gran evento, ahí está la gran entrada económica para los organizadores; y las empresas buscan eso también. Era impensable que Nueva York llegara a tener 47 mil personas que largan por olas en distintos horarios. Pero se adaptaron. rw: ¿Cuánto más puede crecer el El Cruce y en qué aspectos? st: Desde que empezamos, 14 años atrás, queremos que El Cruce sea la carrera más 78
importante del mundo. Ese es nuestro sueño. A veces somos demasiado ambiciosos con la logística. Por ejemplo, el año pasado hubo dos recorridos que no pudimos hacer por cuestiones climáticas. Es una cantidad de gente muy grande para mover, se hace difícil. Si hubiera estado soleado y sin viento se hubiera disfrutado como nunca. Apostamos a que sea una gran carrera, cada vez más grande, en seguridad, y con mejores atletas. En El Cruce nosotros arriesgamos muchísimo a que la gente pueda tener inconvenientes y el gran tema es explicarle eso a la gente. Hay una gran diferencia entre las carreras de aventura y las de calle. Durante años fomentamos la idea de correr en equipo, tener un compañero. Un tema filosófico, que la gente abra la cabeza, que pueda disfrutar la carrera un poco más. Pero a veces los corredores no quieren depender de otra persona, quieren hacer su carrera y tienen razón. Por eso abrimos la posibilidad de que corran en postas o en forma individual. Indefectiblemente, en el futuro del trail la gente va a querer competir sola. RW: Por qué se perdió esa visión más romántica? ST: La gente quiere practicidad. El Cruce va a ser una de las últimas por su filosofía de compartir, más allá de si clasificás 10º o 20º. Hay que disfrutarlo porque es único. RW: : ¿También vas a tener nostalgia de eso que tiende a perderse? ST: Sí. Mi primer Trail Advanced fue de ocho días, nunca había corrido en equipo. Me maté con mi compañero y con el paso del tiempo digo, “qué locura no haberme llevado bien”. Me dejó un gran aprendizaje. En esas carreras ves muchas realidades con respecto a la vida cotidiana. Te das cuenta cómo eras, decías, “no puedo ser tan egoísta, tengo que ser más democrático, no estoy ayudando al más débil, no tengo que competir si somos un equipo”. Durante años eso no lo vi.
RW: ¿Cómo viviste el momento de dejar de ser protagonista como corredor y empezar a hacer que los demás corran? ST: Nunca dejé de correr, ahora no puedo, pero durante años siempre competí, hice las dos cosas al mismo tiempo. Y lo voy a seguir haciendo en tanto me dé el físico. Me gusta, no quiero renunciar a competir. Estoy lesionado pero estoy comprando pasajes para ir a tal carrera, no quiero perder los objetivos. Sí priorizo el trabajo a competir. Al ser algo tan masivo, las carreras generan una gran presión, muchos nervios, y se hace muy difícil, hay muchas precauciones que tomar.
>>>
La ficha de Tagle edad: 48 viven en: Bariloche y Capital Federal. trabaja como: Director de Club
de Corredores. Sebastián corrió: Infinidad de carreras multidisciplina por el mundo, como por ejemplo Eco Challenge, Raid Gauloise, Mild Seven, Ecomotion, Camdex, Extreme Tour, Meridiano Raid, Gaia, Desafío de los Volcanes y los tetratlones de Chapelco, Esquel y Catedral, entre otras. otras disciplinas que también practica: Ciclismo, natación, kayak,
esquí alpino, esquí de fondo, canoa, cuerdas, rapell, jumar, buceo, patín, trekking, montar a camello, canoas de bamboo, canoas chinas, buceo, balsas típicas de Malasia y boia cross.
OCTUBRE 2014
074-079_RN002_conversacion.indd 78
25/09/14 01:26
RW: Tus hijos son adolescentes. ¿Les transmitiste la pasión por el deporte? st: Nunca quise que hicieran algo porque a mí me gustaba, casi que no los incentivé. Dejé que decidieran qué era lo que deseaban. Por vivir en Bariloche decidieron competir en esquí. El mayor ahora estudia en Capital, así que tuvo que cambiar y juega al fútbol. Nunca los quise inducir a que corrieran. Tal vez me fui al otro extremo de no incentivarlos, quise que decidieran solos. El más chico compite en esquí y juega al hockey. Correrán cuando quieran. rw: ¿Les diste consejos sobre las competencias? st: Me parece importante que hagan deportes en conjunto. Hasta los 18-20 años debe ser así. No creo en la competencia de los chicos en deportes individuales. Lo mismo pasa con correr. Nunca incentivé que los chicos compitan en los eventos que organizamos, pero sí que corran
en equipo. Hay una realidad: el que quiere progresar y hacer buenos tiempos en atletismo debe competir solo. Se puede lograr de armar un grupo en el que puedan entrenar juntos y lograr el espíritu de equipo. La Argentina es uno de los países donde más se sociabiliza con el deporte. rw: Volviendo al tema del comienzo sobre los extremos que no te gustan, así como tampoco la obsesión. ¿Nunca te obsesionaste, ni siquiera con el running? st: Corría diez veces por semana, pero también entrenaba bicicleta, kayak y otras disciplinas. Prefería ir a carreras multidisciplina. Claro que buscaba marcas, entrenaba en la pista, hacía los fondos, cambios de ritmo, pero siempre traté de combinarlo con otras cosas. Por ejemplo, cuando quería ver a River iba a la cancha corriendo, miraba el partido y me volvía al trote. Son esas cosas que prefiero a tener que salir a hacer un entrenamiento formal. Siempre traté de que mi vida
en el trabajo
Nos cuenta que son muchas horas las que le demanda el trabajo y el entrenamiento.
“al ser algo tan masivo, las carreras generan gran presión, muchos nervios y se hace difícil cuando priorizás el trabajo a competir”. no gire alrededor del running, porque el obsesionarse y pensar solo en eso no está bueno. rw: Con tanto viaje de trabajo, ¿las zapatillas de correr van siempre en el bolso? st: Sí, y el kayak y la bicicleta. Cuando iba a Bariloche en auto llevaba todo y paraba en el Río Colorado a remar y después seguía. O, si estaba con la familia y querían almorzar, bajaba la bici y avanzaba mientras ellos hacían compras, cargaban nafta y esas cosas. Acordábamos un punto de encuentro y me levantaban. Me las rebusco para ganar tiempo, ya que son muchas horas las que me demanda el entrenamiento y también el trabajo. Si no le encuentro la vuelta no hago nada. Si dependiera de mí, todos los fines de semana competiría en algo. Desde una carrera de calle en Avellaneda hasta una en Luján de bicicleta o en Zárate de kayak. rw: ¿En qué te falta competir? st: Me gustaría poder hacerlo en esquí de travesía y de fondo. Es un deporte que me encanta, pero estoy lejos de los que compiten. Ellos están todo el día en la nieve. Lo hago más por placer. rw: En cuanto a lo que te genera una competencia en el cuerpo, ¿qué te falta al no hacerlo? st: Extraño todo. Si bien hago lo que puedo con dolor, no podría decidir relajarme. Encima, por estar en el ambiente, todos me hablan de las carreras que van a hacer, lo que me genera mucha envidia. La cabeza no para. RUNNERS WORLD
074-079_RN002_conversacion.indd 79
79
25/09/14 01:26