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La isla del coco

Por Alberto Friscione Carrascosa

Todo empezó cuando el inquieto de Alex Zozaya se comunicó conmigo para decir que era tiempo de tener otra aventura submarina, que buscara un lugar espectacular. Lo primero que vino a mi mente fue la isla del coco, en Costa Rica, pues lo recuerdos que tengo del lugar son muy buenos. Después de hacer los arreglos con el barco que nos llevaría, solo nos quedaba es perar a que se cumpliera fecha del mes de octubre para nuestra partida, el grupo ya estaba armado con Pablo Simón como fotógrafo oficial, Eduardo Guzmán, Alex Zozaya y un servidos.

Por fin llego el día, nos embarcamos en el puerto de Punta Arenas, Costa Rica en el barco Under sea hunter el cual seria nuestro hogar los próximos 10 días.

Navegamos casi 36 horas para llegar a la isla que se encuentra a 320 millas náuti cas de la costa mas cercana, el océano pacifico, se mostro alegre durante la trave sía, que transcurrió sin novedad. Al llegar a la isla nos percatamos que esta cubierta de verde pues la precipitación pluvial es muy alta, llama mucho nuestra atención la gran cantidad de cascadas que existen por todos lados y son de diferentes tamaños. Esta habitada solo una muy pequeña porción de ella, por guarda parques, biólogos que cuidan la isla con esmero.

La lejanía con tierra firme, lo difícil de su acceso y el extremo cuidado que tiene los guarda parques, hacen que esta pequeña porción de tierra tenga uno de los fondos marinos mas espectaculares del planeta, por algo también es conocida como la isla de los tiburones o como la isla del tesoro, pues cuenta una leyenda que aquí un pirata escondió sus tesoros.

Yo cero que su tesoro mas grande esta en los fondos de co ral que pudimos observar desde nuestra primera inmersión, los corales se mostraban sanos y llenos de color, en ellos los peces globos moteados, erizos, estrellas de mar, y no era una, eran muchas, y este no era el mejor lugar, apenas era nuestro primer día.

Los siguientes buceos pudimos observar tiburones punta blanca, rayas mármol, tortugas, muchos peces de colores, peces cirujanos, garlopas, pulpos, morenas, cardúmenes de jureles, tiburones sedosos, delfines y grandes escuelas de tiburones martillos.

Entre buceo y buceo nos refrescábamos en alguna de sus muchas cascadas, eran las vacaciones ideales, bucear en uno de los mejores lugares del mundo como lo pudimos comprobar cuando, muy cerca de nosotros y saliendo de lo profundo nos vino a visitar el tiburón tigre, ya famoso en el área, nos dio una vuelta y pudimos notar sus grandes ojos fijos en nosotros. Precavidos nos pegamos a la pared de la roca para protegernos

Pero la cereza del pastel fue cuando veníamos de bucear un arco muy grande y bonito, cuando ya desde la lancha vimos a lo lejos un par de orcas que venían directamente hacia nosotros, con ansiedad de principiante nos pusimos nuestro equipo de snorkel para brincar al agua, pero el guía no nos permitió.

Esto es la isla del Cocos a eso habíamos venido, a ver a los grandes del mar, pero también entendimos que esa maravi lla de lugar existe por el gran cuidado y protección que les brindan sus cuidadores.

Pero seguro regresaremos para poder contarles a nuestros lectores la experiencia.

www.solobuceo.com

Cocos Island

By Alberto Friscione Carrascosa

It all started when the restless Alex Zozaya contacted me to say that it was time to have another underwater adventure, to look for a spectacular place. The first thing that came to my mind was the coconut island, in Costa Rica, because the memories I have of the place are very good.

After making arrangements with the boat that would take us, we only had to wait for the date of October for our departure, the group was already armed with Pa blo Simón as official photographer, Eduardo Guzmán, Alex Zozaya and a servidos. Finally the day arrived, we embarked in the port of Punta Arenas, Costa Rica on the Under sea hunter boat which would be our home for the next 10 days.

We sailed almost 36 hours to reach the island that is 320 nautical miles from the nearest coast, the Pacific Ocean, was happy during the journey, which passed without news.

When we arrived at the island we realized that it is covered with green because the rainfall is very high, our attention is drawn to the large number of waterfalls that exist everywhere and are of different sizes. Only a very small portion of it is inhabited by park rangers, biologists who take care of the island with care.

The distance from the mainland, the difficulty of its access and the extreme care that the park rangers have, make this small portion of land have one of the most spectacular seabed on the planet, for something it is also known as the island of sharks or as the treasure island, because a legend tells that here a pirate hid his treasures.

I zero that its greatest treasure is in the coral bottoms that we could observe from our first dive, the corals were healthy and full of color, in them the spotted pufferfish,sea urchins, starfish, and it was not one, there were many, and this was not the best place, it was just our first day.

The following dives we could observe whitetip sharks, mar ble rays, turtles, many colorful fish, surgeonfish, garlopas, octopus, moray eels, schools of horse mackerel, silky sharks, dolphins and large schools of hammerhead sharks.

Between diving and diving we cooled off in one of its many waterfalls, they were the ideal vacation, diving in one of the best places in the world as we could see when, very close to us and leaving the depths came to visit the tiger shark, alre ady famous in the area, gave us a tour and we could notice its big eyes fixed on us. Cautious we stick to the wall of the rock to protect ourselves

But the icing on the cake was when we came from diving a very large and beautiful arch, when from the boat we saw in

the distance a couple of orcas coming directly towards us, with beginner anxiety we put on our snorkel equipment to jump into the water, but the guide did not allow us.

This is the island of Cocos that we had come to, to see the greats of the sea, but we also understood that this wonder of place exists because of the great care and protection pro vided by their caregivers.

But surely we will return to be able to tell our readers the experience. www.solobuceo.com

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