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PRI-PAN-PRD
PRI-PAN-PRD: LA ALIANZA DE LA DESESPERACIÓN
TEXTO DR. MARIO ORTIZ MURILLO |
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EL MAGO DE LAS PARADAS CORTAS
Para nadie es un misterio que hemos llegado al fin de las ideologías. Lo vaticinaron Daniel Bell y Fukuyama, el liberalismo económico triunfó; esa demoledora realidad basada en el utilitarismo mercantil parece justificar el ridículo realizado por el Partido de la Revolución Democrática (PRD) al integrarse a una coalición totalmente pragmática, junto a sus otrora adversarios políticos, el PAN y el PRI. Si bien el PRD nunca representó cabalmente las tesis del estoico Partido Comunista Mexicano, fundado en la clandestinidad en 1919, sí colocó a viejos comunistas en sus cuadros dirigentes. Sin embargo, fueron prácticamente priístas separacionistas los que encabezaron y se montaron del poder en la mejor etapa de este instituto político: Cuauhtémoc, Porfirio, Andrés Manuel. Y, cuando en el sol azteca se optó por dar un viraje en el perfil, se colocó a Rosario Robles, quien después de ser expulsada se unió al gobierno priísta de Enrique Peña Nieto, vaya ironía.
Así, la condena que por muchos años mantuvieron perredistas contra sus “adversarios” tricolores, resulta el último asomo de ese encono ideológico de los noventa y dos mil que en estos momentos ha quedado totalmente desdibujado.
El trinomio PRD-PRI-PAN, unido por la cruzada cuasi-imposible de derrotar en los comicios de junio a la poderosa maquinaria Morenista, representa una alianza sostenida en la desesperación, en el pragmatismo y en el caso particular del PRD, evitar perder el registro partidista.
Tratemos de explicarlo con la ciencia del beisbol. Es como unir la tradición del PRI (que serían como los Yankees y sus múltiples campeonatos de Serie Mundial), al PAN (como los Cardenales de San Luis, el segundo con más campeonatos en Ligas Mayores) y un modesto PRD (algo así como los Expos de Montreal, que nunca ganaron Series Mundiales, es decir la presidencia de la República, pero sí algunos campeonatos divisionales y como el PRD algunas gubernaturas y la Jefatura de la Ciudad de México) para derrotar a Morena (en esta caso los Dodgers de Los Ángeles, actuales campeones de Ligas Mayores con un equipo dominante que apunta para el bicampeonato).
Además de ilógico, estos partidos no han podido comportarse como oposición durante este trienio, ¿por qué entonces militantes y seguidores de la otrora izquierda, derecha y centro deberían sacar a Morena del Poder y votar por la alianza tuti frutti de amarillosrojos y azules?
En la propaganda política que satura con spots cada media hora en televisión literalmente NO se invita a votar por alguna de esta fuerza tripartita, en realidad en el mejor estilo de principios de propaganda nazi han unificado al enemigo común: Morena, por el que se pide NO VOTAR por los que han descarrilado el rumbo político del PRIAN. Cuando la oferta es provocar el miedo por la continuidad y no realizar una propuesta directa de cambio de rumbo, el efecto podría ser contraproducente para los tres amigos.
En política como en el beisbol es necesaria una estrategia, al parecer la empleada por la coalición no termina por convencer al electorado que el balance de la gestión presidencial es un desastre. Véamos ¿por qué?
Si se fragmenta el mercado electoral y se reconoce la cercanía de Morena con sus bases sociales, esos pobres o sectores populares a los que parece ir dirigida la tesis de “pueblo bueno y sabio”, se puede afirmar que en ese sector en particular, gracias a programas sociales, becas emergentes y obra pública hay una aprobación suficiente para retener la mayoría en el congreso y obtener varias gubernaturas.
Dónde están las propuestas específicas a esas clases sociales o niveles socioeconómicas en el discurso del PAN, siempre cercano a las élites, a la defensa de la propiedad privada y preservar los derechos de las clases medias y el empresariado. Por qué el PRI sigue ausente del discurso de masas con obreros, campesinos, sectores populares, básicamente su mensaje es regresar al pasado porque en opinión del dirigente Alejandro Moreno Cárdenas, “estábamos mejor con el PRI”. Por su parte el PRD, quien en sus mejores años encabezó la agenda de los derechos sociales, de las libertades de las minorías parece haber alquilado su nombre como franquicia para hacer más fuerte al grupo “opositor”, sin la claridad de un proyecto o plataforma propio. Ese PRD desesperado por no desaparecer del registro y las prerrogativas del INE, se ciñe a las decisiones de sus nuevos hermanos mayores, el PAN y el PRI.
Por su parte, MORENA que sigue dando palos de ciego por la defensa de los escándalos de Salgado Macedonio y Saúl Huerta, acusados por abuso sexual, el descalabro en Nuevo León con Clara Luz Flores y algún otro asunto menor, sin, en lo que resulta más importante para la continuidad de la 4T, las curules necesarias, incluso con las restricciones a la sobrerrepresentación, siguen aseguradas.
De esta manera se puede deducir que la campaña del Mac Trío panista-perredista-
priísta sigue sin fuerza no para cambiar la tendencia abrumadora de Morena, sino que tampoco parece inhibir el ánimo de esos pobres entre los pobres que seguramente refrendarán su apoyo en junio al régimen encabezado en Andrés Manuel López Obrador.
Si pensamos que las “amplias” clientelas políticas del PAN siguen dolidos por los constantes errores de Marko Cortés. Si Alito y su PRI siguen sin atinar en convencer a las nuevas generaciones de otorgarles a los tricolores, por enésima ocasión, la oportunidad de redimirse por los errores del pasado, Y, por último, si el desdibujado Chucho Zambrano sigue negociando al mejor postor las escasas oportunidades por mantener el poder en un puñado de municipios y quizá la gubernatura en Michoacán, podemos afirmar que seremos testigos de la crónica de una aplastante derrota por Peje y sus Morenos. Que además de pegar de hit, en una de esas la sacan de la barda y se llevan la mayor parte de las gubernaturas en disputa y dejan en blanqueada a la coalición de conservadorespriístas reformados-perredistas fantasmas.
Cada vez más cerca, a un mes de la elección, los signos del doblete para la segunda parte del AMLOato se ver lucen promisorios no por el talento del equipo del gobierno, sino por la falta de talento entre un equipo parchado incapaz de articular una propuesta unificada verdaderamente atractiva para ciudadanía. A esperar. @mariopuma
DIMX
“El primer método para estimar la inteligencia de un gobernante es fijarse en quienes lo rodean:” NICOLÁS MAQUIAVELO
ROMERO BARRIOS CONSULTORES
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