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POEMARIO Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

PALABRAS DEL AUTOR

A

ve Yavhé Fabel siempre compartió conmigo juegos y sueños fantásticos, cuando algunos de éstos de manera holística empezaron a cumplirse, su presencia se volvió casi cotidiana y en ocasiones la intensidad de sus diálogos terminó en poema.

Tendría entre diez y trece años cuando la muerte de mi padre y mi primera experiencia sexual marcaron por siempre el rumbo de estos versos, no siempre afortunados, para encontrar las respuestas al amor y al desamor, a la vida y la muerte, a la soledad y mi cultural temor a Dios.

Sin embargo, fue Dios mismo quien se encargó de acabar con mis miedos, ha sacado a una mujer de mis costillas y le ha ensanchado las caderas y dotado de senos, ha sembrado árboles con frutos prohibidos, además me prometió perdonar mis pecados y otorgarme vida eterna.

Durante treinta años o más, estas reflexiones silenciosas han permanecido en mis labios y cuando el caos me lo ha permitido, los conservé en un trozo de papel.

De estos poemas sigo pensando que aunque yo los escribí no me pertenecen, son de quien los inspiró y motivó, pero poner nombre y rostro a los sentimientos es intimidar al corazón.

Este libro contiene noventa y tantos poemas para compartirlos con los míos, la elección no corresponde a ninguna clasificación o regla, todo lo he escrito, me gusta y me pone feliz, los elegí en un caprichoso juego de azar y movido por un fantástico sueño.

Que ustedes también los disfruten.

Gustavo Heredia Cabarga Octubre de 2001

Ave Yavhé Fabel

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PALABRAS DEL VERDADERO DEL AUTOR

D

esde siempre, vivir en presencia de Gustavo Heredia Cabarga ha sido difícil, sobre todo si somos varios los que compartimos un cuerpo. Anidar en comunidad ha provocado disociaciones, pero en este fluir de conciencias, Yo, Ave Yavhé Fabel, doceava encarnación de Ahmed Yamil-al-Mahed, desterrado de Constantinopla en 935 d.C., entiendo la presencia y el equilibrio cósmico de Eros y Tanatos en mi existencia, juego con el Etéreo de mis banales conflictos y disfruto la innegable presencia de Teo, quien ha bendecido nuevamente nuestra existencia con Filos.

Al muy cabrón de Gustavo ya se le había ocurrido morirse, sin detenerse a reflexionar que su silencio de siete lustros iba a provocar que nada se supiera de mí y de los otros.

Sepultar este poemario no era su destino, él lo supo en sus pecados de omisión y hoy los imprime para los suyos, seguramente quiere escuchar “Qué bonito escribes Gus”.

Yo me pregunto, ¿Por qué no reúne a los enemigos o a las mujeres que no sucumbieron a sus labios y a sus ansias? ¿Por qué no convoca a los demonios que en sombras lo han perseguido en su huída de la muerte? ¿Por qué no se los recita a ellos?

Soy creativo, no sentimental y espero sinceramente no reencarnar en ninguno de ustedes. Aunque lo cursi no se lo he podido quitar, lo he llegado a querer tanto como ustedes y sobre todo lo que más le admiro es que nunca ha perdido su capacidad de asombro.

Yo también espero disfruten este poemario.

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Ave Yavhé Fabel

Ave Yavhé Fabel Primer otoño del tercer milenio

POEMARIO

Ave Yavhé Fabel

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TEO LA FABULOSA AVE DE DIOS Yo soy el Ave que surca los aires, que ama la libertad, que no tiene tierra; solitaria y melancólica del amor...

Yo soy el Dios antiguo del mundo, el orgulloso, el bueno, soy Yavhé, soy yo mismo.

Yo soy Favel, el cuento, la fábula, soy el fabuloso.

Yo soy AVE Yo soy YAVHÉ Yo soy FAVEL ¡Ese soy Yo! La fabulosa ave de Dios 1970

HAZME UNA PREGUNTA Hazme una pregunta y te daré una respuesta, extiéndeme la mano y te daré la mía.

Mírame de frente y te miraré, dame una frase, una palabra, y te daré una oración, un poema.

Pero no me preguntes si te aliviarás, no me extiendas tu mano para correr con la cometa,

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

no me mires cuando salgo del cuarto, no me digas que te enseñe a escribir vida y felicidad, no me pidas que te enseñe a rezar, porque no tengo las respuestas, porque mi mano tiembla, porque mis ojos se nublan, porque no sé si existen ciertas cosas y porque no entiendo a Dios.

Serás enterrado hoy y no hay respuestas ni calor en tu cuerpo.

Serás enterrado hoy y voy a llorar y estaré triste.

Serás enterrado hoy y dudaré de Dios y su misericordia.

Hazme una pregunta y te daré una respuesta, extiéndeme tu mano y te daré la mía.

Mírame de frente y te miraré, dame una frase, una palabra, y te haré una oración, un poema. ¿Me preguntas si sanarás? ¡sí, tu espíritu no morirá! ¿Me extiendes tu mano para correr? ¡sí, vamos a caminar! ¿Me preguntas cómo se reza? ¡sí, cantaremos! ¿Me miras de frente? ¡sí, reiremos! ¿Me preguntas si hay Dios y dónde está?

Sí, sí hay Dios y hoy estarás con él.

1973

Ave Yavhé Fabel

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SE SANTO...

Santo no es aquel que reza todo el día, ni que hace grandes penitencias, ni milagros.

Santo es aquel que cumple su ideal, que se cumple a sí mismo.

Que se conoce a él y a todos, que se entrega a Dios y a los demás llegando a su perfección, venciendo tentaciones, y que se cultiva y sabe responder a las eternas preguntas: ¿Por qué vivo? ¿Para qué vivo?

Viviendo y luchando siempre de frente, haciendo el Evangelio su código; Ese es un Santo, el hombre que en cualquier momento está listo para la muerte y que no le teme.

1968

CAMINANTE DE CALLE Vi una chica ayer en la noche, con un hombre haciendo un trato, ella se subió al coche, unos pesos por hacer el amor un rato.

Ella está siempre en su esquina, vendiendo placer, ella se asesina, junto con otro ser.

Hoy he platicado con ella, es una tragedia su vida,

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

que tiene una hija muy bella, también en burdeles metida.

He querido por ella hacer algo, ya que los hombres la hicieron ser así, me apena ser macho, nada valgo, aun, acepto la tentación de placer cuando la vi.

Verás el mundo que te hace, vivirás el mundo que te humilla, y que de ti se deshace, cuando vieja estés en tu orilla.

No te compadezco, te comprendo, Sé porqué hay una cruz en tu cama, porque aun mala siendo...

Cristo, Cristo te ama.

1969

HE EMPEZADO… He empezado a no tener nada, y he empezado a tenerlo todo, he dejado de soñar y he empezado a vivir, he dejado de reír y he empezado a llorar.

Así es, ahora ya no tengo placeres, ya no me divierto, ahora sufro, he dejado de estar acompañado y he empezado a estar solo.

He dejado de tener dinero, y he empezado a deber, Así es, estoy dejando de ser niño porque ahora estoy volviéndome un Hombre.

Ya no juego, ahora trabajo, he empezado a perderlo todo, a no tener nada, y he empezado a ganarlo de nuevo.

Ya no tengo nada, sin embargo nada me falta.

He dejado de odiar y he empezado a amar.

No digo no, digo sí a la vida, ya no tengo miedo, ahora tengo valor, He dejado de hacer el mal, Ave Yavhé Fabel

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y he empezado a hacer el bien.

Todo esto, porque he perdido todo, sin que me importe nada, porque he ganado algo, la fe. Creo en Dios.

1970

A PABLO YURI Pablo es tu nombre, y el significado “pequeño”.

Mas no porque lo significa, tú lo vas a ser.

Tus padres vida te dieron, y agradecido debes estar, pues de la nada ellos te dieron un Dios que te ayudará.

Comienza temprano este mundo a recorrer, y pronto a nada has de temer, pues ellos te darán fuerzas para luchar.

Pon en alto tu nombre, con un gran ideal, que te abra paso en contra del mal, que te alumbre en la oscuridad y que te lleve con Dios hasta el final.

Alza tu frente y empieza a admirar, este mundo maravilloso que acabas de heredar.

1968

SEMINARIO LA PURÍSIMA Mi casa tiene largos pasillos y oscuros corredores, son los días largos de mil brillos

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y las noches cortas con sonidos de roedores.

En mi casa hay silencio, hay pan y vino, y la humedad del rocío.

Hoy Seminario pienso en ti, formas parte ya de mi vida, de un pasado que no sentí, pero que recordaré toda la vida.

Hoy recuerdo aquella rosa, hoy recuerdo aquella cruz viejísima, del jardín de Vista Hermosa, del Seminario la Purísima.

De tu capilla era yo sacristán, era el que prendía y apagaba tus velas, el que platicaba con Cristo en el altar, el que ahí ahogaba sus penas.

Adiós casa mía, adiós, tal vez algún día, regrese al llamado de Dios, tal vez algún día lloraré por este adiós.

Nunca fuiste prisión o separo, Ni tampoco fuiste engaño ni tristeza, porque eres guiador faro, del mundo que mira.

Hoy tengo un Cristo de cera, de los que solía hacer con desperdicios de vela, con todo mi ser.

Le pido a mi Cristo por mi ser, por ti Seminario que voy, Semilla de mi ayer, fruto de mi hoy.

Déjame ver por último esas cuatro paredes, donde dormía yo... me voy.

Me llevo a mi Dios, me llevo tu recuerdo y algo más... tu lección.

1970

DIOSES Dioses, yo estoy aquí en un planeta desconocido.

He nacido así tal como soy y no quiero ser otro, no llevo pelo largo ni barbas, ni tengo una dulce mirada, ni me acompañan doce apóstoles.

Ave Yavhé Fabel

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No soy hijo de carpintero ni traigo una corona de espinas en la cabeza, ni una blanca túnica ni predico amor, paz... ni, ni nada...

Pero aquel y yo somos lo mismo: Dioses.

1969

DOCTRINA UNO En doctrina uno hay posdata; ha muerto Cristo, y ha dejado al demonio, sin infierno.

Hoy ha muerto Cristo y no hay condenas que sangren sus venas, por lo visto.

Que el demonio muera yo lo pedí, y en verdad que socavó su era. ¡Sólo creo en mí!

Muera Cristo, muera Satán Dios es listo, Dios es Dios sin hazañas.

El mal es mal.

Dios es bueno, el mal no es demonio, no hay demonio.

No creo en nadie. ¡Sólo creo en mí!

Sin salvación ni condenas, ni mentiras.

Mayo 1971

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MI CRUZ Hace tiempo hice una cruz, una cruz de papel, y aunque se quemó, no me desanimé, pues al poco tiempo hice otra, ésta de barro fue, pero se cuarteó y se rompió.

Enojado tomé y de acero otra forjé, pero no tardó en doblarse y caer... ¿Por qué? Pregunté a Dios, qué acaso una cruz no puedo hacer y pensé; “Tal vez de oro la tendré que hacer” ¡No! renegué preguntándome, ¿Para qué quiero una cruz vacía?

Un Cristo tendría que hacer, para colgarlo después, ¿Colgarlo? ¡Nunca!, Desesperado la solución encontré pues, en mi corazón una cruz grabé y desde entonces, Cristo habita en él...

1967

SANGUIS CHRISTI Sanguis Christi, inebria me...

Eran los rezos de despedida en la capilla refugiante, oraciones en lengua sin vida frente aquel Cristo sangrante.

Capilla de techo abovedado incienso, humedad flotante, gotas de rocío congelado entre aquel Cristo sangrante.

Llorando triste una vez me vi,

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angustia, dolor brotante, melancólico “ten piedad de mí” recé a aquel Cristo sangrante.

Voy por el desierto y el monte soy un caminante, a veces miro el horizonte y diviso al Cristo sangrante.

1971

ETÉREO PERDÓN Nosotros hablamos el mismo… … el mismo lenguaje por eso perdón.

Perdón por los besos que quise darte y no te di.

Por las caricias que esperabas y nunca llegaron.

Por lo que te prometí y nunca cumplí.

Por lo que deseaba hacer, y no hice.

Por lo que quería encontrar y no busqué.

Perdón.

Perdón, tú y yo no hablamos ni sentimos… … ni sentimos lo mismo.

8 abril 73

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EL ABISMO DEL TIEMPO El abismo del tiempo me jala a sus profundidades y en un segundo estoy a diez años de aquí.

Siento la lluvia sin mojarme recuerdo el aroma sin oler, tu piel y las tardes sin caricias, a diez años de aquí.

Sin que hubiera nacido y mientras aquellos y los otros, y mientras me tiro al laberinto del tiempo llego a treinta años de aquí.

Ya todo tan lejano, tan olvidado, tan sin color, tan idolatrado, tan ido lejos y tan profundo como confuso.

El abismo del tiempo me jala a sus profundidades y en un segundo estoy tan lejos de ti. ¿Dónde están todos aquellos? ¿Dónde está el tiempo de los otros?

Hoy, ahora y aquí, tu vida, mi vida y la de él estarán entrecruzadas, vivámosla.

Vivámosla intensamente, porque el laberinto del mañana matizará nuestros días de color cenizo y a diez años de aquí desearemos regresar. ¡Absurda!

Esta melancolía por el ayer es quimera absurda, esta ensoñación por el mañana, es ahora absurdo, hoy, ahora y aquí, nuestras vidas, tienen su momento.

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Vivámoslas, vivámoslas intensamente.

Y si mañana nos ensañamos con el recuerdo, que no sea más placentero que hoy... hoy día . ¿Quién se ira primero? ¿Quién se quedará al final?

Quien diga la oración en mi funeral, que no mienta sobre mi verdad. ¡He sido pecador! ¡He sido débil!

Cuando me toque cerrar a mí tus ojos, los cerraré como quien voltea la página de un libro que no le interesa leer.

A mí cuando el laberinto del tiempo me jale a su abismo y me traiga a este momento que hemos vivido juntos los tres o los que estemos, y que ha sido mentira nuestra, el hoy.

Hoy he tenido sol y lluvia y cariño y por ende neurosis, y nunca he podido estar más vivo que hoy.

Con mañana y con esperanza.

Sin ayer pero sin desamor.

Pero hoy he tenido un momento de tu vida donde te he visto crecer y así es como quiero recordarte te vi crecer, a ti y aquél, y no quiero o al menos no deseo que retrocediera, aunque les cueste la memoria o la angustia de caer al abismo del tiempo.

Arrestado por la nostalgia de regresar al día que tuvimos el valor

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y el coraje de vivir un momento intensamente.

Hoy día.

29 agosto 1993

DESPUÉS QUE PUDE Después que pude comenzar el día con una palabra de amor, solo fui abriendo los ojos, sin saber como serían las cosas, porque hoy como ayer y siempre nací desnudo y ciego.

Porque hoy como ayer y nunca nací hambriento y con nebulosas en mi cerebro, y porque hoy todas las cosas me parecen extrañas.

Ciertos rostros, eran ajenos, ciertos lugares, eran ajenos. y ciertos sonidos diferentes.

Tan sólo fui actuando así, sin saber que sucedería después.

Porque hoy como mañana y siempre naceré con dudas y preguntas porque hoy como mañana y nunca tendré soledad y compañía y porque hoy las cosas se fueron aclarando.

El sol fue moviéndose el día nació y murió y nunca dejó de llover.

Todo lo supe al amanecer en un jardín una semilla floreció, pero en algún otro, un árbol dejó de dar frutos.

Al cenit en algún lecho una virgen deja de serlo y al ocaso quien buscaba un nombre a un niño tuvo que escribirlo en su lápida.

Hoy fui dándome cuenta que el día era diferente Ave Yavhé Fabel

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y no tan sólo para mí.

Porque hoy en alguna parte comenzó un noviazgo porque hoy en algún lugar terminó un amor.

No sé si ayer fue mejor o peor, ya para entonces quien se mirara en el espejo tendría en su rostro algo más de tiempo, y se vería más anciano.

Porque hoy, al amanecer el día nacemos y se transcurre con la misma canción, con la misma canción y con la misma canción.

Y sobre todo hoy aprendí que los días que comienzan con una palabra de amor, son diferentes.

Y que cuando hoy, un día cualquiera del año termine sabré que lo único que tengo es con lo que comenzó el día.

Mi única duda será que alguien comience el mañana con una pequeña palabra de amor.

26 julio 1974

EL OTOÑO VENDRÁ (QUIÉN) El otoño vendrá pronto, las hojas volarán al viento, la música cambiará de ritmo, esto enunciará tu llegada porque escucho tus pasos... y se que vendrás.

Quién será, quién vendrá.

Quién toma mi cuerpo en sus manos.

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Quién convierte en diferente lo igual.

Quién hará ruborizar mi piel, al variar la rutina.

Quién tendrá la nota que haga vibrar las células de mi cuello.

Quién llegará con néctar en la piel a enjuagar su miel en mis labios.

Quién me llevará a los abismos y me tendrá flotando en las alturas.

Quién será capaz de pronunciar nuevamente palabras de amor en las que yo crea.

Quién tendrá la confianza de hacerme suyo y escribir poemas sobre mi nombre.

Quién con su presencia acelerará mi respiración y en su ausencia rajará abismos en mi cuerpo.

Quién en un atardecer cambiará los colores del cielo, en qué playa se hundirán mis piernas.

Quién arrancará los gemidos reprimidos de mi jardín. ¿Quién, quién?

Quién será capaz de indicar el camino sin imponerlo.

Quién podrá tener el cielo y el infinito, sin tenerlos solo para él.

Quién será capaz de todo eso y de mostrarme más de lo que mi mente concibe como vida.

Quién podrá tener la roca, el mar, el cielo y el mundo.

Quién me hará gaviota y pez de mil colores.

Quién dará motivos a mi cuerpo y alma y se confundan siempre enamorados.

Quien quiera que sea sepa mi espera.

El deseo que en una madrugada cuando se filtre el sol y las moléculas de polvo en su vaivén reposen en mi cuerpo desnudo, con su aliento en mi pecho, con un amor expresado en silencio, Ave Yavhé Fabel

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sepa desde este momento mi amor en una mirada, a ése quién.

23 junio 1976

NUNCA SUPE Nunca supe cuándo comencé a escribir estos versos, sólo recuerdo que tenía diarrea y me encontré escupiendo sangre por la boca. ¿Cuándo comenzamos a hacer lo mismo? ¿Cuándo empezamos a repetir?

El hombre nunca supo lo que fue, hasta que empezó a destruirse, como aquel verdugo fue tejiendo en negro su capuchón y su horca, se fue dando cuenta que el mazo del hacha, no astillaba ya sus dedos, no sacaba ampollas a sus manos, ni hacía sudar sus palmas.

Nunca supo cuándo comenzó a ser verdugo, pero un día no pudo quitarse el capuchón, un día sintió vergüenza al mostrar el rostro, un día ni mirar el cielo pudo.

Nunca supo cuándo comenzar a ser verdugo; pero despertaba gritando en la noche, despertaba a la luz de la luna con el rostro lleno de angustia y despertaba mirándose en el espejo... sin cabeza. ¿Y sus víctimas?

Sus víctimas sabían tal vez que moriría, pero nunca estuvieron seguras, hasta que kilos de tierra cayeron sobre su cadáver, hasta que los gusanos empezaron a roer sus huesos, hasta que su madre, su mujer y sus hijos llenaron la capilla de silencio y oraciones. ¿Y los que quedaron solos?

El solitario nunca supo porque estaba solo, tenía tiempo de no hablar con un amigo, tenía tiempo de no confiar un secreto,

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porque tenía tiempo de no tenerlos a ambos.

Pero nunca supo el comienzo de su soledad, hasta que un poco de tristeza y siempre él, conversaban en un café, ya sea por la tarde, ya por la mañana, ya no iba al café, ya estaba solo.

Se sintió tan solo como un naufrago, un naufrago que tenía las paredes de su estomago vacías, juntas y calientes.

Un naufrago que tenía en su vista un horizonte desértico, un sol candente, un sol que salía todos los días que salía por todos los lados y siempre el mismo, el mismo sol.

Era un naufrago y nunca supo cuándo comenzó a hundirse ¿Y aquellos del mismo círculo? ¿Aquel borracho? ¿Aquel vagabundo?

El primero nunca supo cuándo comenzó a beber, el otro nunca supo cuando comenzó a caminar supieron que eran borracho y vagabundo, cuando uno no dejó de beber, cuando el otro no podía detenerse.

Sabía que había recorrido muchos pueblos pero que ninguno de ellos era el suyo.

Nunca supo cuándo comenzó a ser vagabundo, se halló caminando sobre el riel de una vía de tren, encontró el cielo por techo y el sol por cobija.

No sabía de dónde venía, no sabía a dónde ir, era un vagabundo, no sabía cuándo comenzó a caminar, pero un día supo que no podía ya detenerse. ¿Y los más despreciados? ¿El pobre? ¿El preso?

Detrás de esa celda infrahumana siempre hay algún preso, siempre lo ha habido y habrá, porque todas las mañanas despiertan preguntándose, ¿Qué son?

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El preso nunca ha sabido su crimen, nunca ha visto su libertad ni el sol que brilla para todos.

El preso ha estado años sujeto y abrazado a los barrotes, barrotes tensos, cínicos y fuertes, limitando su acción, limitando su pasión, limitando su pobreza. ¿Su pobreza?

Nunca supo cuándo comenzó a ser pobre, se vio pobre con hambre, sueño y necesidad, se vio pobre, se sintió pobre.

Siempre, siempre lo mismo ¿Por qué? No lo sé ¿Por qué? No lo sé. ¿Y tu mujer virgen?

Pureza violada, cuándo supiste lo que eras.

No, nunca supe que había sido, pero que ya no era.

Durante años llevé mi ciclo y mi pudor de la mano, durante años supe que fui pero que ya no era...

“Sentí que mi cuerpo se me caía a los talones que bocas extrañas me arrancaban los pezones” supe que había sido pero ya no era, cuando me dieron a beber fecundos espermatozoides, cuando tuve que comer de la placenta de mi madre. ¿Y tú omnipotente?

Sí, tú Dios ¿Cuándo comenzaste? ¿Cuándo fuiste?

No, nunca he sido, ni era.

Soy una idea abortada por un demonio, un guerrero que empezó a matar en una guerra injusta, un guerrero que hicieron héroe, que le hicieron un altar y unas oraciones.

Un guerrero que le hicieron un templo y que dictó leyes, dictó y fue Dios.

Y fue cuando supo que no existía.

Y así siempre lo mismo, muchos guerreros, muchos Dioses.

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Y luego lo mismo, nada. ¿Y tú? ¿Y yo? ¿Cuándo comenzamos a ser lo que somos?

Si no somos lo que debemos ser, si nunca hemos sido y tal vez nunca seremos.

Pero, ¿Por qué?

No lo sé, no lo sé. ¿Cuándo empecé a amarte?

No lo sé, ¿Cuándo supe que te amaba?

No lo sé.

Sentí que ya no podría vivir sin ti, que todo sería eterno y feliz.

Supe cuando estuve muchos días, pensando en ti y sólo en ti.

Cuando mi sueño era como aquel del comienzo de mi vida, cuando había música y alegría en mi corazón, cuando pensé que podía forjar un mundo en ti, una esperanza, un beso, una caricia.

Cuando yo estaba en ti, cuando tú estabas en mí.

Cuando al contacto de tu cuerpo, cada célula me brincaba, cuando el sol no salía, si no estabas tú, cuando tú eras lo importante. ¿Y cuándo acabo el amor? No sé, quizá cuando me vi solo, de pie con la cabeza mirando al cielo, pidiendo piedad.

Cuando erguido, mis brazos tocaban la tierra, en busca de tu ser, cuando mis puños se cerraban y golpeaban las piedras en busca de respuestas.

Cuando no había más que recuerdos, ni siquiera palabras, había vuelto a comenzar donde siempre, porque siempre lo mismo. ¿Y el niño?

Oye tú niño, ahora que empieza a serlo con la esperanza con la fe en algunas promesas, Ave Yavhé Fabel

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¡Pero no fue en las promesas! ¿Cuándo? ¿Acaso cuando en el seno de tu madre comenzabas a tener independencia? ¿Acaso cuando gritaste al mundo? ¿Cuando exigías sin realmente dar nada? ¿Acaso cuando tu única necesidad fue el hambre?

Si en tus juegos abrigas esperanzas, y sabes que no eres, ningún verdugo, ni vago, ningún preso, ni solitario, ningún demonio, ni enamorado.

Sino que eres un niño y comienzas a dar preguntas. ¡Preguntas! Y te digo que yo, yo sé las respuestas.

Lo mismo, lo mismo. No lo sé, no lo sé.

Como fue tu llegada, será tu partida, y estarás donde mismo, donde siempre.

Porque siempre, siempre lo mismo, lo mismo.

AMEN 1973

DURANTE MUCHO TIEMPO Durante mucho tiempo he estado brincando estos charcos, estos charcos que siempre se forman en la banqueta de mi calle.

Durante muchos días, y muchas noches he pisado estas calles, durante muchas mañanas, y tardes lluviosas, he brincado estos charcos.

Su lodo, sus gotas y su polvo han salpicado mi pantalón y mi memoria de recuerdos de infancia.

Han salpicado mi conciencia, han calmado la sed de mis ansias,

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Ave Yavhé Fabel

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y poco a poco, cada nueva tormenta, voy evitando brincar esos charcos, como lo hacía de niño.

Se han ido algunos vecinos, y han llegado otros, hay nuevos comercios y nuevos progresos, los nidos de los pájaros también son otros, pero los árboles y los charcos son los mismos.

Hay nuevos niños en el vecindario y los amigos pasan con sus parejas, hay otros colores en las fachadas y nuevos faroles de luz, pero los árboles y los charcos... son los mismos, el asfalto de la calle y el escobillado de la casa también son otros, pero los aguaceros y los charcos...son los mismos.

Hay muchas cosas que se han ido y hay muchas cosas nuevas, pero el olor a hierba y los charcos... son los mismos.

Los perros, las vías, los juegos y las calles ya no son como antes, ni siquiera el cartero y el peluquero y el güero de la tienda, ni el herrero ni el sastre son los mismos, los de antes, no ya no lo son.

Pero los charcos siguen donde siempre iguales... iguales.

Esperando que los brinques como antes, como antes.

2 julio 1973

Ave Yavhé Fabel

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LOS SUEÑOS Los sueños del bosque son mis sueños, su vida y belleza son mías.

Esbeltos y enormes pinos que en sus puntas sienten las fuerzas del viento, pero su raíz rígida y fuerte lo mantienen de pie y sin que se doble su quiebre.

Ese es el árbol de mi vida, ejemplo del ser, de un ser que fue todo, solo sus ramas son su abrigo y de ahí brotan sus flores, frutos del amor.

Vedlo ahí, sufre vientos, lluvia calor y tempestades, sufre el castigo del acero, del cuchillo, ahí está de pie y elevándose al cielo, rebasando nubes y alturas, aún acepta al pájaro que le roba su vida y lo picotea para vivir de él, quizás lo desprecia pero lo necesita y yo que lo veo desde lejos y sufro con él, lo abrazo y lo beso, comprendo su tristeza y porqué lloran sus ramas, el porqué tiene su piel dura y arrugada el porqué mira al cielo y el porqué de su alegría.

Porque tiene un mensaje de amor, su misión es que el mundo vea el corazón que tiene grabado en su corteza.

Hay dos nombres y una flecha expresando el pensamiento de dos enamorados que a la sombra de este árbol vivieron un momento de amor, en ese bosque que es mío... ¿Qué ha pasado, qué sucede?...

Tal vez algún día escribiré una poesía sobre un papel hecho de la sabía de ese árbol, de ese bello pino...

Tal vez escribiré un corazón

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

con dos nombres...

Tal vez algún día volveré a ser árbol en los sueños del bosque.

1970

POR SI ACASO (NUNCA JAMÁS) Por si acaso el carmín marca con rojo mis labios y si de momento el rubor se apodera de mí, estaré al tanto de algo, el “bilé” podrá borrarse pero tus besos nunca jamás.

Por si fuera la duda que las heridas volvieran a doler y si de momento el temor se apodera de ti, estarás al tanto de algo, al querer te habrán herido pero mi cariño nunca jamás.

Por si entonces tu reclamo y el mío envuelven de celofán las salidas y si de momento huir se apodera de alguno de nosotros, estaremos al tanto de algo, escapar significa dejar de ser y de estar, pero tú y yo nunca jamás.

Por si nunca se dieran las gracias por recibir de más y si de momento la lucha se apodera de crueldad, se estará al tanto de algo, podrá no llegar el triunfo, pero desistir nunca jamás.

13 de Septiembre 1983

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SÉ QUE HABLAS Sé que hablas dormida, diles que soy tuyo ahora que quiero que seas mía, y que eres bonita.

Y tal vez dormida te arranque, un te quiero.

Diles pero dormida, a oscuras y en silencio, que yo te amo, diles tranquila, ellos duermen y no te escuchan.

Tú sueñas y hablas dormida yo despierto vivo angustia en momentos, pero con la dicha de que aún dormida sientas mis besos.

Abril 1977

GRITO UN DÍA DE VIDA Y MUERTE Grito en un día de vida y muerte, con uve se escribe vida y verdad, verso y virgen, verbo y voluntad, y con uve se graba tu nombre, Veruskha.

Mujer que labras en eufónica palabra melancolía.

Tristes las dos niñas que hoy he conocido, como uvas sin viñas, como pájaro perdido.

Las dos tan diferentes, de corazones desgraciados, una, hija de pobres gentes, otra, hija de adinerados.

Qué bien riman burguesía y alegría, Qué bien riman pobreza y tristeza.

Qué mal riman riqueza y pobreza, ¡Qué mal riman!

Fin humanidad perdida por la desgracia

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

Sexo, droga y bebida, hipocresía y falacia.

Alguna solución a vos he de darla.

Les diré mi resolución, ¡viviré para encontrarla!.

1971

DIBUJO Dibujo. ¿Qué es un dibujo?

Me pregunto cuando mis ojos, trazan un bosquejo de tu figura, mi corazón colorea tu rostro, mis brazos enmarcan el toque maestro y mis labios estampan su firma...

Esto es un dibujo.

1969

ESTUVE ESPERANDO Estuve esperando toda la tarde y siempre no llovió.

Miré por la ventana como las aves buscaban refugio, y siempre no llovió.

Me abrigué, cerré toda la casa y por más que esperé nunca llovió aquel día, al contrario hizo mucho sol.

Hoy camino con un bastón, si hace sol es sombrilla si llueve paraguas, llueva ó salga el sol Ave Yavhé Fabel

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no tengo temor porque llevo mi bastón.

1970

MI NOMBRE (LO SÉ) Mi nombre podría ser cobarde, pero no lo esya que al acabar esta poesía, moriré.

Nadie me dijo que yo iba a ser poeta, yo lo supe.

Nadie me dijo que te conocería, y te conocí; nadie me dijo que me enamoraría...

Mi nombre podría ser cobarde o poeta, nadie me lo ha dicho, además estoy enamorado de ti, y nadie me lo ha dicho.

Sin embargo todo eso, yo lo sé, pero... yo lo sé.

Junio 1972

QUÉ EXTRAÑO SOMOS Qué extraños sois, si grité “tierra” y había descubierto América, no era para continuar la antigua historia, fue para escribir mi leyenda.

Mi lucha al cruzar mares y tormentas terminó al pisar tierra.

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

Luchar contra el nativo, robar su oro, destruir sus dioses, imponer mi lengua, mezclar mi sangre, ya no soy Colón, ya no soy Quetzalcoatl.

Soy mi historia, soy otro amanecer, soy otra piel, soy otro aliento.

Hoy ya no hay sueño, la historia se escribe, no se sueña.

La piel no sangra mientras no se hiera, el beso es suspiro mientras está en los labios, el miedo nos quema mientras somos paja.

La historia no se escribe mientras no zarpemos.

Mi historia es una fiesta pagana disfrazada de ceremonia religiosa. ¡Oh! Qué extraño eres... pareces hombre, pero montado en esa bestia y con esa armadura, eres uno solo, un ser tan incomprensible, tan lejano, tan nostálgico... no entiendo ni tu lengua, ni tu Dios, ni tu sorpresa al ver todo lo que a mí me rodea y que no me sorprende.

Me atrae lo tuyo, tus armas, tus anécdotas de tierras lejanas, tu ser.

Quetzalcoatl dijo que llegarías algún día, hoy llegaste y sin embargo pisaste a la serpiente emplumada...

Oh, qué extraño eres.

Hoy ya no hay sueño, la vida se vive, luego se cuenta.

El corazón siempre late mientras quede vida, la caricia es viento Ave Yavhé Fabel

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mientras quede en tu mano, el hijo no nace mientras los cuerpos no se junten.

La historia no se escribe mientras nos quedemos gritando “tierra” y no desembarquemos.

Mi leyenda es de conquista y “noche triste” de Malinche y fraile, de mestizo y amor a la tierra nueva.

El primer capítulo de la historia tan difícil, tan amargo, sin vencedor ni vencido.

Unos trajeron la rueda, el caballo y la sífilis.

Otros dieron el tabaco, el oro y las doncellas.

Si yo tengo la semilla, tu tienes la humedad.

Si yo tengo la noche, tú tienes la estrella.

Si yo tengo un “te quiero” tu debes tener el otro. ¡Oh! qué extraños somos.

1981

UN DÍA CLARO Un día claro dejé de amar, ya no volví a hacerle caso a mi corazón.

Lo encerré, porque estaba destrozado, ya no llovía ni había arco iris en mi vida.

Desde aquel día Dejé de creer en el amor volví a lo mismo, nada existe, sólo el vuelo de las aves fue verdadero y natural.

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

Nada fue más valioso y sagrado lo demás, fue un engaño.

1980

TU RETRATO Tu retrato sigue pegado en la pared de mi cuarto, todo parece igual, pero ya no es así.

Tu mirada tiene ahora más ternura que antes, tu boca parece hablarme y tus manos quisieran moverse.

Te sigues conservando hermosa, pero de ti, no tengo mas que un retrato, ahora con una capa de polvo y una dedicación que ya no se puede leer, pero que tú y yo bien sabemos de memoria... ¿verdad?

Dímela si te acuerdas, prometiste no olvidarlo. ¿Estás segura?

Te equivocas, no dice eso.

Pero ya no importa, de qué sirve ya...

Tu retrato sigue pegado en la pared de mi cuarto.

Marzo 1973

DÓNDE ESTÁ EL AMOR ¿Dónde está el amor, que en mi mente vive? ¿Dónde está? Le siento, le beso, le veo, le concibo, pero en mi mente, qué amor tendré yo, que vivo de ilusiones y sueños.

Realidad... realidad, Ave Yavhé Fabel

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quiero tocarla, verla a los ojos y besarla, la quiero pero no en mi mente.

Quiero su calor y su pureza, la quiero, pero no en mi mente. ¿Dónde estás amor, dónde estás?

Desesperado estoy y pienso que sin amor voy a vivir.

Oh, qué importante es amar y ser amado, ... tanto amor hay en mí y no hay nadie que venga por él, muchas lo toman pero nadie corresponde, sin amor vivo, vivo sin amor.

Dios mío es mucho amor para ti, dadme alguien que lo comparta contigo, vivo por amor, pero el amor me mata, no quiero pensar que sin amor voy a vivir, ven a mí o dime si voy amor... pero ya!

Que muero por amor y por un amor vivo.

Dibujo mil veces su rostro pero sus ojos no tienen vida, transplanto mi corazón y busco en el Apolo la romántica luna, pero no encuentro amor ni belleza, sólo soledad. ¿Dónde estás amor? ¿Dónde?

1967

QUIERO SER Quiero ser ese sol de madrugada que acalora las frías gotas del rocío, quiero ser ese sol que de mañana pone a cantar a las aves.

Quiero ser ese sol frío y brillante de las mañanas de invierno, quiero ser ese ser pequeño y lejano del Cenit.

Quiero ser ese sol agobiante y asesino del desierto, quiero ser ese sol tierno y refrescante de las montañas y el campo.

Quiero ser ese sol rojo y desnudo de las playas,

32

Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

quiero ser ese sol seco.

Quiero ser el sol expulsado del paraíso, del sudor de vergüenza de Eva y Adán, quiero ser el sol criminal y melancólico que arañaba y a la vez acariciaba el rostro del Cristo en el madero.

Quiero ser ese sol que hace llorar, quiero ser ese sol que hace sudar.

Quiero ser ese sol que se oculta tras las montañas, al atardecer.

Quiero ser ese sol que se ahoga en el horizonte del mar, quiero ser ese sol que se muere en el ocaso del día en el nacimiento de la noche.

Quiero ser la luna que brilla al nacer la noche al morir el día.

Quisiera ser el sol olvidado de la noche.

1971

CANTAR UNO Cantar uno, a mi amor desconocido, le brindo este cantar, el amor que me tiene ido, el amor que quiero gritar, donde quiera que estés, te quiero agradecer, los sueños celestes, los sueños de mi placer.

Tan solo una ilusión, una doncella sin par, la que forma mi visión, y al altar quisiera llevar, es más que un sueño, lo que mi corazón inventó.

Donde soy esclavo no dueño, es lo que en mi mente siento, estupidez tan grande, Ave Yavhé Fabel

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lo que amo yo, lo que mi mente llama lo obedezco yo.

Amor platónico, ilusión ¿En verdad te querré? pregunto en mi corazón si es así que haré. ¿Llorar o tal vez gritar o bailar o reír?

No sé, tal vez lo mejor es amar, si no voy a morir.

1967

RECORDARTE Solo los que sienten vergüenza no muestran su rostro… como tú.

Solo los que han amado como nunca ellos lo serán; se esconden… como tú.

Solo las personas que han ofendido y herido el corazón; no se atreven a mirar a los ojos… como tú.

Son aquellos que se niegan, los que mienten y engañan, … como tú.

Solo algunos no olvidan y lloran al recordarte, … como yo, … como yo.

1973

34

Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

ENGAÑO Engaño fue, el salón desalojado estaba, música ligera oía, en aquel lugar la paz reinaba y a solas yo la veía.

Filtraban rayos de sol por la ventana, en aquel ambiente en sueños con ella reía, recordando cuando bailaba, un rayo verde de sus ojos salía, siempre creí que me quería, pero con saña me engañaba, jugando conmigo me hería, envolviéndome en su telaraña.

Pero mucho tiempo no pasaría sin que ella se enamorara y engañada también viviría, triste y abandonada.

1967

MIENTRAS ME APRESURO Mientras me apresuro a beber mi café alguien se apresura a beber mi galaxia, con cada sorbo la infusión del tostado grano acelera mi adrenalina.

Mas allá un black hole engulle cientos de estrellas, incluyendo al Sol, Venus, Mercurio, Marte, Júpiter y Saturno, así como sus anillos y esta canica azul, llamada Tierra.

No sé qué pasará cuando el monstruo cósmico se beba mis pensamientos, Ave Yavhé Fabel

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pudiera atragantarse y escupirme.

Situación que me preocupa por las consecuencias, o provocar un nuevo big bang o vagaré eternamente por la bóveda celeste.

Vierto un chorrito de crema a mi taza, allá arriba se engullen la Vía Láctea.

Hoy tomo con calma mi prisa, mientras se apresuran a darnos la calma.

Angustia contra esperanza, fatalidad versus optimismo. ¿Valdrá la pena molestarme que hoy no pude conectarme a la red y navegar por Internet?

Sí durante la partida de ajedrez sobre el oscuro cielo nadie posterga reordenar el caos.

Mientras aspiro el aroma y con lento placer bebo mi café, alguien aspira la mesa de Dios y degusta mi galaxia, al final me indican, voltearemos la taza.

Para leer nuestra suerte (es bueno saber lo que nos depara el futuro).

1999

A YUTI (UN CONEJITO) Dónde estés ahora me preocupa, dónde estés ó no estés sí vienes o no me preocupa.

Ayer fue la última vez que te vi.

Te di de comer y te acaricié.

Hoy no sé si fuiste, probablemente asediado por un gato, o te robo algún niño.

No encontré sangre ni la puerta abierta.

Se quedó la jaula vacía, se quedó la comida

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

Y yo me quedé con la duda.

Dónde estés ahora me preocupa y aún me queda una esperanza.

09 septiembre 1973

TANATOS CUANDO PARTA DE TU LADO A Ana Teresa de Velázquez Cuando parta de tu lado no permitas que la tristeza se ancle a tu corazón, despliega tus velas y continúa tu viaje.

Porque el viento y las estrellas ahora nos pertenecen.

Guarda en tu bondad los buenos momentos que vivimos juntos y cuando a ti te toque arribar, no temas.

Yo estaré esperando en puerto para tomar tus armas y volveremos a estar juntos.

Febrero 1999

EL DÍA MÁS TRISTE “... se nos va Carmela... se nos va”.

Era de madrugada, el sol saliendo, estaba durmiendo en un profundo sueño y una mano fría me hizo salir de lo bello.

Era la tía llorando por el duelo, me levanté y fui a verlo, Ave Yavhé Fabel

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estaba la familia, estaba la muerte, llorando de rodillas mi madre, veías su compañero sellar un pacto con su suerte.

Mis hermanos miraban a lo lejos, mis hermanas lloraban, ¿Quién?...

Quién era esa persona que estaba rodeada de amigos, familia y compañeros, de ángeles, arcángeles y serafines, era... era mi padre.

El ser que nos regaló la vida, que nos enseñó el bien y el mal, el amor y la comprensión, la resignación y la humildad, el camino y la verdad.

Al Dios justo y bueno, al Dios que en ese momento le quitaba la vida.

No lo podía creer, el sacerdote lo bendecía el ambiente se estremecía rompiendo el cierre de mis ojos, en cuclillas a sus pies me puse a llorar, en ese momento mi padre nos bendecía, guardando todos silencio el doctor se acercó y lo tapó... ¡ha muerto!

Mi madre gritó y nos abrazó llorando amargamente, después un triste duelo y el camino al entierro.

Era una mañana gris, unidos en pensamiento todos fueron a recordarlo.

Su féretro plateado y el paisaje empañado, varios hombres entre ellos mis hermanos cargando llevaban el ataúd pesado.

Con una tela roja y bajándolo con cuidado después del último adiós, todos se retiraron.

Cubierto de tierra estaba, para que en el tiempo quedara olvidado

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

y colocando un epitafio, unas flores le dejaron. ¿Estará ahí o se habrá esfumado?.

Quién sabe dónde habrá quedado...

Dios, te lo dejo a tu cuidado.

1964

Y HOY Y hoy que estoy a punto de morir, de morir como los demás, de haber vivido como los demás, y de haber sufrido como los demás.

De haber amado como los demás, y de haber sido igual que los demás, me doy cuenta que todos mis intentos, por ser diferente, fueron inútiles...

1969

SI TUVIERA DERECHO Si tuviera derecho a pedirte algo, sería tu última cena, tu último “te quiero”.

Ese último acto de amor, ese último atardecer.

Correr con tu última aventura, y apagar la luz de tus ojos.

Ese último silencio, ese último momento de soledad.

Si tuviera derecho a pedir algo, sería el recuerdo de tu aliento, y que al voltear la página vieras la palabra FIN. 1983

Ave Yavhé Fabel

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EL DÍA QUE TU TE MUERAS A Ronald Beauroyre El día que tú te mueras no cargaré tu ataúd, ni llevaré flores, ni rezaré… pero si necesitas algo, estaré junto a ti.

El día que tú te mueras, no lloraré mi desgracia, ni vestiré de luto, ni lloraré… pero si necesitas algo, estaré junto a ti.

El día que tú te mueras, no esperaré herencia, ni platicaré lo bueno que eras, ni te volveré a recordar, pero si necesitas algo, estaré junto a ti.

El día que tú te mueras, no diré que fui tu mejor amigo, ni que te quería mucho y me iré a la mitad de los rezos, pero si necesitas algo, estaré junto a ti.

El día que tú te mueras, cuando digan tu nombre pareceré indiferente, ni cuidaré de los tuyos, ni platicaré más de ti, pero si necesitas algo, estaré junto a ti.

Porque el día que tú te mueras, estaré junto a ti.

8 julio 1973

EPILEPSIA Se fueron comiendo mis entrañas los demonios, se fue torciendo mi cuerpo en formas fetales, mis labios mordieron el lodo, mi sangre se volvió barro.

Sólo un soplo divino logró que yo regresara para volver a verte quizás por última vez.

Aún siento los gnomos asesinos en mi cerebro,

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

aún llevo las jorobas repugnantes sobre mis párpados.

Escucha los sonidos del infierno, la baba espumosa de mi rabia, mi impotencia y pequeñez, mi lacra sin existencia, mi polvo.

Ven, bebe de la mierda que me alimenta, y humedece el barro de mi cuerpo.

Porque sólo un soplo divino lograría que yo regresara para verte aunque fuera una última vez.

Se fueron comiendo mi alma los hombres, se fue haciendo pequeño mi espíritu hasta perderse.

Hasta perderse.

Enero 19 1979

AHORA MEJOR ME CALLO Ahora mejor callo, mejor pienso, ahora muero un poco, porque lo increíble lo creo.

Ahora pienso en ti, mejor no pienso, ahora vivo, mejor muero... ... mejor me callo.

1968

PUEDES ENSEÑARME Puedes enseñarme a entender por qué la muerte es la Ave Yavhé Fabel

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última razón.

Puedes decirme acaso por qué no puedo volar, cuando sueño contigo.

Puedes acaso mostrarme el mundo desde una montaña.

Puedes darme un beso antes de partir al amanecer.

Podrías dejar de rebotar en mi cerebro y de marcar mis pulsaciones, o de convertir un frondoso bosque, en desierto.

1975

CEMENTERIO “… El poeta murió, el poeta fue enterrado…”

León Felipe En un rincón del mundo muy lejos de la ciudad, y a un lado del camino, allá por donde está el bosque y la llanura, del desierto y el mar, existe un cementerio.

Cuando el sol lo cuida en las tardes, donde el mármol se oxida y donde el frío y la soledad nacen en las noches de luna llena, existe un cementerio.

Una vez al año llevan flores, sólo una vez al año, y nadie vuelve a ir por ese rincón del mundo, por ese cementerio.

Sin embargo, en el centro de la plaza, donde todas las lápidas buscan su sombra hay un árbol común y corriente,

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

ni hermoso, ni horrible, está erguido mirando al cielo y con los brazos abiertos.

Caminaba cerca del campo santo y me detuve a orinar en ese árbol.

Su fantasma me llamó: ¿Ves aquel cementerio? Donde hoy posa un epitafio, antes había un árbol, antes de ser fosa era árbol que se alimentaba de penas, pecados, podredumbre, paciencia y placer, de pastos, de padecimientos, de padrenuestros y paganos, de palabrería y de pálidas lágrimas, de parietales, de paupérrimas penitencias y de propósitos.

Por cierto, ven a visitarme, te estoy esperando… faltas tu en mi cementerio.

1973

QUIERO DEJAR DE TENER MIEDO Quiero dejar de tener miedo, miedo a las autoridades, al mal carácter de mis semejantes, al demonio y a la iglesia.

Pero empezaré por dejar de tener miedo a mí mismo, a dejar de dudar en el amor.

Amor a lago me impide realizarte, es algo anormal, celos.

Es la duda de amarte son los peros.

Amar no puedo por estar pensando Quién será ese famoso rival. ¿Quién será con el que me está engañando?

Quiero dejar de tener miedo.

21 junio 1971

Ave Yavhé Fabel

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MUERA, MUERA AL FIN Muera, muera al fin después de tanto tiempo, y que se lleva el viento, este mal tan ruin.

No lo soporto más, muere o muero y como yo no quiero muerte te darás.

Cuándo será el día que estaré en paz, quién será mi guía, si tu te vas.

No importa nada cuando en ti haga la venganza de mi daga.

Tú no lo quisiste, pero me ofendiste.

No le pediré perdón, ni fatal galardón, no soy asesino, ni bebedor de vino, no soy demente, ni buena gente.

Muera, muera ya lo que me ofendió, que se vaya el odio que me dio.

1971

QUIERO IRME SIN NADA Quiero irme sin nada en las manos, desnudo y sin herencia, y si es posible sin nombre también para comenzar de nuevo.

No quiero tener familia no quiero conocer a nadie, sin recuerdos ni experiencias, y si es posible comenzar de nuevo.

Quiero irme de este país, a otros mundos, a otras cosas, a otra época, no importa dónde, y si es posible comenzar de nuevo.

Quiero otro cuerpo, otro idioma, otro Dios, un nuevo y total cambio,

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

y si es posible comenzar de nuevo.

Quiero otro camino, ser errante y nómada, sin familia y sin herencia, sin nombre, sin tierra, sin sexo ni Dios; Libre como Ave con el cielo de cobija, y si es posible comenzar de nuevo... aún cuando volviera a suceder lo mismo.

Lo sé, lo sé.

1971

AMORFO Y cuando todos esperábamos que su tumba se cubriera de flores, aparecieron hormigas, cosas amorfas y animales extraños.

Todo porque no hubo quien plantara la primera semilla.

Ni siquiera porque tener un pedazo de tierra como tumba, es el derecho de los vencidos.

Ni siquiera porque tener una palabra de amor como oración, es el consuelo de los desesperados.

Todo porque no hubo quien plantara la primera semilla.

Y porque no hubo quien cortara el primer fruto de su vida.

1969

PARECE SER QUE EL CAMINO ACABA Parece ser que el camino se acaba, hay voces que piden retroceder y Ave Yavhé Fabel

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miradas que suplican reducir el paso, la verdad es que ni quiero ni me puedo detener.

Yo no veo el abismo que me presagian tampoco pretendo engañarme, el horizonte queda arriba de mis ojos porque nunca he mirado hacia abajo.

Siempre el sol despuntó a la altura de mi frente, y se ha ocultado, por las tardes, en la comisura de mis labios.

Parece ser que llego muy cansado, algunos creen que estoy casi desnudo.

Fui dejando prendas en cada vereda, y jamás acumulé equipaje.

Nunca seguí un camino pavimentado preferí abrir brecha, por espinosa que fuera, entre olvidos y perdones curé mis heridas.

Quizá por eso, yo no veo la derrota.

Ni sueño, ni hambre, ni frío orillaron a quejarme, hoy no serán la torpeza ni el dolor las que obliguen a acobardarme.

Parece ser que el camino acaba parece ser que llego muy cansado.

Parece ser que mi cuerpo está enfermo, uno que otro lo diagnostica como grave mi corazón lleva medio siglo pregonando tum-tum, pom-pom y las arrugas se acumulan en mi rostro, creo que no ha sido en balde a veces el amor cansa y a veces se llora de alegría, seguro que el odio y el rencor perdieron fuerza y no hay lugar ya ni tiempo para ello.

Pero yo no veo el pecado, quizá mi vida no aparezca en ningún libro de historia, pero para mí ha sido extraordinaria y ya no habrá chantajes ni asistiré a más clases de civismo y geografía.

Parece ser que estaré en el gran juicio todos sacarán su balanza,

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

permaneceré a la expectativa mientras unos suman y otros me restan, al final cerrarán mis párpados y cada quien dará su veredicto.

Si la hora de entregar facturas llegó, quien haga el balance recuerde mi árbol, mi libro y mis hijos, con eso mi saldo es positivo.

Parece ser que mi cuerpo está enfermo, parece ser que estaré en el gran juicio.

Parece ser que los niños se harán hombres mi recuerdo podría ser suficiente para darles el valor de extender sus alas y sabrían que el aliento de mis palabras será el viento que sostenga su vuelo, pero quisiera hacer eterno el presente sin que el futuro implique traer a la memoria mi nombre.

Sólo así mis labios dejarán de besar tu cuerpo en busca de estrellas. Ahora en la oscuridad besaré estrellas buscando tus labios y la luz de tus pechos.

Saben amigos, ya nada de eso importa cubrirá la tierra cuanto error y pecado me ensamblen.

Con el tiempo se dirá que nunca fui mediocre pero a dónde voy ahora no conjugan el pretérito y han olvidado los adjetivos.

Parece ser que Dios y yo tendremos una larga conversación.

Parece ser que el camino empieza, parece ser que llego muy a tiempo.

20 septiembre 2000

Ave Yavhé Fabel

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GUGUI Y GERARDO Gustavo y Gerardo, ¿tendré el tiempo de quererlos... y tenerlos por ahora? ¿Tendré el tiempo de buscarlos en las llanuras y en los peñascos, con largos brazos que cobijan sombras y escarpan piedras? ¿Tendré el tiempo de ser su padre al amanecer, su amigo hacia el mediodía y luz que parpadea toda la noche, no importa que fría o que sofocante sea? ¿Tendré el tiempo para las respuestas y para la sesión de preguntas, y aunque no tendré de todas todas, al menos tendré el tiempo para escucharlas? ¿Tendré el tiempo para tensar la cuerda y para soltarla, para cubrir el viento y para dejarlo soplar? ¿Tendré el tiempo para olvidar ofensas y bordar esperanzas, tendré el tiempo para verlos amar en plenitud una piel y un corazón, y para batirse en duelo por un ideal o una sinrazón? ¿Tendré el tiempo de verlos crecer y guardar silencio ante aciertos y errores?

Porque la vida no tiene compensaciones a la nada, ni abrazos de aceptación. ¿Tendré el tiempo de verlos vivir su vida mientras vivo la mía?

Porque el tiempo de tenerlos es poco y el tiempo de quererlos... es por siempre.

Febrero 1993

YA LLEGÓ! ¡Ya llegó!

Te fugaste de la nada donde habías permanecido por ningún siglo, te fuiste del silencio, donde tus gritos habían sido escuchados, nunca.

Arrancaste de la ignorancia

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

toda la sabiduría que nos enseñaron y que siempre olvidamos.

Así pues dentro del absurdo, la nada, el silencio y la sabiduría se mezclaron como siempre para anunciar... un hijo viene en camino!

Aunque ya llegó, no ha nacido.

Caminaste sin haberte movido, abrazando herencia y destino por equipaje.

Canjeando inmortalidad e infinito por pasaje.

Así pues caminando, caminaste arañando polvo y oxígeno.

Un hijo a mi vida aunque ya llegó no ha nacido.

A mi vida acompaño mi éxtasis y el grito, la marcha triunfal sin ejército ni enemigo.

Las puertas abiertas.

La espera no es más larga ni más corta, así pues, el cielo se encierra, abriendo la esperanza... un hijo aunque ya llegó no ha nacido.

Un hijo... en silencio y a oscuras, así pues, a luchar!

Sin temor, sin cobardía.

Mezclando barro y soplo divino.

Ya llegó... pero no ha nacido.

Mayo 1988

HIJO MÍO “Al principio fue el verbo” Génesis Hijo mío lo único que puedo darte es el verbo, tu deberás hacer las frases y oraciones, toma tu vida y escríbela en todos los tiempos, con todas las conjugaciones.

Porque tu vida como el lenguaje es palabra e infinito. porque tu llanto desde que quebró el silencio, conjuga el verbo lloro, duermo, como... vivo.

Ave Yavhé Fabel

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Eres, soy, somos, estoy, estás, estamos.

Todo verbo es escrito en presente, la vida no se hace de preguntas y condicionales, usa tus respuestas.

Vive hoy y ahora, no uses el tiempo hubiera, es trampa y fracaso.

Todo en su capítulo, todo en una línea continua, en una frase profunda sin tiempos fueras ni perdidos, sin frases de relleno o cortadas.

Hoy y ahora es el tiempo y el verbo, la risa, la alegría, la curiosidad y la voluntad son tus predicados.

No importa lo extenso de tu vida sino lo intenso de ésta.

Si el universo no se puede abreviar en cifras, tu vida no debe limitarse a lo mediocre.

Vivir es ir más allá que ver, oír y decir.

Observa, escucha y habla.

Tu vida llena hojas blancas con vivencias, sin puntos suspensivos ni correcciones, sólo el verbo, la palabra.

Pero no blasfemes, no mientas, no ofendas y cuando conjugues odio, temor o duda, no permanezcas en la prosa.

Vive tu vida con amor y poesía.

Hijo mío lo único que puedo darte es el verbo y una palabra que transforma todas las cosas.

El nombre de Jesucristo.

1988

LEJOS DE TI Y DE TU HERMANO Hoy estoy lejos de ti y de tu hermano, la distancia me pudo más que el cáncer.

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

Hoy sólo deseo abrazarlos, extender mis manos y tocarlos, tomar su cabello en mis dedos mientras hunden su rostro en mi pecho, así volvería a detener el tiempo.

Hoy la tristeza humedeció mis ojos, la mirada se me perdió en el horizonte.

Mis manos estaban vacías aprisionando sombras blancas, hoy sólo añoro la sonrisa dibujada en sus rostros, así volvería a detener el tiempo.

Hoy me sentí más solo que nunca, girando en el centro de un desierto y sin hallar el oasis.

La arena y el tiempo huyendo entre mis temblorosos dedos, hoy sólo quiero verlos brincar y correr en alharaca hacia mí.

Así volvería a detener el tiempo.

Hoy recuerdo cuando nacieron y los recibí con mis manos, eran tan frágiles, pero sus puños se aferraron fuertemente a mis dedos que fue la primera vez que sentí que abrazaba la eternidad.

Hoy sólo buscaría las dos estrellas que más brillan en el firmamento.

Así volvería a detener el tiempo.

Hoy me desgañité gritando sus nombres al viento, con la esperanza de que llegaran a oírme, pero el eco no contesta, cañadas, ríos y montañas se esfuman en silencio.

Hoy apreté mis párpados como cuando me hablan en secreto al oído.

Así volvería a detener el tiempo.

Hoy su ausencia no ha podido calmar mi sed, herido de vacío, mi cuerpo se hela por falta de luz.

Aunque guardo el calor de su piel en mi memoria, no basta.

Hoy sólo el pigmento y el aroma de niño podrían ser mi manantial.

Así volvería a detener el tiempo.

Hoy guardé silencio en busca del más leve sonido.

La neblina me envolvió en su húmeda palidez, jamás logré escuchar sus voces, lloré porque habían enmudecido.

Hoy estoy seguro que cualquier canto de un pájaro es la voz de mis hijos.

Así volvería a detener el tiempo.

Hoy no pudimos contar nuestros sueños y aventuras, compartir fantasías tendrá que esperar a mañana, Ave Yavhé Fabel

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al igual esas preguntas que me hacen y que la verdad no sé las respuestas, hoy me reconforta el brillo pícaro de sus miradas cuando me “chorean”.

Así volvería a detener el tiempo.

Hoy estoy lejos de ti y de tu hermano, pero mi compromiso ante ustedes es no bajar la guardia, ustedes dos son mis brazos, nada nos provocará temor.

Ninguna distancia, ninguna tormenta, ningún pensamiento negativo, ni la soledad, ni la ira, ni el cáncer nos harán retroceder.

Así enfrentaremos el tiempo.

Mañana estaré con ustedes, nos fundiremos en el mejor de los abrazos.

Un cíclope de miradas, mil voces y gritos incomprensibles, molinos gigantes girando, rasguños y choque de huesos.

Mañana detendremos el tiempo con besos frescos y alegres, así dejaremos correr nuevamente la eternidad… por siempre.

Papá.

Febrero 2000

EROS HACE TIEMPO YA Hace tiempo ya, es mas no recuerdo ni cuándo, ni cómo, ni quién, oí cantar una canción antigua.

Es un himno de muchos versos y en un idioma extraño.

Hace poco me acordé de ella y quiero cantarla, su melodía es suave, no muy dulce, y tiene la ternura de una canción de cuna, y la fuerza de una sinfonía.

Quien la oye, la canta, y no es fácil de olvidarla, tiene más de mil versos, y quien la canta le añade uno.

52

Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

Habla de la vida sin cantarle a ella, habla de una muerte extraña, sin ser mortal, habla del hombre y habla de la mujer, pero no son la canción.

Habla de los sueños, pero de esos sueños imposibles, de aquella angustia de la madrugada, de aquellos pensamientos que atormentan, y también habla de muchas sensaciones, de ternura y paz.

Habla de los bosques, verdes y frescos, de las tardes húmedas y tranquilas, de los manjares y vinos, de la misma música y de los bailes.

De un día agitado, habla de las cosas oscuras y extrañas, habla de las caricias y de los besos.

Habla de la necesidad de estar contigo y de lo maravilloso que es estarlo.

Habla de lo intranquilo que está uno.

El deseo de escribir un poema.

También habla de la soledad y de un adiós, de un comienzo y del poco a poco, creo que habla del tiempo sin embargo, quiero poco a poco cantarte esta canción.

El tiempo no me importa quiero que tú la aprendas y la cantes también esta canción se llama amor y tiene más de mil versos, y comienza: Te quiero tanto.

Julio 1972

QUIZÁ YA NO TENGA Quizá ya no tenga que preguntar por qué ha sido mi vida así, Ave Yavhé Fabel

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ni cómo he llegado hasta aquí.

Quizá ya no tenga que prometer cuándo haré las cosas, ni quién las recibirá.

Quizá ya no tenga tiempo para darme tiempo, ni recuerdos para el recuerdo.

Quizá ya no tenga que buscar lo que no he encontrado, ni dar lo que no he tenido que dar.

Quizá ya no tenga que hablar esperando un “así”, ni recibiendo un “así”.

Quizá por quererte de esta manera Stella, ya no soy yo.

Quizá.....quizá.

16 abril 1983

HOY DESCUBRÍ TU CINTURA Hoy descubrí tu cintura y me prendí de ella.

Hablé con los fantasmas... me persiguen cuando me acerco a ti.

Hoy descubrí lo pequeño que soy sin ti.

Escuché ruidos, voces de nostalgia, miedo a mi espalda.

Que pudo ser todo lo culpable y necio…

Hoy descubrí que si extiendo los brazos puedo alcanzar tu cintura y prenderme de ella.

1981

54

Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

LA CALMA PRESAGIA TEMPESTAD La calma presagia tempestad y después de la tempestad, viene la calma.

Mi vida está hecha de tiempo de calma, de tiempo de tempestad.

Mi vida está transcurriendo entre intentar olvidarte, y vivir recordándote.

En dejar de decir tu nombre, y no poder contenerme dormido en pronunciarlo, Laurie... aún te amo.

1973

ESTOY ESCAPANDO Estoy escapando de miradas y susurros acercándome a la vanidad efímera de la inocencia y sobre las ruinas de los remordimientos, me hiere ese silencio premonitorio que arranca el rayo de luz cuando busco dar el calor y la sombra.

Si sé que nadie vale lo suficiente como para hacernos llorar, no buscaría entonces arrebatar las tormentas del horizonte para sembrar nubes al cielo.

No quiero ni rostros cubiertos ni flores deshojadas, no quiero buscar en las mañanas y no hallarla.

Quiero despertar cobijado por ella, solo así cuando borden mis dedos-encaje ternura a su piel-seca y mi mano–espuma Ave Yavhé Fabel

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cubra a sus senos-roca, iremos con extraños sabores tierra adentro, desembarcando no en la tierra prohibida de los hipócritas, sino en la tierra prometida de los amantes.

Sin la angustia de arrancar nuevos temores, mas bien con el deseo de darte mis primeras caricias.

1983

ME FUE LLENANDO LA PRISA Me fue llenando la prisa, me fui llenando de ti.

Los ruidos de tus caricias, la canción rítmica de tus piernas, la explosión en tus labios, me fui llenando de ti.

Tu lluvia en la espalda, tu espuma, me llevan tus corrientes a una playa extraña, la resaca no lo deja salir, los recuerdos se hacían cada vez más tuyos que de mi vida.

Las cosas han sido pasado los recuerdos se van olvidando al ritmo de nuestras caricias.

Han sido siempre las mismas, la misma tonada, todo principia, todo acaba, la canción no, la canción dice “yo” y me fui llenando de ti.

El tiempo ya no me importa, puede variar el ritmo, pero la canción sigue igual.

Me fui llenando de recortes, de ideas, de caras,

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

de cosas ajenas que se volvieron necesarias.

No existen tesoros, no sirve escalar montañas, no encuentro cómo volver a mirar el cielo, cuando me estoy llenando de ti.

Me quedo vacío, muriendo sin ver, viendo sin mirar, oyendo sin escuchar, viviendo sin vivir y llenándome, llenándome de ti.

1974

PREÁMBULO Poesía para una mujer casada Porque nadie me llamará cobarde, si me enamoro de ti y no te lo digo.

Porque aun cuando no se me permita darte un beso, una caricia, en mis sueños te doy mil de ellos.

Porque nadie sabrá cuántas veces, escribí tu nombre, -para mí prohibidoy lo pronuncio en silencio.

Porque cuando intento llamarte, mis labios se cierran, qué difícil será seguir viviendo.

28 octubre1970

Ave Yavhé Fabel

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CUANDO DESPIERTE EL DÍA Cuando despierte el día buscaré en mi cabello tus caricias para estar en tu presencia.

Leeré el horóscopo y con él inventaré una adivinanza donde seas tú el acertijo.

Así yo tendré el misterio y tú la magia.

Tomaré el sol en mis manos y tú le darás luz al momento.

Yo te daré los colores, tú el arcoíris.

Para cuando la tarde se llene de prisa contaré contigo para escribir mi historia.

Tendré las frases, tú las conjugaciones.

Escogeré el tema, tú las posibilidades.

Haré las preguntas, tú las respuestas.

Yo lo cotidiano y tú, tú lo extraordinario.

Porque cuando llegues, yo tendré la prisa y tú la tarde.

Solo así, para cuando la noche me envuelva en tu ausencia sabré que abrazar el vacío queriendo hallar tu cuerpo, es la manera de saber que yo tengo la sed y el perfume, tú la jarra y el aroma.

Yo las manos y la prisa, tú las caricias y las tardes.

Yo las alas y la tierra, tú el vuelo y el paisaje.

Yo el silencio y la historia, tú las sonrisas y mis tardes.

30 agosto 1983

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

CUANDO ME GUSTA ALGO Cuando me gusta algo no pierdo la oportunidad de hacerlo, me gusta que la alegría corra por mis venas, que los rayos de luz y la mañana entren por mi ventana.

Por eso recorro mis cortinas para amanecer con el sol, me gusta mezclarme con la humedad de las mañanas frías.

Por eso piso descalzo la hierba del prado.

Me gusta lavar mis fallas por eso admiro desnudo la lluvia, me gusta la alegría y la música, los brincos y los gritos, por eso bailo en las tardes.

Cuando el día va acabando, me gustan los sueños donde apareces tú, por eso me gusta dormir tranquilo.

Me gusta ir a la cima del mundo, por eso guardo silencio, para estar contigo y decir que yo soy la cima de mi existencia.

Me gusta ser mi propio escultor y dueño, ir rompiendo la corteza que me aprisiona, si fui un bloque de piedra sin forma ni figura, ahora voy tomando existencia y labrando como yo lo siento, véanme estoy labrando en llamas.

Cuando la tarde caiga, no habrá rayos de luz, ni brincos, ni música, y el martillo y el cincel estarán quietos.

Quizá una tonada melancólica.

Pero tú me gustas, y me gusta estar contigo... por eso, Ave Yavhé Fabel

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no pierdo la oportunidad de estar esta noche contigo.

Me gusta que la alegría corra por mis venas, que los rayos de luz y la mañana entren por mi ventana y se queden aquí junto con las cosas que quiero, como tú. enero 1979

NUNCA HABÍA SIDO TAN DIFÍCIL Nunca había sido tan difícil decir algo ni siquiera diciéndolo despacio.

Nunca mis labios se habían resistido a robarse un beso.

Nunca mis manos se habían reprimido a tejer una caricia.

Y nunca mis ojos se habían negado a mirar el universo, siendo que nunca antes había deseado tanto hacerlo.

Tengo el corazón partido para controlar el sentimiento.

Tengo los brazos cortos para alcanzarte a cada momento.

Tengo la ambición pequeña para tenerte como deseo.

Nunca el barco tardó en hacerse a la mar, con tan buen tiempo.

Nunca el ave se resistió a planear, con tan fuerte viento.

Y nuca enmudeció tanto tiempo el juglar con tal instrumento, siendo que nunca antes había mejor momento.

Tengo la mirada cansada para observar tan lejos.

Tengo el espíritu herido para triunfar tan desecho.

Tengo la lengua corta para pronunciar tan perfecto.

Nunca los sonidos los había escuchado tan adentro.

Nunca el fuego se había tornado tan ardiente y nunca mi cuerpo fue tan violento mientras tuve el veneno adentro.

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

Siendo que nunca había sido tan difícil decir algo, ni siquiera diciéndolo despacio... pronunciar un “te quiero”.

Primavera 83

ME GUSTÓ TU PIEL Me gustó tu piel para asirme a ella como su sombra, para tomar tu mano con firmeza y caminar abrazados veredas nuevas caminos sin andar, lugares sin descubrir.

Me gustó tu piel para recorrer en ella la noche, para volcar mi ternura y atrapar peces en tu boca cometas sobre tu cintura, crisantemos en tus mejillas.

Me gustó tu piel para impregnarme en ella como aroma, para tatuar los “te quiero” y vivir en su calor la seda y el encaje, la espuma y la roca, el rojo y su rubor.

Me gustó tu piel porque es playa y puerto, porque encierra tus amaneceres y tus sueños y me lleva con ella mar adentro.

Septiembre, 18, 1983

Ave Yavhé Fabel

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MIS MANOS ESTABAN AHÍ Mis manos estaban ahí, arrancando el follaje, buscando la semilla eterna que palpita bajo las primeras capas de tu piel.

Mis manos estaban ahí, para escarbar y encontrar semillas y corteza que quema.

Mis manos estaban ahí, para labrar tu cuerpo en la tierra, para buscar semillas, para desfigurar tus montes.

Mis manos estaban ahí, junto a las tuyas, haciendo el amor y aprisionando estrellas en tu pecho.

Mis manos estaban ahí, persiguiendo cometas sobre tu piel, tapando el sol con mis dedos.

Mis manos estaban ahí, arrancando las flores de tus campos, construyendo un altar sobre las ruinas de tu remordimiento, construyendo un mundo, sobre la piel que cubre tu corazón.

Mis manos estaban ahí, haciendo pequeño el universo, temblando de angustia tu cuerpo.

Y mientras, tú pensabas en tu Adán, tu paraíso, tu pecado.

Mis manos estaban probando los frutos prohibidos de tu huerto... ¡Oh, quizá se enfade Dios!

1974

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

DERRIBARÉ EL ORGULLO “... no dejaría que me tocara

ni un pelo de la cabeza...”

Derribaré el orgullo que embriaga a la luna y con la tiza de mis dedos, una rayuela a tu cuerpo marcaré, tatuando mis tardes de juego y del cielo a la tierra en brincos al enredarme con tu seda y el encaje castaño de tu piel.

Sobre mi nostalgia por perder el remordimiento, piso una nueva tierra donde sembrar con mis manos e ir arrancando el follaje y posando mi piel en la humedad de la tierra que nadie jamás ha cosechado.

Gotas de rocío que cubren semillas sobre las flores de tus montes que se alegran cuando neblina fría cubre su cónica forma.

Esta hierba no crecería jamás en otras manos que no sean las tuyas.

El aleteo de tu vuelo me eleva a alturas de angustia, éxtasis de olor nuevo y sentencia antigua.

Selva exótica donde peligro y aventura prohíben pregonar la conquista y el sabor almendrado de tu refugio donde el silencio acompaña al adormecido cuerpo que despierta tras un beso en cuello y mejilla.

Silencio que habla de templos destruidos y aves en extinción, halcones y tucanes que no volveremos a ver.

Cirios que se prenden al atardecer cansado y caluroso de tu vida, sueño y letargo que se alborotan al recorrer el velo de tu desnudez.

Ave Yavhé Fabel

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Premonición cálida y lejana, imagen serena de dos cuerpos amándose, llegar a donde nadie ha llegado pisando la hierba que no volverá a crecer, callando la gritería del nuevo amanecer.

Despertar contigo día a día hasta aprender a atrapar la eternidad en cada beso.

Llegar al principio de la inmortalidad con un abrazo de tu cuerpo y el mío.

Hacer el amor más allá de lo prohibido, más allá de lo soñado.

Prolongar memoria y acortar latidos cuando nuestro aliento y respiración detengan el tiempo.

Un segundo mientras nos consumimos en la noche con la llama de mis labios y la cera de tu cuerpo.

20 octubre 1983

(SIN TÍTULO) Mucho me temo que al quererte el abrevadero de tus flores se seque al sol. ¿Qué se puede tener?

Si gran parte de la vida acaba, cuando se tira el primer juguete.

Si con los ojos vendados, adivino tu presencia, y si cuando niño uno conserva la sonrisa, al quererte, ¿la conservarás tú?

Mucho me temo que al quererte teniendo la primera flor de la primavera, no quieras prenderla a tu pelo. ¿Qué se puede desear?

Si gran parte del mundo está ciego, cuando se tiene unos ojos claros, como tú.

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

Si con las manos atadas, acaricio tu cabello, y si cuando niño se llora sin saber, al quererte, ¿lo sabrás?

Mucho me temo que al quererte, si gran parte de todos somos iguales, te arrepientas de haber sido diferente. ¿Quién abre la ventana al amanecer? ¿Quién pone las gotas de rocío en las hojas? ¿Quién recorta las nubes en el cielo? ¿Y quién le da a las aves el vuelo?

Lo que no sé es ¿Quién le puso amor al hombre?

Y quien le canta a la vida es quien le pone música a tus labios.

Qué tendrás cuando se dificulte traer a la memoria mi nombre, y yo seguiré llorando por ti.

Si con mi boca sellada, siento tus labios y si cuando niño se tienen deseos al quererte ¿los tendrás tú?

Mucho me temo que al quererte no me amaras tanto como yo a ti, porque no se puede desear nada cuando uno se llama Sahara y se es mujer como tú.

Y porque no puedo aprender ya nada de ti, no por el hecho de mis próximos años, sino por mis horas de haberte conocido, y porque cuando un niño se pregunta: ¿si uno quiere lo quieren también?

Mucho me temo que al quererte sí siento lo que pienso, que yo seré feliz y que tú serás... también.

1974

Ave Yavhé Fabel

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HOY FUI CONTANDO LA DISTANCIA Hoy fui contando la distancia de tu cuerpo a mi cuerpo, es bastante, más no suficiente para que estemos lejos.

Hoy fui contando tus besos, han sido muchos, más no bastantes para empezar a acostumbrarme.

Hoy fui contando las lluvias, en tormentas y en gotas, han sido algunas, ni siquiera muchas, para que se nuble mi amor por ti.

Hoy déjame entrar a tus entrañas, donde yace la niña melancólica, déjame escalar tus montes, subir las peñas, y ondear mi bandera en lo alto.

Déjame caminar tus llanuras, buscando alimentos, quiero que me queme tu sol, tu fuego, quiero atravesar tu desierto.

Deja que paso a paso, día a día, mientras recorro tu ser, mientras dure mi vida, recorra tu selva, tu trópico de sonidos extraños, de peligros y aventuras.

Deja que platique con la gente de otros pueblos, de tus ciudades y tus cavernas, déjame atravesar tu cuerpo caminando, porque quiero buscar el paraíso que hay en ti.

Atravesar campos y llanos, tus nieves y tus desiertos, tus días con sol y tus días con lluvia.

Porque gota a gota, paso a paso, beso a beso, mientras más llueve,

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

mientras más camino y mientras más te beso... más te quiero.

1973

SI TUVIERA QUE DESGARRAR EL SILENCIO Mayela Si tuviera que desgarrar el silencio, para que entre las heridas se escuchara el sonido seco que se produce cuando se cierran baúles y se abren esperanzas.

Desgarraría con mano descantada la costra del oído que endurece olvidos y traiciones.

Si tuviera que echar las cartas y me saliera la reina de corazones, quizá pensaría que tu presencia me haría acariciar el vuelo del ensueño, así, cuando las nubes se recorten en el cielo, sabría que alguien está inventando el amor.

Si tuviera que brincar bardas, abrir ventanas y robar los mangos del huerto, correría a hurtadillas a tratar de escuchar las mismas palabras, pero quizá ahora sí se puedan creer.

No tendría entonces que pronunciar los te quiero, ni necesitada de beberme el silencio.

Si tuviera que aceptar que sufrir y querer a veces caminan juntos, no tendría alternativa, ya que no querer lastima más.

Y si mientras las tardes pasaran tan lento como para que la soledad intentara vencernos, bien sé que la innegable presencia de ti en las cosas que me rodean Ave Yavhé Fabel

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sería suficiente, para llenarme de nidos las ramas de mis horas.

Si tuviera que andar por nuevos desiertos, sabría que los amigos no se hacen sino se reconocen, poco me valdrían las máscaras, sólo las usan quien no tienen rostro propio.

Y llegar a ti, ha sido llenarse de infinito.

Tomar tus manos, sentir que uno ha llegado.

Si tuviera que morder el silencio por no encontrar el camino a tu cariño, sabrías sin necesidad de explicarlo ni yo de entenderlo, el porqué tu presencia en mí es desde siempre, y el porqué tu nombre, Mayela, me desgarra el pecho, como si así encontrara lo perdido.

1983

(SIN TÍTULO) “... Me sirve y no me sirve...”

M. Benedetti.

Isabelle, una de las cosas más empalagosas y cursis es el día de San Valentín.

Sin embargo, no deja de ser una buena oportunidad para halagar a un amigo.

Pero lo empalagoso y cursi no me sirve, San Valentín y los halagos tampoco me sirven sin embargo, las oportunidades y los amigos sí me sirven, sí me sirven para entender

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

el porqué uno se enamora tanto de alguien como tú.

Es fácil entenderlo... eres espíritu que ama la libertad, eres mirada que se convierte en ternura; tanto como para cambiar un beso en lunar y prenderlo en tu cuello.

Pero estar enamorado y el espíritu no me sirven, las miradas y los lunares tampoco me sirven, sin embargo la libertad y la ternura sí me sirven, lo difícil de entender es qué hacer con la ternura que no puedo convertir en viento y entrelazarla a tu cabello.

Qué hacer con las caricias que labios resecos no pueden humedecer en besos.

Qué hacer con los te quiero que no serán escuchados.

Pero el “quizá” y el “hubiera”, ambos tiempos condicionales no me sirven.

Sufrir y estar solo tampoco me sirve, sin embargo, el que no haya promesas sí me sirve... ...nadie cumple sus promesas, nunca hay tiempo.

Bueno, este tipo de nostalgia tampoco me sirve, a final de cuentas me quedaré con lo que sí me sirve: tu sonrisa y alegría mi esperanza y este día, sin afán de ser empalagoso y cursi, te quiero y que tengas buen día de San Valentín.

10 febrero 1982

Ave Yavhé Fabel

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AL IRSE EL CALOR Al irse el calor, calmará mi locura.

Las nubes y las copas lejanas de las ceibas tenderán su cama al sol.

Tabasco se vestirá de amarillo, cuando los guayacanes lleguen al último rayo de luz, prendiéndose uno tras otro como mis recuerdos.

El chaquiste llenará mi alcoba sin prudencia y veré por última vez, pausadamente, tapizar mi acera de tonos violetas.

Mañana tomaré una escoba y poco antes del amanecer, con el primer “buen día”, con el primer sudor del movimiento, barreré de la puerta de mi casa la alfombra púrpura que, agonizante, mira el cielo.

Deseos se desprenden de los balcones que en cada rama enamorada encuentran y se encuentra mi ansia de levantar cada caricia amarilla y brocar nuevamente a cada vara desnuda estos besos que al primer suspiro descopetaron mi paseo. ¿Por qué flamboyán te arrebata esa locura?

De dónde conviertes tus horas en segundos, nuevamente el tronco dormirá su larga siesta y tus amantes bajarán su mirada de tu pecho.

Choquita anciana te dará florero, choca enamorada te prenderá a su cabello yo te daré mi verso y la chiquilla pondrá un pétalo en su cuaderno. ¿Volverás Macuili?

Tú que no tienes mañana di si volverás para siempre,

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

porque siempre habrá quien te espera, más aún, si estoy en primavera.

14 abril 1981

MENTIROSA Era hermosa, en verdad lo era.

Sabía escoger muy bien su ropa y sus amantes.

Seda y cuero negro, mucho negro que resaltaba con su blancura.

Gozaba de un estupendo encanto, pero qué fácil era desabotonar su blusa, las palmas húmedas y temblorosas se deslizaban una y otra vez sobre sus tibias costuras, “se llenaban las copas para beberlas de un sorbo”, decía.

A lo largo del cuerpo le brotaban mezquinos carnosos, eran como otras tetas acartonadas por engrudo.

Sobre su lado derecho, a la altura de la sien, disimulaba con mechones una protuberancia, moco guajolotero.

Al centro de sus bizcos pechos una simétrica y negra verruga que le gustaba mordisquear como tercer pezón a su amante judío.

Nunca conoció el decoro, su amuleto siempre fue de latex.

Abría más fácil las piernas que la boca, aunque de ambas maneras siempre fue mentirosa.

1978

Ave Yavhé Fabel

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BORDANDO CARICIAS Fui tejiendo ternura y bordando caricias, fui ensanchando horizontes y descubriendo fronteras.

Fui cruzando ríos y acampando en islas.

Pero no se turbe tu sueño por tales cosas; se fueron derritiendo tus pechos y se llenaron de cera mis labios.

Fui mezclándome en tus ramas y andando en tus raíces. Bebí tu savia.

Fui creyendo en tus ideas y rezando a tus oídos.

Pero no se turbe tu sueño por tales cosas.

Se fueron juntando los cuerpos y dibujando sonrisas, se fueron mirando los ojos, tejiendo ternura y bordando… … bordando caricias.

Julio 1974

ME LLENÉ DE TI Stella Dame una palabra, algún símbolo nuevo para decir... ...te quiero.

Dame esa fuerza con la que eres capaz de exponer tu amor, dame esa presencia orgullosa de saberte mujer y dame esa tierna recompensa de ser algo de ti.

Me llené de silencio y la noche de estrellas,

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

me llevo el ansia de capturarlas y enlazar collares en tu cuello.

Me llegó el tiempo de sentir piel a piel tu pecho.

Me llegó el coraje de confesar los te quiero.

Me llené de silencio y la noche de tu presencia me llegó el momento del vuelo y de atrapar lo grande y lo pequeño, me llegó el orgullo de sentirte mujer.

Me llegó la fuerza, me llené de alegría y la noche de estrellas.

Me llegó la esperanza de levantar cosechas, me llegó la caricia que llena, me llegó tu ausencia me llené de silencio y de ti, Stella.

1982.

SE LLENÓ MI BOCA DE SILENCIO Se llenó mi boca de silencio.

Al horizonte las montañas crecieron, se alcanzaron los brazos cuando las nubes cayeron y las líneas ya se curveaban.

Mi ternura abrazó tu pecho, tu piel cambió de textura y la hierba crecía en mis pies.

Se llenó mi boca de silencio y la mirada de respeto y todo aquel remordimiento se quemó.

En el piso donde levanté el vuelo se llenó mi boca de silencio, cuando más quise decir te quiero.

Ave Yavhé Fabel

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Pero no importa, te lo dije con un beso.

Se llenó mi boca de silencio sin miradas ni promesas, abriendo baúles y cerrando esperanzas, reconociendo tu cuerpo en caricias con vergüenza y sin cobardía, nos dijimos te quiero, te quiero… pero en silencio.

1981

DESABOTONAR EL COSMOS “Tres cosas me son estupendas y una cuarta no llego a entenderla: el rastro del águila en los aires, el rastro de la serpiente sobre la roca, el rastro de la nave en medio de mar y el rastro del hombre en la doncella.”

Proverbio. 30-31/18-19

Desabotonar el cosmos y el afán de quedarme sólo con mi presente pudiera ser alguna de las cosas que de ti he aprendido.

Pero si al prenderme de tu cintura como hiedra que tapia muros, mi boca me llena de vuelo tras tus besos, no puedo entonces al quedarme con un cargamento de ellos, más que angustiarme por dejar escapar de mis manos caricias y horas.

Más que ignorar la angustiosa presencia de la ternura que brota de mi cuerpo tratando de encontrar un tramo de tu cabello.

Más que ocultar mis sobresaltos ante la presencia

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

innegable de los lugares que impregnas con tu presencia.

Todo aquí eres tú y algo es cierto, las palabras en ti deberán brotar tras los balcones del patio, terraza donde pudiera uno agotar vida y muerte.

Algo aprendí hoy, creer en ti con ausencia total de egoísmo, de promesas y juegos.

Orgulloso de comulgar el ahora y el aquí de tu presencia.

Por eso hoy creo en ti, y en tu ausencia somos piedras que chocan y modifican sus trayectorias, piedras de sal que al caer al estanque se disuelven.

Tu ausencia me deja las cosas que de ti he aprendido.

1983

AMADO EN SILENCIO Puedes darle a otro tus frescas mañanas, los mejores años de tu vida, tus mejores caricias, la fuerza de tu carne, tus más tiernos besos.

Yo quiero, el atardecer, los rayos dorados del ocaso, el sabor agridulce de la tarde, la carga pesada del día, el aliento maduro, el cansancio.

Dame el final de tu vida, tu fastidio, tu aburrimiento, tu nostalgia.

Puedes darle a otros lo demás, yo quiero el final de tu vida.

Deseo oír de tus labios el último “te quiero” que pronuncies, quiero tener contigo el último acto que realices, quiero el éxito de alguien que ha vivido su vida, a su manera, Ave Yavhé Fabel

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quiero ser quien mueva las ruinas, recuerde el olvido y dentro de las cenizas te encuentre.

Cuando todo el mundo se haya olvidado de ti, tener el verbo del principio porque al final de tu vida sabrás quién te ha querido y amado en silencio 19 octubre 1976

OLVÍDALO Contén el llanto y dame la espalda, sigue tu camino.

Que después que te alejes y tu figura se pierda en el horizonte y el sol se oculte iré al bosque a llorar porque te perdí.

Será difícil olvidarte porque te llevas mucho de mí, te llevas mi risa y mi llanto, mi fe, mi tiempo y mi sueño y yo me quedo con algo tuyo, tu recuerdo y tu adiós.

Ese llanto que nunca fue llorado aún está en tus ojos, en ellos hay amargura y decepción.

Todo, todo hubiera sido mejor si en vez de amarnos como nos amamos nos hubiéramos odiado, todo hubiera sido mejor.

Adiós, olvídame y no llores.

Que escriban con rojo esta poesía porque es fuego, es amor, pasión, odio y fuerza.

Escríbanlo con rojo porque es mi himno y mi vida.

1970

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

ADIÓS Adiós… no quiero decir adiós.

Estoy temblando… me da miedo decir esta palabra.

Maldita palabra te quitaré de mi léxico… e inventaré otra que no me haga llorar.

Otra que diga (más dulcemente) que te irás y nunca volverás.

Ahora dime muerte o fin, oh, oh, oh, otra cosa amor… pero nunca, nunca volveré a decir adiós… si ya no me quieres vete, pero no me digas … adiós.

1969

MI ÚLTIMO POEMA A Retaismo Si acaso resultara cierto aquello del último deseo y éste se cumpliera, sólo pediría uno a mis amigos: que me entregaran sus sombras, me llevaría así el tono gris de las pesadillas; a cambio yo les dejaría mi entusiasmo por la luz y el color que da brillo a los sueños.

Soñaría que mi deseo resultará un trueque incondicional del fardo que me aprisionó dormido y me dio alas despierto.

Sería un buen deseo que sus temores y los míos fueran disipados, del canje sólo habría certeza de que la brecha abierta es la correcta.

Que los fantasmas de maleza alta y puntiagudas espinas no atemoricen la escalada a la montaña,

Ave Yavhé Fabel

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si para mirar el horizonte a veces el sol nos deslumbra.

Si la lluvia, el cansancio y el hambre los golpean, no serán argumentos para regresar a la senda fácil.

No puedo desear darles valor porque lo tienen de sobra, pero puedo desear cargar con sus titubeos, y al saber que ningún amigo dudará de continuar con los retos, se cumplirá mi último deseo.

Si en verdad pudiera ordenar una última cena y ésta fuera servida en la mesa de mis amigos, sería suficiente un trozo de pan recién horneado, una copa ancha de buen vino y compartir sus bromas.

Me sentaría cerca de la orilla para poder servir sus vasos sedientos y rellenar sus platos vacíos, no habría más saciedad y gula que la risotada burlona del humo de sus habanos.

No habría nostalgia que la frescura del primer sonido onomatopéyico y la repetición enriquecida de la misma historia.

Una cena ligera aderezada de bromas pesadas, al final un brandy o un bostezo, ambos flameados.

Quizás hasta un juego de fichas o una diatriba filosófica, pero siempre alguno terminará cubriendo la cuenta del otro.

Lo único especial de esta cena sería doble ración de postre y con un vientre y corazón saciados concluir con un fuerte abrazo de hasta mañana.

Si en verdad pudiera ordenar una última cena, discretamente retiraría los cubiertos enjuagaría las migas y restos, así no parecería que ha quedado un lugar vacío.

Si acaso resulta que la última voluntad se termina por cumplir, suplicaría a mis amigos que sean exigentes con sus propios hijos, así estarían protegidos los míos del cariño que tendrán en exceso, contra la exigencia auténtica de ser mejores.

Pienso que no ordenaría más qué hacer

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Ave Yavhé Fabel

POEMARIO

lo que cada uno es capaz de dar.

Sin afán faraónico de un mausoleo, sería mi voluntad que dispusiera de un pequeño nicho donde cada dos de febrero se colocará un crisantemo y con la discreción del silencio escuchara sus plegarias a coro con las mías.

Sería mi voluntad prescindir de un discurso sobre el féretro, por la tentación romántica de caer en mentiras, sería más saludable para un cuerpo en descomposición saber que mis deudos tendrán consejo.

Si resulta que la última voluntad se termina por cumplir, instruiría que cada día por la mañana mis amigos y mis hijos se dispusieran a ser felices, que cada tarde por la noche juntaran toda ella, así, acumulada y repartida, disminuiría vuestra tristeza.

Sería mi voluntad.

Si me tomará deprisa preparar el equipaje para el último viaje, espero no caer en la trampa del sobrepeso, sólo tomaría lo que cupiera en mis manos, pediría a mis amigos repartirse lo que queda, sabría entonces que mi herencia quedaría en buen uso, una finca de ilusiones, un huerto lleno de promesas y una gruesa inversión en intentos.

Me disculparía por no dejarles mis equivocaciones, esas las requiero para seguir la brega, también tendría que empacar la desidia, sería peligroso dejarla al alcance de cualquiera.

Si acaso no se cumplen el último deseo, la última cena y la última voluntad, dormiría tranquilo ante las últimas preguntas y no tuviese pendiente alguno por mis hijos y los hijos de mis amigos, ya que en Retaismo sabrían las respuestas.

Ave Yavhé Fabel

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Si por si acaso no pasara nada de esto, no se referirán a éste como mi último poema.

Ave Yavhé Fabel Tabasco, 17 septiembre 2001

Siempre estarás en la memoria de tu familia y de tus amigos que tanto te quieren 19 de Mayo de 2017

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Ave Yavhé Fabel

19 de Mayo 2017