Vivir Feliz

Autora: Prof. Rossy Paola Urancy Iraipi

Municipio: Ascensión de Guarayos, U.E. San José Obrero Delitos conexos: Violencia sexual Proxenetismo Pornografía

Fideo, era un niño de 8 años, venía de una familia humilde, se notaba lo escaso que era el dinero en su familia, su mamá trabajaba en el monte si iba contratada y todos en casa quedaban al cuidado de la hermana mayor, la cual ya tenía un hijo y esposo, pero vivían en la misma casa. Fideíto era un niño siempre atento, respetuoso sobre todo educado y muy responsable en sus tareas, le gustaba correr en el recreo.

Cierto día no fue a la escuela, pero al día siguiente tampoco apareció, yo estaba preocupado porque yo era su mejor amigo. Luego de dos días volvió a clases, no explicó por qué se había faltado, estaba de muy mal humor, tanto así que casi le clava el lápiz a nuestra compañera. Él estaba muy agresivo, traté de hablar con él y lo único que hizo fue abrazarme y echarse a llorar desconsoladamente, pero no me dijo nada. Traté de enojarme con él para que me explique qué le pasaba, pero él solo lloraba más y yo me puse a llorar con él y también lo abrazaba tan fuerte que hasta hoy lo recuerdo y donde sea que esté, Dios quiera que se encuentre bien, sobre todo que sea un hombre útil y de bien para la sociedad. Desde ese día no supe más de Fideo, su mamá lo mandó a estudiar otro lugar.

Yo le pregunté a su mamá qué había pasado con mi amigo, ella me dijo que lo había mandado a un internado y que ahí iba a estar mejor. Después de dos años vino de vacaciones, nos dimos un abrazo y yo lo invité a mi casa para pasar la tarde. Le dije que lo extrañe y que esperaba con ansias volverlo a ver y le volví a preguntar por qué había cambiado repentinamente y con un nudo en la garganta, me contó su historia: Él había sido abusado por su padrastro y por si eso fuera poco, también por su cuñado. Me dijo que su madre lo mandó a Beni porque le dijo que era un mentiroso. Antes de irse su mamá le dijo: - No le vas a contar a nadie tus mentiras, me vas a hacer ver mal con mis amistades y mi familia-.

Han pasado diez años, y no sabía nada de él, decían que se buscó una pareja y que nunca visitaba a su familia. A su mamá si la veo y ella suele decir que siempre fue problemático, a ella le cuesta reconocer la realidad.

Esta mañana me buscó la mamá de Fideíto y me comunicó que él había fallecido, y que en sus últimas palabras le dijo a su madre que él estaba así por culpa de aquellos hombres malvados, que no pudo superarlo, no tuvo apoyo. Su esposa dice que se murió de pena.

ASCENSIÓN DE GUARAYOS

ACTIVIDADES

1) Respondamos a las siguientes preguntas de acuerdo con la lectura.

1 ¿Cómo estaba compuesta la familia de Fideo? ¿Quién cuidaba de él?

2 ¿Quién relata la historia de Fideo? ¿Cómo describe a Fideíto?

3 ¿Qué sucedió con Fideo el día en el que no fue a clases?

4 ¿A dónde mandó a Fideo su madre? ¿Por qué?

5 ¿Crees que Fideíto estaba mintiendo? ¿Por qué?

6 ¿Cómo crees que Fideo se sentía con la situación?

7 ¿Piensas que la situación de Fideo es común? ¿Por qué?

8 ¿Crees que está bien que Fideíto se haya callado? 2) Conversamos entre todos y todas con ayuda de la maestra o maestro con ayuda de las

siguientes preguntas.

1. Fideíto vivió una situación de vulnerabilidad ¿Sabes lo que significa?

2. ¿Piensas que se vulneraron los derechos de Fideíto?

3. Lo que le pasó a Fideíto ¿Es tipificado como delito? 4. ¿Quiénes son los responsables de garantizar la reducción de vulnerabilidad de las niñas, niños y adolescentes?

3) Leemos la siguiente información y comuniquemos a nuestros amigos

Los niños, niñas y adolescentes no tienen la culpa cuando los obligan a prostituirse, ellos son víctimas. Los culpables son: el traficante, el proxeneta y el cliente. Estos niños, niñas o adolescentes llegan a tener baja autoestima, sentimientos de vergüenza, culpa, creen que no son dignos de ser ayudados. Muchas veces llegan a suicidarse. Los niños, niñas y adolescentes que son rescatados necesitan mucho apoyo de su familia, amigos y comunidad.