OMBALLEC: El Chamán de la Dama de Cao

El Perú es uno de los países que guarda entre sus tierras tesoros invaluables para la historia del mundo.

Dividido en costa, sierra y selva, este territorio cuna de los incas y de innumerables culturas que dieron origen a civilizaciones que hasta el día de hoy sus legados siguen vigentes con el esfuerzo de pobladores que se resisten a perder su identidad. Omballec: El Chamán de la Dama de Cao”, relata el testimonio del curandero, Leoncio Carrión Flores, más conocido como “Omballec”, que en el dialecto quechua significa “Guardián del agua”, protagonista del ritual de liberación durante la exhumación de la Dama de Cao, la primera momia tatuada que gobernó en la cultura Mochica en el siglo IV d.C. descubierta en el año 2006 por el arqueólogo Regulo Franco Jordán, en la huaca El Brujo, ubicada en el Distrito de Magdalena de Cao, zona norte del Perú.

Este sexagenario, oriundo del pueblo Chiquitoy, se hizo chamán mirando el trabajo que realizaba su abuelo cuando él tenía cuatros años de edad. Desde entonces, se convirtió en observador de las curaciones que se hacían en su vivienda ubicada en la provincia de Ascope. Con el tiempo descubrió su don de curar a personas con extrañas enfermedades y también, el de florecer en espacios arqueológicos. “Recuerdo que llegué a El Brujo y me quedé sorprendido con el hallazgo. Los arqueólogos y yo, no sabíamos exactamente que es lo había en el interior de esos fardos. Sólo alcanzábamos a ver, el rostro cocido en las telas de algodón. Inicié el ritual de liberación y empecé a tener contacto con los antiguos. Fue una sensación que no podía describir con palabras, solo queda la evidencia que yo estaba floreciendo a aquella momia, quien en sus tiempos, también se dedicaba a curar. Eso fue grandioso”, relata.

Omballec realizó el ritual de florecimiento en los espacios de la Huaca El Brujo. Cargado con su mesa, piedras que ha recibido como obsequio del Apu Cuculicote, cerro que actualmente le permite cargarse de energía; varas de madera que invocan a los ancestros y bebidas hechas de flores, bendijo el edificio de barro que fue construido por los Moches en honor a la “Dama de los tatuajes”.